Partida Rol por web

Luego de caminar largo rato por el segundo bioma, nunca creyeron que fuera tan grande llegan hasta una pequeña cabaña escondida en este bioma, que Fuera tiene pintado los estandartes de los Diablos. Antes de llegar los detienen los otros – No querrán encontrarse con el Sr Cecil esperen un momento a que se valla - ven como de la cabaña sale un sujeto con la apariencia de un pulpo que aunque porta las ropas e los Seed no es un estudiante e irradia un aura que da algo de miedo.

Tras de él salen 3 ronsos donde a uno lo reconocen como el que ataco a Renall en el comedor pero este parece estar bajo las ordenes de otro más grande y con un porte diferente – muy bien hemos llegado pero el resto podrán llegar hasta aquí, a la cabaña solo puedes entrar si eres un diablo o estas invitado y solo a ella la invitaron – dice uno de los escualos.

Cadetes no se preocupen solo quiero tener una conversación con esta bella e inteligente señorita, según dicen, acerca de las idioteces que hiso el zopenco de mi hermano – mientras señala al ronso que tuvo el problema con Renall – pero lamentablemente solo ella puede entrar – señala a Kain – si eres tan amable – y la invita a pasar con una seña cortes.

A lo lejos logras observar que Blarr y Nurdalgen están sentados muy cerca de la laguna sobre el césped. Te parece ver muy a lo lejos una de las alas de Isabeau que iba en dirección del bioma siguiente, pero no estás muy seguro ya que unos árboles te obstruyen la visión.

Siguen a Renall por el pasillo para interrogarle cuando de repente no se dan cuenta y llegan al patio.

Al llegar a la puerta del patio principal y abrirla sientes como la luz entre y una ráfaga de aire fresco con ella. No imaginabas un patio ni con estas dimensiones ni de esta forma. Tiene forma de un gran aro de unos 600 Mts de ancho y con un diámetro más grande que el edificio que se alza en su centro que dice Centro de estudios y dirección, la parte central, a donde saliste está completamente adoquinada con un símbolo gigante de los Seed a la derecha si recorres el aro el bioma cambia a un lugar más boscoso con un sendero que lo recorre, los  arboles de unos 15 a 20 metros de alto con troncos grandes y robustos, distingues algunos pinos, el sendero pasa por un pequeño puente peatonal y bajo el una pequeña, laguna este espacio ocupa 1/6 del aro.

Al continuar el recorrido ves que el bioma cambia a un espacio sin arboles asemeja una pradera con sus colinas y todo, donde muchos estudiantes descansan en el pasto hay algunas chozas abiertas donde ves en su interior un pizarrón electrónico con una mesa y algunos bancos donde algunos estudiantes están charlando al igual que el anterior este lugar ocupa el mismo espacio. Luego se repite nuevamente el lugar donde entraste pero este esta empedrado con un signo distinto desconocido en el suelo.

El siguiente lugar es otro bioma distinto es más parecido a algunas montañas de hecho al entrar sientes que el clima es más frio en comparación incluso con la temperatura de la región, este lugar es rocoso con algunos riscos que al asomarte ves un espacio subterráneo de la academia que parece una sala de máquinas o un taller con varios pisos de caída, no logras distinguir muy bien desde aquí. Cuando continúas ves un espacio mucho más frio al punto de ver que está cubierto de nieve y los estudiantes que se encuentran en este sitio sueles usar abrigos algunos pinos lo adornan. Un factor común en estos espacios es que hay algunas máquinas de monedas expendedoras de bebidas distribuidas estratégicamente en cada uno de los biomas y los únicos Accesos al gran edificio es por los 2 extremos el empedrado y el adoquinado.

Regresan de su asombro nunca imaginaron que tamaño de patio estuviera aquí y ven como renal y la pequeña Seed tarutaru buscan ofuscadamente a alguien.

