Partida Rol por web

El Medallón de Lolth

05. Una situación tensa

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10/11/2012, 12:17
Director

Un humano y un mediano junto a un montículo de restos. Otro humano pidiendo explicaciones y a punto de desenvainar la cimitarra. Desde luego, aquella era una situación de lo más tensa.

Notas de juego

Abro escena en común.

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10/11/2012, 12:18
Director

Notas de juego

Como estás escondido, escuchas y ves lo que hacen todos, pero hasta que hagas algo que denote que te encuentras allí, ninguno de ellos ha notado tu presencia, así que mientras sigas de incógnito, postea en privado en esta escena :)

En cuanto indiques tu presencia, postea en abierto, ¿okis?

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10/11/2012, 20:13
Rolan

Un escalofrío recorrió el cuerpo de Rolan cuándo vió el nombre de Cecil en el montículo de delante de la casa. ¿Ha fallecido? ¿Quienes son esos extraños? pensó el viejo marinero mientras observaba oculto en las sombras.

Decidió salir a la luz y dirigirse, con una mano posada sobre su envainada cimitarra, a los dos extraños individuos:

- ¿Quienes sois y qué ha pasado aquí?- dijo con un tono duro y desconfiado.

Notas de juego

He copiado el mismo mensaje de la escena privada, así ya rompo el hielo!

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10/11/2012, 20:18
Demian

Me incorporé sobresaltado. No esperaba una irrupción tan repentina. El hombre parecía confuso, y no se lo reprocho pues la escena que estábamos protagonizando Wimper y yo era, cuanto menos, pintoresca. Di un paso hacia el hombre y, con tono amable y tranquilo, traté de explicar lo que ocurría:

No se alarme, buen hombre. Mi amigo y yo hemos ayudado a una mujer cuya casa había sido asaltada por los hombres que ve a nuestro lado, en el suelo. No somos bandidos. Nos disponíamos a enterrar los cuerpos, pero nos pareció prudente registrar sus ropas antes para tratar de averiguar quiénes eran o qué buscaban.

No sabía si estaba dando demasiada información, pero pese al aspecto agresivo del hombre, algo me decía que no tenía malas intenciones.

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11/11/2012, 19:04
Kaelendril
Sólo para el director

Notas de juego

Como estás escondido, escuchas y ves lo que hacen todos, pero hasta que hagas algo que denote que te encuentras allí, ninguno de ellos ha notado tu presencia, así que mientras sigas de incógnito, postea en privado en esta escena :)

En cuanto indiques tu presencia, postea en abierto, ¿okis?

De acuerdo, no hay problema.

Voy a esperarme un poco a ver qué hacen y actuaré acorde con lo que suceda. Pero, ya estoy preparando el post.

También quiero avisarte de una cosa: a partir de ahora alternaré la primera y tercera persona como estaba haciendo en mis anteriores posts. Solo que esta vez, cuando hable en primera persona, serán posts que solo leerás tu; y la tercera lo leerá el grupo.

Y creo que eso es todo :)

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13/11/2012, 05:00
Wimper

Dirijo mi mirada hacia el recién llegado y me sorprendo al ver su actitud, pero el saber que conocía a Cecil me da algo de tranquilidad. No puede ser alguien malo. -Es cierto lo que dice mi compañero. Hemos salvado al primogénito del hombre por el que usted pregunta y a su esposa también, dando lo máximo de nosotros. Con él no pudo ser lo mismo, porque Arrya nos encontró luego del horrible suceso. Parece que todo fue por ese misterioso medallón...- comento, algo resignado por la situación, agachando la cabeza y apretando fuerte mi puño.

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13/11/2012, 20:13
Kaelendril
Sólo para el director

Aquello tenía mala pinta. La súbita aparición de aquel hombre viejo saliendo de entre los matorrales, parecía indicar que se iban a producir algunos problemas. Os engañaría a todos si dijese que me lancé de súbito a ayudar al mediano y al humano, pero lo que de verdad sucedió es que estuve a punto de salir precipitado, incluso ya tenía mi mano derecha aferrada al pomo de mi espada a punto de ser desenvainada. Sin embargo, algo me hizo quedarme quieto. Quizá fuera mi propio instinto o quien sabe, pero me quedé completamento quieto, agazapado entre los árboles y la vegetación. Me quedé a observar con mayor detenimiento la reacción del humano y del mediano, que no tardó en llegar.

