Partida Rol por web

Aarkan: Destinos Enlazados

Acto 2: Camino a Saburunda

Cargando editor
06/05/2010, 18:30
Director

Pronto te das cuenta de la presencia de animales. Sus huellas claramente lo demuestran. Pero aún con la presencia de algunos animales, sientes que no hay tanta vida como en Nalak'hum. Puede que el canto de los pájaros o el silbido de las pequeñas alimañas sea lo que te hace dudar. Simplemente hay algo en ti que te dice que es un bosque distinto. Al parecer Beyit no distingue esa diferencia. Según te dice, evidentemente es un bosque distinto al otro, pero que no tiene nada de especial.   

Y justamente ese "algo" es lo que te inquieta...

Al cabo de unas horas de camino oís el llanto de un animal. No sabes calcular lo lejos que puede estar pero se oye desde la distancia. Es un grito constante de agonía. Se te pones los pelos de punta al oírlo. En tu interior sabes que no puedes soportar ver a un animal sufriendo. Pero sabes que esta demasiado lejos como para poder ayudarlo... puede que a un par de horas de distancia.

El grupo no le da más importancia y sigue el camino sin detenerse en ningún momento. En cierta manera sientes un atisbo de rabia en tu interior. Un sentimiento que creías haber aplacado hace ya mucho tiempo. Algo te está haciendo rebrotar esos instintos. Finalmente, al cabo de un rato dejáis de oír al animal... poco tiempo después vuelves a serenarte...

Pasada algo más de una hora oís voces de hombres a lo lejos. Puede que a unos cien metros de distancia bosque adentro. El camino sigue hacia el oeste, donde se encuentra la ciudad de Dalabor. Las voces las oís en dirección al norte pero no hay camino alguno hacia allí, solo arboles y arbustos. Se oyen risas y voces algo animadas.  

Cargando editor
06/05/2010, 19:01
Mariscal Zeion Siffrinmundo

No es lo que esperaba, pero en fin, ahora me llama el deber... - dice sonriendo, mientras se apoya en la barandilla del piso superior, para deslizarse hacia abjao donde están los chicos hablando, con una extraña entrada triunfal -

Tras un salto desde donde estaba a donde estan los chicos, Mariscal aun encapuchado, ayuda a la joven muchacha a incorporarse....

Mejor que salgais afuera a despejar vuestras mentes, al sumegiros en el abrevadero de ganado,sería una opción estupenda, no busqueis problemas o saldréis perdiendo... - dice a los jóvenes, en un tono más que misterioso, mientras ayuda a la camarera... , indicándole que ya se ocupa de mitigar la agresividad de los jóvenes-, las peleas se disputan fuera, no dentro de este local, al posadero ya le cuesta sudor y sangre, evitando este tipo de peleas absurdas, debidas a un sobreconsumo de su licor, y un temperamento vuestro que ya se sale de escala.

Dice ya poniendo a salvo a la muchacha e invitando a los chicos a salir de la posada.

 

Cargando editor
06/05/2010, 19:58
Director

El joven zarandea a su compañero mientras tu ayudas a la mujer a levantarse y a apartarse de esas mesas. Justo en ese momento cae un rayo muy cerca y oyes claramente como las tejas de la posada se vienen abajo. Miras hacia arriba y ves como un trozo del tejado se ha venido abajo. el ruido de la tormenta se hace ahora más fuerte y la lluvia no para de entrar por el hueco...

En ese momento cae un rayo del cielo justo por la abertura que había quedado, dejando a los jóvenes carbonizados e iniciándose un incendio en todo el local. Las mesas empiezan a prenderse rápidamente y en pocos segundos el fuego corre por todas partes.

La gente grita y se apresura a escapar de la posada lo más rápido posible. 

Notas de juego

Un detalle, no has saltado al piso de abajo, pues los chicos que están peleándose son justamente los de la mesa de al lado que parecían todavía sobrios. No tiene una importancia muy grande pero es para que te hagas a la idea de que tu "entrada triunfal" no ha sido "tan triunfal". Simplemente te has levantado rápidamente de tu asiento y has ayudado a la mujer, pero nada más.

