Partida Rol por web

Corro como puedo, aunque me quedo en el sitio por alguna extraña razón, bueno, quizás no tan extraña al fin y al cabo, simplemente no me dieron los brazos para llegar al siguiente engranaje.

Intento subir, pero sin demasiados animos puesto que no es algo que se me de bien...

Intento ver si hay otra forma de alcanzar el objetivo sin matarme en el intento

Tanto Asrai como Rhomian trataron de escalar, ambos fallando estrepitosamente, el segundo cayó de vuelta al piso, mientras que el primero terminó más abajo del lugar donde había empezado. Al parecer el hecho de arriesgarse a tomar caminos más peligrosos y medios obvios, era una mala idea si no estaban entrenados para ello.

Sea como sea, Ratigan dió lo mejor de sí, y en unos cuantos saltos apareció practicamente al lado de Basil, a punto de atraparle entre sus garras, un par de engranajes más y el Ratón Superdetective, se convertiría en el Ratón Super-muerto.

Busco algo con lo que poder subir sin matarnos, pero me quedo embobadomirando como se escoña Asrai!!!

Subo varias alturas, sin embargo el esfuerzo de escalar es tortuoso y me quedo a medio camino de un jodido paso.

Mientras los ratones subían a paso de tortuga por la torre del reloj, bueno, mejor dicho, eso lo hacía Asrai, puesto que el resto se había limitado a esperar tranquilamente a que la situación se resolviera por su propia cuenta; varios metros más arriba, Ratigan había logrado alcanzar, sin demasiada dificultad, a Basil, y su batalla estaba teniendo lugar.

O mejor dicho, la huída desesperada de Basil, mientras Ratigan trataba de desgarrar su piel, carne y músculo. De hecho, parecía que tenía las suficientes ganas, motivación y fuerza como para incluso romper cualquier hueso que Basil pusiera al alcance de aquella rata poseída por el odio y la sed de venganza.

Subo pero me quedo a distancia para atacar y no estar cuerpo a cuerpo

Subo todo lo deprisa que den mis inútiles piernas y brazos. En cuanto pueda estocada mientras grito:

"¡TU, PUTA RATA, VEN AQUÍ Y MÉTETE CON ALGUIEN QUE PUEDA DEFENDERSE!"

Chica, ahora es cuando te desmayas y tengo que hacer yo todo el trabajo?

Me reia socarronamente sobre mi comentario... pero la verdad que era completamente cierto y no un chiste!!!

Miro al nuevo... si no te importa, antes que ella caiga redonda incosciente podrias venir a ayudar...la y a lo mejor, muy a lo mejor... esta despierta cuando esto acabe.

Mientras discutían y subían, esa pareja cómica más que héroes o aventureros; notaron como tanto Basil y Ratigan habían desaparecido de la vista; por fortuna, la habilidad de Asrai era más que suficiente como para notar que estos seguían peleando y subiendo, hasta que finalmente desaparecieron hacia el exterior de la torre.

Pasarían los minutos antes de que Asrai y Rhomian llegaran hasta donde se encontraban los otros dos luchando; o mejor dicho, Ratigan cayendo en sus instintos más primarios atacando sin cuartel a un indefenso Basil.

Llegando hacia las manecillas del reloj, tanto Asrai como Rhomian se asomaron al exterior; Rhomian tirando de los pelos a Asrai, mientras que esta le estaba hincando los dientes en su brazo; quien había empezado la pelea no tenía importancia, -aunque probablemente fuera Rhomian con sus frases prepotentes-, pero era más que evidente que tardaron tanto en subir porque estaban peleando mientras lo hacían.

Al ver como Basil iba a ser brutalmente ejecutado por Ratigan, Rhomian sacó su espada y apuntando hacia los pies de la rata casteó un hechizo simple; congelando el aire a su alrededor, haciendo aparecer de la nada pequeñas gotas de agua que cristalizaron y se unieron formando una pequeña estaca de hielo; este la disparó a los pies de la Rata, congelando el suelo de la manecilla a su alrededor.

En ese momento, Asrai aprovechó para darle una buena colleja a Rhomian; saltar a la manecilla, correr sin resbalar y dar una fuerte estocada en el lomo de la rata gigante; haciendo que esta perdiera el equilibrio, y no lo pudiera mantener a causa del hielo que tenía bajo sus pies y cayera al vacío.

Mientras aquella rata desaparecía de la vida de aquellos dos aventureros que habían condenado mandando al vacío a aquel animal insoportable que se hubo granjeado la vida de dos de sus compañeros, Asrai ayudó a incorporarse a Basil.

Ra-Ratigan... ha... ha...

Al parecer el detective no daba crédito a lo que había pasado, seguía balbuceando sin sentidos por unos segundos, señalando al vacío y señalando hacia donde aquella rata estaba de pie hacía unos segundos.

¿Se acabó?

Dijo finalmente antes de esbozar una pequeña sonrisa que rapidamente murió en una mueca de lamento, como si las peleas, batallas, persecuciones que habían tenido durante tantos largos años le hubieran dado las dosis de adrenalina y el reto que tanto ansiaba.

Se acabó...

Al parecer le iba a costar asimilar un poco más el hecho de que, en efecto, se había acabado definitivamente todo aquel problema y embrollo con la mente criminal más grande de todos los tiempos. El Profesor Ratigan, su archienemigo, su némesis, su contraparte, su rival, su adversario.

Gracias por ayudarme, y por salvarme.

Dijo a aquellos dos héroes que fueron más bien oportunos que otra cosa, y tras decir esto, sacó de su bolsillo una pequeña bala que ofreció al grupo; al acercarla ligeramente a la llave-espada de Asrai, esta brilló y cambio su forma; al alejarla la volvió a su forma normal.

Curioso... Bueno... Me voy...

Con todo esto dicho y hecho, Basil con un vacío en el corazón salió de las agujas del reloj con un destino incierto por entre los engranajes. Mientras tanto el grupo se reunía en las manecillas, en concreto en el minutero. Basil había sido salvado, habían obtenido una mejora, habían expulsado al mal y en esta ocasión nadie hubo sido desmayado.

Me la quedo yo y punto. Si alguien tiene algo que decir la usaré contra él igual que tiré a la rata por el puto abismo. Lo digo mirando a Rhomian.

Quien te da derecho ser inferior, o me la das o cargas con ella por mi. Pero es mía o te convierto en rata

jajajajajaja, no. Miiiia.

Miro a Rhomian con el desprecio propio de un ser inferior cuando se encuentra a otro que se cree superior, pero que en realidad ambos son dos insignificantes mierdas en el polvo ocasional del universo.

Tranquila tú llevas la llave y yo a ti

agarro de los pelos a Asrai y la llevo a rastras hasta que me de la llave 

Me agarra de los pelos así que entra en mi círculo de espacio vital, entre su actitud arrogante y sus malos modales propios de un cerdo maloliente del capitán garfio, el mismo se lo había buscado. 

Abróchense los cinturones, cohete Rhomian a punto de partir dirección incierta en 3...2....1....

Asrai se acerca a Rhomian y sin previo aviso le quita los aires superiores con un fuerte tajazo con aquella llave; al parecer el golpe es tan fuerte que a parte de obligarle a tragarse sus palabras, lo lanza varios metros (o centímetros en el tamaño de rata), hacia atrás, hacia el vacío.