Partida Rol por web

Historias de Horror I.

CC: 3- Casa de Kendra Lorrimor.

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01/08/2017, 21:55
(CC) Doctor Querio Vandel.

Querio Vandel se mordió el labio inferior ante las palabras de Janos. No podían proteger todas las granjas de las afueras, por falta de brazos. Tampoco podían encontrar a los orcos sin un rastreador. Y lo más parecido a un rastreador que tenían era Velkan, que ya no estaba entre ellos.

No soy jurista. No soy la persona adecuada para llevar a cabo una defensa legal-se dió por aludido sin serlo-, y me falta motivación para ser convincente. Si ese mestizo hubiese sido criado en alguna granja, en secreto, por su familia humana, sabría el idioma de los hombres. Estamos hablando de un semiorco críado por orcos, y eso le convierte probablemente en miembro de la misma tribu que cometió los crímenes, y puede que incluso en cómplice.

Por otro lado, se me hace raro que tres cazadores hubiesen capturado a un miembro aislado de una tribu orca. ¿Puede darnos más datos sobre el caso? ¿Los hombres que capturaron al acusado son miembros del pueblo?

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01/08/2017, 22:35
(CC) Sascha Danzante de las Nieves.

Tras asegurarme doce o trece veces más de que perder contacto físico con Gruñido no iba a provocar que éste se desvaneciera, había aprovechado y me había sentado en una de las sillas cercanas al lugar donde se había concentrado el efecto de la visita del Sheriff, con la intención de descansar del peso de Rhakan, del resto de objetos cargados, y del mío propio.

Probablemente todos atentos a la cháchara del Sheriff ninguno se dio cuenta de la canción por estrofas que cantaba mi rostro mientras el hombre hablaba de orcos y civilizados aldeanos.

Alguno quizás tomó nota del bufido que se me escapó cuando dijo aquello de que no eran bárbaros.

Que sí. Liarse a pedradas, coger de los pelos y arrastrar a la hoguera a una chica joven y un niño que jamás hicieron algo malo es muy "de civilizados". Y alzar las azadas a modo de arma contra un grupo tranquilo de gente que sólo quiere enterrar en paz a un viejo amigo también es muy "de civilizados". A saber de dónde demonios han sacado a la criatura de la que hablan. Capaces de haberla criado ellos mismos como esclavo y ahora aprovechan y se deshacen de él.
No es que no lo merezca. ¿Por qué Ithaqua permite la existencia de los orcos y sus híbridos descendientes?
Deberían morir todos. ¿Un juicio? ¿Para qué? ¿Acaso se somete a juicio a una cucaracha que se cruza en tu camino? Ellos han atacado primero, como siempre. No hay excusa que deba ser escuchada. Son una plaga que se debe exterminar sin miramientos. Ellos no preguntarán antes de cortarte el cuello.

Acariciaba el mango de Rhakan cuya cabeza reposaba en el suelo entre mis pies, dispuesta en cualquier momento a levantarla y hacer que el hacha pusiera sus dientes en la frente del Sheriff... O se decidiera que era hora de cazar orcos. Dependía mucho de si el hombre tomaba algún tipo de comportamiento despectivo contra mi hermano pequeño o Konrad daba la orden (contra el Sheriff, los orcos o la cotilla de la casa de al lado...)

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02/08/2017, 13:04
(CC) Gruñido.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL BIENESTAR, 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA. CASA DE KENDRA LORRIMOR.

Gruñido mira a Janos como si hubiera dicho que se iba a colgar al granero ahora mismo. Que el joven creyera que podría hacer frente a una fuerza incursora con su caballo y su espadita hacía dar vueltas a la cabeza de Gruñido. Los hombres del Clan Gorra Roja lo hacían con el esfuerzo combinado de grupos de cazadores de cabezas y derramando mucha sangre propia en el proceso, y eso que conocían el terreno y emboscaban a los orcos.

Le oirían venir desde kilómetros y pondrían su cabeza en un pica. Eso si tenía suerte.

