Partida Rol por web

Ered Nimrais, más allá de las Montañas Blancas

Cap. 0: La Rosa

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31/10/2018, 11:36
Freagulf
Sólo para el director

Turno 013A

Tímido se sentó, pero no quería arriesgarse a parecer descortés, y aún así rechazó el tomar nada más. - No, no, gracias. Haciendo un gesto amable y discreto con la mano para evitar que le dieran de beber. Entonces se dispuso a contar su última aventura. - En mi última misión el Mariscal nos encomendó una misión de correo, pero tras atravesar el Bosque Negro, esquivar sus penurias y combatir con Orientales, llegamos al rio y en un poblado fuimos atacados. Pereció casi todo el grupo, y tras pedir ayuda aquí, en este lugar, participé en una misión de ataque. Respiró. Su emoción se hacía sentir en los ojos. Le brillaban, y había estado hablando bastante rápido por los sentimientos que recordaba. Además evitó añadir el hambre que habían pasado en las últimas jornadas. Era algo deshonroso para el admitir aquello y aún no era el momento de desvelarle que su odio hacia aquellos invasores era mucho más grande de lo que quería reconocer. Era un pueblito a unos dos o tres días de aquí, pero encontramos una guarnición de menor nivel. Quienes nos atacaron portaban armaduras especiales, y luchaban como una unidad entrenada conjuntamente. Además, en ese viaje perdió a su preciada amigo y montura. Ulfer. Y por si fuera poco, Chakka, un oriental que si era buena gente, un amigo, también pereció a unos pasos justo a su espalda por las flechas de los tiradores orientales.

Notas de juego

¿Tendría que recordar esos nombres? ahora mismo no me suenan.

:(

PUFF tendría que mirar las otras partidas antes de que adoptase a Freagulf.

:(

¿Me las podrías enlazar y las repaso o no sería necesario?
¿Cómo era mi relación con este hombre? se que lo conozco, pero no recuerdo que hice o dejé de hacer con él.

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31/10/2018, 14:01
Gwalin
Sólo para el director

Turno 013

Gwalin entró en la estancia donde estaba Agranil y los otros dos compñaeros de éste, Egorant y Dorhand como les presento el propio Agranil. El enano se quedó de pié como si estuviera de guadia y ahí permaneció.

-Os lo agradezco, prefiero quedarme de pie y tampoco quiero vino, no antes de firmar un contrato o llegar a un acuerdo- dijo muy seguro el naugrim-. Si me lo permiten me quedaré aquí.

-En cuanto a cómo supe de la empresa, tengo que decir que ya hace tiempo que sé de ella, concretametne cuando usted, con su gente, pasó por Barukkizdin -Gwalin hizo una pausa para que Agranil pudiera recordar este hecho y así poder relacionarlo con lo que iba a contarle.

-Allí yo trabajaba para acompañar a los mercaderes cuando se acercaban a la ciudad. Y aunque alguna vez aparecía lagún necio salteador que nos alegraba el día, la mayoría de las ocasiones era pura parafernalia -dijo negando con la cabeza acordándose de lo aburrido que resultaba todo aquello.

-En fin, en una ocasión, acompañé a un grupo de esgarothianos, un comerciante importante...no me acuerdo de su nombre, ni creo habérselo perguntado. Lo importante es que viajaba con usted, no sé si lo recuerda -dijo mirando directamente a Agranil.

-Mientras viajábamos, me enteré que usted estaba buscando a algunos individuos para que lo acompañasen, protección para el viaje. Un largo viaje que lo llevaría hasta Minas Tirith. Al principio no dije nada. Pero tras dos noches sin dormir, pensando en si debía o querír enrolarme en este viaje, decidí apuntarme a ese grupo.

Gwalin negó con la cabeza y miró al suelo mientras gruñía. -Grrmmmm.

-Tarde. Llegué tarde y usted ya había elegido a quienes le acompañarían en su periplo.

-Pero yo ya había tomado una decisión. Necesitaba volver a viajar. Coger el camino y vagar por el mundo- dijo mirando fíjamenet a Agranil-. Cuando les dejé en Barukkizdi, hice el petate, cogí mis pertenencias y partí con el primer grupo que salió hacia el sur.

