Partida Rol por web

[ESDLA-D&D] I amar prestar aen

I. Hierba para pipa - Reunión de viejos amigos

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04/10/2013, 23:13
Foroglîr
Sólo para el director

Notas de juego

¿Sabes si hay zorzales por aquí?

Debería saberlo.

Sabes que el zoral es un pájaro ligado con cierto misticismo en el norte. Suelen llegar cuando hay buenas nuevas, como cambios en el tiempo (primavera o la llegada del invierno) buenas cosechas, etc... ¿Ves alguna buena nueva? Es tiempo de guerra...^^

Si me preguntas si es la zona de los zorzales, si es por esta zona, pero hace tiempo que no se ve ninguno. En tus viajes por el norte has visto alguno, y si eres más o menos supersticioso puedes pensar que tuviste un buen día...

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05/10/2013, 13:21
Foroglîr

El dünadan escuchó las palabras de la mujer con una ligera mueca de diversión, pero cuando ésta acabó, agitó la cabeza repentinamente apesumbrado por las palabras de Ela:

Hubo... —dijo el montaraz, con cierta tristeza, como si algún tipo de pena le atenazara el corazón. Como si le recordase a algo querido. A otra persona. A otro lugar. A otros tiempos. Como si lamentase profundamente que ya no hubiera zorzales—. Cuentan las leyendas de mi pueblo que antaño hubo zorzales. Claro que las leyendas tienden a ser algo idiotas —su tono se había tornado algo amargado, y pareciera que las palabras tuvieran cierto tono a escupitajo—. Siempre el pasado fue más épico, más glorioso, más luminoso, más feliz, más memorable. El zorzal, "el ave que trae buenas nuevas"... echo la memoria atrás y me parece un sinsentido en estas vidas que vivimos*. Esta... —miro a su alrededor, como buscando un calificatico—... ciudad —el tono era totalmente despectivo— está condenada. Esta tierra está condenada. Incluso mi pueblo está condenado... Al resto de los hombres se les llena la boca envidiando nuestros dones, nuestra vida más larga, pero cada día pienso más profundamente que es una cruel condena que nos obliga a contemplar durante más tiempo la decadencia de un pueblo que, de acuerdo a las leyendas —otra vez ese tono—, un día se alzó orgulloso.

Notas de juego

*Valga la burreznancia

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07/10/2013, 19:44
Ela Botavieja

Ela no comprendía todas las palabras que acababa de oír, pero sí entendía que el dúnadan estaba triste por recordar un pasado más glorioso. Bueno, eso si no había entendido mal lo que acababa de decir. Le miró a los ojos, compasiva. No entendía por qué era tan pesimista. ¿Era seguro que su pueblo estuviera condenado? Pero los zorzales seguían en la cabeza de Ela, así que aprovechó para seguir preguntando:

—¿A dónde fueron todos aquellos zorzales? ¿Siguen existiendo en algún otro lugar?

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07/10/2013, 20:16
Foroglîr

Foroglîr se encogió de hombros.

No lo sé. ¿Acaso importa?
 

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07/10/2013, 20:19
Ela Botavieja

—Claro que importa, claro que sí...

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07/10/2013, 21:53
Fastolpah Tuk

-Eso, eso...¡ha sido increíble!- dijo la esbelta fémina.

-Ni que fueras la primera que me lo dice, pequeña putita...ahora bien, no será ésta la última vez que me lo digas o.......gimas- como se puede comprobar, el hobbit había vuelto a su manera común de ser.

El mediano la miró satisfecho, parecía que había conseguido lo que pretendía y además había demostrado una vez más sus magnificas dotes como bardo. En otro momento quizás, podría demostrarle a la damita otras cualidades en las que también se hallaba bien dotado, y que de seguro, le resultarían tan satisfactorias o más que su música. Parece ser que en lo concerniente al uso de las flautas nuestro querido Fastolpah era muy diestro, o eso fanfarroneaba en el caso de la flauta de..."pico", puesto que como hemos visto en lo concerniente a la cuarta de las artes, no se le daba mal.

Al ver que la dama se despedía, rápidamente Fastolpah se puso en pie, al mismo tiempo que con la diestra se echaba por delante de la entrepierna parte de su camisa haciendo hueco con el fin de tapar la espectacular erección que aquella mirada y aquellos senos tan cercanos le había provocado. Muchos, incluso yo, nos preguntamos, si en realidad la erección de Fastolpah se debía a la mujer, o al narcisismo que manifestaba en lo tocante a su música y al magnífico poema que acaba de componer a partir de todos los conocimientos sobre aquel maldito pájaro había escuchado...¿todos?

