Partida Rol por web

Gañanes de la Tierra Media

1. ¡LAS FIESTAS!

Cargando editor
18/02/2017, 23:34
Lorelai Cantalapiedra, "La Pellegrina"

Al cantante de los Orkos le estaba dando caña hasta la mano blanca del Suruman ese, así que la Lore se suelta de su cuello y seagarra al del guitarrista.

Que este también mola, aunque no tenga un buen micrófono, hace birguerías con los dedos. Aunque el bajista lo tiene más largo. El mástil.

- ¡Ay, ay, ay! ¡Protégeme! Que al nano ese de los cojones cuando del emborracha no sabe ande suelta la mano y lo mismo me avía a mí alguna! Que lo sé porque no es la primira vez, que en el Olifante alguna vez cuando algún cachorro quería ligar conmigo de la ceguera del vino me empujaba a mí y se ponía a piropar al otro.

Cargando editor
19/02/2017, 19:56
Salustiana Eleuteria, La Japuta

Taba la Japuta toa concentrá en el delicado y tierno pimpollo que había agarrao con la mano cuando se lió la de los Cinco Ejércitos, pero con más realismo. Chasqueando entre dientes, le susurra al Rick un intrigante -No t'alejes que aluego te enjuago tó enterito.- Con la que habían liao los otros, así no había quien follara, cagüenla.

Así que, bajándose del carro, se acercó ande estaba la marabunta. Arremangándose hasta los codos (o rodillas del tronco superior, según se viera), clavó la garrota en el suelo y movió el cuello d'un sitio pa otro, pudiéndose escuchar crujíos incluso de ande no debería haber hueso. Y en un alarde de compañerismo para sus colegas, hizo lo que tenía qu'hacerse.

-¡¡APUESTO UNA A FAVOR DEL ENANO!!- Gritó a pleno pulmón, sacándose el tiques del refajo y levantándolo en alto como reclamo.

Notas de juego

Lo siento chicos, hay que aprovechar cualquier oportunidad. ;-)

Cargando editor
21/02/2017, 23:00
Pregonero

¡Qué pifostio, por to los santos! El Sinpán se puso a repartir y a recebir tortas, que ahí se lió to muy liao, un pimpampún de manos y sopapos de ida y vuelta que era pa velo. Que ahí no si distinguía na entre los Orkos Muertos y el enano, que taba to encorajinao contra el equipo visitante, acertando a unos, fallando a otros, recebiendo y repartiendo, y metiendo alguna tollina tonta al aire que daba muncha risión a tol mundo, que en Bree otra cosa no pero nos gusta más una pelotera que a un trol un saquejobi, que ahí no había ninguno que se dijera de vamos a para esto que se van a hacer daño. Qué va, tol mundo mirando como jubilaos las obras de la rotonda del Camino Verde.

- Tiradas (1)
Cargando editor
22/02/2017, 00:37
Ar-Pakunor, tamién conocido como Paco el Sieso

Eso no tinía pinta de acabar nada bien pero, pero de pronto sescucharon unos pitíos. ¡Los monteros del norte! A la plaza llegaron unos guardias a imponer el orden, tocando los silbatos y con las porras en la mano. Y con ellos, a caballo, Ar-Pakunor, disquen que premo segundo del rey Aragorn, un dunadan mixtolobo pero disquen que más lobo que mixto, que al parecer tinía menos garrafón en las venas que otros dunadane doy en día. Además que le se notaba en la jeta, que al capitán de los monteros, que por mucho que tiviera nombre numenoreano en Bree era Paco el Sieso, le gustaban poco las bromicas. ¡Anda que no! Que era más cabrón y más tó que tó. Pocas bromas con Paco el Sieso, capitán de los Monteros de Tyn Gorthad, que disquen que dasquí a nada lo iban a ascender y que acabaría como teniente coronel en Fornost. De ahí a menestro de interior dos pasos. Pos con eso en la nariz taba el Sieso, que no perdía purtunidad de coger puntos, quel hijoputa no pillaba ni los días libres ni las fiestas de guardar.

Cuando llegaron los monteros, ahí sí que los brienses se metieron en el fregao y se pusieron mu responsables a separar a los peleones, y entre unos y otros sagarraron pa parar la pelea mientras Paco el Sieso miraba to con cara de Paco el Sieso desde su caballo.

¡Amarth faeg!se lamentó–. ¡Pueblo de Bree! En verdad os digo que aciagos días aquellos en los que la paz que arropa la celebración de Nuestra Señora de Lothlorien, auspiciada por el rey Elessar, aran vuin, se mancilla con la penosa pendencia. ¡Deteneos!, os digo, pues larga es la justicia y cortos los andares del que trae pesares.

