Partida Rol por web

El Despertar del Mal - II - La Máscara del Dios Viviente

II - Un asunto peliagudo

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06/11/2015, 07:58
Rhylen Carsson

Rhylen afirmó con la cabeza a la propuesta de la pitonisa conocedor de lo mucho que podría aportar una varita curativa en el transcurso de un combate, más aún cuando era él mismo el que solía posicionarse en la cabeza de todos a los que se enfrentaban. – Me parece una excelente idea, añadió. – Gracias por todo, Walren, continuó dirigiéndose ahora hacia el capitán enano, - Si nuestro acuerdo sigue en pie, que espero que sí, nos veremos de nuevo para el regreso a casa…

Mientras Tanyl y Togo realizaban sus investigaciones entre taberna y taberna, el grupo más numeroso de aventureros decidió dirigirse al Mercado de las Baratijas siguiendo las indicaciones del enano. El alboroto y el tránsito de gente tomaba aún más vida en ese barrio con respecto a los muelles. Numerosas, variadas y pintorescas tiendas se ubicaban en ambos lados de la calle ofreciendo a los aventureros una gran variedad de equipo así como la oportunidad de encontrar lo que buscaban si fuese el caso. Una de ellas, situada al fondo de la calle llamó especialmente la atención de Rhylen. Con los ventanales del escaparate impolutos y con la puerta adornada con el símbolo de dos espadas entrecruzadas no fueron nada en comparación al nombre de la misma: “El mito del guerrero”. – Ey, chicos, creo que probaré en esta…, comentó con sus compañeros antes de disponerse a entrar…

Notas de juego

Compro: Cinto de ESCUDO (Conjuro de Nivel 1 - 2 cargas/día) = 720po

A la espera del visto bueno para apuntar y descontar...

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06/11/2015, 11:56
Togo "El Niño" Overhill

El mediano se sentó lo más cerca que pudo de los dos hombres que estaba espiando. Esperó que Tanyl lo acompañara, pero cual fue su sorpresa cuando el elfo no lo siguió, si no que se acercó a los señores y les pidió sentarse con ellos sin más rodeos.

¿ Pero qué hace...? El mediano quedó sorprendido al ver como el elfo parecía querer llevar ahora el plan de ir por separado, cuando en la anterior taberna no lo había hecho y siendo que el hombre desaliñado ya los había visto juntos, no tenía mucho sentido jugar a eso ahora. es que... estos aprendices de mago... Además, se suponía que Tanyl le acompañaba para cubrirle las espaldas, pero era él quien iba a encargarse de manejarse en la búsqueda de información, cosa que también desconcertó a Togo al ver como el joven aventurero quería tomar las riendas de la empresa llevando la voz cantante, nunca mejor dicho, cada vez que había que hablar con alguien. Estos elfos siempre están igual, creyéndose de lo más importantes...

Al mediano le hizo hasta gracia y se limitó a esperar la respuesta de los hombres para actuar en consecuencia. La verdad es que empezaba a pensar que la persona que habían perseguido era más listo de lo que parecía y que en vez de asegurarse que no lo seguía nadie, en realidad nos estaba atrayendo y se había asegurado de que nos percatábamos de dónde entraba. Algún interés tenía en que mediano y elfo estuvieran allí y Togo esperaba que fuera para presentarles a Reginar.

Notas de juego

Me parto. JAJAJAJAJA   Parecemos los de no me chilles que no te veo!!!! JAJAJAJA

¿ habéis visto esa peli? Pues somos clavaditos... jajajaja

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09/11/2015, 00:32
Director

Notas de juego

Resultado prueba de escuchar:

Tan pronto Togo alcanza a sentarse en una de las mesas que están a la espalda de los dos hombres reunidos éste logra distinguir a pesar del barullo reinante cómo Nóremir informa al comensal sobre una extraña pareja compuesta por un semielfo y un niño que van haciendo preguntas acerca de él. Tan pronto Nóremir termina de hacer la exposición y de asegurar al hombre misterioso de que no tardarán en llegar hasta el Regalo del Bosque, éste último asiente y le tranquiliza diciendo que no cree que se trate de emisarios del templo, que más bien cree que puede tratarse de todo lo contrario.

