CAMBIAFORMAS (Shapeshifters)

(by Asui)

Los cambiaformas son una raza numerosa y de complejo entendimiento, dada la capacidad de sus individuos de transformarse en animales. Son tal vez la etnia sobrenatural más polémica y que más choca con las leyes de la física, dado que la transformación anatómica de un humano a un cuerpo de tamaño menor y funcionamiento distinto, siempre es un problema conceptual. La pregunta que se hacen más los Estudiosos es: ¿Cómo demonios caben todos los órganos y huesos de un humano en un cuerpo más pequeño y organizado de modo distinto? O, ¿Cómo se puede desarrollar cuatro compartimentos en el estómago a partir de un estomago humano de uno solo? Ese proceso de reconstrucción y deconstrucción en el cambio de una forma homínida a una cuadrúpeda o aviar, es todo un reto para la biología. A pesar de los intentos de analizar estos procesos de cambio a nivel molecular, al final la respuesta es siempre la misma: Metamorfosis Transgénica. El modo en que eso pudo pasar al inicio de los tiempos, nadie sabría decir. La cuestión es que se han estudiado y trazado las líneas genéticas de varias sub-especies de Cambiaformas hasta sus posibles Pacientes-0, a través de restos óseos arqueológicos hallados en un glaciar en Centro-Europa y África. Éstos señalarían a grupos homínidos, conectados al Nexo, que encontraron un modo de supervivencia ante el peligro inminente de la extinción, a partir del cruce con el ADN de ciertos tipos de animales. De ahí procederían las culturas con creencias totémicas y el surgimiento de la figura crucial del Druida o el shaman*, como guardianes protectores de los bosques y la naturaleza.

“La figura del Druida, al igual que la del chamán, aún hoy en día supone una figura controvertida por su doble naturaleza como mago y sacerdote con habilidades de transformación animal. Los Eruditos todavía siguen sin estar de acuerdo a qué etnia sobrenatural corresponde, quedando su naturaleza dual en el limbo.”

Etnología de una Especie Perdida. Los antecesores de los Cambiaformas euroasiáticos, Ava Heyworth (2020)

Aunque no hay un sub-grupo que destaque por encima de otro, los licántropos werewolves) son, sin ninguna duda, los más notorios desde su salida a la luz en Europa de la Edad Media y su astuta infiltración en subculturas como la de los furrys, ganando visibilidad cultural. Pero, no están solos. Hay otros sub-grupos entre nosotros, caminando como personas, cazando como animales y protegiendo con garras y colmillos lo que es suyo, el derecho a sus terrenos de caza y reproducción, a no ser invadidos y, sobre todo, a no ser asesinados por deporte o diversión.

Diversidad y Creencias

Cada tipo de cambiaformas tiene un sistema de creencias que explica y otorga su capacidad para cambiar. Estos sistemas están profundamente arraigados en la fe, funcionando tanto como guía espiritual como medio para entrar en el “papel” de su otro lado. Sin embargo, existen excepciones: los "iluminados", que logran transformarse sin adherirse a estos mitos, mostrando que el cambio no depende exclusivamente de la fe, aunque ésta siga siendo importante para la mayoría. Por otro lado, estarían los que persiguen una visión más “científica”, considerando que esos “ritos” activan algún proceso automático natural, creado por siglos de condicionamiento. Lo cierto, es que no parece fácil deshacerse de esos mecanismos ni de los tabúes que rodean al cambio, a pesar de los múltiples intentos fallidos. 

A pesar de las evidencias arqueológicas, antes mencionadas, todavía sigue habiendo, a día de hoy, teorías conspiranoides acerca de que esos restos antiguos formarían parte de una farsa, a la altura de la llegada del ser humano a la Luna, para proteger a la especie animal a la que pertenecen los Cambiaformas y que, en realidad, los primeros de cada sub-especie nacieron de lobos o gatos, que luego cambiaron a humanos, y no a la inversa.

Aunque la hipótesis más recurrente entre los Teóricos de la Conspiración, sugiere que los Cambiaformas nacieron de una simbiosis espiritual/existencial con las especies animales que representan o algo parecido a un micelio, del que no se tienen pruebas. De hecho, estos mismos conspiranoicos, afirman que esta conexión es tan profunda que la extinción de un animal lleva consigo a la desaparición de sus cambiaformas: el último tilacino desapareció casi simultáneamente con su última cambiaformas conocida.

