Partida Rol por web

bueno pues a lo profundo del abismo dirijamonos, que vaya el calvo delante, si hay algo chungo ahí abajo estilo megalodon seguro que lo asustara con esa fea cara de os voy a matar a todos- Bromeo intentando quitarle tensión a la peligrosa sumergida que vamos a hacer, a saber que guardia submarina puede llegar a tener este templo.

El descenso en el submarino se iba a producir más tarde o ,incluso, antes. Así que, con alguna de las dudas de los presentes, el equipo fue introduciéndose en aquel submarino.

Sin que os dieseis cuenta, uno de los integrantes se cambió por la barbie de carácter fuerte. Asi pues, para cuando os fijasteis, el calvito y ella, ya estaban adentro. 

-Bien, señores, ¿habéis memorizado el plano? -comentaba el hombre al mismo tiempo que invitaba al capitán a llevar aquel ''trasto''.

Por otro lado, Victoria, caminó hacia la parte trasera y allí cogió cinco bolsas con objetos útiles. Se refirió a ella como ''kit de supervivencia'' y os la entregó:

Necesitáis armas. En la expedición a la Atlántida, uno de los integrantes de un equipo que colaboró, tuvo dificultades con la bombona de oxígeno; otro, fue devorado por un animal primitivo.

Al principio , la presión era leve, apenas se podía notar. Sin embargo, a medida que ibais descendiendo esta se hacía patente. Entretanto, algún más que otro ser acuático se podía ver.

Observaste como los cinco chicos se adentraban en el submarino. Para colmo, sin que ellos se diesen cuenta, hubo un cambio del personal y, el hombre melenudo fue sustituido por Victoria.

Creo que estarás más cómoda si ella se cambia...

Con ayuda del hombre, éste te cogió en brazos y caminasteis por el puerto, en busca de un vehículo. Obviamente podías andar, pero eso suponía que la herida se abriera más , con lo cual, la opción más viable era acaparar órdenes hasta nuevo aviso. Entretanto, mientras que el dúo conseguía un vehículo, podías oír algo acerca del Bosque de los suicidios.

Para cuando te diste cuenta, estabas subida a un Jeep y, aquello, sólo podía decirte que nada iba a salir bien. Pues todos los desplazamientos que en películas se hubieran realizado en un vehículo como ese... en fin, tú solo esperabas que saliese bien y que te quitasen la bala de la pierna.

Por suerte, el hombre sí tenía conocimientos sobre extraer balas -dato que aún más podía mostrarte hasta qué punto llegaba esta organización-, por lo que , mientras conducía, le daba órdenes a Abril.

Esto... te va a doler, ten un trapo en la boca.

-Gracias...- murmuré al hombre que me cargó, incluso si solo lo hacía por cumplir órdenes y lo repetí para Abril cuando me confirmó que aquella loca finalmente no me acompañaría. Me sentía frágil en aquel estado y en un choche lleno de gente que trabajaba para una organización de la que ya me habían dejado claro que no debía fiarme, pero no tenía mucha otra opción en aquel momento.

Cuando me ofrecieron el trapo le dirigí una mirada algo asustada pero... -me pongo en tus manos- dije finalmente, mientras me llevaba el trapo a la boca y deseaba que no empeorase más mi situación. 

-Anda has decidido pasarte al equipo de los chicos guapetes- le digo a victoria cuando la veo dentro del submarino- no te juzgo cualquiera es mejor que aguantar un día mas a la Sargento de Hierro que tiene empleada el capitán Hallmar y la presumida deprimente de Abril.

-¿Bueno que hay dentro de la bolsa? ,en mis haberes no hay nada con lo que me pueda defender en el agua- pregunto mientras miro la bolsa que nos entrega.

Mientras me intentaba relajar miré cómo uno de los integrantes del grupo que nos acompañaba se marchaba y apareció la rubia psicópata lo que me hizo abrir los ojos de tal tamaño como el escudo de el Capitán América. Intenté apartar la mirada con un gesto de desagrado pero antes cruzamos las miradas y otro latigazo en mi espina dorsal apareció, un escalofrío brutal, era muy extraño, pero lo achaqué a la horrible escena que habíamos presenciado antes.

Cita:

-Sí, estaba chupado, he memorizado mapas más complejos que éste, en el colegio sin ir más lejos-dije torciendo el gesto pero sin dejar de apartar mi mirada de sus ojos-Otra cosa es lo que realmente haya allí abajo y que no haya muchos derrumbes por el desgaste o corrimientos de tierra-mascullé frunciendo el ceño. Entonces nos trago una especie de macuto.

