Partida Rol por web

Historias de Horror I.

SA: 4- Los Muertos No Sueñan.

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18/10/2017, 23:11
(SA) Réquiem (Alexei Mykephoros).

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

VESTÍBULO DE BRIARSTONE Y ZONAS ADYACENTES.

Réquiem estaba sumido en sus pensamientos, ni siquiera prestó atención al ofrecimiento de Enterrador mientras su mente divagaba en múltiples hipótesis que podrían llevarlos hacia una muerte dolorosa y terrorífica, parecida a la que debieron padecer los cadáveres que se encontraron en aquella habitación. Después de aquel breve tiempo de colapso, el poeta volvió a la realidad viendo como el Anciano Sabio ayudaba a colocar la armadura a Enterrador. Los ojos, del pequeño de la familia Mykephoros, fueron a algo brillante que había en uno de los cadáveres, sin dudarlo se encaminó hacia el fallecido y le retiró el anillo. Alzó el objeto de oro para ver si había algún tipo de inscripción, después se lo guardó en el bolsillo.

<< Si no recupero la memoria y sobrevivo a este infierno… me vendría bien para venderlo o intercambiarlo por algo que necesite de verdad >>

Fueron sus únicos pensamientos, no dijo nada a nadie y volvió a su posición para cubrir la retaguardia. Se fijó en Enterrador y atendió a su ofrecimiento, el poeta lo miró con cierta sorpresa mientras aceptaba la ballesta – Gracias, realmente prefiero el combate a distancia que no el de cuerpo a cuerpo… - era del todo cierto, sabe que si no tiene ninguna alternativa se debería de enfrentar con su espada, pero si puede mantenerse al margen y atacar desde la distancia no  perdería esa oportunidad.

Antes de salir de aquel lugar dijo -  Deberíamos continuar con la exploración, creo que todos en grupo estaremos más seguros que separados – a continuación entró de nuevo en el vestíbulo, viendo como Gheorghe cerraba la puerta tras él.  Allí se fijó como Tormento se iba acercando a unas puertas, el poeta hizo un gesto para llamar a la atención del grupo – No deberíamos dejarlo solo, parece que hay otra habitación. Vayamos – comentó para avanzar junto al grupo, manteniéndose en la retaguardia. Réquiem había guardado su espada para sujetar la ballesta y así tener la opción de atacar a distancia.

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19/10/2017, 14:02
(SA) Nigromante (Dyonisius).

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

VESTÍBULO DE BRIARSTONE Y ZONAS ADYACENTES.


- Pobres... tiene razón Anselmo. Es un trabajo realizado por quien ya antes ha cometido barbaries similares-  comentó el mago al ver a los pobres hombres asesinados- Quizás, si posteriormente limpiamos este lugar, antes de marchar, podamos hacer algo para ocultar sus cuerpos, darles descanso. A pesar que Anciano Sabio ha dado descanso a sus almas me produce cierta... turbación, dejarlos abandonados así. Que Pharasma bendiga sus almas- dijo mirando acto seguido a Anciano Sabio, y asintiendo, agradeciendo múdamente su labor. Por un segundo, una duda apareció en su mente, y pensó en preguntarle al sacerdote pero, finalmente, guardó silencio: ni era el sitio, ni el lugar. Ni estaba seguro de querer preguntar ni saber la respuesta.

Ese pensamiento, más un presentimiento o un sentimiento, pues eran convicciones privadas de los recuerdos que le debían haber dado una forma concreta, redujo al silencio a Nigromante que, por espacio de unos segundos, ocupó su puesto en el orden de marcha, sin intervenir para nada. Y así fue hasta que Alexei se guardó en el bolsillo el anillo de oro.

- Es buena idea guardar las cosas que puedan tener valor por si salimos de aquí. Recordad que puedo tasarlas bastante bien, sobre todo con ayuda de Hombro Izquierdo. ¿No es verdad camarada? - preguntó a su cuervo con una ladeada sonrisa.

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19/10/2017, 23:13
(SA) Tormento de Tinieblas.

