El Inquisidor lanzó una mirada a la puerta entornada. Observó al Tecnosacerdote y sacó el mando de control remoto del Servidor de Combate.
- Veamos qué se esconde tras la puerta. - Comentó con cierto deje de humor. Luego su tono se volvió algo más serio. - En cuanto acabemos con todo lo que se mueva habrá que registrar el edificio concienzudamente. Necesitamos pistas para dar con el paradero del líder huido. - No hacía falta que explicara la necesidad de dar con ese traficante de artefactos Xenos. Esperó a que Cantus pareciera listo y luego hizo avanzar al Servidor de Combate a través de la puerta entornada. Fuera lo que fuera lo que hubiera ahí dentro no se iba a topar con una presa fácil.
//Hago avanzar primero al Servidor de Combate, y luego tras él entro yo (y confío en que Cantus también).
DESCANSO DE LAS TRES ESTACAS: BASE DE ZAX HOLTHANE:
- El Inquisidor Eisengaard toma el mando del Doble-Sierra y lo hace avanzar. El Tecnosacerdote Cantus abre la puerta de un empujón al tiempo que prepara su Rifle Automático, revelando un despacho, en el medio del cual en el suelo yace la Acólita Fatal, muerta y destripada.
- Casi de inmediato un panel deslizante se abre y un peligroso Servidor de Combate Mechanicus se lanza al ataque.
¡¡¡TIRADA DE INICATIVA!!!
- Pasamos a la escena de combates.
- Como siempre, ritmo al menos diario allí, todos los posts de declaraciones de acciones y tiradas de dados allí.
- Al terminar aquí se postea aquí de forma narrativa.
- Regresamos- digo tras perder la pista a Enoch- Es ilógico seguir buscando. Nuestra presa estará lejos, y sólo podemos causar perjuicio para nosotros y nuestro propósito. Vamos hacia la clínica que comentaste, Enoch,. Ojalá Jaq haya podido sobrevivir.
Si conocemos donde se encuentra la clínica clandestina, vamos hacia allá.
Se por donde se encuentra la clínica, cuando estemos por las cercanías creo que podré orientarme mejor y sino ya le sacaremos la información a alguien.
Vayamos con el resto, ese malnacido corre más que nosotros y no me gusta nada como están mirándonos esta gentuza.
Después de la limpieza y de separar en un lugar oculto las armas y armaduras que aún servían, incluso algunas que no sin poder evitarlo. Me acerco con el Inquisidor hasta la entornada, mirándola con recelo, me acerco y a una señal empujo la puerta, dejando, en menos de lo que tarda la puerta en terminar su recorrido, mi rifle automático preparado para disparar. Cuando veo a mi compañera muerta de esa forma en el suelo, levanto mi vista y tenso mis músculos, esperando encontrar en cualquier momento al hereje que ha hecho esto. Cuando veo al servidor hago una plegaria silenciosa, mientras me preparo para purificar con mi arma, el mal camino que le han obligado a seguir a esta arma.
Ver a la Acólita Fatal muerta y destripada no supuso ninguna impresión para el Inquisidor. Aunque bien era cierto que era el primer Acólito que moría bajo su servicio, y eso hizo que algo se removiera en su interior. Pero la voluntad de prevalecer y servir al Emperador se impuso, y Eisengaard hizo avanzar al Doble-Sierra sin dudarlo, con la intención de devolver al mortal asesino, fuera quien fuese, el regalo que había otorgado a su Acólita.
Cuando el panel lateral se abrió y salió otro Servidor de Combate supo que habían dado en el blanco. Debían destruir a ese Servidor y registrar ese despacho. Algo importante debía estar oculto allí.
Enoch comienza a caminar en dirección a la zona a la que envió a sus compañeros para encontrar la consulta clandestina donde seguramente puedan hacer algo por Jacq. Saca la porra de energía y la mantiene a la vista tratando de intimidar a quienes les miran como posibles presas fáciles.
Motivo: Intimidar
Tirada: 1d100
Dificultad: 40-
Resultado: 88 (Fracaso)
Te he dejado tirada de intimidad por si es necesaria para ir avanzando, sino omitela, espero que sea el segundo caso jejeje
ARBITRADOR ENOCH, TACTICO NOCTINE:
- Tras un frustrante recorrido por el barrio sin dar con vuestra presa, regresáis hacia la guarida del Traficante Zax Holthane, esquivando a las gentuzas de mal vivir antes de que puedan decidir atracaros o interceptaros.
- Volvéis a zonas menos transitadas y entonces alcanzáis a ver un Cargo-9 a cierta distancia. Es el único vehículo en la zona.
- Está aparcado ante la entrada de un callejón.
La criatura biomecánica parecida salida de una pesadilla se abalanzó sobre el Inquisidor y el Tecnosacerdote. Por suerte, los reflejos del Inquisidor y la experiencia de otras situaciones le habían vuelto un hombre precavido, y había avanzado antes con su propio Servidor de Combate. El Doble-Sierra se había interpuesto entre la criatura que les atacaba y sus presas, y recibió la primera estocada de aquel ser.
