Partida Rol por web

El inspector, un varón de edad indeterminada con rasgos afilados, os toma declaración. El hombre desde luego es bastante menos crédulo que el conductor del tren, y os interroga incidiendo en varios puntos contradictorios en vuestras tres versiones, mientras toma nota de cuanto le decís en un pequeño bloc de notas.  

Bien. Eso es todo- Dice dispuesto a dejar que os marchéis. Es obvio que el hombre sospecha que no le decís toda la verdad, pero sin certezas ni pruebas, no puede acusaros de nada. Estando todo dicho, el hombre está a punto de marcharse cuando algo que cuelga del cuello de Gared le hace detenerse en seco.

Chico ¿De dónde has sacado ese colgante?  -Pregunta bruscamente, entrecerrando los ojos cómo si estuviera haciendo memoria, pues parece reconocerlo.

Mirando a la chica de las mariposas tatuadas casi tropiezas de lleno con vuestro contacto.

Entre tanta extravagancia casi te alegra ver alguien vestida de forma normal. A Julia la has visto ocasionalmente por el Jardín, no en vano es la hija de Raine y nieta de Squall. Muchos dicen que es la viva imagen de su abuela, Rinoa, aunque sin sus poderes mágicos, Julia es una guerrera famosa por empuñar el legendario sable-pistola de su abuelo.  La Seed, también te  reconoce de inmediato.

Bienvenido a Esthar. Al principio cuesta un poco acostumbrarse -Comenta riéndose al ver tu cara de sorpresa ante algunas de las cosas que hay por aquí. -Por cierto, la directora me dijo que seríais cuatro...

Continuaba nervioso y agotado, pero ya quiero iniciar de una vez. Vaya lío en que nos metió Ional con el GF para salvarnos, pero no nos queda de otra.

Ese inspector hace su trabajo y no lo culpo, pero espero que acabe de una vez. Contesto las preguntas como se debe y cuando apenas nos deja ir ve mi colgante. 

¡No lo había ocultado! Rayos... debo pensar en algo rápido. 

¿Esto?... Me señalo el dije y me le quedo viendo unos momentos. Lo compré hace un par de años en un bazar en Dollet. Se me hizo muy bonito y por ello lo adquirí. ¿Pasa algo malo?

No quiero que me lo quite, no señor. Lo guardo debajo de mis ropas de manera casual mientras espero que me responda. Miro a Xia, pues quiera o no esto es un primer indicio.

Me dijo la vendedora que me traería suerte, aunque nunca supe de qué iba el símbolo. ¿Usted sí?

El inspector mira fijamente a Gared cómo tratando de deducir si le está mintiendo sobre el origen del colgante, tras unos segundos parece aceptar la explicación del ladrón y se relaja un poco.  

Es un león -Le responde -  Un animal ficticio, mitológico, al que se le atribuye coraje y valor. Al amuleto se lo conoce cómo “corazón de león”.  Muy poca gente lo sabe, no es un amuleto muy común.

Me recordó a uno de mis primeros casos en el cuerpo, pero en fin, debo haberme equivocado. Regresad al tren. En cuanto los técnicos acaben de revisar el vagón dañado reemprenderéis el viaje, me da que los daños no han sido demasiado graves. Es cómo si algo hubiera explotado desde el interior del vagón hacia arriba….

Ional se llevó la mano a la nuca al ver tanta cosa rara, seguro que el turbopatin de Ggared encajaba perfectamente, extravagante todo y ¿tatuajes móviles? ¿Debería hacer algo raro para encajar? Pero mientras pensaba se topó con Julia, alguien normal entre tanto ratito...

- bueno, cuando llegue el tren seguro que llegan los tres restantes, atacaron con gas nuestra habitación, e hice... Emmmmm... Un pequeño estropicio digamos...

Hizo rodar sus ojos buscando como explicarlo - ¿ha llegado a esthar el rumor de una sombra de 4 alas que salva a la gente y desaparece sin decir nada? - tal vez dependían sus compañeros de que el rumor que buscaba esparcir durante sus entrenamientos hubiera viajado lo suficiente, ya fuera gente de un sitio u otro, bastaría con que la gente del tren hubiera escuchado o visto personalmente la sombra de Garuda.

No pude evitar apretar los labios al ver como Ional se largaba dejandonos a nosotros con el marrón, estaba molesto por ello pero tenia otras cosas en mente de las que preocuparse como la adeclaración de policia y el examern médico, durante este último estuve bastante nervioso pero finalmente  acabó todo.

