Partida Rol por web

Aramis iba caminando tranquilamente junto a aquel hombre hasta que Riha apareció por ahí con el coche.

Una cara de satisfacción, calma y alegría se le quedó a Aramis hasta que aquel hombre abrió la boca para preguntar el nombre de su compañera, algo que le sorprendió de golpe "¿Porque ahora, porque ella?" Apretó los puños y se dirigió a la puerta delantera junto a Riha, mirando primero que nadie viniera.

Cuando el coche se detiene y la conductora se presenta, el hombre se detiene. Gira sus talones para dirigir su cuerpo hacia el coche y mira a la joven un momento mientras que su compañero, Aramis, rodea al coche para subirse en el asiento del copiloto.

- Riha Sena.

Repite el hombre mientras mantiene su vista sobre la joven. 

Su expresión no varía lo más mínimo y, sin embargo, parece mirar a Riha como si, en realidad, fuera la primera vez que la viera.

Tras esto rodea el coche y se sienta detrás de Aramis.

- Arranque.

Dice manteniendo el contacto visual con Riha por medio del retrovisor interno.

Con todo aquel asunto se formó una pequeña sonrisa de satisfacción en el rostro de la chica que esperó a que los dos se montaran en el vehículo. Ya había decidido que iba a abstenerse de meter las narices en cosas que no le incumbían así que evitaría el momento interrogatorio de qué le trae por aquí.

-A sus órdenes -respondió más animada emprendiendo la marcha de nuevo.

Qué pena que el Jardín estuviera ya tan cerca.

Aramis se pasó el resto del viaje sin abrir la boca, mirando hacia afuera, con la mano sobre su puño derecho, mientras ese mismo brazo estaba apoyado sobre la ventana.

El coche avanza con rapidez por la carretera que llega al Jardín.

De manera que, lo que a vosotros os ha costado una hora de caminata, en el coche cubrís la distancia en apenas un par de minutos solo. 

El camino veis como se bifurca en un momento dado: por un lado se vuelve más estrecho, claramente para los andantes; mientras que el otro camino parecía para coches. De manera que vais por ese segundo camino.

Este rodea ligeramente el jardín y se mete en un túnel que os

 lleva, directamente, a la parte del Garaje del mismo.

A parte de este coche, podíais ver una docena más, bien ali

neados y colocados, aunque más modernos y más adaptados para el combate.

Una vez Riha aparca en uno de los espacios libres, el hombre carraspea levemente.

- Coger mi equipaje y llevarlo al salón de invitados número 1.

Tras decir esto, sin ni siquiera dar las gracias, abre la puerta y sale del coche. Tras lo cual empieza a avanzar dejandoos atrás. 

-El garaje… tenía que haber sabido que terminaríamos aquí, maldición.

Había estado bien divertirse un poco pero se suponía que había prometido no volver a pasar por allí hasta que estuviera en condiciones de unirse al departamento. Como ya estaba hecho sólo quedaba cargar el equipaje y desaparecer cuanto antes así que fue a abrir el maletero para ver qué iban a tener que transportar.

-Al menos el viaje ha estado bien, ¿no?

Llegaron en cuestión de minutos, sin ningún percance, Aramis no hacía más que pensar en aquel idiota que se creía alguien e iba sentado detrás de él "Payaso...", pensaba cuando el coche paró.

La frase de Riha lo sacó de su pensamiento "¿Estás bien?" quería preguntarle, pero prefirió mantenerse callado.

El problema vino tras la frase de aquel imbécil "¿Ni un gracias? Nada de nada, juro que lo echaré del ejercito" Tras aquella frase en su cabeza, se acercó al maletero -Lo has hecho bien- Dijo sin pensar durante aquel momento, entonces se dio cuenta de lo que había dicho y miró a Riha -Quiero decir, era lo que tenías que hacer- Tras éso recogió un par de bolsas y se movió -Por cierto- Dijo parándose -¿Todo bien? La frase al llegar aquí me hace pensar que no estás del todo bien-

Mientras seguíais hablando, Aramis abre el maletero y se encuentra con un par de maletas.

Sencillas, simples, sin adornos ni nada así...

Sin problemas, el chico coge cada una de ellas en cada mano y las saca. Para otra persona podrían pesar bastante, pero para Aramis no. Eran pesos sencillos de llevar.

Ya que Aramis cogió los bultos, Riha se encargó de cerrar el maletero y el coche, guardándose después las llaves.