Paco el Sieso hablaba a la antigua, como de ciudad vieja, que se notara que tinía buena familia y rancio abolengo, que parecía que sabía tragao to el Libro Rojo de la Frontera del Oeste del señor Bilbo Bolsón, que hablan tos asín que da sueñico. Tol mundo se quedó quieto sin entender mu bien cabía dicho, pero como era un sieso, pos taba como emplícito en el contecsto.

Cargando editor
22/02/2017, 00:41
Pregonero

A la poca las cosas se calmaron y los Orkos Muertos fueron apartaos, la fila recolocá bajo la atenta mirada de los monteros y, al poco, empezó el reparto de los chocolates y la bollería, que hubo pa tos. Los de la taberna de la Mûmaka acabaron sentaos en una de las mesas grandes que sabían puesto pal desayuno, vigilaos de cerca por los guardias. Unas mesas más pallá taban los Orkos Muertos, con algún ojo morao o algo asín, que no se sabe porque con esas caras igual traían los moratones puestos de casa que era una pena de velos que qué pintas de delincuentes juveniles madre mía. Gorgoroth y los suyos lanzaban mirás asesinas asín por lo bajini, pero con tos los guardias por allí atentos a to no taban pa muchas vainas. Además, que lo importante ya sabía conseguío: chocolate y cascoporro de bollos pa mojar.

Las mesas se llenaron y de pronto se escucharon unos silbíos y piropos joviales y jacarandosos: ahí que llegaron las mocicas del concurso pa la reina de las fiestas, que se iban a entrar en el ayuntamiento que taba ahí en la mesma plaza pa elegir a la reina de toas. ¡Qué mozas! Las mejores de to Tyrn Gorthad, más rebonicas que to, con sus trajes típicos limpios y almidonaos y unas sonrisas ca una más guapa. Si es las mujere de Bree son las más mejores y más guapas y más to de to de toa Arda, copón. ¡Guapas!

Cargando editor
22/02/2017, 00:51
La Puri, la Retrasá

Las mozas pasaron sonriendo y saludando a tol mundo, entre las mesas.

Uy, Lore, qué, comiendo, ¿NO? –dijo una con tonico de «mira la gorda esta como se pone hasta el culo de grasaca». Ahí estaba. La Puri, la Puri la Retrasá, la niña del Bwalden, el de Girithlin. El cojo, que traía gorrinos de Minas Malloth y hace unos años se le escapó uno untao de aceite en las fiestas de la Virgen de Annuminas y acabó pegándole un bocao al alcalde. No sé si tacuerdas. Pues esa, la Puri, la Purithel, que la dicen «la Retrasá» porque en sindarín significa «Flor de estío que florece en cumbres de invierno».

La Puri es que mu bonica y mu to, pero se lo tinía un poco subío el guapo, que taba tol mundo tol día dándole halagos y claro, que eso se nota, que la humildá se pierde y eso es lo que pasa, que te miras muncho al espejo. Asín que pasó la Puri con las otras, jijiji jajaja por lo bajini riéndose de la Lore y su falta de respeto por las dietas. Que luego ya se sabe lo que pasa, que acabas como su madre la Mûmaka, con más culo que Ellalaraña.

Las zagalas empezaron a entrar en el ayuntamiento acompañás de un par de guardias, porque enseguía síba a hacer la poclamación de la reina, aunque tol mundo dicía que se lo iban a dar a la Purithel que taba tol pescao vendío.

Cargando editor
22/02/2017, 00:53
Rick Martel

En esas que aparece el Rick Martel al olor de la feminidá, y claro, una cosa pa la otra que son como un enano y una barba, que no se puén despegar. Lo guapo llama a lo guapo.

Ey, chicas. Buena suerte a todas, sois preciosas. ¡Uf! Ni en Rivendel se ven así ya, ¿eh? ¡Eh! Hola guapa. Hooooola, ¿y tú qué tal? Ven que te firmo. Claro, bonita, lo que tú quieras. ¿Sí? Pues esa canción es mi preferida, que lo sepas. Ven, dame un beso. Holaaaa qué tal. ¿Tú eres? –asín se iba pasando duna en nuna saludando y dejándose de querer, que ellas tamién taban acalorás al tener al gran Martel tan cerca repartiendo simpatía. ¡Pero qué buena gente que es!– Uy, uy, uy... ¿y tú? –se pegó a la Puri–. Déjame adivinar: la hermana guapa de la reina Arwen, ¿no? Ja, ja, ja, ja –se riió alto y sonoramente que parecía un ruiseñor, y la gente se deslumbró con el brillo de sus dientes. Un primor de hombre.

