Partida Rol por web

—Los procesos de evacuación suelen llevarse a cabo cuando se da la orden en los sistemas de megafonía de los cruceros... está hecho así para que los tripulantes se deslomen mientras los altos cargos abandonan el barco en pequeñas naves lanzadera. Ya sabes: siempre hay gente más importante que otra gente cuando hablamos del Imperio.— estas últimas palabras sonaron especialmente amargas, y se golpeó un par de veces el mentón con el índice escuchando el plan de Naomi. Ese plan iba a salir mal (porque no lo había hecho él), pero el suyo posiblemente hubiera acabado saliendo peor así que dió una palmada.

—Bien, me parece un plan decente, entonces lo haremos así: me dirigiré dentro a hablar con esos guardias y les diré que unos prisioneros se han escapado y que se necesitan refuerzos inmediatamente, que no se ha anunciado por megafonía para evitar armar un escándalo. En cuanto salgan... tratad de noquearles. Sí, ya sé que tu plan no decía eso, ¡pero si se dan cuenta rápidamente de que no existe tal llamada a las armas podrían dar la alarma!— dijo mirando ahora a la guardaespaldas—. Luego podremos dividirnos y que Kale y Snargle bajen abajo a intentar encontrar ese conden, ese conben... ¡ese cacharro! Si lo encuentran, supongo que la señorita Natasha podría hacer lo que sabe para sabotearlo.

–Es mucho mejor– Los ojos de Naomi brillaban como los de un niño al que le habían dicho que podía comer toda la tarta de chocolate y nata que le entrase en su estómago. Por algo Cyrus era el capitán. Era un gran hombre.

Kale miró a sus compañeros, le parecia bien el plan.

-Entonces debemos tratar de hacerles una emboscada a los guardias, ubicarnos de forma que no nos vean y darles por la espalda de ser posible.Luego yo y el orejudo-  habló refiriendose al Goblin- entraremos al sector y  buscaremos que se de la explosión, pero eso no quita que el sector  de máquinas este lleno de gente, lo cual no es que  ayude mucho porque alguien nos puede ver.. Pero bueno,  sí se trabaja con riesgo , se hará con riesgo.

Concluyó Kale, mirando de reojo  hacía atrás algo paranoide que no vinieran guardias o algo más.

—Voy adentro. Si no vuelvo o no salen en cinco minutos...— dejó un par de segundos de silencio mirando a sus compañeros con intensidad—. ¡...entráis ahí y me rescatáis!

Y volvió a abrir la puerta para perderse por ella.

Lo que pocos sabían es que desertó apenas unas semanas antes de que le fueran a ascender a oficial y tras llevar a cabo la instrucción necesaria para dicha labor. Era un líder nato (aunque bastante bocazas y desenfadado) y aparentemente sus superiores se habían dado cuenta... y creyeron que ofreciéndole algo de poder se le iría esa tendencia al 'buenismo' que tan mal vista estaba en el Imperio.

Acercándose con paso decidido pero temblando por dentro les hizo un gesto a los dos guardias que patrullaban por aquella plataforma, un gesto apresurado y bastante serio mientras aceleraba el paso para llegar hasta ellos. —¡Soldados! Ha ocurrido una emergencia que requiere de refuerzos de manera inmediata. Los prisioneros de la nave interceptada hace unas horas han causado un motín en las celdas y han noqueado ya a dos soldados y a un ingeniero... ¡debemos reagruparnos y actuar antes de que alguno de ellos se nos escape de manera definitiva! Preparad vuestras armas mientras nos dirigimos allí, no hay tiempo que perder.— dijo usando el tono más autoritario que sabía poner, que aunque no era gran cosa sabía que muchas veces los soldados del Imperio preferían obedecer que actuar en contra de ese oficial tercer primo carnal de un Agregado Imperial al que nadie conoce pero que hunde tu carrera si le haces un mal gesto

-Espero que no me toque sacarte- dijo Kale simplemente deseandole suerte al capitan

Miró el reloj mientras murmuró poniendose en un lugar ciego por si tocaba golpear cabezas: "espero funcione"

Los guardias se quedaron mirando a aquel oficial que de pronto aparecía dando órdenes. Luego se miraron extrañados entre ellos. Uno de ellos estaba al lado de Cyrus, el otro permanecía al otro lado de la plataforma. El que estaba junto a Cyrus enarcó una ceja:

—¿Pero qué estás diciendo? ¿Qué dejemos la vigilancia de las calderas para reforzar a todo un regimiento que hay en la nave? ¿Por unos fugitivos?

Una sombra de duda se formó en su rostro. Más que una sombra se diría una nube negra.

—Identifíquese oficial.

Pero lo preguntó mientras se separaba un par de pasos levantando su rifle hacia Cyrus. Lo malo es que el capitán sabía que al otro lado de la pasarela el otro soldado había hecho lo mismo.