 

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09/11/2015, 01:06
Reginar

Reginar se aclaró la garganta y ofreció asiento a Tanyl con un gesto educado. El explorador no perdió en ningún momento la sonrisa, ni siquiera cuando Nóremir le indicó entre susurros lo que era evidente: que aquel hombre era uno de los que habían ido al Callo del Gigante haciendo preguntas sobre su persona. 

No hay de qué preocuparse Nor. - Tranquilizó a Nóremir mientras lo asía por el codo con su robusta mano y lo obligaba a relajarse y a hacerse a un lado. - ¿Verdad que no, amigo? - Preguntó. - Será agradable compartir una cerveza con usted, y más aún si invita. -Rió de forma sincera y levantó la mano para llamar la atención de una de las mujeres que recorría la estancia a fin de que dejase una jarra de cerveza sobre la mesa.

Una vez Tanyl hubo tomado asiento Reginar tamborileó con sus dedos varias veces antes de tomar de nuevo la palabra. - Según tengo entendido preguntaban por mi , ¿no es cierto? - Como estaba claro que Nóremir había hablado a Reginar sobre la presencia de un niño, el explorador no pudo por menos que preguntar por él. - Según me han comentado un niño estuvo haciendo preguntas al bocazas de Buklon. Dime amigo, pues ya puedes intuir cómo me llamo, ¿quién eres y quien es ese muchacho? Juraría que no he dejado descendencia por ahí pero...todo puede ser. - Terminó diciendo mientras fijaba sus profundos ojos sobre la figura del hechicero semielfo.

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09/11/2015, 06:09
Tanyl Argenthor

Sonrío ante el comentario del supuesto Reginar sobre la descendencia. De primeras el hombre le había caído bien.

Por supuesto no hay nada de qué preocuparse. Tomemos esas cervezas y si nuestros asuntos no te interesan me iré por donde he venido. Por mi compañero el mediano tampoco te preocupes, nos gusta tomar precauciones y por eso él se ha quedado más alejado en otra mesa -añadió no muy convencido el semielfo de la verdadera motivación de Togo.

¿Aquí se puede hablar con franqueza?- dijo mirando de reojo al informante de Reginar.-Se trata de Cygar. ¿Lo conoces?

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09/11/2015, 16:21
Togo "El Niño" Overhill

Togo se quedó en su asiento escuchando con atención. Al oir como Tanyl hablaba sobre él y sobre las precauciones, el mediano prefirió quedarse en su asiento disimulando, pero atento a la conversación que Tanyl y el supuesto Reginar acababan de empezar.  Pero el perspicaz mediano también se fijó en el resto de comensales del local, sobre todo de los más cercanos, pues por lo que había escuchado antes de que llegara Tanyl, podría haber hombres de ese templo del que todo el mundo hablaba tanto... 

Notas de juego

Por ahora me mantengo al margen pero atento. Solo me acercaré si me hacen  señales evidentes de que mi presencia es necesaria. 

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09/11/2015, 18:07
Reginar

Puedes hablar amigo, aunque me gustaría saber tu nombre...por educación, ya sabes. - Respondió sonriente. - Estamos en mi casa y si hay algún peligro me lo harán saber de inmediato. Aun así te encomio a que lo hagas en voz baja, mis enemigos tienen oídos tan agudos como los de un elfo. - Dicho esto el hombre se reclinó sobre su taburete y apoyó su vaso de cerveza sobre una de sus rodillas. Poco duró en esa posición, no obstante. Cuando escuchó el nombre de su amigo, Reginar volvió a echarse hacia adelante como si hubiese sido activado por un resorte. 

¡Claro que le conozco! - Susurró excitado. ¿Os ha mandado a ayudarme en el tema del...templo? 

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09/11/2015, 18:15
Director

La jornada de compras se alargó lo suficiente como para que tanto el sol como la actividad en las calles anunciase la llegada de la hora de comer.  Había sido una mañana productiva en lo referente al tema económico, lo que permitió a los tres compañeros equiparse con las provisiones que creerían les sería de utilidad una vez abordasen el tema que los había llevado allí. Teniendo en cuenta que en ese momento, pese al frío reinante, las calles estaban atestadas de hambrientos marineros y mercaderes, los miembros del grupo, que habían desayunado hacía poco tiempo y no tenían excesiva hambre a excepción de Rakna, optaron por acercarse a las inmediaciones del Templo de Razmir con el fin de tener una visión más cercana de éste.