Muy pero muy muy buenas tardes chicos permítanme interrumpirles para informarles que ya para esta hora 3:30 pm se cierra el estadio de Bliztball por pedido del entrenador Leonard ya que están ensayando tácticas secretas para el juego de esta noche… Ummm no se preocupen si querías ver el estadio en funcionamiento podrán verlo esta noche en todo su esplendor y recuerden nuevos cadetes sus puestos estarán muy cerquita de la acción ya que esta exhibición es para ustedes y al entrar todos tendrán los puestos de adelante… HHHOooo y recuerden el gran discurso de nuestro amadísimo director es a las 5:00 pm en el patio de entrada no lleguen tarde…  Los dejo con un poco de música y que pasen feliz noche, se despide quien les habla la única, la inigualable, la magnánima y amiga de todos Sasha Meyyyyyy los quiero - Con una voz alocada y muy divertida se escuchó en los parlantes de todas las áreas comunes de la academia y deja sonado nueva mente la música.

Estaba maravillado ante el gran jardin, el estadio de blitball tenia que ser impresionante, pero justo indicaba la megafonia que iban a cerrarlo, que pena habernos distraido con renall, pero ya que estabamos podiamos intentar echarle un cable - Renall KUPO ¿quieres que te ayude? Dime a quien buscas o como es y lo busco desde las alturas KUPO - ya quedaba cada vez menos para la reunion y tenia que distraer mi mente con algo

- No tiene nada que ver con su acompañante, ¿no? -le digo a Tempi sacándole la lengua antes de ir a preguntar a Renall por su particular situación.

Así que era eso... ¿Por qué será que a este tipo le pasa todo? Pienso al encontrarme con que una vez más un Seed había decidido tomarla con Renall, hasta cierto punto al menos.

En cualquier caso, cuando me había acercado a preguntarle, casi sin darme cuenta había salido al patio. Parecía apurado por irse, así que le hice un gesto de despedida bastante vago con la mano mientras contemplaba el grandioso lugar. Al parecer se habían esforzado por recrear mágicamente (o con tecnología, pero si no no se explicaba) distintos climas, dando una apariencia insólita al lugar. Es algo magnífico, pero no obstante capta mi atención que cuando estaba por irse, Renall se gira de nuevo y me da un papel recién sacado del bolsillo. Lo miro un poco extrañada al principio al ver esos números anotados, pero no tarda en explicarme que es su número de móvil... lo que me hace pensar que este chico es bastante raro para todo, llevar un papel con tu número anotado era bastante extraño. Igualmente, le dedico una sonrisa amistosa.

- Claro, gracias. Ya te llamaré para que tengas tú el mío. -respondo con amabilidad.

No me parecía la clase de chico que prepararía una escena tan curiosa sólo por tener el número de una chica, aunque ciertamente no me parecía imposible. Mogto entonces llegó a ofrecerse para buscar a quien quiera que fuese. Ciertamente él tenía "facilidades" que el resto de nosotros no. Estiro un brazo hacia arriba y luego el otro sujetando del codo el primero, estirando así la espalda de paso. Mi cuerpo se quejaba por el exceso de tiempo sin dormir, y a pesar de no haber comido nada pesado para favorecer que mi cuerpo tuviese energía, el cansancio se dejaba notar ya.

- Como al final no hace falta ni se puede ir al estadio de Blitzball, creo que buscaré algún lugar cómodo para echar una pequeña siesta, veinte minutillos nada más. -les comento- Aunque estoy un poco preocupada, creía que un amigo iba a empezar también este año pero hasta ahora no lo he visto... -¿Qué habrá sido de Darius y Dayka? Pensé. Me hubiese encantado tener una dragoncita también, pero por desgracia no podía.

Quizás después de la siesta preguntase si podíamos ducharnos y cambiarnos de ropa para estar presentables ante el director. Entre la siesta no demasiado larga y eso debía servir para mantenerme bien despierta.

"Queda una hora y media supongo que para la reunión ya abran acabado lo que vayan a hacer así que debería encontrarlos antes de que eso suceda."

