Aquí comienza tu historia...
 

Rienott

Tanto tiempo practicando a escondidas, desde que tienes uso de razón... Tantos secretos profundos e inconfesables por descubrir.

Encontraste un viejo libro de tu tatarabuela que estaba encerrado en lo más profundo del sótano...

Nadie quiere entrar a ese sótano: siempre está húmedo y oscuro, sombras que se mueven... Pero tu curiosidad es superior y te mueves, te deslizas, hacia el interior en busca de saciar, casi puedes sentir cómo algo te llama, clama tu nombre en un susurro desgarrador. Avanzas con seguridad... Lo siguiente no está claro, algo te atrapa la pierna, sientes que te ahogas... Pero tu curiosidad no cesa, algo te apresa la cara... ¿te deja respirar? Qué es eso...

Lo siguiente es estar despierta en tu cama, con un libro entre las manos, completamente empapada... Luego vienen horas y horas  de tiempo pasando, tu familia desapareció en algún momento en el transcurso de tus estudios, pero no lo recuerdas... De hecho, es como si tu propia mente se negase a recordar algunos de los fragmentos de lo que viviste.
Adoras el mar, te sientes libre en él, los cefalópodos te protegen como si fueses su señora, pero hay algo más allá, más... Profundo.

Alguien que le ha dado sentido a tu vida, que te colma de conocimientos... Pero ese alguien está dormido, es como un enorme Dragón, un Dios Olvidado que necesita fuerza para despertar.  Si consigues descifrarlo y las estrellas se alinean...
El Caos Planar comienza. Llegas justo a tiempo, la Amalgama está lista, si la tomases... ¿Podrías despertarlo? ¿Podrías ocupar su lugar? ¿O quizá recuperar una vida normal? Como sea, tienes un regalo de Él: un vial con Agua Negra. No sabes qué es, pero sabes que te será útil en tu propósito.

Arenas del desierto: Puedes arrebatar el don de quien sea, que lo recuperará transcurridos dos amaneceres.

Pacto de Locura: Cuando estés muerta, en cualquier momento puedes decidir volver a la vida una vez por partida pero sin la capacidad de votar durante los días impares, pasando a ser un voto aleatorio. No obstante, si vuelves a morir no podrás volver a la vida hasta pasados, al menos, dos amaneceres y dos anocheceres enteros, aunque volvieses a la vida, volverías a dejar de poder votar en los impares para dejar el voto aleatorio.

Chamán: Puedes alzar a los espíritus de los caídos para que luchen de tu lado, serán una esencia neutral que se alimentará de tí y que te ayudarán a sobrevivir. Tienen algunas Capacidades bastante variables, pero sus Dones se CONGELARÁN mientras estén contigo para alimentarse de las almas más naturales. Puedes revivir a alguien una vez hayan caído 3, 7, 12, 18, 25 y 33 personajes respectivamente. No tienes ningún control sobre ellos. No puedenvotar. Si reciben tres votos, mueren automáticamente. En cualquier momento puedes mandar a descansar a tus espíritus, aunque no puedes alzar dos veces el mismo alma. En cualquier momento que un espíritu caiga o lo mandes a descansar, el contador de muertes necesarias de los demás descenderá en 2. Cada vez que alces un espíritu lanza 1d20 OCULTO para ver sus capacidades. Si tú mueres, todos los espíritus mueren. Si todos los espíritus mueren, perderás tus capacidades y tu voto hasta que alces a otro espíritu.

1-4: Sacrificado: Sufrirá en tu lugar cualquier ataque o capacidad, sea benigno o maligno, por el lado bueno, aún muerto, si ganas, ganará él.
5-8: Chillón: Puede votar como si fuese un personaje más.
9-12: Piadoso: Puede proteger a alguien de un único ataque individual, su habilidad se designa al comenzar el día y durará hasta el próximo día, puede usarse todos los días.
13-16: Vengativo: Cada vez que mueras tú o un espíritu, selecciona a un personaje, éste recibirá tantos votos adicionales como espíritus en el momento antes de la muerte durante la próxima votación. Puede usar esta habilidad incluso aunque muera.
17-20:Aprendiz: Al volver a la vida, seleccionará un personaje. Adquirirá una versión menor de su Don y la capacidad de comunicarse con él en su apartado personal.

