Partida Rol por web

- Negativo- 

Fue la extraña respuesta que recibió el mago. El Clérigo tenia claro cuál era su rol, y no era hacer daño, estaba simplemente trabando en el combate al arquero, por molestar, esperando que el tanque del grupo activara sus cualidades.

Ahora le tocaba reponer salud, que para eso estaba ahí. Si fallaba el golpe, bien podía morir uno, sí albana su maza y clamaba….

- !Path iluminalo!- grito al tiempo que volvía la vista atrás.

Y un rayo de luz rápido e intenso cubrió desde el cielo al mago haciendo que prácticamente volviera a estar con la salud entera. 

Gruñí.. uno de los cambiabormas tendría ocasión de atacarnos. Había que elegir el blanco de modo que no se les diese la opción ni a intentarlo.

Uno de los cambiaformas había sido impactado por la magia... cuanto antes liquidase al otro, tanto mejor...

Apunté la ballesta recién cargada, y la saeta voló buscando "chicha"....

Maladarim tomó la determinación de disparar al cambiante usando de nuevo su poderoso hechizo^[1] aun a riesgo de que ello generara todavía una amenaza de agresividad mucho mayor. O bien aquellos arqueros tenían menos vida que sus compañeros humanos o el hechizo había sido más potente; porque la vida del cambiante bajó a cero, haciendo que el cuerpo saliera despedido unos metros hacia atrás.

Joli decidió que era mejor proteger la vida de su compañero que rematar a aquel enemigo. Las dos opciones tenían sus ventajas y sus inconvenientes. Fuera como fuera Maladarim pudo sentir una suave ola de calor recorriendo su cuerpo mientras su barra de vida recuperaba casi la totalidad de sus puntos^[2]. 

Mientras tanto el arquero había logrado cargar un nuevo disparo; pero la flecha salió desviada y se perdió en la espesura del bosque. En ese momento Brummbar aprovecho para disparar una nueva saeta con su ballesta y terminar por derrotarlo.

Por desgracia pudieron ver también como otros tres enemigos cargaban hacia ellos. Dos humanos con espadas y un cambiante más con arco que parecía dispuesto a disparar desde su posición...

- ¡¡ Matadlos !! - Desde su atalaya Aher Uñalarga gritaba cargando también su arco. No sabéis muy bien hacia quien iría dirigido aquel grito... ni hacia quien aquella flecha. 

Primera parte del combate liquidada... y con un ojo en el tipo que estaba en el árbol, no fuese que nos la jugase, y en los otros tres... un arquero y dos de Cac... habría que elegir bien los blancos... Como siguiese así, el PJ se quedaría bizco para arriba y abajo...

No pedí tiempo; procedimiento de recarga de ballesta a toda prisa...  Por ventura, parece que tendría tiempo para hacerlo, con dos compañeros bloqueando el paso a los tres enemigos.

-¡Ánimo, que somos más!!

En mi fuero interno esperaba no tener que llegar al cuerpo a cuerpo, porque el daño que podría hacer con la espada... podría ser meramente testimonial

- No nos confiemos, y ataquemos rapido. Esperamos a que se acerquen los dos humanos…-

Contestaba a viva voz el clérigo. Que por otro lado sonreía por los cuatro costados. 

Tras ver con satisfacción como mi ataque acabó con la vida no pude hacer otra cosa que regodearme - quien acompaña a quien ahora, ¿eh, sargento Fenton? - dije medio en alto tras el alarde de capacidad destructiva.

Pero la cosa no había acabado y si bien el hechizo en sí parecía bastante poderoso, el consumo de PM también lo era por lo que a ojo contaba que le quedaba como mucho otro disparo en su estado actual. Así que decidí esperar a tener los objetivos más claros. Me moví ligeramente para cubrirme con la empalizada mientras, de reojo, controlaba al topo por si acaso decidía jugárnosla.

"¡Yo los retengo, acabad con ellos desde la distancia!" - Grite a la vez que cargué contra los enemigos con el escudo alzado, con la intención de interceptar los golpes y que los demás pudiesen preparar sus ataques.

