Partida Rol por web

Urkk aflojo las cadenas en sus brazos mientras de su garganta se oía el sonido entrecortado y gutural de sus carcajadas, dando dos pasos decididos intentó ponerse al frente de sus compañeros. Intrépido como siempre, se lanzó con un grito de guerra contra las criaturas que les amenazaban.

-¡Binatang berkepala banyaaaaaak!

Ante la situación Kaalim opta por lo mas sano: da varios pasos hacia atrás y vuelve a convocar su armadura inercial, para protegerse mejor contra sus enemigos.

Seifer ataca en primer lugar golpeando a uno de los canes y le hace una pequeña herida con su arma. Después ambos concentran su poder y escupen un poderoso aliento de fuego que debida a vuestra posición os daña a todos, aunque algunos logran esquivarlo.

Después Kaalim lanza uno de sus poderes sobre sí mismo para protegerse del combate. Mal y la Dama junto con la cadena de Urkk hacen varios ataques contra una de las criaturas y finalmente logran acabar con ella en un momento. Pero aún os quedaba una de las criaturas y esta quizá fuera algo más difícil de liquidar.

Mi espada te reducirá a cenizas, criatura del infierno. Ven a por mí, yo te daré muerte grité mientras me abalanzaba sobre esa criatura, golpeándolo como si no hubiera mañana

El desafío de Seifer suena alto, firme e incomprensible a mis oídos. ¿Cómo podía retar a un duelo a éstas criaturas? Quizás deberiera preguntárselo cuando todo acabara... entretanto me encargaría de devolverlas a su lugar de origen, fuera cual fuera.

El guerrero avanzó hasta la criatura y se dispuso a atacar 

El orco recogió con agilidad su cadena enfrentándose a la criatura que aún quedaba en pie. Con un movimiento brusco la cadena voló hacia atrás y luego hacia adelante como si de un látigo se tratase.

Seifer retó en duelo a esa criatura infernal y le asestó un gran golpe, la criatura se lo devolvió mordiendole pero por suerte la armadura bloqueó el daño. Después el resto de sus compañeros se aunaron para atacar a la criatura y en un alarde de movimientos acompasados y habilidosos lograron dar muerte al can y poner fin a aquel encuentro.

Esos dos bichos del infierno no habían supuesto mayor peligro para los aventureros.

Después de aquello visteis como Rosenight se ponía muy nerviosa y como la loba poco a poco se hacía un ovillo y empezaba a aullar al techo. Instantes después la pobre criatura gimió y murió. La pena se veía en su rostro, estaba claro, algo grave le había sucedido a Drainee. 

Creo que hemos perdido a una compañera- dice Kaalim al mirar la reacción del lobo- estos animales suelen tener un vínculo con su amo, de tal forma que si algo les pasa a ellos, el animal también lo siente.

Drainee... dije al ver cómo su lobo moría. ¿Qué le habrá pasado? ¿Estarían bien los demás?

Debemos continuar, a lo mejor ya somos los únicos que quedamos en pie en la torre

Al guerrero le dolió la pérdida de Drainee, le había prometido que cuidaría de la loba y parecía que era ella la que había necesitado protección.

Había conseguido llevarse bien con el animal, incluso habían llegado a tener un cierto vínculo.

Movió la cabeza en señal de respeto y de despedida, y se dispuso a seguir hacia delante

Urkk no prestó mucha atención a la loba. Pero espero pacientemente a que sus compañeros intercambiarán impresiones. Miraba con algo de curiosidad al animal, quizá preguntándose si le había alcanzado el aliento de fuego de los canes. 

Pronto perdió el interés por la loba y se entretuvo en los cadáveres de los perros. Comprobó si estaban muertos o no para rematarlos. Abrió ligeramente sus fauces mirando con curiosidad dentro, comprobó su pelaje con la mano y trato de medirlos con brazas. Luego se levantó y miro alrededor, buscando en general por la habitación en busca de la llave de la otra peurta de verde o de cualquier otra cosa que llamase su interés. 

Me arrodillé junto a Rosenight y susurré una plegaria al gran Dragón.

-... que sus cenizas se guarden calientes hasta que el fuego sea eterno y el gran dragón vuelva a reinar- mascullé para mí. Acto seguido acaricié el pelaje de la loba y me levanté. Miré en derredor y escruté las paredes de toda la habitación; aunque en aquella pocilga no parece haber nada de valor o mínimamente útil.

La torre se cobraba a su primera víctima en mi presencia. No había otra explicación posible a ésto y por ello era necesario darnos toda la prisa posible en derruirla. Evitando mirar al cuerpo del animal, me decido a encontrar cualquier manera de proseguir nuestro camino para acabar con ella.

En aquella habitación no parecía haber ni un solo objeto. Nada de nada, ni tampoco los canes tenían algo que fuera de utilidad, así que ibais a salir de allí cuando Mal Carlsson encontró una extraña grieta en la pared. Os llamó a todos para que la comprobaseis y de pronto, sin saber bien que es lo que tocasteis una puerta secreta se abrió hacia una nueva sala.

Era extraño que no hubiera nada en la habitación. No era normal que hubiera una habitación que sólo se utilizara de perrera. Aunque todo era posible en aquella maldita torre.

Ya se disponían a irse cunado Mal encontró algo raro en una pared. Cuando se acercaron a investigar encontraron una puerta secreta...bien hecho Mal

Un nuevo camino se abre ante nosotros- dice Kaalim- avancemos pues en el orden anterior y vayamos con cuidado.