Partida Rol por web

Al ver la reacción de Guilles, Chester torna su rostro en una expresión triunfadora. Millicent, ante la revelación que acaba de escuchar se queda totalmente helada en el sitio sin saber que decir, sin poder hacer ningún movimiento. Lord Griffon, comienza a lanzar improperios.

-Maldito cobarde, como puedes pedir algo así. No tenéis honor...-

Algunos de los soldados se agitan incómodos ante los gritos del antiguo señor del castillo mientras otros tensan aun más sus armas. Las llamas de las antorchas hacen bailar las sombras a vuestro alrededor, como si la oscuridad celebrara lo que estaba a punto de acontecer. La empuñadura del arma cae en las manos de Guilles.

Situado a su espalda, Chester pone sus manos en los hombros de su espía y señala con la cabeza a la joven petrificada

-Así es necia, todo este tiempo, ese hermano por el que tanto lloraste, estuvo a tu lado. Y no supiste reconocerlo jejeje. Y ahora, morirás a sus manos.-

Da un paso atrás, quedándose a tan solo unos centímetros de Guilles.

-Adelante, completa la tarea Guilles. Únete al bando ganador-

Adelante -susurra la guerrera-. Haz lo que debas hacer, hermanos.
Su voz suena quebrada. Sus ojos se inundan de lágrímas, pero ninguna llega a escapar a sus mejillas. ¡No puede creer que haya recuperado a su pequeño Guilles! No puede creer que no lo haya reconocido antes. Había aplacado sus sospechas, pues la esperanza era un lujo del que se había desprendido con los años.
Ahora, su hermano pequeño, era alentado para asesinarla con su propio estoque.
Su arma familiar... La familia, ¡ah!
Debía confiar en la sangre... La esperanza no había muerto en ella aún.
¡Adelante! -grita, dando un paso al frente-. Haz lo que debas.

Tomando el arma mira a su alrededor, la solución fácil la tiene. ¿Como hemos llegado a esto? Pero no acabara así de eso seguro.
Toma el arma y se abalanza contra Chester.

Todo ocurre tan rápido que al principio Chester no entiende que ha ocurrido. Los ojos de Guilles le miran con ira, su brazo está completamente extendido y tras bajar la mirada, el filo del sable atraviesa su abdomen y sale por la espalda. El pícaro suela la espada y el espía no puede evitar llevarse las manos al lugar donde le han clavado la espada. Da dos torpes pasos hacia atrás.

-Mal... Maldito... mal... *cof* *cof*- Su rostro se torna en una mueca de dolor tras lo cual profiere un sonoro grito. –Me... has... *cof* Matado-

Su cuerpo se arquea hacia atrás y parece que va a derrumbarse ante vosotros. Extrañamente, ningún soldado hace ningún movimiento. Y cuando el cuerpo de Chester tenía que caer, este se para, os mira desde esa posición y su mueca de terror se transforma en una sonrisa triunfal. Entonces se incorpora y empieza a reír.

-¿De verdad creías poder matarme? Infeliz... y tonto. Has tirado un prometedor futuro por un recuerdo del pasado.- Chester sujeta la empuñadura del arma y con un rápido movimiento se lo saca del cuerpo. –Lo pudiste tener todo, haber derrotado como yo a la mismísima muerte y haber obtenido todos los poderes del universo. ¿Que como son? Permíteme que te los muestre-

Y entonces estalla en una risa colérica que va inundando el lugar, clavándose en vuestros oídos. Un chirriante sonido de cascabeles os taladra la cabeza al tiempo que el cuerpo de Chester va palideciendo hasta tomar un color ceniza. Sus ropajes cambian, y así sus ojos, más malévolos, inundados de locura. La imagen del payaso infernal que se muestra ante vosotros, os hiela el corazón. Dos relucientes dagas brillan en sus manos.

-¡Contemplad el poder de los Dioses oscuros, necios!-

El ser infernal se abalanza sobre Guiles quien no puede apenas reaccionar ante la proximidad de su enemigo y la sorpresa. Chester le toma por el cuello, lo levanta por encima de su cabeza y sin dejar de reir, lo lanza contra el grupo.

-Y ahora...- Chester arroja la espada de Millicent al suelo y la mira maquiavélicamente -... Dejemos que ese niño estúpido vea morir a su hermana-

Chester se abalanza sobre Millicent quien intenta incorporarse para defenderse pero es demasiado lenta, ve las hojas del bufón alzarse ante ella, estas descienden... y Desgarran la carne de Lord Griffon. El señor del castillo se ha interpuesto entre el atacante y la joven.

-Bueno señorito, usted primero si tanto gusta-

Lord Griffon escupe una gran bola de sangre roja por la boca.

-Eres un cobarde, estos jóvenes valen mucho más de lo que tú podrás valer jamas-

Chester saca sus armas del cuerpo del noble y se preparan para asestar un golpe final cuando un grito inesperado inunda la sala.