-Sí, todo está bien… Es sólo que, ¿sabes? Me hubiera gustado que mi segunda visita terminara en mi admisión en el departamento de Armería y Garaje. Especialmente después de escuchar hablar de su trabajo a Arlans -bajó un poco la voz- Espero poder estar a la altura…

De momento se había concentrado en subir de rango y tenía por delante toda una semana para despreocuparse de ello, asistir a algunas clases y seguir trabajando en su proyecto pero seguro que alguna misión haría que saliera de vez en cuando. La satisfacción del deber cumplido le gustaba.

-Pero bueno, será mejor que entreguemos esas maletas. ¿Vamos?

Aramis escuchó lo que Riha dijo y se mantuvo callado, cuando ésta acabó dijo únicamente -Claro, el ascensor estaba... Por ahí- Y se puso en marcha con las maletas a cuestas. 

Prefirió no hablar más sobre el tema del garaje, él tenía su opinión sobre su compañera y, por ahora, mejor no comentarla.

Riha se sentía un poco mal por no estar llevando ninguna de las maletas pero toda la historia de las válvulas le había dejado claro que no estaba hecha para esa clase de trabajos.

-Keaths… gracias por lo de la torre. Creo que si hubiera tenido que hacerlo sola todavía estaría intentando girar alguna de esas válvulas. Bueno, y por acompañarme en esta misión en vez de hacerla con Graves.

Ambos, con las maletas, comenzáis a avanzar por los pasillos del jardín.

Algunos de los estudiantes os miran sorprendidos al veros con las maletas, pero nadie dice nada al respecto, simplemente se aparta.

Llegáis así al ascensor y entráis en él. 

El camino hasta el ascensor había sido tranquilo, a pesar de las miradas de las que el joven Aramis había decidido pasar por completo, si alguien le decía algo ya sería otro tema, lo más probable era que se comiera un maletazo en la boca, pero mientras no se abriera la boca, no hubiera sonrisitas o algo de burla, sin problemas.

Al llegar al ascensor, Aramis dejó las maletas en el suelo y apoyó su espalda en el cristal, esperando que Riha entrase y pulsara ir al 1º piso.

Una vez en el ascensor fue cuando empezó la frase de su compañera "¿Keaths?" se preguntó a si mismo "¿Cuando le he dicho mi apellido a alguien?" continuó en su cabeza, Aramis había intentado a toda costa ocultar ser el hijo del General Keaths, pero parecía que aquella chiquilla sabía algo más de lo que decía... Aunque rápidamente desestimó la idea, "Seguro que le preguntó a Siward por mi" pensó mientras borraba aquello de su cabeza.

Al acabar la frase, el joven soldado de Galbadia no supo que decir, miró hacia un lado, un tanto sonrojado y tras unos segundos habló sin devolverle la mirada -Eh... ya... B-bueno, realmente tu has arreglado el ascensor...- Carraspeó - Ejem, es decir, lo has hecho bien y... bueno...- Claramente no estaba acostumbrado a elogiar a nadie -Y por lo del coche, realmente ha sido todo trabajo tuyo... Así que dudo que me necesitarás por ahí- Volvió la mirada a Riha y rápidamente miró hacia el otro lado -Ha sido cómodo trabajar contigo... Em... Es decir... Que ha sido fácil además... Bueno... Que éso, que... Ya hemos llegado, va- Recogió ambas maletas a toda prisa y evitó la conversación de nuevo.

Era como si estuviera pasando algo extraño y fueran los únicos que no se habían enterado pero el viaje en el ascensor fue más raro todavía que ir por los pasillos con la mirada de todos puesta en ellos. De pronto Aramis había olvidado cómo se hacía para juntar más de cuatro palabras seguidas. Que sí, ella no era quién para hablar porque tan pronto respondía casi con monosílabos como se ponía a hablar por los codos. A saber. Igual tenía claustrofobia en los ascensores.

Ahora sólo les quedaba encontrar el salón de invitados número uno y dejar las maletas con las llaves del coche.

Mientras la conversación sigue de forma... Peculiar, el ascensor se detiene y llegáis al primer piso.

De un rápido vistazo encontráis lo que estáis buscando y entráis en una sala.

Es bastante acogedora, con varios sofás, una larga mesa y una cómoda. Un lugar perfecto para una reunión informal.

Echáis un vistazo y no veis allí a vuestro "pasajero".

