Partida Rol por web

- ¡Y por los servicios brindados a la comunidad, os otorgo a ambos, esta recomendación! - Exclama el jefe del pueblo, un hombre anciano de unos setenta años con una gran barba blanca, haciendo entrega en tus manos un pergamino de papiro con una larga inscripción en el, dos sellos y tres firmas, de las cuales te enteras que son del jefe del pueblo, de Urbick y de el capitán de la guarnición del pueblo. 

Nada mas terminar aquel pronunciamiento oficial, escuchas una ronda de aplausos, no te habías imaginado que era un evento importante que se te haga la entrega de este documento, al parecer los aventureros son personas respetadas y no como en animes que habías visto que era gente que simplemente se ganaba la vida. Según te explico Choa, mientras iban de camino a juntarse con Urbick, los aventureros son personas que claramente se encargan de mantener los caminos libres de monstruos, encargarse de nidos de estos, explorar mazmorras y de servir a la comunidad en caso de ser necesario, como le toco a Urbick aunque el día de ayer, podría decirse que se ganan el respeto de las personas por sus servicios. Y es por ello que ahora estaban en el centro de la plaza del pueblo, siendo nominados como aspirantes oficialmente y siendo felicitados. 

- Debo admitir, que cuando te conocí sospechaba de ti - Exclama Urbick - Pero hombre, has demostrado ser una persona de confianza, felicidades - Exclama poniendo una mano en tu hombro - Pero por cierto... ¿Que te paso en la mejilla? - Cuatro finas líneas rojizas recorren tu mejilla. 

2 horas atrás... 

- ¡Daniel idiota! - Exclama una enojada Choa que te dio un zarpazo mientras caminaba adolorida y quejumbrosa, sentándose mientras te miraba con la cara enrojecida y con los ojos con lagrimas. 

El presente... 

- Bueno, no importa - Exclama Urbick riendo, al parecer se podía hacer una idea de lo que paso tras mirar a Choa que le estaban hablando otras chicas del pueblo. 

Ante la mención de Urbick, te volvió a arder un poco la mejilla, y a tu mente volvieron los recuerdos de hace unos meses cuando escuchaste a tu padre hablando por teléfono con uno de sus amigos diciendo algo así como "no hay quien entienda a las mujeres", poco a poco comienzas a entender un poco mejor a tu padre. 

- A todo esto, estuve revisando un poco y he consultado a mis contactos sobre Efirnhar - Dice el ex aventurero - Nadie parece saber mucho al respecto, pero si me he enterado que el asentamiento de la tribu de Choa, no está muy lejos de ese lugar, quizás ella pueda saber mas al respecto, ¿Le has preguntado a ella?

Daniel hizo una reverencia hacia el jefe de la aldea y el resto de presentes cuando le hicieron entrega del pergamino, donde los nominaban a Choa y a él como aspirantes a aventureros. Pensaba que sería como en el resto de animes, que un aventurero era una especie de mercenario que se dedicaba a viajar sin rumbo buscando trabajo derrotando a monstruos, pero parecía que allí estaba todo mucho más estructurado. Eso le daba mucho más mérito al conseguir una recomendación, pues habían tenido que pasar por una prueba bastante complicada, y en la que casi mueren.

-Es normal que desconfiases...nos encontrasteis en una situación muy extraña- Respondió él y luego se llevó la mano a la mejilla, que notaba que aún ardía el zarpazo que le había propinado Choa -Bueno...no es nada, un intercambio de opiniones.

Tal vez la noche anterior se había excedido con ella, pero es que había sido todo un malentendido. Encima, en el momento no parecía que le hubiera disgustado, si no todo lo contrario. La miró de reojo y suspiró, a veces no había quien la entendiera, pensó. Ahora si que entendía a los adultos.