- Grrrwwllll... Puede que semiorco esclavo de orcos y huir de ellos. Poder tener información sobre lugar donde orcos estar, o planes de orcos. O poder ser oteador de orcos. Sólo saber si preguntar. -

Gruñido podía imaginar una vida de sometimiento y humillaciones por parte de los orcos a quien sabían un mestizo despreciable. No era infrecuente que los orcos capturaran esclavos en sus incursiones, y a las mujeres las usaban para más faenas que para remendar ropas. Malditos fueran.

El chófer se acercó al sofá donde Sascha estaba sentada con una tormenta en la cara, y puso una manaza reconfortante en su hombro. Mejor que Rhakan estuviera tranquila. Por el momento.

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02/08/2017, 15:49
(SA) Réquiem (Alexei Mykephoros).

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL BIENESTAR, 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA. CASA DE KENDRA LORRIMOR.

La sonrisa de Réquiem fue la única respuesta que recibió el Sheriff Benjan Caeller ante sus últimas palabras dirigidas al bardo. La voz de la autoridad llegaba a sus oídos en segundo plano, su mente seguía trabajando e intentando entender todo lo que había sucedido sin percatarse de la mirada de Sascha. Alexei buscaba ubicarse en ese lugar, si no podía recordar necesitaba repasar todo aquello que su memoria había retenido.

<< Piensa Réquiem. Despiertas en lo que parecía ser una cripta con un grupo de personas desconocidas, dicen que tu nombre es Alexei y eres el hermano pequeño de dos de los integrantes del grupo >> La mirada del dramaturgo se dirige hacia Konrad Mykephoros y Gheorghe Mykas << El doctor habló sobre un vórtice de energía espiritual. El mayor de mis supuestos hermanos me quitó el anillo mientras estaba moribundo… ¿Tanto rencor acumulado? ¿Podría llegar a confiar en él? Tengo un vago recuerdo que se lo quité a algún familiar tras una discusión, pero… no hay rostros, ni voces, simples fragmentos inconexos que poca relación tienen. Pero antes de todo esto, antes de aparecer casi m…>> Aquella palabra en su mente hizo palidecer su rostro, tanta confusión mezclada con un exceso de información desconocida había ocultado en su memoria la llegada a aquella cripta. << El sueño donde todos moríamos, los cinco desconocidos que al despertarme estaban allí: el viejo de la barba blanca, otro que tenía vendas en los ojos, el del rostro delgado, el ser pálido y por último el hombre de perilla y bigote; los mismos que en el sueño.  Luego aquel ser espeluznante, buscamos una salida y... >> La mirada seguía perdida en el infinito mientras el Sheriff informaba a los presentes y la voz de Gruñido resonaba en la sala << Un muerto animado… No podía defenderme y cedí a la oscuridad en ese maldito sanatorio…>> La sensación de angustia que le ocasionaba aquella escena hacia incrementar los latidos de su corazón, mientras unas gotas de sudor recaían por su frente.

Durante breves segundos el miedo fue reflejado en su rostro como un libro abierto, pero esa visión cambió de un momento a otro. Un repentino ataque de tos hizo que agachara la cabeza, a la vez que llevaba su mano a la boca, como si se tratara de un acto reflejo. Sintió algo de humedad en la palma y pudo ver como algo de sangre había sido expulsada tras el repentino ataque. Aquel suceso inoportuno hizo que aterrizara en la casa de nuevo, dejando sus escuetos recuerdos aparcados en un rincón de su mente.

<< Debo centrarme en el presente, recordar quien soy y tener cautela con estos desconocidos que dicen conocerme. >>

Después de rozarse los labios con la mano, cerró el puño para que nadie viera la sangre que había expulsado y así mantenerla oculta esperando y deseando que todos estuvieran pendientes de las palabras del Sheriff. Alexei alzó la mano, en la que llevaba una taza, con un gesto que afirmaba estar bien. Después miró hacia Janos, la persona que le ayudó a recuperarse de sus heridas que intervenía en la conversación con Benjan.

<< He de recuperar mis pertenencias. >>

El miedo había desaparecido del rostro de Réquiem, pero seguía presente en su cuerpo en el tímido temblor que tenía en la mano con la que sujetaba su infusión. Bebió mientras escuchaba las palabras del doctor y de Gruñido, que se sentó al lado de Sascha. El poeta intentó mantenerse centrado en la conversación, pero su mente solo pensaba en una cosa, su libro.