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

VESTÍBULO DE BRIARSTONE Y ZONAS ADYACENTES.

Tormento había abandonado la sala y retrocedido a través de los escombros de la pared derrumbada. Habían llegado a una especie de callejón sin salida, tan solo poblado por más cadáveres y que planteaban más preguntas que respuestas. Aun así, no podía decirse que aquello hubiera sido inútil. Una nueva zona quedaba despejada y afortunadamente no habían tenido que enfrentarse a algún enemigo que los hiriera en el mejor de los casos.

Tomó aire, fuera del ambiente viciado de la anterior sala, marcado por el hedor de la putrefacción de los cuerpos en descomposición. Miró al frente, deteniendo su mirada en la hoja de la puerta que se alzaba frente a él. Avanzó con lentitud, los pies descalzos pisando los restos de mampostería y pequeños cascotes caídos consecuencia de los pequeños temblores que afectaban al complejo, levantando pequeñas nubes de polvo que se adherían en parte a los bajos de su inmundo hábito, manchado de sangre e icores varios, mientras otra pequeña porción se elevaba y jugaba con los mortecinos haces de luz que se colaban desde diferentes partes, en un pequeño baile no exento de belleza y que contrastaba duramente con el horror imperante. Pero aquello, era algo en lo que Tormento no se fijaba. 

Sus ojos, ocultos tras su venda, miraba fijamente el entramado de maderos que constituían la nueva frontera a superar. Escuchó tras de sí pasos y vislumbró las sombras arrojadas por la luz que portaba aquel a quien sabía había deproteger de todo mal y daño. Alzó un puño exigiendo moderación y silencio en su avance al tiempo que se detenía frente a la puerta y pegaba la oreja a su superficie. Percibía unos suaves chirridos cuyo origen desconocía. No quiso hablar. Simplemente gesticuló haciendo saber que había escuchado algo. Y su mano se posó sobre la manilla que abriría aquella puerta.

Y abrió.

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21/10/2017, 15:07
(SA) Gheorghe Mykas.

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

VESTÍBULO DE BRIARSTONE Y ZONAS ADYACENTES.

Gheorghe avanzó con el resto, aunque al ver aquella sala, quedó algo confuso. Sabía que Tormento había escuchado algo, y que el lugar estaba hecho polvo, así que de ningún modo se esperaba una sala como aquella, aparentemente vacía. Aunque apenas un par de segundos después, reparó en los cadáveres, y en sus extrañas vestimentas. Quizás eran cultistas de algún tipo, pero era evidente que algo había pasado con ellos allí. Y, por algún momento, le parecía extraño que los celadores del asilo hicieran algo así. 

Su confusión no hizo más que aumentar cuando aquellos pájaros piaron, y soltaron de pronto aquel estridente sonido. De algún modo, habían hecho algo. Algo que iba dirigido a él, lo sabía, aunque su fe le protegió de lo que sea que fuera. 

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25/10/2017, 23:10
(SA) Réquiem (Alexei Mykephoros).

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

VESTÍBULO DE BRIARSTONE Y ZONAS ADYACENTES.

El dramaturgo caído en desgracia escuchó las palabras de Nigromante y allí le respondió con una pequeña sonrisa. – Gratitud por tu ofrecimiento, lo tendré en cuenta, Nigromante. Realmente hay que pensar en un futuro, pero primero… tendremos que salir vivos de aquí, no sabemos qué nos deparará el destino, pero mientras sigamos respirando todavía seguiremos a tiempo de salir de este espantoso lugar – dijo el hombre en voz baja para no hacer ruido.

Réquiem fue avanzando en la retaguardia del grupo, caminaba hacia una de las habitaciones que había en la zona sur siguiendo la marcha de sus compañeros. El poeta se fijó en el gesto de Tormento, parecía ser que había escuchado algo y Alexei extremó su atención a su alrededor, sentía los nervios florecer en su piel, poniéndola de gallina.