-La verdad es que ayer estábamos demasiado agotados como para preguntarle- Respondió volviendo a mirar a Urbick -Pero se supone que debo llevar el corazón del bosque cuanto antes ahí- Añadió, recordando lo que le habían dicho y lo que había sentido durante su encuentro con las hadas -Creo que pusieron algo en mi...una especie de maldición, una promesa lo llamaron. Y si no cumplo, moriré, así que debería darme prisa y hacerlo antes de ir al gremio de aventureros.

Aproveché un instante en el que Choa había dejado de hablar para acercarme a ella. Intentando actuar con naturalidad, como si nada hubiera pasado. Pero las marcas en mi cara eran buena prueba de que eso sería difícil de olvidar.

-No me habías dicho que tu tribu vivía cerca de Efirnhar- Le dijo mientras se caminaba hacia ella, mirándola con una sonrisa en la cara. Al fin y al cabo, era Choa -¿Me guiarás hasta allí? Tengo que cumplir con mi promesa...

- Son seres antiguos - Exclama Urbick rascándose la cabeza pensativo - Si han hecho eso es por algo, es presuntuoso suponer que nosotros podemos entenderlas, pero ¿te dieron un plazo? el tiempo para ellas es diferente al de nosotros, y tengo entendido que ese bosque es endiabladamente peligroso, quizás no deberías ir aún. 

Choa por su lado te mira y asiente. 

- Te puedo llevar hasta allí si eso es lo que crees correcto, pero honestamente no creo que podamos entrar - Te contesta la chica bestia - El bosque está rodeado por un mugo gigante de espinas, y los pasos están bloqueados por guardias del reino, que solo dejarían entrar a gente con permiso para hacerlo, podría decirse que es considerado terreno del rey, aunque el rey nunca visite ese lugar. 

Por unos momentos Choa y Urbick permanecen pensativos, parece que recapacitaran en la información que manejan. 

- Creo que deberías ir primero al gremio de aventureros - Dice finalmente - Si no tienes una fecha límite, mientras no pienses en romper tu promesa creo que deberías enfocarte en ser lo suficientemente fuerte como para entrar en el bosque, y quizás si logras algunas hazañas te otorguen el permiso necesario para entrar, o descubras el modo de hacerlo sin el. 

El joven héroe permaneció pensativo, mirando a uno a y otra alternativamente, mientras escuchaba sus palabras. Si ese bosque era tan peligroso como decían, tal vez fuera mejor no apresurarse en ir hacia allí, pensó mientras consultaba su ventana de estado. Durante el encuentro con las hadas había conseguido una habilidad mágica, que se suponía que le permitía lanzar proyectiles mágicos, pero no había tenido tiempo de probarla. Por otro lado, sus habilidades con la espada no habían mejorado nada, aunque ahora al menos tenía una mejor espada, que llevaba envuelta en telas a la espalda.

-Tenéis razón, lo mejor será que intentemos convertirnos en aventureros antes de entrar al bosque ese, si es que están peligroso como decís...- Respondió finalmente, debía tener en cuenta las opiniones de gente con más experiencia que él, aún no era lo suficientemente poderoso como para arreglárselas solo -Además, esta parece una misión adecuada para un aventurero.

La pregunta ahora era cómo volverían a la capital, y si habría alguien esperándoles. No creía que mucha gente supiera del plan de atacar a los recaudadores de impuestos, y probablemente nadie de la realeza o de los guardias se acordase de su cara. No les habían prestado mucha atención a los héroes que creían que no servían, así que con un poco de suerte, no pasaría nada.

-Entonces será mejor que nos pongamos en camino hacia la capital. ¿Hay alguna caravana o algo por el estilo que nos pueda llevar hasta allí? ¿O hay que ir andando?- Le preguntó a Urbick, no le apetecía nada andar. 

Mientras revisabas tu estado y ordenabas tus ideas, la gente parecía comenzar a agruparse cerca del jefe del pueblo, el cual estaba hablando un jinete que llego de improvisto y le entrego una carta. Parecía algo importante, por lo que cada vez había mas gente en el sector.

- ¿Ahora que nya? - Pregunta Choa mirando de forma sospechosa. 

