Partida Rol por web

EL ANILLO ÚNICO. Parte 1.

La Reunión de los Cinco Ejércitos

Cargando editor
10/08/2015, 22:53
Beldruin

Respiraba a duras penas tratando de recuperar el resuello tras la carrera, pero al fin habían detenido al tipo. Cosa que agradecí sobremanera, no podría haber aguantado un segundo más. Al llegar apoye mis manos en las rodillas, para no caer al suelo.

No pude articular palabra, pero un tipo se encargó de hacerlo, un viejo de barba gris. Lo mire por unos segundos me sonaba de algo, entonces dijo su nombre “Gandalf” Recordé ese nombre y un viejo de ese aspecto en la gran batalla de los cinco ejércitos. Era un amante de esos orejones, nadie del que poder fiarse, aparte era un maldito mago, de esos embaucadores que usaban las palabras para engañarte.

Eso estará bien, saber qué demonios está pasando aquí. Dije a las palabras del viejo. Además podrías hacer que en ese tugurio sirvieran una buena cerveza. Luego me gire, mientras colocaba mi hacha y quitaba el yelmo. Qué pena y yo que pensaba que esta noche tendríamos algo de acción.

Cargando editor
11/08/2015, 00:40
Calántir

Calántir estaba lleno de júbilo, no sólo había conseguido detectar al peligroso cazador a tiempo, sino que había sido él mismo quien lo había apresado, Alberthorn estará orgulloso cuando lo sepa, pensó riendo interiormente. Pero su alegría no acaba aquí, cuando ve al anciano acercarse y descubre su rostro revelando que se trataba de Gandalf su emoción unida a la adrenalina que aún corría por sus venas hizo que abriera los ojos como platos y mostrara ante él una mirada cargada de admiración. Además el mago los felicitó en persona ante su trabajo y les invitó a reunirse con él, Calántir no salía de su asombro, y cuando quiso hablar le falló un poco la voz por culpa de los nervios:

- Sí - dijo mientras le salía un pequeño gallo fruto de su juventud - ejem, ejem - carraspeó para aclararse la voz - Sí, mi señor Gand..., Mith... - los nervios volvieron a hacerle mella y no lograba a discernir que nombre del mago usar - Sí, mi señor - rectificó - muchas gracias, es un placer ayudar a una persona de su categoría, encantado de haber sido de utilidad, vayamos a la taberna pues - dijo mientras se sonrojaba por culpa de sus nervios.

Luego reparó en la presencia del extraño enano que se unió al grupo sin previo aviso y cuando acabó de resoplar le dijo:

-Buenas maese enano, creo que no nos han presentado, mi nombre es Calántir, ¿puedo saber, si no es indiscreción, el motivo por el que os unisteis a nuestra persecución?

Cargando editor
11/08/2015, 11:30
Luriend
Sólo para el director

Miro al tabernero algo preocupara, no sabia si podría hacer algo, sus dotes de sanación no eran muy extensas y estaba muy nerviosa -Haré todo lo que pueda- dijo firmemente intentando tranquilizar al tabernero, pues su actitud tampoco la ayudaba ni a ella, ni a nadie.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Jope, pobre mediano :'(

Cargando editor
11/08/2015, 12:23
Beldruin

Arquee una ceja “¿Qué yo me uni a ellos?” Sonreí irónicamente.

Buenas noches Calantir, un placer. Mi nombre es Beldruin y lo cierto es que vosotros me seguisteis a mí, lo que pasa que vi que era demasiado fácil atrapar a ese tipejo y preferí  no esforzarme. Conteste algo indignado por la insinuación del chico de que me uní a ellos. Pero bueno seguramente cuando yo era un barba nueva, el chico aun ni habría nacido.

Pero gracias a un así por vuestra ayuda. Seguí a ese tipo porque salió corriendo, solo quería mantener el orden y alguien que corre suele ser porque ha hecho algo. Dije sonriéndole.

Cargando editor
11/08/2015, 18:01
El Peregrino gris

Llegáis a la taberna acompañado de Gandalf la situación es bastante triste Luriend tiene las manos ensangrentadas tras intentar sanar al mediano, en cuanto os acercáis veis que fue impactado en el pecho por un puñal y la cura de la elfa no ha dado el resultado esperado. Entre vosotros yace muerto Otho de la comarca. El tabernero impávido ante el suceso no sabe qué decir, y los pocos clientes rodean al mediano con estupor.