-¡NO! ¡Mi señor!-

Y una flecha enviada por uno de aquellos que habían desertado, surca el aire clavándose en el pecho de Chester quien, sorprendido, detiene su ataque.

-No volveré a huir, no volveré a fallar. Vamos hermanos, protejamos a nuestro señor.- Un grito de aprobación inunda la sala mientras todos los traidores se giran para atacar al soldado enemigo más próximo.

E inmediatamente se inicia una batalla campal en la sala. El cuerpo de Lord Griffon cae sobre un charco de su propia sangre. Las espadas chocan por todos lados y las flechas silban en el aire. El oficial del ejército del Señor de la guerra solo grita una orden.

-Muerte a todos-

Chester por su parte, busca con la mirada a Millicent para cumplir finalmente su amenaza. Cuando la localiza a pocos metros de él. Sonríe malévolamente.

Estaba hecho, guilles habia tomado su descision.... las consecuencias que le siguieron fueron realmentre inesperadas, LG herido en el suelo, los soldados que habian traicionado a LG, derrepente estan de nuestro lado y al parecer una batalla epica esta apunto de iniciarce... no hay forma de salir de aqui sin combatir... Millicent enfrente de nuestro nuevo oponente y regatix acababa de surcar los aires... nuevamente!!! veo a los demas, Ragathix saca sus armas como si fuera un rayo veo a Artur y esta reaccionando mientras yo estoy acumulando energia en mi mano izquierda mientras que con la derecha saco mi varita magica Guilles tienes una forma extraña de iniciar los combates... espero que no se haga costumbre digo con tono sarcastico.... Señores, que les parece si nos ocupamos del payaso... tengo algunos chistes que le voy a enseñar...me preparo para la batalla

Se mueve e intenta recuperar el arma y el aliento. La situación parece favorable.
-Siempre dijeron que era bueno con el drama. Además siempre me ha gustado dormir tranquilo.

Regathix era un superviviente por ello reaccionó tan rápido y el primero, enseguida tenía su arco listo para se disparado con dos flechas, se movió unos metros para tener una mejor posición y apunto aquel ser que que sabía debía ser el objetivo principal, no cabía duda de que tenía que acabar con el si quería seguir y salir vivo de allí... Respiró hondo y soltó el aire justo cuando lanzó la primera flecha que se dirigió con un silbido hacia el objetivo, viendo lo atinado que estaba se precipitó con la segunda la cual se le desvió demasiado y golpeó contra la pared rompiéndose en mil pedazos...

Regatix inicia el ataque, los soldados se enfrascaban en batalla buscando defender el honor de Lord Grifon, un conjuro viene a mi mente pero LG esta muy cerca y mal herido del payaso diabolico... no!!! devera ser otro conjuro me digo a mi mismo y repaso denuevo mis conjuros, la batalla de los soldados nos daria algo de tiempo para trabajar en equipo y derrotar al payaso...

La violencia estalla en la sala. Aun superados en número, los hasta hace un momento traidor se encaran contra los soldados del Señor de la guerra. El sonido de metal contra metal inunda la sala, gritos, jadeos y quejidos conforman la banda sonora de este combate. Por su parte, Chester se prepara para abalanzarse contra Millicent.

-Mira esto Guilles. Te arrebaté a tus padres y ahora... ¡te arrebataré a ella!-

El bufón alza sus dagas para lanzarlas contra el indefenso cuerpo de la joven cuando una flecha atraviesa silbando el campo de batalla e impacta en el centro mismo del pecho del espía. La fuerza del golpe le desestabiliza haciéndole trastabillar un par de pasos, entonces se gira hacia el atacante, Regathix.

-Estúpida criatura ¿Aun no lo habéis entendido?- Chester toma la flecha con la mano y se la arranca de un tirón. – ¡Soy invencible!-

Guilles no se lo piensa dos veces y aprovecha este momento de confusión para iniciar la carrera hasta situare justo en frente de su antiguo maestro. El diabólico bufón empieza a reír.

-JAJAJAJAJAJAJA, cuan diligente te veo Guilles, al rescate de la dama ¿eh?, sin embargo, te necesito quietecito, saltando de un sitio para otro no podrás ver bien lo que le hago a tu hermanita. Así que... ¡QUIETO!-

Al gritar esta palabra, sus ojos brillan con un blanquecino resplandor y Guilles siente como una energía oscura intenta paralizar sus músculos. La combate, intenta expulsarla de su interior pero le resulta imposible. En una fracción de segundo, siente sus músculos muertos y ninguno reacciona ante ninguna de sus órdenes. Chester sonrie de júbilo.

-Bien, y ahora querida... es hora de morir-

Chester avanza hasta Millicent situándose frente a ella

¡Regathix, inténtalo de nuevo! -grita Millicent, poniéndose en pie-. Que parece que no le ha pidado lo suficiente.
La actidud de la joven ahoraes de auténtica capitana. Piensa destruir a ese maléfico engendro a toda costa.