Así que miré a todas partes esperando que nos indicasen donde teniamos que ir mientras reparaban el tren tras el desastre de Ional.

Xia escuchó complacida cómo el conductor creía su actuación, pero estaba a la vez nerviosa por la mirada inquisitiva del inspector.

Al escuchar la historia sobre el colgante de Gared, se sorprendió de la capacidad del chico para mentir. Parecía que todo iba bien. Ahora tenían algo de información, por vaga que fuera.

Le agradeció al inspector y se dirigió a dónde se supone debían esperar.

Asiento ante la información del dije. Ya es un paso más para averiguar de mi pasado. 

No puedo evitar sonreír un poco, aunque cuando mencionó que se le asemejó a algún caso en el pasado, me inquieto un poco.

¿Un caso? ¿Qué pasó en ese caso?

Pregunto por impulso, pero creo que ya no me dirá nada... o no lo se. Pero mientras me espero, veo a Alec y a Xia dirigirse al tren, ya si el inspector me comenta o no, me retiro con ellos.

Nada nada, olvídalo- Comenta el inspector, indicándole a Gared que suba al tren.

La espera se hace larga mientras varios técnicos evalúan si el vagón dañado puede proseguir o hay que quitarlo. Durante la espera una aeronave con el logo de una conocida televisión hace aparición, grabando e informando desde el cielo del accidente. Solo esperáis que la directora no esté viendo la televisión en estos momentos.

Una reportera rubia con un micrófono baja del aparato e intenta entrevistaros pero afortunadamente la policía le impide el paso.

Finalmente los técnicos optan por retirar el vagón dañado, os reubican en otro compartimento y por fin, el tren vuelve a ponerse en marcha.

Esthar 18:41 pm.

Finalmente, con varias horas de retraso, el tren llega a su destino. La gente se agolpa a las puertas esperando a que se abran y cuando lo hacen salen en estampida.

La estación de trenes, como todo en Esthar, no deja indiferente a nadie que visite esta tierra por primera vez. El edificio ya de por sí es impresionante, pero desde que ponéis un pie en tierra os da la sensación de que estáis en otro mundo, uno mucho más avanzado tecnológicamente.

Una azafata holográfica a pie de andén os da la bienvenida a Esthar y se ofrece para indicaros cualquier dirección.

Posiblemente haya allí más gente que en todo el Jardín, aunque todo el mundo parece ir a su aire, hablando por el móvil o similares sin prestar demasiada atención a los demás.

Varios soldados de Esthar patrullan por el lugar, pero entre tanta gente apenas llamáis la atención. Solo una chica con patines, vestida con unos mini pantalones verdes, camisa de tirantes de color amarillo fosforito y algo que solo se puede definir como una mezcla entre gafas y teléfono móvil se os queda mirando unos instantes con cara de “¿Estos paletos de dónde han salido?” antes de proseguir patinando y hablando sola con sus gafas. -Calla Txiqui. Casi atropello a tres pueblerinos con cara de no haber visto unas gafas holográficas en su vida.  

De hecho, a medida que os acercáis al vestíbulo constatáis que entre los estharianos, sobre todo los más jóvenes, la extravagancia debe de ser norma. Un chico que lleva media cabeza rapada y un dragón holográfico, que no dejan de batir sus alas, tatuado en el cuero cabelludo atrapa vuestra atención, hasta el punto de que Ional y vuestro contacto os pillan desprevenidos.

Entre tanta extravagancia casi os alegra ver alguien vestida de forma normal. La chica que acompaña a vuestro compañero no es otra que Julia Leonhart, a quien conocéis por haberla visto ocasionalmente por el Jardín, no en vano es la hija de Raine y nieta de Squall. Muchos dicen que es la viva imagen de su abuela, Rinoa, aunque sin sus poderes mágicos, Julia es una guerrera famosa por empuñar el legendario sable-pistola de su abuelo. 

No, creo que no- Te responde señalando una de las pantallas de televisión dónde están retransmitiendo en directo desde el lugar del tren “accidentado”.  -Creo que las noticias están hablando de un posible atentado. No es de extrañar con el clima prebélico que se vive en este país.

En fin habrá que esperar. -Comenta sentándose en uno de los bancos.

Tras varias horas de espera, finalmente, el tren llega a la estación.  Puedes ver a tus compañeros bajando con la misma cara de sorpresa que pusiste tú al ver la

Esthar al principio puede resultar un poco apabullante. -Comenta Julia luciendo una sonrisa de oreja a oreja, al haberos pillado con la guardia baja, igual que le pasó a Ional  -Pero ya os aconstumbraréis. Bienvenidos a Esthar.

