Partida Rol por web

Después de vosotros, los candidatos a ganar esta prueba van probando suerte. Al contrario que con el tiro de arco, hay poca participación, ya que los buenos lanzadores de hachas son guerreros poco instruidos en la escalada.

El primero falla sus tres tiros y se retira. El segundo logra clavar un hacha y sube por el tronco como las ardillas. Los dos siguientes no logran encaramarse ni con ayuda del hacha clavada y el tercero si lo logra pero sin superar la destreza del anterior, que por el momento parece ser el favorito por delante de Aldar y el último participante. Antes de dar el veredicto, uno de los jueces pregunta: -¿Alguien más desea participar en el lanzamiento de hachas?

El joven Crixus se dispone a participar en esta competencia ya que le había llamado la atención -Hey yo me apunto respondió a los jueces y se preparo para competir

Como Erikand no aparece y nadie más se apunta a la prueba, el campeón es un orlanthi del clan de los Raicesheladas, que obtiene una bonita hacha artesanal.

Seguidamente, el pregonero oficial de la fiesta anuncia la siguiente prueba: Los perritos. Quienes quiera participar deben apuntarse ya mismo pues comenzará en breve.

Tanto fracaso no ha conseguido que mi animo decaiga, asi que pensando en que aun puedo ganar algo me apunto a la siguiente prueba llena de optimismo. 

Una vez mas la suerte no esta de mi parte, cuando me acerco al perrito para tirarle del rabo me descubre y tengo que salir corriendo para evitar que me muerda. 

Y otra vez aparece Kilder de la nada, arropado, y se aproxima a los perritos.

me acerco a uno, le tiro de la cola fuertemente, y comiuenza a ladrar.

Salgo corriendo, y me pongo detrás de Loranda, y comienzo una conversación como si no fuese conmigo la prueba.

-Hola!!!, ¿tu también has venido a la exibición de perritos?

El Joven Crixus se inscribe nuevamente en esta prueba, ya que esperaba ganar algo y confiaba en sus habilidades,sin embargo no le fue nada bien...

Me dirijo hacia donde están los perros. No es una prueba fácil... en absoluto. Me agacho e intento imaginar que estoy acechando a una presa.

Empiezo bien, deslizándome como una sombra, pero a medio camino... contengo una maldición cuando tropiezo con una raíz y, al trastabillar, muevo los matorrales. Oigo los ladridos y pongo los ojos en blanco.

Después d evosotros, algunos cazadores más intentan superar la prueba. A pesar de que el alcohol comienza a hacer mella a estas alturas de la fiesta, uno de ellos logra llegar hasta el perro sin ser oído, le estira del rabo y se oculta con tanta maestría que el animal no sabe qué le ha pasado y solo puede ladrar al cielo confuso. Es el ganador indiscutible de la prueba.

Y mientras esperais la siguiente prueba podeis ver como, entre gran expectación llega el khan de los Raicesheladas al pueblo, acompañado por un séquito de guerreros y por su hijo, futuro marido de vuestra querida Ahrrya. El khan, de nombre Olaff, es un hombre no demasiado alto, rollizo y con el rostro muy redondo y sonrosado; Al contrario que Garnath se ve claramente que no es un guerrero si no mas bien un diplomatico y su hijo, de unos 18 años parece seguir sus mismos pasos; Viste ropas elegantes de pieles diversas y a pesar de ser más delgado y ligeramente más alto que su padre, su cara redonda y sonrosada delata su heréncia. Una vez han hecho los saludos de rigor, se dirigen a la cabaña de garnath a hablar sobre el inminente enlace, mientras Ahrrya y Olaff Jr. se miran con timidez.

El pregonero oficial anuncia la siguiente prueba: La prueba de mentiras. rapidamente se reunen un gran numero de personas alrededor de un escenario improvisado para juzgar a cada mentiroso. La prueba consiste en explicar una historia, claramente ficticia y exagerada pero lograr hacerla creíble en el transcurso de la misma.

El primer voluntario es un viejo guerrero retirado, ahora pescador que sube al escenario y comienza su relato: -Voy a contaros cómo una vez... fui engullido por un verdadero dragón... Los congregados alli comienzan a reír a carcajadas y a gritar cosas como "Anda ya, viejo", "mentiroso". En ese momento comienza un relato lleno de detalles para intentar hacerlo creíble. La exactitud y el detalle con el que el viejo describe el interior del dragón y su laborioso camino por salir por el otro extremo es tal, que la audiencia se calla y algunos comienzan a rumorear si no será cierto lo que dice. Cuando termina el relato todos aplauden a rabiar.