El viejo se presenta a Luriend me llamo Gandalf siento enormemente el suceso. Vamos no os quedéis ahí como pasmarotes (dice a los clientes) ¡LLAMAD A LA GUARDIA! Después se dirige al tabernero es hora de cerrar la taberna y buscar al enterrador, hasta entonces estaremos velando el cuerpo.

El tabernero asiente y se marcha después de cerrar la puerta de la taberna y poner el cartel de cerrado.

Os quedáis solos con Gandalf él os mira, este suceso y más deberéis de enfrentar como compañía, la carta que mandé fue para advertir a aquellos que estarían vigilantes ante los sucesos que podían acontecer en contra de los mensajeros y representantes del concilio. No sabía qué carta hacer, así que puse una que tengo en mi poder de Balin, hijo de Fundin, al señor Bilbo Bolsón. Y agregué los párrafos de los aventureros. Tampoco sabía quiénes serían los elegidos, pero ¡Sois vosotros! Hablaré con cada uno de vuestros Reyes, intendentes, superiores para que os otorguen el estatus de asistir a las reuniones restantes del concilio y permaneceréis juntos como compañía hasta que el hado vuelva otra vez a separaros... Mi misión es de advertencia no se me ha dado el poder de intervenir en los sucesos que están aconteciendo, esta medianoche se hará la ceremonia inaugural y mi presentación formal hasta entonces he permanecido oculto para no alterar lo que tenía que suceder. Un mago solo puede utilizar su poder mientras que se le otorgue hasta entonces somos simplemente meros espectadores de lo que nos rodea, aunque podemos advertir a los pueblos de la tierra media para que actúen en consecuencia del mal que se avecina.

Después se levanta os serviré unas cervezas sentaros os tengo que contar algo más que pertenece a lo sucedido, por este cazador. Después de serviros las jarras... se sienta, este cazador se llama Hunald, es un hombre del bosque que desapareció en el bosque Negro en 2954 mientras buscaba tesoros. En el bosque negro lo más seguro es que se encontrase con el Mensajero de Mordor, que lo imbuyó con una sombra de Miedo y lo envió a Esgaroth en su asesina misión. Me preguntaréis como sé estas cosas bien os diré que hace muchos años me atreví a atravesar las puertas del nigromante en Dol Guldur por segunda vez, para espiar en secreto sus planes. Lo que descubrí en aquella ocasión no es para discutirlo aquí, pero baste decir que encontré el lugar más oscuro y opresivo que antes. Me pareció que un nuevo poder se había aliado con el Nigromante, y gobernaba los pozos inferiores de Dol Guldur."

Allí es donde encontré a Thrain, el padre de Thorin escudo de roble, vagando sin rumbo y cerca de la muerte en las más negras mazmorras. Llegué desmasiado tarde, y murió antes de que pudiera ayudarle, pero con sus últimas palabras pronunció el nombre de su carcelero y torturador: el Rey del Patíbulo.

Me fui de tan maldito lugar antes de que el Nigromante pudiera espiar mi presencia, pero supe que mi visita no pasaba desapercibida. Noté los ojos del terrible carcelero sobre mí. El Rey del Patíbulo me vio, pero pareció contentarse con dejarme marchar.

Después mira a Beldruin y te dice lo siento.

Cargando editor
11/08/2015, 20:35
Beldruin

Aquel viejo contaba cosas que no podía creerme, según explicaba se mascaba un complot en aquel lugar “¿Pero que podríamos hacer nosotros ante aquello?”  Pero si los míos corrían peligro no dudaría en actuar y si tenía que trabajar con un par de orejones pues que así fuera, ya tendría tiempo para maldecir mi mala suerte.

Pero lo último me dejo helado, el viejo había estado en Dol Guldur, esquivando al Nigromante, pero lo que me hirió fue que comento la muerte del rey  Thrain, si bien lo que sabía es que era un demente, era un Señor Enano, un hijo de Durin y aquella muerte no era honorable para nadie, al menos ahora padre e hijo estaran juntos en los grandes salones “¿Rey del Patibulo” Recordaría su nombre, ahora ocupaba el primer puesto entre los que me habían agraviado. Apreté el puño por rabia.