El templo de Razmir, el Dios Viviente, se encontraba situado cerca de la zona centro de la ciudad. No les costó mucho llegar a él, pues no eran pocos los carteles que indicaban el camino a éste. Se encontraba rodeado por numerosas residencias a cada cual más lujosa, indicativo ésto de que el barrio era uno de los más boyantes y distinguidos de la ciudad. La presencia de patrullas de guardia era como cabía esperar de un lugar así más frecuente que en otras parte de  Tamran; los ricos residentes les gustaba sentirse arropados y cuidados en el aspecto que concernía a sus seguridad, la cual era aliñada con generosas propinas a los soldados para que éstos ahuyentasen a todo aquel que pretendiese realizar actos delictivos. Sin embargo, como nota discordante en aquel lustroso barrio, gran cantidad de desfavorecidos peregrinaban por el barrio en busca de los puestos que los monjes del templo establecían en las esquinas de las calles más amplias.

El templo ocupaba toda una manzana con calles muy concurridas que lo rodeaban por todos los lados. Las empresas que a su alrededor se establecían variaban ampliamente yendo desde toneleros a zapateros, todos ellos dedicados en exclusivo a los ricos propietarios del barrio.
Otro detalle que no escapó a la vista de los compañeros fue que a menudo los tenderos salían a las puertas de sus establecimientos al ver pasar a algún monje enmascarado para solicitar que éstos bendijesen a sus respectivos negocios; cuidando mucho después de pagar con generosos donativos tan sagrado favor. Estos grupos de monjes, cuyo número oscilaba entre cuatro y seis miembros, entraban y salían del templo a todas horas y merodeaban las calles bendiciendo a todo aquel que se lo solicitase, que no eran pocos. Todos ellos vestían con amplias túnicas blancas, sin embargo no es extraño ver a alguno de ellos vestido con otras de color gris o negro. Sus identidades permanecían siempre ocultas bajo una máscara carente de expresión idéntica a la hallada en la Cripta de la Llama Eterna. 

En la calle de la Providencia el caminar se hizo más dificultoso de lo normal: reunidos en torno a un tenderete multitud de gentes aguardaban su turno en silencio para recibir verduras, pan e incluso carne de manos de los siempre atentos monjes, que no dejaban que nadie pasase hambre si ellos podían evitarlo. 

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09/11/2015, 19:29
Tanyl Argenthor

- Si, disculpa mis modales. Soy Tanyl Argenthor. Perdona si no te doy ahora suficientes detalles pero es que en realidad soy solo una ínfima representación del grupo que me acompaña, y aunque Cygar nos recomendo buscarte para ese tema del que hablas, no nos dió ningún detalle sobre tu persona, asi que cómo puedo saber que eres aquel al que busco? Es todo algo complejo.

Te rogaría que antes de que nos metamos más en el tema, te reunieses con el grupo al completo. Podríamos venir aqui si lo deseas o podríamos juntarnos en el La Ultima Comida de Gar, que es donde nos hospedamos.

Tanyl se veía en una difici situación. Todo parecía indicar que ese era el hombre correcto, pero él no era de los que calaban a las personas a la primera. Quizás, pensó, la pitonisa del Débil pudiese hacerlo. No quería dar más información de la necesaria antes de asegurarse de que se trataba del tal Reginar.

- Dime dónde y cuándo y ahí estaremos mis cuatro compañeros y un servidor.

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10/11/2015, 01:07
Togo "El Niño" Overhill

Togo se echó la mano a la frente cuando escuchó todo lo que Tanyl le estaba contando al desconocido.

Vaya espero que  sea Reginar de verdad, porque sólo falta que le diga lo que lleva en los bolsillos... Tendría que haber sido yo quien hablara y él quien vigilara y no al revés. Éstos de sangre élfica siempre con su afán de protagonismo... maldita sea.

Togo por ahora no se movió, era consciente de que probablemente el hombre ya le habría echado el ojo, pero  no veía la necesidad de mostrarse. Al fin y al cabo Tanyl ya le había contado prácticamente todo, poco podía remediarse ya.

Notas de juego

Sigo atento a la conversación y al entorno.

