Partida Rol por web

El eco del Diablo

Los Olvidados

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17/05/2016, 19:17
Sophie Taylor
Sólo para el director

Notas de juego

Se me ha olvidado añadirlo en la descripción, pero puedes comentarlo tú más tarde si lo crees pertinente. Me gustaría añadir como detalle que en alguna de las mesitas hay un par de libros de ornitología. No me he dado cuenta, pero me parece bastante lógico que Sophie haya tratado de leer algo sobre pájaros, abubillas y cuervos en especial, sin duda sin encontrar nada más que datos puramente biológicos. Pero, ya sabes.... ¡Detalles, detalles!

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17/05/2016, 23:43
Director

Notas de juego

Ok, lo tendré en cuenta. Entre las cosas que ha encontrado en los libros y vídeos de Internet:

La abubilla es un animal beneficioso para la agricultura -come muchos insectos perjudiciales- y es verdad que en época de cría protege el nido con sus heces pestilentes.

Tiene una cresta que despliega cuando se excita. Su vuelo es un poco errático, como el de las mariposas y camina en lugar de saltar, como también hacen los cuervos.

Los cuervos son de los animales más inteligentes. Pueden resolver problemas que requieren cierto nivel de abstracción y no sólo utilizan herramientas, también las fabrican.

Y, por supuesto, pueden imitar la voz humana.

Sin dejar de ser unos pájaros la mar de rarunos :-)

 

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18/05/2016, 00:13
Eliza Taylor

La puerta del salón se abrió y de la cocina llegó un increíble aroma a estofado de ternera.

Eliza entró con un delantal a rayas rojas, su mejor sonrisa y una bandeja con un buen vino, queso, pan y paté. Le hizo una señal a su hija para que apartara dos libros de ornitología de la mesilla de centro, dejó allí el aperitivo y después de saludarlos afectuosamente habló:

-Bueno chicos, ya era hora que nos viéramos en nuestro terreno. Por supuesto, os quedáis a comer. Estoy preparando mi plato estrella, y pronto estaremos todos.

Se giró hacia Sophie para informarle.

-Vienen Zac y Antoine, con Gigi -era el diminutivo de Georigine, la mujer de Zac- y Emmanuelle. Tu padre está al llegar, ha ido a cazar duendes con la pequeña Jackeline. ¡Hay mucho que celebrar!

Su mirada brillante dejó caer un par de lágrimas que se apartó con el delantal.

-¡Qué alegría chicos!

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18/05/2016, 12:01
Mats Bergstrøm

Cuando la madre de Sophie entra para invitarnos a comer, me levanto del sofá y le doy dos besos a modo de saludo.

Buenos días, señora Taylor. Mmm, huele de maravilla. Sophie, qué suerte tienes de tener una madre tan buena cocinera…

«O de tener una madre, para el caso».

Miro a Arthür un segundo, ligeramente desconcertado al enterarme de que va a haber más invitados a la comida. Parece que vamos a tener que esperar antes de poder hablar tranquilamente. Y lo que es peor, más variables suponen más cosas que pueden torcerse… Aunque será mejor no poner el parche antes de que salga la herida.

Parece que Sophie está teniendo una recuperación asombrosa, ¿no? —respondo al entusiasmo de la mujer—. Desde luego, si los primeros días son un indicativo fiable de la progresión general, tenemos motivos para ser optimistas. ¿Verdad, Sophie?

Sonriendo, vuelvo a sentarme en el sofá, echando un vistazo a Sophie para asegurarme de que todo va bien. No puedo evitar ser el primero en coger un trozo de queso y llevármelo a la boca.

Exquisito.

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18/05/2016, 13:03
Arthür Guitry

Arthür se levantó cuando entró la señora Taylor. Después que Mats la besara le saludó igualmente y le agradeció sinceramente la invitación. El olor que llegó desde la cocina hizo que le entrara una fuerte hambre repentina.

—Muchas gracias, señora Taylor. Será un placer probar su estofado. Es estofado, ¿verdad?

Tras escuchar el listado de lo que sin duda tenía que ser toda la familia cruzó su mirada con la de Mats. Bien, las noticias tendrían que esperar. Y la alegría de ver a la madre de Sophie tan feliz se juntó con el apuro de pensar en toda la gente nueva que de un momento a otro entraría por la puerta.

Cuando la mujer se enjugó las lágrimas temió contagiarse. Queriendo variar los pensamientos aprovechó para mostrarle la bandeja de los dulces: —Les hemos traído esto para el café, ¿dónde quiere que lo deje?