-Por eso conozco su empresa. El porqué quiero unirme, es por viajar haciendo lo que he hecho durante casi toda mi vida. No quiero alardear de mis conocimientos y experiencia, pero llevo en esto muchos años...pero nunca he ejercido este trabajo viajando tanto y tan al sur...así que todo concuerda para mí -dijo Gwalin encogiéndose de hombros.

Notas de juego

A su derecha estaba Egorant, y a su derecha Dorhand. Tal y como le presento Agranil.

¿Cuantos brazos derechos tiene Agranil? ... es un tipo con muchas sopresas jejejeje

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31/10/2018, 15:00
Grimbeorn
Sólo para el director

Turno 013

Cuando Grimbeorn por fin accedió al privado que Agranil había solicitado, se quedó perplejo brevemente al ver el tamaño de la estancia. Sin duda, aquel establecimiento no reparaba en gastos a la hora de ofrecer a sus clientes un servicio de calidad. El animista se forzó a centrarse, recordándose que no estaba allí para admirar la habitación. Se sentó, tal como el esgarothiano le invitó y dejó el yelmo a un lado, sobre la mesa.

- Buenas tardes, señores. - Agradeció el gesto y respondió a las presentaciones con un respetuoso cabeceo. Una vez se hubo sentado, se presentó a su vez, de forma escueta, y declinó la oferta de servirse vino. Alegó haber ingerido ya suficiente alcohol antes de replicar a la cuestión que planteaba Agranil.

- En realidad, mi interés inicial estaba en intercambiar información sobre los orientales. Cómo me enteré de su empresa guarda relación con eso. - A juzgar por la premura con que el hombre había ido al grano, el norteño optó por no dar rodeos tampoco y se dispuso a exponer lo que había encontrado a grandes rasgos. - Hace varios días, en los lindes meridionales del Bosque Verde... de las Hojas Verdes, - Se corrigió de forma neutra. - descubrí un rastro de huellas. Pertenecían a un tipo de calzado que no había visto nunca antes en la región, lo que me intrigó e hizo que lo siguiera rio abajo, a lo largo del cauce del Gran Río. A unas dos jornadas de Tir Anduin, el rastro se perdió; al acercarme a la ciudad para preguntar si habían visto a un grupo de forasteros o desconocidos viajando hacia el sur, oí hablar por primera vez de orientales. Y de su ataque a Tir Limclaro. Entonces, empecé a sospechar que ese calzado que no había visto antes pudiera pertenecer a dichos orientales. Y que el grupo que seguía pudo tener algo que ver con el ataque. Al indagar más sobre los orientales y posibles pistas para seguirles, fue cuando surgió su nombre, señor Agranil.

En este punto, el hombre del bosque hizo una pausa corta para respirar, aunque su intención era ver el grado de interés o la atención que sus palabras suscitasen hasta ese momento. Aprovechó ese lapso también para descansar la garganta antes de retomar la palabra.

- Desconozco el valor que puedan tener para usted los movimientos de una partida de posibles orientales por el sur del Bosque de las Hojas Verdes y a lo largo del Gran Río pero, si le son de utilidad, confio en que pueda compartir información sobre ellos que me permita retomar mi persecución. - A la espera de la reacción de los esgarothianos, Grimbeorn optó por reservarse por un tiempo más lo relativo a Geleswinta.

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01/11/2018, 01:32
Agranil (Regente de Esgaroth)

Turno 013

 

Los tres se miraron algo sorprendidos de que Freagulf rehusase a servirse vino - Podemos pedir algo de cerveza si lo desea - le ofreció Dorhand, pero el ailgratha rehusó bebida alguna. Era algo rato en un guerrero, en realidad de cualquier persona, declinar una invitación de vino o cerveza. Los hombres de armas eran conocidos por beber mucho, si bien no era tan raro que se guardasen antes de un combate inminente. No era el caso.

- Lamento su perdida, seguro que Draupner y los demás murieron con honor - dijo Agranil dando por supuesto que el grupo al que se refería Freagulf era el que él mismo conoció. - Estamos al tanto de la recuperación de la villa, enhorabuena - felicito el regente.

- No conocemos a ese mariscal - dijo encogiéndose de armas - Tras separarnos en Bur Ailgra viajamos con una larga caravana de exiliados de la ciudad, pero nos acabaron cogiendo - comenzó a explicar - Sufrimos un ataque por sorpresa, eran muchos - dijo recordando las penurias - El ejercito fue valiente, quedo atrás para proteger nuestra retirada, logramos llegar a Burh Marlinge muchos de nosotros. - dijo al dando por terminado el tema.