Abrieron la puerta y fueron entrando poco a poco, los ojos del pequeño Mykephoros fueron mirando el interior de aquella gran sala. Gracias a la iluminación que ofrecían sus compañeros pudo ver aquellos dos cuerpos inertes, uno en el suelo y otro empalado en la cornamenta de la cabeza de un animal. Réquiem se quedó en la retaguardia con el filo de su espalda en alto, sentía a su espalda el peso de los virotes y la ballesta. Los ojos se movían enérgicamente por las paredes, fijándose en los cuadros hasta pararse en lo que parecía ser una jaula. El gritó de Tormento de Tinieblas puso a Alexei en alerta, seguidamente el cántico de unos pájaros resonó en la gran sala. Aquel ruido se volvió tétrico y metálico, aquello no presagiaba nada bueno. Réquiem utilizó un conjuro para detectar magia y sintió el poder por toda aquella habitación, el poeta se había movido para tener una visión  amplia del lugar sin que nadie le molestara, todos sus compañeros fueron hacia la jaula para terminar con aquella "maldición".

Un pequeño instinto se activo en su ser, como el eco de un recuerdo su habilidad interpretativa surgió por sus labios. Con el arma alzada y en la retaguardia del grupo empezó a recitar los versos de un drama ustalávico. El poeta se sentía cómodo al recitar aquellas frases, entonando a conveniencia y poniendo énfasis en las palabras recitadas.

Cuando sus compañeros lograron erradicar aquel estruendoso sonido, el canto del poeta desapareció, no sabía muy bien porqué lo había hecho, pero brotó de su interior como si de un acto reflejo se tratara. Réquiem observó a cada una de las personas que formaban aquel grupo, no sabía qué decir y allí bajó su arma volviendo a una postura normal, su cuerpo había seguido la interpretación de los versos como si hubiera estado en un recital rodeado de espectadores.

- Deberíamos seguir explorando… mirar los cuerpos sin vida para ver si guardan algo de información… - comentó en voz baja, como si quisiera volver a la normalidad y hacer como que allí no había sucedido nada. En su mente vagos recuerdos luchaban por florecer, pero seguían retenidos en unos cajones olvidados en el fondo más oscuro y negro de su memoria.

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26/10/2017, 00:16
(SA) Gheorghe Mykas.

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

VESTÍBULO DE BRIARSTONE Y ZONAS ADYACENTES.

Gheorghe siguió al resto, alerta ante las indicaciones de Tormento, pero nada podría haberle preparado para lo que encontró dentro, pues realmente no había esperado nada así. No por los cadáveres, ni siquiera por su extraño atuendo, si no por los responsables de sus muertes. Por eso el paladín al principio dudó, sin saber qué debía hacer, si es que debía hacer algo. Eso, claro esta, hasta que los pájaros se activaron. 

Notó como las energías mágicas confluían sobre él, pero su voluntad era demasiado fuerte, y el manto de Iomedae demasiado impenetrable para aquellas cosas. Y no sería porque no lo intentaran, pues varias veces intentaron hacer con él lo que sea que hicieran con aquellos cadáveres, probablemente... Y varias veces fallaron. Mientras tanto, empezó a golpear la jaula y a sus ocupantes, junto con el resto de sus compañeros, acabando finalmente con aquel canto que se volvía estridente cada vez que le atacaban. Por asegurarse, el hombre destrozó un poco más los restos, antes de mirar al resto.

-¡Por Iomedae! Jamás había visto tal cosa, ni la habría esperado, la verdad. Sea lo que sea que hicieran, debo dar gracias a los dioses por su protección, no me gustaría haber acabado como esos desgraciados-dijo, refiriéndose claramente a los cadáveres de la sala. 

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26/10/2017, 00:36
(SA) Enterrador (Anselmo Paddock).

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

VESTÍBULO DE BRIARSTONE Y ZONAS ADYACENTES.

Cuando penetraron en aquella sala siguiendo a Tormento, la luz de Anciano y su propio farol iluminaron la que fue una imagen grotesca con dos cadáveres y en especial uno de ellos empalado en una cornamenta decorativa a notable altura. Aquello impactó levemente al enterrador.

