Partida Rol por web

No respondió para ratificar lo buenas que eran sus ideas. Mayormente porque no estaba segura de qué argumentar... No era fácil de explicar, pero Kora creía estar haciendo lo correcto. No sólo lo que más le convenía a ella, sino también al resto. Tal vez sí que tenía algo de Erik y lo desconocía...

Le sorprendió recibir el cuchillo sin haber llegado a pedirlo. Zack la estudiaba hasta aquel punto y se mostraba solícito a pesar de las circunstancias, y ella reaccionaba esquivándole la mirada y sonriendo de medio lado mientras negaba, bufando divertida con el comentario de la pistola.

- Es evidente que el pañuelo es mucho más valioso que tu pistola... - Bromeó sin mirarlo a la cara.

Ambos debían de tener una idea muy diferente de lo que era el mundo. Kora era más joven, por lo que obviamente él le ganaba en experiencia. Y no es que no le aterrorizasen las quimeras del Yermo, pero una bestia podía acabar con tu vida en segundos, mientras que un hombre era capaz de torturarte durante años... ¿Sitios peores? Estaba segura de ello. Pero mejores... Se preguntaba si aún seguían existiendo poblaciones como Angeltown: villas pacíficas y apartadas del caos, lugares donde no había necesidad alguna de portar un arma. Ésa era su idea de un "lugar mejor"; algo tan sencillo como inaccesible.

No se le escapó la reacción de Zack cuando se arrimó un poco más a él, asegurándose de que el tatuaje quedaba cubierto. No estaba segura de lo que había sido aquello, pero tal vez el militar no era tan imperturbable como parecía serlo, y la idea de una muestra de debilidad por parte de él le brindó cierta seguridad a ella, en apariencia mucho más frágil.

- Si aprieto un poco más no te va a llegar la sangre a los dedos* - Estaba bromeando otra vez, claro, pero con aires de sabelotodo. No tenía tanta fuerza.

No supo qué le llamó más la atención, si lo de "estamos juntos" o la mención a su padre... Pero su ceño se relajó al oirle decir aquello, al igual que la tensión en sus músculos, pues la presión de la tela pareció ceder entre sus dedos, que paseron con suavidad sobre el tejido ya asegurado a la piel. Que el médico siguiera con vida era un regalo que le habían puesto por delante, uno por el que había implorado años atrás... ¿Era su vuelta a la vida una recompensa por todo lo que le había pasado?

Nunca dije que estuviera muerto... Quizás es sólo una forma de hablar o... O puede que haya sido la manera en la que lo he mirado en la mina... Es que... Es que no sé, no puedo mirarlo de otra manera...

Tragó saliva y alzó la vista hacia él cuando percibió movimiento, justo cuando respondía a su pregunta. A medias.

Me dices de dónde vienes, pero no qué haces aquí. Me he dado cuenta, chico del norte...

Fue apenas unos centímetros, pero rehuyó de su mano en un acto reflejo; un gesto del que se arrepintió al instante. Le tomó un momento caer en la cuenta de a qué se refería, pues no llegó a entender del todo el final de la frase, y sus pupilas se quedaron fijas en las de él, vigilante, deambulando en aquel abismo desconocido...

- ...Ninguna - Reveló tras un inciso, esbozando una sonrisa enigmática - Es la única que me he hecho yo sola - De todas las que tenía, la de su rostro estaba ligada a un recuerdo agradable. Que le diera un aire más salvaje era pura casualidad. Y que él se interesara... Bueno... No le desagradó. Era pronto para emitir un juicio sobre Zack, pero cabía la posibilidad de que el médico no fuera el único regalo con el que le había obsequiado Helmtown, por muy opuestos que fueran el uno del otro: él, procedente del norte, seguía un código, exhibía una entereza envidiable y tenía una visión de la vida probablemente más acertada, mientras la sureña rehusaba de las normas, tendía al arrebato y percibía la realidad de una manera mucho, mucho más retorcida. Que acabaran juntos en la misma habitación no era sino un capricho del destino...

La pequeña fiera se dispuso a terminar de anudar el vendaje, asegurándolo con fuerza pero evitando hacerle daño:

- Si exite un lugar mejor que éste... - Levantó de nuevo la vista hacia él, desafiante - ¿Cómo es que estás aquí?