Lo cierto es que los expertos que han conseguido infiltrarse en las comunidades cerradas de Cambiaformas, afirman que no hay ningún tipo de prueba ni indicio real que demuestre esto último. La hipótesis que se sostiene actualmente es que esa supuesta “desaparición” no lo es como tal, sino una evolución de las especies. Esos últimos Cambiaformas se adaptaron a nuevas formas animales evolucionadas, emparentadas con la especie original (El origen de las Especies Sobrenaturales, Adama Thompson, 2007).

Postura Religiosa

Los creyentes afirman que los cambiaformas son una respuesta divina al desequilibrio provocado por la humanidad. Según ellos, la Tierra misma, en su infinita sabiduría, creó a estos protectores para restaurar la conexión perdida entre humanos y la naturaleza. Los cambiaformas actúan como mediadores entre dos mundos: el humano, racional y destructivo, y el animal, instintivo y vulnerable. A lo largo de la historia, sirvieron como chamanes, druidas, sanadores ó protectores, guiados por una fe ancestral que los vincula con su madre Tierra, una entidad que algunos llaman Diosa y otros simplemente “la vida misma”.

Sin embargo, los religiosos también lamentan el camino destructivo de la humanidad, viendo su misión como una lucha constante para proteger tanto a los animales como a los humanos de ellos mismos. Para ellos, el origen de los cambiaformas no importa tanto como el propósito que los guía.

Postura Científica

Por otro lado, la comunidad científica entre los cambiaformas propone que son el resultado de la Tierra como un superorganismo viviente, capaz de influir en la evolución para proteger su equilibrio. En este marco, los cambiaformas son vistos como una herramienta de control, un mecanismo para limitar el impacto humano en el medio ambiente. No son el "siguiente paso" en la evolución, sino una especie simbiótica diseñada para restablecer el balance. De ahí los relatos folklóricos de cambiaformas que aterrorizan aldeas, al controlar el crecimiento de la población controlarían el impacto en la naturaleza.

La ciencia a pesar del obscurantismo biológico, si ha sido capaz de ofrecer una explicación sobre la activación de las transformaciones: el proceso está relacionado con una recompensa emocional y un impulso instintivo que conecta al cambiaformas con su otra forma. Estas conexiones son tan fuertes que, incluso en una sociedad moderna, los cambiaformas sienten una profunda empatía hacia sus especies animales. Por tanto, su doble naturaleza estaría en la forma que tomaría la conexión de sus emociones con el Nexo.

“BIOLOGÍA SOBRENATURAL 101”:

Lo primero de todo, hay que aclarar un concepto: la mutación de homínido a animal es DOLOROSA. De cojones. Da igual de qué animal se trate, SIEMPRE DUELE. Los huesos se rompen y se recomponen para ajustarse a un esqueleto distinto y de tamaño, normalmente, menor. Los órganos se reubican y algunos, incluso se deforman y cambian internamente para un funcionamiento correcto. Todo eso, NO ES GRATIS. Tiene un precio y es ese: DOLOR INTENSO Y ATROZ. Lo único que la Señora de las Bestias concedió a los Cambiaformas fue que al menos fuera rápido, aliviando el proceso. Así que una mutación acaba resultando en una metamorfosis envuelta en un dolor intenso, que se prolonga, de unos 3 a 5 minutos máximo, dependiendo del tamaño. Cuanto más pequeño, más se tarda. Y más duele. Y el proceso a la inversa, no es mucho mejor, aunque el alivio es mayor. No en vano, se retorna al tamaño original, eso se ha de notar. El cuerpo deja de sufrir tensión y estrés físico y mental por las modificaciones. Da igual lo bonito que lo planteen los Shamanes o los Soñadores Hippies y los radicales del Movimiento Pro-Cambiaformas. Ni es bonito, ni es tan bucólico y perfecto como dicen. Es sucio, desagradable e imborrable de tu mente. Eso sí, la libertad de correr a pelo por ahí, eso no te lo quita nadie…

Dicho esto, los Cambiaformas pueden adoptar dos formas o estados de animalismo, además de su forma original homínida:

1. Completa (o Forma Final): El sujeto transita hasta la forma animal plena. Deja de ser humano y la mayor parte de veces, pierde toda conciencia al respecto. El espíritu animal toma posesión completa del cuerpo y la mente, conformando una entidad poderosa, dominada por sus instintos animales. Son los que evocan las leyendas más aterradoras, como los Huargos, o el Big Foot, entre otros. 

