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Dragon Age: Las Cenizas de la Ruina

8. La Angustia

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20/12/2011, 15:11
Gabrielle

Mientras Wynne y Lynn discutían, Gabrielle comía galletas a carrillos llenos. No se había dado cuenta de lo hambrienta que estaba hasta que su mentora mencionó el asunto del desayuno.

Ooooh —gimió, poniendo los ojos en blanco—, están riquísimas. ¿Las haces tú misma, Wynne?

Tenía unas ganas locas de contarles lo que había pasado, pero también se quería hacer un poco la interesante.

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20/12/2011, 15:16
Wynne

Wynne sonrió y se cruzó de brazos.

Se supone que eso es lo que se asocia a la gente de mi edad, ¿no?—respondió—. Coser calcetines y hacer galletas.

Entonces levantó un dedo en ademán didáctico.

Solo que como a mí me gusta ir en contra de las  modas, no las hago, las conjuro.

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20/12/2011, 15:38
Lynn

No te hagas de rogar—insistió Lynn tras haberse comido la cuarta galleta en el tiempo que a ti te había tomado comerte una y media. Al parecer el hambre canina inicial había remitido pero las ansias por escucharte, no—. ¡Cuenta!

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20/12/2011, 15:40
Wynne

Wynne había cogido de una encimera una jarra llena de leche, al parecer había previsto que estarías muerta de hambre. Tras tomar también una manta cuidadosamente doblada de esas que se echan sobre las rodillas, colocó la jarra en la mesa, suspiró y miró a Lynn.

Ya que no existe forma humana de que me hagas caso, Lynn. ¿Podrías al menos sentarte?—dijo—. Te aseguro que las galletas conjuradas no salen corriendo para evitar que se las coman.

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20/12/2011, 15:48
Lynn

Al ver que finalmente Wynne se daba por vencida, Lynn asintió tragando el trozo de galleta que tenía en la boca y miró a ambos lados.

La anciana se había sentado en la otra silla de la mesa frente a ti así que no tenía sitio pero encontró fácilmente la solución: caminó hasta una de las esquinas de la habitación y arrastró un mullido sillón con orejeras que la Encantadora Superior solía utilizar para enfrascarse en sus lecturas.

Para cuando llegó a la mesa estaba con la lengua fuera, eso sí.

Listo—dijo con una sonrisa jadeante mientras se sentaba—. Ahora soy toda oídos.

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20/12/2011, 16:41
Wynne

Así me gusta, pequeña—sonrió Wynne acariciando el pelo de la clériga—. Que me hagas caso por una vez.

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20/12/2011, 16:41
Lynn

Lynn miró a Wynne en un principio devolviéndole la sonrisa, pero entonces parpadeó con gesto a medio camino entre confuso e interrogante.

Los ojos le bailotearon, se le pusieron en blanco y la cabeza le cayó hacia atrás, con lo que se quedó recostada en una de las mullidas orejeras. Dormida como un lirón.

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20/12/2011, 17:10
Wynne

Nunca subestimes el poder de sugestión de unas galletas...—suspiró Wynne desdoblando la manta que se había puesto sobre las rodillas y echándosela a Lynn por encima. Al parecer la Encantadora Superior también iba en contra de la moda en eso: No era una ancianita friolera—. Ni de un mago que conoce conjuros de sueño.

Te miró y esbozó una sonrisa de disculpa.

Lo siento hija, me temo que vas a tener que contar esa historia dos veces—admitió—. Pero es que tu amiga ya me estaba preocupando desde buena mañana.

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20/12/2011, 17:22
Gabrielle

Gabby dejó de masticar aunque tenía la boca llena y miró con sospecha a la media galleta que aún tenía en la mano. Después extendió la mirada de sospecha a Wynne y siguió masticando lentamente, como si esperara caer profundamente dormida de un momento a otro. Como no lo hizo, se terminó la otra media y bebió un buen trago de leche.

Fue... difícil. Estuve muy asustada —dijo con una gravedad echada a perder por el bigote que la nata de la leche le había dejado en la cara—. Fue un demonio de la pereza el que me acechaba en el Velo. Era muy poderoso, te hacía sentir pequeña e insignificante. Que no podías hacer nada y todo estaba perdido.

Se frotó los brazos como si de repente tuviera frío.

Era una sensación horrorosa.

