Partida Rol por web

HLdCn: El Legado de Caín II - Semillas de Destrucción

Día 8 - El Rojo del Amanecer

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31/12/2013, 21:10
Zyllah

Levanté una ceja al escuchar la amenaza "velada" de Marceline y me encogí de hombros después, antes de hablar. - Yo intenté decírtelo con sutileza, esperando que sólo tú lo entendieras. Has sido tú la que nos ha obligado a explicártelo con palitos y bolitas, así que ahora no te quejes. Es tu poder, lo increíble es que yo te tenga que explicar a ti cómo funciona. Y si no me equivoco, hace unos minutos te estabas ofreciendo para sacrificarte y llevarte a alguien contigo. Qué rápido cambias de opinión cuando le ves las orejas al lobo. ¿Qué pasa? ¿No esperabas que nadie te dijera que sí, no?

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31/12/2013, 21:42
19 Muerto - Gabriel Hyde

-Hace poco defendías a capa y espada a Ivhone, y ahora, súbitamente, cambias de parecer.

Niego con la cabeza mirando a Marceline, esta muchacha era demasiado maleable para tener tanto poder, a menudo construía sus propias teorías sin escuchar a los demás, o se dejaba llevar por impresiones equivocadas. 

-Te traje de vuelta por que creo en tí, Marceline. No cometas el mismo error que yo, no pienses que eres indispensable, o poseedora de una verdad absoluta. Tu secretismo con Jared y tus enigmas me crispaban, y a estas alturas ya podrías hablar claro.

¿Por que has cambiado de idea? -Pregunto finalmente con suspicacia.

Después me dejo caer en una de las paredes, y resoplo. Paso la mano por mi rostro, sin duda debía tener un aspecto cansado y demacrado. Empezaba a consumirme... solo esperaba que todo esto terminase pronto.

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01/01/2014, 15:08
Eko Létang

Al escuchar las nuevas palabras que Marceline les dirigía Eko alzó una ceja, sin llegar a preguntarse siquiera si hablaba en serio. Y cuando ella se dirigió a Ivhone una media sonrisa se formó en sus labios con satisfacción.

- Vaya, - Comentó, llevando la vista a esta última - parece que la arañita no ha podido tejer lo suficiente como para tapar sus propias mentiras. - Le dijo, encogiéndose de hombros. - Está muy mal eso de desilusionar así a nuestra médium. Ya bastante palo ha tenido que ser ver cómo se evaporaba su teoría sobre las muertes falsas.

Luego volvió a dirigirse a Marceline, con un suspiro.

- Ojalá no hubiera tenido razón. - Enunció con tono serio, dejando de lado la discusión previa. - Dile a Zagam que al menos enviaremos a Ivhone de vuelta.

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01/01/2014, 19:04
21 Muerto - Ira Von Carstein

 Movió la cabeza de lado a lado, sintiendo cierta molesta en los laterales del cuello, se llevó la mano hacia la zona, sonriendo de medio lado al recordar la razón de aquellas heridas. Apoyando las manos sobre el suelo se levantó, mirando unos instantes a Liam, pero después su atención fue llamada por Gabriel, el cual parecía realmente cabreado por el resultado de aquella noche, lentamente sus largos dedos apartaron un mechón rojo.-¿Intentas asustarme con tus palabras? Recuerda, solo conoces una parte de mi... Crees conocerme y te equivocas. Tus palabras tan solo me animan a seguir.-Hablaba de manera pausada, susurrando, dejando que cada una de las palabras llegasen a los oídos de él.-Es duro darse contra la realidad.. ¿No es cierto, Gabriel? Un intento fallido por salvar algo de mi, cuando ni el mismísimo Demonio podría hacerlo. Te lo dije... Nada dentro de mi está libre de oscuridad.-Sobre los labios de ella brotó una tranquila sonrisa, pero para quien de verdad la conociera, sabían que la pelirroja solo estaba jugando y se estaba divirtiendo más que nunca.