El humano trató de tranquilizar al hombre mayor alegando que la casa había sido atacada por lo que parecían bandidos y el mediano apoyándolo mencionó algo que llamó mi atención: "Un medallón".

¿Un medallón? ¿Se ha producido una masacre por culpa de un medallón? Pero, por qué? Y por lo que han dicho ahora Cecil está muerto por culpa de ese objeto...

No lo entendía, qué querían esos hombres, que ahora yacían en tierra muertos, de Cecil? Por qué matar a un inocente por un medallón? ¿Acaso ese medallón era algún tipo de artefacto mágico antiguo? Mi cabeza no paraba de dar vueltas a lo que había dicho el mediano. Por más que tratara darle un sentido a todo eso, sólo me salían más y más preguntas. Todo apuntaba a que tanto el mediano como el humano habían ayudado a los residentes de la casa, pero y si estaban mintiendo? No podía fiarme de las apariencias. Sin embargo, ellos tenían la pinta de saber lo que realmente había ocurrido. Me encontraba en una entrecrucijada.

Todo aquello era muy extraño. Debía decidir pronto cuál iba a ser mi siguiente paso. Todo apuntaba a que mi viaje en busca de Garland me iba a llevar a algo grande. Muy grande.

Notas de juego

Todavía no me creo que esté en modo sigilo. Dejaré pasar unos días antes de salir de mi escondite :)

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16/11/2012, 09:37
Arrya

Al escuchar voces en el exterior, se abre una de las contraventanas de la casa, y una melena marrón emerge de ella. Cuando divisa lo que está sucediendo, su rostro denota alarma. Cierra rápidamente la contraventana y se escuchan pasos apresurados provenientes de la casa.

Al cabo de unos segundos, una mujer emerge de la casa. Es la dueña de ésta, qe se aproxima corriendo como una descosida en dirección a los hombres que la contemplan sorprendidos.

-¡Alto! ¡Alto! ¡Que haya paz!- exclama, mientras extiende una de sus manos en dirección al grupo, con la palma abierta como indicando calma. Su voz resulta harto nasal, y la causa de ello se contempla en su deformado rostro. Su por otra parte bonita cara se ve ligeramente grotesca a causa de la hinchazón y el amortamiento propio de aquel a quien han roto la nariz de forma violenta. La lesión se ve que es reciente- ¡Estamos todos en el mismo bando! ¡Amigos!

Llega al grupo y se coloca en medio, con aspecto conciliador. Jadea a causa de la carrera. Por culpa de su nariz rota no respira bien, y realizar ciertos esfuerzos sin aire suficiente la agotan.

-Será mejor que nos expliquemos. Rolan, estos dos muchachos- dice, señalando al mediano y al humano- Nos salvaron la vida ayer. Nos atacaron esos bandidos y ese... ese... ese monstruo- dice, señalando el montículo de restos. Ahora ya se ve con claridad que son dos cuerpos y lo que queda de alguna criatura repugnante, quizás una araña gigante- Mataron a Cecil- al decirlo le tiembla la voz- Pero yo pude escapar y ellos vinieron en mi ayuda y rescataron a mi hijo- dice, señalando a la casa- Les debo la vida.

Cuando termina su explicación, mira a Wimper y Demian y les cuenta su parte de la historia.

-Wimper, Demian, este es nuestro único vecino, Rolan, la persona a la que iba a buscar ayer cuando os encontré a vosotros a mitad de camino. Iba en pos de su ayuda cuando me tropecé con vosotros tres.

¿Tres? ¿Había dicho tres? Pero si allí solamente había dos personas...

-Deberíamos enterrar estos restos y regresar a la casa a ver qué podemos hacer.

¿Ver qué hacer? ¿Sobre qué? ¿De qué hablaba? Daba la impresión de que había aún muchas cosas por aclarar.

Notas de juego

Hacedme una tirada de Advertir.

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16/11/2012, 09:49
Director

Notas de juego

Sin embargo, de tu pj quiero una de sigilo :P

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16/11/2012, 21:12
Kaelendril
Sólo para el director

La primera incógnita parecía haberse resuelto ante la aparición de aquella mujer con un largo cabello castaño. Pero sólo era eso, una incognita entre las muchas que tenía mi cabeza en aquel momento. Aquellas personas no eran peligrosas, según explicó la mujer. Y además de esto, el anciano que acababa de aparecer era el vecino en el bosque de Noyvern.