Cargando editor
08/05/2010, 17:01
Sólo para el director

Beyit le muestra la prueba de que si habitan animales en aquel bosque, pequeñas huellas y débiles cantos de pájaros tranquilizan al elfo el cual comienza a sentirse un poco mejor entre aquellos árboles. Para los elfos la naturaleza era muy importante, la respetaban y veneraban. Pero para Eriüm los animales que habitaban en ella eran de igual importancia ya que sentía mucho respeto por ellos. Aún así en su interior sentía algo extraño en ese bosque. Hay algo extraño en este bosque…

De repente se detuvo, giró su cabeza de un lado a otro fijando su mirada intentando ver más allá de lo que podía. El grito agonioso de un animal alertó al elfo el cual intentaba descubrir la procedencia de aquel llanto. Al unísono la capitana también se detuvo, seguramente también había percibido el ruido o simplemente lo hizo al ver a Eriüm detenerse. Por lo contrario los Humanos siguieron la marcha como si no lo hubiesen oído nada o no le dieran importancia. Lo has oído? Le preguntó a la elfa con cara de preocupación. Tengo que ir a ayudarlo, sea lo que sea. Estaba apunto de salir corriendo cuando Beyit le detuvo aconsejándole que lo dejase estar, estaba demasiado lejos como para ir a ayudarlo.

Eriüm sentía rabia, se había estado preparando para este momento durante mucho tiempo, pero algo en ese llanto le hacía hervir la sangre al elfo. Como si ese animal estuviese llamándole, pidiéndole ayuda. No entraba en razones y volvió a prepararse para marcharse obligando a la elfa a ponerse en su camino y detenerlo. Eriüm respiró hondo y se tranquilizó, miró a Beyit con un rostro entristecido. Tienes razón, será mejor que sigamos o perderemos al resto. Ya no escuchaba al animal, ya no lo llamaba. Algo en su interior le decía que había muerto así que siguió caminando en absoluto silencio lamentándose no haber podido hacer nada.

Tras ese percance el camino se hacía mas pesado para el elfo quien seguía sin decir una palabra. A una hora de camino se escucharon unas fuertes voces mas al norte como si alguien estuviese celebrando algo. Eriüm simplemente giró su cabeza hacia el lugar y luego hacia la capitana pero ni si quiera se detuvo, era como si no le diese importancia y si quería avisar a los humanos de ello debería hacerlo Beyit.

Cargando editor
08/05/2010, 21:53
Mariscal Zeion Siffrinmundo
Sólo para el director

Mariscal rapidamente ayuda a la gente a salir de la posada, mientras que intenta apagar el fuego, entre el ir y venir de la gente, registra sigilosamente los cuerpos de los jóvenes, para buscar el tan peculiar artefacto que habían cogido, para una vez lo tenga en su poder, llevarlo de nuevo a la cueva.

Rápidamente, mariscal empieza a sacar a la gente, apagar con cualquier agua que sepa que no es infamable el fuego ocasionado por el rayo, al parecer, el Dios del que hablaban si está muy molesto por el robo, en cuando recupere el artefacto, lo llevará al sitio original donde estaba.

Notas de juego

Lástima...XD

Cargando editor
09/05/2010, 16:57
Sólo para el director

Si amiga no te hagas problemas. No pretendo que nos movamos de aquí.

Holdio esperó pacientemente la vuelta del hombre que los habia recibido. el repiqueteo de la lluvia golpeaba los vidrios y latigos de viento chocaban contra estos mismos.  Los truenos hacian un escandaloso espectaculo mientras los relampagos iluminaban esporadicamente la oscuridad en la que se habia sumido el pueblo. Cuando el hombre volvio Holdio se dirigió a el.

Disculpe, si no es mucha molestia nos gustaría quedarnos aquí a pasar la noche. Resulta que ya no poseemos comida ni lugar donde dormir. El viaje nos ha jugado malas pasadas y ademas esta tormenta parece poco alentadora para un caminante. ¿ podríamos quedarnos aqui?.

 

Cargando editor
10/05/2010, 18:58
Director

El grupo en este caso se detuvo al oír las risas y el jolgorio que se oía cada vez más cercano al camino. Los paladines por primera vez se prepararon para recibir a la posible amenaza. Pero unos minutos después el peligro pareció disiparse al ver de que se trataba. Parecía ser un grupo de cazadores. Más o menos un grupo de unos 5 o 6 humanos. Entre dos llevaban a cuestas un ciervo que acababan de cazar. El resto transportaba el equipo de caza. Varios arcos, algún que otro machete y sobretodo y más importante 3 o 4 cepos de gran tamaño. 

Al llegar al camino los paladines bajaron las armas ya más tranquilos. Los cazadores por su parte tampoco parecían verse intimidados por el grupo de caballeros. Simplemente se acercaron al grupo y preguntaron...

¿A donde os dirigís caballeros? Dalabor está a tan solo unas horas de camino a través de este bosque. Lo mejor que podéis hacer es pasar la noche allí... Nosotros vamos de camino, si no les molesta podemos acompañarles.  