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18/05/2016, 13:42
Sophie Taylor

-¡Arthür! ¡No tenías por qué traer nada! -dijo Sophie asomándose por encima del brazo del chico para ojear la bandeja de pasteles-. Aunque tengo que reconocer que huele bien. Mamá, ¿por qué no lo llevas a la cocina y los dejamos para el café de la tarde? Así todos podrán probarlos, no me hago responsable si los dejas aquí...

Sophie sonrió con cara de pilla, aunque en realidad sólo estaba buscando una excusa para que les dejasen solos. Entendía la alegría de su madre, y la compartía pero... bueno, simplemente había cosas que ella no podía, ni debería nunca saber. Y dado que media familia planeaba pasarse a comer, parecía que iban a tardar en encontrar tiempo para hablar, así que quizás podrían encontrar un rato antes de la comida para ponerse rápidamente al día.
 

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18/05/2016, 15:49
Eliza Taylor

Eliza se hizo cargo de los pasteles.

-¡Yo tampoco me hago responsable! Pero vale, trataré de apartarlos de la vista y… Bueno, si os quedáis sin queso pasaos por la cocina. Chicos, ¡Estáis en vuestra casa!

Y así los dejó con sus cosas, quedando en silencio el salón. Sólo el ruido de las gotas de lluvia en las cristaleras y lo que ellos quisieran hablar.

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19/05/2016, 10:28
Arthür Guitry

—Mats tiene mucho que contarnos, yo voy a ser breve —comenzó diciendo Arthür inclinándose hacia delante en el sillón y rompiendo el silencio. —He encontrado datos interesantes acerca del ciprés blanco. Creo que nos dicen algo más acerca de las creencias de esta gente o al menos del origen de la magia que utilizan, aunque claramente lo que hacen parece una desviación del credo original... Veréis. A lo largo del siglo XX se encontraron en diversas excavaciones arqueológicas, siempre asociadas a enterramientos, las que se han llamado laminillas órfico-dionisíacas. Las más antiguas datan de entre los siglos V y IV a. C. y se han hallado tanto en el sur de Italia como en Grecia. Son pequeñas láminas de oro que llevan grabados, en verso, textos que recuerdan a otros escritos sagrados antiguos de carácter escatológico, como El libro de los muertos egipcio, por ejemplo. Digamos que contienen indicaciones para que el difunto realice con éxito su viaje al Más allá, sortee los peligros que le acechan y pueda integrarse en el destino de los bienaventurados inmortales tras pasar ciertas pruebas y conociendo la geografía del Otro mundo así como las palabras que ha de pronunciar frente a los guardianes que encuentre en el viaje —rebuscó en el interior de una cartera sacando un folio de una carpeta—. Os he traído el texto de una de ellas. Su contenido suele ser parecido pero ésta en concreto me parece que tiene exactamente las palabras que nos dijiste que te había dicho Vendela —dijo mirando a Sophie y entregándole la hoja donde estaba imprimida la imagen de una de las tablillas. La traducción del texto estaba debajo:

«De Memoria (Mnēmosýnē) he aquí la obra. Cuando esté a punto de morir e ingresar en la bien construida morada de Hades, hay a la derecha una fuente y, cerca de ella, enhiesto, un blanco ciprés. Allí, descendiendo, las almas de los muertos encuentran refrigerio. A esa fuente no te acerques en ningún caso. Más adelante encontrarás el agua fresca que mana del lago de Memoria, y delante están los guardianes que te preguntarán con corazón prudente qué es lo que estás buscando en las tinieblas del funesto Hades. Diles: "Soy hijo de la Tierra y del Cielo estrellado, agonizo de sed y perezco, dadme presto de beber del agua fresca que mana del lago de Memoria", y apiadándose de ti, por voluntad del rey de los ctonios te darán de beber del lago de Memoria y finalmente podrás tomar la frecuentada y sagrada vía por la que avanzan los demás gloriosos mýstai y bákchoi.»

—Las dos últimas palabras se refieren a los iniciados en los misterios —volvió a hablar después de que leyeran el texto—, concretamente la última indica que se refieren a misterios dionisíacos.

—Tenemos pues versos épicos, misterios relacionados con el descenso al Hades y el conocimiento de que no hay que beber de una fuente concreta, sino buscar la fuente de Memoria. Parece claro que esto nos indica que la que hay que evitar es el agua del Olvido. —Hizo una pequeña pausa como para dejarlos pensar. —No sé qué pensáis pero por ahora me encaja con lo que poco que sabemos. Aunque parece claro que por sus métodos, que incluyen secuestro, posesión y asesinato, no estamos frente a una secta órfica al uso que busque precisamente la purificación y la superación del juicio de las almas... Esto parece más bien una desviación o un uso perverso de unos conocimientos destinados en realidad a un fin elevado pero empleados aquí como magia degradada y oscura.