Por la puerta entreabierta, Natasha escuchó lo que se cocía y se decidió a actuar. Entró en tropel, como si estuviera escapando de un ejército de demonios y se paró en seco al ver a los tres oficiales. Soltando varios exabruptos, giró sobre sus talones y se dirigió de nuevo a la puerta por la que había entrado, no sin lanzar antes una mirada furibunda a Cyrus. ¿O quizá era un reto? En cualquier caso, no se iba a quedar allí parada. Tenían que salir de allí cuanto antes, el amor y la libertad la estaban esperando.

—Mierda, mierda, mierda...-iba diciendo como un mantra mientras trataba de escabullirse de la sala antes de que la echaran el guante y fueran los guardias los que recibieran el de Naomi y compañía.

—Pero... ¿qué demonios?

Si la situación ya parecía rara el ver a Natasha había dejado ya totalmente aturdido al soldado. Su compañero, desde el otro lado de la pasarela, acertó a gritar:

—Oye ¡que se escapa!

Lo cual hizo que el guardia que estaba junto a Cyrus todavía parpadease un momento confundido, pero finalmente se lanzase a la carrera tras Natasha mientras el otro, todavía con el rifle en alto, parecía dudar entre seguir apuntando a Cyrus o seguir a su compañero.
 

Desde antes Kale habló  con el Goblin le pidió que se hiciera al otro lado de la puerta. Kale   se tocó el pecho y rebusco en sus ropas sacando una cuerda  de hilo fuerte, era delgada, pero no fácil de romper. Le pidió al Goblin que tomara una de las partes de la cuerda y el tomo la otra, cada uno en una parte de la puerta esperaron, dejaron pasar a Lady Blackbird y luego tensaron la cuerda para hacerle zancadilla al guardia y que callera de bruces.

Luego de que se caiga trataré  de inmovilizarlo  saltandole encima y golpearlo para dejarlo inconciente.

El corazón de Naomi se paró cuando Natasha hizo lo que ella misma estaba pensando hacer. Afortunadamente, las cosas parecía que iban a ir mejor de lo que le había ido a Cyrus. Cuando por fin la sangre comenzó a fluir de nuevo, la gladiadora vio la trampa que el goblin y Kale habían preparado. Era inteligente... y si caía al suelo ella se encargaría de que aquel mamonazo no se levantase de nuevo.

A veces las argucias más raras son las que mejor funcionan. Así que cuando Kale y Snargle extendieron la cuerda y el guardia salió simplemente ¡se cayó al suelo! Luego todo fue muy rápido: Kale golpeó la cabeza del guardia nuevamente contra el suelo y antes de que nadie pudiera darse cuenta estaba enrollando al soldado como si una araña en su tela se tratase a una velocidad que dejó a todo el mundo pasmado.

En el interior el guardia que vigilaba a Cyrus no tenía demasiado claro que sucedía. La puerta se había cerrado al salir su compañero, así que se había decidido a aproximarse para ver mejor que pasaba. Estaba acortando distancia a través de la pasarela pero aún se encontraba a unos diez metros de la posición del capitán del Búho (y de la puerta). Su fusil, sin embargo, había bajado un poco la posición de apuntado porque debemos reconocer que aquella cadena de acontecimientos estaba siendo cuanto menos extraña.

–¡Cabrón! ¿Crees que tú solo puedes conmigo?– Naomi vociferó –No te acerques, mamón. Tienes miedo ¿eh?

Aquellas voces intentaban llamar la atención del guardia y de Cyrus. Esperaba que el capitán convenciese al otro tipo para ir a por ellos. Para dar más realismo a la escena, la gladiadora, entusiasmada por la ensalada de bofetadas que se aproximaba, incluso cogió un mosquetón y lo disparó al aire

–¡Has fallado, inútil!

Sin embargo, el entusiasmo de la joven y la alegría por imaginarse a sí misma golpeando repetidamente al otro guardia hizo que pareciese cualquier cosa menos una pelea real.

Su cerebro fue demasiado lento para entender el plan de Natasha hasta que vió como el otro guardia salía corriendo detrás de ella. ¡Qué gran idea! Tanto que debería haber sido suya... Vió conteniendo una sonrisa como el guardia desaparecía a través de la puerta y supo que, una vez ahí, pocas cosas le salvarían de lo que le esperaba al otro lado.

—¡Malditos rebeldes!— escuchó el griterío de Naomi y también le pareció una buena jugada. ¡Así podrían atraer al segundo fuera y desde ese punto noquearle de manera segura!

Una lástima que sus reflejos habían sido (otra vez) más rápidos que sus pensamientos y ya tenía el rifle en alto, apuntando al guardia que se acercaba a paso ligero contra él. ¡Bang!

—¡Eres imbécil!— pensó para si mismo mientras su dedo ya estaba pulsando el gatillo

A veces las cosas se descontrolan. El mejor de los planes va sobre ruedas y ¡zas! descarrila.