Mientras hablaba con Gabriel, algo empezó a levantarse entre la pila de cadáveres, que por el tiempo llevado allí empezaban a desprender su olor peculiar. Sus ojos se quedaron afilados durante largo rato en el mismo punto, pero al ver quien era la que resurgía desvió la mirada sin gran interés. Solo se había acercado una vez a aquella mujer, por lo que el trato era mínimo, como con todos los demás. La pipiola (Marceline) se empeñaba en mencionarla, por lo que se giró hacia ella, cruzando los brazos y dejando las manos en los costados se mantuvo expectante.-Vaya, vaya, vaya... Ahora ya no será uno, si no tres ¿Por qué tanta ansia por morir, Marceline? Es que acaso escondes algo detrás de ese rostro angelical...-Lentamente separó las manos de los costados, dando unos pasos hacia ella, pero sin aproximarse.-Eres realmente moldeable, te da igual el lugar... Siempre estarás del que más te beneficia ¿Por qué? Créeme, si tuviese opción de decidir a quien llevarme estarías en la primera del ranking... Tú no eres mejor que yo.-Sus ojos centellearon divertidos, como las de alguien que está descubriendo algo realmente importante.-Pero desgraciadamente... Me debo a alguien en este lugar.-Sus ojos viajaron hasta Gabriel, el cual en más de una ocasión la había nombrado.

Se mantuvo unos instantes callada, observándolo. Parecía ser que todos empezaban a estar cansados y desgastados por el paso de los días. El agotamiento cada vez era mayor y no perdonaba a nadie, ni siquiera al señor del tiempo. Antes de hacer nada observó a Liam dedicándole una pequeña sonrisa, la noche anterior le había ganado la batalla gracias a las niñas, pero no siempre sería así, eso estaba más que claro. Lentamente se acercó hasta donde estaba Gabriel, agachándose frente a él.-Tenemos una batalla pendiente... ¿Creías que yo sería la que te atacase en la noche? Te equivocas, traidora o no, mantengo mi palabra.. Y la cita está pendiente.-Le dedicó una caricia en la mejilla, con las yemas de los dedos, era un gesto cariñoso para lo brusca que ella podía a ser, pero ese simple gesto iba lleno de veneno... Y podría ser mortal.-Prométeme que me esperarás...-Susurró la joven mirándole fijamente, sin perderlo de vista. Manteniéndose a la altura de él en todo momento.-Me perteneces tanto como yo a ti... Y no dudes jamás, brindaré con tu sangre cuando llegue el momento.-Susurró nuevamente, para que aquello quedase entre ellos.

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01/01/2014, 20:02
20 Muerto - Marceline

Ante las palabras de Zyllah, Marceline se pasó la mano por el pelo con una sonrisa. Con las palabras de Gabriel, soltó un infantil suspiro mientras se encogía levemente de hombros. Sin embargo, si dio respuesta a las palabras de Eko.

Si, yo también siento que tengáis razón. Pero como ya dije, ya estaba preparada para lo peor. Se lo comunicaré a Zagam, y a ver si Lennish nos cuenta que pasó esta noche. Al menos ahora, supongo que el voto estará claro.

Luego escuchó las palabras de Ira, y Marceline se rió con fuerza.

Claro que no soy mejor que tu. No soy mejor que nadie. Y realmente, tu y yo sólo tenemos una o dos diferencias. La primera, es que la protección o destrucción del sello. La segunda, sería si yo sobreviviera. Eso es algo que aún está por ver, lo que si es seguro, mi "reina", será tu muerte.

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01/01/2014, 21:27
18 Muerto - Ivhone

Ivhone se había quedado confusa, muy confusa... De Zyllah, Eko y Gabriel, no le extrañaba su actitud. Hacía tiempo que desconfiaban de ella y por más que se esforzara en intentar demostrar su inocencia, ellos no la creían. No tengo nada que pueda demostrarles que mis palabras son reales... Pero de Marceline... Se volvió a mirarla con la decepción tiñendo sus ojos de avellana.

