Partida Rol por web

Si en su primer golpe parece dar muerte al que se quería llevar a Khaled a Dios sabe qué, en su segundo, destroza literalmente el brazo derecho de uno de los que pelean contra Agneta. El pobre diablo casi cae al suelo del trompazo, al no llevar armadura ni nada Jaume le hiende medio brazo y retuerce, haciéndole una sangría en las "cuerdas" del brazo. El campesino tira su arma y se lleva la otra mano al brazo intentando en vano detener la hemorragia.

- Ahh!, - grito al ver como el cuchillo sale despedido de mi mano. Los ojos se me abren como platos y presa del terror me agacho y retuerzo intentando evitar los golpes de los endemoniados, mientras empiezo a rezar un Ave Maria...

Agneta está desarmada bajo el dintel de la puerta de entrada a la cabaña que está abierta de par en par con tres enemigos justo en frente, el de su izquierda no consigue acertarle mientras que uno de los adversarios de Jaume que está con el pecho destrozado intenta en vano alcanzarle. El otro campesino que se bate con Agneta utiliza bastante mejor su horca y blandiéndola de un lado a otro apunto está de dar a la gitana que en el último momento esquiva ambos golpes. El último que se enfrenta a Agneta tiene el brazo derecho destrozado y aunque parezca increíble, el loco- porque no puede denominarse de otra manera- en lugar de huir se lanza a por la mujer y trata de golpearla con su brazo izquierdo sin éxito. El brazo del campesino empuñado como arma vuelve a surcar el aire pero ahora no alcanza al caballero en ninguna parte de su cuerpo mientras que el último de sus enemigos y el más entero lanza el palo desde abajo pasando lejos el golpe pero desde arriba lo hace descender con tal velocidad que golpea al caballero en toda la cabeza, dándole un castañazo de aupa que podría matar casi a cualquiera, por fortuna, la celada del caballero era de una factura excelente, y consiguió salvar la vida al caballero, dejándole sólo con un ligero dolor de cabeza.

Turno 10

Orden:

Diêgue  muerto

Jaume

aldeano 4 muerto

aldeano 15 muerto

Valentí muerto

aldeano 12 muerto

adelano 18 -7 morirá en 3 asaltos

aldeano 3 muerto

aldeano 9 -6 PV inconsciente morirá en 4 asaltos

aldeano 13 -8 pv corazón dañado, morirá en 2 asaltos

Agneta 10 PV herida en el abdomen, desarmada

aldeano 8 muerto

aldeano 17 muerto

aldeano 5 -7 pv morirá en 3 asaltos

Khaled 1 PV, inconsciente

aldeano 10 muerto

aldeano 16 7 pv herida en la pierna trabado en combate con Agneta

aldeano 1   4 pv costillas rotas - 50 % ataque, correr mod daño 1d2 herido trabado con Jaume

aldeano 6  muerto

aldeano 2 5 pv herido (mitad bonus) 1d2 trabado con Agneta

aldeano 7 3 pv, brazo tendones afectados, herido. Mitad de Bonus al daño.trabado en combate con Agneta

aldeano 14 4 pv herido desarmado brazo inutilizado cortado, armado con su brazo trabado con Jaume

aldeano 11 traba combate con Jaume

aldeano 20 muerto

El bastonazo que golpea el yelmo fáceme ver las estrellas... necesito acabar con aquestos herejes, e facerlo ahora!!!

Novamente, agotado por el devenir del combate, opto por atacar solo a dos de los enemigos, justamente a dos de los que enfrentan a Agneta para librarla de oponentes!

Por enésima ocasión, la Crucífera surca el cielo e rasga la panza de uno de los que enfrenta a la zíngara; el mandoble sigue su mortífera ruta hasta aplastar violentamente el brazo de otro de los oponentes de la muller... pienso que he abatido a los dos y que ahora solo queda uno que se oponga a ella!

Dios obraba a través de aquel caballero, de eso no cabía ninguna duda. Él se estaba bastando para dar matarile a uno tras otro de aquellos endemoniados. Ahora de un par de golpes de hombro mandó a uno junto a satanás hendiéndole la tripa hasta la empuñadura de la espada y luego tras arrancar la espada lanzó un grito y en una pirueta digna de ver, seccionó de cuajo el brazo de otro con tal fuerza, que el aldeano cayó a plomo diríase que muerto.

Estupefacta, veo como dos de los tarados caen bajo la hoja del señor, salpicando de sangre todo a su alrededor.

-Gracias santísima, - susurro al tiempo que intento retroceder escabulléndome en el interior de la cabaña, mientras saco el pequeño cuchillo de cabo de ciervo que uso para cortar carne. Si algún otro me intentase atacar pararía con él.