Gracias. Por Thrain el Rey bajo la Montaña. Que encuentre la paz que no obtuvo aquí. Dije tomando la jarra de cerveza levantandola y dando un gran trago de ella.

Y bien ¿Cómo seremos útiles?¿Vigilando, observando? Prefería las cosas claras si tanta pompa ni palabrería.

Cargando editor
11/08/2015, 20:49
Varamis

La inesperada muerte del afable Otho Acebuche le entristeció enormemente, y se quedó de pie junto al pequeño cuerpo sin vida. Varamis acarició con la mano el rostro ya frío, y le susurró:

Sí man i yulma nin enquantuva? Namarië, Otho.

Las palabras de Gandalf le sacaron de su lamento, y le escuchó humildemente. Hace un rato, había dudado de si realmente se trataba del Peregrino Gris que había salido de las leyendas y canciones y se había presentado ante ellos, pero la duda se había disipado.

No obstante, Mithrandir traía nuevas realmente preocupantes. No en vano, se decía que aparecía cuando peor estaban las cosas, en los albores de la tempestad. Varamis nunca pensó que le llegaría a conocer. Pero había sido elegido, junto a los demás. –Lamento la pérdida de vuestro Rey, maese Beldruin, le dijo al enano al que había visto correr detrás del cazador y que se había unido al resto del grupo. –Mi nombre es Varamis, y los de mi pueblo hemos sufrido más que nadie el oscurecimiento del Bosqueverde el Grande, al que ya todos conocen como Bosquenegro.

Cargando editor
11/08/2015, 23:32
Calántir

La expresión de júbilo del joven explorador cambió de súbito al entrar en la taberna, su rostro se volvió de un blanco intenso; de la alegría pasó a la incredulidad, de la incredulidad a la tristeza, y de la tristeza al dolor. Calántir salió corriendo a la posición del pequeñó hobbit, y al comprobar que no era una broma, ni un mal sueño ni nada por el estilo, Calántir gritó:

-¡NOOOOO!, !Otho háblame!, te pondrás bien, ¿verdad que sí Luriend? - pero el rostro de la elfa reflejaba que nada se podía hacer para salvarlo, Calántir no pudo soportarlo más y se echó a llorar mientras abrazaba a Otho y se mecía con el inerte cuerpo hacia delante y hacia atrás - ¿Por qué él Eru?¿Por qué él? - decía mirando hacia arriba mientras las lágrimas se le derramaban por las mejillas.

Tras un instante en el que Calántir seguía sollozando abrazado al hobbit, dijo mirando hacia el suelo:

-Todo es culpa mía, yo le dije que fuera a hablar con el cazador pese a saber que era un hombre peligroso, ¡maldita sea!, tenía que haber ido yo, ¡yo debería estar aquí en el suelo y no él! - dijo mientras lloraba cada vez más intensamente con una voz cargada de ira y arrepentimiento - Juro por todos mis ancestros que acabaré con la mente malvada que organizó esto - ésto lo dijo con una voz sin alma, salida desde lo más profundo de su ser y que no olvidaría jamás. 

Luego se separó con cuidado de Otho para dejar que los demás también le presentaran sus respetos y le dijo a los demás en un tono más sereno, pero con las mejillas aún húmedas:

-Cuando venga el sepulturero yo me encargaré de cavar su tumba, le debo al menos eso al bueno de Otho; y por cierto - se volvió a arrodillar junto al hobbit, le cogió la mano y le dijo mirándolo - No permitiré que tu investigación sobre los parientes hobbits de éstas tierras caiga en el olvido, averiguaré cuanto pueda en tu honor.

Ésta era la primera vez que Calántir vivía en persona la pérdida de un compañero, había tratado poco con Otho pero había sido suficiente para que lo considerara su amigo, ya jamás volvería a escuchar ni sus bromas ni su amigable voz ni sus desinteresados ofrecimientos ante un joven bastante perdido,... 