—Respecto a lo de encontrar un sitio en París donde quedarnos... Uf, misión imposible...

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19/05/2016, 13:50
Mats Bergstrøm

Agradezco que Arthür sea el primero en hablar, lo que me da algo más de tiempo para pensar en cómo soltar todo mi rollo cuando sea mi turno. Mientras el joven nos relata con todo lujo de detalles sus averiguaciones acerca de referencias a antiguas sectas órficas y báquicas, yo aprovecho para prepararme un delicioso bocado: una delgada rebanada de pan untada de foie con un trozo de queso encima. Arthür prosigue con su narración, dejando claro que las relaciones entre los antiguos cultos de los que habla y a lo que nosotros nos enfrentamos no son mera coincidencia. Incluso ha encontrado alusiones al ciprés blanco, que simbológicamente parece asociado con las aguas del olvido.

Todo eso tiene mucho sentido —mascullo mientras termino de masticar y tragar—. La verdad es que ignoro qué desviación de esas creencias es la que sigue nuestro grupo de psicópatas, pero sea la que sea, de algún modo parecen haber llegado a alguna clase de verdad… O sea, si no, no serían capaces de hacer lo que hacen, ¿no? ¿Cómo podemos llamarlo? ¿Magia? ¿Poderes psíquicos?

Mientras divago, me cepillo la barba con los dedos, metiéndolos entre el pelo y tirando suavemente hacia abajo. Frunzo ligeramente los labios y asiento, ensimismado y con la mirada perdida, como si estuviera reflexionando sobre algo que, por vueltas que le doy, no logro comprender.

En fin. Bueno, me toca —digo, y parezco centrarme de repente. Abro la tapa de mi portátil y lo enciendo, dejando que vaya iniciando. Mientras tanto, como ya hiciera en el jardín de Saint Jean de Dieu hace una semana, empiezo a susurrar—. Como me imaginaba, no he conseguido ver a Montillet… Pero al saber que quería interrogar al tipo que lo apuñaló, un tal Julius Bacrotel, él mismo me organizó una reunión con él, dándome una palabra clave que debería decirle solo a él: «Nadir». Al parecer, desde que intentó asesinarlo involuntariamente, Bacrotel hace lo posible por colaborar con Montillet, y esa palabra serviría para que él supiera que estaba hablando con un amigo de David. Bueno, el caso: haciéndome pasar por un abogado de una ONG, logré acceder a Bacrotel. El tío ahora se hace llamar «el Asceta», apodo que desde luego le pegaba… —Hago un gesto con la mano, como señalando una larguísima barba—. Pues nada, en cuanto nos quedamos solos, dije «Nadir», y él empezó a hablar, así, sin más, sin que yo tuviese que preguntar nada. Me contó que había estado entrenándose para dormir lo menos posible, y que empezaba a ver imágenes de sucesos, o recuerdos, no lo tengo muy claro, que no sabía si eran reales o imaginados. —Me encojo de hombros, con una mirada que quiere decir: «¿Dónde está la línea que separa una cosa de la otra?»—. «Recordaba» haber despertado junto a Vendela, confuso, ambos desnudos y tapados por una piel de lobo. Ella estaba furiosa, y su piel se veía completamente negra, y sospecho que untuosa. ¿De qué nos suena? Bacrotel cree que ella lo mordió. También me dijo que creía haber estado bailando en el bosque, con las ropas hechas mierda, junto a «lobos a dos patas»… —digo, con una expresión de profunda extrañeza. Abro un archivo del escritorio de mi ordenador, que ya está activo, para consultar unas notas, por si la memoria me falla—. De fondo, en algún lugar del bosque, oía gritos y llantos de bebés. Creepy. También me dijo que, incluso despierto, pensaba muchísimo en Vendela, y ahora os vais a acojonar: me contó que un día, trabajando de camarero, presenció el almuerzo de Vendela con una chica con el pelo blanco —levanto los ojos hacia Sophie—, o sea, tú, y les sirvió unas perdices reservadas exclusivamente para cuando Vendela las pidiese. Terminó diciéndome que su intento de asesinar a David Montillet fue lo que marcó su despertar después de haber estado, de algún modo, durmiendo y soñando durante meses…

Lanzo un largo suspiro por la nariz, mirando sucesivamente a mis dos contertulios, especialmente a Sophie, para ver cómo reacciona ante lo que acabo de contar. En el silencio que acaba de formarse, solo son audibles mis dedos tamborileando sobre la mesa.