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10/11/2015, 16:34
Alétheia

Alétheia caminaba por las calles despreocupada. Confiaba en su amiga Hostawen para hacer de guardaespaldas e incluso "guardabolsas" pues, su vista era tan aguda, que ay del pobre ratero que osara tratar de robársela en presencia de la arquera. Así caminaba confiada a paso lento, agarrada como siempre al brazo de su amado, deleitándose con el populoso ambiente de Tamran. Como miembro del culto al Débil la Pitonisa estaba acostumbrada al trato de los más desfavorecidos. Aún así le impresionó bastante la confluencia de mendigos y pobres alrededor del templo del Dios Viviente y, en parte, despertó en ella un sentimiento de celo . No tardó en rechazarlo, mucho más sabiendo que aquellos monjes, de aparente impecable servicio al prójimo, podían no ser más que "robatumbas" y acaparadores de riquezas cuya avaricia no respetaba ni el descanso eterno de los muertos.

- Hemos hecho bien en venir. Podemos sacar información de vital importancia tan sólo observando.- Y eso hacía la Pitonisa. Acostumbrada a sacar información de la mera observación de los sujetos que tenía en frente no le costó demasiado anotar mentalmente ciertos detalles. En caso de que tuvieran que infiltrarse en el templo bien podrían hacerlo sin revelar sus identidades pues todos los monjes llevaban las mismas máscaras encontradas en la Cripta de Kassen y unas sencillas túnicas. 

Grupos de entre cuatro y seis, todos con máscaras y túnicas blancas...ah, y alguno con túnica gris o negra.

En un rato en el que estuvieron fuera de miradas indiscretas le comentó a sus compañeros lo que pensaba. Quizá pudieran hacer algo más que observar.

- ¿Nos acercamos un poco más al templo?- Dijo mirando la calle Peregrinación que parecía atestada de gente.- Quizá así puedas pedir un poco de comida para ti y Rakna. Ese lobo tuyo siempre está hambriento y noto cómo me mira a veces...- Le dijo con una sonrisa pícara a Hostawen, dejando claro que era una treta.- Padre y yo podemos esperar cerca, o dando una vuelta...por si acaso. Rezaré por vosotros.- Dicho esto se ocultó el llamativo pelo con la capucha y se agarró de nuevo al Sr. Carsson.

Notas de juego

Uso conjuro level 1: detectar el mal. Duración 40´y alcance 60´. Mi idea es pasear alrededor del templo, escrutar a los grupos de monjes y ver si son todos malignos o qué auras desprenden.

Si le parece bien a Hosta ella puede pedir comida como una pobre más y así Alé puede usar el conjuro mientras Rhylen la protege.

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10/11/2015, 16:56
Reginar

Pues encantado Tanyl Argenthor, mi nombre es Reginar y éste de aquí es un amigo mío, Nóremir. - Dijo señalando a aquél que habían seguido desde el Callo del Gigante.  Lamento decirte de que deberás fiarte de mi palabra amigo, pues poco puedo hacer para demostrarte mi identidad. - Dio un largo sorbo a la cerveza. - Me alegra escuchar noticias de Cygar, eso confirma que llegó sin problemas a Kassen después de nuestro encuentro para hablar sobre la máscara esa que encontraron unos habitantes del pueblo. - Miró a ambos meditando acerca de la propuesta del semielfo. - Nos reuniremos aquí, si no os parece mal. - Dijo al fin. - Aquí tengo a mis conocidos y es el lugar más seguro para hablar sobre el tema en cuestión. Nos veremos aquí  al caer la noche, mientras tanto procurad manteneos alejados tanto del templo como de sus monjes.

¿Os parece bien? - Preguntó alegre porque Cygar no le hubiese dejado en la estacada.

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10/11/2015, 17:06
Director

Notas de juego

Resultado de Detectar el Mal:

Detectas auras malignas en todos los monjes pero su fuerza es débil.

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10/11/2015, 17:41
Tanyl Argenthor

Si ese hombre no era Reginar que le castrasen como a Fuzuli!

Contento dió un fuerte apretón de manos a su interlocutor.

- Perfecto! Iré a decirselo al resto del grupo.

Dejo unas monedas para pagar la bebida como había prometido y se despidió de ambos hombres. Cuando pasó al lado del mediano susurró con un marcado tono irónico; vienes conmigo a seguimos 'de incógnito' por separado?- Tras lo cual marchó por la puerta y se dirigió al posada para reunirse y dar la buena noticia a los demás.