Algo tremendamente fuerte y grande ha tenido que levantar a ese desgraciado para ensartarlo ahí, pensó en un primer momento.

Poco a poco observó la decorada sala, en buenas condiciones si se la comparaba con otras investigadas, dando a entender que era un gabinete de recibimiento. Una voz de alarma, la de Tormento, y un sonido mecánico estridente, tratando de trazar una chirriante melodía, le pusieron en alerta y tensión.

- ¿Qué demonios...? - se preguntó Enterrador mientras miraba a su alrededor, tratando de discernir de donde venía la aberrante canción. Pudo ver como el púgil corría hacia adelante tras echar mano de una de las mantas, aferrándola a modo de red. Y también pudo observar cómo el caballero parecía estar rígido y con el rostro en tensión esforzada, como si estuviera en una letrina tremendamente estreñido. Y por un instante le pareció como si fuera a flotar.

¿Pero qué...?

No entendía nada, pero parecía que algunos la habían tomado contra una jaula con unos pajaritos de colores disecados.

Por algo será, se dijo mientras se acercó allá, maza en alto. Y el caso es que el sonido parecía provenir de ese sitio y cuanto más se acercó más creció una sensación perturbadora y más claro tuvo que había que machacar a esos pajarracos.

Por el rabillo del ojo percibió cómo Tormento hacía cabriolas extrañas con la manta y finalmente caía de morros al suelo. Debía ser el influjo de la canción infernal.

El cuchillo de Nigromante cortó por la mitad a un pajarillo y la maza del vigilante aplastó al otro, dejándolo con un grosor similar a un doblón de plata. Se hizo el silencio y retornó cierta calma.

- Canción infernal que elevaba a la gente y la dejaba caer... donde más daño pudiera hacer - comprendió por fin mirando a los restos de las aves que Georghe se afanaba en despedazar con su arma.

Ni grande ni fuerte. Pequeños y frágiles, pero letales.

- Estoy contigo, Requiem. Veamos qué información sacamos de estos dos. Ya sea por sus pertenencias o por sus cuerpos - asintió el hombre que se arrodilló para examinar al cuerpo caído y más a mano. Luego acercaría una mesa al empalado y se subiría para examinarlo igualmente.

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26/10/2017, 21:49
(SA) Tormento de Tinieblas.

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

VESTÍBULO DE BRIARSTONE Y ZONAS ADYACENTES.

Cuando la mano se cerró sobre la manilla de la puerta, aspiró profundamente. El hedor que sus ropajes desprendían asaltó sus fosas nasales sin piedad aunque no le importó. Lo convertía, de algún modo, en un elemento más de la podredumbre imperante y lo hacía invisible, o eso quería creer, a los sentidos olfativos de los potenciales enemigos que los acechaban.

La puerta se abrió, chirriando levemente sobre sus goznes y ante sus ojos se abrió una habitación en otro tiempo espléndida y en aquel momento, literalmente anacrónica. Sin duda, hermosa y hecha para granjearse la confianza de los visitantes. Pero había oído algo, algo que lo había puesto en tensión y no eran los cadáveres que, una vez más, ornaban su marcha. Apenas dirigió un vistazo al cuerpo ensartado en las astas del gran cráneo que colgaba de la pared, aunque creyó percibir un movimiento en él.

Por contra su mirada se centró en la gran jaula, aquella lujosa cárcel que en su interior guardaba los cuerpos disecados de un buen número de aves, algo a todas luces enfermizo y cuyo sentido se le escapaba. Pronto las aves empezaron a gorjear y consciente de que aquello nada bueno habría de traerles, tomó una de sus mantas y trató de cubrir la jaula con ella. Un esfuerzo inane en el cual insistió con funestos resultados. Tropezó y cayó, golpeándose en el proceso y quedando aturdido.

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27/10/2017, 15:25
(SA) Tormento de Tinieblas.