- ¿Qué estás diciendo...? - Le preguntó con un tono de voz suave pero ligeramente tembloroso. - Si hubiera podido lo hubiera hecho, pero... Joder, ¿no has entendido lo que os he contado...? - Tragó saliva y se mojó los labios con la punta de la lengua. No quería regresar a aquel lugar, aunque echaba de menos el dulce vino que ofrecían a los recién llegados. - No podía llevarme a nadie conmigo, ni tengo la capacidad de matar... Ya os lo he dicho, aunque no sé cómo queréis que os lo muestre... - Caminó hacia la médium y la miró directamente a los ojos. - Cuando alguien inocente traspasara el umbral, yo podría tomar su puesto. No lo entendí bien, pero creo que es una especie de balanza para equilibrar las fuerzas del bien y del mal... No, no tenía la capacidad de regresar llevándome a nadie por delante... Joder... No he matado a nadie...

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01/01/2014, 21:47
Eko Létang

Las palabras de Ivhone hicieron que Eko liberara una risotada, y cuando la volvió a mirar lo hizo de buen humor. La mujer no paraba de dejarse en evidencia una vez tras otra.

- Cuidado, arañita, estás perdiendo a la única que confiaba en ti. - Le dijo entonces, divertido al ver cómo ella se hacía presa de su propia red. - Claro que hemos entendido lo que has contado. Pero eso no significa que sea cierto. Repasemos: Nos dices que unas voces te hablan, y tenemos que creerte. Y no sólo eso, sino que además no debemos matarte porque claro... ¡Esas voces dicen que eres inocente! - Exclamó, con los ojos brillantes. - ¿Qué conveniente, no? - Preguntó, antes de sosltar una nueva risotada. - "No podéis votarme porque unas voces que sólo oigo yo me han dicho que soy inocente"... - Dijo, como si la estuviera citando. - Claro. Ahora mismo te hacemos caso. - Asintió de forma sarcástica, con una sonrisa.

- Zagam ha muerto envenenado, sólo tienes que verlo. - Explicó entonces, haciendo un gesto hacia el cuerpo del ilusionista y su corcel. - Y sólo una persona aquí ha estado envenenando a otros en cuanto ha tenido oportunidad. Apuesto a que ahora ya ni siquiera necesitarías a tu estúpida araña para ello. - Añadió, con tono despreocupado. - Evidentemente hay más pruebas que esas... - Dijo entonces, antes de encogerse de hombros. - Pero si te las dijera, ¿dónde estaría la gracia?

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01/01/2014, 23:06
Yormund

Fui andando poco a poco rodeando a Ivhone, sonrie y tras quedar detrás de ella da una cachetada en su trasero y dice: Bienvenida cielo, creo que soy el único que se alegra de verte...

La mira de arriba abajo y dice: El cambio te sienta fenomal, pero explicate mejor o el señor justiciero Eko, te tendrá que castigar. Voltea los ojos, cansado de todo aquello y bufa hastiado mirando cómplice a Ivhone antes de alejarse.

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01/01/2014, 23:31
18 Muerto - Ivhone

Ivhone se volvió a mirar a Eko y su semblante palideció. Dirigió su mirada hacia el cuerpo de Zagam, hasta ese momento ni se había dignado a mirarlo. Se acercó a él y se acuclilló a su lado, contemplando la piel abotargada y perlada... Alguien quiere incriminarme, mierda... El pistolero tenía razón, al ilusionista lo habían matado usando veneno.

- Yo no he hecho esto... - Dijo mientras se incorporaba y se volvía a mirar de nuevo a Eko. Apretó con fuerza los labios... - Os he contado la verdad, te puedes reír todo lo que quieras, pero fue así... Y yo no dije que fuera exactamente una voz. De repente esas palabras se grabaron en mi mente, pero... no voy escuchando voces fantasmales... - La joven empezó a sentir que la respiración se le aceleraba. Bajó la mirada y comprobó que el corsé le apretaba demasiado, no había sido consciente hasta ese momento del cambio ejercido por su cuerpo. Sus curvas eran más pronunciadas y sus senos... Pestañeó varias veces y empezó a desabrocharse la prenda para aflojarla. Sus treinta dedos se movían con agilidad y en un momento el corsé dejó de apretarle el pecho, quedando igualmente firme.

