Partida Rol por web

 La Rodelais ya estaba lista. Los alimentos y minerales que habían extraido del planeta para exportar a la tierra estaban en la zona de carga. El temporal de aquel planeta había dañado una pequeña zona de la cubierta superior. Los vientos hacían que se formaran fenomenos parecidos a las tormentas de arena. El mecanico Desker se estaba ocupando de ello y no tardaría mucho en arreglarlo pero eso había retrasado la salida de la nave unas 32 horas aproximadamente. El resto de la tripulación verificaban todos los sistemas o jugaban a las cartas, segun su ocupación. Lo que estaba claro es que todos querían volver a la Tierra, pues hacía 3 años que estaban fuera y tardarían otros 4 en volver.

 El intercomunicador sonó en la sala de mando:

- Soy Jonh, oye gente esto estará en unas horas no debería tardar mas, asi que idme preparando un chocolate caliente ahi dentro.-dijo de buen humor.

Ultimamente en la nave parecía haber algo de tensión por los imprevistos de la jornada pero ahora todos estaban mas relajados en vista del inminente despegue.

Paseo por la sala de mando, revisando que todo el equipo y los ordenadores se encuentren perfectamente, no me vale que esten bien, busco que todo ande como el mismo dia que salio de fabrica.

Los compañeros me molestan... como siempre, se podian haber quedado fuera, contando granitos de arena... total para lo que hacen aqui dentro.- pienso sin detenerme ni a mirarles, como si no estubieran alli.

Escucho el anuncio del mecanico de sistemas. La prueba viviente de lo que pasa si dejas entrar en una nave a un chico que no a aprobado ni la egb y todo lo sabe de maquinas se basa en reparar la esquiladora de su pueblo.

Niego con la cabeza, es algo inaceptable "¿Como que oye gente?" ¿Que forma de hablar es esa ? y el tiempo de espera propuesto... inaceptable. Si no fuera porque no tengo la minima gana de volver a la tierra le echaria una bronca que le temblarian las orejas.

Aun asi voy para el interfono y con un tono sarcastico pulso el boton.- ¿Estas seguro que quieres chocolate y no doce uvas en un plato?

 Tranquila jefa, esto ya esta casi listo- Vuelve a contestar el hombre.- Capitan, supongo que me oye. Que todos se vayan preparando que en unas horas estamos listos.

El hombre sabía perfectamente que Tailor no estaba para bromas, por algun motivo no le caia bien pero ya estaban a punto de salir de aquel planeta, una larga siesta y antes de darse cuenta ya estarían todos en casa.

Sidney se encuentra en el puente de mando, en su puesto, casi sin moverse de ahí desde hace 32 horas, tiempo que lleva demorado el despegue desde aquel entonces. Normalmente no habría pasado tanto tiempo ahí, cuando su supervisión no es mas que una formalidad, pues todo estaba en manos de los mecánicos, pero últimamente prefería pasar el tiempo mirando indicadores y chequeando protocolos una y otra vez a estar tumbado en la cama de su camarote, dándole vueltas a sus paranoias, y bebiendo su escocés de contrabando hasta quedarse dormido. Si iba hacer eso sería mejor esperar a después del despegue, aquella fase le parece muy delicada como para dejar de concentrarse, aun con todos sus años en el oficio. Luego, una vez fuera, ya podría ser el mismo de siempre, cansado y confundido.

Se incorpora en su asiento al escuchar las palabras de Desker por la radio, como si lo despertaran de un sueño, cosa que no se aleja demasiado a la realidad, pues en los últimos minutos Sidney no había hecho mas que cabecear en su asiento del puente de mando, dada su inactividad, salvo por la espera a los mecánicos.

Bosteza mientras se refriega los ojos con una mano y presiona el botón del intercomunicador con la otra.

- Bien hecho, Desker – dice con su voz y tono característico, sin dejar denotar su cansancio por su voz – comprueba una vez mas tu trabajo y entra a la nave, hoy te as ganado ese derecho – bromea. Hace una breve pausa – Tailor, realiza un repaso a los sistemas principales de la nave. Quiero estar completamente seguro antes de despegar – le ordena a la ingeniera en jefe, mujer de pocas pulgas si las hay.

Tras eso se incorpora y comienza a revisar los tableros de información, cerciorándose de que no haya nada fuera de lo normal en la nave. El despegue fue siempre la parte que mas le había preocupado a Sidney, - “una vez ahí arriba las cosas van por si solas” – suele decir.

El capitan tiene suerte de que mi padre me inculcara un respeto extremo por los mandos.- Si señor, ya esta todo comprobado. En este momento estoy realizando una segunda comprobacion por modulos para estar completamente seguros de que no habra sorpresas... y si me lo permite me gustaria bajar un momento y supervisar el trabajo del señor Desker.