No quedaba claro si aquello estaba descarrilando o era simplemente una genialidad. El caso es que tras reducir de forma primorosa al primer guardia lo del segundo fue... más sucio. El disparo a bocajarro de Cyrus lo pilló desprevenido. El tipo todavía tenía el fusil medio levantado pero ese medio le costó la vida.

¿Y abajo?

Pues por suerte abajo las calderas hacían mucho ruido, el suficiente al menos como para que nadie se hubiera percatado de los disparos. Pero el que había realizado Naomi en su emocionante representación de 'fugitivos en lucha' había resonado por los pasillos de metal. ¿Atraerían la atención de alguien?

Fuera como fuera ¡era el momento de actuar!

Kale escuchó el disparo y la acción de Naomi que básicamente era como sacar la lengua y salír corriendo, es así como miró al Goblin y dijo "eso no es bueno para el sigilo de nadie, a ver como esconden esos cuerpos,  no hay tiempo que perder.... vamos orejudo"- le dijo al goblin- "A ver si podemos hacer mágia mecánica"

Kale habló en terminos no muy técnicos pero entendibles, y haciendole una seña al goblin  y a los demás entra a la sala de máquinas con  su uniforme de ingeniero.

El lugar estaba lleno de gente como había notado. Kale no comprendía como el ingeniero y su amante  se encontraban aquí  para hacer sus cosas, ciertamente no le encontraba lógica.

¿Qué había hecho? ¿¡Qué había hecho!? ¡Le había disparado allí mismo! Por todas las nubes de gas del Azul, ¿¡es que acaso era idiota? Cyrus Vance definitivamente lo era, pero dicen que la temeridad y la genialidad a veces van de la mano... y ese no era uno de esos momentos, sin duda. El disparo había ido bien, pero ahora tenía que sacar al tipo de allí sin que abajo se diesen mucha cuenta de lo sucedido y debía hacerlo rápido.

Se agachó para coger al tipo por las piernas y comenzar a arrastrarlo pegado a la pared para que desde abajo quizá se viese un poco menos. Se estaba lamentando absolutamente de haberle dejado fuera de combate de una manera tan ruin mientras otra vocecilla en su cabeza le decía "Eh, ¡ahora eres un forajido!". Y uno tenía que mancharse un poco las manos para escapar... aunque haría todo lo posible porque no fuese con la sangre de un cadáver: él no era un sucio perro imperial.

Además, las manchas de sangre en la ropa se limpian fatal.

Tras superar el deseo inicial de arrancarse la lengua, Naomi actuó con celeridad. Pisando el trasero del soldado, arrancó la chaqueta del uniforme y se la puso por encima a Natasha.
–Te queda enorme y no es un gran disfraz, pero servirá para que los colores de tu ropa no destaquen. Vamos

La guardaespaldas espero a que su señora se pusiese en marcha antes de hacerlo ella. Mientras caminaba y tú de señal a casa para que siguiese a Kale. Su magia podía ser útil allí, mientras que quizás Cyrus necesitase de su fuerza y agilidad. Desde abajo de lanzó una mirada significativa acompañada por un gesto de mentón al capitán.

La cabeza le daba mil vueltas. Demasiado jaleo, estaban haciendo demasiado jaleo. Pero no pudo lanzar un conjuro que amortiguase el ruido así que aceptó a regañadientes y regañamuelas que Naomi le endosase aquella chaqueta que apestaba a sudor y sala de máquinas. Luego miro a Cyrus y lo vio enredado con el cuerpo. 

—Vance, déjame a mí-se dirigió a él en susurros mientras se ponía en posición en la puerta-. Naomi, coge un arma y así simuláis los dos que sois los guardas que montan guardia. ¿Es ése el depósito que hay que sabotear?

Su mente empezaba a calibrar qué tipo de conjuro emplear. Observó los tanques que alimentaban a la bestial maquinaria y se concentró en buscar lo que el ingeniero había señalado en su carta. Tras unos preciosos segundos viendo el panorama halló el punto débil. Afianzó sus pies y adelantó las manos, juntando ambas, sólo con ambos índices extendidos igual que cuando era niña y jugaba a combates simulados con pistolas. Luego empezó a canturrear, invocando la fuerza del aire y el viento. Sólo que no iba a provocar ningún remolino ni nada por el estilo. 

Sus compañeros empezaron a notar una leve corriente, o varias que parecían confluir en Natasha y enronscarse en su cuerpo. Sus cabellos se movían por la acción del viento pero de forma muy sutil. Con la vista fija en el punto que había hallado gracias a la reveladora (en todos los aspectos) carta, apuntó con sus dedos y dejó fluir la magia. Mientras estuvo concentrada, canalizó a su alrededor el aire, convirtiéndolo en viento y comprimiendolo, para después liberarlo en forma de un único proyectil invisible que cruzó raudo la instancia buscando el punto de impacto. Si impactaba, saltaría el chapucero empalme y abajo se generaría el suficiente jaleo para salir rápidamente y buscar el Búho.