Bueno, eso por un lado —prosigo, cambiando de posición en el sofá—. Bacrotel y yo quedamos para vernos más adelante y seguir hablando, así que de momento, nada más. Ahora, segunda cosa: el psiquiatra de Montillet. Hervé Lurçat desapareció sin dejar rastro poco después de que entrases en coma —explico, mirando a Sophie—. Tardé mucho en encontrar información sobre él porque ha cambiado completamente de identidad, y cuando digo completamente, me refiero a que ahora se llama Geneviève Gibran. En efecto, se ha cambiado de sexo, y solo lo descubrí porque ha adoptado el apellido de su madre. —Vuelvo a bajar la vista, consultando mi portátil—. Trabaja como psiquiatra en la clínica mental Philippe Pinel, en el bosque cercano a Arras, muy al norte de Francia.

Doy una palmada y me froto las manos, y luego me aprieto los dedos, haciéndolos crujir.

En cambio, no me costó nada encontrar cosas sobre los Masaryk. Papá Masaryk fue embajador de Chequia en Francia, y actualmente representa al mismo país, pero a nivel europeo. El hijo, Eugene, el que le dio su tarjeta a tu hermana —continúo, mirando a Arthür a los ojos—, tiene mucha popularidad e influencia entre la clase alta, y cuando digo alta lo digo en serio. No he visto que se dedique a nada en particular, lo que tampoco me sorprende. Lo que sí me sorprende más es que políticos y altos empresarios de toda Europa lo veneren, poniéndolo por las nubes y ensalzándolo como si fuera una verdadera luminaria en nuestro continente. —Hago una breve pausa, preguntándome si acaso tanta influencia y estatus no se deberán a su dominio de la brujería—. El tío vive entre su palacio neobarroco del barrio de Montmartre y un castillo del siglo XVIII, regalo de cumpleaños de su amigo, nada menos que Antonio María de Bramate, duque de Lamboise. Ya os dije que este Eugene es un pez gordo… Intenté colarme en sus sistemas informáticos para descubrir más, pero mirad. —Muestro la pantalla de mi portátil, y mis amigos pueden ver una oleada abrumadora de datos de escasa relevancia que van llegando a mi ordenador de forma constante, en un goteo casi automático—. Es un sistema de camuflaje de red que no había visto en mi vida. Es más, con la de años de experiencia que tengo con los ordenadores, jamás me había imaginado que esto fuese posible…

Cierro la tapa de mi ordenador, y lanzo un ligero suspiro.

Por último: sí, coincido con Arthür. Encontrar piso, local, garaje o lo que sea para escondernos es un horror. Ni de coña hay algo mínimamente asequible y que se ajuste a lo que necesitamos.

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19/05/2016, 15:00
Sophie Taylor

El rostro de Sophie se había ensombreciendo poco a poco ante el relato de sus compañeros. Cada vez que se reunían y encajaban los pedazos de información que cada uno de ellos tenía, más se sorprendía la chica de sorprenderse siempre, de algún modo, en medio de todo aquello. Al comienzo de la conversación, la chica se estiró para alcanzar un cajón bajo de una de las vitrinas y sacó una pequeña libreta, donde empezó a tomar algunas notas mientras sus compañeros hablaban. Llevaba toda la semana haciéndolo, recopilando la información de la que disponía, tratando de encontrarle sentido. En un par de ocasiones, Sophie volvió varias páginas atrás de su libreta y rodeo con un círculo alguna palabra, antes de anotar algo más, todo sin dejar de escuchar a Arthür y Mats.

Finalmente le llegó su turno. No sabía bien por dónde empezar, así que decidió abordar primero lo más fácil.

-Creo que yo sí he encontrado un sitio donde podríamos quedarnos -dijo como respuesta a la última frase de Mats, contenta de, por una vez, ser útil -. Es poco más que una granja abandonada, pero no está lejos y está aislada. Una amiga de mi madre nos la dejaría por un precio simbólico. Aunque posiblemente tengamos que acondicionarla un poco, lleva muchos años sin usarse. Pero si tenemos que escondernos, creo que es el lugar perfecto.

Vale, sobre lo demás... Arthür, sí, esas mismas palabras fueron las que me dijo Vendela. Aunque, cómo no, ella sí quería que bebiera de la fuente. Imagino que para hacerme olvidar, o matarme, o cualquier cosa...

