Partida Rol por web

Apenas se marcharon sus colegas, Horacio encendió un cigarrillo sin preguntar. En su rostro se podía ver el cansancio, pero supo esconder la desesperación por salir de allí y comenzar a correr hacia la nada.

-Horacio Molina-Menoit, 65981547-N, nacionalidad argentina, naturalizado en España- respondió, a modo de telegrama y sin humor alguno para explayarse.

-Conocí a Manuel y José al inicio de la investigación del asesinato de Jaime, el portero del edificio donde vivía Manuel Arnoztegui. Ángela, ellos dos, Cifuentes y yo conformábamos la primera formación del grupo de investigadores- comentó, dándole una larga calada al cigarrillo, rememorando aquellos personajes que ya no les acompañaban con gesto lánguido.

-Están ambos muertos- contestó, sardónico ante lo protocolario de la pregunta. -Lo sé porque estuve en el funeral del cura, y porque vi el cadáver mutilado de Samuel- dijo, con algo de desdén en la voz.

-Creía que sí. Hace meses recibí una carta anónima ofreciéndome el trabajo. Llegué a Alcalá para conocer a un tal Don Germán, sacerdote, en este mismo edificio. Tenía una abogada... Isabel Blanco. Ahora que lo pienso, no me imagino por qué están ustedes acá. Supongo que va a ignorar mi incertidumbre- señaló, poniendo cara de obviedad.

-No. Mis padres eran religiosos y me mandaban a catequésis, pero también eran tolerantes, y fui lo suficientemente inteligente como para negarme a tomar la comunión. Eso sí, me bautizaron cuando era un bebé-

Santillana indica a Horacio que puede pasar el siguiente

En cuanto le indican que ya puede pasar el siguiente, Ángela mira a Julio. Por su expresión se deja adivinar que pretende entrar ella la siguiente, a pesar de que tiene los nervios a flor de piel. Se adelanta y procede a entrar en la sala donde va a proceder a su declaración.

Cuando Ángela pasa, lanza una mirada fría a Santillana. Están condenados a colaborar pero parece que no se llevan nada bien entre ellos. Limar asperezas a estas alturas del partido, es casi tan peligroso como necesario.

Ángela se sienta y se acomoda, deja el paquete de cigarrillos encima de la mesa. Del paquete asoma uno, que parece que la abogada está dispuesta a encender en cualquier momento. Entrelaza sus manos y mira fijamente al policía.

- Bueno cielo - no sin cierto retintín debido a lo de antes - me temo que nos guste o no, vamos a tener que trabajar juntos.

Deja sobre la mesa su carnet de identidad. Eso responde a la primera pregunta. Ángela Merchán Cuéllar. Ahí aparecen la mayoría de datos requeridos por la declaración.

Echa un vistazo alrededor, sabiendo que Raúl la tiene bien vigilada y muy probablemente estarán grabando la declaración.

Efectivamente ves que tiene en frente una grabadora. Te pide que te ciñas a responder en voz alta y de forma no gráfica a las preguntas.

Si te intentas salir de las preguntas Santillana te recriminará, no es muy paciente. Pero si intentas responder con evasivas te dice que si quieres posteriormente charlar estará encantado con o sin grabación de por medio. Pero que te por el momento te limites a responder de la forma más sincera y directa posible.

Ángela responde a las preguntas en orden y con voz clara, sin dejar de dedicarle pérfidas miradas a Santillana, miradas que no reflejan deliberadamente ninguna intención concreta, pero para bien o para mal, se lo come con los ojos.

 Ángela Merchán Cuéllar - mientras vuelve a tender el dni sobre la mesa - 77708932 - dice con voz clara su dni - letra M - carraspea - nacida en España.

Hace una pequeña pausa para contestar la segunda pregunta.

