Partida Rol por web

... y los sueños, sueños son

Imago d10

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31/08/2016, 22:09
Director

Te frotas los ojos, el humo te molestaba. Desde que las montañas del Dragón habían entrado de nuevo en erupción las lluvias de cenizas y el humo eran cada vez más frecuentes. Abres los ojos y ves que te has quedado dormida, en el bosque de las hadas ni más ni menos.

Si Devian se enteraba que te habías dormido en lugar de buscar la flor de Dymas que te había pedido buscar, volvería a sermonearte con lo despistada que eras. Devian no era malo, solo un viejo cascarrabias. Pero si querías saber más sobre pociones, encantamientos y una pizca de alquimia tenías que seguir escuchándole. Al menos lo suficiente hasta que pudieras robarle su libro y marcharte a vivir tus aventuras. Es lo que querías de verdad. Quizás incluso adivinar por qué las montañas del Dragón escupían cenizas, se supone que no quedaban dragones allí arriba, ¿no? 

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07/09/2016, 19:21
Ginebra

No quería quedarme dormida, lo prometo. El viaje hasta el bosque de las hadas  es fatigoso y sólo quería descansar un poco, arrullándome a los pies de aquel viejo olmo. Pero al final había cerrado demasiado los ojos y lo que iba a ser un leve descanso, se había convertido en un sueñecito. Devian seguro que se enfadaría, pues era in viejo impaciente que tenía que hablar de todo, y quería la flor "para ayer", o eso me dijo. A veces era un poco insoportable... No era malo, pero si insufrible en ocasiones, y eso hacía que la paciencia para tratarle acabara desbordando. No obstante es buen profesor, debía reconocer entre dientes. 

Me vuelvo a frotar los ojos, por la irritación que generaba el humo y me pongo en pie. Olfateo y tengo que arrugar el hocico por el desagradable olor a humo y cenizas. No dejaban de atosigar desde la erupción misteriosa y más de una vez había fantaseado con desentrañar aquella extrañeza. 

Miro alrededor, asegurándome que estoy sola y sigo encauzando mis pasos en busca de la flor de Dymas... Maldito Devian. !Era su recadera!

Notas de juego

Aún pienso que raza soy, te lo pongo luego.

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13/09/2016, 12:10
Director

Caminas por el bosque, hasta llegar al borde del mismo. Ahí donde nacía el mar y la brisa marina nocturna refrescaba. Es ahí, donde a la luz de la luna la flor de Lymas se abría. Era una flor brillante, que solo salía cierta noche del año, si sabías dónde ir a buscarla. Para un humano hubiera sido complicado llegar, pero para una bastet con buena visión nocturna y con un olfato envidiable, era un paseo.

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14/09/2016, 14:52
Ginebra

Tras una larga caminata, no puedo evitar don un pequeño salto en el sitio. Un salto de júbilo por haber conseguido localizar la flor. Mi mentor quitaría hierro al asunto y diría que no es gran cosa. Pero ahora mismo me sentía muy realizada y contenta. Con el ánimo por la nubes me acerco, para cogerla y de paso respirar la fresca brisa marina. Aunque detestaba el agua, debía reconocer que la costa tenía un no se qué... Sería perfecta si no tuviera agua. Y sin agua no sería costa... Lástima que el mundo no sea perfecto.

Me agacho, sacando la pequeña navaja de campo para poder cotar la flor desde el pedúnculo. Pero antes la observe, con suma fascinación. 

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16/09/2016, 12:26
Elfo

La flor era perfecta, magnífica e irradiaba magia con solo verla. Se decía que había sido creada de una gota de estrella pura que había caído a la tierra. Cuando sacaste tu navaja para cortarla una voz te interrumpió.

-¡No la cortes maldita cambiaformas!- te grita una pequeña elfa, o un elfo, no sabías distinguirlos bien de género. Eran seres asexuados, pero de alguna manera tenían que duplicarse y duplicarse como lo hacían.

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16/09/2016, 19:29
Ginebra

Conforme me acerco más a la flor, mis ojos se abren como plato un palmo más. Sentía como hipnótica la mera visión de una flor así. ¿Para qué la querría aquel viejo? Debía ser muy poderosa...Eso estoy pensando cuando una voz estridente me sobresalta y doy un bote. Como un resorte, el cuchillo que porto en la mano apunta al frente, esté o no ahí el elfo/a. Siento que mis fauces han crecido y el tacto de los colmillos. Así como veo que han crecido mis uñas, dibujándose ya en ellas un comienzo de garras.

- ¡No te acerques! - bufo, alterada. Motivo del cambio también. No esperaba la interrupción de uno de estos bichos verdes. !Qué inoportunos!.