Mats, todo lo que te dijo ese hombre cuadra con lo que me ha pasado a mí. Desde lo dormir, desnudos, con Vendela bajo una piel... -la chica hizo una mueca de disgusto y se interrumpió al ver las caras que ponían los otros - Perdón, son recuerdos difusos, pero cuando me habló de la fuente y el ciprés blanco, cuando aún estaba en coma... bueno, creo que hizo eso... Y sí, nos sirvieron perdices en el almuerzo. Así que parece decir la verdad. Sobre el resto de lo que cuentas... no sé más de ello.

Lo que me ha pasado a mí estos días... tan sólo un par de cosas. He estado teniendo algunos sueños raros. No sé bien qué separar del mero sueño y qué puede tener sentido, pero en fin. Para empezar, el avestruz es recurrente en mis sueños, de una forma u otra. Arthür, tú sabes de símbolos, no sé si a ti te dice algo. Y anoche mismo soñé sobre un edificio en París, en el que no había estado nunca en la calle -consultó un momento su libreta - Roquette, en el cruce con Charles Dallery. En el sueño vi un cartel de "Se alquila" y un teléfono -les pasó la libreta, donde estaba el número anotado -. Lo he comprobado en internet, tanto el sitio como el teléfono existen. Y os juro que jamás había estado allí.

Y tal vez no sea nada, pero bueno... dudo mucho que cualquier cosa pase por casualidad ya. Han estado desapareciendo pequeñas cosas en casa, muchas sin importancia. He pensado sobre ello y me he dado cuenta de que todas las cosas brillaban. Un anillo, cubiertos, una pequeña figurita de un Óscar. Es sólo una intuición, pero creo que los cuervos, los que vimos en el pasillo, siguen visitándome.

Finalmente, Sophie dejó de hablar y, mientras esperaba la respuesta de sus compañeros, movió ligeramente la silla para tener una buena vista del pasillo, y poder cortar a tiempo la conversación si alguien se acercaba. Tenía previsto interrumpir cualquier cosa con un banal comentario sobre lo mucho que le gustaban los rollitos de canela si lo necesitaba.

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19/05/2016, 16:16
Arthür Guitry

Era sorprendente todo lo que habían averiguado sus compañeros e interesantísimo lo que había estado explicando Sophie de sus sueños. Lo que Bacrotel había contado a Mats más los recuerdos de la chica le dejaron pensativo:

—Mats, ¿te dijo Bacrotel por qué estaba entrenándose para no dormir? —sin dejarle responder aún les expuso el porqué de la pregunta —Cuando nos enfrentamos al hombre oscuro y todo terminó, Sobol estaba allí, en la habitación del hospital me refiero, frente a nosotros pero, ¿dónde estaba aquel hombre? Físicamente, quiero decir. ¿Podría ser que empleen su magia de posesión en «sueños», mientras duermen y/o hacen dormir a sus víctimas? Después de todo tanto el camarero como Sophie recuerdan a Vendela echada junto a ellos y todos los recuerdos siempre son confusos, pues si se llega a recordar algo puede confundirse fácilmente con un sueño. Tal vez por eso no quisieran a Sophie despierta... No, Sophie —se adelantó en el asiento en dirección a la chica—, no deseaban matarte, habrían habido mil oportunidades y métodos sencillos. Querían que durmieras y querían hacerte beber de la fuente del Olvido. No sé por qué pero algo sacarían con ello... Eso de soñar con cosas que no has visto nunca, ¿te había ocurrido alguna vez antes?

—Y tal vez la doctora Gibran sepa algo más. No creo que uno se cambie de sexo por ocultarse, suena un poco radical, pero, no sé, de algún modo sí podríamos decir que se ha apartado de su vida anterior. ¿Y si averiguó algo? Tal vez podríamos tratar de hablar con ella.

—Respecto a Eugene Masaryk... Es horrible que alguien así tenga semejante influencia en tanta gente a su vez influyente... Parece mucho más poderoso en más de un sentido que los «soñadores».

- Tiradas (1)

Notas de juego

Dire, quisiera hacer una tirada de Razón más Cultura académica por lo del simbolismo del avestruz.

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19/05/2016, 19:01
Mats Bergstrøm

No sé por qué, pero el hecho de que Sophie también haya vivido las experiencias que me contó el Asceta no me sorprende en absoluto. Más desconcertante es que haya soñado con un edificio real, existente, sin haberlo visto previamente, aunque visto lo visto, parece que todo es posible. A pesar de lo extraño e inquietante del dato, me sorprendo sonriendo cuando Sophie nos cuenta que sus amiguitos alados la visitan desde el «otro lado», robando pequeñas cosas brillantes a cambio de su protección, como si fueran duendes del hogar, traviesos aunque benignos. Me giro hacia Arthür cuando me pregunta por qué Bacrotel no quería dormir.

