Partida Rol por web

El servidor dorado despliega dos sopletes de alta temperatura y se lanza girando contra los ojos del enjambre. Sin embargo, el objetivo es demasiado pequeño incluso para los precisos movimientos de la criatura, más acostumbrada a soldar, montar y desmontar, que a atacar. Los ojos desaparecen unos segundos bajo una nube de insectos; la nube se desplaza hacia atrás, y reaparecen unos segundos después.

Erick echó un vistazo por el tetrico teatro en el que estaban. Por un momento pensó en tratar de activar el sistema antiincendios y empapar a los insectos. Pero algo le decia que no sería tan facl de hacer en este lugar, independientemente de que podría salir cualquier cosa de ahí.

Al ver como Dai se abalanzaba contra los ojos de la criatura pensó que era una buena idea, ya que era lo único medianamente solido que tenía el ser.
Concentrandose nuevamente en el bastón, lo volvió a transformar en una lanza.

Con Gotterdamerung bien aferrada en las manos cargó contra los ojos de Hundun.

Oh padre, guia mi mano para que sea certera y da fuerza a mi brazo para destrozar a mi enemigo.

ODÍÍÍNN

Mientras el enjambre estaba entretenido intentando esquivar los sopletes del servidor dorado de Marielle, Erik ataca por otro ángulo. El instante que el enjambre pierde esquivando al servidor le sirve a Erik para colocarse en una posición favorable y clavar la punta de su lanza en uno de los ojos amarillos de la criatura. Esta vez, la criatura emite un chillido de dolor, que suena como un zumbido. Parece que este ataque si que le ha dolido.

A la par que Erick se lanza hacia delante cojo mi Atlat Solar y de repente aparecen 5 Venablos listos para ser lanzados.

Preparo el primero de ellos en el Atlat y lo lanzo hacia la pared del fondo para que rebote finalmente llegue por detrás hasta uno de los Ojos de la Criatura mientras Erick lo golpea por delante.

Al rebotar contra la pared, el venablo se desvía de su trayectoria y se clava en el suelo, cerca del núcleo del enjambre, pero sin tocarle.

-¡Mierda!-fue el gruñido de asco y temor que me salío sólo de la boca cuando el cuerpo de uno de los cultistas se hizo polvo literal al caer a mis pies, uniendo al enjambre otro puñado de moscas que acabó envolviéndonos. Moscas que, ya habíamos visto, se metían por todos tus orificios corporales y te jodían la cabeza.

Si las moscas ya eran malas, nuestro nuevo escenario era aún peor; me cubrí la nariz y la boca con el guante que me había quitado, reprimiendo una náusea. No es que mis zombis sean las criaturas más guapetonas y adorables del mundo, pero esto es otro nivel de olores y sensaciones visuales. La voz de Hundun era, si bien no, igual de molesta.

Dai es la primera en tratar de atacarle, pero sólo resulta en un ejército de moscas tratando de rodearles a ella, Ab y Marielle, consiguiéndolo sólo con los dos últimos. Atacar al centro, donde los ojos, no había valido para Dai, pero sí para Erick, así que trato de imitarle. Con el estilete me parece arriesgado, por la proximidad que me supone, así que engancho enseguida la Colt de mi bolso y apunto al núcleo de Hundun.

Bern dispara su revólver, pero los nervios le juegan una mala pasada y falla el tiro

Trata de buscar otras cosas que hacer en combate; diez zombis aumentan bastante el número de objetivos para los enemigos, puedes usar dones... o ser imaginativa con el escenario ^^

Se que tu personaje es muy social y en estas situaciones no tiene mucho que hacer, pero no te preocupes, esto es para "entrar en calor"; después de esto si vas a tener posibilidades de utilizar tu personaje al 100%

Chicos?

-!Argh, joder¡

Fui impactado por uno de los tentaculos, o por lo menos eso creo, de Hundun, sufriendo algo inusual. No es como que me hubiese echo daño y sangrase, es mas bien, al reves, es como si hubiese intentado introducirse dentro de mi e intentando detrozarme por dentro, corrompiendo mi sangre con un veneno enloquecedor. Pude resisttirme ante tal ofensiva, conservando mi buen juicio, pero creo que un poco si me afecto, porque en aquel momento, realmente me senti cabreado.

-¿Veneno?¿Eso es tu gran ataque?- Chille enfurecido, mostrando los diente y gruñendo como una animal rabioso.-!De yo provengo, me he comido escorpiones crudos como aperitivo¡

Sin decir nada mas, ataco con mi espada, pasandola de mano en mano, de frente a espalda, haciendo extrañas maniobras giratorias con estas a mi alrededor, en un hipnotizador juego de manos, hasta acabar frente al amasijo de cucarachas que era nuestro enemigo, y extender la espada en un continuo movimiento giratorio de 360 grados, cortando en pedazos como si fuera las helices de un ventilador.