To Bree lanzó un OOOOOOHHHH de encanto al ver a esa prometedora parejica. Si es que era pa valos de guapo y de to.

 

Cargando editor
23/02/2017, 12:16
Salustiana Eleuteria, La Japuta

La Japuta estaba contenta, se notaba en cómo comía los churros y el chocolate. Hay gente que se limita a comerlos o a degustarlos, pero la Japuta no era "d'esas personajas fisnas", no. La Japuta metía la mano en la taza hasta'l codo pa luego embutírsela entera en la boca, sin cerrarla pa que to'l mundo lo viera, y se pasaba el churro de lao a lao, machacándolo entre encías podrías, rematándolo con sus tres únicos dientes sanos. El chocolate caía a raudales po la barbilla, pero pa eso estaban los pelajos que había ahí, pa retenerlo, volviéndoselo a meter en la boca entre grumos y escupitajos. Las madres que pasaban por allí tapaban los ojos a sus hijos ante tanta crueldad.

Y en esas estaba la Japuta, rememorando las ostias dás por el enano y el Chato. Ay! quién tuviera sus ochenta añicos... estaban hechos unos chavalotes. Sí, era un buen comienzo de día; gritos, peleas y chocolate con churros. ¡Que gran día! Lástima del Sieso, que era un aguafiestas. La Japuta aún recordaba cuando trabajaba de montera y tenían un tecnicismo muy preciso pa definirlo; capullo. En fin, que había de tó en la viña de Eru...

Y aluego se presentaron las mozas. ¡Qué mocicas! Daba gusto verlas, ahí, paseando el cuerpo y mostrando enaguas. Este año, como cada año, el alcalde le había pedido a la Japuta que no se presentara, y ella lo entendía, había que dar oportunidades a las otras mozas, pobrecicas. La Japuta las miraba con orgullo, hasta que pasó la Retrasá, y le soltó con su boquita esas lindeces a la Lorelai. La Japuta no se metía en lo ajeno, pero si lo ajeno se metía con los suyos... Mascando lentamente el churro, con un ojo medio cerrao y el otro rezumando odio, le soltó un simpático y sincero.- Y a tí habría que coserte'l coño.-

En fin, que la cosa no fue a más, sobretodo después de que el joven de culo prieto arrimara cebolleta a la Retrasá. Pues él se lo perdía, porque la Japuta sabía que gallina vieja hacía buen caldo.

Cargando editor
24/02/2017, 21:37
Lorelai Cantalapiedra, "La Pellegrina"

- Tú a callar, - le dice la Lore a la Retrasá cuando pasa cerca, - que tos sabemos cómo quemas tú las calorías esas, en horizontal, y comiendo na más que nabos crudos.

No te jode la so asquerosa que me va a decir a mí que tengo cuerpo pera. Pues mejor cun espárrago esmirriao.

- Que si hablamos de familia tos sabemos que tu abuela se quiso trincar a mi abuelo pero era tan fea que un elfo no se la arrimaba ni goliendo a miel.

Y es que a la Lore se la sudaba to ahora mismo porque tenía su chocolate y sus buenos bollacos pa mojar y había conseguío que los Orkos la firmaran los melones a pesar de haber recibío palos pa una valla.

- Deberías comer más chocolate y menos po...

Y antes de que termine de hablar, aparece el guaperas afeminado.

Amos, no me jodas, ese es que no sabe lo que pueden hacer unas buenas manos acostumbradas a los trabajos duros. Que la Puri le va a dar largas por miedo a romperse una uña la muy fisna.

Cargando editor
27/02/2017, 23:23
Pregonero

Pos eso, que las mozas entraron en el ayuntamiento y la Puri y el Rick Martel tamién, que yíba siendo hora de empezar de verdá los festejos, y la fiesta de Nuestra Señora de Lothlorien empezaba jiempre con la eleción de la reina de las fiestas. La reina sería conocía como la más bonica y la más limpia y la que más mejor llevara el nombre de la comarca de Bree por el mundo delante durante un año.