Antes de alguno podáis empezar a hablar de algún tema relacionado con la misión la Seed os hace un gesto de precaución, señalando a los soldados que patrullan por la estación, que enseguida comprendéis. Aquí no.

Venid, ya se nos ha hecho bastante tarde-  Dice guiándoos hacia el exterior de la estación.

La estación se encuentra en un punto elevado y en cuanto salís del edificio la ciudad se muestra en todo su esplendor. Esthar es enorme, una gigantesca urbe que ridiculiza a la pequeña Balamb, con cientos de vehículos por sus avenidas y personas llendo y viniendo, y unos extraños tubos que parecen recorrer toda la ciudad.

Ya fuera de la estación, Julia os guía hacia uno de aquellos tubos. - Es una acera autorodante. - Os explica mientras entra dentro y ocupa uno de los asientos.

No sin cierta aprensión os subís a la plataforma circular e imitando a vuestra anfitriona ocupáis los asientos. Julia marca una dirección y de inmediato la plataforma empieza a moverse a través del tubo traslúcido que permite ver el paisaje urbano. Aunque apenas sentís la aceleración, las calles y los edificios a vuestros pies pasan a velocidad de vértigo. 

Desde la graduación he estado aquí en Esthar- Os comenta ya con la seguridad de estar a solas-  Mi misión era encontrar, infiltrarme y desmantelar una banda que trafica con órganos humanos, pero esta mañana me ha llamado la Directora cancelando mi misión ¡Meses de trabajo a la porra! - Comenta algo decepcionada –En fin.

Agradecería saber a que se debe tanta urgencia. La directora me ordenó averiguar quien podría estar continuando la labor del profesor Odine, construir una máquina del tiempo, y me ha dicho que os ayude en todo lo que necesitéis, pero nadie ha tenido el detalle de contarme de que va todo esto.

Después del incidente, el resto del viaje había estado sentado en el compartimento, pero al final decide acostarse para tener fuerzas y descansar a fin de cuentas mientras dormías no eras realmente consciente del paso del tiempo y así el viaje sería más corto. El tiempo que no durmió lo pasó escuchando música distraídamente con los ojos cerrados igualmente.

Cuando finalmente pudimos bajar del tren notaba sus músculos agarrotados por tantas horas en ese lugar. Aquel lugar era realmente y grande y distópico, mirando embelesado el tatuaje ese del dragón en movimiento y pensando en lo mucho que le molaría a Sally hacerse uno de esos, Julia e Ional nos pillan por sorpresa.

Al ver el gesto de Julia de no hablar aquí suspira profundamente y dándole un codazo a Ional dice en voz baja:

Supongo que debemos agradecerte el salvamento, pero vaya salvamento, mamonazo. Un inspector con pinta de sabueso estuvo interrogándonos. – Comento siguiendo a la famosa guerrera del sable-pistola, hacia uno de aquellos tubos, no sin cierta aprensión. Nunca me han gustado las montañas rusas, y se llame cómo se llame el chisme este, las similitudes son evidentes.

Durante el trayecto, más pálido de lo normal, y aferrado al asiento como si fuera a salir volando en cualquier momento, permanezco callado a las preguntas de la Seed. No se porque pero no me acabo de fiar de nadie, menos después de los recientes acontecimientos… ya ni de nosotros mismos podemos fiarnos. Joder esque es la hija de Rinoa, la bruja, ¿No había otro SeeD disponible o qué?

En lo que a mi respecta preferiría contarle a Julia lo justo, pero no puedo decidir por los demás. Además esta maldita máquina de tortura al final me hará vomitar, así que cierro los ojos y apoyo la cabeza contra el respaldo tratando de no fijarme en los edificios que pasan a toda pastilla bajo nuestros pies.

Al ver llegar al resto, Ional sonrió, al fin llegaban. Cuando Alec habló el pistolero suspiró - es lo que tiene buscar ser el protagonista - dijo encogiéndose de hombros.

Cuando llegaron a aquel transporte circular, Ional solo se cruzó de brazos, aquel movimiento era bastante simple comparado con volar como Garuda, pero no era incómodo. A la pregunta de Julia, poco dijo, era cosa de quien poseía el liderazgo decidir cuanto ofrecía.

- personalmente me preguntaba si sabes de algún trabajo de aprendiz técnico, me iría bien aprender un poco mientras hacemos lo que sea...

Justificar su petición como estudio no era tan raro, le gustaba la mecánica y la tecnología.