- Conocía a ambos recientemente. Mi relación era estrictamente laboral. - acto seguido responde a la tercera, poniendo las manos sobre la mesa y controlando sus sentimientos con toda la frialdad de la que es capaz. Su expresión se torna dura, lo cual ligado a su palidez le confieren un aspecto algo siniestro - sé perfectamente en qué estado se encuentran, por desgracia. Su óbito ha sido muy, muy reciente. Del estado del padre don José, me enteré de forma indirecta. De lo de Samuel... no sabría como explicarlo - dice dudando por primera vez en toda la declaración, y con intención de que se le note, algo que profesionalmente nunca le había ocurrido.

- La diócesis de Alcalá me contrató hace poco para ciertas averiguaciones y papeleos. Pero hace bastante que no se nada de mi directo contratante por lo que personalmente doy el caso por concluido.

- Mi familia siempre ha sido buena amiga del clero en general y yo soy cristiana practicamente - mira de nuevo, desafiante a Santillana - no sé si le vale como respuesta.

Santillana para la grabadora y la enseña para que se pueda comprobar que está parada.

- Bueno Ángela, como luego quiero hablar con todos y te había prometido unos minutos. Puedes hacerme una pregunta ahora en privado o por el contrario hacer pasar a Julio y charlar después de interrogar a todos. ¿tu decides?

Después de que entre Ángela Julio se apoya en un lateral de la habitación mientras espera su turno para enfrentarse al tenaz y pesado inspector.

Horacio salió de la oficina casi bufando, con seriedad en el rostro.

-¿Crees que nos van a dar una mano después de este interrogatorio?- inquirió el detective, esbozando una sonrisa sardónica a más no poder. -Nos van a desechar con una patada en el culo, y nos van a dejar a nuestra suerte. Vas a ver...-

1º Pregunta: Julio Moreno , español y con numero de identidad ......

2º Pregunta: Apenas conocía a ambos , me incorpore tarde a la investigación y convivi un par de días con ambos , aunque el Padre José siempre me inspiro mucha confianza , era una buena persona , una lastima.

3º Pregunta: El estado creo que esta bastante claro......muertos , a fin de cuentas para mi desgracia he visto ambos cuerpos , el padre José si no recuerdo mal me lo comunicaron mis compañeros y el de Samuel cuando llegamos a su apartamento y estaban allí sus chicos.

4º Pregunta:No tengo ninguna.

5º Pregunta:Como le comente  hace poco que me uní al grupo , y no se si detrás de mi contratación estará la diócesis  , me contrato Isabel Blanco , o eso creo , pues con tanto jaleo uno ya no sabe que pensar.

Julio sale de su trance cuando Horacio interrumpe en la habitación como un poseso ,tranquilizate Horacio , esperemos a ver que sacamos al final de todo esto.

Ángela revela una expresión sorprendida ante el gesto de Santillana. No esperaba ni un ápice de comprensión y sin embargo el tipo, para romper el tópico de poli malo, se le veía predispuesto a conceder precisamente lo que hacía unos minutos le había prometido a la abogada.

Esta sonrío. Dibujó en sus labios una de esas líneas arqueadas, a medio camino entre la impotencia del momento y la furia contenida, a punto de estallar y de llevarse por delante toda reacción madura para deshacer en lloros las emociones del momento y que la fachada de chica dura y fría de Ángela se desmoronara. Por suerte, sacó fuerzas de donde no había y mantuvo el tipo ante el policía.

Se acerca a la mesa y posa sus ojos sobre los de Santillana. Los ojos de Ángela tienen un brillo especial.

- Aparte de nosotros... dime por favor si tenéis algún otro sospechoso. - más que a pregunta sonaba a ruego pero sin entrar en la desesperación.

Santillana te mira y te dedica una sonrisa también algo forzada, por primera vez te da la impresión que le está resultando a él tan duro como a vosotros. No obstante su respuesta y comportamiento es tan frío y calculado como de costumbre. Efectivamente parece Santillana un hombre con el mejor de los entrenamientos y preparación.