Se podían presentar mozas de la Gente Grande y de la Gente Pequeña de Bree, Entibo, Archet y Combe, y podía ganar cualquiera enmientras lo mereciera, moza jobi o moza humana. Ahí quentraban toas las buenas mozas de Bree, que desas nos sobran porque la región de Bree se conosque ques la más decente y la más mejor de toa la Tierra Media. Que eso lo dicen tos lo que viene de vesita que les faltan palabra pa decir lo bonico que es to, y lo güenas y honrás y decentes que son las mujeres daquí que es pa velas cómo son.

En eso que al rato... ¿sabe usté quién salió al palco del ayuntamiento? ¡Yo! ¡El pregonero de Bree! Es que pa eso me tienen, pa dar los avisos, las noticias y las trompetás de las cosas importantes. Que si ha nacío un zagalico nuevo, que si sa muerto un viejales querío, que si una borregona sa caío a una poza, que si se avisa de que se abre el plazo pa pidir suvenciones del Reino Setentrional de Arnor pa olivo o pa vide o pa gramínea, que si mañana viene el pescatero de Tharbad con los bacalaos... en fin, to lo que tié cacer un pregonero responsable. Por allí salí yo, con mi pito de pregonero, el pito de Gondor, que me lo compré una vez que fui a Minas Tirith de visita con la parienta. ¡Sitio más grande, copón! ¡Qué de cosas y cuánta gente! Ahora, como en Bree en ningún sitio, que asquí la gente es mejor y se come muncho mejor! ¡Claro!

Pos eso, que salín y le pegué un soplo al pito de Gondor para de llamar a tol mundo.

¡Turúuuuu turú turúuuuuuuu! ¡Sace saber! ¡Que ya están aquí las mozas de Bree! ¡Que son todas mu rebonicas como tos puén ver! ¡Que ganará la que más merece! ¡Que esto es to amistoso! ¡Que no habrá inquina ni resquemor, como es tradición! ¡Y que con la eleción de la reina de las fiestas empieza el gran y mu vistoso de ver festejo de Nuestra Señora de Lothlorien, patrona de Bree y comarca, que Eru la tenga en su Gloria en Valinor!

El descurso me quedó mu bien que lostuve praticando dos semanas y eso se notó, ya lo creo. La gente aplaudió, que me tienen en muncha estima porque soy muy de Bree y mu cercano a tos. Que me conocían tos en Bree que me oían darle al pito y dicían ¡que viene el pregonero! ¡Claro!

– ¡Y ya con esto dejo cable el mu venerable alcalde de Bree, don Jacinto Matojo!

¿Cómo? ¿Que no sabes quién es? ¡Don Jacinto! ¡Jacinto Matojo el Mierdas! ¡El jobi! ¡El de la Catagachas! ¡La del Pitu el Meandros! ¡Ese! ¡Don Jacinto! ¡El alcalde de Bree, copón!

Cargando editor
28/02/2017, 10:33
Gromenauer, el "Sinpán" el del Klander, de los enanos Arrecíos de las montañas

Gromenauer estaba mu enfadao. Cuando ya tenía a tos los orcos feos acoquinaos en una esquina, habían venío tos los guardia a separale. Y claro, a ver qué era eso de dejar a los orcos pastar por allí alegremente.

Así, el Sinpán estaba en un rincón de la plaza, encabronao bebiendo chocolate. Que por cierto, estaba mu malo. Pero no por na, sino porque le faltaba vino y le sobrababa chocolate. En una proporción de 0/100.

Por eso, con su cabreo, el Sinpán no dijo na. No le interesaban mucho las humanas, por mu guarras que fuesen. A él le interesaban las enanas. Que a un enano le gusten las humanas o las elfas es de desviaos. Pero tan desviáos como el Dodo y el Juan. O más.

Por to eso, Gromenauer esperaba sentao, sin hacer na, vigilando a los orcos muertos. Como se les ocurriese decir algo, al remate los iba a aviar del to.

Cargando editor
28/02/2017, 22:38
Jacinto Matojo, el Mierdas

Don Jacinto, que era un jobi, era tamién el alcalde de Bree. Los jobis no habían sido muncho de ser alcaldes de Bree, pero desde que están en la picota ya se meten en política que es pa velos. Don Jacinto Matojo era de familia de jobis ricos, emparentaos con los Tuk de La Comarca, y le dicían el Mierdas porque el suyo era un negocio de purines de gorrino, que tinía unas balsas de estiércol al sur de Bree, que eso fermentaba y hacía abono. Que se dicía que don Jacinto sacaba oro de la mierda, que los puercos obraban purines desos y el alcalde sacaba buen provecho dahí.