Me frustra un poco que el inspector no me quiera decir nada, pero tengo un indicio en vez de nada... algo es algo.

En el transcurso del viaje me la pasé "descansando", si es que descanso era mirar mi dije y pensar qué significaba; además de no poder conciliar el sueño por si otra cosa pasaba... aunque no fue así.

Cuando llego me asombra toda la estructura y tecnología de Esthar, sin dejar de pensar que cualquier equipo de guerra aquí sería superior a muchas partes y que la misión que nos encomendaron sería lógico que sí se diese aquí en vez de otro reinado o gobierno. La extravagancia era algo normal y, lejos de intimidarme, me emocionaba.

¡Y ese cabello! ¡Y ese tatuaje! ¡Esa cosa se mueve! ... ¡Puedo conseguir equipo para mejorar a Brisa! ... Concéntrate, Gared.

Sí, sé que no estamos para turistear. Lamentablemente.

Me topo con Julia, la hija de Raine y se nota que es de mejor personalidad que la instructora. Le sigo y cuando nos metemos al tubo ese y veo las imágenes del paisaje moviéndose a gran velocidad me controlo un poco el mareo, es como estar sobre Brisa pero en algo más grande sin sentir el viento en mi cara... Aunque veo que a Alec parece irle mal.

Anda, Alec, solo respira hondo y no mires. Le aconsejo sonriendo de lado y luego veo a Ional señalándolo. ¿Protagonista? Pero Ional, yo habría rugido y dirigido algunas palabras de consuelo al menos, creyeron que fuimos nosotros y que tu... Suelto una risita y me encojo de hombros. Bueno, ya está hecho, solo espero que eso no arruine nuestra discreción por parte de las autoridades. 

Escucho que Julia quisiera una explicación, pero eso me tensa un poco. No me atrevo a contarle todo, y no se si me vaya bien haciéndolo. Pero... ni siquiera sé cómo empezar y que tuviese sentido para ella. Además, ¿podríamos confiar? Luego veo a Xia, esperando que ella decidiera. De todos, era quien podría dar una buena resolución. 

Nada más entrar en la habitación la chica se dirige hacia la mesa dónde tiene varios papeles.

-En cuanto me llamó la directora me puse a investigar quien tendría la capacidad para construir una máquina del tiempo, pero con tan poco tiempo esto es lo único que he conseguido reunir.

El chica os pasa un sobre que contiene varias hojas acerca de una compañía llamada la Sempai Biocorp. En su mayor parte se trata de información técnica, soporíferamente densa y en buena parte de dominio público; La empresa nació durante la época del presidente Laguna siendo unos laboratorios químicos y farmacéuticos, con Hidenberg la empresa ha ido creciendo, sorteando diversos escándalos y denuncias que siempre han acabado en nada, absorbiendo otras empresas, expandiéndose y ramificándose en distintas áreas. Hoy día la Sempai Biocorp fabrica desde medias de nylon, medicinas o herbicidas a misiles intercontinentales y armamento pesado. El gobierno de Esthar es su principal cliente proporcionándole contratos millonarios a cambio de abastecer al ejército con armas, naves y vehículos de guerra. El gobierno también financia la mayoría de sus proyectos de investigación secretos, cuya información es clasificada.

En el sobre hay también varios planos y plantillas con la disposión estructural, arquitectónica y la instalación eléctrica de la sede central de la Sempai. Así por encima asimiláis que se trata de un edificio de oficinas de 42 plantas con alarma, circuito cerrado de tv que sugiere la presencia de cámaras de vigilancia e intranet. Los cristales que recubren el edificio son a su vez placas solares que garantizan su autosuficiencia energética. Pasillos, puertas y ventanas se bloquean con compuertas blindadas de medio metro de grosor si salta alguna alarma. 

Si, la sede central de la Sempai parece una fortaleza inexpugnable. - Comenta poniendo voz a lo que estáis pensado mientras miráis los planos -Lo siento, pero es todo lo que he podido averiguar con tan poco tiempo. No se me ocurre nadie más que posea los medios, el dinero y los conocimientos para estar construyendo esa máquina del tiempo.

Antes de mover ficha, si queréis podríamos tratar de reunir más información. Podríamos indagar en algunos garitos a los que van empleados de la Sempai cuando salen del trabajo, quizás podamos averiguar algo más. También sería buena idea rastrear la red- Dice señalando un ordenador portatil que hay sobre la mesa- A mi se me dan fatal los ordenadores y todos esos chismes, pero quizás de la red se pueda sacar algo en claro.