<< He de leerlo. >>  

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02/08/2017, 18:42
CC: Ravengro: Sheriff Benjan Caeller.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL BIENESTAR, 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA. CASA DE KENDRA LORRIMOR.

Al Sheriff no le dio ninguna seguridad, como parecía darle a Gruñido, la historia del suceso que había sufrido de pequeño, al contrario, fortaleció su idea de que la presencia del semiorco podría desatar un pequeño tumulto, la gente no distinguía entre orcos y semiorcos, todos eran lo mismo y todos eran malos. Por su parte no tenía problemas con Gruñido, sabía de sus servicios con Konrad durante años y parecía adaptado a la civilización, el problema era que la civilización jamás se adaptaría a su presencia por desgracia. Tampoco dijo nada ante las bravas palabras del joven Janos, sin duda era un noble cometido pero probablemente les llevaría a la muerte, así que intentó calmarlo un poco.

-Seguramente los soldados acaben encontrando y liquidando al grupo, sospecho que no se trata de uno demasiado grande o nos hubieran dado más problemas. Pero nunca se sabe... -Asintió ante las palabras de Gruñido.- Precisamente eso es lo que me gustaría averiguar. -El destino del semiorco lo veía más bien negro, siempre habría algún robo, asesinato o acto criminal que alguien estuviera dispuesto a jurar que había cometido, nadie iba a salir en su defensa, pero si al menos conseguían alguna información sobre el grupo al que supuestamente pertenecía... Tampoco estaba seguro de eso, tenía dudas parecidas a las de Querio, pero prefería no decir nada.- No Doctor Vandel, la verdad es que apenas los conozco, no son del pueblo, aunque a veces aparecen para vender pieles, pequeñas presas por lo general.

Y de repente aparecían con un semiorco al que querían hacer ver como un poderoso y peligroso guerrero orco. Benjan había visto a la criatura y parecía cualquier cosa menos eso. La tos con sangre de Alexei hizo que el Sheriff se alarmara un poco.

-¿Está bien Señor Alexei? Eso no tiene muy buena pinta.

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02/08/2017, 19:33
CC: Ravengro: Kendra Lorrimor.
MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.
 
DÍA DEL BIENESTAR, 5 DE ABADIO.
 
MEDIA MAÑANA. CASA DE KENDRA LORRIMOR.
 
Kendra escuchó las palabras del sheriff con atención, sabía que Bejan no los hubiera molestado si no hubiera sido algo importante, pero el asunto que proponía podría meter en problemas a sus invitados. Lo sentía mucho por aquel semiorco, pero por otro lado no quería que a Gruñido o a cualquiera de los otros le pasara algo. La tos de Alexei fue una buena excusa para hacer que el hombre abandonara la casa y dejara en paz a sus invitados.
 
-Lo siento Sheriff Benjan, no ha venido en un buen momento. Espero que puedan solucionar el problema con su prisionero, estoy seguro que usted hará que se cumpla la ley. Mis invitados meditarán en su oferta, no se preocupe. Le acompaño hasta la puerta.
 
No hizo falta mucho más para que Benjan se diera cuenta que ya estaba de más, así que se tocó el ala de su sombrero a modo de despedida y acompañó a la señorita Kendra a la puerta.
Instantes después la muchacha volvió a aparecer sola.
 
-Siento la interrupción. Ya tienen ustedes bastantes preocupaciones como para andar ocupándose de los asuntos del pueblo, como si además se lo fuera a agradecer alguien, seguro que buscarían alguna excusa para echarles la culpa si algo saliera mal. -Hizo una pausa, estaba un tanto indignada con la actitud de algunos de sus vecinos y no iba a permitir que molestaran a sus invitados después de haberlos tratado tan mal.- Voy a recoger el desayuno, por favor, sigan con sus asuntos y olvidense de lo que ha dicho el Sheriff.
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02/08/2017, 23:00
(SA) Gheorghe Mykas.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL BIENESTAR, 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA. CASA DE KENDRA LORRIMOR.