No. No me lo dijo. Pero tampoco me cuesta mucho imaginármelo. Cuando Montillet me habló acerca de los soñadores y de cómo convertían a la gente en sonámbulos, me contó que las personas psíquicamente vulnerables eran especialmente susceptibles a la posesión. Dentro de esa categoría entra la gente dormida, pero no exclusivamente. La inestabilidad mental, los trastornos de ansiedad o la depresión también facilitan el control a un soñador. Pero bueno, supongo que el Asceta quería dormir lo menos posible para darles menos oportunidades de entrar… —Resoplo, en un intento de risa que se queda a medias—. Dios, es alucinante. Como el puto Freddy Krueger. Duérmete y estás jodido…

Guardo silencio mientras Arthür continúa con su exposición, analizando las similitudes entre el relato de Bacrotel y las cosas vividas por Sophie. Lo que dice tiene todo el sentido. No, no querían matar a Sophie. Querían usarla en alguna clase de ritual, tal vez convertirla en sonámbula, como hicieron con el camarero. O tal vez quisieran iniciarla en cualquiera que sea la mierda en la que crean. Cuando mi amigo comenta el hecho de que Sophie haya soñado con algo antes de verlo, tomo la palabra:

¿Ves? Por eso. Creo que ellos se han dado cuenta de que eres especial, aún no sé por qué o en qué sentido, pero quieren utilizarte. Respecto a tu sueño en sí… —Hago una pausa, pensando si lo que voy a sugerir es demasiado absurdo. Pero demasiado, ¿comparándolo con qué? Así que decido hablar—: ¿Crees que tu subconsciente estaba tratando de avisarte de algo? Como una especie de premonición, quiero decir. Igual te estaba diciendo que donde tendríamos que refugiarnos es en ese piso en alquiler, y no en la granja de tu amiga… Dios. Suena tan absurdo… Pero no sé, no creo en las coincidencias, así que tu visión tiene que significar algo. Ese sitio tiene que ser importante… Supongo.

Asiento al oír la sugerencia de Arthür de ir a hablar con la doctora Gibran.

Totalmente. De hecho, tenía pensado ir a verla, pero está a tomar por culo de lejos, y con todo el lío no me ha dado tiempo. Pero vamos, que pienso hacerlo. Y si te apetece una excursión al norte de Francia, te puedes apuntar. Y sí… Masaryk es un cabrón muy poderoso. Se codea con la gente más rica e influyente de Europa, tío. Europa. Y sin embargo, no tenemos ni idea de quién es él o qué hace… Nada bueno, eso seguro.

Me doy unas palmaditas en los muslos, pensativo. Realmente no sé qué más decir.

Y entonces, un mal presentimiento asalta mi mente.

Por cierto… Os dije que David Montillet accedió a ayudar a mi periódico, pero no os dije cómo. Resulta que al día siguiente de nuestro encuentro, recibimos la noticia de que L’Hexagone había sido elegido ganador de un premio muy importante, concedido por la Asociación de Periodistas y Medios contra la Censura. La cena y la gala es mañana*, y como es natural, he de asistir. —Hago una pausa—. Y no sé por qué, pero me da miedo. Tengo la sensación de que va a pasar algo malo mañana por la noche…

O puede que no. Al fin y al cabo, el premio es gracias a Montillet. Sin embargo, no puedo quitarme esa sensación de encima.

Notas de juego

*CREO que es mañana XD. En realidad, Jérôme me dijo «en una semana», y técnicamente ha pasado una semana y un día... A no ser... ¡¡¡QUE SEA ESTA NOCHE!!! O_O

Dire, dime si es esta noche o mañana. Yo había puesto que mañana, por aquello de no ir tan ajustados, y que a lo mejor no hemos ido a ver a Sophie al cabo de siete días exactos. Pero si la gala es hoy, cámbialo, porfi.

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19/05/2016, 19:13
Director

Notas de juego

En el antiguo Egito la pluma del avestruz era símbolo de justicia, equidad y verdad. La pluma del avestruz se elevaba sobre la cabeza de la Maat, diosa de la justicia y verdad, que presidía la ponderación de las almas; servía igualmente de justa pesa en la balanza del juicio.