Por otra parte,no sé cuanto os urge vuestra misión, si queréis podríamos intentar infiltrarnos en la Sempai con la información de que disponemos, aunque en mi opinión, sería precipitarse.

Xia deseaba con todas sus fuerzas que nadie en Balamb estuviera viendo las noticias en ese momento porque les llevaría una fuerte reprimenda. Si bien habían logrado engañar a quienes les habían visto, era peligroso que muchas personas los vieran, y más aquellos que querían matarlos. Ellos sabían dónde estaban, pero cualquier precaución era necesaria.

Al llegar, una joven muy parecida a la instructora apareció, Allí entendió que se trataba de la famosa Julia Leonhart. Con el nombre de su bisabuela y el arma de su abuelo. Y pensar que él había sido el primer SeeD en graduarse con aquella arma, tal vez era de familia.

Aunque había leído mucho sobre la magnanimidad de Esthar, era diferente verlo en persona. No pudo evitar el paralizarse por un momento para contemplar la ciudad más avanzada y, a pesar de su desconfianza, se sentó en el montículo para navegar por allí.

La explicación de Julia comenzó y Xia prestó mucha atención, esperando recabar toda la información necesaria para su misión. Venía el momento de informarles a su contacto sobre su misión y el corazón de Xia se redujo en miles de pedacitos. Ella no sabía bien qué harían, pero seguiría con su plan a toda costa. Se sorprendió que ninguno de sus compañeros dijera nada y sintió la mirada de Gared, al igual que algo de Ional. ¿Estaban esperando que hablara ella? ¿Por qué? Si todos tenían la misma información. Xia dudó y cuando llegaron al edificio, se sintió algo más aliviada de ver una construcción sencilla. Miró a Alec algo inquieta al ver lo mal que se le había dado el viaje.

- Podrás descansar cuando entremos – le dijo al chico al acercarse a él y mirar si necesitaba ayuda para ponerse de pie.

Julia les enseñó el lugar y Xia se alarmó un poco. Solo tenían dos camas y, aunque ella estaba habituada a compartir habitación, compartir camas era algo completamente diferente. ¿Las compartirían? Esperemos que no.

Ya adentro, no quizo dejar pasar la oportunidad de mirar a Ional a los ojos y recriminarle un poco sus acciones – Ional, ser el protagonista puede implicar que nos maten más fácilmente. Debes ser menos ruidoso la próxima vez – no dijo más.

Ante la explicación de toda la compañía que era la mejor candidata, la maga reflexionó un poco y, ya que sus compañeros no habían dicho nada, decidió hablar.

- Entrar apresuradamente puede ser perjudicial. Hemos visto que se ha desarrollado una máquina más avanzada que la máquina de Eleone. En el futuro no solo podrán traer su conciencia a nuestra época, sino que viajarán completos, incluso su cuerpo. Nuestra misión es encontrar quién la está desarrollando y destruirlo, pero es secreta – no perdió oportunidad de mirar a Ional y espetarle el hecho -, por lo que infiltrarnos es nuestra única opción. ¿Qué tal te va con la tecnología, Ional? – le miró nuevamente.

- Necesitamos rastrear la red para poderla aislar. Una vez aislada, podríamos manejar cámaras de seguridad incluso de manera remota, saber los turnos de guardia, la disposición y empezar a conocer al personal. Si conseguimos uniformes de allí e identificaciones, entraremos más fácilmente. Todo esto requiere tiempo, pero debemos trabajar rápido porque no podemos tardar. A mí no se me da mal la tecnología, pero para hacer esto en tiempo récord, necesitaré apoyo – miró a sus compañeros de equipo.

- ¿Alguna sugerencia o alternativa? -.

Siempre querría ser el protagonista, no le podía hacer nada, era su naturaleza, y a Garuda parecía gustarle también el destacar. Pero no recriminó nada, hizo lo que creyó mejor, y su GF acompañante pensó lo mismo, dado que le dio opción a no aparecer si no le apetecía, incluso con el dolor de cuello y espalda por la presión la fuerza de destacar a lo grande ganó destrozando el techo del vagón; y con él quienes les querían tender una trampa.

- no soy un genio en cuanto a tecnología, pero no se me da mal, con un nivel similar de mecánica, creo que podría infiltrarme, de hecho por ello preguntaba si había alguna vacante en algún lugar, preferiblemente laboratorios o grandes empresas tecnológicas. Como ayudante creo que encajaría...

Infiltrarse sin que hubieran puestos libres sería más complicado, por ello pensó que mirar la bolsa de trabajo primero sería más fiable, confiarían más en el nuevo que en alguien que llega sin más.