Gheorghe se encontraba callado y pensativo, algo que no era demasiado extraño dado todo aquello por lo que habían pasado en las últimas horas. Saludó brevemente con un asentimiento de cabeza al sheriff, y dedicó otro a Alexei cuando le miró, con la sana intención de tranquilizarle y transmitirle fuerza, aunque quien sabía si lo había conseguido. Aunque se mantuvo en silencio durante la visita del sheriff, no paró de darle vueltas a lo que decía, añadiendo esas preocupaciones al resto que rondaban su cabeza. Y cuando se marchó y la señorita Lorrimor sugirió que lo dejaran pasar, negó suavemente.

-Me temo que no debemos dejarlo sin más, querida. Sin duda será peligroso, pero puede que alguien inocente vaya a ser ajusticiado, y no podemos permitirnos eso. Y, si todo ello no fuera suficiente, puede que tenga información. Ya sea de la amenaza orca, o de las preocupaciones del profesor. Esos orcos son preocupantes, y me gustaría detener la amenaza, Janos... Pero ahora mismo no creo que podamos. No ya por conocer el tamaño de su grupo, si no por desconocer su ubicación o donde atacarán. Puede que la visita al prisionero solucione eso. 

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03/08/2017, 21:44
(CC) Doctor Querio Vandel.

Vandel miró de soslayo a Alexei. Una vez más, el grupo necesitaba a un doctor en medicina, y Querio no era ese tipo de doctor.

Oh... ¿Vamos a hacerlo, verdad? Defender a ese semiorco. Realmente, solo es necesario que Gruñido pregunte por los cazadores que atraparon al prisionero. Quizás vió algo que pueda identificarles como miembros del Camino Susurrante. Todo lo demás se escapa a nuestras prioridades o a nuestras capacidades. Los soldados se pueden ocupar de las batidas para matar orcos. Yo... agh. Supongo que podría buscar en la biblioteca del Profesor algún libro sobre derecho y sobre las leyes locales. Preparar su defensa legal.

Pero os lo advierto, la gente nos odiará si nos ve de parte del semiorco. Ninguna defensa podrá cambiar la opinión del juez, o el jurado. ¡Cáspita! ¡Ni siquiera sabemos quienes tomarán la decisión sobre la vida de ese mestizo! Tal vez sería buen momento para llevarle un obsequio a nuestra influyente vecina Mirta Straelock. Kendra, querida, ¿podrías disponer de un trozo de tarta para la concejala?

¿Se dan cuenta de que hasta podría tratarse del asesino del Profesor?

No importaba lo que se decidiese en aquella cocina sobre el tema. Querio Vandel tenía pendiente visitar a la anciana de todas formas, para solicitar el acceso a los papeles del registro civil sobre el incendio de Piedra Alzada. Mejor hacerlo mientras aún tuviesen algo de tarta que llevarle, como dictan las convenciones sociales sobre las visitas, aunque eso le privase al Doctor del interrogatorio en orco que Gruñido tendría que hacer al acusado.

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03/08/2017, 22:30
(CC) Gruñido.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL BIENESTAR, 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA. CASA DE KENDRA LORRIMOR.

Los hombres de las casa de piedra hablaban de cosas grandes, de justicia y de proteger a los suyos de los orcos. Para eso necesitaran soldados, muchos soldados. Si el prisionero sabía sobre ese asunto, sería cuestión de comprobarlo. Pero la señorita Lorrimor había dejado claro que no quería que sus invitados se entrometieran en el asunto del semiorco prisionero.

Gruñido se debatía entre dos pensamientos. Primero quería conocer a otro mestizo como él mismo, y ver que similitudes o diferencias había entre ambos. Y por otro tenía en mucha estima a la muchacha, y tomaba en consideración sus deseos y opiniones. Si ella decía que tendrían problemas con la gente del pueblo, es que era verdad.

Una tercer pensamiento aleteaba en la frontera de sus cabeza. El encuentro la pasada noche con la sombra que ese fantasma proyectó desde el Otro Lado. No se quitaba de la cabeza la figura traslucida del enano con la almádena, y ese cráneo con la boca abierta flotando en su hombro. Había proyectado su sombra para deambular por la casa, y quién sabe cual era su intención. Pero Gruñido creía que buscaba algo, algo que había en la casa...