       

Cargando editor
10/05/2010, 19:09
Director

El fuego se extiende más de lo que prevenías en un principio. La estructura del techo comienza a quemarse ya que las vigas son de madera. Los intentos de apagar un fuego tan grande con el agua de la que dispones es inútil. Entonces decides ayudar a la gente a salir de la posada para que no haya más víctimas en esta catástrofe. Una vez todo el mundo esta saliendo vuelves a subir al piso superior. Rebuscas entre los cuerpos de los muertos pero no parece haber nada. El artefacto no está...

De repente una viga cae sobre las mesas del piso inferior destrozándolas y empezando a prenderlas. No hay mucho tiempo. La mayoría del humo por suerte puede salir por el agujero del tejado por lo que todavía tienes algo de visibilidad y aire que respirar. Pero el fuego sigue arrasando con todo. Puedes seguir buscando entre las pertenencias de los cadáveres que están en la mesa en la que cenaban o huir lo antes posible del incendio.

Es un momento crítico y posiblemente aunque decidas salir ahora no te sea fácil.

Notas de juego

Escapar: Prueba de Atletismo + FUE , Dificultad 10, para saltar por encima de las mesas en llamas y salir a la calle.

Buscar: Prueba de Hab. Manual + PER, Dificultad 8, para rebuscar rápidamente entre las pertenencias de los jóvenes carbonizados.

Cargando editor
10/05/2010, 19:29
Mariscal Zeion Siffrinmundo
Sólo para el director

Mariscal humedece un trozo de tela, que arranca de uno de los no afortunados que yacen bajo escombros, colocándoselo en la boca, se acerca soportando las mordidas de las abrasivas lenguas de fuego, soportando el calor de las llamas, haciendo buena mención, de la resistencia innata de los paladines...

Empieza a buscar en los cadáveres de los jóvenes que hablaban del tesoro, para después de buscar en sus cuerpos, santiguar los cadáveres con un gesto de su mano, si tuviese tiempo, sacaria aquellos cadáveres de ahí, antes de que las llamas devoraran sus carnes.

Una vez registra los cadáveres de los jóvenes para encontrar lo que buscaba, intenta escapar, para evitar ser pasto de las llamas, para asi no correr la misma suerte que los jóvenes.

- Tiradas (2)

Tirada: 1d10(+3)
Motivo: Buscar
Dificultad: 8+
Resultado: 9(+3)=12 (Exito)

Tirada: 1d10(+3)
Motivo: Escapar
Dificultad: 10+
Resultado: 7(+3)=10 (Exito)

Notas de juego

Lo voy a tener francamente chungo el escapar, me da que me voy achurruscar un poco-bastante

Cargando editor
10/05/2010, 19:47
Director

Notas de juego

No vale elegir las dos opciones. Puedes elegir escapar y punto (Dif. 10) O puedes elegir Buscar (Dif. 8) para luego intentar escapar (Dif. ???)  Te dejo quedarte con una de las dos tiradas que ya has sacado, pero no con ambas. 

Cargando editor
10/05/2010, 19:53
Mariscal Zeion Siffrinmundo
Sólo para el director

Notas de juego

por una vez que ambas me salen buenas...XD

Me quedo buscando lo del tesoro, a ver que lo devuelva a su sitio, antes de que haga mas destrozos

Cargando editor
11/05/2010, 13:38
Sólo para el director

Eriüm había avanzado sin hacer ningún caso a las voces, pero la Capitana le ordenó que se detuviera al ver que los humanos se preparaban para una posible batalla. Poco después se comenzó a visualizar un grupo de cazadores que entre risotadas se acercaban al grupo de caballeros.

Desde la lejanía el elfo pudo observar como dos de ellos cargaban un ejemplar joven de ciervo. De repente le volvió a la cabeza el horripilante grito de sufrimiento del animal que sintió horas antes. Podría ser el animal que escuché. Caminó sigiloso mientras los cazadores y los soldados intercambiaban palabras apareciendo detrás de los dos que sostenían su presa.

La mirada del elfo podía fulminar a cualquiera que intentara mantener su vista sobre el. Puso su mano derecha sobre el animal y comenzó a decir algo en elfico entre susurros. Perdona por no ir en tu ayuda. Ahora descansa, que la diosa proteja tu espíritu. Retira su mano y examina uno a uno a los cazadores apretando su puño con rabia, si fuera por el acabaría con ellos con rapidez, pero tenia que reprimir sus impulsos y optó por alejarse y volver a su posición anterior con Beyit sin mediar palabra. al llegar a ella la capitana asintió con la cabeza y apoyó una de sus manos en su hombro compartiendo el dolor que sentía en ese momento.