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20/12/2011, 17:31
Wynne

Wynne estaba acariciando aún el cabello de Lynn y murmuró algo con gesto grave. Luego se giró otra vez y, cruzando los brazos sobre la mesa, te escuchó.

Sí, todos son así... —dijo con aire resignado—. Es como una miasma que los envuelve.

La anciana torció el gesto, casi podías adivinar en lo que estaba pensando. Había sido precisamente un Demonio de la Pereza quien había tratado de atrapar a la Guarda y a sus compañeros cuando se habían lanzado en un intento desesperado por salvar el Círculo. Wynne había estado allí, junto a ella, lo sabía muy bien.

En realidad sólo son tan poderosos como tú se lo permites—añadió—. Recuerda que se alimentan de tus sentimientos. Un Demonio de la Pereza normalmente trata de ahogarte en desazón, en apatía y en que no merece la pena hacer nada ni esforzarse. Si sucumbes a ello, es cuando le haces más fuerte.

Se inclinó hacia adelante.

El miedo te hace precavida, el exceso de confianza puede llevarte a dar un patinazo fatal—sonrió—. No es malo tener miedo siempre y cuando no dejes que te domine. Pero dime, hija, ¿qué tenemos que ver Lynn y yo con ese Demonio de la Pereza?

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20/12/2011, 18:00
Gabrielle

Gabby bajó la mirada como si se avergonzara.

El Demonio de la Pereza se disfrazó de ti. Supongo que para que bajara la guardia, o para que obedeciera lo que él dijera sin rechistar. Dijo que eras realmente tú, que habías entrado en mi Angustia para ayudarme. Sabía que no eras tú, pero me costó un montón discutir contigo —admitió Gabby, contrita—. Pero no era el único ente del Velo que me encontré. También había un espíritu interesado en mi, que en un momento dado se disfrazó de Lynn.

Miró a su amiga y se sonrió al pensar en Astucia.

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20/12/2011, 20:01
Wynne

¿Se disfrazó de mí?—repitió Wynne levantando una ceja y lanzando un suave jadeo incrédulo—. Qué tipico. Siempre andan creyendo que los lazos que nos unen a las personas son nuestro punto débil.

La anciana rió entre dientes como si estuviese hablando de lo increíblemente tonto que le parecía alguien. Algo te decía que en el fondo era así.

Nunca entenderán que es justo al revés. Los vínculos con aquellos a quienes queremos son precisamente nuestro punto fuerte, ¡porque les conocemos mejor que nadie!

Wynne parecía aliviada y a la vez satisfecha de lo que escuchaba, y te pellizcó un moflete cuando te mostraste contrita como dando a entender que comprendía que te hubieras sentido así pero que habías obrado correctamente. No obstante, al escuchar hablar de la otra entidad del Velo, los ojos de la anciana se volvieron tan grandes como las galletas de la bandeja.

¿Había un espíritu?—parpadeó—. Oh, Gabrielle. Eso es... es grandioso, ¡es fantástico!

Hablaba con el mismo ímpetu alegre con el que Lynn había hablado de los nevaditos. No recordabas haber visto a tu calmada maestra tan contenta.

Bendita Andraste, estoy rodeada de gente maravillosa—dio una palmada con las manos y las mantuvo juntas mirando un instante hacia arriba, luego te miró de nuevo a ti—. Es reconfortante; primero Mahariel, ahora tú. Tenéis algo especial. Sois de esa gente que, con mirarla, algo te hace pensar que está destinada a algo especial. Que un Espíritu del Velo se interese en ti es una bendición.

Volvió a cruzar las manos sobre la mesa.

Si se disfrazó de Lynn supongo que lograste hablar con él, ¿por qué lo hizo? ¿Qué clase de Espíritu era?

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20/12/2011, 21:15
Gabrielle

A Gabby se le hizo un nudo a la garganta. No sabía si decirle a Wynne la propuesta que le había hecho el espíritu. ¿Y si su maestra lo desaprobaba? No podía vivir con ello, ni ser obligada a elegir entre Astucia y Wynne. 

Era un Espíritu de Astucia —replicó—, quería que me enfrentara a Pereza usando la inteligencia en vez usar la fuerza bruta.

Gabrielle se tocó el músculo fofo de sus brazos.