Uno de los ámbitos icnográficos más relevantes en la iconografía de Maat y de su pluma son las escenas de psicostasia. En este juicio supremo ante el tribunal presidido por Osiris, el difunto debía demostrar su absoluta pureza para poder acceder a la eternidad. Ello queda gráficamente expresado en una balanza que porta en uno de los platillos el corazón del individuo y sede de su conciencia, ocupando el otro platillo una pluma de avestruz en alusión a Maat (o, en ocasiones, la propia representación de la diosa). Una balanza en perfecto equilibrio era el resultado deseado para acceder a una existencia sin límites

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19/05/2016, 19:24
Director

Notas de juego

Perfecto, mañana.

:-)

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20/05/2016, 09:49
Arthür Guitry

Sin dejar de escuchar a sus compañeros Arthür buscó el cruce de calles de que habló Sophie con el teléfono móvil. Por la ubicación pensó que podrían inferir lo poco asequible que pudiera ser.

—Aunque tenga algo de inquietante la verdad es que me alegra mucho saber que los cuervos están vigilando. «Si no llega a ser por Hugin y Munin no estamos ahora aquí...» —Arthür ya los había bautizado en su mente como a los dos cuervos de Odín.

—Y respecto al avestruz, sí, sí, algo he leído —levantó la vista del teléfono—. No sé en otros pueblos de África, pero en el Antiguo Egipto la pluma del avestruz tenía un simbolismo muy importante. Se consideraba una representación de la Maat, del Orden universal, la Justicia y la Verdad, tal era así que se decía que Maat era el alimento de los dioses y se la representaba también como a una diosa que portaba como distintito una pluma de avestruz en la cabeza. Y por cierto, ahora que hablábamos de destinos post mortem: en el juicio de las almas, el juicio de Osiris en este caso, se pesaba el corazón del difunto en una balanza colocándolo en uno de los platillos -corazón que representa la conciencia y el centro espiritual de la persona- y en el otro una pluma de avestruz. El corazón tenía que ser ligero y no debía pesar más que la pluma para superar el juicio. —Llegó el punto en que pensó que tal vez se había emocionado demasiado y dado detalles de más. —Bueno, en cualquier caso es todo favorable. —se volvió a Sophie sonriendo. —Estoy de acuerdo en que como poco habría que investigar esa casa que has visto en tus sueños —se quedó mirando la pantalla del móvil—. Si fuera asequible el hecho sería aún más milagroso, si cabe —les pasó el teléfono a sus amigos para que vieran el emplazamiento, aunque Sophie ya lo conociera —: al final de Roquette está el cementerio de Père Lachaise. Y en realidad ese cruce está mucho más cerca todavía de la plaza de la Bastilla.

—Estoy a tu disposición si necesitas cualquier cosa para mañana, Mats. Como mínimo estar en contacto por si pasa lo que sea y pudiera ayudarte. ¿Sabes si Vendela conoce la relación entre el premio concedido a tu periódico y el señor Montillet?

Notas de juego

Dire, he buscado la dirección con el google maps porque imaginaba que existiría de verdad. Si no estás de acuerdo con cualquier cosa lo dices y editamos.

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20/05/2016, 10:05
Director

Notas de juego

Es el número 67 de Roquette, la finca de ladrillo rojo, con una puerta un poco desconchada, pintada de rojo y un restaurante de Sushi. Prente a un parquecito. Os la eneseño porque la podéis ver en el móvil. En este link.

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20/05/2016, 12:26
Mats Bergstrøm

Una vez más, Arthür nos sorprende con una detallada explicación del significado simbólico del avestruz, más concretamente de sus plumas, en la religión del antiguo Egipto. Es fascinante la cantidad inagotable de conocimientos que cabe en su cabeza. Probablemente, Arthür se habrá pasado toda su vida estudiando. Es más, seguro que aún continúa haciéndolo. En todo caso, la pluma del avestruz parece tener una connotación de justicia, de baremo de medición de la conciencia y de la pureza espiritual. De ser así, la aparición del avestruz en los sueños de Sophie no tendría ningún significado pernicioso, al menos por el momento. Claro que si nos ponemos a darle vueltas, podría ser la advertencia de un juicio inminente, el consejo de que Sophie debe mantener su alma pura para cuando este llegue… No puedo evitar sonreír. ¿Quién hubiera dicho que acabaría creyendo en sueños de naturaleza profética o esotérica?

Arthür me ofrece su ayuda para lo que sea que pueda suceder mañana. La verdad es que puede ser solo una falsa alarma, pero de algún modo, una reunión donde estarán todos mis amigos se me antoja una ocasión suculenta para que nuestros enemigos ataquen. Yo desde luego no la desaprovecharía, y eso es precisamente lo que me da pánico.