- Pero eso ya pasó, salimos de aquella ciudad en cuanto llegamos y vinimos hasta aquí directos, acompañados de unos ganaderos que traían una yeguada hasta aquí - informó - Pero dime, ¿por que nos buscabas? - pregunto, aunque sabia la respuesta

Notas de juego

¿Tendría que recordar esos nombres? ahora mismo no me suenan.

Si, eran compañeros tuyos antes de llegar a Burh Marlinge, como Temudyin.

PUFF tendría que mirar las otras partidas antes de que adoptase a Freagulf.

En realidad llegaste a jugar con ellos

¿Me las podrías enlazar y las repaso o no sería necesario?

Podrias (si quieres) leer algo de las ultimas escenas de la partida Un largo viaje a Minas Tirith

¿Cómo era mi relación con este hombre? se que lo conozco, pero no recuerdo que hice o dejé de hacer con él.

Te uniste a el, como escolta. Lo conociste por casualidad en el bosque, cerca de Burh Ailgra. Cuando la ciudad fue destruida, huisteis de allí. Bueno en realidad servisteis de señuelo para proteger la cota de malla, fuisteis por otro camino mas largo. No lo habías vuelto a ver desde entonces. 

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01/11/2018, 02:27
Agranil (Regente de Esgaroth)

Turno 013

 

- Claro... - dijo algo confundido Egorant. - Puede quedarse donde quiera - Le sorprendía que un enano rehusase a beber.

Después el enano comenzó a hablar, al parecer el enano ya sabia de ellos desde que salieron de Barukkizdin, cosa que sorprendió a los tres. El enano tenia tesón, desde luego. Dejo que hablase hasta que por fin termino.

- Lo lamento, no le recuerdo - dijo sincero el regente - Es usted insistente, sin duda, pero... - dijo pensativo Agranil . - ¿Cuál cree que es nuestro objetivo? - quiso saber antes de continuar

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01/11/2018, 02:43
Agranil (Regente de Esgaroth)

Turno 013

 

Los esgarothianos se sorprendieron de que no quisiese servirse un poco de vino, pero lejos de sentirse ofendidos. Tan solo ocurría que era bastante inusual que un fornido hombre rehusase una buen vaso de alcohol. Agranil y los suyos escucharon pacientes todo lo que Grimbeorn les estaba contando, sin interrumpirles. Cuando el bosquimano conto lo que sabia de los orientales, los tres se miraron, aunque dejaron que terminase.

- Cierto, los orientales acechan desde el este. - informo - Por lo que se, un frente en Burh Marlinge parece haberlos detenido por el momento - afirmó - Pero me consta que numerosas avanzadillas han logrado atravesar nuestras líneas... - dudo antes de continuar, y de que Dorhand lo interrumpiera.

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01/11/2018, 02:50
Dorhand (Comerciante de Esgaroth)

Turno 013

 

- Antes de nada... - dijo interrumpiendo - ¿Qué hace que alguien como tu decida seguir un rastro de botas extañas, de iniciar esa persecución de la que hablas? - sentía curiosidad

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01/11/2018, 07:07
Freagulf
Sólo para el director

Turno 013B

Intentó explicarse: - No, no, gracias. Su voz sonaba sincero. - He visto perecer a gente por nublarse el juicio y con la mentalidad que estoy adquiriendo, eso no quiero que pase nunca. Además, ya tomé un cerveza fuera, y un vino antes de llegar aquí. Y confesó. - No he de forzar al estómago más de lo necesario. Sonrió.

Intentó añadir información de una manera discreta: - El Mariscal de Gondor, que por lo visto el noble local es familiar directo, e incluso atrevería a decir que su propio hijo. No quería decir nada especialmente indiscreto o que pudiera parecer descortés.

- Lamento su perdida, seguro que Draupner y los demás murieron con honor

- No, no. Intentó negar alarmado. Parecía que había generado otra confusión. - Joer te estás luciendo chico. - Tedmüyin me acompañó tras la batalla y terminamos sirviendo bajo las órdenes del Mariscal. Chakka si murió en este pueblito del norte, pero los demás, no se nada desde hace mucho. Nos separamos cerca de Burh Waldlaes o de  Burh Marlinge.

- Pero dime, ¿por que nos buscabas?

