Partida Rol por web

*1 Rastrear a Vyakai desde el lugar del accidente y descubrir la dirección general de su viaje requiere una tirada Complicada (‑10) de Rastrear  El seguimiento se complica por las condiciones del terreno, que varían entre el denso barro-químico, rocas rotas, y paneles de rejilla de acero hundidos en la superficie para proporcionar equilibrio en las vías de comunicación entre los distintos edificios. Pero debido a una falta de visibilidad debido a la escasa luz los soldados no ven rastro posible 

4: Bunker de seguridad

“Rodeado por una valla de alambre de espino, en la que cuelgan varios avisos de que se pena a los intrusos con la muerte, hay un pequeño búnker blindado. Esparcidos sobre el terreno están los restos destrozados de pesadilla, de criaturas parecidas a murciélagos, que reconocéis como alcaudones tiránidos. Los bólteres pesados automatizados que coronan el techo del búnker, y que probablemente causaron su desaparición, ahora están en silencio y desactivados. El búnker y su puerta blindada parecen intactos”.La puerta del búnker está bloqueada desde dentro y requiere una considerable fuerza para abrirla (la puerta tiene 15 PB, y se requieren 30 puntos de daño para causar una brecha)*2

Desde el punto 4 se acercan a ver el 5, ya que lo tenian planeado y asi barrer toda la zona del sureste, mas allá el vacio lunar , era un desierto infinito

5: Enlace de comunicacion

“En la parte superior de un monte escarpado que se cierne sobre la zona, una torre cónica de acero y azotada por el tiempo se eleva en el cielo gélido, rematado por una esquelética antena de transmisión”. La torre es una estructura hueca que solo sirve para proteger del mal tiempo sub-ártico a la maquinaria automatizada de la antena de comunicaciones. En el interior hay dos servidores industriales que obedecen a su programación de emergencia de defender la zona. Apilados a un lado están los cuerpos de tres trabajadores convictos y un alcaudón tiránido que llegaron demasiado cerca de la torre. El enlace de comunicaciones es el mejor lugar para efectuar una extracción aérea*3

Le doy una patada a la puerta del bunker para intentar llamar la atención de quien esté dentro en caso de que fuera nuestro magus, pero no parece que nadie vaya a abrir. Decido aplicarme con la espada sierra, que para algo tiene que servir.

Hay que ser meticulosos y sistemáticos.

La pongo sobre la superficie y la activo para que haga el mismo efecto que una sierra eléctrica contra la madera, abriendo un hueco por donde acceder.

Seguid buscando mientras termino esto - pido a los demás.

Uriel enciende el foco de su armadura mientras barre la zona por si hay supervivientes.

- En nombre del dios Emperador! Si hay alguien vivo que se muestre!- la voz resonó potente a través del casco.

El cañón del bolter iba de un lado a otro, registrando la zona como marca el codex astartes, con el código la victoria estaba de nuestro lado. 

parecía que no había ni un alma, xeno o imperial dentro, ni del bunker ni de la torre de comunicación, aquella zona estaba desierta, pero el colmillo largo y el ultramarine no parecían creer que eso fuera a sera así "Hermano Ragnar, hermano Uriel, no creo que dentro del bunker haya nadie, sino, habrían hablado o reaccionado al escuchar una voz humana" les digo, pero entonces pienso en que podría haber algo util, tal vez alguna información sobre las instalaciones, aunque en principio parecía ser simplemente un puesto de guardia fortificado.

Aunque no oyeron ninguna respuesta desde dentro , la tenacidad de el marine Ragnar y sobretodo el teson, de no dajar nadie atras  que no dejaba nada por perdido, aunque encontraran solo los cuerpos o cualquier otro resto de ellos ellos.Los marines espaciales podrian descansar en paz . Con precision geomertrica y saltando chispas tanto de sus musculos geneticamente modificados como de la potente sierra se abrio porfin el compartimento

Dentro hay una escena de carnicería, el recinto está sembrado de los restos desmembrados de las fuerzas prebostes. Un agujero enorme en el centro del suelo conduce a un túnel de tierra derrumbado,Hay poco útil en el búnker salpicado de vísceras para la escuadra (escopetas, equipo de agentes, paquetes de raciones, etc.) Sin embargo, si la escuadra utiliza los códigos de anulación de los guardianes en las pocas terminales aún viables, y superan una tirada Ordinaria (+10) de Competencia tecnológica, pueden obtener un informe de seguridad de la refinería. No obstante, los relés de imagen y voz están completamente muertos. El informe revelaria posible información útil: 

La escena era dantesca, algo que por desgracia Uriel estaba acostumbrado a ver tras sus siglos de servicio, los tiránidos habían arrasado con todo y continuado su camino para devorar todo lo que encontrar, Uriel apretó su bolter con fuerza esperando poder acabar con ellos cuanto antes, el honor de Macragge lo requería.