- Al parecer noticias, si han llegado ahora tienen que ser de ayer en la capital. 

El jefe del pueblo sube arriba de una banca y se aclara la garganta para hablar, se pone sus lentes y lee la carta que le ha llegado, mientras el jinete sigue su camino a toda velocidad sin llegar a descansar un poco, al parecer tenía prisa. 

- Noticias de la corona - Exclama leyendo rápidamente el contenido antes de anunciarlo, puedes escuchar como la gente a tu alrededor parece de mal humor, algunos se preguntan si ya volverán a subir los impuestos por tercera vez en un año, o sobre alguna invasión, al parecer el rey no es tan popular por estos lugares - Un nuevo héroe ha comenzado su viaje - Exclama el jefe del pueblo en voz baja y luego lo informa en voz alta - Su alteza informa que ayer ha comenzado un viaje un nuevo héroe para salvar este mundo de la oscuridad que nos acecha, y solicita su plena colaboración en caso de que llegue a pasar por aquí. 

Al parecer el héroe elegido comenzó su viaje tras unos cómodos días en el castillo. 

Daniel no se había enterado de que había llegado el jinete hasta que Choa habló, y miró en la dirección en la que se encontraba el jefe del pueblo. 

-¿Noticias de la capital? Espero que no sea nada malo-  Comentó el futuro aventurero, y procedió a escuchar el mensaje.

La noticia sorprendió un poco a Daniel. ¿Ahora acababa de partir? Si ni siquiera habrían tenido tiempo de entrenarlo ni de enseñarle nada...Bueno, pensó, entonces lo único que habría hecho sería vivir a cuerpo de rey, disfrutando de un harén de mujeres. Al menos no lo habían envenenado como a él, pero si que lo mandaban a una muerte segura. La mención de que el héroe pudiera pasar por allí le intranquilizaba un poco. Seguramente sería el mismo mensaje para todos los pueblos, pero Daniel esperaba no cruzárselo. Tal ver pudiera ver su ventana de estado e identificarlo como otro héroe, haría que fuera con él, y entonces lo arrastraría en su aventura suicida. 

-Será mejor que no nos crucemos con el héroe- Le dijo en voz baja a Choa cuando la gente comenzó a comentar la noticia -Podría reconocerme, y no se como acabarían las cosas.

Si, le deseaba suerte al pobre infeliz al que habían engañado para llevar a cabo esa misión suicida. Pero que no contase con su ayuda.

- Tienes razón, es mejor mantener las distancias - Exclama la chica gato ante tu comentario - No se en que términos están ustedes dos pero prefiero evitar problemas innecesarios. 

Urbick estaba entretenido escuchando las noticias y comentándolas como para prestarle atención a vuestro breve intercambio de palabras. Sin embargo, tras unos momentos voltea nuevamente y te vuelve a prestar atención. 

- Disculpa, las noticias me han tomado desprevenido, lamentablemente no suelen pasar caravanas por este lugar, es demasiado apartado para eso, lo mas rápido sería caminar hasta el camino real y encaminarse desde allí. 

Al parecer este pueblo es demasiado pequeño y a trasmano como para que tenga un tráfico importante. 

La verdad era que a Daniel no le apetecía mucho andar, y menos por el camino real. Después de lo ocurrido allí en el asalto fallido, la idea de volver por esa zona no le motivaba mucho, pero aún así tendría que hacerlo. Si la capital le imponía algo de respeto, el camino real ya era demasiado.

-De acuerdo, parece que entonces tendremos que volver sobre nuestros pasos-  Suspiró el chico, que esperaba no encontrarse esta vez con ningún ser extraño que les matase sin previo aviso.

Al menos habían podido ayudar a la gente de ese pueblo y habían pasado un par de días que, salvo la incursión para acabar con el monstruo del bosque, habían sido muy tranquilos. Además aunque no les habían recompensado con dinero, la cantidad de comida que les habían dado les aguantaría hasta que llegasen a la capital y pudieran convertirse en aventureros. Daniel volvió a mirar el pergamino que le había entregado el jefe del pueblo, y lo dobló con cuidado.