1. Versátil (o en Transición): el sujeto se queda a mitad del proceso de transformación, en un estadio intermedio, donde conserva su forma humanoide, pero adquiere acceso a algunas habilidades de su segunda naturaleza animal. Carecen del ímpetu y la fuerza bruta de su estado completo, compensándolo con el raciocinio y la humanidad que conservan en ese estadio. Eso les da control sobre sus acciones, a pesar de la vocecilla insistente en sus cabezas (el instinto animal llamando a su puerta). Depende de su capacidad de voluntad e inteligencia el aceptar la llamada de la naturaleza o frenarse.

CLASIFICACIÓN

Los Cambiaformas se distinguen por dos principios básicos: su tipo de alimentación y su tipo de zoomorfia.

• Tipo de alimentación:

1. Carnívoros
2. Herbívoros y frugívoros
3. Omnívoros

• Tipo de zoomorfia:

     1. Mamiformes:

Representan a mamíferos de todo tipo, desde grandes depredadores como lobos, tigres y osos, hasta especies más pequeñas como zorros o tejones. Son los más conocidos debido a su prominencia en leyendas y mitos.

Sistema de creencias: Tienden a ver su capacidad como una herencia directa de la Madre Tierra, y muchos adoptan roles de líderes en comunidades mixtas. Tienden a creer que eventos naturales cíclicos (luna, sol, estaciones) determinan su transformación. 

Sub-especies: Cánidos (lobos, perros, coyotes); Feliformes (tigres, pumas, hienas y gatos salvajes); Roedores (mapaches y ratas grandes tipo Capibara); Rumiantes (vaca, cabra y oveja); Plantígrados (osos), Équidos (Caballo) y Otros pequeños y medianos depredadores (zorros y comadrejas).

       2. Aviformes:

Representan a las aves. Tienen una conexión especial con la libertad y el viento, y adoptan solo formas de aves de mediano y gran tamaño, como las rapaces, los córvidos o determinadas aves marinas de gran tamaño.

Sistema de creencias: Ven el cielo como un símbolo de la espiritualidad y creen que su capacidad es un regalo para observar el mundo desde una perspectiva superior. Tienden a creer que necesitan elementos de su lado animal para acceder a su transformación.

Sub-especies: Aves rapaces (águilas y buitres), córvidos (cuervo y la urraca) y aves marinas de gran tamaño (albatros y pelicanos).

       3. Herpestomorfos:

Representan a reptiles y anfibios, como serpientes, lagartos, cocodrilos y ranas. Aunque menos comunes, su presencia suele ser muy simbólica.

Sistema de creencias: Ven su cambio como una conexión con la renovación y la resistencia, influenciada por la capacidad de muchas especies reptilianas de regenerar partes de su cuerpo. Tienden a creer que necesitan consumir algo antes de su transformación (sangre, carne, lágrimas, agua del pantano).

Sub-especies: grandes serpientes (tipo anaconda), Lagarto de Komodo y Cocodrilos. 

Especies Extintas o Legendarias

• Dracónidos:

Cambiaformas de dragones, considerados extintos o inexistentes. Las leyendas dicen que eran guardianes del conocimiento antiguo y que su desaparición marcó una ruptura en la conexión espiritual del mundo. Muchos religiosos creen que su extinción es un símbolo de la decadencia de la humanidad. El teórico Edmund Lloyd apuesta por la hipótesis de que no desaparecieron si no que evolucionaron a Cambiaformas reptilianos, en concreto, al Lagarto Dragón Komodo.

• Megafauna:

Cambiaformas de animales extintos como los dientes de sable o los pterodáctilos. De nuevo, el teórico E. Lloyd indica que habría pasado lo mismo con estos cambiaformas primigenios, que habrían evolucionado a la forma actual de determinadas especies, como los félidos o las grandes aves y que, por tanto, constituirían sus antepasados.

• Insectoides:

Hay leyendas que cuentan la existencia de Cambiaformas que adoptaban formas insectoides gigantes, como abejas y mantis religiosas, pero nunca se encontraron indicios al respecto. Actualmente, son historias que se cuentan a los niños para que se vayan a dormir o hagan caso a sus mayores y cumplan con sus deberes. Se consideran una mera fantasía, dado que, si hubiera mantis religiosas de 1,80m. de altura, fijo que alguien ya las habría visto… y chillado como un loco, mientras corría montaña abajo. Seguro. De eso, no hay duda que habría alguna grabación y más hoy en día, con tantos móviles por todos lados. Lo dicho. Pura imaginación infantil.

