Partida Rol por web

Abandono la zona dirigiéndome de nuevo a la enfermera que me había atendido Parece que no está mi amigo, volveré abajo a ver si doy con él, muchas gracias y disculpe las molestias. Le digo con un tono suave y agradecido.

Mientras me alejo en busca del ascensor o las escaleras, saco el móvil y marco el número de Marcus para explicarle sobre el nuevo hallazgo

La niña está por decirle a Marcus sobre sus padres cuando el celular del joven vampiro suena, lo que se siente más bien es una vibración ya que lo ha puesto en ese modo para evitar cualquier problema.

El joven le pide a la niña unos segundos y atiende. Es Moonchild:

Comienzas a caminar por el pasillo al que da una de las puertas traseras, ves varios uniformes que están esperando a los de limpieza. Nadie nota que tomas uno y vas a una salita, llena de suplementos médicos y te cambias. Ahora pareces una empleada de limpieza, debajo llevas tu ropa normal, así que no tuviste problema, simplemente te colocaste el uniforme encima.

Empiezas a caminar llevando un cepillo para dar mayor realismo a tu disfraz. En ese momento sientes que la temperatura ha bajado unos cuantos grados. Un halo de vapor se escapa de tu boca al respirar. Tienes dos pasillos delante de ti, uno a la derecha, otro a la izquierda y también un ascensor.

Marcus, soy Moonchild, creo que podría tener algo... ¿Cómo lo llevas tú? Mi voz suena profunda y ligeramente entrecortada al ir hablando y caminando lo más rápido que puedo a la vez.

En oncología he encontrado un resto que tal vez me sirva para rastrear, pero aquí dentro me es imposible !joder está lleno de gente! no creo que sea buena idea transformarme...

Escucho las palabras de Moonchild alegrandome de que el también tenga algo, y cuando termina contesto firma acaciando un poco la mejilla de la niña para que esté calmada.

-Yo estoy en la sección donde estaban los niños antes de que se los llevaras, converso con uno de ellos que quizás puede decirme algo al respecto. ¿Necesitas algo?

Intento hablar lo más bajo posible, para que la niña no se soprenda de la incoherencia de ambas conversaciones.

Miro hacia los lados, pensativa. Todos los pasillos de estos malditos sitios me parecen iguales: frios, impersonales... Lo dejo al azar, en el ascensor no voy a ir, así que me encamino por en pasillo de la izquierda. Y que sea lo que dios quiera. Aunque tengo un mal presentimiento por lo de el bajón de temperatura, no hay nada bueno en eso.

No, creo que voy a ir a seguir el rastro a ver si descubro algo, mantenemos el contacto, si descubrís algo llamadme, en cuanto sepa algo os avisaré, ¡primero voy a salir de este hospital! exclamo agitado a mi compañero a través del teléfono móvil mientras me acerco a la salida.

Bueno, eso es todo Marcus, cuidate...

Vas por el pasillo de la izquierda que da a uno aún más amplio donde se encuentran varias salas anexas. Una es la de cirúgía, está vacía, por lo visto nadie está siendo operado en este momento. Luego sigues un poco más, hay otra sala grande en donde hay muchas camillas vacías. Parece que allí es una especie de depósito de suministros que luego se usarán en cirugía. Hay algunas máquinas que no sabes para qué son, cajas etiquetadas con nombres que desconoces, cajas con gasas, alcohol y demás, las camillas y una puerta al fondo.

Sigues caminando y ves, al fondo una puerta que da a otro pasillo. Te parece ver pasar a algo muy rápidamente. Te acercas, de aquí viene el frío. Miras por el vidrio. Es un salón rectangular con algunas puertas a la derecha e izquierda, probablemente consultorios pero no lo sabes. Ves una sombra negra entrar en una de esas puertas. Empujas para meterte en el salón pero el portón está cerrado.

Cortas con Marcus y te dispones a rastrear la prenda, para eso primeramente debes de abandonar el hospital, así que, para evitar preguntas innecesarias vuelves sobre tus pasos. La idea es salir por la ventana por la que ingresaste. Pasas afuera de la sala de Oncología, las dos enfermeras están charlando y te miran sin mucho reparo.

De allí a la sala vacía y luego a la ventana. Tienes que esconderte para usar tu poder, si te conviertes en lobo sería bastante fácil rastrear el origen de la tela, pero claro, no debes permitir que te vean. O tal vez puedas contarle a Ledwing sobre el descubrimiento. Sea como sea, hay una decisión a tomarse con celeridad.

Y tú tienes la mejor nariz de todos.