La voz de Mogto me pillo por sorpresa al parecer me había seguido pero en vez de molestarme suspiro y decido aceptar su ayuda.

-Quiero que busques a tres Aquarian Rathz, ya sabes lo que parecen tiburones, y a Kain, la última vez que los vi estaban en el patio y de eso hace unos minutos así que es posible que sigan aquí. Empieza a buscar por ahí -señalo al siguiente bioma- Si te encuentras con Aokishi, Isabeau o una novata de piel pálida y que responde al nombre de Euphemia.

Parecia que se habia quedado a medias pero lo que me ha pedido era que buscara a tres acuarian que estaban con la señorita con la que comimos, esperaba que no fuera dificil - ¿Los aquarian van uniformados? ¿Kupo? - tras su respuesta mientras emprendi el vuelo conteste - ahora te los encuentro ¡kupo! - o eso esperaba que la altura me diese ventaja en la busqueda

En nuestra siguiente parada subieron una chica un tanto pálida, un kupo, un moogle y un tarutaru, lo que convertía a nuestro grupo de viaje en el más variopinto que hubiera visto jamás.

De inmediato saludé a los recién llegados con una sonrisa amable, mientras me presentaba.

Buenas tardes, soy Eladamri Lorian, podeís llamarme sólo Eladamri. - dicho esto, procedo a relajarme e intentar disfrutar el viaje.

Luego el Halcón hizo una segunda parada en donde subieron otro ronso y un wyrm, es en ese instante que repare nuevamente en Darius, pues el recién llegado lucía un gran cuerno en su cabeza, cuerno que al parecer Darius había perdido tiempo atrás.

En ese momento me forcé a no comentar mucho el tema y me limité a presentarme con el recién llegado.

Buenas tardes, soy Eladamri  y respondiendo a tu pregunta, yo llevo sólo unas pocas horas en la nave, Darius tiene un poco más de tiempo que yo. - dije mirando al recién llegado, al tiempo que noté que este último dirigía una mirada significativa a Darius.

Muy bien, aquí vamos de nuevo.- pienso cruzándome de brazos.

            - Si Kain deecide entrar a solas para platicar contigo amigo, no tendré inconveniente en esperarla, ya que no puedes ser un cordial anfitrión para nosotros, pero si ella no desea entrar a solas entonces tendrás que hacerlo aquí mismo o romper tus propias reglas para incluirnos -    Dijo Isabeau enarbolando en el aire un bastón de madera que terminaba en una punta como una lanza, que descubría de su espalda, junto a su carcaj antes de comenzar a tenzar la cuerda mientras que doblaba sobre si mismo el bastón para que tomara la forma de un arco.    De reojo miraba al resto para mostarles su intención y para reconocer las de ellos

ya se le estaba haciendo un poco redundante todo, Kain en ningún momento había mostrado miedo, quizás pesaba igual que ella, que no parecía existir peligro, además, todos eran de la misma raza y podría obedecer más a una especie de logia secreta o fraternidad. Se preguntó si había algo así para los dhampiros, aunque imaginó que todos debían ser unos estirados. 

 — Kain ya ha dicho que irá  — acota, antes de que se empiece otra vez con la defensa corporativista, y miró la hora, aún quedaba rato para el bendito discurso, pero su atención se fue a otro lado, a ese extraño y oscuro ser que salió, Sr. Cecil, hizo una nota mental sobre él, y sus ojos se entornaron, esa aura  — ¿por qué no queríamos? ¿es malo? ¿quien es el señor Cecil? — pregunto con una vocecita de niña, simulando a la perfección una completa inocencia, usando su lindo rostro y encanto para conseguir esa información, claro, no era tan tonta como separar a las personas entre buenas y malas, habían muchos matices entre ambos extremos, un amplio espectro de tonalidad que no podían ser catalogados de buenos o malos. 