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

VESTÍBULO DE BRIARSTONE Y ZONAS ADYACENTES.

Finalmente y gracias a la asistencia de Anciano Sabio, Tormento se recuperó de su aturdimiento. Torpemente se puso en pie y sonrió con una mueca.

-Debería ser yo quien cuidara de ti, Anciano Sabio y aquí nos ves, cumpliendo uno las tareas del otro. Gracias -apuntó roncamente-. Me encuentro bien.

Elevó su mano a la cabeza, y pudo percibir bajo el cuero cabelludo el chichón que asomaba prominente. Lo palpó con suavidad, sintiendo su calor y el torpe latido del dolor abriéndose paso. Su índice presionó de forma progresiva el bulto, hasta un punto que casi hubiera podido ser descrito como sañudo. El dolor crepitó, electrizante, y los ojos de Tormento se cerraron bajo las vendas y la boca se curvó en un gesto de sádico placer. El dolor era su amigo, le hacía sentirse vivo, le hacía ser consciente de sí mismo eliminando las brumas que tendían a agruparse en su mente. Suspiró con un jadeo cuando retiró el dedo.

Miró alrededor y se concentró en el cuerpo que reposaba en el suelo. Se acuclilló junto a él y lo cacheó con rapidez y pericia. Dos redomas, un medallón y una daga de filo argénteo recorrieron la distancia hasta su bolsa. Ya habría tiempo para conocer su verdadero valor y uso. Era momento de seguir revisando la habitación. No podían dejar tras de sí nada que fuera de valor o supusiera una amenaza.

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27/10/2017, 20:03
(SA) Anciano Sabio (Sebastián Moro).

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

VESTÍBULO DE BRIARSTONE Y ZONAS ADYACENTES.

Anciano Sabio entró en la sala, alumbrando el lugar con su Símbolo Sagrado, a la par que Enterrador lo hacía con su farol. Al viejo le llamaron enseguida la atención los dos cuerpos de los hombres muertos y decidió acercarse a ellos. Quien hubiese lanzado a aquel hombre sobre la cornamenta, debía ser realmente fuerte o un mago muy poderoso.

Pero el grito de alerta por parte de Tormento, al igual que el suave y dulce gorgojeo de lo que parecían pájaros disecados, retrocediendo lo suficiente como para regresar junto al grupo y poder usar el Escudo de Fe junto a su guardaespaldas, quien avanzaba hacia la jaula con una manta en sus manos, dispuesto a tapar la jaula con ella.

Una voz detrás del viejo le pidió que se apartase. Anciano Sabio hizo caso a las palabras de Nigromante alejándose todo lo que pudo de la jaula y de la trayectoria del hombre. Permaneció unos pasos alejado, daga en mano, mientras su pulso temblaba por la adrenalina y los nervios del momento.

Sin saber como ocurrió, contempló con horror en sus ojos como Tormento fue lanzado hacia atrás y como terminó en el suelo, inconsciente, tras golpearse la cabeza. El viejo corrió sin dudarlo a su lado. Sus rodillas chasquearon levemente al inclinarse junto a Tormento para examinarle y atenderle, mientras que susurraba unas oraciones a Pharasma. El combate pareció llegar a su fin, antes de que Tormento recuperase el conocimiento y el viejo no pudo evitar sonreir cuando intuyó que el hombre había abierto los ojos tras aquellos vendajes que le cubrían el rostro.

Las rodillas del anciano volvieron a sonar al incorporarse, pero miraba sonriente a su protector. - Hoy por tí mañana por mí, hijo mío. - Le respondió a Tormento a sus palabras.

El viejo se quedó clavado en medio de la sala, alumbrando allí donde sus compañeros necesitasen luz, mientras sus viejos ojos examinaban desde allí el entorno.

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28/10/2017, 13:29
(SA) Gheorghe Mykas.

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

VESTÍBULO DE BRIARSTONE Y ZONAS ADYACENTES.

