Partida Rol por web

Thardus comienza a aburrirse soberanamente... mira con desprecio a Matt.

-¿Vas a desactivar ésta trampa hoy o tendremos que usar el cuerpo del mediano para obstruirla?

-Ei chicos, una cosa.-dice a los dos semiorcos- ¿Habeis explorado la zona detrás de esa puerta abierta?- les pregunta señalando en dirección contraria, hacia la puerta abierta de la izquierda.*

-Si...+contesta escuetamente+ Ahi murio Argot. Hay un esqueleto y poco mas... Pero no seguimos por ese pasillo hasta asegurarnos que no dejabamos algo importante atras. +señalando la puerta trampa. Mira los trabajos de Matt, y menea la cabeza+... Creo que valdra la pena. Pienso como tu, enano, una bestia no pone tantas trampas. Debe haber algo interesante alli...

Esqueletos eh? ..... animales y personas destripadas ....  esto ya lo e escuchado anteriormente ....

Los esqueletos ... son guerreros sin cerebros que en la mayoría de de veces son comandados por seres inimaginables sacados de la peor pesadilla que pudieras imaginar ....  sea lo que sea que aquí se encuentre .... trabaja para el caos ... y donde hay caos .... estaré yo para  contrarrestarlo .... 

El humano permaneció allí mismo, donde el cadáver de su antiguo compañero de aventuras se encontraba, el dolor por esa pérdida era grande, pero el odio hacia quien perpetró ese hecho... era peor.

-Mmm, que bonito es el techo...- dice el gnomo, que se apoya a la pared con los brazos cruzados y que mira hacia arriba para luego mirar inquisitivamente hacia el pícaro que está trabajando en la trampa.

No he conseguido desactivar la trampa, dice el elfo tras andar trasteando cerca de la puerta.

No creo que podamos obstruirla ya que al parecer sale aire frio del suelo, las paredes y el techo... Quiza deberiamos ir por el otro camino.

Miro a Thardus. Otro inutil. Un pensamiento de ira brota en mi corazon, pero trato de calmarlo... no es su culpa ser tan estupido... es elfo. Asi que recojo el "detector" mediano, sosteniendolo en una mano.

-No queda otra... habra que ir por ese lado, tal vez encontremos algo con que bloquear la salida de aire.... Ah si... Ojo con los esqueletos...

Dice esto moviendo significativamente el palo con el cadaver.

-... no tenemos tantas pertigas para todos...

Con el irrespetuoso "detector" adelante, arrastrandolo por el suelo que va a pisar cuidadosamente, el joven semiorco avanza... Su expresion es serena, pero algo le preocupa. Algo relacionado con el lugar.

*Quien mantiene estas antorchas?

Cuando llegan al final del pasillo, dobla por el.... viendo otro pasillo, con numerosas habitaciones.! Se detiene, algo sorprendido por la enormidad y complegidad de este lugar para ser una mera cueva desde arriba...

*... que es esto... deberiamos haber preguntado...?

-Ey, los que fueron a la taberna... quien les dijo de este lugar y que les dijeron? +pregunta, todavia mirando...

Zephyrus avanzaba dos metros por detrás de Oboldo, alerta y expectante a lo que pudiera ocurrir en cualquier momento. En ese momento intentaba atisbar desde la distáncia lo que hubiera en la sala que tenían delante, que ensanchaba el pasillo. A la pregunta del semiorco contestó:

-Pues fue el enano zapatero, aquel que dicen que tiene tan malas pulgas. De hecho nos dio un mapa indicando la ubicacion de la cueva.- lo dijo con tono inocente, como si no se diera cuenta de la acusación que implicaba la información que acababa de dar.

Thardus mira con una media sonrisa como Oboldo arrastra el cuerpo del mediano a modo de detector de trampas.

"¡Es una ocurrencia realmente divertida!"

A la respuesta del gnomo, se gira hacia él:

-¿Pero cómo lograsteis que os diera el mapa? ¿Así sin más? Explicad toda la historia. -espeta.

-Eee, aaa...- el gnomo se paró en seco al sorprenderse de la reacción de Thardus.- Bueno, le preguntamos si nos podía ayudar con lo de los asesinatos y él nos dijo que había una cueva donde no entraba nadie y que él creía que se escondían bandidos- dijo como si quisiera exculpar al enano de cualquier sospecha. Ya se imaginaba al semiorco derribando la puerta de la zapatería-. Luego nos dio un mapa de la zona donde marcó el lugar de la cueva. ¡Nada más!

-Uhm... ¿Y a ninguno de vosotros se le ocurrió pensar que podía ser una trampa? -aparece una media sonrisa en su rostro- ¡En fin! ¡Solo hay un modo de averiguarlo! -señala al fondo del pasillo- ¡Sigamos adelante!