Partida Rol por web

-Capacidad inservible donde las haya. ¿O en qué te ayudará en tu batalla que haya dos enamorados? Juegas con nosotros, creía que mantendrías un orden, pero estás jugando con nosotros mucho más que tus dos "contrincantes. No distas de ellos en absoluto mas que por la máscara que llevas.

Contrólate, Ferriel. El amor es una de mis armas, son los sentimientos del bien. Astucia es cuanto necesitas para derrotarles. Ellos son tramposos, yo no... Fué la elección de tu alma.

-Efectívamente, una respuesta que bien podría haber sido muda, habrías dado la misma información.

-Y de nuevo solo recibo silencio por respuesta. Quizás no lo sepas, pero el silencio es como el viento: atiza los grandes malentendidos y no extingue más que los pequeños.

Mantener el orden en la batalla me trae atareado. Y no ví una pregunta real, sabes la respuesta antes de que la formule.

-Supongo que por mantener el orden te refieres a otorgar información y poder a algunos mientras que a otros nos tienes desinformados escudándote en tus propias mentiras, ¿no?

No son mentiras, Ferriel. Actúa como consideres, yo sólo te he brindado una oportunidad. Recuerda que sólo soy una parte de tu alma, la parte más firme.

Enhorabuena, Ferriel, has dado un paso más hacia tu redención... Encontraste un secreto de tu Alma.

Entre el Cielo y el Infierno: Si mueres antes de que concluya el tercer amanecer, volverás automáticamente a la vida, perdiendo tus Capacidades por dos amaneceres completos y uniéndote a los siervos de Rakedus. No obstante, si consigues llegar hasta el tercer amanecer sin morir, un aura de bien te protegerá y recibirás un voto menos en cualquier votación en tu contra.

Siénte cómo poco a poco el bien gana hueco en tí... Lejos queda quien fuiste, Demódinus, ahora eres una criatura del bien. Les has brindado a ellas dos la oportunidad del amor, tu deuda está saldada. Ahora te encuentras entre el Cielo y el Infierno... Y tus caminos te llevan hacia la ascensión. Caer significará la muerte de Ferriel... Una vida que no podrás recuperar. Disfruta de tus nuevas alas. De tu nueva luz.

-¿Qué acaba de ocurrirme exáctamente? - digo confundido.

Te lo explicaré de un modo sencillo, y con ésto pretendo que terminen las rencillas entre tú y yo: Cuando matásteis a Phi Khelek, él te infectó... Cuando tú murieses, él volvería a la vida... Con la nueva oportunidad, te encontrabas entre dos mundos, tú deberías de haber sido un Ángel tras la última batalla, pero... Quedaste atrapado en un cuerpo mortal... Tres días has tardado en purgar la maldad que Phi Khelek introdujo en tí. Ahora... ahora estás un paso más cerca de tu verdadero yo.

Escucho con atención, la agresividad que antes tenía hacia Cell se ha desvanecido, al menos en  parte.

-¿Y cómo puedo estar seguro de que este es mi verdadero yo? Siempre he sido Demonidus, no Ferriel, quizás mi verdadero yo sea Demonidus y Ferriel no sea más que la obra de alguien al intentar cambiar mi esencia.

Fuiste Ferriel antes de tu Caída. Sabrás más... Cuando terminemos la Amalgama, pero creeme, sólo has liberado una parte de tu propia esencia.

- Dices que entonces antes fui Ferriel despues Demonidus y de nuevo Ferriel, ¿no?

Asiente.

- ¿Y como puedes estar tan seguro? No recuerdo una existencia anterior a Demonidus, es todo cuanto he sido pese a que ya no sea él.

Como te dije, lo sabrás en que todo termine.

-Con la condición de estar vivo, supongo. Hecho que no tiene pinta de que vaya a ocurrir en vista del anonimato que vivo ahora mismo.

¿Deseas morir por Essycia?

-No - Digo con rotundidad.

Lo supuse.

Asiente.