Solo te mire mientras sacabas un poco de ese sarcasmo que solias hacer gala, esa rudeza y esa mala leche que aunque no venia a cuento, visto el panorama de tu estado fisico era hasta normal. Sonrei de medio lado y te deje expresarte a tu gusto, sin interrumpirte.

Hice un gesto para que siguieras hablando. - Un resumen bastara.

Aun asi lo que llego fue el resumen del resumen, de la sinopsis de una fraccion de tu vida. Facil, simple y directo... y exento de cualquier detalle que pudiera ayudar en forma alguna.

La mirada hizo que sonriera de medio lado, mientras negaba levemente y acabase riendo levemente, aunque no era ofensiva, mas bien era de puro humor absurdo. - La hostia puta, con menudo grupo raro de cojones acabe uniendome... aunque bueno, tampoco es que fuera tan raro despues de todo... - Lo que venia a decir que igual mi historia tampoco era la habitual. - Asi que una ex-hermandad o algo asi, a la que echaron por mala conducta... - Te recorri con la mrirada, sin atisbo de sexualidad ninguna. Era obvio el motivo. - mira que este grupo ya era raro de inicio pero sin duda os llevais la palma...

Preguntas. Claro que tengo me cago en todo. Uno de los grupos mas cerrados del puto Yermo... y tenemos aqui a una que se piro sin que le volaran la cabeza... - Ahi quedaba la opcion. - Aunque antes de meternos en asuntos de sus putas armaduras o similar... - Señale al cielo. - Con lo que sabes de ellos... enviarian solo un trasto volador? Crees que pueda haber alguien por aqui de ellos? - Estaba claro que la Hermandad tenia fama, mala mayoriatariamente, pero la cuestion era que si habia alguien por aqui... la pregunta era de que lado estaria.

Tee dejó crecer su sonrisa también mientras Dante reía. Había que reconocer que la situación era graciosa cuando menos. Y aunque ella no era de preguntar demasiado el origen de nadie, sobreentendió que en ese grupo raro de cojones, Dante encajaba perfecto. Asintió, con un suspiro, al oírlo repetir su historia. Si, ese era un buen resumen también. Aunque ella no lo llamaría mala conducta, a pesar de que prácticamente fuera exactamente la definición de ello. Hacía lo que querían, solo no de la forma en que lo querían hecho.

Supongo que creyeron que no valía la bala - pero no habían contado con que podía mantenerse viva a base de pura terquedad - Debieron gastarla. Me entrenaron bien. - bromeó con una sonrisa de medio lado. En realidad, tampoco los culpaba. Les había dado lo suficiente por culo para que le dieran la espalda y la dejaran morir lentamente, en sus condiciones era casi imposible que sobreviviera. Pero lo había hecho, por darles por culo otra vez. Y porque quería vivir, claro. Tenía muchas razones para mantenerse viva. Y la última añadida a esa la lista estaba en Parody.

Ya dije antes, ni de coña mandaron al trasto solo. Mandan siempre un grupo de exploración, y eso son malas noticias. Los cabrones más duros de la Hermandad, con diferencia. - tomó una breve pausa - Por otro lado, no suelen llevar servoarmadura. Así que ahí tenemos un punto a favor. No los veo hace años, pero si reconozco a alguno podría decir su especialidad. - de las que recordara, al menos.

Una mirada larga que acabo con una suave sonrisa. - Sin ninguna duda, el panuelo sirve para mas cosas que una pistola, por lo que su valor sin duda es mayor... - Podria ser una broma, quizas un comentario cargado de ironia pero a ti, no te lo parecia. Si era un militar, si era un hombre de la Hermandad sin duda se alejaba y mucho de lo que podrias esperar... o de lo que quizas hubieras oido por los rumores. Parecia darle un valor a las cosas mas alla de su practica capacidad para matar.

La cercania. Tu presencia sin duda me altero, pero busque que no se notase en exceso. Eras diferente a lo que uno cabria esperar, la mayoria de tu grupo lo era pero tu tenias algo que llamaba mi atencion aunque no supiera el que... aun.