Estuve a punto de salir en aquel instante, pero el hecho de que se encontraban casi en familia siendo yo el único extraño y el único que estaba oculto, hicieron que me replanteara mi decisión. Es cierto que por el momento no parecía haber peligro, pero quizá si salía ahora podrían considerarme como enemigo y atacarme. Aunque sabía cuidarme en una batalla, una desventaja 4 a 1 era importante, por mucho que supiera manejar mi espada. Lo mejor que podía hacer era permanecer en silencio y esperar a poder salir.

A menos que la suerte estuviese conmigo.

- Tiradas (1)

Motivo: Sigilo

Tirada: 1d20

Resultado: 2(+2)=4

Notas de juego

Antes de la tirada de sigilo: Preveo que me va a salir un 1 (xD). Mielikki ayudame!

Después de la tirada de sigilo: En fin... Se ve que Mielikki estaba en otro plano y ha pasado de mi xD

Todavía hay posibilidades de que los otros saquen un 1 en avistar (por qué será que uno de ellos sacará un 20 xD)

La última frase la he añadido después de la tirada.

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17/11/2012, 10:45
Rolan

Rolan relajó su postura después de escuchar las aclaraciones de aquel hombre de pelo rubio y el mediano que le acompañaba. ¿Bandidos tan cerca de Noyvern?. La siempre perspicaz intuición del viejo aventurero permanecía en estado de alerta, algo no cuadraba en todo aquello, especialmente que atacaran el hogar del humilde Cecil.

Justo en ese momento fue interrumpido por Arrya, quien añadió algo de luz a lo sucedido y presentó a todos.

- Esto ha sido una desgracia - dijo con tono triste, ante la perdida de Cecil - En todo caso, hay puntos negros en este suceso que hay que aclarar Arrya. Será mejor que enterremos rápido estos cuerpos y luego aclaremos todo -

- Tiradas (1)

Motivo: Advertir

Tirada: 1d20

Resultado: 17(-2)=15

Notas de juego

Tirada de advertir: 15

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20/11/2012, 11:20
Director

Tus oídos perciben un sonido que te hace ponerte alerta. A poca distancia de donde os encontráis, se halla una criatura, parece un elfo o un semielfo a juzgar por sus orejas y por su liviana constitución física. Os está observando tranquilamente, sin mostrar signos de amenaza. ¿Era un enemigo o un mero explorador curioso?

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21/11/2012, 00:05
Demian

La llegada de Arrya puso fin a la tensión que había en el ambiente. Tal como pensaba, el hombre era alguien en quien se podía confiar.

Bien, acabemos aquí y entremos. El de hoy ha sido un día muy duro para todos...

Y dicho esto me dispuse a enterrar a los hombres y al monstruo. Aquel estaba siendo un día horrible, y me moría de ganas de que se terminase por fin.

- Tiradas (1)

Motivo: Advertir

Tirada: 1d20

Resultado: 9(+1)=10

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22/11/2012, 03:17
Wimper

-Está bien compañero. Hagámoslo ya!- digo, ayudando a Demian a enterrar a los malhechores y a la espantosa araña, más relajado que hace unos minutos, producto de la predisposición del recién llegado a entender nuestra situación. Decidí concentrarme a fondo en darle sepultura a los cádaveres, sin prestarle atención a otros sucesos, ya que había que hacerlo cuanto antes para aclararle el panorama al amigo del difunto Cecil.

- Tiradas (1)

Motivo: Advertir

Tirada: 1d20

Resultado: 1(+2)=3

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22/11/2012, 16:31
Rolan

Rolan observó durante unos instantes la zona boscosa que rodeaba la casa de Cecil. Sin duda su vejez no había atrofiado aún sus sentidos y a Rolan le pareció que no estaban solos. Se giró a los demás y alzando un dedo entre sus labios les pidió silencio.

Acto seguido desenvainó suavemente su cimitarra y se acercó lentamente a la zona de donde había procedido aquel ruido.

- ¿Quien anda ahí? ¡Descubrete! - dijo Rolan con tono decidido y amenazante.

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22/11/2012, 21:32
Kaelendril
Sólo para el director

La situación se iba calmando por momentos. El mediano y el humano empezaron a enterrar a los bandidos (o fuera lo que fuesen) junto aquella araña peluda, una decisión que, por qué mentir, no esperaba tras la subita aparición del anciano hombre. Tenía pensado, observar con más detenimiento los cadáveres para ver si había alguna pista, uan vez se hubieran metido dentro de la casa; pero por tal y como se comportaron esos dos parecía que no había nada relevante, ningua posible pista a la vista. Sólo unos bandidos con una araña como mascota.