Luego se sentó algo separado del grupo, escuchó lo que dijo Gandalf, pero por su mirada perdida y su pose estática era obvio que no prestó mucha atención; parecía mentira como pese a lo ilusionado que estaba anteriormente con escuchar al gran mago, ahora carecía de importancia para él, sólo resonó en su mente un nombre, "El Rey del Patíbulo".

Cargando editor
12/08/2015, 13:25
Luriend

Dos lagrimas rodaron por su mejillas, no conocía mucho a Otho, pero sabia que los Hobbit eran, sobre todo, una buena raza de noble corazón y perder una vida siempre era algo muy triste, más si era de ese pequeño que pensó en ayudar sin pedir nada, ni esperar nada a cambio. Miro a Calántir y negó -No te culpes, todos le pedimos que lo hiciese, incluso él se ofreció- le puso una mano en el hombro -Si piensas eso, más culpa tengo yo, lo dejasteis a mi cuidado y.... no pude hacer nada- volvió a mirar a a Otho y le beso la frente -Como bien dice Calántir seguiremos tu misión pequeño- y se levanto para acercarse a los demás.

Escucho atenta todo lo que decía Gandalf, no había oído poco sobre él y los elfos siempre habían tenido mucho contacto con él, quizás los más antiguos. No le sorprendió su historia, pues sabía de lo que era capaz el mago y mucho más, eso si le pareció muy interesante e inquietante. SE mordió el labio inferior y miro al enano -Siento su perdida- dijo al enano sin saber muy bien como dirigirse pues no los habían presentado -Siempre es horrible perder una vida, más si es de un valiente enano-

Luego se volvió hacia Gandalf -¿Así que ahora somos una comunidad? ¿y cual es nuestro cometido?- estaba un poco inquieta, derrepente todo había cambiado ¿ahora tenían una misión?

 

Cargando editor
12/08/2015, 19:58
Alberthorn

Alberthorn cerraba el grupo de vuelta a la taberna, algo le decía que la sombra había movido ficha enviando a aquel asesino, y la aparición de Gandalf, aunque reconfortante, no auguraba nada bueno.

Le saludó con una respetuosa inclinación de cabeza, no era la primera vez que había visto al peregrino gris, pero sí la primera que trataba con él en persona, sin embargo sus empresas más que aventuras eran desventuras según se rumoreaba en Rivendel. 

Ahora se encontraba junto a ellos, lo que significaba que algo importante, no para los hombres, elfos o enanos, sino para el futuro de la Tierra Media, estaba a punto de comenzar.

Es probable que La Sombra esté en marcha, sólo puede significar eso.

Al entrar en la taberna, se encontró al joven Calántir abrazando el cuerpo inerte de Otho, lleno de sangre.

Bajando la cabeza ocultó un fugaz gesto de debilidad - Otho, un alegre hobbit, una de las razas más nobles y pacíficas de Arnor, yacía muerto en una taberna de una ciudad a muchas millas de su hogar, ¿que locura es ésta? - Recuperando la compostura se acercó al cuerpo de su amigo para darle su último adiós

Nai Eru varyuva le, mellondijo el dúnadan mientras posaba su mano en el rostro de éste como despedida.

No te culpes por esto - le susurra a Calántir, el cual aún permance al lado del hobbit - no fuiste tú quien le atacó, ya has atrapado a su agresor, se hará justicia.

Creo que todos estamos en deuda con el valiente Otho, nos hemos tomado este asunto demasiado a la ligera y ha tenido consecuencias fatales, no volverá a ocurrir - dijo al resto mientras lanzaba una última miráda hacia el que hacía poco era su compañero de viaje.

Después Gandalf comenzó a hablar, y como no podía ser de otra manera, Alberthorn reunió toda la atención de la que era capaz en ese momento, para entender toda la situación que tenían por delante y cuál era el papel de cada uno en todo ésto.

El Bosque Negro...Mordor...Dol Gundur...El Nigromante...Thrain...El Rey de Patíbulo...

Sin duda La Sombra se reúne de nuevo, ¿qué espera conseguir durante estos festejos? Deberíamos partir lo antes posible, ¿quién sabe lo que tramará el poder oscuro mientras conversamos? - Aunque su experiencia le decía que las prisas no son buenas, después de tantos años había logrado recuperar la pista de La Sombra y miles de amenazas invisibles se cernían sobre la Tierra Media en su mente.