-Por supuesto, mi encantadora señora, acuda presta y veloz a su casa...entre en su dormitorio, rauda introdúzcase en su perfumada cama y sienta el roce de sus sabanas sobre sus desnudos pechos...debe de tener cuidado, pues la noche es peligrosa y más en estos tiempos de guerra...en los cuales, cualquier hombre, mediano o enano, la estaría empalando durante toda la noche hasta haberla desgarrado como si fuera ropa vieja- el hobbit hizo una educada reverencia y la despidió agitando la mano a la misma manera que Ela. -¡Nos vemos mañana!...una lastima que no sea esta noche...-

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08/10/2013, 00:45
Director

Claro que importa, claro que si...

Con estas enigmáticas palabras la mujer norteña vuelve a poner rumbo dirección a su hogar. Camina pausadamente, confiada, es una mujer del norte, sabe valerse por si misma.

Mientras tanto, el Dünadan continúa apoyado sobre la pared con su pipa todavía encendida, esperando.

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08/10/2013, 00:47
Director

El hobbit se despide con un gesto de los pocos parroquianos que aún quedan, los de siempre, la mesa central principalmente. Hace un guiño a la posadera con su habitual desparpajo para este tipo de cosas, y pone rumbo a la calle.

Al salir la fría noche hace que el hobbit se emboce, es casi invierno y tan al norte el tiempo es inclemente. De repente, al arrancar a caminar, observa al dünedan de la posada. Está fumando de su pipa apoyado en la pared, un poco más allá.

Al final de la calle se percibe la silueta de la mujer norteña, que acaba de abandonar la calidez de la posada, justo antes de que tuerza la calle, lo que hace momentos después.

- Tiradas (1)
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08/10/2013, 00:53
Director

La puerta de la posada se abre a tus espaldas justo antes de torcer la calle hacia la casa de Eviathar, tu residencia. Calculas tus pasos para que te permitan observar la figura que acaba de atravesar el umbral girando levemente el cuello al torcer la calle.

Es el mediano no hay duda. Está parado delante del dünadan, dispuesto a iniciar una conversación. No hay duda, esa extraña pareja se trae algo entre manos.

- Tiradas (1)
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08/10/2013, 01:01
Fastolpah Tuk

Fastolpah era de los pocos que permanecían aun en la posada. Ya era tarde e iba siendo hora de irse a dormir, a follar, a razziar o a lo que fuese, pero lejos de esta puta taberna de la que empezaba a estar un poco harto. -Viejos, estrechas, mendigos, vagabundos, borrachos, bardos de tres al cuarto. ¡Hasta los cojones!-* El humor del mediano se había agriado, los motivos podían ser muy variados. Tenía algunas cosas pendientes, y le daba mucho por culo tener que hacerlas. Entre ellas la primera era la de hablar con el viejo Tio Frito Berde. No le soportaba, ni a él, ni a su olor a pis; pero no había más remedio. La muchacha le había preguntado por el zorzal, y le había contado las cuatro primeras cosas que se le habían ocurrido. En realidad, no sabía si le habría dicho lo que necesitaba, lo que estaba claro es que lo había disfrazado todocon una rápida composición poética para dar por satisfecha la curiosidad de la tal Ela. ¡Y que diantres! Si conseguía algo de información quizás podría utilizarlo para abrir la oxidada cerradura del candado de su pubis. Pero no parecía que el puto viejo estuviera por la labor. Abotargado por la hierba de pipa y por la cerveza, la tez del bardo berde comenzaba a hacer honor a su nombre tomando un color cenagoso. -¡Ya estás viejo, hideputa! Más te vale que te cuides hasta que me haya aprovechado de ti lo suficiente- 

-¡Bah! Aquí ya no pinto nada- resopló Fastolpah viendo el percal que le rodeaba.

El bardo no tuvo más remedio que acudir al segundo de los motivos de su cabreo. El imbécil del vagabundo que no había sabido apreciar su arte anteriormente y, que para su tristeza no le había dado una buena estocada al cornudo borracho de Mantecona. Se empezó a rascar detrás de la oreja. -Espero que aquel perspicaz pulgoso no me pegase sus parásitos- Su gesto mostró una mueca al recordar el agudo ingenio del humano al llamarlo "pequeño", después se llevo la mano a la entrepierna para comprobar que la erección había desaparecido finalmente. Tras acabarse definitivamente la cerveza, eructar profusamente, echar una última mirada de arribar a abajo a la estrecha tabernera y guiñarle un ojo, Fastolpah se despidió secamente de los parroquianos para finalizar otro aburrido día más en su vulgar vida. Encaró la puerta lo más dignamente que pudo y anadeando se dirigió hacia ella para encontrarse fuera con el humano y lo que ostias quisiera. Estaba demasiado borracho y amargado como para percibir el posible peligro que esto podría suponer. O eso, o pensaba que nadie sería tan estúpido como atacar a alguien en la noche con los corchetes rondando.