- Hermanos, alguno domina las artes del mechanicus? En los circuitos de sus sistemas puede que tengamos respuestas y un rumbo para seguir.

Uriel comprendía la necesidad de la tecnología y su mantenimiento, pero nunca siguió ese camino como astartes, los hermanos tecnomarines que realizaban su viaje a Marte, volvían siendo mucho más silenciosos y hablando sólo con la voz metálica de las máquinas.

Por lo que de momento, sólo podía cubrir la zona mientras otro se encargara de extraer la información de las consolas disponibles y determinar hacia donde se encaminaban las bestias xenos.

La verdad es que esperaba algo mucho peor.

Niego con la cabeza cuando mi compañero pregunta.

En eso no puedo ayudar - respondo mientras me coloco en posición de controlar la zona con mi bólter -. Nunca he sido demasiado amigo de esa clase de espíritus máquina.

Acaricio mi bólter mientras lo digo, tranquilizando al que contiene mi herramienta.

Estos son los que mejor me caen.

Podemos intentarlo de todos modos - sugiero -. ¿Qué podría pasar de malo?

era de esperar lo que había dentro, ya me esperaba lo que había dentro, una masacre, esto haría palidecer a un humano normal, pero para un marine como ellos no era nada nuevo, y también explicaba lo que había pasado con la guarnición del bunker, pero antes las palabras del ultramarine, "siento decir esto, pero yo tampoco tengo conocimientos sobre los aparatos del mechanicum" le digo. 

por no poder ayudar a mis compañeros y no haber nada interesante dentro del bunker, salgo para echar un vistazo por los alrededores, ese abujero indicaba, junto a las bestias muertas, que los xenos andaban cerca, solo había que encontralos, y esperaba hacerlo para darles una prueba de su justa ira.

Unos pasos pesados se acercaban. Era un sonido conocido por todos. Las botas de ceramita eran algo que ya tenían más que conocidos los oídos de cualquier astrartes. Era su propio ruido. La señal de que llegaba alguien más.

El sonido venía del mismo lugar por el que habían llegado ellos.

Era un astrartes. Un hermano. Pero era un tanto extraño y su mera presencia era algo tétrico y espeluznante. Un astartes daba miedo en las almas de muchos amigos y enemigos, pero este Hermano de Batalla era un tanto distintivo. Una máscara de armadura muy antigua era lo que conformaba sus casco. Además, una túnica, con capucha, también cubría su espalda y cabeza. Esta era de un material sencillo, un cuero viejo, de un color sencillo, el mismo que tenía el propio material que la conformaba.

Su voz, que sonaba metálica, ya que hablaba por el respirador, sin usar el sintetizador de voz ni la radio del casco, completaba el espectro de su presencia. - La verdad ha llegado Hermanos.

Einar entró en la sala con dificultad. Sus enormes retroreactores  hacían aún más voluminosa la figura ya abultada de la servoarmadura, y la puerta no parecía preparada a los estándares sobrehumanos.

Lo primero que le llamó la atención fue el número de ocupantes de la sala. Alguien se les había unido mientras el inspeccionaba los alrededores. Su primer instinto fue levantar su arma, sin embargo no parecía haber un enfrentamiento entre sus compañeros y el recién llegado.

Un silencio incómodo reinaba en la sala, y decidió interrumpirlo.

¿Quien eres? Preguntó al desconocido. Había dureza en su voz, pero, al menos de momento, no hostilidad.

Se quedó a la entrada, desde donde podía observar toda la sala de un vistazo, sin embargo no junto a la puerta, sino cerca de la esquina, a fin de que nada que viniera del exterior pudiera sorprenderle.