-Entonces creo que será mejor que nos vayamos poniendo en camino- Sugirió Daniel y miró a Urbick -¿Está muy lejos la capital?

- Me gustaría proporcionarles un medio de transporte, pero lamentablemente no hay nada a mi disposición - El joven niega con su cabeza y luego parece recordar algo - Lo que si puedo hacer, es aconsejarte - Mira para todos lados, como esperando a que nadie los escuchara - No le muestres a la gente la esfera que encontraste o lo que te pidieron que transportes las hadas a menos que confíes en ellos, aun entre los aventureros puede haber quienes te quieran perjudicar para quedarse con el crédito. Dicho esto, deberían estar llegando allí antes de que caiga el sol si no tienen inconvenientes, si se pone el sol, su recomendación puede servir como identificación para entrar a la ciudad, pues cierran las puertas cuando se pone oscuro - Urbick sonríe - Les deseo a ambos un buen viaje, espero que nos encontremos de nuevo algún día. 

Choa tira de tus ropas. 

- Será mejor que partamos ahora si queremos llegar a tiempo - Dice, no está tan animada con la idea, pero al menos irán juntos - Supongo que nos espera un largo camino por recorrer - Se toma unos momentos para pensar, se sonroja levemente y finalmente lo confiesa - Pero al menos la compañía es buena. 

Daniel escuchó atentamente las palabras de Urbick. Él ya sabía que debía de tener cuidado en quien confiaba, sobre todo después de sus experiencias pasadas, pero nunca estaba de más que se lo recordasen. Así que sonrió al ex-aventurero y asintió con la cabeza, tendría cuidado.

-Muchas gracias por todo Urbick- Sonrió al joven -Seguro que nos veremos de nuevo, o vendremos a visitaros a ti y a la abuela.

Al ver como Choa se sonrojaba, el se sonrojó también un poco, y tomó una de sus manos con la de él, entrelazando sus dedos, para así ir caminando de la mano.

-Si, será mejor que nos demos prisa si queremos entrar en la ciudad antes de que oscurezca- Le respondió y luego miró por última vez hacia Urbick -¡Hasta pronto! ¡tened cuidado!

Y así, caminando de la mano de Choa, se dirigieron hacia el camino real. Solo rezaba porque fuera un viaje sin contratiempos, ni bandidos, ni monstruos, y que pudieran encontrar una cama calentita en la que dormir cuando llegasen agotados después de una buena caminata.

-Ya verás como sale todo bien- Le dijo a Choa. Sabía que ella tenía sus dudas, pero ser aventurera al menos la sacaría de una vida más cruel y peligrosa -Ahora vamos juntos, así que nada nos detendrá.

Así se perdieron entre la multitud tras despedirse de Urbick. Las calles mas allá de la plaza parecían desiertas, por lo que fue bastante fácil avanzar una vez salieron del bullicioso lugar. Tomaron sus pocas pertenencias y comenzaron a caminar tomados de la mano por el pequeño sendero que conducía hasta la casa en la colina, la casa de Ren y también vuestro hogar temporal, sin embargo, eso fue hasta hoy, no estaban predestinados a quedarse en ese lugar mucho tiempo, sin embargo, era algo nostálgico alejarse de allí, pese a la notoria falta de muebles y reparaciones. 

Continuaron caminando y pasaron por fuera de la casa de la abuela, aún rodeada por sus cabras las cuales pastaban plácidamente y no os prestaron mucha atención al pasar por allí. La última vez que estuvieron en ese lugar, casi murieron victimas de la fallida emboscada, aunque siendo sinceros, ambos habían muerto ya una vez producto de la ruptura en la realidad de ese ser misterioso... ¿se lo encontraran nuevamente? Si el destino es suficientemente inmisericorde si, pero quien sabe, la vida es misteriosa y quizás, estén mejor preparados para cuando llegue el momento, o por lo menos cuenten con mas ayuda para enfrentarle... pero posiblemente la mejor opción sería nunca verlo de nuevo. 