La puerta se abrió y el hobbit salió al exterior esperando encontrarse con su destino, aquel que solo sabía, si el mediano sería recordado durante todas las restantes edades, o...caería en el olvido...Sin embargo, en ese momento había un tercer motivo que le encabronaba más y era el no haber descargado los huevos en la cara de cualquier guarra que se hubiera merecido tal manjar.

Notas de juego

*Notese que Fastolpah comienza a hablar farfullando, entre dientes, sin darse cuenta que alguien podría estar escuchándole, aunque comprenderle sería bastante complicado. Todo ello es obviamente consecuencia de la mezcla de alcohol y amargura a partes iguales que el pobre hobbit porta en su interior esta noche.

 

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08/10/2013, 01:08
Director

Notas de juego

Nota para Foroglîr. El hobbit está bastante borracho, se le nota tanto en los gestos como en el hedor que desprende.

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08/10/2013, 01:12
Foroglîr
Sólo para el director

Notas de juego

Espero a que postee él. Si no interacciona conmigo, dejo que pase de largo y después te cuento lo que hago, dependiendo de las eses que haga xD

Director;

Encaró la puerta lo más dignamente que pudo y anadeando se dirigió hacia ella para encontrarse fuera con el humano y lo que ostias quisiera. Estaba demasiado borracho y amargado como para percibir el posible peligro que esto podría suponer. O eso, o pensaba que nadie sería tan estúpido como atacar a alguien en la noche con los corchetes rondando.

Me ha dicho además que esperaba a tu post, estáis frente a frente. Además eres tú el que tiene que resolver asuntos con él. Tu turno^^

<--------- No me había salido la actualización y lo he mirado de chiripa.

He hablado con él esta mañana, le dicho que yo esperaba a ver si interaccionaba conmigo y me ha dicho que me posteaba él

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08/10/2013, 01:41
Ela Botavieja

¿Pero qué pasa? ¿Acaso estos dos se conocen? Cada día me siento más tonta, no me entero de nada..

Ela se queda observando desde la distancia, tratando de oír qué dicen esos dos o ver qué hacen, tratando de no ser vista.

- Tiradas (1)
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10/10/2013, 01:17
Fastolpah Tuk

La puerta se abrió, poco a poco, lentamente. Al otro lado, un hobbit ciertamente atontado por el nivel de alcohol y por la buena hierba de la cuaderna del Sur, salió como pudo por la puerta de la, reconocida en todo el norte, taberna "El Bardo Berde". Lo primero que sintió al salir fue un frío que jodía, así que echándose rápidamente mano a la capa se embozó hasta el flequillo para intentar hacer más llevadera la noche. Al salir recordó el gesto de aquel "clarividente y agudo" humano, por lo que alzó la mirada con la intención de buscar la silueta del extraño ser. El viento rugía y los ojos del hobbit se cerraron unos centímetros para protegerse de la cortante galerna. -¡Copón! ¡Así no hay mierda que vea uno!- Aguzando un poco más la vista oteó el horizonte, centrando sus pupilas en el final de la calle y...allí estaba, ese culito curvo, y delicioso, que seguro que sería pálido como la leche y exótico sabor a canela. Pero ese manjar desapareció, y la realidad, con un sonoro bofetón de helada ventisca, le devolvió a Fastolpah a aquella ciudad que jamás volvería a contemplar días mejores.

-¡Allí estás, bastardo hideputa!- susurró entre dientes, palabras que se las llevó el viento, mientras costosamente se dirigía hacia la finalmente localizada silueta del humano, o lo que esperaba que fuera él, pues entre tanta capa no veía una mierda. -Espero que este embozado sea el de ahí dentro, porque como sea uno de estos matachines que rondan la noche para desvalijar a los honradísimos viandantes como yo, le meto un palmo de mi acero en las tripas.-  Y allí se presentó nuestro adorable mediando delante del humano, al que le dedicó un seco saludo con la cabeza. El mediano estaba con sus dos manos, cabezas y prácticamente cuerpo entero dentro de su capa protegiendose del frío. Cierto es, que la mano derecha iba posada sobre una cazoleta de acero, por si acaso había algo más de lo que protegerse aquella noche.