El comentario me hizo sonreir e incluso cerrar los ojos mientras negaba con la cabeza, realmente llevando un humor claro en mi cuerpo. - Pues no mucho mas... no queremos que pierda el brazo por ahi... seria sin duda todo un problema... y deberias tomar responsabilidad por ello. - Una broma sutil, algo mas de picardia, que no de picante, mientras volvia a elevar la mirada y la fijaba en ti por unos largos segundos.

Un carraspeo y acabe desviando la mirada hacia esa cortina que por el momento, daba intimidad. Aun asi el sonido de la otra sala, donde se ponian o parecian ponerse en marcha sin duda clamaria bastante, estando los dos relativamente en un silencio solo roto cuando nos dirijiamos el uno al otro.

Fui consciente de como mis palabras menguaban tu tension, como te relajaban notablemente y eso junto con lo que ya habia empezado a captar me dio una valoracion mas profunda de lo que tu "padre" significaba para ti, aunque él no se hubiera dado cuenta aun de quien eras. Era un valor extraño a encontrar, pero con una profundidad densa y pesada que bien podia convertirse en unos cimientos o en un peso que acabara por arrastrarte. Solo el tiempo lo diria.

Me quede quieto cuando rehuiste, mirandote sin moverme, esperando cualquier reaccion para que comprendieras que no buscaba nada malo. Eso si, no lo repetiria. Una vez te quedase claro la autentica intencion detras de mi gesto, mi mano volveria a su lugar, no buscaria seguir con el gesto que sin duda habia violentado y congelado la realildad por unos largos instantes.

Una ceja enarcada ante la peculiaridad de que la cicatriz fuera autoinflingida, mas entonces los movimientos del otro cuarto ya no podia dejarse pasar. Se estaban preparando para irse. - Sin duda me gustaria saber mas sobre esa cicatriz, aunque ahora mismo parece que los demas estan preparandose para salir... - Se podia notar cierto desagrado de dejar la conversacion a mitad, como si realmente hubiera interes genuino en esa cicatriz y su historia. - Asi pues solo puedo esperar que haya otro momento de soledad donde puedas contarme la historia de una cicatriz con tanto significado. - Era una invitacion, una invitacion a estar a solas para hablar, no parecia haber mas detras de mis gestos.

Aun asi, antes de poder ir mas alla tu misma dejaste escapar una pregunta que tenia demasiado significado, demasiada fuerza segun se mirase. Una sonrisa plena sin duda ninguna, mientras estaba claro que creia lo que iba a decir. - Porque alguien tiene que seguir avanzando, alguien tiene que seguir descubriendo y encontrando la tecnologia antigua que pueda permitirnos volver a alzarnos sobre las arenas de este mundo. Si nos quedamos quietos, al final las arenas acabaran por consumirlo todo... por eso... estoy aqui... para asegurar un sitio mejor no solo ahora, sino en el futuro.

Me recoste algo mejor contra la pared mientras miraba a una rara criatura como pocas, pero sin duda una ex-miembro de la Hermandad era un bicho raro cuanto menos. Lo sabria el puto pelirrojo? Seguro que si... no habia duda de ello, de alguna manera a ese cabron no se le escapa una. Estaba loco, pero de tonto no tenia nada aunque disfrutara haciendoselo.

Fuera como fuera sigues viva y estas aqui... acaso importa realmente lo demas? - Lo pasado era pasado, yo me alimentaba de ello y dejaba que la ira del mismo corriera por mis venas para dar muerte a quien creia que lo merecia, aun asi nunca me planteaba mas. La realidad es que habia sobrevivido, como lo habia hecho ella, eso es lo unico que importaba.

Asenti y mire en direccion a Rea, que se habia removido levemente. La tipa era dura, pero le habian dado con todo... y aun asi seguia peleando.

Un tipo entrenado para sobrevivir solo en el Yermo, o un grupo entrenado para lo mismo, por mas que no lleven servoarmaduras si dices que son duros, es que es mejor masticar piedras o beber queroseno que liarse a ostias con ellos... - No parecia que importase realmente, si habia que hacerlo se haria pero siempre era bueno saber contra que tipo de criaturas te enfrentabas.

Pues ya sabes, estate al tanto por si alguna de las caras te acaba siendo reconocida... solo faltaria que la maldita Hermandad estuviera aqui y no lo supieramos... - Mire hacia la bolsa de granadas. La señale con la mirada. - Deberian haberselas llevado, pero Erik es demasiado optimista... 