- Han pasado muchas cosas - Dice Choa mientras caminan por el sendero que comienza a internarse al bosque, es un sendero auxiliar, en donde os habías encontrado con la carreta tras el escape... una hora mas lejos caminando aproximadamente el camino se cruza con la carretera principal - No esperaba que terminara siendo una aventurera... ni en compañía de un héroe - Exclama la chica, permitiéndose expresarse con mas libertad ahora que no hay nadie que les rodee - Pero puedo decir que tengo interés en donde iremos a parar... solo hay que procurar no llamar tanto la atención. 

Choa era una persona buscada, pero no oficialmente, como todo había sido muy turbio, las personas que la seguían eran cazadores de recompensas o mercenarios, después de todo, incendiar la mansión de un noble no es cosa poca, de una u otra manera tienes la sensación que eventualmente eso traerá secuelas... al igual que tu estado y tu compromiso para/con las hadas. Y hablando de las hadas está el poder que adquiriste de ellas. 

A medida que se iban alejando del pueblo, pasaron por un montón de sitios familiares para Daniel. A diferencia del resto de lugares, por los que únicamente había estado de paso, en ese lugar habían estado un par de días y se habían podido permitir algo de descanso. Ahora lo abandonaban mucho más preparados que antes para cualquier cosa que pudiera pasar. No podía evitar pensar en la emboscada y lo mal que había ido. Aunque en realidad la emboscada había salido bien, lo único que había ido mal era ese extraño ser que había aparecido de repente. 

Daniel escuchó a Choa y sonrió. Le gustaba ver como ahora la gata se abría más con él, y le contaba lo que estaba pensando con una mayor facilidad. No la había soltado desde que habían salido del pueblo, así que seguían caminando de la mano a través de los campos, e internándose en el bosque. Era una sensación extraña, reconfortante. ¿Así era como se sentía uno cuando tenía novia?

-La verdad es que esto se parece un poco más a lo que imaginaba que sería. Siendo aventureros más que mercenarios- Respondió Daniel mientras caminaban, mirando de vez en cuando hacia la gata -Pero si, tendremos que tener cuidado. No creo que nadie se acuerde de mi, pero puede que a ti te sigan buscando...Así que intentaremos pasar desaparecibidos. Aunque parece que los problemas me persiguen- Bromeó.

Recordó el poder que había adquirido de las hadas, una cosa llamada magia Fae. Al tener el rango E, podía lanzar un proyectil de enérgía, así que decidió probarlo ahora que no había nadie por las cercanías. Imaginaba que solo tendría que pensarlo para que ocurriera, no tendría que ser muy difícil, pensó, mientras se detenía y soltaba a Choa.

-Por cierto, las hadas me dieron un poder, mira...- Dijo Daniel, mientras alzaba la mano y apuntaba hacia un árbol cercano. Se concentró en visualizar un proyectil saliendo de su mano y alcanzándolo, una bola de energía verde o algo por el estilo, y antes de que se diera cuenta, sucedió -¡Wow! ¿Has visto eso?

Mientras caminaban tomados de la mano recordaste que las hadas te habían entregado una clase de magia, y de forma instintiva, quizás por ver tantas películas y anime, lograste convocar aquella energía sintiendo como esta transita por tu cuerpo y la lanzas en forma de una esfera, un proyectil que salio disparado mas menos a la velocidad que arrojarías una pelota de tenis o de golf con tus manos desnudas. Al impactar contra el árbol este se sacudió y la energía se disipo. Un rápido vistazo muestra que Choa esta sorprendida, es mas, con la boca abierta. 