Asenti a la pregunta de Darius, agitando una mano en el aire, como intentando quitarle importancia al asunto y, de paso, volver a recuperar el control sobre mis actos- Si, estoy bien, tranquilo. Es solo... Que todo esto me ha descolocado un poco... Quiero decir... no pensaba encontrarte aqui... ni tampoco habia pensado en como sería esto de la academia y demas. Y ya sabes como soy yo, ¿no? Un alma libre y tal... - resumi, intentando que todo pareciera liviano y trivial, acabando por esbozar una enorme, enorme sonrisa cuando saco aquella improvisada "merienda"- Oh, sí. Ahora soy una mujer muy, muy feliz- acabe por sonreir a Darius, mientras cogia algo de lo que me ofrecia, cayendo entonces tambien en la cuenta de dos cosas: una, que habia intentado sonreir, lo cual resultaba en cierto modo entre comico e inquietante. Y, otra, que el tal Rimu, acabo por ofrecer comida tambien tras presentarse, lo que hizo que instantaneamente se ganara un pedacito de mi corazon.

-Oh, ¿en serio? Graaacias. - dije, cogiendo un trocito tambien para probarlo, dedicandole la mejor de mis sonrisas- En serio, llevaba sin comer nada desde ayer... Me moria de hambre... - añadi entonces, explicandome, con la boca parcialmente llena y la sonrisa aun en los labios-  Por cierto soy Ruby. Encantada. - me presente, a Rimu y al resto, alzando mi mano en general, a modo de saludo.

Entonces, Rimu hablo de alimentar con sangre a la chica que los acompañaba, lo que hizo que generara en mi cierto nivel de desconfianza relacionado mas bien con mi propia supervivencia. -  Espera... ¿y tu? Quiero decir... ¿te alimentas de ellos? - estaba flipando. ¿En serio con lo majos que parecian iba por ahi chupandoles la sangre? ¿Y a ellos les parecia todo normal y tal? Sabia que los Damphiros existian pero jamas habia visto a nadie hablar de ellos con aquella normalidad.

Y estaba a punto de añadir algo mas, algun algo descolocada con todo aquello cuando paso lo que tenia que pasar. Alli estaba aquel ronso, dedicandole a Darius una mirada que no me gusto ni un pelo. Sabia perfectamente qué pasaba. Sabía qué era lo que miraba con aquel desprecio. Y no, no iba a consentirlo- Eh. ¿Y tú que miras? - le dije, ni corta ni perezosa, sin miedo  a nada ni a nadie. Quizas mi codigo etico no era el mejor y quizas mucho podrian tildarme de interesada y de gualtrapa, pero era valiente, y no tenia miedo a decir las cosas a la cara. No, yo no era de las que se quedaba callada. -Es guapo, ¿verdad?- dije, intentando avergonzarlo deliberadamente, para darle a entender que aquel gesto no me habia gustado lo mas minimo.

No. No iba a consentir ninguna de aquellas miradas.

Kain asintió - sería descortés e incorrecta si no accediera en soledad, màs un hogar no es un lugar libre por el que pasear, entraré encantada por respeto y curiosidad, y tengo esperanza de no mucho haceros esperar - hizo una reverencia, saludando al anfitrión. Acercándose a la cabaña, acabando de hablar.

- Si mi anfitrión no accede primero, seré un invasor en mi acceso, y aunque nos han dicho de evitar al tal Cecil, que su aura sea un misterio no lo veo una razón de peso, aconsejo a sus compañeros apoyarle por respeto, pues no quien peor aparenta es siempre un esperpento, y si sus propios aliados aconsejan el distanciarse de él, no le quedará a Cecil confianza en la que sostener su mal ver.

Sabía que si no te apoyaban los compañeros, te vendían como "el malo", y pocos llegarían a conocer a una persona (tal vez) interesante.

- ¿Cómo? No, claro que no.- Respondo sonriendo a la pregunta de mi amiga que me había pillado por sorpresa.