Cargando editor
17/08/2015, 19:36
El Peregrino gris

Y bien ¿Cómo seremos útiles?¿Vigilando, observando? Prefería las cosas claras si tanta pompa ni palabrería. Dice Beldruin.

Deberéis de decidir ante el consejo, se os plantearán muchas ocasiones de aventuras, seréis vosotros los que habréis de decidir en conjunto. Te dice el mago mientras mira tu cerveza.

Bien Maese Beldruin, Varamis, Calántir, y Alberthorn y Luriend vuestros nombres son conocidos por representar a vuestra raza en el consejo.

¿Así que ahora somos una comunidad? ¿y cual es nuestro cometido?-

Le responde a Luriend, vuestro cometido siempre es el mismo, erradicar el mal pero el mal se expande hacia muchas partes. Es vuestro cometido saber elegir algunas de las misiones que saldrán en el consejo y seguid manteniendo la alerta, no sabemos si habrá más percances que subsanar. 

Sin duda La Sombra se reúne de nuevo, ¿qué espera conseguir durante estos festejos? Deberíamos partir lo antes posible, ¿quién sabe lo que tramará el poder oscuro mientras conversamos? 

Nooo, no debéis partir lo antes posible Alberthorn, vuestro cometido ahora es quedaros hasta que termine el consejo, debéis de empaparos incluso hablad entre vosotros para los que no fueron a la primera reunión, y comentad los temas tratados. 

Después se levanta celebremos una brindis por Otto, coge la jarra de cerveza, nunca fue doblegado por el mal, y el mal no pudo someter a aquel cuya bondad no deja espacio para ello. Otto Acebuche es un claro ejemplo de aquel que llega a ofrecer su vida por desafiarlo, y ha contribuido hacia la paz y salvación del Reino. Intentaré que se le haga un entierro con todos los honores para ello debo de darme prisa y hablar con el Rey. Dicho ésto Gandalf se levanta y con un gesto se despide de vosotros, hasta la próxima compañeros, a medianoche será la ceremonia inaugural, pero tengo que visitar a demasiadas personas en tan breve tiempo, no creo que nos volvamos a ver en breve, ¡Por Otho! Os dice y se dirige hacia el exterior.

Cargando editor
18/08/2015, 12:47
Calántir

El joven Calántir se sintió un poco más reconfortado tras las palabras de ánimo de sus compañeros y del propio Gandalf, por lo que intentó dejar sus penas a un lado y esforzarse en escuchar lo que sus compañeros le tuvieran que decir.

Al fin y al cabo ya había conseguido su propósito al partir del oeste, había conseguido entrar en una compañía, tenía una misión importante, ayudaría a luchar contra el mal cara a cara y podría asistir y participar en las reuniones de los grandes señores; el dúnedain no se esperaba conseguir todo aquello en tan poco tiempo, por lo que debería estar notoriamente entusiasmado. Sin embargo, no era así, con gusto cambiaría todo aquello por devolverle la vida a Otho, pero no estaba en su mano hacer tales tratos. Sólo le quedaba una opción, ya era hora de convertirse en un hombre y no dejarse llevar por sus emociones; ahora mismo tenía una importante misión, aunque simpre mantendría vivo el recuerdo de Otho y las promesas que le hizo, en aquél momento tuvo que hacer de tripas corazón y dedicarse completamente a la compañía, por lo que levantó su mirada a los compañeros y dijo:

-Muchas gracias por vuestros ánimos amigos, ya me siento un poco mejor - decía mientras se secaba las lágrimas con el puño, e intentaba adoptar un pose seria y tranquila - y gracias a ti también Gandalf, prometo que no te decepcionaremos - luego levantó él también su jarra y secundó el grito del mago - ¡Por Otho! - decía mientras se quitaba la capa y cubría el cuerpo del hobbit con ella. Luego se sentó en una mesa alejada del mismo para evitar tenerlo a la vista y que la pena aflorara de nuevo en su corazón, y les dijo mirando a Luriend y a Alberthorn:

-Bueno compañeros, ponednos al día en cuanto podaís, no sé si tenéis mucho que añadir a lo dicho por Gandalf pero es mejor conocer todos los detalles que podamos.

