Partida Rol por web

Akira ni alcanzó a ver la ola hasta que finalmente fue tragado por ella. Inconsciente quedó tirado en el arena cerca de Tomoyo, pues la había abrazado antes al fin y al cabo. Sus quejas lo despertaron y alcanzó a oir que se estaba cagando en él, pero no dijo nada y se aquejó un poco arrugando el ceño mientras se colocaba en cuatro patas. Estaba muy cansado y tenía golpes en el cuerpo, así que se quedó sentado suspirando y frotándose los ojos un poco. Sentía que había tragado agua y le dolía el estómago por la sal.
—¿Dónde estamos? —preguntó con un poco de seriedad y luego cuando pudo abrir su irritada mirada, observó la isla en silencio. En el suelo y estirando su larga figura, se reclinó hacia atrás y dedicó miraditas a sus compañeros.

Tomoyo!!!, no hagas eso, mira si se asfixia o algo!!! – Tsubasa miraba las maldades de su amiga – pobrecilla – dice tomando a la pequeña rubia y recostándola boca arriba, luego, le quita la arena de la cara – mala Tomoyo!!, es una niña pequeña!!.

Tsubasa siente una voz  masculina cerca y voltea – Señor Akira músculos – kun!! Buenos días, algo roto? – le pregunta dándole una mano para ayudarlo a levantarse.

-Zzz... Zzz... Zzz... ¿eh?- estaba dormido boca arriba, bastante tranquilo la verdad, hasta que noté algo en mis pies. Me fui incorporando lentamente, empezando a visualizar a mi alrededor. Vi que lo que me golpeaba en los pies eran olas -¿Olas...? Espera... ¿estoy en una playa?- pensaba algo confundido. Entonces recordé: estábamos en el bote, yo tomé el relevo del remo, entonces vino la ola gigante y... bueno, supongo que acabamos aquí.

Escuché un pequeño griterío en otro lado de la playa. Me fui incorporando hasta levantarme mientras me frotaba los ojos para espabilarme, habíendome sacudido antes las manos de arena. Caminé tranquilo hasta el grupito que había formado por la peligris, la peliverde y Akira. Cuando vi lo que estaban haciendo, todos alrededor de Menta, aceleré el paso con prisa -¡Menta-chan!- exclame al ver que seguía inconsciente y con tierra en la cara. Me puse enfrente de Tsubara, recostandome al lado de Menta -Menta-chan, ¡Menta-chan... esto no tiene gracia, levanta!- le dije con bastante pánico.

Akira miró a Tsubasa un momento y le inclinó un poquito la cabeza. Pronto extendió su mano y la tomó para hacer la mayor parte del esfuerzo él y ponerse de pie.
—Me duele todo el cuerpo, pero creo que no me he roto nada —dijo a modo de comentario con algo de seriedad y se puso de pie soltando un quejido por la garganta. Una vez arriba, le miró hacia abajo—. Gracias.
Los gritos de Nemoru le hicieron tornar el rostro y se acercó con pasos largos hacia Menta, pronto se arrodilló y prosiguió a comprobar su pulso, retirándole un poco la tierra que le tiró Tomoyo.
—¿Nadie sabe dónde estamos? —preguntó algo malhumorado e incómodo, sin mirarles porque se centró en ver qué le pasaba a la rubia.

Aunque no lo aparente, Tomoyo es un ser humano, y tiene sentimientos. Al notar que Menta no despertaba, y ver la creciente desesperación de Nemo, Tomoyo se siente mal, y decide revisar si Menta está viva o muerta.

Casi sin darse cuenta, se agacha hasta ella y le toma el pulso. Su padre le enseñó a hacer estas cosas, puesto que en el dojo los entrenamientos eran intensos, y algunas veces uno que otro se desmayaba tras recibir un golpe con el Shinai (una espada de bambú)

Toma la mano de menta, y con sus dedos siente su pulso. Ya que Akira la sostiene se le facilita bastante.

Yuri despertó sintiéndose desorientado y con una gran sensación de humedad, unos pocos segundos le bastaron para orientarse de nuevo y ver donde se encontraban, por lo menos estaban enteros y vivos.

Se acercó donde los demás estaban comprobando si una chica estaba viva o no, al parecer solo estaba inconsciente, miro de nuevo a la zona de la jungla y dio un largo suspiro, seguramente habían acabado en una isla perdida de la mano de dios, aunque tampoco estaba nada claro, ninguno sabía la ruta que seguía el barco, pero era mejor ponerse en lo peor para luego no desanimarse mas de lo que ya estaban.