En eso que tinía buenas maneras con Bwalden, el de Girithlin, el padre de la Puri. El Bwalden, el Cojo, tinía una buena mano de gorrinos, un emporio de guarros en Minas Malloth y hacía nigocios con don Jacinto el Mierdas. Era de tradición que la familia del Bwalden ponía los chanchos de las fiestas de Nuestra Señora, y que hace unos años uno le pegó un bocao en la mano al antirior alcalde, don Pepe, que desde entonces se le conosce como el Otrofrodo, porque el gorrino se le llevó un dedo de la mordida. ¡Menúo era!

Don Jacinto se me puso al lao, subío a un taburete porque el ayuntamiento taba edificao a escala de Gente Grande y don Jacinto era un jobi. Detrás tinía a los del consejo de Bree, y a su lao a toas las mozas y a Rick Martel, que por ser un cantante importante era invitao de honor o algo. Que nandie labía dicho que subiera, pero él subió egualmente. ¿Y quién liba a dicir nada? ¡Que era Rick Martel, copón!

La gente se apelotonó más todavía, subiéndose a los carros y los escenarios de la plaza y to. Tábamos tos emocionaos.

Don Jacinto habló con su voz de eunuco. Llevaba un casquete que solía llevar en las ocasiones especiales.

¡Pueblo de Bree, Entibo, Archet y Combe! ¡Vecinos de Tyrn Gorthad, visitantes de Arnor y de toa la Tierra Media! ¡Munchas gracias por vinir un año más a celebrar los más grandes días de esta comarca! ¡Las fiestas de Nuestra Señora de Lothlorien!

La gente aplaudió.

¡Lo pasaremos mu bien! ¡Y que yo sé que tamos tos con ganas de empezar de verdad con esta semana tan grande asín que no voy a entreteneros muncho! ¡Que yo sé que tos queréis que se pegue el chupinazo ya! ¡Asín que paso a la eleción de la reina de las fiestas! Aquí tenemos a las zagalas más bonicas de to Bree y las más decentes –las miró golosón–. ¡Aaains! ¡Guapas! ¡Guapas toas! –chasqueó la lengua–. ¡Que ricas que están! En fin, ninguna desmerece y ojalá que pudiera eligirse a toas, pero reina no hay más que una que no vivimos como los salvajes de Khand, que tienen harenes de mozas y eso. Pos que quede claro que el consejo de Bree sa reunío y hemos estudiao a toas las candidatas. ¡Y aquí está el nombre de la ganaora! –sacó un sobre lacrao, lo abrió y sacó un papel–. ¡La reina de las fiestas de Nuestra Señora de Lothlorien del décimo año de la Cuarta Edad del Sol es... Purithiel, hija de Bwalden! ¡La Puri! ¡Norabuena, Puri!

Cargando editor
28/02/2017, 23:02
La Puri, la Retrasá

To la plaza se puso a aplaudir y silbar. Era una decesión sensata y honrá, seguro. La Puri pegó un saltico de emoción, toa contenta dando palmitas. Asomó la corona y le se cambió la cara, y se puso a dar codazos pa acercase.

¡Quita, cooooño ya! ¡Quita, copón! ¡Trae pacá, coooooño!

Se la arrancó de las manos a don Jacinto y se la puso sola.

¡Ooooogh tento tol poderío nel coño metío perras! –dijo, dando una palmá y señalando a las demás mozas–. ¡Me vaia comel tol coño! ¡De tu endivia nase mi fama!

Se giró pal público y saludó con la manica como una reina delicá y vrirginal.

Un grandioso cobete de Gandalf subió pal cielo y ¡tracatún patún! ¡Dieron comienzo las fiestas de la Nuestra Señora de Lothlorien!

Y empezaron a rular las botas de vino, los toneles y los porrones. ¡A ponerse hasta el culo!

Cargando editor
01/03/2017, 22:46
Salustiana Eleuteria, La Japuta

A base de bastonazos y escupitajos la Japuta se había hecho un hueco entre el gentío, no quería perderse detalle de la coronación. Y allí estaba la Puri, sacando su amabilidá cual pato atragantao. La Japuta se miró las mozas y no pudo más que chasquear con la boca. Qué tiempos aquellos en que tiraban la corona en medio la plaza y la ganaba la que mordía y daba más ostias. Eso sí que era una Reina de las fiestas, no esa vacaburra sin tetas. En fin, eran tiempos modernos y habría que adaptarse. -¡Ala! Ya tié la coronica. Aquí ya está tó el pescao vendío. Ámonos al gorrino en sebo.-

Y dicho esto abrió paso a sus compañeros con su "savuá fer"(1).- ¡Aire! ¡Aire! ¡Uix!- garrotá - ¡Parta coño, que está ajobitao! - pisotón - ¡Hombre Julián! ¿Como está la parienta? ¿Muerta? Ná, hombre, ya se le pasará. - golpecitos de condolencia en la espalda - ¡A ver! Un poco respeto pa los mayores, quita d'ahí, melenudo - escupitajo.