Cargando editor
18/08/2015, 14:05
Beldruin

Al parecer habían perdido un compañero un mediano, lo lamente ciertamente dado que uno de aquellos seres fue un héroe para con los míos en la gran batalla.

Lamento la perdida de vuestro compañero, seguro estará con los suyos tomando un gran banquete y festejando. Por Otho y esos valientes medianos. Dije respetuosamente tomando un sorbo. Luego puse la jarra en la mesa.

Olvide todo los lamentos, brindis y más cosas. Según el mago, debería formar parte de una compañía, cosa que no me molestaba por si. Pero tener de compañeros un par de orejones no me agradaba. Aunque parecía que no podría negarme, si era como explicaba el mago.

Lo lamento pero yo he estado ocupado estos días, no puedo aportar mucha información. Pero aunque no me gusten un par de miembros de esta compañía, podéis contar con mi escudo y hacha. Tenía que exponer mi opinión. Así que como dice el chico ¿Qué sabéis que pueda servir?

Cargando editor
18/08/2015, 21:21
Varamis

Varamis torció ligeramente el gesto ante las palabras toscas y rudas del enano. Su propia historia era una cadeana que ataba a las razas mortaes, condenados a repetir los errores de sus antepasados. Luego miró al joven dúnadan, también de los Segundos Nacidos. Impetuoso, impulsivo, orgulloso. Pero sus lágrimas ahora luchaban por salir, y el dolor por la pérdida aún era reciente y el mediano seguía presente. -Calántir, sé que las palabras de consuelo ahora te sonarán vacías. Pero honra el recuerdo de Otho. Con el tiempo el dolor recorre distintas sendas en cada uno de nosotros. Y de alguna forma, el hecho de haberle conocido aunque sea brevemente, te hará más fuerte.

El elfo depositó su copa en la mesa. -En cuanto a esta comunidad, nuestro cometido nos será revelado en las reuniones venideras al parecer. Poco puedo aportar ahora, ya que no acudí a la de hoy a pesar de haber sido invitado. El motivo por el que solicitaron mi presencia fue la inesperada ausencia del emisario de mi rey, Thranduil. No sé si alguno de los que sí participaron puede arrojar más luz sobre el tema.

Cargando editor
22/08/2015, 13:44
D.M

LA CEREMONIA INAUGURAL

Habéis velado por Otto, y pronto será enterrado con honores, mientras que pasáis la tarde hablando de los hechos ocurridos... a medianoche, se reúne una multitud alrededor de la fuente que conmemora la caída de Smaug, frente al palacio Real. Una procesión de nobles y cortesanos emerge de la gran puerta delantera, y es recibida por los vítores y los aplausos de todos los presentes. El grupo está encabezado por Dain, el rey bajo la Montaña, y por un trío de emisarios élficos vestidos con ropajes verdes y oro. Les sigue el gobernador de la ciudad del Lago. Por último, el rey Bardo hace su aparición, seguido por sus consejeros de más confianza, todos ellos arqueros de su compañía cuando no era más que un simple capitán en Esgaroth.

El rey Bardo da un paso al frente para dirigirse a la multitud. Su corona, cincelada por los enanos, brilla a la luz de las muchas linternas. Su cuerpo es tan fibroso y duro como lo era cuando abatió al dragón, pero esta noche sus ojos grises brillan de alegría.

¡PUEBLO DE LAS TIERRAS ÁSPERAS! Hace años éramos extraños los uno para los otros, y nos ocultábamos en la sombra. Teníamos miedo a un mundo en el que mandaban los dragones, y en el que los orcos estaban libres para saquear. Y un día, nuestros peores temores cayeron sobre nosotros y amenazaron con enterrarnos para siempre, junto con nuestras debilidades y nuestras preocupaciones.

El gentío queda en silencio, mientras un anciano envuelto en un manto con capucha sale de entre los consejeros del rey y se coloca al lado de Bardo. Éste continúa hablando:

Pero entonces, las nubes que oscurecían nuestros días fueron arrastradas por el viento, y un crepúsculo rojo desgarró el Oeste. Luchamos unidos en la Batalla de los Cinco ejércitos, y unidos vencimos. ¡Hoy estamos aquí para testimoniar que desde ese día permanecemos unidos!