Cada vez que lo pensaba, más raro y extraño se me hacía. ¿Por qué? ¿Qué querían realmente?  ¿Qué tenía que ver Cecil con todo esto? Todo parecía indicar que aquella mujer tendría la clave a todas mis respuestas, o al menos eso esperaba.

Quizá por culpa de todas esas dudas e incognitas que tenía en mi mente o por vete a saber qué, bajé la guardia. Y por culpa de aquello me descubrieron.  Aunque estaba oculto entre los árboles, me iba moviendo y asi poder observar mejor la escena. Pero, si bajas la guardia y no reaccionas a tiempo, puedes cometer errores, como el que cometí yo.

A punto de llegar a otro árbol, di un paso en falso y pise una rama que había en el suelo. El ruido que hizo fue como si el de un trueno golpeara a la tierra. Claro que quizá no fuese así... aún así, en aquel momento me lo pareció. Actuando con rapidez, apoyé mi espalda contra el árbol para tratar de ocultarme. Intneté no hacer ningún ruido mientras esperaba, rezando para que no lo hubiesen escuchado.

- ¿Quien anda ahí? ¡Descubrete!

Y el anciano me sorprendió. Él se percató de que algo iba mal y sabía que yo estaba allí. Cerré con fuerza los ojos y apreté mis dientes, maldiciendo mi suerte.

Por los nueve infiernos! ¿Por qué tenías que estar ahí dichosa rama? ¿Y ahora qué hago?

No tenía muchas opciones. Me llevé la mano al cinturón donde estaba mi espada y tomé una decisión.

Notas de juego

Qué decisión habré tomado? xD

Ahora descansaré y trataré de escribir mi primer post compartido xDDD

Espero que guste :)

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23/11/2012, 21:11
Kaelendril

Y el viento empezó a silbar, a corretear, a extenderse por el bosque. Mientras, los árboles, susurrando entre ellos, agitaban sus hojas con inquietud, expectantes, intrigadas por saber lo que iba a pasar en aquel instante. El silencio se había producido por el simple gesto de aquel hombre que se acercaba, poco a poco, a los grandes y fuertes árboles. Él sabía que alguien les observaba pero eso no le impedía avanzar sin temor. El silencio también se había apoderado de los pájaros, cuyo canto se iba apagando hasta que finalmente cesaron sus cantos alegres, mientras reposaban delicadamente en las ramas de los árboles. Y la figura, escondida y apoyada entre los árboles, lo estaba empezando a notar. El bosque, silencioso- hecho extraño e inusual-, estaba esperando a que realizara su próximo movimiento. Respiró hondo, relajó músculos y cuello hasta que, por fin, decidió salir de su escondite.

Entonces, unos pasos fuertes empezaron a resonar en el silencioso bosque. Y de entra la espesura del mismo, una figura surgió, andando con paso firme, segura de lo que iba a hacer, sin miedo. Pero, ¿quien era? Era un elfo. Pero no era un elfo corriente, era diferente. Había algo extraño en él. ¿Quizá era su el tono de su piel? Era claro como el de los elfos plateados pero tenía un tono más oscuro de lo normal. Oscuridad y claridad estaban entremezclados en su piel. O, ¿quizás era el color de sus ojos? Un verde oscuro que parecía brillar a medida que avanzaba el elfo. Era, pues, un elfo misterioso y extraño.

Y allí estaba, avanzando con determinación. Su rostro, serio y concentrado a la vez, observaba con atención los movimientos del anciano. El elfo tenía los brazos en alto, a la altura del pecho, mientras en su mano derecha aferraba el cinturón en el que estaba su espada envainada. Un movimiento atrevido, pero era la única manera para evitar que aquella situación se le fuera de las manos y para evitar, sobretodo, problemas. O al menos eso esperaba.

La figura se detuvo a escasos dos metros de donde se encontraba el anciano. La mirada del recién aparecido alternaba entre la figura del humano y la de la cimitarra que era fuertemente asida, una amenaza que podía resultar letal si se manejaba correctamente. El elfo debía ir con cuidado y no bajar la guardia. Finalmente, le miró fijamente a los ojos y pronunció con voz potente sus primeras palabras desde que apareció:

-Me llamo Kaelendril. Y no soy vuestro enemigo.- su voz era música, una sinfonía que trasmitía sensaciones inexplicables, transmitía calma, paz y tranquilidad, era pura armonía- Os pido que confiéis en mi, mas no tengo nada que ver con esos hombres que estáis enterrando.