- Grrrrwwlll... ¿Hacer algo más que hablar? ¿Sí? -

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03/08/2017, 23:25
(CC) Sascha Danzante de las Nieves.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL BIENESTAR, 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA. CASA DE KENDRA LORRIMOR.

¿Defender al semiorco? ¿Vamos a gastar nuestro tiempo en eso? No, de eso nada. No con Velkan desaparecido y sin pistas de dónde está.

La tos de Alexei me recuerda constantemente que el hueco que ahora él ocupa entre nosotros debería estar ocupado por mi hermano.

Los ojos entrecerrados y los labios apretados son signos inequívocos de mi enfado. Me parece que cada vez que uno abre la boca es para explicar una idea aún más ridícula que la anterior.

Defender a un semiorco, ir a visitar a la vecina cotilla. ¿Qué será lo siguiente que propongan? ¿Ponernos a jugar a las tabas? Si ellos no piensan hacer nada productivo en relación a la desaparición de Velkan, lo haré yo. Y usaré sus ideas absurdas a mi favor.

- Señor. - Comienzo llamando la atención de Konrad. - Creo que antes de movilizarnos demasiado, Alexei necesita recuperar mejor sus fuerzas. Creo que puedo ayudarle, pero me gustaría estar con él a solas. Sólo necesito diez minutos, y otro vaso de agua caliente. Puedo quedarme con él mientras vais a ofrecerle la tarta a esa mujer.

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04/08/2017, 02:29
(CC) Janos Dimitriev Mykerinos.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL BIENESTAR, 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA. CASA DE KENDRA LORRIMOR.

La idea de ir en busca de los orcos para darles la muerte que merecen no es muy bien acogida por el grupo, algunos por miedo a la batalla, otros por desinterés. Puedo leerlo en los ojos de cada uno y sé, inequívocamente, que esto no sucederá. Desisto de mi intento de volver esta visita algo más entretenido, me reclino en mi asiento y me resigno a ser inútil y comer tarta hasta volverme tan gordo que tenga que dejar el templo de Sarenrae por no caber por sus puertas.

"Supongo que es porque solo Gheorghe y yo somos luchadores del bien y la verdad. Konrad es un noble a quien no le importa nada más, el Doctor Vandel una rata de biblioteca, Sascha una sirvienta y Gruñido un cochero. Si Velkan estuviese aquí quizás nos apoyaría, pero Alexei moriría con solo el oler el aliento de un orco. Claramente la idea de ir a buscar pelea no es el fuerte del grupo."

Pero me comprometí a quedarme aquí cuidando a la hija del Profesor y sus cosas, promesa que no fallaré. El Sheriff se retira, o mejor dicho, lo retiran rápidamente. El resto comienza a debatir si debemos ayudar al semiorco ese, algunos asumiendo su inocencia, otros manteniéndose cautos. Doy mi opinión al respecto, más que nada para no seguir comiendo y dejar de caber en mi armadura:

 - "Deberíamos ir y escuchar lo que tiene que decir. Si le creemos, intentamos ayudarlo. Si nos parece culpable, dejamos que las cosas sucedan. Busquemos la justicia pues si es inocente, debemos defenderlo para que no sea juzgado solo por su herencia."

Me pongo de pie cuando todos comienzan a moverse, pues quiero participar en algo y no estar estático en la casa, sintiéndome inútil y todo menos lo que debo ser.

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04/08/2017, 16:43
(SA) Réquiem (Alexei Mykephoros).

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL BIENESTAR, 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA. CASA DE KENDRA LORRIMOR.

- Sí estoy bien, no se preocupe Sheriff –. Dijo el dramaturgo con la voz ronca, estaba mintiendo pero no quería interrumpir la conversación. Por suerte Kendra hizo gala de su oratoria para que Benjan Caeller abandonara la casa, Réquiem se quedó más tranquilo ya que no tenía que responder a ninguna otra pregunta del agente de la ley. Inclinó levemente la cabeza a la señorita Kendra Larrimor, en un gesto cordial para transmitirle las gracias por su rápida actuación. La voz de Gheorge Mykas llegó a los oídos de Alexei, se quedó mirando durante unos segundos a su hermano mayor.  