- ¿Como has hecho eso? ¿Era un mago en tu otro mundo? - Pregunta sorprendida la gata mirando ahora el lugar en donde había impactado tu descarga - Eso fue impresionante... espera... ¿dices que las hadas te lo han dado? ¡Usualmente para aprender magia hay que estudiar muchos años para poder usarla! ¿Es que acaso puedes aprender cosas sin mucho esfuerzo? 

La chica se inclina, sentándose de rodillas revolviéndose el pelo. 

- ¿Dices que puedes ver mis datos cierto? ¿Que tengo? - Pregunta con curiosidad. 

Daniel parecía muy contento de haber podido hacer magia. Tal vez fuera un poder personal que venía junto con la promesa que había hecho. Aunque la velocidad no era demasiado elevada, no como un disparo, parecía ser lo suficientemente poderosa para derribar a alguien, tal y como se sacudió el árbol. Miró a Choa y sonrió un poco, se imaginaba que podría ser algo sorprendente para ella que el pudiera hacer tantas cosas con esa facilidad.

-Igual al ser una magia de la naturaleza consiste más en tener el don que en estudiar...- Respondió, intentando razonarlo. Luego pensó en lo que decía de que tal vez aprendiera las cosas rápido, y era probable que fuera así, ya que su habilidad con la espada había mejorado bastante -Creo que es probable que aprenda cosas más rápido que un humano normal. Con la espada he mejorado "bastante" en poco tiempo, aunque realmente sigo siendo lamentable.

Acto seguido, abrió la ventana de estado de Choa, y miró su estado y sus habilidades. Ya las había consultado varias veces, así que solo tuvo que repasarlas un poco antes de empezar a recitárselas a su compañera.

-A ver...dice que eres una bestia, bandida de nivel 7- Empezó a decirlas, como si estuviera leyendo -Dagas C, puñalada C, emboscada C, Artes amatorias D- Al decir esto, Daniel se sonrojó un poco -Robar B...toda una ladrona. Poder de combate 190. No está mal, yo tengo 54. Mis habilidades son resistencia a estados adversos C, esgrima D, y magia Fae E.

Cuando mencionas sus habilidades Choa se pone bastante pálida, para ella era escalofriante que puedas ver sus cosas, también se sonroja cuando mencionas lo de artes amatorias y mira en otra dirección, pero parece permanecer pensativa. 

- ¿Cuanto tiempo llevas practicando con las espadas? - Pregunta Choa interesada - Yo para llegar a tener esta habilidad con las dagas... cuatro años, un poco mas o un poco menos... - Permanece reflexiva - ¿Has dicho magia Fae, cierto? Nunca había escuchado eso... pero si te lo dieron las hadas debe ser un poder del demonio, todos los magos les gusta arrojar fuego, o quemar cosas, algunos conjurar rayos... yo que se, de magia no se nada, solo los cabeza de cono se preocupan por eso... ¡No quiero decir que tu seas un cabeza de cono! - Exclamo rápidamente para dar a entender mi punto de vista - Aah... no se... nya...  - Cuando escucho mi nivel de poder saco pecho y me pongo en pie, dándole un golpecito con la cadera a Daniel - ¡Naturalmente nya! ¡Esta grande y poderosa Choa es demasiado buena como para perder ante un humano, héroe o no! ¡Nyahahahaha! - Se pone una mano delante de la boca y ríe de forma molesta. 

Ciertamente, tu nivel de poder y el de Choa son bastante diferentes, sin embargo, ni uno de los dos sería nada seguramente ante aquella cosa nivel 300 y algo que encontraron en la carretera. ¿Es eso normal en este mundo? ¿Cual es el estandar de nivel de poder o de nivel? Choa parecía tener un nivel mas bajo que otras personas que has encontrado pero tiene mas poder que otros humanos... quizás la raza si influya en algo. 

-Con las espadas...mi primer combate fue contra la rata, y el segundo fue en la emboscada...La verdad es que creo que lleve en este mundo más de una semana- Admitió Daniel, entonces se acordó de mencionar otra cosa de su estado -Pero en mi clase pone que soy héroe, y que entonces tengo una bonificación de experiencia de 500%. Es decir, aprendo 5 veces más rápido...tal vez sea eso.