Dos marines espaciales se habian quedado rezagados y se encontraron con los otros 3 que estaban haciendo un reconocimiento previo de la zona (los 3 han hecho Zonas 4 y 5 en mapa previamente ). Era tanta la presion que se les ejercia con un posible enjambre de tyranidos , a punto de caer sobre ellos sumado a lo solitario de la atmosfera de aquel planeta olvidado. Que casi se sorprendieron al encontrarse , pero los 5 habian sido mandados a la vez y bajaron al planeta de la misma capsula 

Asi que una vez reconocido el sureste del mapa se dirigieron a una zona intermedia entre los edificios del norte y los del sureste(Punto 6). Ahora mas confiados por ser 5 soldados de verdad Guardias del emperador y con un solemne proposito salvar Al magus desaparecido y volver con el a la nave suborbital , pero a la vez mas cautelosos el tiempo jugaba en su contra ya que esta busqueda era una prueba a contrareloj

6- Transporte volcado

“A medida que os acercáis a un amplio barranco sumergido en la tierra, oís el distintivo chasquido del fuego láser y el sordo rugido de órdenes bramadas. Avanzando cautelosamente a un escarpado cercano para obtener una visión más clara de la situación táctica, miráis hacia abajo para ver los restos de un transporte de carga de ocho ruedas. Tomando una posición defensiva con el vehículo en un flanco hay una escuadra irregular de dieciséis guardias imperiales, agachados en posiciones de disparo. Los cuerpos de más guardias están diseminados por la zona, y entre ellos se encuentran los restos destrozados y quemados de una docena de alcaudones tiránidos, enormes, pesadillas con alas de murciélago con ensangrentadas garras como guadañas. Erguida en medio de los soldados está la inconfundible figura de un joven comisario imperial, con su largo abrigo negro roto y manchado de sangre. Sin mostrar temor o preocupación por su propia seguridad, grita órdenes a sus hombres para que se mantengan firmes y mueran por la gloria del Emperador. Más allá de ellos, al otro lado del barranco, el movimiento ondula entre las rocas mientras los tiránidos se congregan para otro ataque”.

En cuanto cayó en la cuenta de su error, Eynar echó a reir. La tensión les estaba comenzando a jugar malas pasadas... Recuperada la compostura, se reprendió a si mismo. El credo prometeano les enseña a pensar antes de actuar, y estuvo a punto de levantar las armas contra un compañero.

Vayamos. Les dijo. He oído gritos por allí. 

Llegando a la zona señalada comienzan a oírse los inconfundibles sonidos de disparos, y al acercarse más, comprueba que son guardias imperiales defendiéndose del ataque tiránido.

¡Vamos! Urgió a sus compañeros. ¡Hay que ayudarles! 

Encaminándose al lugar recordó las veces que se había enfrentando con anterioridad a la amenaza tiránida... pero en esas ocasiones vestía el verde esmeralda, y contaba con el apoyo del fuego prometeano. Echaba de menos a sus compañeros... pero en estos momentos echaba más de menos sus lanzallamas

tras revisar el bunker y reencontrarnos con nuestros hermanos rezagados, seguirmos avanzando hacía el trasporte, pero el sonido de los laseres de la guardia hace que saque mi bolter, puede que el martillo del emperador fueran milicia, pero si estaban combatiendo, es que posiblemente había tiranidos cerca y les estaban atacando, por lo que saco mi bolter, y tras llegar ha donde estaban resistiendo los guardias y su comisario, el cual estaba demostrando un gran valor al arriesgar su vida para inspirar valor en sus soldados, el si era un hombre para tener respeto, "estoy con el salamandra, hay que ayudar a esos soldados, no hay que dejar que su valentía no sea recompensada con nuestra intervención" digo a mis compañeros cuando me lanzo con el bolter delante y apuntando al enemigo.

La revisión del bunker no les ayudo en su búsqueda, no encontraron datos del magus del mechanicum, y al salir al exterior nos encontramos con un combate entre la guardia imperial y un grupo de tiránidos que se prepara para cargar, viendo el escaso número de los guardias, estaba claro que iban a ser eliminados en cuestión de minutos, pero extrañamente el resto de la escuadra quiere intervenir.

- Hermanos si tanto deseáis pelear, podemos contener este ataque, pues esos xenos son mis enemigos más odiados, pero esté será el último retraso que tendremos, tenemos una misión encomendada, la guardia imperial sabe que su deber es morir por el imperio, como lo es el nuestro, todos sabemos que esa escuadra, aunque valiente terminará muriendo aquí, no tenemos medios para evacuarla y no es nuestro cometido. Erradicaremos esa amenaza y seguiremos con nuestra misión sin mirar atrás, entendido?

El deber estaba siempre por encima de todo lo demás, y el tiempo estaba corriendo en su contra.