Partida Rol por web

Tranquilos por las provisiones, os llevaré a la plaza de Sundabar sin problemas. Allí podéis comprar lo que necesitéis. responde Khelben.

Al ver la ilusión de Alekdra, saco mis útiles de escritura y apunto el nombre del bárbaro. Guardo todo y me dirijo a Landroval, posado en mi hombro. - ¿Lo has entendido? Ahora quédate pegado a mí, que vamos a hacer un viajecito. - cubro a Landroval con mis brazos, y miro a Khelben - Por mí, cuando queráis.

Ciaran observa como se desarrolla la escena. Escucha la pregunta de Quarion y la respuesta de Erthos y se decide ha intervenir. -No te preocupes Quarion, yo también tengo conjuros que pueden protegernos, aunque, hasta que Oghma no me los conceda mañana en mis plegarias no dispondré de ellos.-
Mira a Khelben. -Señor, yo también estoy listo para partir, aunque antes necesito que me concedáis un favor. Debéis avisar a Adeb, clérigo mayor de mi templo, de a donde me dirijo y cual es mi misión. Como comprenderéis, no puedo abandonar mis tareas en el templo sin antes avisar.-

Bien pues, ¿a que cuantos dias de distancia esta el templo de la ciudad de Sundabar a pie?, mas que nada por el tema de las provisiones, y no os preocupeis Tyr tambien me proporciona proteccion frente al mal, solo que tendre que esperar a mañana para poder obtenerla.

Por mi podemos marchar, tengo ganas de mandar a unos cuantos demonios de vuelta al averno. Digo dirigiendo a los todos pero en particular a Arunsun y cogiendo mi casco pero sin ponermelo.

Estupendo, pues no perdamos más tiempo. Por favor, cogeros todos de la mano. dice el gran mago.

Tras eso, comienza a recitar una serie de palabras arcanas y la Urdimbre comienza a entrar dentro de vosotros... Por unos instantes unas ráfagas de luz nublan vuestra vista y cuando volvéis a ver correctamente estáis en otro lugar...