Cuando Renall nos explicó su situación miré a la TaruTaru que le había hecho eso y sonreí, la gente a veces nos trataba como si fueran superiores solo por parecer niños, además Renall no era la primera vez que se metía en líos, un escarmiento le iría bien. - Wow, ¿Qué clase de magia es capaz de hacer algo así?.- Me estaba dando cuenta que las disciplinas que enseñaban en la academia eran de lo más variadas.

Antes de alejarse de nuevo le dio un papel con su número de móvil. Miré a Aura alzando las cejas. - Vaya, parece que has causado impresión, primero Kenneas, ahora Renall...- Solté una risita, con eso le devolvía el comentario anterior.

No tardaron mucho en llegar al patio, y como todo lo demás en la academia, me impresionó tanto que necesité unos momentos para asimilar lo que veía, ¿Cómo era posible que en un mismo espacio hubiera tantos biomas diferentes?. La idea de tener un terreno tan amplio y variado por el que pasear libremente hizo que mi sonrisa se ensanchara. - Yo me iré a dar un paseo, a ver si con suerte conozco a alguien divertido. Si veo a las aquarian les diré que las estáis buscando.- Propuse a Renall,  a la TaruTaru y a Mogto que se acababa de unir a la búsqueda. - ¿Para que las buscáis si se puede saber?.

- Eso - Dije señalando su mano izquierda - va dentro de lo que tienes en la mano derecha. - Le indiqué a Hedeon cuando estaba intentando abrocharse el cinturón. Después de ver por la ventanilla donde había vivido toda la vida, era normal que no hubiera visto en su vida un cinturón de seguridad. Entonces se me queda mirando, y no me cuesta demasiado ver que sus ojos se dirijen hasta mi frente, donde la ausencia del cuerno se hace notar respecto al resto de mi raza. - Tranquilo, te acostumbrarás rápido. - acabé por decirle mientras la aeronave despegaba a toda velocidad y él parecía asustarse algo por el despegue. Era más fácil adivinar las sutiles connotaciones de la gesticulación facial de otros cuando eran de tu misma raza.

Pero la que también pareció comprender lo mismo fue Ruby, quien saltó inmediatamente contra el otro Ronso. - Ruby, tranquila. - Le pedí, con total tranquilidad. - Es normal. - Negué con la cabeza. - Entre los Ronso, el cuerno de su frente representa su fuerza, su valor, su honor y su orgullo. Perderlo es toda una vergüenza. - le expliqué con total tranquilidad. - Pero yo nací sin él, así que no puedo perderlo. Templé mi fuerza, valor, honor y orgullo en mi espíritu y en mis huesos. Algo que siempre estará conmigo, que nunca podré perder. - Sentencié, volviendo la vista esta vez hacia el Ronso. - Y estoy seguro, que Hedeon como buen Ronso, sabrá valorar el honor y la fuerza venga de quien venga, sin prejuicios. - Acabé por decirle al peludo amigo, para después centrar mi atención en asuntos menos trascendentales.

- Por favor. - le agradecí a Rimu, tomando algo de emparedado con cuidado. - Si no me hubiera adoptado Meltra, habría acabado allí seguro. - afirmé sobre la Residencia Ishino. Lo que también explicaba porque hablaba "correctamente" a pesar de ser un Ronso, y mi comportamiento era más parecido al de un humano o un elfo que a alguien de mi especie. En cuanto Rimu mencionó lo de alimentarla, miró a Uzume. Había conocido a otros dhampiros, no era algo nuevo. Y siempre que los donantes lo hicieran de buena gana, nada tenía él que objetar.