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16/09/2016, 21:57
Elfo

-¡Eres tú la que no tienes que acercarte! ¡Aléjate de esa flor o pagarás por ello!- grita enfadado el elfo, con su voz apitufada. Cuando asoma entre las altas hierbas ves que tiene un arco y te apunta con él. -La reina de las hadas te castigará si tomas la flor de Lymas y la cortas. ¿No te das cuenta que destruyes el bosque con tus actos? Todos los cambiaformas sois iguales, unas bestias sin alma.

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18/09/2016, 20:20
Ginebra

Mi cuerpo, poco a poco, toma el control y se torna en la forma más resistente y ágil. Por mera inercia ante una situación hostil. De alguna forma inconsciente no temo la flecha de aquel elfo tan inoportuno. Quizá me estaba equivocando, pero no podía volver sin la flor. La valentía de la edad y las ambiciones, quizá, pero hasta sentía que si actuaba con rapidez podría salir de aquel bosque y salir ganando. ¿Me castigarían? Quizá era todo un farol....

 

Le bufo, sin perderle de vista. Intentando después, en un movimiento lo más rápido posible, enganchar la flor con las fauces y salir corriendo de allí. 

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19/09/2016, 21:55
Elfo

Tomas la flor y corres con ella en la boca. Una flecha pasa zumbando por tu lado, al tiempo que ves que el arrancar la flor desencadena que todas las plantas del bosque comiencen a morirse en una ola que te sigue a medida que corres. Por alguna razón aquella planta daba vida al lugar, como te había dicho el elfo.

-¡¡Pagarás por esto maldito cambiaformas!! ¡Lo juro por mi vida inmortal!- grita al tiempo que corres y huyes del lugar. Ahora solo quedaba entregar la flor y olvidarte de ello. Lo que pasara con el bosque no era tu problema, ¿o sí?

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24/09/2016, 12:16
Ginebra

No esperaba realmente que el hecho de arrancar la flor fuera a generar todo aquello. Exageraciones de elfo, meras ganas de interponerse en mi camino... Puede. Pero no esperaba que pasara el realidad. Debo reconocer que me pone un poco nerviosa, pero en ningún momento pararía de correr. El elfo podría alcanzarme con sus flechas o cualquier otra cosa darme alcance. No podía mirar atrás. Ya no.

En parte, me importa poco lo que le pase a este bosque. Aunque era muy bonito... Pero era un daño colateral. ¿No? ¿No era mas importante mi objetivo? Corro y corro.

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25/09/2016, 18:30
Director

Corres y el elfo no puede alcanzarte, aunque él tira otra flecha más que roza tu muslo y te araña. Por mucho que corras aquel halo de muerte de alcanza y lo notas como algo frío y helado. Entra en tu cuerpo y duele, te paraliza y te pega al suelo. Tu cuerpo parece que se convierte en piedra poco a poco, como si por dentro también murieras de alguna forma o te congelaras. Aquello dolía y dolía bastante.

Quieres gritar, pero te resistes para que la flor no caiga al suelo. Aquella sensación dolorosa sube por tus patas, por tu cuerpo y por tu cuello. Es en ese momento en que es demasiado insoportable el dolor y gritas.

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28/04/2018, 19:10
Director

...Otra sacudida que arrastra tu cuerpo.

Olor a salitre en el ambiente y otra sacudida más te saca del medio líquido. 

Toses y escupes agua, que se encontraría alojada en tus pulmones.

La arena bajo tu cuerpo raspa tu suave piel y el sol hace que el agua de mar se seque rápido, quedando tu piel ligeramente pegajosa y con esa sensación desagradable sobre ella. El agua al evaporarse había dejado la sal seca sobre tu piel. La pierna te escuece y es cuando ves que ahí está la flecha clavada que te hizo "despertar". Al levantar la mirada ves el acantilado donde estaba la flor de Dymas, esa que habías cogido, pero no hay ni rastro de la misma en tus bolsillos.

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29/04/2018, 15:30
Ginebra

La segunda sacudida me hace abrir los ojos, en mitad del shock de la desubicación y la incertidumbre. Pasar del medio liquido a uno seco abruptamente, hacer que el resto de agua queda en mi cuerpo se antojo hostil y mortal. La primera bocanada de mis pulmones la expulsa con un espasmo salado que me irrita la garganta. La segunda viene acompaña de una arcada y la más absoluta consternación. ¿Donde estoy?

No tardo en darme cuenta de que soy sobre la arena, en una playa. El tacto de los granos de arena bajo mi cuerpo, se antojan molestos. Pero pronto me sobreviene una sensación mucho mas insidiosa que la picazón de la piel por la salitre. Pronto siento un dolor punzante y muy vivo, que viene acompañado por el escozor el agua salada irritando la herida. 

Ah, joder... - digo al ver la flecha aun clavada- Mierda... - casi gimoteando, y mirando al rededor. La mera idea de tocar aquello me hacia sentir mareo y miedo ¿y si me desangraba? ¿que pasa si me muero en un sueño? ¿porque es lo que era esto no?