Notas de juego

(1)La Japuta siempre dominó los idiomas, aunque pocos eran los que aguantaban las arcadas cuando le daba por insultar en lengua negra.

Pues eso. Pal gorrino que no se nos escape.

Cargando editor
05/03/2017, 20:15
Pregonero

A la poca empezaron a llegar a la plaza la música de las fanfarrias, las bandas y los pasacalles, que taba la gente ya que no se aguantaba con ganas de jolgorio. En un pispás se levantaron las mesas y se volcaron los carros y los mozos de obras públicas del ayuntamiento pusieron toneles y toriles pa hacer en la plaza un redil bien bonico y resultón, que iba a empezar el plato fuerte de la mañana que era mu tradecional de jiempre que eso era una deversión mu sana y mu nuestra que era pa vela de lo devertía que era la deversión y la risión que daba a tos que la vieran la deversión esa.

¿Cómo? ¡Qué me dice! ¿Qué no sabe de lo q'ablo? ¡De la cumpitición del gorrino en sebo! ¡Pues claro! Mu de rírse con las caías y la cuchufletas y las tollinas y los hostiones, que más de uno se ha salío del redil del gorrino con un diente menos y a muncha honra que eso es mu de rírse y mu sano. ¿Cómo que bruto? ¡De bruto na! Lo que pasa es que usted será de ciudá o algo, que eso jiempre sa hecho aquí en Bree y a nandie la pasó nunca nada por partirse el jocico contra los toriles.

Yo le cuento: se embadurna bien a un guacho en sebo que paresca un jabón que eso no hay cojone de agarralo. Se lo suelta en el redil de la plaza, entran los cumpiticionarios tamién llamaos cuncursantes, en pantalón y a pecho palomo los señores, y si hay alguna señora pues tamién, que se tapan muy bien tapás las virtudes con su camisón, su picardías o lo que sea, que asquí en Bree semos mu modernos y las munjeres hacen las cosas egual que to la gente normal, que asquí muncho tién caprender en la capital de respecto y concordia, que tratamos mu bien a nuestras munjeres, que pa eso son nuestras. Pregunte usted a las niñas del Lembas, la casica de luces que hay a las afueras de Bree en el Camino Verde km. 2. Que no tién queja. ¡Claaaro!

¿Por dónde iba? ¡Ah! ¡Sí! Que los cuncursantes entran en el redil con el gorrino, y tamién bien untaos en sebo o aceite, que asquí tenemos un aceite de oliva virgen extra de muncha calidá, el mejor de to el Reino Setrentional, prensao en frío, que estamos a ver si nos dan latiqueta de pruduto cológico. Que digo yo que eso es to lo mismo que tolaceite viene del mismo lao, pero que en la ciudá ta mu bien visto y la botellica decológico nos la pagan a por cinco ca una. Que semos de pueblo pero pa tonticos los de Fornost. Que otra cosa no, pero pa sabernos toas las suvenciones y toas las pagas tamos bien afilaos.

¿Por dónde iba? ¡Ah! ¡Sí! Que los cuncursantes entran en el redil con el gorrino, bien untaos pa resbalase to. Entonces se lincita al gorrino pa correr y escapase, y los participantes pues tien que cogelo y agarralo bien agarrao, que no sescape. Y que gana el que más mejor lo agarre. ¡Y que vale to, que es donde está la calidá! To vale. Que al gorrino se le permite morder y pisotear y to lo caiga falta. ¡Animalico! Si na más quiere escapase, normal. Pa los que lo quieren de pillar tamién vale tó, se puén empujar, se puén dar una tollina simpática, trompezarse entrellos, caerse de boca quiriendo y sin querer, de tó. Lo que no se permite es pegarle una patá en los güevos al chancho, ni mordéselos, ni agarralos con inquina y malquerer, queso duele muncho y el animalico tamién tié derecho a devertise.

Pos eso, ese es el conceto. Y ahí estaba ya la gente subiéndose a las tarimas y las tablas del redil y en los toriles, que na más quedaba que llegaran los cochinos y que se presentaran los vuluntarios pa la cumpetición, que ahí se pudía presentar quien quisiera. ¡Claaaro!