Santillana te comenta:

- Mira ese es uno de los principales temas por los que os he hecho llamar, hay varios sospechosos y quiero charlar con vosotros sobre alguno de ellos. Por otro lado esto ha sido una formalidad necesaria, para preparar el informe de lo acontecido estabais tan ligados a los fallecidos que no tomaros declaración, hubiera sido una falta muy grave en el expediente .... Haz pasar a Julio y después seguimos charlando.

Ángela solicita entrar a Julio ... Al cabo de un rato Santillana después de interrogarle acompaña a Julio hasta la sala de espera ... al pasar por la recepción pide a los agentes que por favor se tomen un descanso. Acto seguido os pide que os sentéis todos, el se sienta en el centro, como presidiendo una reunión informal ...

- Gracias por venir, antes de nada daros mi pésame por lo ocurrido a unos compañeros vuestros de trabajo, ya que aun no he podido hacerlo a la familia me veo en la obligación de dároslo a vosotros que sois lo más cercano a las victimas con las que he hablado personalmente.... podéis hacerme alguna pregunta si queréis, antes de que vuelvan mis compañeros.

Ángela mira a sus compañeros por si alguno tenía algo que preguntar. Ante el silencio incómodo que invadía la sala decidió romper el hielo una vez más, incapaz de estarse con la boquita cerrada.

- ¿Qué hay del resto de sospechosos? - espetó - Nos gustaría saber quien más está en la lista.  - Era un buen comienzo si iban a comenzar a trabajar juntos de una vez por todas.

Llevaba algo más de diez minutos sin llevarse un cigarro a la boca y el nerviosismo comenzaba a apoderarse de sus gestos y palabras. Aunque aún no titubeaba, le temblaba levemente el pulso.

El tufo a cigarrillo inundaba la sala. Hacía poco, Molina se había fumado uno, apoyado contra la pared, recorriendo el lugar con la vista con gesto cansino y un claro deseo de escindirse del caso en sus ojos. No hacía otra cosa que rememorar conversaciones, pistas fútiles, frustraciones, muerte. De vez en cuando bajaba la vista, negando con la cabeza, para luego reír irónicamente y por lo bajo, pitando cáncer nuevamente. Luego podía verse como el rencor y el arrepentimiento le envejecían el rostro, y cruzaba una mirada con la abogada.

Deberá pensar que soy un pelotudo.

Allí, sentado en ronda y enfrentando al buenazo de Santillana -no se le pasó el sarcasmo, como era habitual- se sentía de la misma manera. ¿Qué clase de idiota sigue hundiéndose en un pozo de mierda, del cual ya no podía ver la parte superior, voluntariamente? Miró atrás, recordando ese afán infantil por evitar la muerte capturando al responsable, aún sabiendo que los eliminaban por buscar precisamente eso. Se preguntaba, ¿qué diablos había razonado para llegar allí?

Había lanzado la colilla debajo de una mesita, para cruzar los brazos frente al resto. -También me gustaría saber que fue de Don Germán y Blanco. Después de todo, seguimos cavando nuestras tumbas a pedido de ellos, y con la motivación de su dinero, ¿no?- inquirió, como preguntando cuanto sumaban dos y dos. Pero bien sabía que si oía un "sí" tildaría de hipócrita y mentiroso al portador de aquella respuesta. Porque aquellos asesinatos anormales se habían adentrado profundo en su cerebro. No podía evitarlo. Había sufrido las consecuencias de ello una vez.