Lo mejor sería salir del agua y protegernos del sol, comprobar que estamos enteros y tener suerte de poder encontrar algo para mantenernos hidratados- sin esperar respuesta se empezó a dirigir hacía la zona de jungla, por lo menos esperaría a la sombra, Yuri y el sol no eran muy amigos que digamos, ahora lo mas importante era encontrar algo para hidratarse, sino era muy probable que no aguantarían mucho, 

Cuando abrí los ojos, lo único quepodía ver, a parte de a aquellos que iban en el bote conmigo la noche anterior, era una jungla, una que, por alguna razón, me recordaba a MH. Aún con el cuerpo algo adolorido, consigo levantarme y volverme a los otros. "Esto tiene que ser coña, espero que no sea algo como perdidos...", con este pensamiento, camino hasta el grupo. Me fijo en la chica rara que parecía k.o, solo con ver su pecho era evidente que estaba viva, por lo que solo debía haberse desmayado.

-Hey, ¿Alguno sabe donde cojones estamos? 

-Es que acaso tengo cara de guía?? Alguien mas va a hacerme la misma pregunta?? No sé, ve a preguntarle a algún plebeyo, ellos deben saber, viven en arboles y mugre- decia con indiferencia.

Soltó con brusquedad a Menta -esta viva, solo esta inconiente...- levanto la vista y miro a todos lados -pelo blanco, cúal es tu nombre?? Dijiste algo de encontrar un lugar seguro, me gusta tu idea, tu nos guías-

Tomoyo sacó de su bolsillo su teléfono, el que usaba para oír musica. Estaba empapado y ya no funcionaba, pero Tomoyo no era tan buena con los electrónicos, cuando se rompían pedía un nuevo teléfono y ya. Trato en vano de llamar a su madre para q envíe un chofer a por ella.

-rayos, este trasto no sirve- dijo lanzándolo con fuerza al piso -pediré uno nuevo cuando llegue-

Akira luego de comprobar que seguía viva y de escuchar a Yuri sin dedicarle palabra porque se fue, mantuvo el silencio un momento y observó hacia el sol, luego a Nemo y finalmente a Menta. Echó un suspiro desganado y aprovechó lo pequeña que era para cargársela en brazos y caminar tras el pálido hacia una sombra. No obstante, se detuvo antes y miró por encima de su hombro.
—Nadie sabe dónde estamos, pero el otro chico tiene razón. Deberíamos ir a una sombra y agruparnos un poco. —Tenía la seriedad marcada entre ceja y ceja, a la vez que arrugaba un poco el entrecejo al hablar, no estaba cómodo ni de buen humor ni tampoco muy descansado que digamos. Su respiración se percibía arrastrada y tenía los brazos cansados, pero no iba a abandonar a la rubia.

Tsubasa mira como van encamino todos a la sombra – oigan espérenme!!! - dice apurándose a alcanzar a su amiga Tomoyo – Mmmmoooo… mala amiga, me dejas atrás!! – le reprocha.

Voltea a mirar a todos – conozco primeros auxilios, soy trapecista y tengo muchos viajes al hospital, puedo ayudar con la pequeña siempre q no haya sangre!!! – esto último lo dice sintiendo un extraño escalofrió que sube por todo su cuerpo – Tendríamos que revisar los alrededores, y no alejarnos tanto de la costa, aquí podríamos pedir ayuda en caso de q veamos un helicóptero o algún bote – decía levantando su mano y rascando su cabeza – también tendríamos q tener cuidado con algunos animales, capas hayan pumas, o panteras o algo así… tengo muchas cuerdas flojas y espectáculos que quiero realizar aún -  sonríe un tanto nerviosa, el lugar podría ser muy peligroso, como también podría estar al lado de la civilización, nunca se sabe – Por cierto!! – agrega – mi nombre es Tsubasa!!, con todo esto no tuve tiempo de presentarme!!

-pu.. Pumas?? Panteras??!- Tomoyo se pone nerviosa, de pronto este lugar le parece peligroso.

-ne.. Necesitamos huir de este lugar, tenemos que ir a algún lugar alto para ver hacia donde ir-

A Tomoyo se le ocurre que los lugares mas altos serian seguramente un edificio enorme, quizás un buen cetro comercial...

Mientras estabais yendo a una zona de sombra, algunos movimientos de los arbustos cercanos os llamaron la atención. Yuri se acercó a ver que era eso con precaución, cuando un par de animalitos salen de entre la espesura, quedandose mirando al chico con curiosidad. Los animales no serían más grandes que un gato doméstico de tamaño medio.