Cargando editor
06/03/2017, 15:25
Éuhlogio Focín, el ovejero.

Éuhlogio “el ovejero”, pastor de vocación y tradición familiar milenaria (¿no tacuerdas del Euhstaquio, hijo de Purin, al que apodaban “follaovejas” por sus aficiones amatorias? Sí, ése mismo. Pues el Éuhlogio, hijo suyo es. El único que tuvo. Sí, claro que lo tuvo con una humana, ¿cómo va  a ser con una oveja, animal? Luthiana, creo que se llamaba su madre), sacercó a la valla que delimitaba el redil de combate, y se hizo un hueco entre el gentío, dispuesto a dar el salto que lo metería en medio de tol fregao.

- Tú quédate aquí quieto,  Gollum, -le dijo al pequeño perro lanudo que siempre le acompañaba- y me cuidas de la Blanquilla. -Blanquilla era la oveja que llevaba hoy a cuestas; vaya usté a saber por qué, siempre cargaba con una u con otra. Unos dicen que tié muy buen corazón, y que carga con los animales que están más pachuchos; otros que si las lleva de bufanda, pa que no se lenfríe la colleja, que eso es mu malo y por ahí es por donde se cogen los constipaus. Y otros, lo más mal pensaus, disquen que el Éuhlogio ha heredau las aficiones amatorias de su padre, y que la lleva siempre a cuestas por si le da un apretón.- Y ni se tocurra meterte ahí dentro como el año pasau, a espantar al gorrino, que te daré en tos los morros.

Y es que el Éuhlogio ya había participau otros años en el concurso, pero nunca se había conseguido llevar el ansiado trofeo. Dejó la pipa con la que fumaba la hierba de los medianos, se quitó la zamarra y la camisa y, a pecho descubierto y con la gancha en la mano, dio un brinco por encima de los maderos y se metió en medio de la plaza, levantando el clamor de los aficionados al ver que entraba el primer participante.   

Cargando editor
06/03/2017, 19:07
Dominga del Rey Sabrosa

Dominga andaba un poco mosqueá. Era ya el segundo año en el cual no la permitían presentarse en el concurso de reina de las fiestas. Siempre la dician lo mismo: "No ti pudemos dijar piarticipá. Tu bielleza es tian espicial y tan bonica que'l riesto de mozas no pudrían competí contijo." Así que este año se apuntó a lo de coger el cochino.

Na más llegar y ver a todos los mozos quitándose la parte superior de la ropa, a Dominga se le abrieron los ojos tanto o más que la boca, por la cual salió la lengua, que casí llegó a tocar el suelo. Sin perder el tiempo, la moza se quitó la parte de arriba de sus ropajes, dejando su joven, flojo y caído pecho al descubierto para luego lanzarse hacia los buenos mozos que se estaban preparando para la competición. Por fortuna para ellos, Dominga fue placada y parada por parte de los presentes y obligada a vestirse de nuevo. No solo por que se cubriese las vergüenzas, sino porque con la ropa, parecía que el cuerpo de la joven jolía menos que desnudo.

Si sólo quiría disiarles buena suerte! se quejó la joven mientras se la llevaban para untarla de aceite. Pero al llegar al lugar, nadie quiso tocarla y, la única que se aventuró a ello dijo que no se le podía poner más grasa para que resbalase e incitó a la joven a que se escurriese el cabello grasoso un poco. Dominga lo hizo y, como si hubiese sido magia, su cuerpo quedó lleno de grasa. Lista para saltar al redil.

Y así lo hizo. Ni corta ni perezosa salió a la zona de juego, mirando pa todos lados donde agarrar algo. Miró al ovejero y puso cara de asco. Ande andan los mocicos qui vie antes!!! Exclamó buscándoles con la mirada. Se acercó al único que compartia redil con ella. Había puesto sus manos bajo las axilas, manteniendo los brazos cruzados.

No has visto sialir a los mocicos?? Que nervios!!! ¿Qué tal jolisqueo? Preguntó al ovejero acercándole una de sus manos llenas de grasa del pelo y olor a axila. D'aquí sargo prometía po lo menos!!!

Dominga se puso a saltar de un lado a otro, saludando con la mano a todos los presentes y regresó junto al ovejero, pero esta vez con las manos entre las piernas. De los nerfios, tiengo pis.... le confesó mientras se seguía tocando. Piero si me toco se pasa...