Bajó la mirada. Le daba verguenza reconocerlo, pero no quería ... demorarlo demasiado. Suspiró: - Creo que hay intenciones de ir hacia el sur. Además, al conoceros, esperaba poder servir otra vez junto a su grupo, para llegar a la capital de Gondor. Miró al comerciante. Sus ojos brillaban en una mezcla de de sentimientos intensos como venganza, odio, necesidad desesperada y como no, lealtad. Pero era lealtad a la sangre vertida. Lealtad a los que habían perdido la vida y creían en lo que hacían. - Me he propuesto eliminar la amenaza oriental. He perdido amigos, he perdido familia, y para repatar la faena, el único hombre que me consideraba tan amigo suyo como para decir que era hermano... Estaba a punto de llorar... murió a pocos pasos de mi por las flechas de un grupo especial de combate de perros mal nacidos de esos. Casi se pone en pie en la emoción del momento y luego, al darse cuenta, se sentó. Se sentó pesadamente, como derrotado, pero con el ánimo firme. Miró un instante hacia abajo, pero retomó la mirada con orgullo, hacia el esgathoriano. El mismo había vencido a su emoción y pugnaba por controlar el ardor que le quemaba por dentro. - Tengo intención de borrar de la faz que que pisamos de ese mal. Sonaba frío; despiadado. El odio que sentía, sentimiento visceral, le hacía seguir adelante. No podía ocultarlo. No quería ocultarlo. - Hacer que la buena gente pueda vivir otra vez es necesario, y todo ello pasa por eliminar a un enemigo que pretende asesinar a todo y todos los que no comulguen con ellos. Casi parecía un predicador. Empezaban a aproximarse sus sentimientos a los monjes de los lejanos desiertos del sur. Esos que magros de cuerpo no portaban espada ni más armas que sus propias manos ni vestían armadura más que unas blusas y si acaso unas cintas de cuero que eran más adorno que otra cosa. Sus sentimientos estaban haciendo cambiar su mentalidad. Era su destino. Quería que lo fuese. - Hay que conseguir que Gondor sepa el peligro que se aproxima, ya que serán los siguientes en caer, y es un reino fuete, que puede poner ejércitos frente al enemigo y derrotarles. Sus ojos se clavaron en Arganil. - Y quiero estar presente cuando el último oriental muera, para poder mearle en las cuencas vacías de los ojos.

Respiró profundo para controlarse. Respiró profundo repetidas veces. Lo necesitaba: - Por eso quiero acompañarles. Quiero informar y formar parte del grupo que luche contra ese mal. Ser del ejército que libere a las buenas gentes de quienes no respetan la vida ni la paz. Sus palabras estaban siendo antesala del recobrar la compostura. De poner otra vez la sangre en su sitio y hacer que regresase a ser el hombre sereno que solía ser. - Además, no tengo un duro. Necesito algo para poder llegar hasta allí y un viaje así solo, sin dinero y sin nada más que mi espíritu puede hacerse un tanto lago. El "largo" lo estiró bastante. Se refería a duro, a solitario... a tantas cosas que preferiría hacerlo con alguien más. Además, no sabía por qué, pero no podía ocultarle cosas: - En nuestra última misión, pasamos tanta hambre, que incluso pensamos en comernos a las monturas. Lo hubiera hecho si no fuese porque mi vieja y leal montura había muerto unos días antes, en combate, defendiendo a un enano. Bajó la mirada apenado una vez más y así, tímido y pensando que igual no compartirían lo que sentía habló: - Por eso quiero unirme otra vez como su escolta, acompañarle hacia el sur, tener algo que comer y dar un paso más hacia mi venganza. Hacia la venganza que traerá paz.

Notas de juego

Creo recordar que llegué justo para empezar con la cena que nos ofreció el Mariscal, para iniciar la misión del bosque. No recordaba a estos compañeros. He mirado algo, pero no se que me hace sentir una pereza extraña. Es como que estoy mirando unas cosas que me hacen sentir cotilla. Algo que no tendría que ver. No se.

Te uniste a el, como escolta. Lo conociste por casualidad en el bosque, cerca de Burh Ailgra. Cuando la ciudad fue destruida, huisteis de allí. Bueno en realidad servisteis de señuelo para proteger la cota de malla, fuisteis por otro camino mas largo. No lo habías vuelto a ver desde entonces. 