Marielle comenzó a moverse inquieta en su sitio. El ataque de su servidor no había servido de nada. No sabía que hacer. Intranquila, se devanó los esos pensando algo para hacer verdadero daño al enjambre.

Fue entonces cuando lo vió. Un extintor justo detrás del escenario. Si iba a por él tendría que esquivar los filos herrumbrosos de la torre de los focos, además de enfrentarse al enjambre, No obstante, no hay victoria sin sacrificio.

Decidida, se alejó del grupo y salió corriendo como alma que lleva el diablo hacia el escenario. Por suerte no era corpulenta, sino más bien canija, y por ello tenía más facil poder llegar al extintor. No obstante, no era tarea fácil. Trató de escurirse entre la torre, y de esta forma coger el extintor y usarlo contra la marabunta de insectos.

Dai viendo que no sería tan fácil como había pensado el poder herirle, miró su katana y entonó un suave cántico:

Hagane-fu no Kami
Sourumeito

Anata no sonzai o kongan suru watashi no inori ni sābisu o teikyō
Watashi jishin wa to michibiku watashi no ken

Necesitaba que Hagane-sama la ayudara a descubrir el punto débil de aquel horrible ser para poder destruirlo y evitar que más inocentes pagaran con su vida.

El espíritu de la espada vuelve a manifestarse

- Esa criatura.... un engendro del Titán del Caos. Extiende la locura y la anarquía, y por ello no resiste los poderes de la justicia y la protección. Si queréis vencerlo debéis atacar directamente a sus ojos; es la única parte verdaderamente sólida de su cuerpo.

Haciendo una serie de movimientos giratorios, Abdallah empieza a cortar a diestro y siniestro contra el enjambre. Montones de insectos caen destrozados a sus pies, y durante un momento el enjambre parece desmaterializarse y desaparecer. Sin embargo, solo unos segundos después, se rematerializa con renovadas energías. Emite una carcajada siniestra.

Entonces, Marielle sale de detrás del escenario con un extintor, y apunta la manguera hacia el núcleo de la criatura. Una nube de nieve carbónica envuelve el escenario, y montones de insectos empiezan a caer muertos al suelo. Cuando la nube se difumina, veis que el enjambre ha tomado una nueva forma. Esta vez no es una masa informe de insectos; ha tomado una forma humanoide, sin rasgos distintivos salvo sus dos grandes ojos amarillos. Se mueve lentamente, dando pasos, como si ahora estuviese limitado por su forma.

- Eso... ha...dolido

El enjambre extiende sus dos brazos, que se convierten en dos enormes cobras compuestas por insectos que zumban. Lanza un brazo contra Erik, y otro contra Marielle, buscando venganza. Sin embargo, debe estar muy debilitado, ya que ambos esquivan los colmillos de las serpientes con solo agacharse en el momento preciso

Aliviada, pero con las piernas aún temblando de miedo, Marielle relaja los brazos pero sin dejar de sujetar el extintor, y procede a darle órdenes al servidor. Ahora que ha adquirido forma humana, es más fácil atacarle. Estamos atacando a algo concreto, no a una masa informe de insectos. Por ello, Marielle ordena a su servidor atacar a la figura con sus sierras y sopletes.

Dai asintió a las palabras de su guía, y con una ligera reverencia de la cabeza, le mostró su respeto y le agradeció sus palabras.

Después con su agilidad habitual y su rabia aún intacta, se dirigió hacia la criatura ahora con forma humana.

Katana en posición y mirada fiera, un ligero y rápido movimiento para tratar de alcanzar sus ojos con la punta de su arma y poder así afligir el máximo de daño posible.

El servidor vuelve a atacar, pero sus sierras pasan inofensivamente por el cuerpo de la criatura, dejando solo unos pocos insectos muertos a su paso.

Sin embargo, el ataque ha servido para distraer unas décimas al enjambre, momento que Dai aprovecha para realizar un ataque. Lanzándose directamente hacia su objetivo, Dai salta y realiza una pasada de su katana contra la cabeza del ser. El golpe es preciso y consigue darle justo en los ojos. La criatura aulla de dolor y cae de rodillas al suelo. Empieza a estar muy debilitada; el zumbido se hace menos intenso, y parece que hay más insectos muertos en el suelo que componiendo el cuerpo del enjambre.

- Esto... esto no puede... estar ocurriéndome

El engendro del caos habia recibido ya mucho daño. Estaba claro que no aguantaría mucho más. Sólo le faltaba un pequeño empujón y lo destruirían por completo. Un enemigo más que  mordía el polvo. Un paso más a hacia la victoria de una guerra interminable.

Erick trata de acabar ya con la criatura, pero pese a estar debilitada no quiere decir que esté acabada. En el último momento la figura se descompone dejando que la lanza le atraviese sin causarle daño.