Y mientras buscáis un lugar donde dejar las maletas, notáis como vibra vuestra pulsera. Al mirar, veis que es la recompensa por esa misión.

Después de una incómoda conversación, el joven Keaths volvió a ser el de siempre, ambos entraron en la sala de espera junto, Aramis dejó las maletas que cargaba al lado del sofá y tras éso recibió una vibración en su pulsera -Superada- Dijo mirando a Riha y moviendo su pulsera.

Tras éso la pulsó, la abrió de nuevo y leyó las demás misiones -Hemos hecho dos ya, ¿Que hora es? Tengo un poco de hambre, podríamos comer algo y hacer otra por la tarde- Esperó unos segundos -Si estás ocupada puedo escribir a Siward o hacerlo solo, aún me sobran fuerzas- Sonrió y miró a su alrededor, tras éso, se dirigió hacia la puerta para salir de ahí.

Las habitaciones que tenían en el Jardín eran bastante buenas pero entrar en aquel salón de invitados fue un poco chocante. Parecía sacado de un palacio… ¿De verdad iba a quedarse allí una sola persona?

-Es enorme… -murmuró para sí todavía desde la puerta mientras su compañero dejaba las maletas.

La vibración de la pulsera la sacó de sus pensamientos y fue a dejar las llaves sobre la mesa entre los dos sofás para luego comprobar el mensaje que le había llegado. Una nueva actualización de rango le sacó una sonrisa pero Aramis tenía razón: eran las hambre en punto.

-Sí, vayamos al comedor. Podemos revisar las misiones.

Tras dejar las maletas y las llaves en la habitación, la pareja se da cuenta de que sus tripas se empiezan a quejar y que es una buena hora para ir a la cafetería. Allí podrán hablar con más calma, ver las misiones que quedaban y organizarse.

Así que allí llegan y ven el panorama. 

En una de las mesas estaban cuatro de los jefes de departamento.

Por un lado la Jefa de estudias, el jefe del departamento de Exploradores, el de combate y el de misiones*.

Todos están hablando de forma... Tensa... 

Sin embargo están en una mesa apartada del resto.

En otra de las mesas había dos chicos sentados charlando tranquilamente. Parecían conocerse bien porque reían y hablaban con tranquilidad.

En una mesa, solo, había uno de los que pasó el examen con vosotros, el cual os hace un leve gesto con la cabeza al veros.

Mientras que en otra mesa, apartada, hay una chica sola, leyendo varios libros.

Tras entrar en la cafetería, Aramis dio una ojeada rápida, devolvió el saludo con la cabeza al chico que estaba sentado solo, tras éso miró a Riha y señaló, con la cabeza de nuevo, hacia una de las mesas que no estaban lejos de los Seeds, por si acaso se les escapaba algo un tono más fuerte de lo normal y tenían la suerte de poder enterarse.

Aramis se movió hacia la mesa esperando que Riha le siguiera, una vez sentado en ella dio una ojeada de nuevo, "Que raro no ver a Siward..." -Bueno, voy a pedir algo de comer, ¿Te apuntas?- Y se levantó a por la comida.

Tras éso volvió a sentarse con la esperanza de llenar su estómago.

Mientra se metía comida en la boca, miró la pulsera con las misiones -Mmm... ¿Que te parece ésta de nivel C?- La leyó de nuevo -"Detener a unos bandidos"- Miró a Riha -Está cerca de Deling, no creo que nos lleve mucho tiempo-

Durante el camino, Riha se entretuvo mirando las misiones que había disponibles. Seguía teniéndole alergia a acercarse mucho al garaje… pero había un par más que no pintaban mal.

En la cafetería también echó un vistazo general. Al ver al compi de la misión de ingreso saludándoles levantó el brazo de forma más vistosa que Aramis pero también estaban por ahí la chica de aspecto aburrido, el chico de la biblioteca con el chico sobrexcitado y una mesa de mandamases nerviosos por sus cosas secretas de alto nivel. Ella hubiera ido directamente a por la comida pero por algún motivo Aramis quería sentarse un momento antes de hacer eso… así que se quedó de pié mirándole y asintió.

-Eh… Para eso hemos venido.

Ya con la comida en la mesa pasaron a lo importante: qué hacer esa tarde.

-¿De nivel C? Me temo que todavía no tengo rango 2. Yo había pensado en hacer inventario en la enfermería. Algo más tranquilo después de ir de un lado para otro... y hay trabajo de sobra.