El único de los que luchaba contra Agneta que se mantiene aún en pie al ver a la mujer internarse dentro de la cabaña mete medio cuerpo e intenta golpearla en forma de puñetazo sin éxito. El campesino que intenta golpear a Jaume con su propio brazo cercenado vuelve a intentarlo pero la mano pasa rozando el casco del caballero. Sólo quedando uno ileso en combate con el caballero y batiéndose con extrema ferocidad, dándole un palazo en la pierna y otro en el pecho, dejando al caballero sin resuello por un momento.

Turno 11

Orden:

Diêgue  muerto

Jaume

aldeano 4 muerto

aldeano 15 muerto

Valentí muerto

aldeano 12 muerto

adelano 18 -8 morirá en 2 asaltos

aldeano 3 muerto

aldeano 9 -7 PV inconsciente morirá en 3 asaltos

aldeano 13 -9 pv corazón dañado, morirá en 1 asalto

Agneta 10 PV herida en el abdomen, desarmada

aldeano 8 muerto

aldeano 17 muerto

aldeano 5 -8 pv morirá en 2 asaltos

Khaled 1 PV, inconsciente

aldeano 10 muerto

aldeano 16 -7 pv morirá en 3 asaltos

aldeano 1   4 pv costillas rotas - 50 % ataque, correr mod daño 1d2 herido trabado con Jaume

aldeano 6  muerto

aldeano 2 -5 pv morirá en 5 asaltos

aldeano 7 3 pv, brazo tendones afectados, herido. Mitad de Bonus al daño.trabado en combate con Agneta

aldeano 14 4 pv herido desarmado brazo inutilizado cortado, armado con su brazo trabado con Jaume

aldeano 11 traba combate con Jaume

aldeano 20 muerto

Pierdo el aire momentáneamente mas no puedo permitirme claudicar... non ahora que tan cerca estoy de acabar con ellos!

- Aaaaaargh! - Rujo a la par que aqueste montante busca la sangre infiel, ávido de segar las ánimas de los adversarios! 

Ahora sí que el combate definitivamente se decantaba para el bando de los justos. El caballero segó trigo con su montante y cortó el abdomen y pinchó un brazo para mandar a otro campesino con Barrabás y a un segundo dejarle el brazo hecho una pulpa sanguinolenta y muy debilitado, aunque en pie no obstante.

Al ver como al caballero abre las tripas al que venía hacia mi, me recompongo y decido atacar al que sólo hiere en el brazo aprovechando que está distraído, - ¡¡aaahhh!!, - grito con una bravura inusitada en mi, y le hundo mi cuchillo hasta el mango en su barriga, notando como mi mano se llena de sangre caliente.  

Luego retrocedo atenta a cualquier otro enemigo o ataque inesperado...

El aldeano que luchaba contra Jaume ve con sorpresa cómo el cuchillo se hunde en su vientre y poniendo los ojos en blanco se desploma definitivamente.

El aldeano  que lucha contra Jaume intenta de nuevo acabar con él pero su ataque es francamente lamentable. Ahora tan sólo queda en pie la aberración fanática que peleaba con su propio brazo vuelve a estrellarlo contra la lóriga del caballero, abollándola en un lado más.
 

Turno 12

Orden:

Diêgue  muerto

Jaume

aldeano 4 muerto

aldeano 15 muerto

Valentí muerto

aldeano 12 muerto

adelano 18 -9 morirá en 1 asalto

aldeano 3 muerto

aldeano 9 -8 PV inconsciente morirá en 2 asaltos

aldeano 13 muerto

Agneta 10 PV herida en el abdomen, desarmada

aldeano 8 muerto

aldeano 17 muerto

aldeano 5 -9 pv morirá en 1 asaltos

Khaled 1 PV, inconsciente

aldeano 10 muerto

aldeano 16 -8 pv morirá en 2 asaltos

aldeano 1   4 pv costillas rotas - 50 % ataque, correr mod daño 1d2 herido trabado con Jaume

aldeano 6  muerto

aldeano 2 -6 pv morirá en 4 asaltos

aldeano 7 -5 pv morirá en 5 asaltos

aldeano 14 4 pv herido desarmado brazo inutilizado cortado, armado con su brazo trabado con Jaume

aldeano 11 -5 Pv morirá en 5 asaltos

aldeano 20 muerto

Exhausto, al límite de mis fuerzas, vuelvo a embestir, acaso por última vez, a los dos últimos contendientes que, de nuevo con la gitana al costado, enfrentamos! Pardiez que caigan ya!!!

- Aaaaargh! - Rujo mientras fago volar la feroz espada contra los herejes!!! 

