Partida Rol por web

Posada a mitad de camino entre Aguas Profundas y La Puerta de Baldur.

Tiene una pequeña arena de combate... a un módico precio.

Yarkiam siguiendo su camino de fe decide pararse a tomar algo a mitad de camino. A lo fondo parece ver una posada. Entra en ella. Nada más entrar dice:

Venid Amigos, convertiros a la gracia de Pelor. Esuchad las miserias que ha soportado, los milagros que ha concecido. Convertiros al Dios del Sol.

-Vaya! ya no dejan ni tomarte una copa en paz!, dice una servidora des del fondo de la taberna...
(lo que daria por un respiro señor...)(en voz baja)

Posadero!!! Un vaso de agua y un palillo!!!

Un palillo?(leve sonrisa), Virgil seguia sumergido en sus pensamientos despues de aquella pequeña interrupcion, mirando fijamente hacia el suelo, como si esperara que de un momento a otro apareciera de la nada la respuesta a todas sus plegarias.

Después de muchas noches de caminata por los densos bosques, Airem siente la presencia humana. Será una buena ocasión para pararse a descansar. -habla para sí misma mientras acaricia el lomo de su pardo lobo- Entonces podrás cazar tranquilo, y yo aprovecharé para informarme de las nuevas noticias que pueda haber.

Dicho esto, Airem despide a su lobo con un susurro que solo él puede entender y se encamina hacia esa senda transitada. La gente que sigue su mismo camino o que simplemente van de paso se para un momento al observar sus ropajes, pero siguen sin importarles. Al cabo de poco, Airem llega a la posada.

Al entrar en 'El Ojo del Tuerto', Airem hace una leve inclinación a modo de saludo a los que se han girado para observar la recién llegada. Posadero, puedes ponerme un vaso de vino? -pregunta al enano mientras se acomoda en la barra. Entonces se gira hacia el clérigo por curiosidad y le escucha mientras espera la llegada de su vino.

Con tranquilidad y paciencia recorre el sendero que bajo sus pies, los carros y los ciudadanos marcaron en un antaño. Su viaje le lleva camino a una posada en mitad un nuevo día en su aventura privada la de aprender el mayor conocimiento de las artes y crecer en ellas, atento a cada movimiento como si fuera un entrenamiento el ir recordando cada objeto animal o persona que ve a lo largo de su camino, va observando únicamente con el movimiento de sus ojos, su cabeza sigue firme hacia el frente por el camino, una de sus manos la lleva agarrada al asa de la mochila que esta rodea su hombro y la otra mano la lleva justo encima de su bolsa del dinero colegada de su cinturón.
No confía mucho en los lacayos del mal que andan suelto en cada rincón de las ciudades más hospitalarias y de mejor ambiente, siempre hay una oveja negra en cada lugar…

Esperado el momento de parar en la taberna desde que la vio a lo lejos, se adentra en ella como si fuera una celda de asesinos, sin dejarse intimidad y atento a todo desconfiando de todos. Sinceramente al entrar lo que le sorprende y llama mas su atención es el posadero en sus viajes jamás había conocido a un Enano y sintiéndose atraído por su interés humano se acerca a este, no sin quitar la vista de encima a todos los lugareños de la taberna y dando por sentados quienes eran extranjeros y quienes no, por el tamaño de sus mochilas de quien debía desconfiar mas según la primera impresión… Claro esta que el enano que se afanaba en superar el tamaño de la barra no suponía ningún tipo de confianza, pero siendo el único capaz de saciar la sed y el hambre...Acercándose a la robusta barra que se interponía entre el enano y él sus labios se abrieron y hablaron.
-Perdona Posadero, Agua y comida para este viajero, por favor.-

Las palabras se soltaron y flotaron por el aire el mensaje fue captado y en un asentimiento del enano, el monje se retiro a una mesa a esperar su comida.

Otro vaso de vino para mi!!! dijo Virgil mientras se levanta de su mesa para acercarse a la barra, instantes despues de que la semielfa pidiera el suyo.

Virgil se dirige hacia la barra y se pone a la altura de la recien llegada, apoyandose en la barra por los codos e inclinando la cabeza un poco hacia delante, sin apenas mirarla saluda con un timido....hola, mientras espera su proximo vaso de vino.