Santillana cambia el semblante tranquilo tras oír las palabras de Horacio. Y como si un huracán a punto de explotar fuese, Santillana mostrando una faceta desconocida para vosotros efectúa el siguiente monologo :

- Bien, ya que preguntas por ellos te diré, que Don Germán está en coma, e Isabel no sabemos donde está ... nos tememos que haya sido raptada, ya que ha desaparecido ... no está localizable por nadie ni en ningún sitio. Nadie nos sabe decir con exactitud que ha sido de ella desde hace más de tres semanas. Esta oficina como veis ... para mas inri ha sido desmantelada por vete tu a saber quien, y buscando que ... el amigo personal de Germán fue quien denunció los hechos. Le pedimos que no dijera nada a nadie y que en cuanto peináramos la oficina en búsqueda de algo le haríamos participe a los seguros pertinentes ... Sinceramente no se que pensar de todo esto porque además la diócesis insinúa que vosotros estáis detrás de todo esto y ... joder no quiero entregaros cuando se que es mentira ... tengo solo dos semanas para daros, tenéis que demostrar vuestra inocencia aunque sea sacando alguna pista a la luz para daros algo más de tiempo ... Ángela sabe que es cuestión de tiempo tener los papeles para meteros en chirona hasta que saliera el juicio, y una vez más los de arriba no quieren enfrentarse a la iglesia y no dudo ni un instante en que si no tienen donde aferrarse os comeréis este marrón solos.

Acto seguido saca una pequeña foto del bolsillo y la muestra

- El apartamento donde Samuel fue encontrado no fue forzado, Samuel abrió la puerta y creemos que la abrió a esta mujer, esta imagen es de una cámara de seguridad que tenía un local del edificio y os puedo asegurar que no había ninguna fiesta de disfraces en 10 manzanas a la redonda. hace una pausa y sin dejaros hablar continua ... No tardarán en volver mis compañeros, estoy fuera del caso oficialmente y no puedo colaborar con vosotros, ni daros más información si no me uniré a la lista de sospechosos o algo peor ... ¿tenéis una ultima pregunta que queráis hacerme o algo que decir?

Ángela resopla y se lleva las manos al pelo. Lo mesa con cierto nerviosismo ante las palabras de Santillana. No si al final va a resultar que el policía es buen tipo y todo.

- Estamos jodidos. Muy jodidos.

Le mira fijamente. Esta vez sus ojos no se revelan desafiantes si no todo lo contrario.

- ¿Tienen pruebas para...? Bueno claro, es la diócesis quien está detras buscando una cabeza de turco. No les hacen falta pruebas. Probablemente tienen untado de una forma u otra a la mitad de los juzgados de la comunidad de Madrid.

Examina la foto con detenimiento. Una mujer enmascarada. No se adivinan apenas ninguno de sus rasgos salvo sus ojos. ¿Podría haber visto esos ojos en alguna otra parte? Ángela intenta hacer memoria pero es casi imposible distinguir a una persona sólo por el color de sus ojos y más en una situación de estrés como ésta.

Después su mente volvió a detenerse un momento y se acordó de lo que Raúl dijo de don Germán.

- ¿En coma? ¿Cúanto lleva así? ¿Dónde le tienen?

Pobre Germán, víctima de sus propios intereses de resolver este asesinato. Probablemente quien estaba detrás de esto no le gustaba que Germán indagara demasiado, por eso se encuentra postrado en la camilla de un hospital, y nosotros con un punto de mira en la frente y medio departamento de homicidios olisqueándonos los talones. Al menos había un tipo que creía en nuestra inocencia. Algo era algo. Manda huevos, que ironía, depender ahora de la cordialidad de Santillana.

Miró a Julio y después a su otro compañero. Imploró con su mirada a Horacio que se mantuviera con la cabeza fría. Él era siempre quien sabía atisbar una solución o una pregunta que les encaucaría en este marrón, citando literalmente al policía.

Santillana respira hondo, y responde a Angela en un tono entre compasión fraternal y decepción.

- Me temo que no puedo deciros mucho al respecto, en un principio no sabría decir la causa de Don Germán y tampoco puedo argumentaros nada al respecto, solo que estáis siendo investigados por las muertes de Manuel del portero del edificio, la de vuestros compañeros, el rapto de Isabel y el repentino coma de Don Germán ...