Respiró profundamente, se encontraba mucho mejor. Aquellos minutos los había invertido en darle vueltas a las palabras de Eko. 

En ese momento Yormund se le acercó y le dio una cachetada en el culo. Ivhone se volvió a mirarlo con los ojos abiertos como platos. Aquel gesto la había dejado descolocada. Sus mejillas se ruborizaron y sus labios se curvaron en una sonrisa sesgada. 

- Eko sabe hacer bien su papel. Es un líder nato y sabe como llevar a la gente a su terreno. En el fondo le admiro... - Confesó y volvió a entrelazar su mirada con la del citado pistolero. - Pero no sé si de verdad se cree sus historias o juega con todos para que le sigáis ciegamente. Utiliza cualquier excusa para volverla en tu contra... Ya sea un gemido, un suspiro, lo que sea... Es un depredador... - Durante unos segundos mantuvo la mirada a Eko. - A los que no entiendo son a Marceline ni a su hermano Kaldreade - . Dijo, volviéndose nuevamente a mirar a la vidente. - Me gustaría volver a juntaros, ¿sabes...? Él desea abrazarte... Además que no me gustan esos cambios tan repentinos que tienes. Sabes que soy inocente, hasta ahora todo ha sido palabrería y nadie ha mostrado nada y... ¿De repente me ves como una asesina? No... No quiero jugar a tus juegos absurdos...

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01/01/2014, 23:35
Eko Létang

Ante la respuesta de Ivhone Eko alzó una ceja, antes de emitir un suspiro. Los intentos de la mujer eran ya desesperados, y se notaba.

- Los juegos de ropa para distraer están ya muy vistos, Instinto Básico. - Le respondió, con tono cansado. - Además, si esperas que te funcionen con Gabriel, sólo tiene ojos para la pelirroja. - Añadió, antes de dedicar una mirada divertida al Señor del Tiempo.

- Vamos a ver, Ivhone... ¿De verdad estás jugando la baza de la pena? ¿Quiero que tu hermano y tú os abracéis y seáis felices, sálvame? ¿Es eso? - Le preguntó, abriendo los ojos, mientras el pequeño pájaro en su hombro emitía un sonido agudo.

- ¿Nos has contado la verdad? - Continuó entonces, mientras una sonrisa se dibujaba en su rostro. - ¿Cómo crees que murió Annie, Ivhone? Venga, tic, tac, tic, tac... Te doy diez segundos para responder. Gabriel puede contarlos.

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02/01/2014, 00:11
18 Muerto - Ivhone

¿Juegos de ropa...? Ivhone se volvió a mirar a Eko y enarcó una ceja. - No estaba jugando... - Imbécil... Se mordió el labio, no quería caer en el insulto fácil. Aquellos días que había estado muerta le habían servido para madurar. Era consciente de que el pistolero buscaba derrumbarla, pisarla como ya había hecho anteriormente y que ella terminara llorando en algún rincón, para encima vanagloriarse y decirles a todos que jugaba con sus lágrimas. - No me sorprendes, Eko... - El nombre destiló bilis en sus labios. - Empiezas a ser predecible y no voy a jugar a tu juego. Jajajaja... ¿Pena...? En ningún momento he intentado darosla. Os estoy contando las cosas como han ido, pero no me dais ninguna opción. Estos dos días me hicieron creer que eráis más listos de lo que verdad sois. Y creía que alguno se habría dado cuenta de como les manipulas. Pero veo que no, me doy cuenta de que siguen ciegos y tú continúas siendo un sucio manipulador... Bravo... Lo estás haciendo de puta madre.... - Dio unas cuantas palmadas con sus tres pares de manos. 

- Y sí, os he contado la verdad, no sé a qué viene lo que ocurrió con Annie... Yo no tengo nada que ver con esa... traidora... - 

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02/01/2014, 00:25
Liam Donaire

Un día más encerrado en aquel lugar lleno de sangre y muerte, una día más donde el juego continúa. Me desperté junto con la pelirroja, obvio teniendo en cuenta que jugamos hasta tarde, llevaba días sin llevarme nada a la boca, así que la ardiente y dulce sangre de Ira me pareció un manjar. Todo mi cuerpo era la prueba evidente de que aquel duro enfrentamiento entre ambos fue un hecho innegable.