Cuelgas con Moonchild y vuelves a hablar con la niña, en eso notas que está parada frente a la puerta. Hay una figura oscura delante de ella.

-¡¡Ya me has venido, ya me has venido a buscaar!!- la pequeña te mira y dice -Mira, mira a mi amigo, él es mi amigo, mira a mi amigo. La pequeña está por tomar la mano de esa cosa.

Decido no perder tiempo llamando a Ledwing Ya llamaré cuando tenga algo más importante... pienso mientras desciendo hasta el callejón.

Este será un buen lugar me digo buscando un hueco en el que poder guardar mi ropa y disponiéndome a transformarme. extraigo el móvil del bolsillo antes de sufrir la transformación creo que podré llevar esto en la boca...

Michael al asegurarse de que esa mujer tenia vista bastante deficiente, decidio avanzar lentamente tratando de ir por donde menos de la luz, podria aparecer otra persona y debia estar preparado. Mientras va pasando va hechando una mirada a cada habitacion que pasa.

Tal vez haya niños...

El movimiento de la niña me sobresalta, no esperaba que fuera tan rápida. Miro al ser mostrando levemente los dientes, no pretendo asustar a la niña.

Casi sin darme cuenta de que puede haber gente escuchandome alzo la voz.

- No toques a la niña, desgraciado.

Te escondes, pones las ropas a resguardo arriba de un árbol y dejas el móvil cerca para colocarlo en tu boca. En segundos comienza la transformación, los músculos se agarrotan, los huesos se estiran, los miembros se hacen más fuertes, todos tus sentidos se agudizan y sientes como el cabello comienza a crecer. Ya te has acostumbrado pero siempre sientes algo de dolor.

Cuando la transformación termina, eres un imponente lobo oscuro. Tomas el móvil y te dispones a moverte cuando lo hueles. El hedor proviene de una sala en el hospital en donde hay una niña, Marcus también está allí y algo más, algo terrible, algo que tiene el olor más putrefacto que has sentido en tu vida. Por primera vez en muchos años, tienes miedo. Cada poro de tu piel siente un aire de maldad que ni siquiera sabías que podía existir. Ahora debes de ver cuál será tu siguiente paso.

Me lanzo dispuesto a seguir el rastro por la ciudad cuando el inesperado hedor llega a mi hocico, por acto reflejo mis orejas se curvan hacia atrás y mi cola se esconde entre las piernas. Es una sensación que me aterroriza, un leve gruñido sale de mi garganta. Joder! proviene de dentro pienso agitado tengo que avisar rápido a Marcus, pueden estar en peligro, parece que el hedor viene del lugar dónde se encuentra, pero no puedo perder el tiempo transformándome de nuevo en humano... ¿qué debo hacer?

El miedo al que me enfrento no me deja pensar con plenitud, mi instinto se antepone a la cordura y finalmente me lanzo al interior del hospital en forma de lobo. Será difícil pasar desapercibido, intentaré esconderme todo lo que sea posible; prefiero que se asusten a que acaben muertos, no tengo eleciión...

Pasas por las habitaciones tratando de fijarte si hay chiquillos por ahí que puedan ser las próximas víctimas, en ese momento ves a Moonchild, transformado dirigiéndose a algún lugar.

El enorme lobo también te ve a tí y se detiene.

Es un milagro que no lo hayan descubierto, quizá es que hay muy poco personal a esta hora, quizá es simplemente un poco de buena suerte.

Intento dar la vuelta para llegar al mismo pasillo por otra puerta, ya sea por una habitacion, la cocina... miro a mi alrededor, a ver por donde puedo avanzar para llegar allí

Michael asiente con la cabeza al ver al lobo

"¿Has averiguado algo?"

le pregunta

No toques a la niña, desgraciado.

Le dices y el ser levanta su mano mandándote a estrellar contra una pared. Por ser un vampiro y tener gran agilidad, te mueves a último momento y evitas un golpe frontal que, si bien no te hubiese lastimado, podría haber ocasionado graves daños a la estructura y quizá, accidentalmente, herido a la niña.

El ser te habla y dice:

-Dile a tus amigos que no se entrometan...

Y comienza a salir de la habitación con la niña en brazos.

Miro unos segundos a Stone y emitiendo un pequeño gruñido me lanzo de nuevo a la carrera en busca del origen de tan extraño hedor.
Espero llegar a tiempo...

Corro por los pasillos en dirección a la sala dónde se encontraba Marcus, mis patas se mueven con soltura mientras la rabia comienza a crecer en mi