Agol se acercó hacia ellos que en cuanto lo vieron se lanzaron al ataque. El primero fue el arquero que aprovechó una apertura que dejaron sus dos compañeros a la carrera para lanzar una flecha hacia el cambiaformas que logró impactar en uno de los hombros. Por suerte su armadura logró bloquearla, haciendo que no sufriera ningún daño.

Preparado como estaba no le costó demasiado usar primero su escudo para detener el fuerte espadazo desde arriba que aquel humano le había lanzado y después su espada para bloquear el ataque del otro bandido que buscaba hacer un corte en la pierna.

Por ahora parecía que el guerrero había logrado atraer hacia si todos los ataques de los enemigos. En ese momento una flecha surcó el cielo y se clavó en el suelo al lado del arquero. Aher había disparado hacia los bandidos.

— ¡¡ Traidor !! — Grito el arquero que parecía cambiar su objetivo hacia su hasta ahora compañero en la atalaya...

Joli Zaint clérigo al servicio de Dios Path, del sendero de Luz, corrió en pos de su compañero animal, y procuro trabar al otro guerrero, de manera que no tuviera fácil acercarse a sus compañeros a distancia.

Sabia que su rol no era hacer daño, pero menos valía una piedra. Y teniendo en cuenta que de momento estaban todos prácticamente “enteros”, prefería guardar sus oraciones para otro momento.

Silencioso e imponente como era, lanzo la maza contra el cuerpo del guerrero enemigo. Al menos no podrían concentrarse del todo en hacer un golpe efectivo contra su compañero. Que por otro lado, parecía mucho bien preparado para aguantar los envites del combate. 

El objetivo de esta Quest era contactar con Aher .... y ahora peligraba, en tanto en cuanto se había descubierto y convertido en objetivo de los bandidos. Eso me dejó claro a quien debía disparar la siguiente saeta; podía optar por apoyar a quienes ya estaban empeñados en la lucha Cac, o ...

... Así que decidí atacar al más lejano, el arquero. Con la ballesta cargada tras un turno de darle al manubrio (entiéndase bien la frase), apunté al lejano tirador...

... y la saeta se fue a ver mundo, lejos de su objetivo, seguida de una serie de exhabrubtos por mi parte....

-@#%&3@KAbrón...@#€%&SuPadre....

Tras ver como se encaminaba esta siguiente fase del combate decidí salir de la cobertura al ver que, efectivamente nuestro contacto estaba de nuestro lado.

- Cúbrete Aher - grité totalmente metido en mi papel y después de debatir interiormente si valía la pena gastar esos PM o esperar otro turno para ver si empezaban a reponerse, alcé el báculo de nuevo y como ya había hecho anteriormente y disparé contra el arquero más lejano, aunque esta vez sólo salió un único proyectil.

Viendo que el arquero cambiaba de objetivo hacia nuestro contacto, corrí ignorando a los dos guerreros que tenía al lado y ataqué al arquero.

El grupo parecía que todavía tenía que coordinarse un poco antes de poder decirse que sabían como luchar juntos de forma efectiva. Mientras el sacerdote analizaba la situación aprovechando para realizar una defensa activa y Bruumbar recargaba su ballesta, el mago lanzó su último proyectil disponible con el mana que le quedaba^[1]. El arquero que se encontraba unos pasos atrás, y aunque parecía que su disparo iba a ser para Aher, el poderoso ataque del mago hizo que cambiara de objetivo.

Agol lo había visto, y fue directo hacia él, dando un golpe tratando de captar su atención... por desgracia no fue lo suficiente poderoso y el cambiaformas logro soltar su flecha cuando le quedaba menos del veinte por ciento de vida. El disparo fue certero, aunque gracias a la sanación recibida hace poco no supuso la muerte del mago.

Los dos guerreros también cambiaron su objetivo con el aumento de agresividad generado por el mago, haciendo que su vida bajara hasta cero. Cuando la barra de vida llegó a cero apareció una nueva barra de vida de color verde, completa. Según la guía del juego perder puntos de esa vida era preocupante... ya que ni siquiera las curas actuales del sacerdote podían recuperar esos puntos...

Aher en ese momento lanzó una nueva flecha que impactó directamente en el arquero, haciendo que ahora si... todos sus puntos de vida descendieran a cero.