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10/10/2013, 18:21
Foroglîr

El montaraz, al contrario que el hobbit friolero, estaba bien abrigado y acostumbrado a noches más frías, a dormir en la intemperie, en el bosque, en el suelo, y en ocasiones, si eran perseguidos o persecutores, sin fuego. Se quitó la capucha con un gesto para ser menos amenazante e intentó entablar conversación con el hobbit, pero lo cierto es que su hedor a alcohol era tan evidente que ni siquiera la brisa nocturna era capaz de disiparlo.

Perfecto, mañana no recordará nada de esto —pensó, irritado. Había con personajes con los que intentar dialogar era una pérdida de tiempo y el hobbit, cada vez más, parecía ser uno de ellos. Sin embargo, había que intentarlo.

Hola de nuevo, pequeño hobbit —saludó, sin demasiado interés—. Me temo que tenemos algunas cosas de que hablar, no demasiado agradables para ti, o si acaso lo fueron en su momento, no ahora. Verás, tu conducta no ha pasado inadvertida realmente, un payaso como él no podría pasar inadvertido ni en la feria anual de ganado— y hay quien se manifiesta molesto con tu incómoda costumbre de tomar las hembras ajenas, ¿me explico?. Me han sugerido que debería "comentártelo", preferiblemente después de atarte un palo y azotarte con una vara, pero no creo que sea necesario. Se me da un ardite lo que hagáis, pero sed más discreto. Quizá en la próxima ocasión no topen conmigo, si no con alguien sin escrúpulos y tu cadáver violentamente profanado protagonice los rumores de los próximos meses en la ciudad... —dejó caer. No quería engañar al mediano, por muy grotesca que su advertencia pareciese. Era una posibilidad bien real y, en cierto modo, le entristecería. Era un ser lamentable, pero ningún ser lamentable merece eso.

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10/10/2013, 21:31
Director

Sabes que es un Dünedain, crees que no es de esta ciudad pero no lo sabes con certeza, sabes que mide y pesa mucho más que tú, que tiene una espada como tú de alto, que tiene malas pintas pero su forma de hablar indica que es más culto de lo que aparenta, que tiene razón en lo que dice sobre ti, que no sabes si es cierto lo que a él respecta ("quizá no topen conmigo"). Y por último y más importante, que está tratando de tener una conversación y tu estás bastante bebido.

- Tiradas (1)
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14/10/2013, 13:32
Fastolpah Tuk

El hobbit intento mantenerse firme durante toda la parrafada que le soltó el humano. El frío no era un buen amigo para mantenerse enhiesto y con buen porte, pero desde luego lo que tampoco ayudaba era la melopea que había cogido allí dentro.

-¡Cien veces puta, Ivi! ¡Me ha envenenado! ¡Joder! ¿Pero que ostias me está contando este harapiento? Apenas puedo entender  lo que me dice. ¿Un momento? ¿Y ese otro? ¡Pero si ahora hay dos! ¿De dónde ha salido el otro encapuchado? ¡Esto no me gusta!-. La cabeza del hobbit comenzó a dar vueltas y vueltas. Por ella pasaban estridentes notas de laudes y zanfonas sin afinar, desagradables sabores como el de la bilis que le subía por la garganta y borrosas visiones que le hicieron perder su sentido de la orientación. Su cuerpo comenzó a oscilar peligrosamente.

-Pequeño hobbit...cosas de que hablar...pasado inadvertida...tomar las hembras ajenas...azotarte con una vara...sed más discreto...tu cadaver violentamente profanado...

Uno de aquellos dos humanos no paraba de hablar. El mediano solo pudo captar varias palabras sueltas de toda aquella verborrea. Palabras que desde luego no le gustaron nada. Apenas entendía muy bien de que narices estaba hablando el humano. Por lo poco que había podido captar, seguro que era por sus decorosas y honrosas costumbres con y para las mujeres. A muchos maridos, novios y otros mancebos de carácter propiamente mezquino no veían con buenos ojos como el bardo obtenía con sus excelsas canciones y sonatas el favor de numerosas damas y más de uno se lo había hecho saber. Otros en cambio, aquellos que no tenían los arrojos suficientes para ello,recurrían a matachines de tres al cuarto con el fin de deshacerse del problema de astado. Más de una vez le había tocado correr, otras en cambio había solucionado la cuestión con su magnífica diplomacia acompañada de un tramo de acero a tiempo en un momento de confianza. Muchos dirían que simplemente habría sido suerte. Parecía que esa noche iba a ser una de estas últimas o...más le valía.