Sigo mirando a mi alrededor. Al acantilado y al mar ¿de donde he salido?

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29/04/2018, 15:45
Profundo

Al mirar alrededor ves que no estás sola, una criatura te mira con la cabeza ligeramente inclinada y toda la curiosidad del mundo en sus ojos. Sus movimientos son cuidadosos y guardando una distancia prudencial ahora que has despertado.

-Nunca había visto un bastet- dice con una voz carrasposa y demasiado aguda. Era como si un delfín tratara de pronunciar algo comprensible. Y luego señala la flecha de tu pierna, sin hablar pero pidiendo una explicación.

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29/04/2018, 20:39
Ginebra

Doy un respingo de alarma cuando me percato de que no estoy sola allí. Lo imprevisible del encuentro hace que bufe de forma felina y los músculos de mi cuerpo se crispen... Eso supone que al herida de la pierna me de una mordida de dolor algo mas intensa, y en mi cara se dibuje una mueca, en consecuencia.

Tengo que recordar que es un sueño. Uno muy vivido, pero un sueño. Es por eso que intento calmarme, respirar. Ver a aquella criatura como lo que es. Algo que sale de mi imaginación.

Yo nunca había visto... - ¿que coño era? - ... ¿qué eres...? - sigo en distancia prudencial, porque demostrado quedaba que la imaginación también hacia daño.

Parece que muestra curiosidad por mi herida. De la que yo no me puedo olvidar.

 Tengo que sacarla...- cojo flecha por un extremo y trato de tirar un poco.

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13/05/2018, 20:54
Profundo

La cosa o lo que fuera te mira con la cabeza inclinada, como si tratara de comprender tu pronunciación, o como si las palabras no fueran lo suficientemente claras. Te mira luego con ojos grandes, parpadeando un par de veces. Sus párpados no se cierran como los tuyos y parece que tiene dos pares de párpados en lugar de uno. Unos se cierran en horizontal y otros en perpendicular, algo curioso.

-Soy Nük- responde ante tú quién eres, aunque la palabra es pronunciada de una forma que tú no podrías repetir con tus cuerdas vocales. –No puedes sacarla, no es bueno.

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17/05/2018, 20:41
Ginebra

El dolor el intenso cuando trato de sacar la flecha, cosa que me repele para terminar de dar el tirón final. Algo que va acorde a lo que dice el... bicho. Vuelvo a mirarla. 

- Joder.... - preguntándome el sentido de este sueño, que parece continuar otro pasado, lo que me hace volver mirar alrededor y tratar de ponerme de pie, aun teniendo distancia de seguridad con Nük. - No sé que ha pasado, necesito salir de aquí... - ¿si me moría en un sueño también lo hacía en la realidad? ¡pánico! - Me seguían, creo... no se... Joder... 

Si puedo ponerme de pie, trato de caminar, con cautela. 

- ¿Vives aquí? - le pregunto a la criatura.- ¿Sabes dónde estoy? 

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31/05/2018, 22:34
Profundo

-Caíste- te señala lo alto del acantilado. Cuando levantas la mirada ese lugar te suena porque es donde viste aquella flor dorada. La flor de Lymas.  Se había abierto frente a ti por la noche. Ese acantilado está un poco lejos y estabas justo en el mar que había debajo.

Nük gira la cabeza sin entender y señala el agua.

-Vivo aquí y estás en la playa. Necesitas ayuda- recalca lo evidente señalando tu pierna.

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03/06/2018, 17:18
Ginebra

Había reconocido el lugar, pero eso de que caí no lo recordaba. Miro para arriba y luego me miro el cuerpo, pues no vi más magulladura que la flecha. ¿Salté al agua? ¿Nuk me sacó del mar? Es posible. En cualquier caso, ahora tenia un problema grave y no sabía que hacer. Camino un poco hacia el interior de la playa. 

Lo que quería era poder sentarme en un sitio donde no me vieran si miraba desde arriba hacia abajo. Alguna gruta en en acantilado o similar.

Ya se que necesito ayuda ¿quién me puede ayudar? - le miro un poco - Creo que me están persiguiendo... necesito sacarme esto, no me lo puedo dejar.

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12/06/2018, 18:32
Profundo

Caminar se te hace molesto, pero además la sal del agua de mar en la herida hace que escueza y bastante. Nük te mira deslizarte hacia el interior de la playa, pero no se mueve, solo mira. Sentarte en un sitio escondido parecía complicado. Pero no piensas que te busquen, porque cuando te encontraste con aquel elfo aún era de noche.

-Nük no- responde a lo de la ayuda. –No vi a nadie y si sacas es peor- dice con su razonamiento simple, la verdad es que sacar la flecha podría ser un riesgo de infección e incluso de desangrarte si tocó alguna zona delicada. Pero era molesta.