Eisengaard pulsó los controles del mando haciendo que el Doble-Sierra reaccionara de forma refleja agitando ambos brazos terminados en sierras. El primero de ellos pasó bastante lejos de su objetivo y no logró impactar en el Servidor Mechanicus. El segundo en cambio golpeó en un punto clave del estómago, la sierra se clavó hasta casi la empuñadura donde comenzaba el brazo del Doble-Sierra, y el movimiento ascendente consiguiente casi partió al Mechanicus por la mitad, dejando un reguero de componentes mecánicos y vísceras por todo el suelo.
El Inquisidor observó los destrozos y evaluó rápidamente que el Mechanicus ya no supondría un problema para él o el Tecnosacerdote. Luego su mirada se dirigió al cuerpo destrozado y mutilado de su Acólita. Una lástima. Era la primera baja que sufría un equipo a su mando, pero debía acostumbrarse. Las bajas serían algo habitual pero mientras continuaran sirviendo devotamente al Emperador y eliminaran herejes, todo se compensaría.
- Recoja el equipo que pueda ser útil, tanto de la Acólita Fatal como cualquier cosa que hayan dejado por aquí esos mercenarios. - Ordenó al Tecnosacerdote Cantus. Mientras tanto, el propio Eisengaard comenzó una rápida exploración de la zona usando al servidor Doble-Sierra como avanzadilla. Nada le aseguraba que no hubiera otras sorpresas cerca, o enemigos acechando.
//Registro el lugar en busca de cualquier enemigo o pista.
Que opinas Caradoc?, nos agenciamos un transporte hasta nuestros compañeros?.
Es posible que con el revuelo causado necesitemos salir de aquí sin llamar mucho la atención y puede que con prisa una vez hayan tratado lo mas grave de Jacq…siempre que pueda moverse claro esta.
El servidor de combate controlado por el inquisidor empezo avanzar en el momento que abrí la puerta, mientras otro servidor de combate avanzaba desde dentro de la habitación hacía nosotros. Tomando posición a un lado y detrás del el servidor del inquisidor, dispare un único disparo, viendo como su blindaje lo repelió sin causarle daño. El cuerpo de nuestra compañera yacía en el suelo sin vida, pero no me provocaba ningún problema para usar la fría lógica, solo era un inconveniente más para el equipo, ya que era una herramienta menos para nuestras misiones. Observé unos segundos al enemigo buscando un punto mas vulnerable, cuando el inquisidor, realizando un excelente trabajo al manejar su control sobre la maquina, logró asestar un golpe mortal a nuestro atacante, terminó el combate en un segundo. Una vez terminado el peligro y observando la habitación, me dispongo a preparar una de las armas a mi disposición. Cargando el nuevo arma y dejando la mía a mi espalda, asiento a las órdenes de mi superior y empiezo a recuperar el equipo de nuestra compañera, comprobando que su cuerpo realmente está sin vida. Me tomo mi tiempo recogiendo las partes que puedan servirme y buscando algún medio para llevar todo las armas y máquinas que pueda llevarme.
Preparó una de las armas que puedan servirme, recargandola y teniéndola lista y preparada. Miro unos segundos a mi alrededor buscando productos o dispositivos que puedan servirnos para destruir el lugar y nuestra presencia allí. Recupero el equipo de la acólita y antes de ponerm
Caradoc niega con la cabeza, al cabo de unos segundos.
- No me convence. No sin saber más- responde en un susurro- Si nos ven, empeoraremos la situación, y ello sin contar con que no sabemos a quien puede pertenecer. Creo que lo mejor será acercarnos primero, y observar mejor la situación. Y ya con esos datos tomar una decisión de como actuar.
Si a Enoch le parece bien, nos acercamos intentando no llamar la atención (pero no escondiéndonos) para ver mejor el vehículo. Y si, digo no escondiéndonos, que con nuestras habilidades de sigilo sería la mejor manera de lograr que nos disparen cuando torpemente intentemos acercarnos entre las sombras.
ENOCH, NOCTINE:
- Parece que el conductor no está en la cabina, que podría estar abierta.
- El refugio de Holthane está justo tres manzanas al Sur de esta posición.
- Tirada oculta de Perspicacia +10.
Tirada oculta
Motivo: Perspicacia
Tirada: 1d100
Dificultad: 15-
Resultado: 33 (Fracaso)
Preparó una de las armas que puedan servirme, recargandola y teniéndola lista y preparada.
Miro unos segundos a mi alrededor buscando productos o dispositivos que puedan servirnos para destruir el lugar y nuestra presencia allí.
Recupero el equipo de la acólita y antes de ponerme a trabajar con la nueva máquina, busco posibles medios para transportar todo lo obtenido.
Tirada oculta
Motivo: Perspicacia
Tirada: 1d100
Dificultad: 48-
Resultado: 39 (Exito)
- Al Táctico Noctine le pasa totalmente inadvertido, pero el Arbitrador veterano distingue un símbolo pintado en la pared en la entrada del callejón. Está rodeado de grafitis y bastante desvaído, por lo que es fácil pasarlo por alto:
- No veo nada interesante y no lo tengo claro- dijo Caradoc sin percatarse de la pintada- ¿Seguimos camino?
- Repentinamente, el Iniciado Zariel Marius sale del callejón sin percatarse de la presencia de Noctine y de Enoch y golpea la parte de atrás del vehículo.
- La puerta se abre, revelando a la psíquica Ferris y al herido crítico Jaq Flair, inconsciente. Entre Marius y Ferris se disponen a la delicada tarea de transportar al herido.