<< No hay forma de recordarlo, pero transmite serenidad. Parece un  hombre de honor y sus palabras lo confirman >>  

El escuálido hombre desviaba su atención a cada uno de los presentes cuando estos hablaban entre ellos << Mirta Straelock >>. La mente seguía trabajando intentando poner cara al nombre que dijo el doctor Querio, pero ni idea. Su vista volvió al semiorco llamado Gruñido que tenía intenciones de ponerse en marcha. La palabra de Sascha dirigiéndose a Konrad le llamó la atención << ¿Estará a las ordenes de mi supuesto hermano? >>. Por último, Réquiem miró a Janos Dimitriev Mykerinos << También transmite serenidad y deber como Gheorge >>.

Alexei se terminó la infusión y antes de que todo el grupo se disipara alzó su voz - ¡Esperad! – el tono imperativo resonó por la sala. Meditó durante breves segundos unas palabras y empezó a hablar – No os recuerdo, no me suenan vuestras caras y ni siquiera reconocería a un enemigo de mi pasado. Para mi todos vosotros sois unos desconocidos – quería dejar clara su situación – Pero como bien dice Sascha – miró hacia la mujer - Me vendría bien recuperar mis fuerzas. Si me conocéis... – sus ojos se posaron en sus hermanos. Réquiem cree que son ellos los que mejor le conocen, ya que él es parte de su familia – Mi constitución deja mucho que desear, al igual que mi salud –. Su mirada volvió al grupo – Pero estoy en deuda con la persona llamada Velkan, pienso ayudaros y hacer todo lo posible para encontrarlo. Por otro lado, haré todo lo que pueda para ayudaros en cualquier cometido que os encontréis, al fin y al cabo vosotros me conocéis y estaré más seguro dentro del grupo que fuera. No sé qué perjuicio tenéis hacia mi persona, pero si cometí algún error obviarlo por el momento. Yo, en estos momentos, desde mi punto de vista no soy esa persona que llamáis Alexei, mi nombre es Réquiem. Espero algún día pueda recordaros y conocer mi pasado, de esa forma podré deciros dónde me encontraba y como acabé allí -. 

Réquiem dejó la taza en la mesa y se acercó a Sascha – Agradecería mucho tu ayuda – esperó que el grupo tomara las decisiones. Él estaba allí y tenía que continuar su vida, una vida que le había regalado la persona llamada Velkan.

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05/08/2017, 02:11
EL TIEMPO TODO LO CONDENA.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL BIENESTAR, 5 DE ABADIO.

MEDIO DÍA. CASA DE KENDRA LORRIMOR.

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05/08/2017, 02:11
(CC) Konrad Mykephoros.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL BIENESTAR, 5 DE ABADIO.

MEDIO DÍA. CASA DE KENDRA LORRIMOR.

Konrad se había mantenido en silencio hasta entonces, no le gustaba que un extraño como el Sheriff se metiera en sus asuntos, por mucha autoridad que creyera que tenía y mucho menos que, tras como los habían tratado, viniera a pedirles un favor y ni siquiera les ofrecía nada a cambio, sólo problemas y de esos ya tenían bastantes.

Hizo un gesto de despedida al Sheriff y después centró la atención en su hermano, que todavía parecía bastante perjudicado. La propuesta de Sascha le pareció correcta, así que hizo un gesto a la muchacha para que se marchara a otra habitación.

- Alexei, acompaña a mi ama de llaves, ella evitará que dejes de toser sangre, lo que resulta muy desagradable y terminarás manchando algo en la casa donde tan desinteresadamente nos acogen.

Claro, que qué sabía Alexei de agradecimiento, siempre había sido un egoísta desagradecido, pero era su hermano y aunque sólo fuera por eso debía ocuparse de él.