Cargando editor
16/05/2010, 13:24
Director

No hay problema, podéis quedaros el tiempo que necesitéis. Pero... si que es cierto que nos vendría bien tu ayuda. Hay que subir al campanario y arreglarlo. Yo ya estoy muy mayor para esas cosas... tendrás que pedirle las piezas necesarias al herrero, yo ya las pagaré, no te preocupes.

De repente la tormenta se hace más fuerte y oyes como cae un rayo muy cerca de donde te encuentras. Recuperado del susto el sacerdote sigue hablando.

Ahora lo mejor que podéis hacer es descansar. 

A medida que pasan el tiempo comienzas a escuchar gritos y mucho alboroto en el exterior. Parece que hay gente en peligro fuera, en las calles.

Cargando editor
16/05/2010, 13:30
Director

Te afanas en buscar entre los restos de los pobres muchachos pero no encuentras nada. Rápidamente te acercas a la mesa donde estaban sentados y miras por todas partes. Encuentras una bolsa pero miras en el interior y no hay nada que pueda relacionarse con lo que hablaban. Solo hay un casco de minero, unas botas y una bolsita con monedas, nada más. Viendo que no vas a encontrar nada de valor entre sus pertenencias corres hacia la salida.

Bajas apresuradamente las escaleras que están en llamas. Una vez te encuentras en el piso inferior te encuentras con la salida bloqueada por un grupo de mesas ardiendo. Intentas coger impulso para saltar sobre ellas. En un par de segundos saltas por encima del mobiliario ardiendo, pero tu capa se prende fácilmente. En un instante todo tu cuerpo empieza a estar envuelto en llamas.

A duras penas consigues dar unos pasos hacia el exterior, donde te derrumbas, quedando inconsciente...

Cargando editor
16/05/2010, 13:38
Director

El grupo entonces reanuda la marcha hacia Dalabor. Solo hay un par de horas de camino y se acerca el mediodía. Puesto que todavía hay tiempo paráis para comer en un claro cercano al camino. Una fuente de agua brota de entre las rocas. Aprovecháis para rellenar vuestros odres de agua fresca y cristalina. Os sentáis todos en circulo para comer. Los cazadores os ofrecen a probar quesos de la comarca que parecen bastante buenos...

Pero en medio del almuerzo algo os perturba. El sonido de un cuerno de guerra. Retumba sobre el bosque haciendo que algunos pájaros se marchen volando hacia el cielo. Las caras de los cazadores en ese momento se vuelven pálidas. Parece ser que saben lo que ese sonido significa...

¡Vamos rápido hemos de llegar lo antes posible a Dalabor!  dice uno de los cazadores dejando. 

Tendréis que ayudarnos a transportar el ciervo por turnos. Se que pesa mucho pero lo necesitaremos. No podéis quedaros en el bosque a menos que estéis dispuestos a morir.

Los miembros del grupo recogen con prisa sus pertenencias y se disponen a partir lo antes posible.

Cargando editor
16/05/2010, 20:09
Mariscal Zeion Siffrinmundo
Sólo para el director

Notas de juego

Menos mal que en buscar me salió 9, que si no a saber que me pasa...XD

Bueno, ya que estaré inconsciente, esperaré a que me digas algo.

Cargando editor
17/05/2010, 00:00
Sólo para el director

A Eriûm no le parece bien parar a tan poca distancia de Dalabor pero no emite quejido alguno ya que esas pausas en el camino le dejaba tiempo para descansar de su pesada carga. Se sentó lo más lejos posible de los cazadores humanos pero aún así llegó a sus manos un pedazo de queso el cual tuvo que comérselo ante las persistentes miradas de los demás. Aunque se hizo de rogar el elfo notó enseguida un sabor especial que hacía de aquel queso una delicia. Agradeció asintiendo con la cabeza pero sin articular palabra alguna.

Poco después un cambio brusco en la naturaleza hicieron que el elfo se pusiera alerta, pocos segundos después un fuerte sonido proveniente de un cuerno de guerra envolvía el lugar espantando a los pájaros. Viene del oeste, que hacemos... La mirada del elfo se mantenía fija en su capitana a la espera de una orden aunque la elfa se mantuvo a la espera.

No había que fijarse mucho para saber que esos cazadores sabían lo que estaba por venir y se apresuraban en recoger para partir o antes posible. Por primera vez Eriûm se dirigió a los cazadores humanos. Estaños sois los humanos, primero decís que tenemos tiempo de sobras como para parar a comer y ahora os apresuráis a marchar... a que se debe ese repentino cambio... Oh si! supongo que será por ese cuerno de guerra que acaba de resonar. El elfo cambia su faz ahora más seria y agarra a uno de los cazadores por la manga de su chaquetón. Quienes son los que se acercan.