Me siento en la hoguera, e invito a todos a que se sienten alrededor mio, para explicarles como maté a un gran oso de un flechazo en el bosque.

Comienzo a explicarlo, pero al parecer no resulto muy convincente.

Toso un poco para llamar la atención y grito que voy a contar cómo yo y mis compañeros acabamos con una guarida de trolls justo hace dos semanas. Sin embargo, parece que ni los niños se lo creen. -¡Que es verdad! digo frunciendo el ceño. Luego me marcho de allí para dedicarme a otra cosa.

Subo al escenario y comienzo a hablar- Hace mucho tiempo, iba paseando por el campo cuando un grifo enorme me agarro y me llevo volando durante horas... -Me doy cuenta de que no creen una palabra de lo que digo y bajo sin acabar mi relato. 

Finalmente es el viejo quien se proclama vencedor de la prueba. La noche va cayendo, la gente comienza a sentirse embriagada y la fiesta va subiendo el tono. Algunos afortunados han encontrado pareja entre los orlanthis vecinos mientras que otros esperan con alegría la prueba musical.

Garnath ha terminado su reunión con el khan de Raicesheladas y ha salido al exterior para disfrutar de la fiesta y de la copiosa cena que se ha preparado para la ocasión. Ahrrya y su futuro marido se miran tímidamente sin tener nada que decirse; Ambos saben que van tener que pasar toda una vida juntos.

Mientras esperais a que comience la prueba de la música os dais cuenta d eque varios cazadores se dirigen a Garnath llevando escoltado a un hombre de aspecto extraño: va vestido únicamente con pieles y adorna su cuerpo con tatuajes, huesos y otros fetiches. Aunque claramente es de origen orlanthi, no parece que siga la misma senda que los demás. Garnath se levanta con sus mas de dos metros de altura, algo contrariado, y se dirige a hablar con el recién llegado.

Rayos, con tanta prueba no he tenido tiempo para charlar con las mozas de buen ver de los Raícesheladas... -refunfuño mentalmente al ver a otros miembros del clan riendo con las mujeres del clan vecino-. Tal vez durante la cena tendré mi oportunidad.

Cuando veo a Arrhya con su futuro esposo, me fijo detenidamente en el chico y me da mala espina. ¿Será digno de ella?

Luego mi mirada se centra en el recién llegado. ¿Un kolati? ¿Qué habrá venido a hacer aquí? ¿Habrá causado problemas? Frunzo el ceño de nuevo y me acerco a Garnath para ver y escuchar mejor lo que sucede. Si hay problemas, no quiero que afecten a la boda de mi sobrina.

Una vez han pasado las pruebas físicas no tengo mucho más que hacer. Desde que se fue mi hermano he cazado a solas, así que no sé contar historias ni cantar. Me entretengo examinando mi nuevo arco hasta que los acontecimientos de mi alrededor me distraen.

Veo al novio de Arrhya y contengo una sonrisa. Creo adivinar quien va a llevar los pantalones en esa relación. Sin embargo, un pintoresco recién llegado concentra mi atención. No recuerdo haber visto nunca a nadie así en estos años que llevo viviendo entre los orlanthis, y por la reacción de Garnarth, no parece traer buenas noticias. Estiro el cuello y trato de enterarme de lo que ocurre.

Doy un codazo a Loranda, y miro hacia arriba para hablar con ella:

-Oye, ¿conoces a esa chico?, tu como embajadora, ves y presentanoslo, posiblemente sea de otra tribu y seria bueno estrechar lazos entre los dos pueblos.

Mientras tanto, pienso para mi, si no va ella, ya iré yo,q que parece que es un mago o algo así, igual podríamos intercambiar información.

Miro al extraño con curiosidad y luego respondo a Kilder- No conozco a ese hombre, como os lo voy a presentar? Parece que se trata de alguien importante, lo van escoltando, sera mejor que no meta las narices no sea que provoque un conflicto diplomatico-miro a Kilder con desconfianza- Si nos necesitan nos lo diran, deja que Garnath se ocupe de el.