Suspire mientras ahora miraba a Isaias que seguia dormitando, lo necesitaba el maldito loco. Aun asi me acerque para comprobar si estaba entero y no la habia palmado en medio de todo el jaleo anterior. Una vez hecha la comprobacion, eleve el pulgar en direccion a Teela.

Y que se cuenta Shawn? Aparte de la Arena hacia mucho que no lo veia...

¿De dónde había salido aquel tipo?

Era casi frustrante no verlo venir. Casi parecía más dócil y benevolente que ella, pues no era lo que esperaba de un militar, ni siquiera de un hombre... Su valoración del pañuelo no terminaba de tener sentido para Kora, que básicamente no cargaba con nada que no pudiera utilizar como un arma. ¡Nada! Hasta a la tela que ahora se ceñía al bíceps de él podía darle un uso mucho menos amable...

Esperaba una evasiva por su parte, pero para su sorpresa había optado por desvelar sus intenciones; o parte de éstas. Al menos eso intuía la sureña, que afiló la mirada, atenta a su explicación. Una explicación que sonaba convincente... No ya por sus palabras en sí, sino por su gesto y su sonrisa. Era la expresión de un hombre que creía fervientemente en una idea y parecía tener un verdadero objetivo en la vida. Uno que no fuera sólo sobrevivir a un nuevo día...

No era nada habitual encontrarse con gente genuinamente interesada por el futuro o el bien común. Y era ridículo cómo aquella polaridad llamaba su atención, cómo encontraba atractivo ese mismo altruismo del que ella intentaba escapar: ¿pero cómo no iba a hacerlo? Había visto morir a tanta gente honrada... Tanta violencia, exceso, abuso de poder y brutalidad... ¿Qué tanto por ciento de la población merecía un lugar mejor? Ni siquiera ella se sentía merecedora de algo así.

Pero papá... Él... - Negó para sí, absorta en sus pensamientos... - Mi padre merece algo mejor que esto...

El sonido de pasos la hizo girar la cabeza hacia el pasillo, endureciendo el gesto de nuevo antes de volver a mirar a Zack a los ojos durante unos segundos, escudriñándolo con curiosidad.

- ...Será mejor que nos movamos - Asintió ceñuda, más por el inconveniente de no saber a ciencia cierta cuáles eran las intenciones del grupo que por otra cosa - Y si te portas bien... - Aquel aire arrogante entró de nuevo en escena, mientras la belleza rubia se acomodaba uno de sus guantes - Quizás te cuente un par de cosas más - Una sonrisa fugaz antes de abandonar la habitación después de recoger sus trapos sucios, caminando con renovada seguridad.

No era la persona más fácil de leer.

Tu respuesta arranco una leve sonrisa, puesto que ambos sabiais la realidad tras tus palabras. Si no tuvieras un tubo clavado al pecho estarias ahora mismo en el bunker. De todas, todas.

Segui escuchando a Tee y asenti. - Siete años es mucho, sin contar que se supone que los puntos fuertes de la Hermandad estan en el norte, asi que supongo que habra pocos capaces saber quien eres y viceversa. - Me recoste un poco mejor. - Aun asi... no esta de mas estar atenta... y ante cualquier duda, haz el favor de no disparar primero, ni siquiera sabemos si la Hermandad nos considera enemigos o no y es del tipo de gente a la que prefiero evitar.

No era nada reprochable, era como buscar pelea con un sanguinario. Nadie lo haria de primeras, pero si no habia mas opcion, era otro tema.

Suspire y mire en direccion a la puerta. - Creo que hemos gastado ya mucha de nuestra suerte hasta el momento... - Viendo los heridos que habia en la sala era claro que era un milagro que no hubiera mas muertos.

Una sonrisa torcida mientras negaba levemente, pues tus palabras eran muy similares a lo que el pensaba que hacias en general, despues de todo os habia visto en acciones hacia unos meses.

Si eso esta bien para ti, entonces esta bien. - Si no te preocupabas por quien era Shawn, no era cosa mia incidir en ello... pero el pelirrojo aparte de ser uno de los mayores peligros de Parody, era tambien uno de sus misterios y por lo que sabia, cualquiera que intentaba dilucidarlo no acababa bien.