Ingenio de Zyba: Cada amanecer par, crearás una poción, a elegir entre vida o muerte, la primera de ellas es tan sólo durante la noche, y te permite traer a cualquiera a la vida... O salvar la vida de cualquier caído que fuese a morir durante el proceso. La segunda sólo puede usarse durante el día y sesgará la vida de cualquiera en cualquier momento, incluso aunque terminen con tu vida seguirás usándola en el mismo instante, si pudieses. La poción estará creada al caer el anochecer. Además, podrás entregar estas pociones a quien quieras siempre que tengas una escena compartida con él. Podrás crear una única poción aunque estés muerta, no obstante, no podrás usarla hasta que regreses a la vida, o informes a alguien de que puede cogerla.

Agua Negra: Puedes devolver la vida a alguien que acabe de morir (24 horas) ó devolver a la muerte a alguien que acabe de volver a vivir (24h).

Bruja: Posees dos pociones que puedes utilizar, la primera de ellas es tan sólo durante la noche, y te permite traer a cualquiera a la vida... O salvar la vida de cualquier caído que fuese a morir durante el proceso. La segunda sólo puede usarse durante el día y sesgará la vida de cualquiera en cualquier momento, incluso aunque terminen con tu vida seguirás usándola en el mismo instante, si pudieses.

Recibido ^^.

Espero que te guste el personaje y la historia, pensé que serías capaz de sacarle jugo. :)

La historia y la habilidad están genial :3. (Lo que no me gustaba era el avatar xDDDDD). Espero estar a la altura ^^.

Lo siento, pero no te preocupes, todo, en esta vida, puede cambiar...

Y gracias por que te guste.

Una luz invade tu ser.

Te sientes impresionada, rodeada. Varias siluetas se dibujan enfrente tuya, las identificas rápidamente como Cell, Rakedus y Zyba.

Una mano amistosa te hace girarte y entonces ves a Eir. Ella te sonríe y su sonrisa te calma.

Esto es el Juicio, tranquila. Estaré aquí para guiarte. Ellos pueden ofrecerte su apoyo si lo deseas, pero la elección final dependerá en exclusiva de tí. No dudes en preguntarme a mí o a ellos si tienes alguna duda, pero recuerda que aquí se pondrá en juego tu Alma, el Don único que te identifica con el resto de la existencia.

Dicho esto, Eir retrocede un paso.

La Locura y la Destrucción huelen a partes iguales en tí.

Sonríe. Asiente.

Sé mi mente entre los demás. Te otorgaré algunos de mis dones. Mis pensamientos más perversos pueden anidar en tí...

Un gesto macabro.

¿Tu Mente? En serio, Rakedus... Mal, muy mal. Si lo que deseas ofrecerle es el cambio, el punto de origen, el conocimiento de nexo entre lo que ha sido y lo que será, sólo podrá alcanzarlo conmigo. Y lo sabes. Pero, oh, ella es inteligente. Tomará la decisión necesaria...

El humo le rodea formando extrañas runas que sólo el parece saber leer.

Te ofrezco la redención, la sabiduría de lo correcto y del Orden. Incluso las más viles criaturas tienen una oportunidad de alcanzar un estado más elevado, y eso es lo único que puedo ofrecerte.

Me siento confusa rodeada de repente de estos seres que parecen esperar algo de mí.

Me fijo en primer lugar en Cell frunciendo el ceño. - ¿Me estás llamando criatura vil acaso? Si lo único que puedes ofrecerme es tu estúpida redención... Te puedes quedar con ella.

Me doy la vuelta con aire digno hacia Zyba y Rakedus entonces. - Su mente... ¿Es acaso Él? ¿El que busco? ¿Estoy acaso ahora en lo más profundo? 