Mientras la multitud prorrumpe en aplausos, el anciano se quita la capucha y el manto, alzando un alto bastón: ¡Gandalf el Gris ha venido a Valle! De repente, el bastón del mago reluce como un relámpago, y tras el palacio Real, el cielo por encima de Valle explota con fuegos artificiales mágicos, lo suficientemente brillantes como para iluminar las laderas de la Montaña. Flores y árboles, candelabros y estrellas fugaces, y después una bandada de grandes águilas doradas, que explotan como el amanecer.

Cargando editor
22/08/2015, 14:00
D.M

EL BAILE DE MÁSCARAS

Al acabarse los fuegos artificiales, todos en la multitud se ponen máscaras y empiezan a entremezclarse. Los músicos echan mano al arpa y a la flauta, y la cálida noche se llena de cánticos y de bailes. Hay varios conjuntos musicales, notablemente una banda de 13 enanos (que incluye al propio Bombur), que se enzarza en una especie de batalla musical con un grupo de elfos. Si bien ambas bandas tienen estilos muy diferentes (los enanos confían más en la potencia, y los elfos en la armonía), unos y otros son igual de entusiastas, y acaban uniéndose para crear la música más extraña que jamás se haya oído en el Norte, ¡pero por lo menos se puede bailar siguiendo su ritmo!

Aquel que lo desea puede participar en un concurso de canto que se hace en la misma fiesta.

También hay juegos de azar para aquellos que no le gusta el baile, la forma más popular de juego en Valle son los dados y un juego enano muy popular, que básicamente es como el dominó, jugado con runas. También hay juegos más extraños, como apostar a qué rata saldrá primero de un laberinto, o apostar sumas de dinero sobre el color de la capucha del siguiente extraño que doblará una esquina. 

Y como no juegos de acertijos, uno de los concursos más populares entre la gente de Valle, el juego de los Acertijos, tiene lugar en un estrado. La inteligencia y el encanto son casi tan importantes aquí como la astucia: si no puedes hacer reír a la gente con tus acertijos, lo más probable es que te echen del estrado entre abucheos en la primera ronda del juego. 

Notas de juego

- Aquel que lo desea puede participar en un concurso de canto, para ello debe de tener 3 rangos o más en cantar. El NO a vencer es 16.

- Si un jugador quiere participar en uno de estos juegos de azar, tira el dado de proeza.

Éstos tres juegos también están disponibles al día siguiente.

Cargando editor
22/08/2015, 14:28
Calántir

Calántir habría estado colmado de alegría y disfrutando con el ambiente festivo si no fuera por la reciente pérdida que había sufrido, no obstante el jolgorio resultante le animó un poco y le ayudaba a superar la pérdida de su amigo. Cuando el rey Bardo terminó de hablar, el dúnedain comentó asombrado:

-Es visiblemente un hombre comprometido con su cargo, me alegra saber que aún existe gente así, me recuerda a los nobles reyes de antaño sobre los que se cuentan tantas gloriosas historias. De hecho, la historia de Bardo seguramente sea mucho mejor que la de muchos de ellos, es sin duda un gran rey - concluyó.

Luego se quedó completamente asombrado ante los fuegos artificiales, por un momento olvidó la pesadez que ensombrecía su alma y disfrutó brevemente como el joven que aún era; él nunca había visto los famosos fuegos de artificio de Gandalf y eran tan impresionantes como había oído. Luego al ver el espectáculo y la diversión que se estaba formado, Calántir sonrió y se divirtió escuchando la música de enanos y elfos, viendo las extrañas apuestas y entretenido con los acertijos que oía; pero ahora mismo no tenía el cuerpo para participar en ninguna de aquellas diversiones, y aunque estaba algo más contento y animado, había perdido parte de su entusiasmo característico. Por lo que le comentó a sus amigos:

-¡Vaya! es obvio que ésta gente sabe como divertirse - dijo con una media sonrisa, con la expresión aún un poco marcada por el dolor - yo no creo que participe en nada de momento - dijo torciendo el gesto y ensombreciendo su rostro - estoy un poco alicaído aún, pero no obstante me encantaría acompañaros a veros si alguno de vosotros decide participar en algún concurso - dijo mudando su expresión e intentando parecer más contento de lo que estaba en realidad. Además creo que deberíamos presentarnos ante Gandalf de nuevo y que nos introduzca ante el resto de los grandes señores.