Iba a ofenderse un poco por como hablaba de los magos, aunque realmente el no se consideraba uno de ellos, ni siquiera un estudioso. Suponía que había tenido suerte y poco más, seguramente si hubiera tenido que estudiar magia le habría costado un poco más. Lo mejor era que siguiera entrenando con las espadas, pensó, ya que no sería tan peligroso ni difícil de dominar.

-La verdad es que yo tengo más nivel que tú, tengo nivel 10 y tú 7, pero tu poder es más grande que el mío, debe ser por las habilidades...- Respondió pensativo -La mayoría de la gente con la que hemos estado tenía un nivel alrededor de 20...Así que todavía tenemos los dos mucho margen de mejora- Sonrió. No quería decirle a Choa el nivel del enemigo que les había hecho escapar de la emboscada. No quería que se viniera abajo, y seguramente habría pocos como él. Nivel 300 sonaba demasiado excesivo.

Cuando mencionas que llevas una semana nada mas Choa te toma de los hombros y te sacude mientras se rie de manera algo loca, no se esperaba eso al parecer... y menos si tu primer uso de una espada fue contra la rata, pero logra calmarse y soltarte antes de respirar profundamente. 

- Me haces sentir como una inútil nya... si bien he aprendido sola y tampoco me he dejado la espalda haciéndolo creo que... - Suelta un suspiro - Creo que me pasaras en nada de tiempo serás mucho mas fuerte que yo... si aprendes a ese ritmo, además ahora sabes magia y pronto dominaras la espada. 

Puedes notar que Choa se da media vuelta mirando al bosque, no parece tensa, pero parece que recapacita sobre algo mientras le mencionas sobre el nivel promedio de otras personas de este mundo que has visto, quizás le haya afectado saber tu excesivo aprendizaje. 

- Nya... si Daniel avanza tan rápido pronto será una fuerza a tener en cuenta - Me llevo una mano al mentón mientras pienso en ello - En una semana adquirió magia y habilidades con la espada... eso significa que en un mes será mucho mas fuerte que yo definitivamente... - Cierro los ojos, se que los humanos por raza son mas débiles que las bestias si hablamos solo de nuestros cuerpos, pero los humanos pueden aprender mas cosas que cualquier otra raza - ¡Esto significa que si me quedo con Daniel no tendré que preocuparme de que alguien quiera abusar de mi nuevamente! - Una sonrisa se apodera de mi rostro gatuno - Estoy bien nya, continuemos. 

Sip, Choa está podrida por dentro. Resumen su marcha. 

-No eres una inútil...- Respondió él. Podía entender ese sentimiento de quedarse atrás y de pensar que no valías para nada, pero eso no era cierto, pues si el mejoraba, aunque Choa lo hiciera a menor ritmo, también podría -Cuando te conocí creo que tenías nivel 6, y ahora tienes nivel 7, así que puedes seguir mejorando y conseguirás ser muy poderosa.

Daniel parecía un poco preocupado, acercándose un par de pasos hacia la chica, pero sin interrumpir sus pensamientos. ¿En que estaría pensando? El joven miró hacia el bosque, en la dirección que estaba mirando Choa. No sabía si es que había detectado algo, porque él al menos no había notado nada extraño. Pero cuando finalmente la chica se volvió hacia él, Daniel suspiró aliviado, no parecía que le hubiera afectado para mal todo aquello.

-¿Estás bien? ¿En que pensabas?- Preguntó el chico mientras volvían a caminar. Estaba tentando en volver a usar su magia para atacar otro árbol, y de paso practicar.

Pero no quería que nadie le viera haciendo eso, y no sabía cuando podrían cruzarse con alguien. Mejor estaba alerta, pues ya había visto emboscadas en lugares similares, aunque ellos no llevaban gran cosa de valor, a parte de la comida y la espada de Daniel.