A pesar de querer enfrentar a los dos, el cansancio hace mella y solo alcanzo al que me atacaba armado con su brazo derecho al que, en esta ocasión, secciono limpiamente el único miembro del que disponía y con el que esgrimía el otro... gruesos chorros de sangre brotan de la sección ¿¿¿Acaso haya acabado con él??? 

Presa de un terror incontrolable, grito con todas mis fuerzas y apuñalo por dos veces en el pecho al único desgraciado que queda aún con vida.

-AAaaaaaa!!

La sangre me salpica la cara y la ropa mientras el cuchillo entra y sale de su cuerpo

Cuando despacharon y mandaron al suelo a los dos que tenían delante fueron a arremeter con la espada y con el cuchillo para darse cuenta de que estaban solos. ¡ERA INCREÍBLE! habían conseguido acabar con una turba fanática que les cuatriplicaba en número y que no se rendía hasta caer muerto o moribundo.

Entonces se dieron cuenta de que el cántico sólo se oía a lo lejos en el centro del pueblo, donde se escuchaban también tambores de lo más siniestro. Allí cerca de ellos yacían Diegue, Valentí muertos y Khaled muy malherido. También en contrásteis que varios aldeanos se habían despojado de sus máscaras o se les habían caído y otros las llevaban puestas cuando cayeron. Por fin apareció Joan tirado cerca a vuestras espaldas muy cerca del río. Joan y Khaled estaban desmayados pero vivos, por suerte.

Los cánticos se detuvieron y escuchásteis gritos que venían del pueblo.

El amargo sabor de la Victoria: Nobles rondallas alabarán aquestas gestas en que vímonos envueltos!

El campo de batalla, cubierto de un amasijo de cadáveres plañideros, vísceras, huesos y que efluvios también, emanando todos et cada uno dellos nauseabundos hedores que non facen más que ofender mis narices et que todavía más las de la moza...

Entre los cadáveres distingo los de nuestros caídos de Besalú y el de Moureau y aún tengo tiempo de entonarles una breve oración y más quisiera poder ofrecerles el Santo enterramiento que bien merecen!

Por suerte, el fiel escudero Khaled aún resiste et que, por lo que parece, el de Sabastida también aguanta... busco en rededor a mi buen Coceador cuando cuenta me doy del cese de los escalofriantes cánticos y de los gritos que llegan de la turbadora Navata:

- Aprisa moza... - me dirijo a la buena Agneta que, contra todo pronóstico, logró sobrevivir donde otros cayeron! - ...atiende al Khaled, non sabemos cuánto durará el reposo del que gozamos!

Atisbo el horizonte, en dirección al poblado, tratando de discernir el sentido de los gritos que oímos et que si una renovada horda de herejes vuelve a azotarnos! 

Caigo de rodillas, con los brazos a los lados, pues la fuerzas me fallan. Miro a mi alrededor, hipnotizada por la visión de lo que allí acontece. El suelo lleno de cadáveres. Muertos por todas partes. Las moscas y el olor a sangre lo impregna todo. Y por encima de todo ello, en el centro, una figura se alza inmune, el caballero Jaume.

Poco a poco vuelvo a ser consciente de mi misma, del dolor de mi herida, de los compañeros muertos, y las lagrimas lo cubren todo con su niebla. Me acerco temblorosa a Diègue, y a Valentí, y con la mano les cierro los ojos. Luego sacudo la cabeza y acudo junto a Khaled, y sorprendida de que siga vivo trato de ver si sangra por alguna parte. Sin saber muy bien que hacer, le doy unas palmaditas en la cara, - vamos amigo, despierta, - y con amargo pesar recuerdo que el que se encargaba de los heridos era el bueno de Valentí.

Al oír las palabras del caballero, le miro y encojo los hombros en signo de desconocimiento, - no se cómo está, pero está vivo mi señor.

Luego soy consciente del cese de los cánticos, y me incorporo asustada. ¿Vendrá otra oleada de endemoniados?

Khaled estaba vivo pero no respondía a los intentos de Agneta por despertarle, simplemente estaba exhausto. No quedaba más remedio que llevarle a cuestas y lo mismo con el de Sabastida que se había desplomado del caballo y estaba igualmente inconsciente.

Aparentemente la ceremonia había terminado o se había hecho una pausa al menos. Mientras montábais a los dos inconscientes como podíais para llevároslos de allí, vísteis cómo se acercaba una mujer desde el pueblo a una buena distancia con la cara tiznada de negro y al ver la masacre empezó a gritar como una posesa y salió corriendo de vuelta al pueblo.

Ahora teníais la posibilidad de enfilar el camino real y alejaros de toda aquella locura, de aquel maldito pueblo de Navata y continuar el viaje, quizás encontrar otra aldea y recuperaros o por el contrario, ir al centro de aquella locura y acabar con todos los adoradores del demonio y quizás darle algún sentido a esta locura.