No es que cuestione su profesionalidad, es que estoy segura de que es el tipico chapucero que habra pegado los paneles sueltos con chicle mascado, muy en la linea de lo que viene siendo el personal de esta nave.

-Vamos a confiar en el trabajo del señor Desker por ahora, confío en su criterio – responde Sidney por la radio a la petición de la ingeniera en Jefe. Pese a las distancias que mantiene la mujer, Sidney ya sabe lo perfeccionista que puede llegar a ser con su trabajo, o eso le parece a él, y ceder a aquella petición podría suponer otra buena cantidad de horas en tierra, cosa que no vale la pena pues conoce perfectamente las capacidades de Desker como para desconfiar del mecánico, aunque no duda que Tailor realiza aquella petición tan solo impulsada por su profesionalismo.

- Muy bien, vamos a revisar esta belleza una vez mas para poder salir de aquí, vamos atrasados – dice a todos los demás por el intercomunicador de la nave – quiero un informe de situación de cada cubierta antes del despegue.

Mientras da aquellas ordenes no aparta la vista a los paneles, revisando la nave en detalle desde el puente, esperando que esta vez este todo en orden para poder despegar de una vez.

Silenciosamente, tal y como hago siempre las cosas, sigo las indicaciones que me van dando. No suelo hacer eso, peor me presté voluntaria y estoy de bastante mal humor pues no soporto que me den órdenes.

"Eres más tonta...¿qué esperabas? Si te oofreces y no sabes hacer esto, pues te mandan, es lo normal" pienso para mí silenciosamente mientras intento realizar la tarea que me han encomendado.

La realizo tal y como explico, e suna tarea simple y sencilla. Le miro de vez en cuando para ver si sigue muy atareado, pero parece que tiene todo bajo control y eso me tranquiliza. Hace casi cinco años que no veo a mi familia y tengo ganas de hacerlo, así que mis deseos de volver a casa es lo que me ha llevado a ofrecerme a ayudar pues cuantos más ayudemos más pronto llegaré a casa.

Suspiro y sigo con mi trabajo, intento hacerlo deprisa pero con cuidado de hacer las cosas correctamente.

Un chasquido se oyó del intercomunicador de la enfermería. - Oiga capitán, estoy cansado de contar tiritas... ¿Cuando nos largamos de este lugar infecto? Como siempre la voz de Vincent sonaba alegre, y era difícil verlo de mal humor.

La verdad es que se había pasado las horas sentado en una silla con los pies en alto, ya sabía de sobras el material médico y las medicinas que había en la nave, al fin y al cabo, era el único que tenía acceso a ellas.
Contaba las horas, días y meses que le quedaban encerrado en esa cafetera, tenía ganas de volver a casa, de volver a su vida. - Me cago en el juez y en su puta madre. Cada día que pasaba allí encerrado, se lo repetía como un mantra.

- Tan pronto termine de contar tiritas, Doctor – responde desde su lugar, sin dejar de prestar atención a lo que hace. Aquel sujeto es el mas “problemático” en su tripulación (así como en algunos casos fundamental), no por que no se lleve bien, si no por que es uno de los pocos que no desea estar haciendo aquel trabajo, según puede entender Sidney, y para un trabajo que requiere prácticamente que uno se entregue a él completamente, es mucho. El tipo dejaba entrever claramente que se encuentra en un lugar en el que no quiere estar y haciendo algo que no quiere hacer, y eso es algo que puede traer muchos problemas en una nave que recorre tanta distancia durante tanto tiempo. Aun así, Sidney nunca a tenido problemas con aquel sujeto, aunque no dejara de notarlo – sería una lastima tener que desviar nuestro viaje un par de meses de vuelta por que se le acabaron las tiritas, ¿no cree? - añade, medio en tono de broma, aunque no deja de prestar atención a su trabajo.

 Una risa se escucha desde el interfono de la enfermeria.

No se preocupe capitan, fui a por mas cuando coji tabaco. Ya sabe por si las moscas-Contesto la voz de Olivia la Doctora ayudante de Vicent.

- No se preocupe capitán, tenemos tiritas para forrar la nave. Todo lo demás está correctamente inventariado. Aunque Vincent era un poco vago, y realmente no le gustaba estar en aquella nave, las cosas importantes se las tomaba en serio. Aunque le faltaba definir que eran "las cosas importantes".

- Hay que malito estoy doctora... Fue lo último que se oyó a través del interfono, en un claro tono jocoso y lastimero.