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10/11/2015, 20:37
Rhylen Carsson

Tras realizar las pertinentes compras, el grupo de aventureros decidió en hacer un primer reconocimiento de las inmediaciones del templo de Razmir. Las opciones eran escasas y ante la negativa de hacer tiempo en alguna de las tabernas expuesta por Rhylen, las posibilidades quedaban en inspeccionar el templo y no hacer nada…

Por el momento y hasta obtener noticias de Tanyl y Togo, el grupo sólo se limitaría a recopilar toda la información posible desde el exterior del templo, por lo que la propuesta de Aletéhia fue respaldada por el viejo guerrero. – Bien, hagámoslo …

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11/11/2015, 08:21
Togo "El Niño" Overhill

El mediano escuchó con atención todo aquello que decían. Al parecer habían encontrado a Reginar. Había sido más fácil de lo que pensaba. Cuando Talyn se despidió Togo esperó a que el semielfo saliera por la puerta para salir él. Cuando se levantó de la mesa se quedó mirando al tal Reginar y antes de dirigirse hacia la puerta le dedicó una sutil mueca con la cara en señal de reconocimiento. Tras eso salió de la posada y después de varios metros andando tras el semielfo le dio alcance y se dirigieron hacia la última Comida de Gar a reunirse con el resto.

Pues no ha sido tan difícil... 

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12/11/2015, 03:04
Director

Desandar el camino hasta la taberna que les había dado cobijo la noche anterior se convirtió en un paseo agradable a pesar de lo atestado de las calles. Coincidió en que la hora en que Togo y Tanyl volvían hacia la taberna era también en la que numerosos trabajadores hacían el alto en sus tareas para dirigirse a las tabernas y posadas que salpicaban los alrededores de los muelles para saciar su apetito. Pronto la blanca nieve caída durante la noche se convirtió en una masa negruzca y sumamente resbaladiza que cubría todas las calles y se adhería a las botas con una fijación igual que la resina de los árboles. Compartían ambos compañeros sus impresiones acerca del fugaz encuentro con Reginar cuando de una calle lateral apareció un pequeño grupo de hombres ataviados con túnicas de color blanco y cuyos rostros estaban cubiertos por máscaras de hierro carentes de expresión. Se trataba de los acólitos del Templo de Razmir en su patrullar diario a través de la zona portuaria. A su paso los tenderos, mercaderes y propietarios de cualquier clase de negocio salían de sus locales en busca de la bendición del Dios Viviente, la cual era concedida al instante previa donación de las correspondientes monedas de oro o plata.

Un coro de alabanzas aderezadas con sonrisas de oreja a oreja se levantó al paso de los monjes. El nombre de Razmir resonaba por encima de los tejados para gozo de sus fieles tan pronto éstos tocaban con sus manos las puertas de los establecimientos o la cabeza del propietario del negocio. Como era natural, el caminar a través de ese punto se veía ralentizado por la aglomeración. No obstante, aunque todo aquel festival improvisado parecía estar imbuido de la mayor felicidad, no escapó a la vista de los dos compañeros que las madres, siempre con disimulo, metían en el interior de sus hogares a sus hijos valiéndose de empujones si el retoño no respondía a las órdenes de la madre al instante.

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12/11/2015, 03:24
Director

Siguiendo el plan de Alétheia, Hostawen y Rakna se colocaron en la larga cola que aguardaba para recibir las generosas donaciones del templo. Mientras, la Pitonisa del Débil, concentrada en el poder de su hechizo y agarrada al brazo de Rhylen, se movieron por las inmediaciones del templo a fin de obtener una visión más clara de éste.

Sin duda se trataba de una construcción imponente tanto por su estructura como por su situación predominante entre los edificios de menor altura que lo rodeaban. Constaba de sólidos muros de piedra revestidos con un mármol reluciente que le confería un aura sagrada. Aunque por las ventanas que ambos compañeros veían desde la calle el edificio parecía poseer únicamente dos plantas, éstas eran tan altas que incluso edificios de tres plantas situados justo en frente quedaban empequeñecidos si uno los comparaba observándolos directamente desde la mitad de la calle. Además, por si fuese poco, torres colocadas cada treinta pies a lo largo de su circunferencia aportaban a la edificación un aspecto más grandioso si cabe. Estas torres se elevaban por encima de la templo en sí y cada una estaba coronada por estatuas que representaban al Dios Viviente. El templo carecía casi de ventanas, siendo la mayoría de ellas tragaluces con la altura de un hombre alto y cerradas con unas vidrieras de colores en las cuales se distinguía la máscara de Razmir.