Me pregunto porqué Sascha quiere estar con él a solas. En cualquier caso, mejor. No me apetece nada ver lo que sea que va a hacerle. ¿Diez minutos? Dan para mucho.

- Creo que la Señorita Kendra tiene razón. Tenemos bastantes cosas que hacer como para meternos donde nadie nos llama.

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05/08/2017, 02:13
CC: Ravengro: Kendra Lorrimor.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL BIENESTAR, 5 DE ABADIO.

MEDIO DÍA. CASA DE KENDRA LORRIMOR.

Kendra sonrió a Konrad cuando este la apoyó, desde luego era todo un caballero y parecía que había meditado bien las consecuencias de lo que podía suceder, claro que parecía que no todos pensaban como él.

-¿No se dan cuenta? Todo el pueblo quiere ajusticiar al semiorco, sería un milagro que encontraran una forma de salvarlo y si lo hacen... No creo que su presencia aquí sea mejor vista. Además... -Dudó un poco y miró a Gruñido.- Tengo miedo por Gruñido, con todo el pueblo así pueden pensar que es un compinche e intentar hacerle algo malo y si el pueblo se les vuelve el contra no podrán seguir investigando las notas de mi padre, nadie querrá ayudarlos. Lo siento mucho por ese pobre desgraciado, sobre todo si es inocente, pero deben mirar las cosas con perspectiva. Mi padre era consciente de los problemas que traían los orcos y siempre me decía lo mismo: "Querida Kendra, los orcos son un pueblo que no ha evolucionado como el resto y por lo tanto están condenados a desaparecer antes o después, la civilización los destruirá, el verdadero enemigo se haya mucho más cerca, entre nosotros, y no debemos distraer nuestros esfuerzos en otra cosa."

Aquel tema del semiorco no le gustaba nada, no veía que podían sacar de todo aquello, aunque no paraba de imaginarse todos los problemas que les podía conllevar. Apreciaba el espíritu benefactor de sus invitados, pero esperaba que no les llevara a su perdición. Si se hubiera tratado de Gruñido entonces los hubiera apoyado con todas las consecuencias, pero al fin y al cabo no sabían siquiera si el semiorco era inocente y el coste de averiguarlo parecía demasiado alto.

-Doctor Querio, todavía nos queda tarta, le envolveré un trozo, es muy amable por su parte. Quizás la Señora Mirta esté volviendo de la casa del pueblo, es casi la hora de comer. Como pasa el tiempo...

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05/08/2017, 03:06
(CC) Gruñido.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL BIENESTAR, 5 DE ABADIO.

MEDIO DÍA. CASA DE KENDRA LORRIMOR.

El semiorco mira a Alexei, ahora renombrado Réquiem con denotada sorpresa.

- ¿No acordar como llamar? La mala vida al final poder con la cordura de este pobre... -

Pero sus siguientes palabras elevan el ritmo del corazón del cochero. Ha mencionado a Velkan. ¡A Velkan! ¿Qué sabe sobre el hermano de Gruñido? La cabeza le da vueltas mientras el Amo dirige unas palabras a la señorita Lorrimor que no alcanza a escuchar del todo debido al zumbido que siente en su cabeza.

No obstante cuando Alexei, Réquiem o como quiera que se haga llamar se acerca a Sascha, la manaza que Gruñido tiene protectoramente sobre su hombro se crispa un tanto. Mientras su mirada amarillenta se cruza con la del debilitado joven.

- Grrrrrrrwll... Gruñido ir con Sascha, ¿Sí? -

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05/08/2017, 12:18
(CC) Sascha Danzante de las Nieves.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL BIENESTAR, 5 DE ABADIO.

MEDIO DÍA. CASA DE KENDRA LORRIMOR.

Un gesto de asentimiento que denota agradecimiento sigue a las palabras de Konrad cuando me da permiso para lo que le pido. Otro más cuando el más joven de los hermanos dice estar de acuerdo, y uno cargado con cierto alivio cuando Gruñido pide quedarse conmigo.

- Claro. Kendra tiene razón. Salir ahora podría ponerte en peligro.

Después miro a la muchacha.

- Necesito agua caliente.

Y la palabra "necesito" tiene ese matiz de quien está pidiendo permiso para hacer algo, en este caso, usar la cocina.