 Venga ya chicos, dejad de armar jaleo y dejad a los que estan trabajando en paz...ademas me desconcentrais y Jim me esta dejando en los calzoncillos con las cartas-se quejo uno de los tripulantes.

Silencioso Landis mira los aparatos de radio de la nave .

Parece que aun no tenemos señal en todo caso es normal por el momento seguramente nadie nos escucharía gritar!!!

tras mirar la radio de largo alcance prueba los intercomunicadores internos de la nave :

Capitana se recibe bien la señal?

todo bien!!!

Chicos creo que es hora que saludemos a morfeo todo funciona

¿como que vamos a fiarnos de su profesionalidad? ¿Que clase de respuesta es esa?.- Esta bien, señor, en tal caso y dado que nuestras vidas dependeran de eso voy a hacer una inspeccion esaustiva de los sistemas, sobre todo de los referentes a seguridad y emergencias.

Me doy la vuelta y me siento frente al ordenador central, metiendo mi clave para acceder a los sistemas para escanear todo el sistema, no creo que tarde mas en esto que el "profesional" y por tanto no retrasaremos la salida.

Desde mi posicion escucho la broma insulsa de las tiritas.- Tiritas no faltaran pero o empezamos a añadir bromuro en las comidas o creo, capitan, que vamos a volver con pasajeros extra...Aunque siempre es una alegria para la tripulacion tener una buena... "profesional" poniendo tiritas.- Dejo el tono de doble intencion sin preocuparme si ofende o no, total, no es amiga mia y me cae fatal la doctorcita.

Despues escucho a Jhon, con una leve interferencia que borro con un ajuste de los mandos.

-Alto y claro Jhon, estoy terminando los ultimos analisis de sistemas, estare lista en unos minutos.

- Bien, suficiente. – dice finalmente en tono mas serio, viendo que algunas palabras e insinuaciones pueden resultar mas ofensivas de lo que suele permitir “frente” a él, mas que nada por mantener la calma entre la tripulación y evitar cualquier discusión tonta, que por sentirse realmente molesto, ya que le da bastante igual las formas que utilice su tripulación mientras hagan su trabajo bien – todo esta en orden. Últimos análisis aprobados. Preparados para comenzar con el despegue – dice serio, mientras mira el tablero y los indicadores. El despegue siempre genera en Sidney respeto y cierto temor, pues levantar una nave de aquella masa, en medio de un entorno hostil y con la gravedad en contra siempre es un reto, y con el paso del tiempo, al contrario de lo que se podría esperar, la experiencia no ayuda a mermar aquella sensación, aquel nudo en el estomago que se le hace minutos antes de despegar.

- Vamos a casa – sentencia finalmente, aunque “casa” para él es un termino muy ambiguo y que le dice muy poco a esta altura.

- Jejeje. Vincent rió después de apagar el intercomunicador, en su rostro había dibujado una amplia sonrisa. Se colocó los brazos detrás de la nuca, y volvió a colocar los pies encima de la mesilla. - Me hubiera gustado ver la cara de Tailor. Seguro que está que hecha humo por las orejas, alguien debió de olvidarse de añadirle el humor cuando la parió, jejeje. Miró hacia el techo, e intentó imaginar se el rostro de la estirada y borde ingeniera jefa. - Menos mal que le tengo a usted, Doctora Michels... Como mínimo tienes sentido del humor del humor Olivia.

 Jajaja, ya sabes que me animo cuando volvemos a casa-dijo la doctora colocando algunas cosas en el cajon- estoy deseando "dormir" y despertarme para el aterrizaje, necesito unas vacaciones.

Cuando el capitan me corta respondo un militar.- Si, señor.- no digo nada mas pero ya tengo claro quien mas disfruta de tener una profesional en la nave. Es comprensible, a su edad y con lo que bebe debe tener dificultades tecnicas para poner despegar y necesita profesionales que le ayuden... y ese pensamiento va en ambos sentidos tambien. Este hombre tiene suerte de tenerme a mi en el puente de mando y a la doctora siempre dispuesta a "ayudar", si no, no se que seria del pobre hombre.

Aguardo unos segundos para que el ordenador verifique que el ultimo escaneo salio tan limpio como esperaba.- Todo en orden y preparado para el despege, señor.- Informo mientras vuelvo mi asiento hacia el panel de controles. Comienzo a accionar la secuencia de inicio, preparando los motores y facilitando la tarea del despegue.

- Motores encendidos, potencia al 30 por ciento y subiendo, señor.- informo mientras preparo el resto del equipo.- Unidades de soporte vital cargandas al maximo, Tanques de oxigeno al 100%, temperatura del reactor principal optima... Todos los sistemas preparados, señor.