Partida Rol por web

Kristian calienta sus manos cuando finalmente alcanza la cima tras sus compañeros. El frio era brutal y el esfuerzo ha supuesto un gasto de energia que, practicamente, le ha dejado exhausto. aun asi,siguiendo al resto del grupo, escucha como se aerc un vehiculo y lanza su cansado cuerpo sobre la nieve, aprovechando la cobertura de esta. Es un coche de la SS... A estas horas?

La cabeza de Fiske comienza a pensar que pueden hacer alli... con este tipo de gente nunca esta nada claro...

- Demonos prisa, vale amigos? - susurra mientras avanza un poco mas hacia la entrada - Aun nos queda lo mas complicado...

El siguiente paso es el más peligroso. Se trata de cruzar el espacio entre las dos alambradas pasando sobre la carretera; teniendo en cuenta que cada cierto tiempo los focos de vigilancia rastrean la zona, moverse por allí va a ser peligroso.

El cabo sintió la adrenalina recorrer todo su cuerpo. El corazón acelerado, la boca seca, los músculos calientes... Se llevó un puñado de nieve limpia a la boca y se enjuagó con ella.

-Ya hemos llegado hasta aquí. Ya casi es imposible volver. Y a partir de ahora será totalmente imposible. Si alguien se quiere ir, que se vaya ya. El resto, que me siga.

Con cuidado agujereó la alambrada lo suficiente como para que pasase una persona y se coló por el agujero, dejando paso al siguiente.

- Jævla crazy nazistene! - rugió Thrud por lo bajo, tan suave que apenas fue una impresión más del viento - Odín jamás tendría espacio en su mesa para cobardes como estos.

Pasó segunda detrás de Gladstone, sintiendo más el cosquilleo de la furia que el de la adrenalina. Ya estaban allí. Faltaba una alambrada, y luego la fábrica. Los delirados de las SS habían enfilado directamente para ese lugar, pero a Thrud no le importaba. Eran como cualquiera de los otros, una bala los podía matar, un hachazo los podía partir. No había ni siquiera pensado en las palabras de Gladstone sobre volver, abandonar, pero le llegaron extrañamente nítidas luego de unos segundos de ya estar al otro lado. Lo miró a los ojos. Era un buen líder para los suyos, pero no parecía entender visceralmente lo que era el odio. Quizás Edvin... y su propio padre...

Miró al foco. Miró al terreno. El desnivel, las posibilidades. Trató de observar el sitio de donde venía el haz de luz, aunque no se hacía esperanzas de poder ver si el movimiento del foco era producto de máquinas o de la mano humana. Estaban ya muy cerca. Faltaba muy poco.

Con mucho cuidado, avanzáis cerca de la valla exterior en busca del mayor ángulo hacia el norte, prefiriendo rodear y perder tiempo que ir rápido pero arriesgar más. El foco rastrea hacia el oeste hasta la torre de fabricaciónde amoniaco, repasando sus muros.

El cabo caminó semiagachado y se arrojó al suelo detrás del terraplén. El foco rompía las tinieblas de la noche y amenazaba con dar al traste con la misión. Ahora tocaba correr con cuidado para llegar a la fábrica.

Thomas respiró hondo y se preparó para salir corriendo.

-Correremos de uno en uno. Cuando uno llegue a la posición, sale el siguiente. Si hay problemas, cuerpo a tierra. Que el último cubra la retirada con su fusil si es posible. No quiero disparos, pero tampoco quiero sorpresas. ¿Todo claro?

Liam no sabía que narices significaba aquello del coche. No conocía muy bien a aquel grupo sectario del partido nazi, aunque había oido hablar de ellos y sabía que sus técnicas no eran muy ortodoxas incluso para los nazis. Trataban temas escabrosos que quedaban demasiado lejos del alcance mental de Murray.

Después el foco se empeñó en seguir complicando las cosas. Ante la propuesta del cabo no se lo pensó dos veces.

Yo ire primero. Dijo siendo consciente de que su velocidad podía ser buena para ir abriendo brecha.

A la carrera, el grupo logra atravesar la carretera muy cerca del foco de luz que por muy poco no les ha descubierto. Ahora toca llegar hasta la segunda valla y atravesarla mientras las luz delatadora sigue dando vueltas por el terreno.

Al ver acercarse el foco, el cabo Gladstone se arrojó al suelo para intentar salvarse de la luz delatora. En cuanto se sintió seguro salió corriendo hacia la valla.

Todo era demasiado impreciso... demasiado caotico para saber cual seria el siguiente movimiento del foco en busca de posibles transgresores.

Aun asi Kristina continuo el camino con el resto de compañeros, sintiendo el frio entumeciendo sus huesos y calando sus ropas y apretando con fuerza el arma que empuñaba.

Un poco mas, ya casi estamos - se repetia a si mismo una y otra vez.

Lográis llegar hasta la valla que os separa del núcleo del complejo y os agacháis allí tras de una loma de nieve. La luz parece moverse lejos de vosotros ahora mismo pero os afanáis en cortar los cables lo más rápido posible.

Venga, señores, afánense en cortar esa valla, que tenemos prisa. El edificio está sólo a unos pasos. Ni un ruido a partir de ahora.

El cabo se preparó para pasar el primero en cuanto el agujero estuvo hecho.

Atravesáis la valla manteniendo la distancia con el foco que parece ahora centrado en otra zona de la colina, afortunadamente.

Aliviado por ver tan lejos el foco, Kristian se mueve con celeridad, evitando causar ningun ruido aunque para ello tenga que detenerse mas de lo aconsejable. Solo espera que el resto del equipo sea tan cuidadoso y puedan finalmente guarecerse en el cercano edificio... el frio y la tension ya es mucha y se esta aferrando a sus musculos como si estuviese a punto de ser fusilado.

El cabo corrió como alma lleva el diablo en cuanto atravesó la valla. El torso bajo, la mirada pendiente de todo, la mano cerca del cuchillo por si era necesario.

Mientras el foco, por fortuna, sigue buscando por la ladera, vosotros lográis llegar a la base del edificio donde se fabrica el amoniaco con el agua pesada de la planta contigua. Es un edificio de dos plantas al que se accede desde la plataforma superior bajo la que estás ahora mismo... ¡y por la que va a pasar en unos segundos un soldado de guardia! Hay pocas posibilidades. U os quedáis muy quietos y esperáis que no os vea o corréis ahora hacia el edificio del agua pesada confiando en pasar antes de que os tenga a la vista o alguien sube de inmediato para cogerle por sorpresa. En los tres casos, hay posibilidades de que os vea y pueda dar la alarma antes de que lleguéis al edificio. Y en ese caso, habría que anular la misión o entrar, colocar las cargas lo antes posible y salir a sangre y fuego.

-Esperad aquí. Yo me ocupo de él.

El cabo se deslizó lo más rápido posible para poder colocarse a las espalda del guardia, y poder trepar. Una vez arriba, tan sólo tenía que colocarle el puñal entre las costillas flotantes y apretar mientras le tapaba la boca. Sencillo, según el manual. Aunque la realidad nunca es tan agradable.

Murray aguardó en el lugar donde estaban mientras el cabo salía corriendo para encargarse del soldado alemán.

Por si acaso sacó su arma y apunto al centinela, con la esperanza de no tener que apuntar el gatillo. Pero si la vida del cabo estaba en peligro, no dudaría en disparar aunque eso significase descubrir su posición y alertar a todo el mundo.