Mierda... suele pasar... ahn ido a por el mago... han detectado que puede ser el más peligroso en este nivel de juego, y...

Cargué la ballesta apresuradamente, y con esta todavía a la altura de la cintura, disparé al etiquetado como Bandido Humano 1; teníamos que eliminarlos... o pasaríamos a perder un compañero en no mucho tiempo...

-Vamos! hay que liquidarlos en este turno!!

- Mierda Mala no, pero que… Atacad. No podemos dejar que nos sigan golpeando -

El Clérigo estaba atónito, en cuestión de segundos habían echo push sobre el mago y le habían bailado la vida. Pero aun estaba ahí, notaba que la nueva barra de vida era distinta.

No debía dejar que le volvieran a atacar. Así que siguiendo con su naturaleza, golpeo con la maza contra el humano bandido 3. Si no contaba mal, le quitaría unos pocos puntos de vida. 

Se sentía culpable, su rol era el de sanar, y no había podido hacer nada por su compañero. No era justo. Seguro que era por la conexión. 

- Pero que... - fue lo único que logré decir cuando vi que todos los enemigos se enfocaban en mi recibiendo, en un momento, el total de daño de los PV que me quedaban.

Entonces hice lo único que puede hacer un mago de nivel 1, sin PM y con dos enemigos cuerpo a cuerpo atacándole - ayudadme que me matan - supliqué mientras alzaba el báculo para intentar defenderme de los golpes - ¡quitadme el aggro!.

Sin embargo, había aprendido un par de cosas interesantes del sistema - hazed algo, por el amor de Path.

"¡Pero cubrete!" - Le grité al mago mientras ayudaba al clérigo a rematar al bandido 3.

El mago usó su báculo a modo de escudo y lo cruzó delante de sus enemigos para que en caso de ser atacado, al menos pudiera tratar de salvar la vida. Brummbar usó su habilidad tiro rápido; y pudo ver como sus velocidad aumentó considerablemente durante el tiempo que le costó cargar un virote y apretar el gatillo. El resultado fue que dejo al Bandido 3 con un 33% de vida.

Joli y Agol centraron sus ataques tratando de eliminar al otro bandido. Por desgracia no fue suficiente y tan solo lograron dejar la vida del bandido bastante similar a la del otro.

Por su parte los bandidos cambiaron de objetivo. El que había recibido el disparo de Brummbar fue directo hacia él. Por suerte su armadura de cuero fue suficiente para un tajo que podría haberle causado bastante daño. El ataque de Agol y la inactividad del mago parece que fue suficiente para cambiar de nuevo el agro del bandido hacia el guerrero, que fue quien más daño logró hacer. Su espada rozó primero por la cota de mallas con un sonido metálico, pero finalmente el filo llegó a una zona expuesta y aunque no fue mucho daño, el cambiante pudo ver como su barra de vida volvía a bajar.

El combate continuaba.

 - Menos mal - pensé cuando los guerreros dejaron de atacarme para centrarse en los demás, sin embargo el combate no había terminado y no estaba dispuesto ha hacer nada que hiciese peligrar los puntos de vida crítica que aún conservaba enteros.

Aún así estaba emocionado, hacía tiempo que no encontraba un juego en el que tenía que ponerte serio des del primer momento, y eso siempre era bien recibido, esa emoción, ese miedo a morir si se hacían mal las mecánicas, ese placer al acabar el combate... ese sensación "old school" tan de moda. Y por ese motivo, me mantuve en mi sitio, atento por si tenía que defenderme de nuevo pero sin alejarme, por si acabo ese movimiento causaba algún tipo de atención en los bandidos.

Su... joder!!! Tenía a uno de estos encima, y menos mal que la coraza de cuero me salvó el pellejo.... pero la suerte no puede durar siempre, y puesto a elegir, entre quedarme recargando y llevarme otro intento de tajo, quizá con mejor suerte... o intentar otra cosa, elegí lo segundo.

Rápidamente, o todo lo rápidamente que pude, dejé la ballesta y saqué la espada. Tal vez debía dedicarme a defenderme con ella, y esperar que otros acabasen con mi atacante.... pero... no era mi estilo...

Con un grito grutural, intenté el ataque...

... eso,... intenté.