Ahora entiendo porque me tiene una cierta estima. Servimos para que ellos pudieran sobrevivir. Bueno, de algo sirvió.

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01/11/2018, 15:42
Grimbeorn
Sólo para el director

Turno 013

- Una intuición. - La atención de Grimbeorn saltó al compañero de Agranil que acababa de intervenir. Dorhand, de acuerdo a la presentación anterior. - Aquellas huellas eran la única anomalía en la zona en la que desapareció uno de los nuestros. Además de las señales de lucha. - Aquel último matiz lo añadió con la naturalidad de quien piensa que ambas pistas estaban obviamente relacionadas.

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02/11/2018, 01:00
Leofred

Turno 013

Leofred había esperado intranquilo el turno de su entrevista con Agranil, pero sus nervios anteriores no eran nada comparados a la sensación de interrogatorio que le sobrevino al ver al esargothiano y sus dos acompañantes sentados ante aquella amplia mesa, a pesar de que Agranis seguía siendo cordial.

Aceptando la invitación, Leofred se sentó y miró la jarra de vino con ganas de dar un trago para acallar los nervios, pero en aquella ocasión se le impuso el sentido común, ya había bebido suficiente para todo el día y toda la noche. - Gracias. - dijo simplemente rechazando el vino con un gesto de la mano, en un vano intento por mantener la lucidez durante el resto de su conversación con Agranil.

- Como usted bien dice he viajado mucho, visto mundo si le apetece llamarlo así, pero los caminos se han vuelto peligrosos a este lado de las nubladas para un viajero solitario como es mi caso. Por mi modo de ganarme la vida tampoco puedo quedarme demasiado en un mismo lugar. Como verá, no es que me encuentre en una situación muy prometedora. - pensó que aquél sería el mejor modo de manejar la conversación, primero apelaba a la compasión del señor de Esargoth con un poco de sinceridad, y después intentaba hacerle ver la utilidad de tenerle en su compañía. - Estoy seguro de que ya contáis con muchos soldados a vuestro cargo y deseando unirse a vos, pero creo que podemos ayudarnos mutuamente. No es la primera vez que hago el recorrido hasta Minas Tirith y vuelvo al norte; no me defiendo mal del todo con la espada, aunque sea yo quien lo diga; y tal vez no sea un sabio, pero le sorprendería lo que llega uno a aprender simplemente cambiando de aires y apañándoselas por cuenta propia. -

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02/11/2018, 02:30
Director

Turno 013

 

 

Egorant (Comericante de Esgaroth)

- Ha sufrido, se nota en sus palabras - aseguro el Egorant - Se nota la rabia en lo que dices, y si lo que buscas es venganza, este no es tu lugar - dijo seriamente.

Dorhand (Comerciante de Esgaroth)

- Sin embargo, tal empeño nos vendría muy bien - interrumpió Dorhand - Creo que debería de venir con nosotros - afirmo.

Agranil (Regente de Esgaroth)

- Estoy de acuerdo, es valiente, y capaz, pero también temo que la venganza es lo que le mueve. - dijo Agranil mirando fijamente al rohir - Lo que buscamos es alguien sosegado, alguien que pueda pasar desapercibido, alguien capaz de no saltar en cuanto vea a un oriental... - dijo Agranil tras escuchar todo lo que Freagulf contó -  ¿Eres tu esa persona? - preguntó - Me gustaría que vinieses con nosotros, de veras, aunque no quiero a alguien volátil... - Añadió

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02/11/2018, 02:44
Director

Turno 013

 

Egorant (Comericante de Esgaroth)

- Bien, siguió fuera de su territorio unas huellas dudosas hasta muy al sur... - dijo Egorant con una palabras que connotaban una clara desconfianza, no había creído del todo en lo que Grimbeorn le había contado.

Dorhand (Comerciante de Esgaroth)

Dorhan lo interrumpió de inmediato - No tiene por que contar a unos desconocidos lo que le impulso a dejar la seguridad de su pueblo - dijo condescendiente - Tranquilo, no necesitamos saber mas - añadió - Si quieres información, la tendrás, le contaremos cuanto sepamos - dijo amablemente.

Agranil (Regente de Esgaroth)

- Sin embargo no estamos aquí para intercambiar información - dijo antes de darse cuenta de lo grosero que podría parecer aquello - Me explico, sabrás cuanto quieras saber, pero lo que necesitamos es otra cosas - dijo tratando de disculparse.