Gheorghe observó pacientemente como sus compañeros registraban los cadáveres o la sala. No se unió a ellos, pues en determinadas situaciones, unas manos extra entorpecen más que ayudan, además de que alguien debía permanecer atento a posibles amenazas. Además, aquel registro tampoco duraría mucho, la sala no era tan grande, ni había tantos cuerpos a los que echar un vistazo. Vio como cogían las dagas y los amuletos, sin variar su expresión. Puede que fueran mágicos, y la plata a veces tenía propiedades útiles en combate.

No era como ese anillo de oro que había cogido Alexei, cosa que le había decepcionado un poco. Pero todo eso daba igual en aquellas circunstancias, debían seguir con la exploración e intentar salvar a los supervivientes de aquella maldita institución.

-En cuanto os sintáis preparados, continuaremos. 

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28/10/2017, 22:45
(SA) Nigromante (Dyonisius).

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

VESTÍBULO DE BRIARSTONE Y ZONAS ADYACENTES.


Todo había sido muy rápido. Al ver aquellos seres, y la evidente aura, Nigromante había gritado su aviso al resto de sus compañeros, y hecho esto, había tratado de eliminar a los seres y el encantamiento que provocaban y que, evidentemente, había terminado con la vida de los pobres diablos cuyos cadáveres seguían allí.

Como fuere, cayó Tormento, quizás por efecto de los conjuros que, por el bien de los dioses, habían fallado frente a Gheorghe. Tras pedir a Anciano Sabio que se apartara logró eliminar a uno de los pájaros y, poco después, Gheorghe y Anselmo destruyeron a los otros pájaros disecados poniendo fin al encantamiento. 

Horrible, sin duda.- reconoció ante las palabras que había dicho Anselmo sobre el encantamiento. - Aunque ingenioso. No se como han podido crear este conjuro, esta magia... quizás después de todo esto sea otro plano. Es... perturbador. Aunque mis recuerdos han huido de mí, tengo la sensación que tales cosas son poco frecuentes. Y menos si se trata como parece del traslado de una porción importante de terreno y una gran cantidad de personas. Extraño- se queda pensativo hasta que Anselmo termina de registrar uno de los cadáveres.

Gracias, Anselmo- respondió Nigromante cuando éste le entregó una de las pociones de curación y el medallón- Intentaré ver para qué sirve ésto...

Tras las palabras el mago lanza sobre el medallón un conjuro de detectar magia, y empieza a estudiarlo con su capacidad de conocimiento de conjuros. Lo cierto es que lleva casi cinco minutos, y al final, muestra el medallón. - Creo que tiene una pequeña aura de abjuración y debe dar una pequeña protección de desvío a quien lo lleve- mira entonces a Tormento- Puede ser que sea el mismo tipo de magia y medallón que ese, Tormento. Cuando quieras lo reviso.-  dicho esto mira a Anselmo nuevamente, y le muestra el medallón. - Me vendría bien quedármelo, pero si algún otro lo precisa, lo entenderé. 

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29/10/2017, 21:21
(SA) Réquiem (Alexei Mykephoros).

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

VESTÍBULO DE BRIARSTONE Y ZONAS ADYACENTES.

Sus ojos observaban la oscuridad que había en el vestíbulo del asilo de Briarstone. Réquiem decidió mantener su espada en la mano, dejando la ballesta en su espalda con sus respectivos virotes. Miró hacia atrás fijándose en sus compañeros que se iban preparando para reanudar la marcha, se intercambiaban los objetos que habían encontrado en los cadáveres de los dos desgraciados que habían muerto, lo más seguro, por aquella fuerza mágica. Volvió a centrarse en el vestíbulo cubriendo así la entrada de aquella sala. Las dudas volvieron a su mente, los temores a no volver a conocer su pasado o si lo llegara a conocer que repercusiones tendría en su vida.