La última frase del dünadan fue suficiente para el hobbit. La bilis había ascendido desde el estomago por el esófago para finalmente producirle una brutal arcada. El hobbit comenzó a perder el equilibrio. Rápidamente intento esquivar las dos borrosas siluetas de sus interlocutores sin mucho éxito -o tal vez, el adecuado, evitando el cuerpo del real- con la del imaginario, al que arrolló. Finalmente, extendió su brazo izquierdo sobre la pared, sin intuitivamente soltar la mano derecha de la cazoleta. La arcada se repitió, esta vez mucho más fuerte y acompañada de todos los alimentos que había tomado dentro de la taberna. El suelo fue recogiendo a chorros un liquido amarillo verdoso en el que podían comprobarse tropezones del pollo que tan magníficamente le había preparado Ivi. Fue una regurgitación contundente que acabo salpicando las botas del hobbit, y que podría haberle llegado mucho más alto si toda aquella sustancia hubiese caído desde una mayor elevación.

Fueron tres arcadas, acompañadas de chorros de bilis, después, el hobbit permaneció en la misma posición durante unos momentos, respirando fuertemente. Sus ojos permanecían cerrados aunque de ellos caían lagrimas provocadas por el esfuerzo. Su boca, abierta, como si estuviera preparada para una cuarta expulsión, igual que sus orificios nasales, que se dilataban como si buscasen aire que respirar de manera desesperada. Pero todo esto no podía ser visto por el humano, puesto que el brazo con el que se apoyaba sobre la pared, tapaba la fatigada cara del hobbit. Finalmente, Fastolpah comenzó a hablar de un modo bastante lamentable y cortado, manteniendo la postura

-Supongo...que he de daros las gracias por vuestra clemencia...Pero...decidme...¿Tan en decadencia está la raza de los Dünedain... que ahora se dedica a estos menesteres...?

-Pensaba que los hijos de Elendil...grandes héroes en el pasado...preferían defender con honor y nobleza...las gloriosas y sacrosantas tierras del Norte...

-Creía que la sangre de Nümenor...había escogido no caer en el...OLVIDO...

Y por cuarta vez...vomitó...

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14/10/2013, 14:35
Foroglîr

Foroglîr, dünadan, montaraz, hombre curtido y errante pero a un tiempo falto de pasión soportó la escenita estoicamente. Sin entrar en detalles, se lo esperaba y poco tenía que reprochar. Montañas más altas habían caído y hombres más orgullosos, más altivos, más nobles, más honestos, más limpios, más elocuentes, más respetados y de más alta cuna habían escenificado peores tragicomedias personales momentáneas. Esperó pues a que el hobbit expulsase a borbotones y ordenadamente todo el contenido de su estómago mientras miraba para otro lado. No quería herir el desmedido orgullo del hombrecillo, que contrastaba tan ácidamente con su estatura. Tampoco entró en sus pullas, si tales eran.

Siempre hemos cuidado del reino del Norte Aunque ya no tenga el más mínimo sentido. Aunque ahora solo se haga por la fuerza de la costumbre, porque cueste más cambiar de oficio que seguir acarreando un peso muerto. Aunque seamos apenas enterradores defendiendo un ataúd vacío de los saqueadores de tumbas— y de todos aquellos que lo habitan. Alégrate de que eso ocurra, aunque sea de formas distintas —más bajas, más sucias, más rastreras, más vacuas, más improductivas— a las que usaban nuestros ancestros —nada le retenía allí ya—. Buenas noches —dijo, al tiempo que se calaba de nuevo la capucha y echaba a andar por las callejuelas empedradas, tan desgastadas y antiguas como su Raza, tan sombrias, tan oscuras y tan silenciosas como la amargura en su pecho. Tan solo su silbido quedo rompía el pesado mutismo de la ciudad. Una tonadilla olvidada. Una canción del Norte.
 

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15/10/2013, 00:26
Director

Notas de juego

La escena que contemplas desde la esquina es algo grotesca. No puedes entender lo que dicen pero podrías imaginar la situación. El hombre está hablando al hobbit de forma pausada en la posición en la que se encontraba anteriormente, a su vez el hobbit se encuentra en una posición inestable, cambiando el peso de un pie a otro y balanceándose más de la cuenta, hasta que finalmente vomita apoyado en la pared. Tras esto, el hombre dirige unas breves palabras al pequeño hobbit y se dispone a alejarse con paso lento.

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15/10/2013, 23:04
Director

Notas de juego

Escena cerrada.