- Tengo entendido que es placentero para ambos ¿Es cierto? - le pregunté a la chica recién llegada, mientras Eladamri mencionaba algo a lo que no había estado atento. El tiempo que llevabamos allí metidos. - Pues... - saqué el móvil, comprobé la hora. - Unas ocho horas, más o menos llevo aquí. Después subieron ellos. - Señalé a Eladamri, Kiel y Ruby con la mano abierta -que señalar con el dedo era de mala educación- - Después ellos. - esta vez incluyó a Remi, Lucky, Uzume y Leelu. - Y por último Hedeon. - Acabé por citar. - Pero no os preocupeis, en menos de una hora estaremos allí. - acabé por decirles, para tranquilizarlos.

-Así es, además llevan el emblema de la cabra que ya conocemos.

Observó como Mogto se eleva deseando que encuentre algo. Me giro de golpe en el preciso instante que Tempi dice que si encuentra a los aquarian les avisaría de nuestras intenciones.

-Ni se te ocurra, si los ves aléjate inmediatamente y búscame esa gente es peligrosa. Kain podría estar en peligro. Por eso he tenemos que darnos prisa y encontrarlos -claramente estaba preocupado, miro a la Seed que nos acompañaba- Me pareció ver el ala de una compañera Aven que se encontraba con nosotros durante el encontronazo con los Aquarian e insistió en acompañarlos así que puede ser que ellos también estén por ahí. No es seguro que fuera ella, ni que donde este ella estén los Aquarian por eso como superior nuestro es tuya la decisión de si vamos a investigar ahí o buscamos una pista mas segura.

Uzume iba a responder de manera igual de cortés que la pistolera, así que le indiqué con un gesto que me tocaba hablar.

En realidad, es un acuerdo bastante funcional- explico con total normalidad-. Somos tres y compramos comida equivalente a ello. Nosotros tenemos la tranquilidad de que tendremos comida suficiente para alimentarnos, ya que incluso nos sobra media ración para cada uno y ella a cambio de su comida puede alimentarse de nosotros. Además, con los años nuestro organismo se ha acostumbrado y cada vez nos cuesta menos recuperarnos.

Miro al ronso con curiosidad cuando pregunta por si es placentero.

Supongo que un poco- respondo con una sonrisa-. Aunque ayudar a un compañero siempre lo es ¿no?

¿Quieres probar? - añade ella mordiéndose el labio-. Prometo no hacerte daño. Soy una dhampira buena.

Sonreí divertida al comentario de Tempi. Para bien o para mal, Kinneas estaba cogido y no parecía que Renall pensase en ese sentido. Igualmente, poco importaba.

No obstante, la cara me cambió de golpe cuando escuché el comentario de Renall. Eso de que pudiera estar en peligro ya no me hacía nada de gracia.

- Vale, cambio de planes por mi parte. Voy a ayudar a buscar, si los encontráis y me veis a mi antes que a Renall avisadme a mí, que teniendo su número será más rápido que yendo a buscarlo. -dije con seriedad- Voy hacia la laguna a ver si los veo por allí, mejor démonos prisa. -les dije antes de enfilar en la dirección que había dicho.

No era sólo el hecho de irme, sino que al poquito de empezar a andar pasé a ir corriendo en esa dirección, primero al trote y luego en carrera. Había que dar fe sobre la agilidad de los elfos.

Casi por pura inercia Elisse camino con los demás, más movida por el no tener realmente nada que hacer que por otra cosa. Cuando llegaron observo a aquel ser tan extraño, realmente estaba claro que allí podrían encontrarse con prácticamente cualquier clase de persona y eso en parte le gustaba, podrían ver que no todos los Seed eran iguales, y menos como sus padres, tendría que estar atenta para aprender y ver cómo era todo el mundo.

La reacción de la chica alada le pareció un poco exagerada, le coloca una mano en el hombro mientras dice:

Tranquila, dudo mucho que le hagan nada aquí dentro, además como ha dicho ella (señala con la cabeza a Euphenia) Kain accedió a entrar ahí…

Lo que sí que le llamaba la atención es que quisieran hablar con Kain algo de lo sucedido en el incidente de la cafetería cuando realmente ella puede decirse que llego al final y no supuso demasiado a lo que paso.