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02/11/2018, 03:01
Director

Turno 013

 

Se sorprendieron de que el dunadan rehusara de una buena copa de vino, no era normal declinar una invitación, los que estaban dispuestos a partir lejos de su hogar solían ser bebedores, pendencieros y osados, pero no le dieron mayor importancia.

Egorant (Comericante de Esgaroth)

- No dudamos de sus capacidades - comenzó a decir Egorant - Pero creo que no comprende bien nuestro objetivo - aquel hombre era serio, un tanto malhumorado y grosero - Creo que buscamos otra cosa.

Dorhand (Comerciante de Esgaroth)

- Bien es cierto que nuestro objetivo es difícil de explicar - interrumpió Dorhand - Tal vez su experiencia en viajes, en recorrer los caminos, y sobre todo si lo que dice es verdad - lanzo una mirada escrutadora al bardo - y conoce la zona, podría sernos de cierta utilidad - sugirió el anciano.

Agranil (Regente de Esgaroth)

- Si, creo que necesitaremos algo mas - dijo Agranil, quería que lo convenciera. - Buscamos alguien con dedicación y capacidad de acatar ordenes, mas allá de vendetas personales o el ansia de monedas - continuó hablando. - Le recuerdo de Esgaroth, nos deleito con sus cuentos y canciones, y estoy seguro de que puede sobrevivir al dia a dia, necesitamos un poco mas... - termino por decir, esperando la replica de Leofred.

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02/11/2018, 11:26
Hallfrid
Sólo para el director

TURNO 13

El joven campesino ingresó en la sala con aire resuelto, sin prestar siquiera atención a lo imponente del salón o a la majestuosidad que evidentemente irradiaban sus anfitriones. Simplemente se acercó a la mesa con paso firme, se presentó con una sencilla reverencia y se sentó en el lugar que le habían dejado reservado, teniendo la prudencia incluso de rechazar con un educado ademán el vaso de vino que le ofrecían.

En verdad, aquel talante decidido tenía mucho más que ver con los efectos del alcohol que con una voluntad férrea y disciplinada. Pues de no haber ingerido Hallfrid tantas jarras de cerveza durante la tarde, muy probablemente se habría quedado boquiabierto ni bien le habían abieto las puertas del salón, petrificado ante la opulenta magnificancia del lugar. E incluso le habría costado dirigirse siquiera a sus anfitriones, abrumado por la regia autoridad que emanaba de sus venerables personas.

Sin embargo, así como el alcohol le daba algunas ventajas, inflamando su espíritu con un seguridad que un muchacho de su edad difícilmente habría encontrado en otra parte, también tenía sus contras. Y muy conciente de ellas, Hallfrid se propuso impedir que le resultaran un problema.

Así que estaba decidido a hablar lo menos posible, para evitar que su lengua adormecida y su escasa modulación lo pusieran en evidencia. Su tono era sereno y medido, tomándose algunas pausas entre frase y frase para asegurarse de que sus palabras no se volvían ininteligibles.

- Pues, lo cierto es que todo el pueblo está hablando de los hombres llegados de Esgaroth. Parece que es lo más importante que ha ocurrido en los últimos días. Bueno, eso y los ataques de los orientales.

- Aunque la verdad es que no he oído a nadie que sepa por qué están aquí. Solo que se dirigen al Sur. Que es también hacia donde pretendo ir yo mismo.

- Llevo ya una temporada como guardia de caravanas. Y lo cierto es que quisiera volver un tiempo a casa en Anórien. Quizás pasar por Minis Tirith, si es posible.

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02/11/2018, 13:02
Freagulf

Turno 013C

- Lo soy. Contestó sincero, y pausado, sosegado y con una compostura recobrada continuó con su exposición: - Esta venganza no es algo que fuera a saltar a la más mínima. Está encaminada a la vida en el futuro. Otra cosa es el odio que les tenga, y que, si la oportunidad lo permite o lo requiere, hará verter sangre enemiga. No les tendré compasión si llega el momento del combate, pero que tampoco negaré un trato diplomático si lo requieren en parlamento. No soy un asesino.

Notas de juego

Se me hace raro que dijeras que pusiera turno 13 y ti sigas poniendo 12.