Rei ante tu ultima frase. - No parece del tipo de gente que hace eso, pero es bueno saberlo... - Estaba claro que me habias pillado a contrapie. - Le veo mas bebiendose una de sus botellas y gruñendo por lo bajo... - Una mirada directa. - Es mas, es raro que no este aqui... no? Pensaba que vendria la verdad sobretodo cuando le vi jugar de aquella manera delante de Titan.

Escuche tranquilamente sin decir nada, dejando que las opiniones, las ideas y cualquier cosa que se le pasara a Tee por la cabeza la fuera soltando.

Shawn. El loco pelirrojo. El cabron irlandes con menos tornillos de los necesarios y demasiada carga explosiva suelta. No sabia mucho de el antes de Parody, cuando llegue el ya estaba alli y ya era una "celebridad". La verdad es que no sabia de nadie que supiera mucho de el... o al menos que se hubiera atrevido a preguntar.

Recordaba los rumores cuando acogio a alguien del Yermo. Shawn era muchas cosas, pero abrir su casa, la de verdad, para meter a alguien dentro habia sorprendido a mas de uno... y a mas de una...

Rei levemente. - Aunque te hubiera avisado, habrias venido... pero como tu ya dices, sin duda tendria un buen motivo para mandarte lejos... y si alguien puede saber cual es, esa deberias ser tu. - Claro esta, si es que sabias algo que los demas no.

En medio de la conversacion, se escucho un leve crepitar electrico.

Estatica. Una radio o algo similar, de eso no habia duda. Venia de uno de los cuartos cercanos. No quedaba claro si alguien estaba buscando contactar con alguien, o simplemente era una frecuencia perdida.

Frunci el ceño al escuchar eso, no es que dudase de que hubiera algo asi en una ciudad como Helmtown pero en las actuales condiciones llamaba la atencion. Mi mirada fue hacia Tee.

Os movisteis afuera de la habitacion, buscando identificar de donde venia ese ruido. No estaba lejos, una habitacion algo mas adelante.

Dante se apoyo en la puerta, pero te dejo espacio para que mirases tu tambien adentro. Habia un chico joven que tenia varios aparatos de radio o similares ahi tirados, se ve que se le debian dar bien las maquinas y habia estado intentando apañar algo. Era un desastre siendo sinceros, pero aun asi habia conseguido algo, al menos... estatica, lo que implicaba que podia rastrear o buscar frecuencias.

Ajeno a vuestra presencia comenzo a mover los diales cuando de repente se escucho una palabra... pero se perdio al momento... aunque el chico buscaba recuperarla o eso parecia. No tenias muy claro si sabia lo que hacia.

"MetalBird"*

Tras encontrar la habitación, y dado el paisaje que ahí se encontraron, Tee permaneció en silencio, detrás de Dante. Su ceño se frunció con curiosidad, y luego un poco más con preocupación, al escuchar "MetalBird" saliendo de aquella radio improvisada. Se debatía sobre si esperar a que el chico la recuperara, o hacerlo ella misma, pero dado el escenario supuso que él tendría mejores oportunidades.

El helicóptero - susurró Tee muy despacito, asegurándose de que con la estática solo Dante la oyera. Mientras el chico encontraba la frecuencia, al menos podía ponerlo sobre aviso.

Dante te miro y asintio levemente.

El chico estaba ahi dandole, girando cosas y muy concentrado. La estatica era brutal, saltaba de un lado a otro pero de repente un mensaje se cruzo raudo.

MetalBird .... Ghost. El objetivo esta destrozado. Si esos inquisidores tenian algo aqui .... .... quede mucho ... pie.

..... .... .... Esperando.... .... paqu... ... ... form... alenta...

La comunicacion volvio a cortarse.

Tee frunció el ceño, escuchando con atención. Por un lado, se alegraba de tener confirmación y un poco de información extra, por otro, le preocupaba con lo que fueran a encontrarse ahí fuera. Al menos tenía la certeza de que Isaías estaba aquí y no se suicidaría contra los inquisidores. Solo podía esperar que el resto optara por la decisión más sensata, aún si ella no era quien para pedírselos.