 

Cargando editor
22/08/2015, 15:35
Beldruin

Asistí respetuoso al discurso del Rey Bardo, el cual había mostrado su gran valor y valía en la batalla, guiando a los humanos, convirtiendo a un grupo de campesinos en soldados valientes que afrontaron al enemigo con fuerza. Por ello merecía mi respeto.

Su discurso dio paso a el mago quien con un golpe de bastón hizo aparecer preciosos fuegos de artificio en el cielo, los mire impresionado, tenía una edad avanzada pero aquello me hacía sentirme como un niño.

Pero lo mejor vino después, los festejos, no tarde en hacerme con un pequeño barrilete de cerveza que degustaba, viendo y admirando la música de mis hermanos, aunque nos perturbaban las perfumadas melodías insípidas de los orejones. Pero no era cuestión de discutir, no era lugar, momento y además no estaba permitido. Eructe con fuerza cuando vi el juego que jugaba con mis compañeros.

Pues yo no desperdiciare un momento, no sabemos cuánto estaremos en este mundo, por lo que mejor no perder una oportunidad de divertirse. Dije a las palabras de Calántir, no conocía a ese mediano, pero de seguro no querría que sus compañeros estuvieran amargados. Vamos yo me apunto a esas runas, hace tiempo que no juego. Comente sentándome con mi barrilete y preparándome para jugar. El mago que espere, disfrutemos de la fiesta. Solté junto con un eructo mientras esperaba que se repartieran las runas para jugar y riendo.

- Tiradas (1)
Cargando editor
22/08/2015, 17:16
D.M

Mientras te acercas a Beldruim ya que es el primero en animarse a jugar a los juegos de azar... os cruzáis con algunas caras como Elstan, que fue uno de los primeros en jurarle lealtad. El alto norteño, delgado y de ojos grises, ostenta el título de Primer capitán de Valle, y tiene bajo su mando los Cuarteles reales. Tiene fama por su habilidad con la espada, y por su brillante armadura forjada por los enanos. Dondequiera que el reino se ve amenazado, allí está para defenderlo.

La gente le adora... Elstan lleva su yelmo de acero con visera en lugar de una máscara. Y una multitud de seguidores que hace difícil abrirse paso hasta él.

Hay un mercader que esta noche está en todas partes. Es un mercader de Esgaroth que partió de allí después de que el antiguo gobernador huyera de la ciudad. Ha vuelto recientemente al Norte, habiendo hecho fortuna comerciando con antigüedades y objetos curiosos. En cuanto os ve os da unas máscaras señores éste es un baile de máscaras no os puedo dejar que vayáis a él sin ellas. Os dice un tanto impresionado por no haberos proveídos para el festejo que tanto ansían la gente de Valle.

En cuanto Beldruin empieza a jugar va perdiendo algo de dinero...

Notas de juego

No hace falta hacer la tirada de Juegos de azar en oculta, ni tampoco poner dificultad.

Con un resultado entre 1 y 7 pierdes una pequeña suma.

Entre 8 y 10, gana un poco.

Con una runa de gandalf, gana 1 punto de tesoro, y con un ojo de sauron, pierde 1 punto de tesoro (o lo debe, si no tienes ninguno).

Cargando editor
24/08/2015, 14:08
Luriend

Escucho al rey, sin duda era un hombre de temperamento fuerte y de los que quedan pocos, esperemos que dure muchos años su reinado y no se colapse con el poder, que como todos saben puede llegar a corromper al más recto, ya se vio con los enanos.

Admiro los juegos de artificio de Gandalf y sonrió viendo a sus amigos asombrarse y olvidar por un momento la oscuridad de sus almas por la perdida de Ottho.

Agradeció con un gesto y una sonrisa la mascara que le tendía el mercader, pero no queriendo tomar parte en ninguno de los concursos, se separo un poco del gentío. Se apoyo en una pared, la fría piedra le reconfortaba, suspiro y miro a cielo ahora oscuro, luego bajo la mirada y se miro sus manos, esas manos que habían sido inútiles para salvar la vida de un amigo.