Orphen estaba tomando sol en la cubierta del barco. El calor en su cara se sentía bien, aunque notaba la ropa arenosa y pegada al cuerpo, eso lo incomodaba. ¿Por que había arena alli? Abrió los ojos para encontrarse tumbado boca arriba en aquella jungla. Recorrió con la vista el lugar sin levantarse de la arena, asimilando todo lo ocurrido.

Vaya, de tener el defecto de vago podría quedarme aquí todo el día, retozando bajo el sol - Pensó a la vez que oía los gritos del resto del grupo. Chasqueo la lengua mientras se incorporaba, sacudiendo la arena que aun se aferraba a su ropa. Por acto reflejo se fijo si aun conservaba sus efectos personales - Puta vida, perdí la navaja.

Comenzó a caminar hacia el resto del grupo, con somnolencia. Aun le dolían los brazos y las piernas del esfuerzo del día anterior.

Akira escuchaba a las dos animosas que no parecían estar afectadas por el cansancio y no contestaba nada. Estaba un poco de mal humor y desorientado llevando a Menta con cansancio mientras a lo lejos notaba a Yuri.

—Yo soy Akira, creo que ya lo dije —comentó algo seco mirando hacia Tsubasa y le asintió. Pronto depositó su vista en la jungla sin descartar lo de animales salvajes.

Siguiendo con sus largos pasos, se detuvo cuando notó que el pálido estaba lidiando con algo en particular. De un saltito afirmó a Menta en sus brazos inclinándose un poco hacia delante.
—¿Qué es eso? —preguntó.

¿Hum? ¿Tocaba presentarse? Bueno, no era mala idea conocer el nombre del resto, supongo.

-Yo soy Nicolas, pero podeis llamarme Nick.

Al poco de decir esto, apareció aquella criatúra. Fijo mi mirada en aquella extraña criatura, parecía un lagarto bastante grande y con demasiados dientes para mi gusto. Akira era el primero en hacer la pregunta que a todos nos rondaba.

-Tío, no se que sea, pero no me gusta nada.

Tomoyo se puso en guardia rápidamente al escuchar los arbustos

-se... Será una pant... Pantera??- decía. Lo cierto es que no esperaba que saliera lo que salio de ese arbusto. Todos estaban sorprendidos, y Tomoyo igual. Pero si eran hostiles no dudaría en defenderse!! Al menos no eran panteras

-Tsubasa, Yuri, detrás de mi!!- Tomoyo no se preocupaba x proteger a Akira, no parecía necesitar protección... Donde está el pueblerino que esquivo el helado?? Seria muy útil ahora...

Tsubasa iba a responderle a su amiga cuando volteó la mirada -oigan... No se parecen a los de la película?- Tsubasa estaba atónita, que rayos era eso?! No entendía... Que saliera un tigre, bueno, es razonable... Pero eso era salido de Hollywood!! -Tomoyo ten cuidado- le dice a su amiga haciéndole caso y colocándose atrás y a un lado para apoyarla 

-que es esto?-  pensaba -una terrible tormenta, una maldita isla y ahora esta cosa llena de dientes?? Admito que si no fuera por esos dientes pensaría que es inofensivo...-

No por descortesía, no presté atención a lo que comentaban mis compañeros; ahora mismo solo me preocupaba Menta, que seguía inconsciente. Creo que se estaban presentando entre ellos... no estaba seguro. No fue hasta que Akira cogió a Menta en brazos y que vi a esas pequeñas criaturas que reaccioné -¿Eh? Yo soy Nemoru, aunque todos me llaman Nemo, y ella...- hice una mini pausa -Ella es Menta,es mi amiga- dije algo apenado de verla así. -Eso de ahí son... ¿lagartos?- pregunté bastante confundido. No sabía que eran... pero no me daban muy buena pinta.

Ya que todos estaban haciendo sus respectivas presentaciones y ante la amable petición de aquella chica el hizo lo propio y también se presentó- Mi nombre es Yuri aun en estas circunstancias un placer- poco mas pudo decir cuando escucho algo entre los arbustos.

Mas por curiosidad que otra cosa Yuri se acerco a ver que podía ser, a mala hora le vino la curiosidad, aunque fue mas la sorpresa del momento, aquel lagarto no podría hacerles mucho daño, aunque si aumentaba la cantidad de ellos sería mas bien preocupante, así que sin quitarles la vista de encima empezó a recular hacía donde se encontraban los demás.