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05/08/2017, 13:23
(SA) Gheorghe Mykas.

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL BIENESTAR, 5 DE ABADIO.

MEDIO DÍA. CASA DE KENDRA LORRIMOR.

Gheorghe sabía cuando una batalla estaba perdida, y aquel era el caso ahora mismo. Sin traductor, la posibilidad de ir a ver al semiorco era totalmente inútil, y aunque ese prisionero podría, potencialmente, saber muchas cosas que les serían útiles, el resto habían decidido dar cierre a aquella línea de investigación.

"Ojalá Gabriel estuviera aquí... Seguramente me habría apoyado."

Estaba levemente decepcionado, desde luego, pero no tenía sentido llorar sobre la leche derramada. Era el momento de tener fe en que aquel movimiento no les saliera caro, y preparar su siguiente jugada.

-¿Al menos iremos al concierto?

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05/08/2017, 13:39
(SA) Réquiem (Alexei Mykephoros).

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL BIENESTAR, 5 DE ABADIO.

MEDIO DÍA. CASA DE KENDRA LORRIMOR.

La atención del dramaturgo se posó en el rostro de Konrad Mykephoros, luego afirmó a sus palabras para seguir a Sascha, su ama de llaves.

- Eso espero, que consiga evitar que tosa sangre. Realmente es algo muy molesto y preocupante

Réquiem decidió no participar en la conversación que hacía referencia al semiorco que iba a ser juzgado de forma injusta.  No conocía la situación, se quedó al margen de nuevo sin dar su opinión al tema.

Al escuchar las palabras de Gruñido el gesto de Réquiem fue de aceptación – Por supuesto, es la opción más lógica  - dijo amablemente, afirmando las palabras de Sascha y Kendra. El poeta caído en desgracia se quedó observando aquellos ojos amarillentos durante unos instantes, a la vez que afirmaba con la cabeza. El viscoso tacto de la sangre en su mano hizo perder el contacto visual con el semiorco.

 – Si me disculpáis, darme un minuto, iré al baño

Alexei fue al baño y accionó el grifo para dejar caer un chorro de agua, se limpió las manos y la cara con celeridad, quería borrar aquel líquido carmesí de su vista. Al alzarse se cruzó con su propia mirada y un chispazo le iluminó su mente.

<< El libro… >>

Antes de volver con el grupo, subió a la habitación para rebuscar entre sus pertenencias, que más bien eran escasas. Una vez encontrado el libro de obras teatrales bajó al salón y se acercó a Sascha y Gruñido - ¿Hay algo que pueda hacer para ayudaros? – Si aquella mujer podía ayudarle, iba hacer lo que hiciera falta para que lo consiguiera.

<< El concierto >>

Las palabras fueron dirigidas a su hermano – No me importaría acompañarte al concierto Gheorghe, siempre y cuando haya terminado con Sascha y Gruñido –. La música, la poesía, en definitiva el arte... era algo con lo que no podía luchar y le llamaba la atención como un oasis en  un enorme y árido desierto. 

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06/08/2017, 10:46
(CC) Doctor Querio Vandel.

Así se habla, Alexei. En comparación con el mundo que has descrito, este es más tranquilo. Te vendrá bien distraerte. Nosotros, por nuestra parte, trataremos de llamarte Réquiem más frecuentemente, por lo menos mientras no recuerdes tu pasado.

Querio se puso frente un espejo y pasó las yemas de los pulgares por sus alborotadas cejas, para peinarlas. No tenía interés amoroso en la concejala, era incluso más anciana que el propio señor Vandel, o eso le parecía, pero por cortesía le correspondía acicalarse un poco. Después volvió junto a Kendra para tomar la bandeja o plato con el trozo de tarta.

Si todo sale bien, espero comer en casa de la concejala, y acompañarla luego al concierto. Eso significa que os volvería a ver en el Diablo Reidor... salvo que las cosas salgan mal, claro, y en ese caso comería aquí con vosotros. ¿Alguien...? ¿Alguien más quiere acompañarme?-tanteó, mientras se dirigía ya hacia la puerta.