Espera ansioso su comida, observa que la joven que llego antes que él, aun no ha sido atendida por lo que tendrá que seguir esperando. La joven señorita que entro antes que él, parece demasiado joven para deambular sola por lugares como este, aunque aun no tiene mucho conocimiento de la cultura de este lugar, él lo ve como algo insólito una joven de esas características podría ser victima de cualquiera que se propasara.
El caballero que ahora se junta con ella parece un soldado con esa vestimenta, otro que a su juicio es demasiado joven para andar manejando espadas…
La comida no llega aun...

..y recordad. que Pelor nos advierte que debemos de luchar contra la osucuridad con fuerza y determinación; sin embargo de la misma manera que el sol nos ciega, la eterna ira y la excesa belocidad rompen el corazón de las personas. Es así como Pelos nos lo enseña.

Con la garganta algo seca. Esperando conseguir que en algún de los habituales de la taberna creciera su preocipación hacia la Divindad de Pelor.

Levanta la mano hacia la barra, esperando ser avisado por algún encargado para que venga a atenderle.

El camino ha sido largo, el descanso merecido

-¿Pelor...?- murmura para sus adentros arqueando una ceja y escuchando atentamente al que pregona sobre su mencionado Dios, mas aunque no le interesa para nada ese Dios ya que su creencia se basa en los Dones de la naturaleza, le interesa ver como alguien sin ningún tipo de vergüenzas intenta convencer a otros con el poder de la palabra…

Virgil se gira rapidamente al escuchar las palabras del clerigo, y le dirige las siguientes palabras....al igual que hemos de aclamar a Heironeus dios del valor, que nos enseña a ser fuertes en los momentos debiles, el mismo que nos dice que la valentia sin valor no sirven para nada.

Sin mas, Virgil se gira hacia la barra esperando que el enano le sirva el vaso de vino que habia pedido hacia una eternidad.

¿Heironeus...?- Otro Dios que a su parecer no tenia ningun significado... pero la idea de ver a dos religiones diferentes enfrentarse le parecia divertido.. esperaba que empezaran a narrarse hechoz de sus dioses y a discutir sobre quien era el mejor, tal idea le arrancaba una sonrrisa

Bendito Seais, fiel de Hyeroneus. Alabado sea vuestro valor y caballerosidad. ¿Que os ha acercado por estas tierras, que a tantos extraños en una noche como esta parece estar atrayendo?

El joven clérigo se fija en los recién llegados.

Virgil, con la mirada puesta en el clerigo le contesta......La soledad amigo mio, la soledad. La soledad y la idea de forjarme un destino por mi mismo. Una larga historia llena de penas y amarguras me han traido hasta esta posada, lugar donde descanso por primera vez tras mi partida hacia el destino.... dejando caer un intento de lagrima entre sus mejillas, Virgil agacha su cabeza y sin esperar palabra alguna del clerigo vuelve a girarse hacia la barra.....Posadero,donde esta ese vaso de vino!!! ....esperaba encontrar en ese dichoso vaso de vino un poco de compañia para pasar la noche, siempre y cuando sus recuerdos le dejaran dormir.

Argmur camina por la calle divisando una posada mas allá.

Mmm mis pies necesitan un descanso y mi sed clama por una buena cerveza.
Argmur No duda ningún minuto, y se dirigirse a la pasoda.
Grata sorpresa se encuentra al entrar y divisar al posadero que es un enano.
Un sentimiento de hogar le inunda, aunque bien no se siente del todo grato con la presencia de tanta gente extraña.
Con lo que se dirige a la barra, saluda cordialmente al posadero y le pide una pinta de cerveza.

Namesis se apena por la breve discusion de el guerrero y del que pregonaba sobre Pelor y apartando las ideas de la discusion se centra en el enano, que parece que no entregara hoy su comida pero de pronto otro enano que acaba de entrar por las puertas y que le da una sensacion de inseguirad le capta su atencion.
-Valla posada con gente mas extraña-

¡¡Que pasa con ese vaso de agua!! Desde luego...como esta el servicio...

Argmur recibe la pinta de cerveza y empieza a tomar a gusto.

Observa como el enano le sirve su comida, parece ser que le ha traido un par de patas de conejo adornada con unas patatas asadas y una jarra de agua.
-Parece que habeis tenido que correr tras el conejo, cazarlo y demas, por que bien que habeis tardado...- Sin mas comienza a comer mientras el enano se va