Partida Rol por web

Y por su parte, el Medicae no mira al grandullón ni a su idea de "todo lo que no sea matar no tiene que ver con el combate". No debía haber estado en muchas batallas de verdad. Conmbates a muerte, los que quieras. ¿Batallas? No creía. Por lo menos Uriel entendía la importancia de la planificación como miembro del orden que era; en una zona tan anodinamente regular tener información de mano para moverse podría ser la diferencia entre la vida y la muerte. ¡Y seguramente lo fuese!

-En ese caso, cada 3-4 edificios para hacer un marcaje rutinario -comentó sin demasiada pasión, como si estuviera confirmandio un hecho- Con mucho más tiempo podría hacer una planimetría decente de verdad.

Pero siguió trazando, porque ese tiempo no lo tenían, y todo lo que consiguieran podía ser bueno, aunque luego nadie lo fuese a apreciar. El Imperio se mantenía a base de gente que se negaba a aceptar el mérito del trabajo de otras personas, después de todo.

Estaba claro: Markus estaba con el grupo adecuado - el granuja sinvergüenza de vuelta de todo y el militar enrrollado - seguro que a la otra banda de pringaos un asunto como este les vendría grande, e incluso quizá surgieran reparos o dudas sobre la "licitud" de algunas propuestas.

Recurriendo al mismo código que utilizaba su camarada, Bromel propuso algunas opciones:

- Lo del furgón blindado me parece bien, aunque la propuesta de robarlo y hacernos pasar por seguratas es arriesgada, tendríamos que controlar todos los códigos y contraseñas que utilizan con la central y además, el vehículo lleva un localizador que lo sitúa en el mapa de un ordenador de la central de alarmas. Sin embargo, si le colocamos una bomba adhesiva controlada por control remoto en los bajos del blindado y la reventamos cuando hayan terminado la ronda y estén repletos de dinero podríamos inmovilizarlo y mientras los tipos esten aturdidos, hacernos con la pasta.-

el gángster de Nora Rosa hizo una breve pausa, y luego prosiguió:

- Por otra parte, como dice el dicho quien roba a un ladrón, cien años de perdón. Podriamos intentar otra cosa: asaltar una casa de apuestas antes de un gran combate de Boxeo u otro evento similar. Me refiero a una casa de apuestas ilegal, por supuesto, allí se mueven grandes cantidades de pasta y si les atracan tampoco van a llamar a la policía. Sería cuestión de buscar un sitio y vigilarlo hasta la fecha, controlar el lugar, la disposición del dinero y los guardias y en el momento propicio, entrar armados hasta los dientes y con pasamontañas para hacernos con la viruta. Así podríamos sacar unos cuantos miles sin necesidad de echarnos encima a la pasma. O sin inciar una guerra con los traficantes de armas si les robamos.-

Había oído mi historias sobre ese tipo de asuntos, y como los responsables solían acabar en los malecones de las grandes zonas marítimas con un bloque de cemento bajo los pies. No lo sé… lo del furgón blindado es algo seguro, puede ser cosa de 2 minutos bien planeado, pero compañero… esas casa de apuestas… Joder… Tuerzo el gesto al pensar en ellas. Suelen ser un autentico fortín y no tenemos personal como para abarcar todas las salidas, controlar a la gente y demás puntos que nos harían falta.

Cojo una servilleta de la mesa y con un boli sacado de mis bolsillos comienzo a hacer esquenas para aclarar las posibilidades. Una antigua costumbre que no se me despegaba.

Verás, el dinero de los bancos es asunto seguro, asegurado por las compañías de seguros que las empresas de transportes blindados contratan, y si pertenece a alguien peligroso no se molestará al perderlo, porque se le reintegrará por parte de los seguros. La policía se moverá, husmeará, preguntará y todo ese tipo de cosas, pero esa gente se aferra a un código estricto, complejo y lleno de lagunas legales de jurisdicciones, por no contar con que tenemos una de esas personas en nuestro equipo. El problema con la casa de apuestas es que a quien robemos no se va a aferrar a ninguna autoridad superior, ni norma moral alguna. Habremos mordido al pez que vive en nuestra pecera y que tiene sus tentáculos en todos lados. Esa gente… no da oportunidades, y tiene oídos en todos lados.

La servilleta había quedado manchada con flechas y recuadros sin que me hubiera dado cuenta siquiera.

Me da mucho menos miedo cabrear a la policía del lugar, a los arbitres, que a alguien que pueda disponer de semejante sistema de apuestas como para saciar nuestras necesidades económicas. Sobre todo porque estamos en su zona, con su gente, y cuando preguntásemos por las armas… Sumarian 1 + 1 y obtendrían el resultado de donde está su dinero. ¿Me seguís por donde voy?

Mi todo se había vuelto serio, preocupado más bien, pues sabia cual era el destino de quienes robaban a las grandes mafias su valioso dinero.

El gran problema es que robarles el dinero no es como robarles las armas. Una vez robado el dinero hay que ir a por las armas, y entonces ya será tarde. Si robamos las armas, cosa que no estoy sugiriendo, sería dar el golpe y volar. De la otra forma habría otro paso que nos conduciría al fondo del mar.