- Eriûm!

El elfo no tuvo que girarse para saber de donde provenía esa melódica voz. Soltó al cazador y se dirigió hacia la capitana. Esta bien, pero no pienso cargar con su presa... Se abrochó su mochila y prosiguió por el camino hacia Dalabor, de vez en cuando miraba hacia el oeste para ver lo que se acercaba.

Cargando editor
19/05/2010, 22:56
Sólo para el director

A la vez que Holdio escucho los gritos sale despedido hacia la puerta para abrirla. Mientras realiza la tarea  Yrbis le mordia las prendas para que no salga, pero el estaba decidido a ayudar. Era su necesidad de ayudar a los otros. Se olvido de aquella herida generada por ese mismo sentimiento y acudió a socorrer a aquellos que estaban en peligro. Seguramente sería por la tormenta.  Era hora de correr.

Disculpeme anciano, pero probablemente tenga que traer gente aquí dentro.

Holdio salió del establecimiento y comenzo a levantar barro en cada zancada que realizaba.  Los relampagos alumbraban espontaneamente el paisaje y los truenos zumbaban en su oido. 

Cargando editor
22/05/2010, 17:09
Director

El grupo rápidamente coge todo lo necesario y comienza a correr por el sendero en dirección oeste. Los humanos cargan el venado que por suerte no es adulto y se puede llevar entre dos de ellos sin muchos problemas. Lleváis un ritmo de carrera moderado pues todavía tenéis una hora de camino y tenéis que aguantar todo el trayecto. Mientras recorréis el bosque los hombres os cuentan lo que creen que está sucediendo...

-Lo que habéis oído es el cuerno de Dalabor. Estoy seguro que se trata otra vez de un ataque de los Skaerling. Llevan meses intentando hacerse con nuestra ciudad y de vez en cuando mandan a un escuadrón para acabar con nosotros. 

Nos roban las presas... incendian partes del bosque...  

En ese momento comprendes la razón por la cual estos humanos usan trampas para osos contra pobres crías de ciervo. No pueden permitirse perder una presa. Si cazaran con el arco no tendían la certeza de llevarse al animal. Entiendes pues que en tiempos difíciles hay que tomar medidas practicas... 

-Colocar trampas es más peligroso para nosotros. Podemos caer en una sin querer y perder una pierna. Pero de esta manera nos aseguramos de no perder ni una sola presa. Además a veces nos encontramos la cola de alguno de esos lagartos atrapada.

-Malditos bastardos pueden regenerarse en cuestión de días!

A lo lejos podéis divisar humo. Pero al no conocer la zona no estás muy seguro de si se trata de la ciudad o de algún incendio causado por los asaltantes.

Notas de juego

Aparte del post, si quieres intentar deducir de que se trata ese humo haz una tirada de INT+Conocimientos, Dificultad 7. 

Cargando editor
23/05/2010, 16:08
Director

Corres a través de la calle principal. Se ha desatado una gran tormenta en el cielo. No para de llover a mares y los rayos caen sobre los tejados. La gente huye despavorida para refugiarse presa del pánico. Una gran nube de humo negro y un resplandor anaranjado parecen ser el foco del caos. No tardas mucho en llegar al final de la calle y ver una gran edificio en llamas. Por suerte la lluvia parece estar menguando su crecimiento por momentos. No parece que pueda propagarse a causa de la lluvia. Las casas cercanas están demasiado húmedas para prenderse. Pero lo que parece ser una posada esta casi totalmente carbonizada.

El humo por otro lado no te deja ver mucho más que las siluetas de la gente que todavía esta cerca. Entre varias personas parece que arrastran a un hombre que esta inconsciente. Por lo que parece al acercarse a ti el grupo de personas está bien. Ninguno de ellos parece tener quemaduras importantes. En cambio el hombre que hay en el suelo si tiene la espalda quemada. Lo que antes era una capa ahora es solo un montón de jirones.

- Hay que llevar a este hombre a la capilla. Ha tenido suerte salir antes de que se derrumbara el tejado.

- Ayúdenos a cargar con él. Los aldeanos necesitan ayuda, parece un hombre de gran estatura y musculoso. Tiene que pesar bastante para llevarlo en volandas.

Yrbis que te había seguido llega hasta donde estas tu. Se acerca al hombre que hay en el suelo y luego te mira. Su mirada te lo dice todo, es la misma que cuando te vio tan mal herido que casi mueres.