¡Como si yo tuviera de eso! —dijo, riéndose de si misma—. Aunque lo que superó todas mis expectativas fue encontrarme un segundo espíritu. ¡Uno de Fe, Wynne, nada menos! ¡De los más poderosos que hay! Aunque Astucia no sabía muy bien a qué jerarquía pertenecía, dice que surgió por las emociones de esta última Ruina.

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20/12/2011, 21:45
Wynne

Un Espíritu de la Fe... —Wynne sonrió maternalmente como quien recuerda algo magnífico—. Eres de las pocas personas que se me ocurren capaz de atraer a uno de los espíritus más esquivos y que encarnen el lugar más alto de la jerarquía del Velo.

Emitió una risita cascada y feliz, aunque de pronto parpadeó y su gesto se tornó asombrado.

¿De la Astucia?—repitió—. ¿Has hallado uno de los nuevos espíritus? ¡Eso es más que excepcional, Gabrielle!

El rostro de la anciana se iluminó.

Es normal que no sepa a qué jerarquía pertenece, "acaba de nacer" como quien dice y que ya se haya interesado por tí es... oh, eres muy afortunada, pequeña—sonrió. Yañadió casi con expectación:—. ¿Te pidió que lo aceptases?

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20/12/2011, 22:00
Gabrielle

Gabby se empezó a poner colorada, anticipando la respuesta.

Sí... —admitió con timidez, al creer que a Wynne le parecería bien—, le pregunté si le volvería a ver y me contestó que lo haría si yo quería. Que temía mucho que enseñarme, y que quería aprender cosas de mi.

El arrebol de sus mejillas se tornó del granate al rojo brillante.

Aunque no sé que puedo enseñarle yo a un espíritu de Astucia, precisamente.

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21/12/2011, 00:32
Wynne

Wynne pensó un momento tus palabras y al instante la luz del entendimiento se hizo en sus ojos.

Debe encontrarse perdido—dijo—. Un tipo de espíritu que tiene su origen en la reciente Ruina debe poseer un conocimiento muy confuso del mundo, tal vez quiera que se lo muestres. La astucia no tiene nada que ver con esa situación.

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21/12/2011, 00:50
Gabrielle

Gabrielle se rascó la mejilla.

Pues no ha elegido precisamente a una mujer de mundo —se quedó pensativa durante unos momentos, miró a Lynn y volvió a mirar a Wynne mientras empezaba a sonreír—. ¡Ahora todo encaja! 

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21/12/2011, 00:56
Wynne

Wynne sonrió con tus palabras, luego ella misma se sirvió una taza de leche.

Nada ocurre por casualidad—dijo—. Todo tiene un motivo, hija. Tal vez en un principio tu cabeza no sea capaz de saberlo, pero al final tu corazón lo termina sabiendo, tu corazón siempre lo termina sabiendo. Así que dime: ¿qué es lo que cuadra?

Levantó las cejas y tomó un sorbo de la taza.

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21/12/2011, 01:08
Gabrielle

Hizo un gesto como si quisiera abarcar toda la habitación.

¡Que puedo ayudar a Lynn y ayudar a Astucia a la vez! —dijo con alegría, sin pensar en si misma—. ¿Crees que Irving me dejaría...? Oh, claro que lo crees. Por eso me diste ese consejo, ¿no?

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21/12/2011, 01:16
Wynne

A Wynne le entró la risa y tuvo que dejar la taza rápidamente sobre el plato para llevarse una mano al rostro. No llegó a atragantársele la leche pero casi.

¡Esa es mi niña!—rió—. Me has pillado.

Miró un momento a Lynn y luego volvió a mirarte a ti.

Si te digo la verdad, no me extrañaría que Irving no tuviera ya pensado de antemano que Lynn no fuese "tan sola"—dijo—. Ya te dije que cuando hace algo es por un motivo. Solo que él suele andar no un paso, si no unos cuantos kilómetros por delante de los demás. No creo que ponga objecciones pero recuerda consultárselo.

Te miró un instante con el rostro iluminado, como si de nuevo estuviese recordando algo magnífico.

Cuando Uldred fue derrotado, me sé de una maga que pese a que todavía su cabeza era un cáos de sentimientos, tuvo la corazonada de que podía hacer mucho bien si acompañaba a la mujer que había salvado al Círculo. Lo hizo, y aun a día de hoy no se arrepiente ni por un segundo de ello—dijo—. ¿Quién sabe? Puede que la vida te esté indicando algo similar ahora mismo.