Te lo agradezco mucho, Arthür. De verdad —le respondo sinceramente, mirándolo a los ojos—. Mira, no te estaba pidiendo que te implicases. Tú tendrás tu vida y tus cosas que hacer, y además, seguramente solo sea una neura mía… Es poco probable que Vendela sepa nada ni del periódico ni de la relación del premio con David. Para empezar, se supone que cree que su marido está muerto, y en principio no ha ocurrido nada para que sospeche lo contrario, pero, ¿quién sabe? Quizá hayan podido leernos la mente o algo… —Chasqueo la lengua. En vez de tranquilizarme, me estoy preocupando más—. No sé, tío. No sé nada. A estas alturas ya no sé qué pueden saber y qué no. Pero ya te digo, mañana no tiene por qué pasar nada. Es solo, en fin, un pálpito. Una corazonada. Bah, seguramente no pase nada… —Sonrío—. Pero bueno, si te apetece y no tienes nada más que hacer, en este tipo de eventos siempre dejan asistir con un acompañante. En este caso concreto no lo sé seguro, pero puedo preguntárselo a mi jefe. Eso sí, tendrías que ir de etiqueta. Y bueno, si al final no pasa nada, tendrás cena y fiesta por el morro. —Guiño un ojo a Arthür—. So will it be yes or no?

Por una parte, no me gustaría poner en peligro innecesariamente a Arthür, pero por otro, contar con su compañía me haría sentirme más seguro si ocurriese algo inesperado.

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20/05/2016, 13:07
Arthür Guitry

Las palabras «etiqueta» y sobre todo «fiesta» con desconocidos no eran lo que más le apetecía del mundo pero cabía la posibilidad de que aquella gente vigilara de algún modo el periódico de Mats o cualquier otra cosa y no estaría de más poderle acompañar.

—También creo que lo más probable es que no suceda nada pero, en caso de que alguno de ellos anduviera por allí, tal vez podríamos darnos cuenta, como ocurrió con el doctor Sobol... Es mejor ser precavidos, sí, te acompañaré. «Tendré que llevar el traje de la graduación a una tintorería de urgencia». Ya me dirás dónde y cuándo nos encontramos.

—La furgoneta de mi hermana está a nuestra disposición mientras esté fuera -la he convencido de que le vendría bien un cambio de aires-, así que si necesitáis lo que sea, cuando sea, durante dos semanas tengo quien me cubra en el trabajo. No habrá ningún problema, ¿eh? —miró alternadamente a los dos mientras asentía con la cabeza para recalcar la sinceridad de su ofrecimiento. —«Todos para uno...» —sonrió.

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20/05/2016, 14:43
Sophie Taylor

Tras la explicación de Arthür sobre el significado de la pluma del avestruz, Sophie asiente enérgicamente. Sí, todo lo que dice tiene sentido con sus sueños, aunque sea un sentido un poco... perturbador.

-¡Sí, sí! En uno de los sueños, soñaba con Eugene* y... estaba comiendo un corazón y me decía precisamente eso: que mi corazón debía ser ligero como la pluma de un avestruz para que no terminase en su plato. Y puede que tengas razón sobre lo del piso en alquiler, porque veía el alquiler justo después de estar paseando en la granja, que estaba en ruinas... Sí, quizás sea una señal de que debemos ir allí. ¿Creéis que deberíamos llamar? ¿Ir directamente? Maldita sea, ojalá entendiese que significan estos sueños...

 

Notas de juego

La verdad es que ahora mismo estoy confuso con quién es Eugene. Creo que es la pareja de de Antoine, lo que pasa es que yo había imaginado a Antoine como un hermano, pero creo que Cusa lo ha puesto como hermana, así que no estoy seguro jajaja.

Perdonad por no poder postear por las mañanas, pero me es imposible!

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20/05/2016, 15:48
Director

Notas de juego

¡Cuidado! Eugene es el rubio del pasillo, el del ruido de los pasos, el que estaba rodeado por una especie de vórtice de oscuridad, vamos... ¡Creo que lo has confundido con la encantadora Emmanuelle, la novia de Antoine y cuñada de Sophie. No digo que no sea relativamente común un cuñad@ rodead@ de un vórtice de oscuridad, pero este no es el caso. XD

Edito: por cierto, yo tengo una especie de afasia para los nombres, y los suelo cambiar así que cualquier duda preguntad, que suelo liarla parada y podéis acabar pegándole un tiro a una cuñada... XDDDD