Estructura Social y Dinámica

En general, los cambiaformas conforman comunidades cerradas a los extraños. Mientras, algunas especies solo se reúnen en épocas específicas, como el apareamiento; otras, construyen redes más complejas, uniendo su activismo, investigación científica y discursos políticos. Son excelentes mediadores, voceros y rescatistas, pero su aversión al fuego descontrolado los ha mantenido alejados de los cuerpos de bomberos.

Cuando dos cambiaformas de la misma especie tienen descendencia, usualmente hereda esta doble naturaleza y asume el mismo tipo de animal que sus padres. En casos de parejas de diferentes especies animales, los hijos suelen inclinarse hacia una de las dos formas, aunque existen raras excepciones en las que no prime una sobre la otra. Los sujetos que heredan ambos animales distintos suelen tener una esperanza de vida muy corta, no llegando a alcanzar la adolescencia. Y, por último, estaría el llamado mestizaje con humanos no Cambiaformas (Bruj@s). No son demasiado bien aceptados en ninguna de sus comunidades, a pesar de que han salido grandes Brujas y Brujos de estas uniones. Pero, se ha demostrado que son dos naturalezas, la Bruja y la Cambiaforma, compatibles entre sí, algo que se había negado durante siglos, desde ambas Comunidades.

Durante mucho tiempo, los Cambiaformas se mantuvieron aislados de los humanos mundanos y de las otras especies sobrenaturales. Demasiada sangre vertida entre ellos. Pero, la reducción de los espacios naturales libres de turismo humano y de la depredación de las ciudades, los ha ido empujando cada vez más hacia la resignación y aceptación de que la única salida para sobrevivir era compartir los espacios libres con otras comunidades sobrenaturales, como la de los brujos y brujas. Así que en el mundo rural se iniciaron las primeras pruebas de convivencia, con relativo éxito. A eso se añadió la ya buena relación existente desde siempre con El buen pueblo (las Tribus feéricas) y de algunos Círculos pequeños de setas. Juntos, plantaron las semillas para conformar un frente de mayor resiliencia ante los cambios acelerados del mundo moderno.

En la actualidad son una Comunidad abierta a la existencia y convivencia con otras especies. Puede que aún no hayan resuelto mucho sus problemas con los Vampiros y otros No-muertos, por ser todo lo opuesto a la Vida (los muertos no deberían levantarse y andar, deberían permanecer en la tierra hasta acabar formando parte de ella, no yéndose a comprar a la 5ª avenida de NY), pero están trabajando en ello.

Organización Social y Política

Socialmente, los Cambiaformas se organizan en Camadas o Nidos y se agrupan en asentamientos en zonas rurales. Difícilmente se ven en ciudades o grandes metrópolis, aunque siempre hay excepciones. Antiguamente no solían mezclarse los tipos de animales distintos entre sí, pero con la caza indiscriminada, internet y los móviles, no les ha dejado otra opción que mezclarse entre sí. Así, determinados animales afines conviven en un mismo lugar, como buenos vecinos (o casi). Su sistema social suele ser igualitario y sin ningún tipo de distinción por castas o grupos sociales basados en ningún tipo de jerarquía, dada la mezcolanza granjera.

Los asentamientos se pueden conformar en base a una manada o dos bien avenidas, o varios nidos. Normalmente, cuando hay mezcla de tipos distintos de Cambiaformas, la tendencia es a asentarse con los similares. Los Depredadores suelen convivir con los que son como ellos y los no-depredadores, entre sí, dependiendo de su tipo de alimentación primaria (animal). Ha habido casos excepcionales en los que una manada de tipo depredador ha convivido con una de tipo herbívoro, pero no suelen durar mucho. Las diferencias (y el hambre) acaban separando a la comunidad.

Las especies depredadoras pueden conformar una sola manada de distintas zoomorfias o una sola dominante de la misma. No es el caso de los herbívoros, que pueden crear comunidades grandes compuestas por varias zoomorfias, en convivencia totalmente armoniosa (mal llamadas, “granjas”). Y, por último, los omnívoros. Son los únicos que son capaces de convivir tanto con unos, como con los otros. Su presencia no es inhabitual en los asentamientos de un tipo u otro. Son los más adaptables, incluso los que son de clase depredadora. Entre los herbívoros y frugívoros su estancia se la suele tolerar poco, pero, en algunos casos, se los admite por su gran función como protectores. Son el mejor perro guardián posible, aunque algunos ponen en duda el tema, por lo de “nunca pongas un zorro a guardar tus gallinas…”.

