Partida Rol por web

Veto os sirve varias raciones de pescado frito.

- "En la zona norte de la Isla del Emperador están los muelles, seguro que allí podréis contratar a algún barquero que acceda a llevaros a Olrankan. Aunque siendo zona de guerra imagino que será caro." -

Veto le cobra los dos Tronos a Tercio y le sirve las dos cervezas de sierpe que ha pedido.

RUMORES PARA TITUS: 5.

TITUS NIHILIUS:

- Nunca te has considerado un tipo especialmente carismático, pero de alguna manera logras tirarle de la lengua a un borracho que está en la barra.

Te cuenta lo siguiente (antes de desplomarse por exceso de bebida):

- "Hace más o menos cien años operaba en Olrankan una extraña secta. Jamás llegaron hasta la Isla, pero tengo entendido que disponían de planes para ello. El caso es que, por lo que se ve, los sectarios estaban confabulados con un atajo de insurgentes y adoradores del vacío. El Imperio llegó y los quemó a todos, aunque yo creo que alguno debió de escaparse..." -

No había mejor lugar en el que esperar a que Vladymir se recuperase de las consecuencias de su irreflexiva forma de actuar que aquel sórdido lugar. Pero por qué extrañarse, aquel local no es que desentonara precisamente con todo lo que habían encontrado hasta ese momento, era un agujero más en una isla llena de grutas. Mejor iluminado, eso sí, aunque en su caso por el brillo rojizo de las luces de “EMERGENCIA”.

- “Las calles repletas de asesinos y aquí venden una cuestionable cerveza de serpiente, seguramente venenosa.”

- Sírvame cafeína- pidió mirando con desdén las cervezas en las que hundían los morros sus compañeros.- Hirviendo- puntualizó con sequedad mientras daba manotazos para apartar el humo de su cara. ¿Por qué nunca se tenía a mano una máscara de gas cuando se necesitaba?

Veto le sirve a Xerxes una cafeina humeante y una bandejita con rosquillas. Le cobra un Trono.

XERXES VON BRAUN:

- Si lo deseas, puedes tirar Carisma +0 o Indagar -10.

- Alternativamente, puedes no hacer ninguna tirada para resguardarte de las posibles consecuencias de obtener demasiados niveles de fracaso en la tirada.

El imperial, cuando se sintió razonablemente recuperado de aquel horror, se dirigió hacia la máquina para obtener unos cuantos tronos con los que poder subsistir medianamente en aquel maldito planeta.

"Decididamente, si he de analizar la situación, el comienzo no ha sido nada positivo..."

Miró alrededor con desconfianza, antes de teclear los códigos y la cantidad deseada, y otra vez antes de recoger el dinero. 

-Gracias, jefe -dijo Itsua en respuesta a la información del tabernero. Tras aquello, echó un vistazo a sus mermadas reservas en efectivo. No era algo que le apeteciera, pero se veía obligado o bien a vivir del dinero ajeno o a sacar tronos de aquel expendedor con los riesgos que conllevaba de cara a su anonimato. Fuera como fuera, estaban en Areage y no en Orlancan. Sin embargo, echaba de menos que aquellos detalles no les fueran mencionados en su base antes de partir. Alcanzó a Vladymir, protegiendo con su cuerpo las miradas curiosas-. Vostroyano, cuando acabes, sacaré yo algo. Cuida que no haya ojos curiosos.

- Vladymir saca 30 Tronos de oro de su cuenta.

- Arlan saca 50 Tronos de oro de su cuenta.

ARLAN HEX:

- Te parece que nadie se fija de forma especialmente inapropiada en vosotros.

- Llamáis ligeramente la atención en que parecéis algo mejores que la típica escoria mercenaria que baja de las naves, pero eso sólo hace que a vosotros os hablen de mejor grado que al resto.

Me acerco a la barra un momento y me pongo al lado de un borracho cercano, para intentar averiguar algo de él. La verdad es que nunca he sido demasiado carismático, sobre todo cuando no convenzo a las personas con los hechos sino con las palabras, pero por alguna extraña razón, este hombre tuvo empatía conmigo y me habló de sus creencias acerca de la situación actual. Si bien puede que su perorata no sea precisa en ningún aspecto, puede darme luces de posibilidades o por lo menos de la creencia local.

Me devuelvo a mi mesa cuando el hombre cae inconsciente por exceso de alcohol, y me siento junto a mis compañeros para hablar:

 - "Un hombre no muy interesante me ha hablado acerca de una antigua secta en esa zona que nunca llegó hasta la isla. Dicen que eran herejes y fueron quemados, aunque puede que más de alguno haya sobrevivido. Puede ser eso, remanentes de un credo impío. No lo sé pero hay que tener en cuenta las opciones."

Miro al resto mientras sigo bebiendo de mi cerveza y como del pescado traído por el posadero. No estoy seguro si alguna vez he comido pescado, quizás conservado de alguna forma, pues en mi mundo natal no hay mucha producción de alimentos frescos.

Nada más recibir el café Xerxes se cercioró de que le había llegado lo suficientemente caliente como para no tener que preocuparse de ninguna enfermedad, un mal que debía ser bastante común con la infecta clientela que frecuentaba el local. Lamentablemente para las rosquillas no había forma de comprobar si su estado cumplía los altos estándares del Cuestor en cuanto a calidad alimentaria.

- He pedido café, no rosquillas- informó, apartando la bandejita para que Veto se la llevara con la misma diligencia con la que la había traído.- Pero gracias- añadió completamente serio antes de olisquear el café para asegurarse de que olía como tenía que oler.

- No he podido evitar fijarme en esa mujer del fondo - dije bajando la voz e indicándole a Veto que se acercara un poco más.- ¿Es eso lo que te hacen en los Pozos de Grasa? ¿O quizás un ajuste de cuentas? Es sólo curiosidad...

- "Esa es Salaz, y en su caso puede ser debido a cualquiera de los dos motivos. Nunca habla de ello." -

- Entiendo - dije mirando a la mujer.- Invítale a una cervecita de mi parte...

Me metí la mano en el bolsillo y saqué un trono de oro, jugueteé con la moneda un instante y después la dejé caer sobre la mesa para que el camarero pudiera cogerla.

Veto prepara una cerveza de sierpe y un camarero se la lleva a la mujer de las cicatrices.

La mujer levanta la vista, el camarero le señala a Tercio y ella asiente, aceptando la cerveza.

Cuando la mujer levantó la vista para comprobar quién le había invitado nuestras miradas se cruzaron. Le dediqué una de mis sonrisas y le saludé con la mano.

TERCIO:

- Tirada oculta de Carisma o de Engañar. A +0.