Se apoyó en el marco de la puerta y se pasó la mano libre por su rostro, dándose una palmada en la cara para despejarse y centrarse en su cometido. Cuando el pequeño de la familia Mykephoros vio que el grupo se empezaba a juntar, les informó de los accesos que había descubierto – Hacia el norte del vestíbulo vi unas puertas, antes de llegar a la sala que entramos antes. Por otro lado, en el sur hay otra puerta que tal vez sea la que lleve al exterior. ¿Vosotros os fijasteis en alguna otra? Yo seguiré en la retaguardia del grupo - El dramaturgo esperó las respuestas de los presentes y así iniciar de nuevo la marcha, esperaba y deseaba que su hermano Gheorghe fuera el que avanzara primero, por algún motivo confiaba más en él, aparte del buen equipo que tiene es algo que Réquiem no podría llegar a explicar por el momento.

- Os sigo

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29/10/2017, 22:14
(SA) Enterrador (Anselmo Paddock).

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

VESTÍBULO DE BRIARSTONE Y ZONAS ADYACENTES.

- Quédatelo - dijo asintiendo con la cabeza a Nigromante, en referencia al medallón. Miró una última vez al entorno y fijó su atención en las ventanas, observando la oscuridad en el exterior, las nubes verdosas que arrojaban una clara sospecha de toxicidad y las sombras que se movían ocultas por las penumbras.

Lo lúgubre del ambiente le traía a la mente sensaciones familiares, recuerdos que no terminaban de plasmarse en su memoria, pero que le evocaban imágenes parecidas que había vivido en el pasado. Inconscientemente su mano izquierda se alzó y con ella su farol, arrojando algo de luz al exterior a través de la ventana, abriendo brecha en la negrura tal y como había hecho tantas veces en el pasado. En numerosas noches de ronda en escalofriantes cementerios.

Ciertas formas grotescas, cercanas y espías, parecieron huir ante la luz recién plantada, haciendo que un gesto torvo se dibujara en el rostro de Enterrador.

- Tsk. No creo que sea juicioso salir ahí fuera por ahora - comentó en voz baja, a sí mismo, a pesar de que todos lo oyeron. Se tornó a los suyos y vio cómo parecían haber formado para continuar inspeccionando. Escuchó los comentarios de Requiem sobre posibles vías que tomar y asintió con la cabeza.

- Vayamos por las del norte - opinó mientras adoptaba su posición habitual en el orden de marcha, dejando evidente que no deseaba probar por las puertas que daban al exterior.

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30/10/2017, 17:42
(SA) Gheorghe Mykas.

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

VESTÍBULO DE BRIARSTONE Y ZONAS ADYACENTES.

-Norte pues-dijo simplemente Gheorghe, asintiendo levemente, antes de ponerse en marcha. Sabía que su lugar se encontraba en primera fila, y así sería incluso aunque llevara un pijama de interno como los de sus compañeros. Con la protección de Iomedae, pocas cosas debía temer, solo que su fe no flaqueara. Cuando llegó ante las puertas del norte, se detuvo, y quedó totalmente quieto. 

Aunque no es que le hubiera pasado nada, simplemente buscaba minimizar el ruido que hacía, debido a su armadura, para poder escuchar mejor lo que pudiera haber al otro lado de la puerta. Si es que había algo, claro. 

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30/10/2017, 20:53
(SA) Anciano Sabio (Sebastián Moro).

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

VESTÍBULO DE BRIARSTONE Y ZONAS ADYACENTES.

El viejo miró aquello que le ofrecía Enterrador y recogió el vial, dedicándole una sonrisa a su compañero. - Mil gracias, hijo mío. - Le dijo mientras se guardaba la poción por si la necesitaba más adelante, algo que seguro que iba a ocurrir. - Que las bendiciones de Pharasma estén contigo. - Elevó su mano al tiempo y realizó el símbolo de su diosa en el aire.

Uno a uno, sus compañeros guardaron los tesoros encontrados en la sala y fueron saliendo del lugar, quedando el viejo solo en la habitación. Miró hacia atrás, hacia la jaula donde aquellas muertas y crueles aves habían logrado matar a dos hombres son su don y lograron dejar inconsciente a Tormento. Un escalofrío recorrió su huesudo cuerpo pensando en que hubiesen logrado hacer de ser más inocentes y dulces pajarillos disecados los que hubiesen estado en esa jaula.