Políticamente, la Comunidad Cambiaforma han tendido a imitar un poco el sistema de los humanos y en especial, de las comunas hippies. Cada asentamiento tiene su alcalde, elegido "democráticamente" en asamblea plenaria, que se ocupa de mantener el orden y los representa en la Asamblea General o Cohorte (algunas Comunidades Sobrenaturales las llaman Piaras, a modo despectivo y burlón). De ahí, salen elegidos los Portavoces para el Concilio o Alphas.

En la última década, ha surgido un Movimiento Pro-Derechos de los Cambiaformas, por una dignidad y respeto de su forma de vida y pensamiento. No tienen presencia en el Concilio, pero sí en muchas Cohortes. En su seno, hay un grupo de radicales que propugnan la toma de poder del Concilio y acabar con el dominio de los Magos sobre el resto de sobrenaturales. Su objetivo es ir contra los humanos mundanos y acabar con su destrucción masiva de los sistemas naturales. Algunos están infiltrados en grupos humanos Eco-terroristas. Se desconoce el alcance real de su influencia y penetración en los organismos de poder comunes sobrenaturales y de los humanos mundanos.

APRENDIZAJE

No existe el concepto maestro-aprendiz, solo el de Cachorros, Seguidores y Alphas.

Cachorro = niñ@ ó joven Cambiaforma no adiestrado. No suele llamárselos así hasta que cumplen los 12 años y sufren su primera mutación.

Seguidor = Cambiaforma adiestrado.

Alpha = Cambiaforma adiestrado que toma el rol de líder del grupo o manada.

Por tanto, al igual que las hadas, los Cachorros suelen ser enseñados y disciplinados en casa, rodeados de los suyos. No hay Escuelas para ellos y desde luego, ninguna de las otras, con aprendices de otras comunidades sobrenaturales, les admitirían. Los consideran “problemáticos”: caóticos, sucios y peligrosos. Con la apertura al mundo exterior, las nuevas generaciones de Cachorros suelen asistir a los centros educativos humanos normies, como alumnos normales y corrientes.

A los niñ@s de cada Comunidad, desde los 5 hasta los 11 años, se les educa, dentro del entorno familiar, en las creencias y en la vivencia del grupo, aunque todavía no sean capaces de mutar físicamente. Se les prepara, poco a poco, para aceptar su futura doble naturaleza. En cuanto cumplen los 12 años, se les conduce de forma disciplinada e intensa hacia lo que ha de venir, su primera mutación animal, que marcará el resto de su existencia. Es el momento más importante para cualquiera Cambiaforma.

El proceso de cambio se inicia a los 12 años, siendo su primera transformación completa bajo la primera luna de agosto tras cumplir dicha edad. Previamente, sufre algunos cambios parciales, unos meses antes, a modo de aviso de lo que va a venir: olfato u oído más desarrollado (es bastante molesto), alargamiento descontrolado de los dientes caninos (incómodo, muy incómodo y raro), vello corporal más denso, fuerza física aumentada, lo que viene a ser la pubertad un pelín más exagerada, vamos. Pero, no hay que olvidar, que es un momento delicado para el Cachorro, la pérdida de todo control puede llevar al completo desastre, mental y físico, para éste. Así que esos meses previos pueden significarlo todo o nada para la comunidad entera. Ser descubiertos o vivir una vida pacífica y tranquila.

La Luna de Agosto es la noche perfecta para realizar el rito de Iniciación de los Cachorros. Se realiza en un bosque o entorno rural amplio y asegurado por los adultos, donde se dejará suelto al menor mutado para que deambule suelto, haga su primera cacería (en caso de pertenecer al tipo depredador) y entre en contacto más directo con la naturaleza. Cuando hay más de un Cachorro para el rito y/o son de distinto tipo (por ejemplo, depredadores y herbívoros, en caso de que sea una comunidad mixta*), se los divide en sectores separados para darles espacio suficiente, vigilando que no entren en conflicto. Los adultos se apostan, a escondidas, por el bosque y vigilan que no haya peligro alguno para los iniciados. De esta manera, mantienen el orden y la seguridad de los Cachorros respecto a intervenciones procedentes del exterior y del interior. Una vez superada la noche, con la llegada del alba, los niños son recogidos, bañados y vestidos y se inicia un banquete que dura el resto del día, para celebrar la buena nueva. Ya son uno más de la manada.