Cita:

Cogí uno de los macutos y lo abrí para inspeccionar su contenido-Que maravilla a parte de peligro de quedar atrapados, quizás nos coma algún bicho prehistórico, ésto mejora por momentos-miré de reojo a Teo, el cual intervino.

Cita:

-Pse, normal, esa mujer es insoportable, lás únicas mujeres agradables en el viaje son Abril y Marina, que gracias a tí, ahora tiene un balazo en la pierna-miré con dureza a Victoria-Es una de las mejores submarinistas y no deberías haberlo hecho, ahora tenemos un especialista menos, a no ser que tú seas tan buena como ella, cosa que no tengo clara, nisiquiera si te vas a mojar el culo aquí abajo-dije con un ligero tono interrogante, mientras terminaba de inspeccionar mi macuto.

Victoria bajó la guardia y sus brazos quedaron relajados a la altura de su cintura. Miró uno a uno a los presentes que allí estaban pendiente de su respuesta y de la nueva decisión.

Lo que tenéis ... son armas, señor Drake... John...Drake, ¿verdad? Además de algunos botiquines. Ya sabéis, esta es la primera vez que Triquel no se sabe a qué se enfrenta. 

La mujer miraba de reojo a su compañero, una parte de ella no quería perderlo de vista. 

¿Y por qué no se han ido con el capitán si son sus empleados?

Anda has decidido pasarte al equipo de los chicos guapetes

Eso debo de juzgarlo por mí misma, señor ...Romasanta -comentó con una leve sonrisa de oreja a oreja-. 

En esos instantes, la respuesta del submarinista llegó a sus oídos, lo que hizo que la rubia se girara hacia él.

Evidentemente, no estaría aquí si no fuese mejor que ella. Además, seguro que prefieres ver otro color de cabello que no sea los típicos castaños. ¿Dices que mi compañera Abril es amable? No te fíes, ¿quieres volver a la tierra e irte con Marina? Adelante, seguramente la maten. Hum... veo que no has perdido el sentido del humor... Me gusta.

Después, volvió a colocarse al lado de Grzegorz, para ver qué era lo que estaba tramando en su cuaderno. Se inclinó, ladeó la cabeza y dijo:

Necesito su ayuda... ¿Podría trazar un dibujo del templo y ,mientras tanto, trazamos un plan todos juntos?

Mientras tanto, John Jackson, que así era como se denominaba el hombre, miraba la escena de aquella mujer con algunas dudas. ¿Por qué conocía a ese tal Romasanta? ¿No sé suponía que debían de ser miembros ajenos a todo tipo de relación entre los trabajadores de Triquel? 

Aquello no le daba espina. Además, ¿por qué iba a confiar él en una mujer que no pintaba ni cortaba en una misión como aquella? ¿Por qué diablos le había llamado Abril? ¿Es que Victoria era un topo? Si aquello fuera cierto, debía de acabar con ella.

Jackson se acercó a ti. Sabía quien eras y tu objetivo allí. Al parecer, el señor Ainsworth dejó de fiarse de la señorita Victoria, o eso suponía él, pues no comprendía nada de nada.

Necesito que extermines a esa mujer y yo cojo el Edén, no me fío de ella. Pudiera tratarse de una trampa... 

¿Cómo que va a venir? Se preguntó, observando a Victoria, por primera vez un gesto de espanto le cruzo la cara, pero apenas dijo nada excepto cuando preguntaron a todos si habían memorizado el mapa.

-Lo he memorizado –acepto con la calma de una estatua Anteros, cuando más tiempo llevaba allí más tenso se sentía el aire, sabía bien porque estaba todo tan incómodo y no era sorpresa, lo que lo llevaba a decir pocas palabras; o mejor no decir nada.

Aunque lo último era más evidente pues me limitaba a mirar la interacción entre los otros.

Recibí la mochila de manos de Victoria y la abrí, revisando su interior para lo cual se alejo del resto sin demostrar demasiado interés en los juegos de palabras que había al otro lado y un poco después volvió con el resto. momento en que hablo. 

-Necesitaremos un informe de cuál es el plan de acción, más allá de sumergirnos en el agua e ir allá dentro. ¿Quiénes irán delante? ¿Saldrá al agua con nosotros? –vio a Victoria directamente – Para presuponer que le seguiremos a usted, ¿o será al señor Drake? Que es quién podrá moverse mejor que el resto, dados sus conocimientos y capacidades. Solo señalo que el liderazgo de grupo debe definirse según las capacidades del sujeto y el ambiente.

Eran más palabras de las que había dicho en mucho tiempo, pero empezaba a hartarse. Victoria le provocaba la misma sensación que una serpiente real… no sabes si en realidad es una coral.