Deposité la mirada primero en los ojos de Cortez que observaba todo meditando muy callado y luego en las de Markus, que parecía muy calmado y frio, para luego continuar:

El punto de camión blindado seria sencillo y es atajable de muchas formas. Se puede por ejemplo buscar la ruta más sustanciosa y el punto que en ella sea más problemático. En ese lugar colocamos un coche en un semáforo delante del blindado y lo obligamos a detenerse. De ese modo dará todo el flanco a un posible ataque lateral con un tráiler o algún vehiculo pesado que lo embista y lo vuelque. Una vez tumbado, cortamos las intersecciones cercanas que den a la zona con bandas de clavos y pinchos y abordamos el camión colocando una lanza térmica o un c4 en la puerta trasera. BUM. Lo volamos y nos cargamos a los conductores, aunque sea feo, todo ello con caretas para que no nos reconozcan.

De ante mano preparamos las alcantarillas de la zona con algún sistema de arrastre por poleas. Cuando tengamos la pasta lanzamos un par de botes de humo y bajamos a las alcantarillas con ella escapando por la zona previamente reconocida y de modo que nadie vea que nos hemos metido a las alcantarillas y no sepan que ha pasado. Todo muy rapido. Calculo 120-180 segundos.

Continúo mirándolos con las cejas arqueadas.

Claro está requeriría mucha más planificación que eso, pero vamos, en cuanto a material solo serian un par de vehículos, un explosivo, las bandas de clavos y lo necesario para manejarnos por las alcantarillas, donde no hay tráfico y llevan a todos lados.

La segunda servilleta había quedado como un mapa de la ciudad, con un ejemplo grafico marcando las intersecciones y desde donde se aproximaría cada cosa.

Bueno, es solo un ejemplo, tampoco hay que tomarlo al pie de la letra. ¿Va? Pero quiero hacer ver que tomar un furgón será algo más sencillo que entrar en un local ilegal de apuestas. A mi forma de ver claro. Aunque no conozco los locales de esta zona. ¿Cómo de protegidos suelen estar Markus? Tú vives por aquí. ¿Cómo lo ves para tres hombres?

- Lo de la casa de apuestas puede hacerse, pero no habría que dejar testigos. Además, podríamos ir corriendo la voz de que han sido los Synth, últimamente andan bastante activos. Si les damos duro y rápidamente sería cosa hecha.-

comenta Bromel.

- No obstante, quizá debiéramos dejarlo como plan B y centrarnos en el blindado. Has hecho una exposición cojonuda y el planteamiento es bueno. Muy bueno. Como has dicho, no hace falta un material sofisticado ni excesivos medios. Bloquear la carretera, parar el vehículo, volcarlo, cortar las intersecciones y abrirlo. Luego nos largamos por las alcantarillas. No está nada mal. Yo propondría hacernos con una sustanciosa cantidad de explosivos sencillos y poner varias bombas en varios lugares alejados entre sí, eso crearía el caos en media ciudad y dispersaría a las fuerzas del orden. Coincido contigo en que, indudablemente, habría que eliminar a los seguratas del blindado. No podemos permitirnos dejar cabos sueltos. Por otra parte, tenemos un mes para preparar el golpe, así que podemos planificarlo bien.-

Markus miró a Cortez, que seguía silencioso.

- Por mí está bien: a por el blindado. ¿tú que piensas?-

le inquirió

Le pregunto lo que me ronda mientras miro en dirección oeste.

¿Cuanto se tarda en llegar caminando? ¿Hay transporte hasta allí?- continuo-.

Asiento ante las palabras del sereno Lucius y me dirigo hacia donde Smul tiene "acorralado" al ciudadano. Tiene cara de querer salir de allí cuando Smul lo sigue taladrando a preguntas a su modo a habitual de martillo pilón.

-Disculpe a mi amigo, si es tan amable de responder, es todo lo que queremos- intento ponerme delante de Smul- No hay problemas, no le va a pasar nada- Intento tranquilizarlo.

Cortez escuchó con atención ambos planes, si bien necesitaban las armas, reunir 50.000 tronos y eso siendo generoso, a base de casas de apuestas o de golpes a compañías banqueras fortificadas le sonaba a suicidio colectivo divertido, diversion por el recuento de municiones que se iban a gastar en ello y el ejercicio que implicaría, claro está. Sin embargo, su mente andaba en este momento más sobre el equipo Arastus, más que por simpatía, por intriga. Si bien el lugar donde había que montar la base era allí y posiblemente hubiesen instrucciones o material adicional esperándoles en el lugar, decidió llamar a sus compañeros del otro equipo.

- Señores, opino que lo mejor será hacer un pequeño pause nocturno y llamar al otro equipo e informarnos de como proceden nuestra agenda. En cuanto al cash, personalmente creo que necesitaremos un milagro para que este plan funcione, ya que 50000 tronos no caen del cielo... - Miró al cielo.- ¿Verdad Emperador? - Dijo como si en parte esperara ese milagro.