Dante, ve a buscar a Lizzie y Pearl. Ponlos al día de lo que hablamos con el resto de los inquisidores, pero traélos. Voy a ver que más saco. - lo miró a los ojos, para luego entrar en la habitación.

Eh, chico - dijo con lo que intentaba ser una sonrisa - ¿Me dejas? - preguntó mientras se acercaba a maniobrar la máquina.

El chico te miro y tu miraste la maquinaria. No la conocias. Era una amalgama de muchos tipos de aparatos que el chico por algun tipo de milagro habia conseguid unir hasta dar forma a una radio aunque su alcance no seria tampoco muy extenso, o eso pensabas de inicio.

Al ver tu cara, el chico miro la maquinaria y luego a ti. - Si tu te encargas de la frecuencia, yo puedo lidiar con los cables... - Te miraba con respeto, quizas miedo y no podia sino mirar hacia tu pecho que estaba cercano. Era algo mas tirando a un adolesncete que otra cosa y tu presencia lo habia alterado en mas de un sentido.

Os pusisteis a ello mientras de fondo escuchabas como Lizzie flipaba en comentarios claros con Dante, aunque no captabas del todo lo que decian, a no mucho tardar aparecerian detras tuya pero mientras tu estabas absorta en las frecuencias. Conocias algunas antiguas, no es que hubiera muchas opciones de que sirvieran pero no perdias mucho por probar.

Tardaste un poco pero al final algo asomo.

Ghost, aqui Metalbird. No no me ha entendido Ghost. La ciudad esta hecha polvo, hay pocas posibilidades de supervivientes a excepcion quizas de los pertenecientes al Refugio.

Boom. Tu mente se quedo en blanco y el silencio se extendio a tus compañeros. Refugio. Vault. Un puto Refugio. Todo el puto Yermo habia oido hablar de ellos. Bunkeres subterraneos de antes de que todo se fuera a la mierda. Eso no era un simple tesoro, eso era como el tesoro de tesoros. Medio Yermo mataria al otro Yermo por conseguir entrar en uno... y habia uno... uno justo debajo de Helmtown.

Las Mareas estan activas y hay una puta Madre Reina gusano despierta. Se ha replegado por ahora.

No sabemos que tenian los inquisidores o cuales eran sus intenciones. Mision en progreso. Actualizaremos lo antes posible. Punto Montgomery.

Unos segundos de silencio. 

MetalBird. Agui Ghost. Estado actualizado. Procedan con extremada precaucion. Uso de fuerza letal autorizado en caso de necesidad.

El chico no hizo caso, siguio a lo suyo con los cables mientras se escuchaban las trasmisiones. Te miro cuando dijiste aquello como si fuera una pregunta retorica. Notaste algo de tension en su mirada, nerviosismo en sus dedos, mientras una gota caia por uno de sus laterales que bien podia ser por el calor, antes de volver a los cables. No sin antes volver a fijarse en ti y relamerse los labios sutilmente y en un gesto solo para el.

Eso esta claro... - Dante respondio desde atras, donde estaban los demas. - Y cuanto antes...

Mas fue Lizzie la que nego. - Ni siquiera se si hay alcantarillas en esta ciudad, o si estan en pie tras toda la mierda que han hecho, ademas de que esos putos bichos son subterraneos... - Dejando claro que ir jugando bajo tierra, no sonaba como algo sano.

Pearl se mantuvo callado un momento antes de hablar. - Si realmente es un Refugio... No estara conectado a ningun sistema de alcantarillado, si es que existe. Esos sitios se supone que son capaces de aguantar cualquier mierda que les echen... pero conectarlos al alcantarillado... no lo veo. - Se quedo pensativo y miro al chico que estaba en su mundo de cables. - Si hay una entrada, seguramente sea por donde han ido los demas... parece lo mas logico... sobretodo porque no han vuelto...

Dante miro a los otros dos antes de mirarte a ti. - Entonces... nos vamos de paseo? - La mirada te la acabo dirigiendo a ti.

Lizzie fue la que hablo por el otro lado. - Yo puedo ir tambien si quereis... - Miro a Pearl y este asintio, pero de una forma que dejaba clara que se quedaria atras para cuidar de los que quedaban alli, si te daba por llevarte a la mujer contigo.