Y con ella… la cosa era el doble de peligrosa, porque desde luego es una coral...

Jackson se acercó a ti. Sabía quien eras y tu objetivo allí. Al parecer, el señor Ainsworth dejó de fiarse de la señorita Victoria, o eso suponía él, pues no comprendía nada de nada.

Necesito que extermines a esa mujer y yo cojo el Edén, no me fío de ella. Pudiera tratarse de una trampa... 

Revisaba la mochila (sentado) cuando él se acercó, fije la mirada en sus ojos leyéndole no sin cierto desprecio escondido bajo la calma fría de mi apariencia externa. 

-¿Son ordenes directas o solo fruto de tu sensible sentido de percepción? - el tono de la pregunta fue impersonal, como si en realidad la respuesta no importaba -Tomarás el edén cuando lo tengamos, el mapa nos fue entregado por Abril, por lo que este debería estar bien, la chica es sensata para traicionar a Triquel de buenas a primeras... pero asesinar a una de las mejores agentes de la organización no es sabio ¿Que diremos cuando subamos? ¿Creímos que era una traidora y no quisimos arriesgarnos? ... así que tratare de mantener la vida de Drake y Grzegorz -pronuncio los nombres con retintín -son los únicos necesarios para llegar al fruto, mis conocimientos de la cultura que visitaremos... son limitados. 

Estaba listo para cualquier ataque, pero sabía que no era necesario estarlo... el otro no era idiota para atacarlo allí; del mismo modo en su mirada había una sencilla aceptación a matar a quienes fueran necesarios. Si Victoria daba una solo muestra de inestabilidad... acabaría con ella incluso si eso le causaba pena. 

-Si, por supuesto... De hecho lo tenía en mente. Saqué un cuaderno con una lapicera enganchada en las anillas. Como marcapáginas tenía el propio mapa. Al abrirlo por ahí mostré los bocetos de lo que era el inicio de la copia. Apenas había tenido dos minutos y los trazos estaban flojos y desdibujados.

-Aquí está. Preferiría salir de este submarino con un plan claro señorita... Hasan? Digo dudando unos instantes.

La victoria de dentro del submarino parece mas relajada que la de fuera por alguna razón, peor quien llamaba mas la atención era el don limpio en neopreno que viajaba con ellos, allí en su esquina silencioso sin quitarle ojo a ninguno.
Ey tu, el hombre con cara de muerte perpetua que nos observa en las sombras-digo dirigiendome a el- estaría bien conocer tu nombre y que participaras un poco dando tu opinión, no se llamame loco pero estaría bien un mínimo interacción para conocernos ya que ahí abajo tenemos que cuidar los unos de los otros.
 

La rubia psicópata me miró y noté algo raro en sus ojos por una milésima de segundo..¿Estaría pensando en cómo matarme? A saber, aquella mujer despertaba en mi una sensación muy extraña.

Cita:

-Si, así me llamo y tú eres... Victoria ¿No? A Teo se le escapó tu nombre-dije tomándome la libertad de tutearla-No hay problema con las armas, si logro atravesar un pez con un arpón bajo el agua con ésto me será más fácil-dije mostrando la pistola que había en el macuto. No era un especialista en armas pero me defendía bien.

Cita:

Reí ante el comentario de Teo-Oh vamos, aceptalo, te has quedado con lo mejor del grupo, además si dices que quedarse arriba es un suicidio, te va a venir hasta bien-dije guiñándole un ojo. No sé si sería la presión de miles de kilos contra el casco, pero parecía que Hassan se había tranquilizado.

Cita:

Mis ojos la miraron con extrañeza, ni conocía mucho a Marina pero ya la había visto en acción se desenvolvía perfectamente, pero Victoria...de momento lo único que podía creer era en su palabra de desequilibrada-Si eres tan buena como dices lo demostrarás en unos minutos así que ya veremos si lo que dices es cierto-dije con una pequeña sonrisa desafiante-En cuanto al color de pelo... no lo negaré, mis favoritas son las rubias y las pelirrojas, así que no me quejaré. En cuanto a mí podré perder el pelo, podré perder mi sexapeal pero nunca mi sentido del humor- contesté dejando el macuto entre mis piernas, momento que aprovecharon mis compañeros para intervenir.

-Me uno a la petición, supongo que ya tendréis un plan bien organizado aquí abajo y yo no pienso meterme ahí dentro sin tener objetivos claros- aseguré mirando a los dos hombres que me acompañaban terminando en Teo, al cual sonreí por su comentario-Eso hombre, intégrate con nosotros que vas a quedar como el raro de clase-dije con tono jocoso, aunque claro estaba que al bola de billar no le iba a hacer ninguna gracia.