Cuando llegó a Hostawen su turno para recibir las donaciones alimenticias consistentes en un repollo, dos barras de pan y un cuenco con aceite, Alétheia y Rhylen aparecían por la esquina oeste del templo. Atrás habían dejado lo que parecía ser una amplia entrada a un patio, la única con que contaba el templo a primera vista. Sin embargo no pudieron detenerse demasiado porque además de estar éste sellado por una gran barbacana, numerosos sacerdotes patrullaban la parte superior de las murallas observando a los transeúntes que caminaban por la calle con una atención más propia de soldados que de clérigos.

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12/11/2015, 05:57
Tanyl Argenthor

Y no era tan solo porque a Tanyl le traia al pairo el entero compendio de Dioses (pues para él solo había dos cosas en el mundo que mereciesen alabanzas; la magia y las mujeres) sino por el obvió mal yuyu que desprendían aquellos acólitos, que se deslizó debajo de una sombra y se quedó ahí hasta que los hombres pasaron.

Espera! -le susurró a Togo- Ocultémonos hasta que pasen. Puff mira como esconden la los pequeños esas madres...

Habría que tener en cuenta el miedo que aquella secta levantaba en la población. Quizás podrían usarlo a su favor en algún momento si fuera necesario.

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12/11/2015, 07:22
Togo "El Niño" Overhill

Tanyl y Togo volvían hacia La Última Comida de Gar, satisfechos por haber cumplido con su cometido. Las  calles estaban llenas de gente en busca de un lugar en el que comer y no eran pocos los resbalones, pues la esponjosa nieve de la mañana se había convertido un duro y sucio barrizal que provocaba inocentes caídas entre los viandantes. La vuelta fue más lenta para evitar dar de bruces contra el suelo, lo que les permitió poder fijarse más en las casas, negocios y puentes que iban dejando atrás por el camino.

En un momento dado unos gritos de júbilo y alabanzas empezaron a escucharse a lo lejos y tras ellos no tardó en aparecer una comitiva de acólitos del templo de Razmir, todos con sus máscaras, repartiendo bendiciones allá por donde pasaban a cambio de unas cuantas  monedas. La gente parecía agradecida con esa visita, pero hubo un detalle que no pasó desapercibido para los aventureros. Las madres ocultaban con disimulo a los niños dentro de sus casas, a ninguno se le permitía  ver el paso de la comitiva. Togo enseguida reaccionó , al igual que Tanyl, sabedor de que fácilmente podía ser confundido con un niño y apelando al refrán " donde fueres haz lo que vieres" buscó una casa cercana en la que poder esconderse junto con algún otro niño 

~~Ocultémonos hasta que pasen. Puff mira como esconden la los pequeños esas madres...  

- Sí, lo he visto, pero el problema soy yo.- contestó Togo a la propuesta de Tanyl- Si te escondes tú también puedes levantar sospechas. No te preocupes por mí, tú disimula y si te bendicen corresponde como el resto. Y fíjate en sus túnicas...

Acto seguido y aprovechando todo el sigilo que su corta estatura y bajo peso le permitía, Togo se escabulló entre la gente en dirección opuesta  a la de la comitiva, buscó  alguna de las madres que arrastraba a sus hijos hacia la puerta de la casa y con su mejor voz pueril y toda la lástima del mundo  le pidió ayuda a una mujer que en ese momento metía a unos niños en su casa - señora, me he perdido, por favor déjeme entrar a mí también hasta que pasen los hombres enmascarados,  me dan miedo... mi madre siempre me dice que me aleje de ellos... se lo suplico, no quiero que me coman...

Por qué ocultarán a los niños de los monjes, quizás porque se los llevan a los templos como acólitos, o pero aún, para sacrificarlos...  Pensaba Togo mientras esperaba la compasión de la señora 

Notas de juego

Espero que me deje pasar a esconderme, una vez dentro le haré algunas "inocentes" preguntillas.

Editado hoy a las 10:40.