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02/11/2018, 14:13
Sven Ed´Rohir (Edan)

Turno 13

Cuando le llegó el turno, Edan se levantó y acompaño a Rovis hasta el Reservado. No sin antes sacudir un poco el polvo de la capa que ahora portaba en el brazo. Quería estar lo más presentable posible. Por lo que había podido averiguar aquella tarde, muchos eran los interesados en unirse a la expedición de Agranil, y si éste ya disponia de algunos hombres de confianza como así suponía, era posible que de aquella reunión dependiese formar parte de los elegidos.

Buenas tardes caballeros, mi nombre es Sven, Sven Ed'Rohir, pero todos me llaman Edan
Tomó asiento en la silla mas cercana a Agranil y se sirvió un vaso de vino tal y cono este le ofreció, aunque apenas dio un pequeño sorbo cuando el propio Agranil lo hizo, más como muestra de agradecimiento que otra cosa.
Cuando Agranil le preguntó cómo había sabido de su empresa, respondió con sinceridad, pero cuidando sus palabras. Queria mostrar su entusiasmo con el trabajo sin dejar entrever la necesidad económica que lo acuciaba.

Vera, señor. Hace poco que he llegado a la ciudad, mi hogar esta en La Marca, y ha sido por mi trabajo que he llegado hasta Tir Anduin tras un largo viaje. Al poco de llegar, he sabido por los lugareños del ataque de los orientales al asentamiento conercial de Limclaro.

El rohir hizo un parón tras la pequeña introducción para poner a los comerciantes en situación.

Fue entonces que llegó a mis oidos que un comerciante de Esgaroth estaba buscando gente resuelta para ayudarle a recuperar una mercancía robada por esos indeseables.
No quiso usar adjetivos más coloquiales, pero permaneció atento a la reacción de sus interlocutores ante aquel apelativo.

Soy un hombre de armas.. continuó sin mas preambulos ofrezco mis humildes servicios a todo aquel que este dispuesto a pagarlos siempre y cuando la causa me parezca digna... Miro a los ojos a los comerciantes deteiendose por ultimo en Agranil.
...mi último encargo está ya cumplido y la verdad, no veo mejor manera de usar mi tiempo que acompañandolos a ustedes en su importante Expedición, si me dan la oportunidad de demostrarles mi profesionalidad, estoy seguro de que no les decepcionare. Habia llegado el momento de venderse y diferenciarse del resto de candidatos y a Edan no le temblo la voz a la hora de hacerlo.
Soy un buen jinete y se usar mi hacha cuando la situación lo requiere. También sé acatar órdenes y tendrá mi más absoluta fidelidad a los términos que podamos acordar en un presumible acuerdo. Pero se valerme por mi mismo y puedo actuar con inicativa y ofrecerle mi consejo en aquellos asuntos en los que me sienta capacitado si eso es lo que desean.

En cuanto a mis razones...no voy a engañarlos. Mercenario es mi profesión, y tanto mi familia como yo vivimos de las monedas que consigo. Pero tampoco miento cuando les digo que no veo mejor empresa que devolver lo que es suyo por justicia a quien le ha sido arrebatado injustamente. Ardo em deseos de hacer pagar a esos orientales su afrenta y si con ello puedo devolver un poco de tranquilidad a las buenas gentes del reino...arde en mi pecho la llama de conocer nuevas tierras a las que mis pasos ninga me han llevado y si este encargo me permite hacerlo, creo que no puedo pedir mucho más.

Habia sido un largo discurso, pero Edan sentía que cada palabra era necesaria, y que Agranil y sus colegas podrían apreciar mejor que otro tipo de clientes todos los matices que se desprendían de ella.

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02/11/2018, 16:08
Grimbeorn
Sólo para el director

Turno 013

Las palabras del compañero de Agranil que había permanecido en silencio hasta entonces hicieron que Grimbeorn se plantease si aquel hombre había escuchado la referencia a la desaparición de uno de los suyos. O tal vez fuera que, bajo la sombra de Erebor, aquellas personas se habían vuelto codiciosas e insensibles a los problemas del resto. El norteño prefirió pensar que, en las grandes poblaciones como Tir Anduin, los lazos dentro de la comunidad eran más bien tenues, a diferencia de los clanes de hombres del bosque, y eso hacía que a Egorant le resultase difícil creer que alguien pudiera alejarse de la seguridad del hogar para ayudar a un vecino. Que ese "vecino" resultase ser además la depositaria de generaciones de saber de su pueblo y una mentora sólo añadía urgencia al asunto.