Su voz mostraba firmeza. El elfo no presentaba temor ni en sus ojos ni en su rostro, ni tan siquiera en su melódica voz que parecía encantar incluso a los propios árboles, pues parecía que las hojas de éstos se movían al ritmo de su voz. Su voz no se había resquebrajado ni en un solo momento. Parecía como si aquella situación ya la hubiese vivido.

Aquel elfo, que había aparecido de entre las sombras de los árboles, estaba completamente seguro y convencido de lo que estaba haciendo, aunque pareciese una locura. A él, esas cosas no le importaban.

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26/11/2012, 12:00
Rolan

Rolan no salía de su asombro. ¿Qué intenciones tenía aquel elfo? ¿No era demasiada coincidencia encontrar a tan variopintos personajes justo en aquel lugar y después de la sobrevenida muerte de Cecil?

El viejo aventurero se mantuvo en alerta y con su cimitarra firmemente asida, preparada para ser hendida sobre cualquiera que supusiera una amenaza.

- No acostumbro a confiar en aquellos que aparecen sin más de entre las sombras, elfo Kaelendril. ¿Cuales son tus intenciones aquí, si no tienes nada que ver con este suceso? - preguntó menos tenso, pero manteniendo una mirada seria hacía el elfo.

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26/11/2012, 21:08
Kaelendril

Kaelendril sonrió para si ante aquella afirmación del anciano. La frase sobre la confianza le hizo evocar, durante unos instantes, algunas de sus "aventuras" tiempo atrás cuando sólo viajaba de un lugar a otro sin tener un objetivo predefinido. Aunque en la gran mayoría de las veces se había encontrado siempre solitario, el mero hecho de encontrarse con alguien (fuese desconocido o no), le daba un atisbo de esperanza con el que entablar una relación amistosa. Sin embargo, la gran mayoría de las veces no sucedía eso.

Sin perder ni un segundo la vista de la peligrosa cimitarra y atento ante cualquier brusco movimiento del anciano, contestó con firmeza a la pregunta que le habían hecho:

-Vengo de lejanas tierras del norte. Llegué hace unas semanas a la ciudad de Noyvern y, por azares del destino o por designio de los dioses, me adentré en este bosque para buscar a un hombre llamado Cecil con la esperanza de que me diese información...-hizo una pausa, recordando las palabras de la alta mujer con los cabellos largos.

Le cambió el rostro, durante unos segundos, eternos para el elfo, insignificante para los demás. Durante esos interminables segundo, Kaelendril estuvo expresando dolor y tristeza, sufrimiento y oscuridad. Lo estaba recordando... otra vez. Perder a un ser querido era muy duro y el elfo lo sabía.

Kaelendril, por primera vez, apartó la vista del anciano y su cimitarra. Dirigió una mirada hacia la mujer y sus ojos trataron de decirle un claro y sonoro "Lo siento", sus ojos verde oscuro, en aquel cruce de miradas, estaban más apagados y el brillo pareció haber disminuido. Acto seguido, volvió a su cruce particular de miradas con el hombre que tenía a escasos dos metros. Sus ojos habían vuelto a la normalidad, incluso podría atreverme a decir que la intensidad de sus ojos se hizo mayor.

-Anciano, os pido que confiéis en mi. Se que es dificil hacerlo, pues soy un extraño, pero creedme, no he venido a hacer ningún mal.

Y Kaelendril esperó, mientras mantenía su expresión serena y su mirada de concentración.

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27/11/2012, 12:44
Demian

El recién llegado no parecía suponer una amenaza y, según decía buscaba a Cecil, por lo que era probable que Arrya lo conociese o supiese qué era lo que quería. Sin embargo, si algo yo no tenía, era mucha paciencia, de modo que decidí presionarle un poco. Tras el episodio con los bandidos, no estaba para fiarme del primero que apareciese, y menos resultando tan enigmático como era aquel elfo:

¿Qué clase de información buscabas de Cecil, Kaelendril? Como ves, él ya no podrá dártela, pero tal vez alguno de nosotros pueda ayudarte en lo que buscas.