Bueno, quizás nos estemos lanzando demasiado rápido. Me parece correcto poner puntos intermedios a los planes de actuación. Lo que he comentado antes ha sido algo especulativo, un boceto como estas servilletas. Digo mostrando los papeles arrugados mientras los coloco en el cenicero y les prendo fuego. Esperemos al contacto a ver que dice y si tiene algo suculento, y entonces evaluamos la situación. Quizás sería bueno hacer una llamada y preguntar qué tal van los otros, y después, podríamos dar una vuelta viendo cuales serian nuestras posibilidades. Era algo sencillo y pausado, que nos daría tiempo a pensar que podíamos hacer, algo con calma y sangre fría.

     El hombre parece apabullado por vuestra actitud y por vuestro aspecto. Parece a punto de echar a correr. Tras un par de segundos de pensárselo, comienza a contestar a Uriel, la cual le parece, con mucho la menos amenazadora de los dos que le han abordado. - Ya se lo he dicho a su amigo, está... bastante lejos. Casi tartamudea ya. - En la otra punta de la zona Arastus en dirección oeste. Me gustaría poder ayudarles mas, pero...  

- Como veáis. A ver qué tal les ha ido a los del otro grupo. La mezcla de prepotencia y egos desmesurados puede resultar explosiva, menos mal que el doctor pondrá algo de seso de por medio.-

les comenta dando por bueno el plan de consultarles.

- Lo que más me jode es que nos hayan encargado montar todo este cristo sin darnos casi nada de viruta. ¿Esta gente se cree que tenemos en casa una máquina de hacer billetes?.-

dice.

Desde luego así cualquiera monta nada.. ¿Verdad? Estaba muy de acuerdo con la afirmación de mi compañero, y compartía su punto de vista. La inquisición era como era, y siempre solía actuar con una mezcla de actitudes que se encontraban entre el "Se muchísimo más de lo que tu llegarás a saber del mundo" y "Vivo tan alto que no me entero de cómo funciona todo por abajo".

Era algo muy típico, pero contra lo que no se podía lograr nada. Así que esperé muy pacientemente a que la respuesta del otro equipo llegara vía comunicador, o no llegara, nunca se sabía. Quizás ahora mismo no quedaba ninguno y el último había muerto ensartado por su compañero mientras lo mataba. Una mezcla explosiva de testosterona descontrolada y potenciada por los esteroides y una gran carga de hormonas femeninas con tendencia a la revolución y descontrol constantes. ¿Quien podía vivir entre ello? Realmente complicado.

La madre que lo pario... A este paso estamos jodidos. Comento escuchando la comunicación abierta en todo el canal de banda ancha. Este mamon... Por cierto, ¿Donde estará el contacto? Comienza a tardar, ya debería haber vuelvo con alguna noticia.

Saco una varia del paquete y lo dejo sobre la mesa, para que todos puedan tomar uno si quieren. El cenicero comenzaba a estar lleno, y aun manteníamos nuestros vasos con hielos frente a nosotros. Cada vez había más tensiones, pues el otro grupo parecía no querer saber nada de nosotros, y nuestro contacto tardaba. El tiempo pasaba y todos nos preguntábamos que podríamos hacer a continuación.

Propongo esperar al contacto y ver que tiene para nosotros. Y entonces, calibrar. Yo no perdería más tiempo y dinero en ir con el otro grupo, no nos quieren ahí, y mi política es la de evitar la confrontación innecesaria. Y ese tipo... es lo único que busca. Quizás la próxima vez que llamen es para decir que lo han matado. Bueno, entonces, ¿Como lo veis vosotros? ¿Os parece bien esperar al contacto y luego hacer una exploración de la zona?

Le cojo el comunicador a Uriel para responder y después le hablo al ciudadano.

-Oye tú, me estás cansando, o me dices donde está exactamente la capilla o te abofeteo con tus brazos- increpo.

Cuelgo el comunicador y se lo doy al médico.

-Encangarte de esto en adelante, por favor, me aburren- mientras giro la cabeza y me encaro con el transeunte- dime que quieres cobrarnos, vamos, alégrame el día.

- Que les follen. Nosotros nos lo montaremos por nuestra cuenta, parece que les da bastante igual lo que hagamos y cómo nos vaya, la verdad.-

dice Markus ante la prepotencia de las palabras de su lejano compañero. Mentiría si dijera que les echaba de menos.

- Será mejor que esperemos como dice el colega Entreri. Josef llegará en breve. Espero.-

dice echándose otro pitillo.

Cortez estaba un poco cansado de las contestaciones malhumoradas de Smul, pero no se iba a manchar las manos a menos que se lo pusiera un poco más en bandeja. Alli la cosa andaba un poco parada y dificil.

- Personalmente pienso que Smul habla solo por Smul, y que el resto colaborará si es que el cerebro les late un poco. Si no, el Inquisidor dará cuenta de ellos. - Encendió un pitillo.- Por lo que a mi respecta, creo que deberíamos explorar las opciones aquí y luego allí, yo no hablé de unirnos a ellos, sino de ver la otra zona. Pero logicamente, esto es un equipo, asi que vosotros diréis.