Por otra parte, Dorhan parecía ser más consciente de aquello o, al menos, de la privacidad de sus motivos, aunque el animista no varió el gesto, del mismo modo que no lo había hecho ante la anterior intervención. Se limitó a esperar a que el intercambio entre los tres hombres se calmase antes de retomar la palabra.

- Si el señor Agranil tuviera a bien precisar algo más esas cosas, tal vez podamos llegar a un punto en que surja una posibilidad de ayuda mutua. - El animista habló de manera calmada y de la forma más protocolaria de la que era capaz. La vida en el bosque no le hacía a uno especialmente ducho en aquellas lides y no estaba seguro de hasta qué punto podía dialogar con aquellos hombres sin expresar algo que pudiera ser interpretado como ofensivo. Sólo le quedaba confiar en que alguno de ellos hubiese tenido contactos en el pasado con la gente del bosque y comprendiera que eran personas sencillas, humildes y de modales más pragmáticos que refinados. Y propensos a bastarse por sí mismos.

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02/11/2018, 19:10
Ional
Sólo para el director

El du adan se sentó como le había dicho el anfitrión de aquella reunión. Se sirvió también un vino pero lo dejo delante de él sin beber.
La verdad es que no sé mucho de su misión, más bien nada. Pero salí de mi casa en busca de aventuras y, sobre todo para ayudar que el bien prevalezca en Tierra Media.
Al saber que usted, o ustedes, querían viajar a Minas Tirith no me lo pensé dos veces y quise entrar a formar parte de su comituva.
Sé que soy joven y que la experiencia no me acompaña, pero en cambio mis ganas de ver cosas nuevas y experimentar, combinadas con mi energia y desparpajo hacen que sea un digno candidato a pertenecer a su grupo.
De verdad ni se arrepentirá.
El joven se quedó mirando a las tres personas que tenía delante esperando una respuesta.

Notas de juego

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02/11/2018, 22:39
Leofred

Turno 013

El bardo no reconocía a los acompañantes de Agranil, pero por cómo hablaban con él de igual a igual consideró de ellos que se trataban de otros altos señores de Esargoth o tierras cercanas. Leofred no se atrevía a interrumpirles mientras debatían sobre él, pero era fácil ver que no estaban totalmente decididos a aceptarlo o rechazarlo.

La mención de Agranil sobre acatar órdenes no pudo sino percibirla como una dulce ironía de su vida. Sus hermanos le habían dejado camino libre porque no había sido capaz de centrarse en las tareas que le correspondía acometer, y ahí en ese momento le pedían que se sometiese de nuevo a la voluntad de una autoridad diferente. Se contuvo para no sonreír.

- Entiendo su postura, buscan un compromiso con el objetivo que desean emprender. - También entendía que debía de tener un propósito de suma importancia si pretendían tratarlo con secretismos, pero aquello no lo dijo en voz alta. - Me siento honrado de que lord Agranil me recuerde con aprecio y me gustaría pagarle con la misma o más entrega a su causa. Por ello, aunque tal vez la palabra de un viajero ambulante sea poca para unos hombres de su linaje, quiero prometerles por mi buen nombre que si me aceptan les acompañaré y serviré hasta que completen su empresa con éxito; y solo una autoridad por encima de la suya propia me obligaría a retractarme de estas palabras. -

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03/11/2018, 00:56
Gwalin
Sólo para el director

Ante la pregunta el enano se mesó las trenzas que tenía en la barba mirando fíjamente a Agranil. Al poco rato se encogió de hombros y contestó.

-Pues la verdad es que no me lo he planteado -dijo con toda la calma y sinceridad que atesoraba-. Suponía que viajabais a Minas Tirith en una misión comercial o algo por el estilo, pero la verdad es que no lo sé.

-...pero ya que no lo sé, lo pregunto ¿para qué viajáis a Minas Tirith? ¿Cuál es vuestra misión?, ¿para qué nos necesitáis? y ¿qué tendremos que hace... ¡¡¡baaaaaahhhh!! -se autointerrumpió el naugrim-. Me da igual, quiero llegar hasta Minas Tirith y ver la ciudad blanca. Mientras no abuséis de mí ni de mi confianza, podéis mandarme las tareas que sean.

El enano mostraba una sonrisa ancha feliz al pensar en la posibilidad de ver aquella magnifica ciudad.