Anciano Sabio se dio la vuelta, viéndose solo allí y se reunió con el resto del grupo, quienes comenzaban a moverse hacia la puerta norte. El viejo alumbró la zona en general, incluso sus espaldas por si algo venía por detrás, viendo que Réquiem también estaba atento a ella.

Guardó silencio cuando sus compañeros comenzaron a pegar la cabeza en la puerta o a mirar por la cerradura. Había vivido muchos años precisamente por no hacer imprudencias como aquellas en lugares hostiles. No sería la primera vez que veía como una cabeza era ensartada en una puerta precisamente por ponerla donde no debía. Cerró los ojos y recitó mentalmente una plegaria a Pharasma para que les protegiese por su negligencia.

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30/10/2017, 22:26
SA: Los Eones son Extraños.

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

BIBLIOTECA.

Estanterías hundidas, que se mantienen unidas por el polvo y un extenso sistema de escaleras rodantes recorren esta biblioteca de recios tomos de aspecto aburrido. En el centro de la estancia anida una mesa muy desgastada rodeada por sillas incómodas. Un candelabro de parras de hierro cuelga del techo.

Los olores a cuero y papel permean este espacio de altos techos, así como lo hace un distintivo almizcle bestial.

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01/11/2017, 11:10
(SA) Nigromante (Dyonisius).

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

VESTÍBULO DE BRIARSTONE Y ZONAS ADYACENTES.


- Gracias- dijo con sinceridad el mago a Anselmo y procedió a ajustarse el medallón de protección. Desgraciadamente el mago estaba aún perplejo con lo ocurrido y, sin avisar a sus compañeros, examinó unos segundos más el lugar, buscando más datos con los que comprender mejor lo que estaba ocurriendo. Eso le llevó, quizás, más tiempo del que esperaba y cuando levantó la cabeza, comprobó que estaba solo. Murmuró entre dientes y, con cierta preocupación, marchó en la dirección por la que se habían ido sus compañeros. 

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01/11/2017, 11:50
SA: Ulver Zandalus.

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

BIBLIOTECA.

- El grupo penetra en la biblioteca polvorienta para seguir investigándola, sumidos en la sospecha.

- En un momento dado, el Paladín Gheorghe se siente agotado y se sienta en un rincón. Cierra los ojos por un momento, durmiendo plácidamente. Cuando abre los ojos, ya no es Gheorghe, sino Buscador de la Verdad.

Notas de juego

// Sale de escena: Gheorghe. - Sigue en: Ravengro.

// Entra en escena: Buscador de la Verdad. - Procede de: Ravengro.

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01/11/2017, 12:00
(SA) Nigromante (Dyonisius).

LOS MUERTOS NO SUEÑAN:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

SEGUNDO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 5 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

BIBLIOTECA.


De alguna manera, el placer de ver aquella biblioteca llena de posibilidades de conocimientos, palideció ante la presencia del Buscador de la Verdad. Nigromante se acercó hasta Buscador de la Verdad, tomando a este del brazo.

- Buscador, ¿eres tú? ¿cómo te encuentras? ¿estás herido?- no se da cuenta que puede estar siendo un poco obstinado y sigue preguntándole- ¿Tienes más datos sobre ese otro lugar? ¿sobre tu identidad o la de cualesquiera otros de los presentes? ¿hay alguna prueba sobre la relación que ellos tienen con nosotros? ¿los que estaban allí y han pasado por aquí recuerdan todo lo que les ha pasado en este lugar? 

Había una profunda necesidad que se vislumbraba en las preguntas del mago, una que precisaba ser saciada: saber lo que eran, lo que hacían allí, encontrar nuevos datos con los que comprender lo que estaba pasando y, quizás, con la que poder descubrir una forma de salir de la terrible situación en la que estaban.

La biblioteca le importaba y le interesaba. Realmente deseaba poder leer cada uno de esos libros. Pero era algo que tenía que esperar.