Cargando editor
06/03/2017, 20:19
Odovacar 'Oído fino' Percharcilla

El Odo pingó las orejas al grito del pregonero. Ya sabís, el Odo. El Odovacar. El Odovacar de los Percharcilla de toa la vida. De los jovis. Sí, el pequeño de la Lalia “la Coneja” que tuvo veinte muchachos mu hermosos tos y le queda el pequeño sin casar. El pequeño, el Odo “Oído fino”. Que le dicen asín porque de pequeñico encendió un petardo desos de Gandalf pero no lo soltó mu lejos y se quedó medio sordo. Esas cosas que te pasan por bacín cuando eres chico. Que lastimica, que su madre pensaba que era medio tonto hasta que se dieron cuenta quesque no oía bien. Más lástima que con esos orejones oiga la mitás o menos.

El caso… Que el Odo quiría participar en coger el gorrino también. Que él era mu macho y mu echao palante y le daba iguá que el gorrino fuera dos veces más grande qu’él. Se quedó a pecho palomo pa lucirse, que parecía un metrosesuá desos. Que tol mundo sabe que los jovis tienen muncho pelamen en los pinreles, pero luego el pecho es lampiño como el de un muchacho de doce años. Que el Odo ya calzaba veinticinco añazos en cada pata, que sus padres ya no sabían cómo echarlo de casa, porque cuando sacaban el tema s’hacía el sordo el jodío.

S’estiró ahí un poco y se metió al redil, pasando por bajo la valla sin agacharse muncho. –Mande, el Odovacar aquín presente…- dijo mirando enderredor y vio al ovejero. -¿Qué ande hay orcos?- achumó l’oreja al pastor, porque no l’entendía. Al iguá que no’ntendía que le hablaba a su chucho sobre darle en el morro.

S'apartó un poco de la Dominga, porque aunque andaba en busca de moza, aún no había llegao a esas ansias de tener una. Lo mismo más tarde con unas zurras se animaba y hasta la veía bonica. 

Cargando editor
07/03/2017, 10:50
Gromenauer, el "Sinpán" el del Klander, de los enanos Arrecíos de las montañas

El pobre Gromenauer ya estaba un poco más calmao, aunque seguía enfurruñao porque no le habían dejao pegarse con los orcos. Así, daba pequeños sorbos al vaso de chocolate, que seguía sin gustarle porque no llevaba vino, ni tan siquiera sabía a vino. Pero como no había otra cosa, pos a sorber de eso. Si hubiese sío un tanque lleno sulfato, lo había sorbío igual. Si ya dicen del tonto y la linde...

Sea como fuere, ahí estaba el enano, sin meterse con nadie, viendo pasar a la gente, a ver si alguno le ofrecía algo de vino, sin enterarse de na. Pero los únicos que se fijaron en él fueron los mozos, que son mu cabrones y aguantan mu mal el vino. A la que el enano estaba despistao, se le arrimaron por detrás, le engancharon como no iban a enganchar al gorrino y se lo llevaron pa la plaza.

Gromenauer, que tiene los cojones mu bien puestos, se habría revolvio y habría partío la cabeza a los mozos. Pero estos eran mu listos, y lo primero que hicieron fue llenar al enano de vino por encima. Así, mientras se relamía, no se enteraba de donde estaba.

Cuando se quiso dar cuenta, estaba en medio de la plaza. Por lo visto, tenía que pegarse con to'l mundo pa coger un gorrino o algo ansí. La verdad es que el gorrino se la pelaba, hasta que uno desde un balcón le gritó "Sinpán, si agarras al gorrino te doy una fanega de vino"

Y claro, el enano estaba achispao y no se enteraba, pero de lo que no quería. De eso se había enterao a la primera. Así que se plantó en medio de la plaza tambaleante, y dijo a los demás—. Lo mejor será que me dejéis al gorrino. Que luego vienen las tontunas y los ascidentes.

Y tras decir esto, el enano echo otro trago al vaso de chocolate. Que ya, por fin, sabía a vino.

Cargando editor
07/03/2017, 15:01
Lorelai Cantalapiedra, "La Pellegrina"

- ¡Venga, venga! ¡A cazar al gorrinico!

La Lore estaba exultante, más contenta que unas castañuelicas. Lo que más le gustaba de la prueba del gorrino era que siempre alguien le preguntaba por qué no participaba en una prueba con animalicos con lo bien que se la daban, y ella siempre decía "porque sería abusar". Y se quedaba tan pancha. Pero ver a los paisanos intentar cogerlo también era muy divertido.