Me dirijo a Rakedus - ¿Qué es lo que me ofreces, mago? ¿Cuáles son esos dones de los que hablas? ¿Por qué debería elegirte a ti?

Locura y sabiduría. Supervivencia y supremacía. La fina línea entre lo correcto y lo incorrecto. Fragmentos que vuelan de un lado a otro. Eso es lo que te ofrezco, al ofrecerte una parte de mi mente.

Mientras Cell escupe en el suelo, es Zyba quien se aparta a un lado para dejarte más intimidad al hablar con Rakedus.

Sabiduría... Eso es lo que necesito. El Conocimiento... ¿Será la locura un intercambio razonable por poseer un trocito de la mente del mago?

- Habla, mago. ¿Qué me pedirías a cambio de tu sabiduría? ¿De tu... mente?  - Fragmentos que vuelan... Fragmentos que flotan... ¿Será esta la forma de ascender para llegar al fondo?

Luego me giro hacia Zyba. - No te apartes, pues también deseo escuchar tu oferta. ¿Por qué habría de interesarme ese punto de inflexión del que hablas? 

Tu cordura es el precio de la Locura. Mi Sabiduría se paga con Sabiduría. No me traiciones, y no serás traicionada.

Tras sus palabras se desvanece para aparecer unos metros atrás.

¿Por qué no?

Sonríe mordaz, pero manteniendo cortés la distancia entre ambos.

Un punto de inflexión es un cambio. La locura ofrecida es seguir el camino que ya has comenzado.

Asiente con la cabeza. Te observa.

Lealtad... La lealtad de la locura... La locura de la lealtad. ¿Es eso lo que hay en la Profundidad añil? 

Sigo dirigiéndome a Zyba mientras observo alternativamente su rostro y el de Rakedus. - ¿Qué tiene de malo el camino ya comenzado? ¿Qué hay en el cambio que me ofreces?

¿Dónde está Él? Esa es la pregunta. El camino más corto podría necesitar un desvío... El camino desviado podría ser equivocado... ¿Nadar entre preguntas o flotar entre respuestas?

Rakedus es locura, es destrucción. Mientras el nacimiento exista, él podrá existir... Pero... ¿y cuando destruya al nacimiento? ¿Qué sucederá después? Sólo resta la propia autodestrucción. O aprender a... Nacer. En cuyo caso un camino cambiará. Yo soy cambio en el pasado, en el presente, y en el futuro. Soy lo que vendrá. Lo que ha venido. Y Cell... Cell es lo que hay, lo que desea seguir habiendo, lo que no desea cambiar. Ninguno de los caminos es bueno. Ninguno es correcto. Pero uno, y sólo uno, es el tuyo.

Muevo la mano derecha ligeramente, como un pequeño tic incontrolable. - Cell no me interesa en absoluto. La estaticidad es la pérdida del alma. La mía es viajera y a veces se me despista, pero no la perderé. Quiero tu cambio. Elijo tu camino. Pues a pesar de que en ocasiones se puede sacar nacimiento incluso de la propia destrucción, la curiosidad ilumina mi camino. Ella me ha salvado antes, y ella me guía hacia mi destino. Siento curiosidad por esos desvíos de que hablas, y el conocimiento puede esconderse tras cualquier recodo. 

Miro a Rakedus. - Lo lamento mago, me interesa tu sabiduría y me atraen tus oscuridades. - Todas y cada una... - Pero ya conozco tu camino. Es demasiado liso para mí. 

Bifurcando mi destino quizá encuentre el atajo que necesito... O quizá me pierda antes de llegar. Pero el conocimiento es más amplio que en la oscuridad que ya conozco. Despertaré al Abismo, pero creando mi destino a partir de mis elecciones.

Espero que no te arrepientas de tu decisión, pero mi camino no es, en lo absoluto, llano, es el más amplio que puedes encontrar.

Zyba... ¿Seguro? Una vez decidido no habrá vuelta atrás. Estoy aquí para ser tu guía...