Una sonrisa libidinosa se dibujaba en mis labios solo con recordar lo sucedido, seguramente repetiría sin dudarlo, pero ahora no, no era el momento. Me incorporé y vi dos cadáveres, la de la arquera, y la del ilusionista, dos muertes muy dispares, me recordaron un poco a la de otros días.

- La de la arquera era esperable, ¿pero y la de él? – Pregunté un tanto desconcertado mientras señalaba con mi mirada al cuerpo yaciente sin vida de Zagam, así creo que se llamaba el chico. No me importaba su muerte pese a que estábamos en bandos enfrentados no me caía mal el chico. Sin duda a Zyllah le ha tenido que…dolerle mucho.

Pero el día lejos de acabar una nueva  sorpresa en forma de semidemonio aparece delante de todos revelándose su identidad como Ivhone, la chica de la araña. Ella provocó desconcierto, no entendía que hacía de nuevo en el mundo de los vivos, pero ya que Gabriel  y Zagam podían, ella también por lo visto.

Además, las discusiones no paraban de aflorar, mi nombre al igual que el de la pelirroja estaban en boca de todos. Sonreí divertido, estaban buscando formas para dejarme fuera del juego. Y de sonrisa pasó alguna carcajada ante las palabras de Marceline y de Ira. Gabriel también parecía afectado, aunque deduzco que por una razón bastante distinta. Seguramente no le haría ninguna gracia que la pelirroja prefiera jugar conmigo antes que con él.

Le dediqué una mirada de desdén a la médium, si es que lo era porque empezaba a tener ciertas dudas teniendo en cuenta el poco sentido común que denotaba. – Ay que ver mi encantadora Marceline, si no fuera por Eko y Zyllah no te enterarías de una mierda, será mejor que dejes de de mirar tu jodido ombligo, no vaya a ser que te lleves una sorpresa desagradable que te acabe estallando en la puta cara por no prestar atención a lo que sucede detrás. – Mi tono era duro, de desprecio y decepción ante aquella Eve, se lo había ganado a pulso con sus absurdas idas de olla que solo conseguían sacarme alguna carcajada de lo absurdas que eran. – Mira que me caías bien, pero cada día que pasa solo demuestras que eres una inútil que solo sirve para ser la intermediaria entre vivos y muertos. Bueno, al menos has hecho algo más que la pelirrosa, ya es algo. – Y más desdén por mi parte, si antes me odiaba, seguro que ahora lo haría más.

Desvié mi atención a Eko por un segundo una vez terminado con la dichosa Marceline. – Sabes, te compadezco por tener que aguantarla. – Me aparté de todos, mientras observaba divertido en silencio ante la situación que se encontraba Ivhone. Ahora que prestaba más atención ella pude ver con más calma su nuevo y excéntrico cuerpo. Sin duda nada discreto.

No tenía mucho más que hacer o decir, así que me dirigí a Ira, mi nueva compañera de juegos en tono descarado. – Déjale, algunos les encanta tener las falsas esperanzas que pueden salvar a cualquiera. – Después la miré, a ella, de forma desafiante, teníamos una cuenta pendiente. Así que le dediqué una frase en alemán mientras sonreía con picardía. - Willst du einen Rückkampf ? * 

Notas de juego

* ¿Quieres la revancha?

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02/01/2014, 00:30
Alexia Belikov

Me desperté y comprobé quienes eran los caídos, me quedé bastante afectada en ambos casos. En el caso de Zagam porque, al fin y al cabo, había cumplido su promesa y me sentí un poco culpable al recordar cómo me posicioné contra su resurrección. La muerte de Lennish también resultó un impacto, era bastante silenciosa y me había defendido contra Alice y no lo olvidaría. El regreso de Ivhone me impactó aún más, sobretodo dada la cantidad de brazos que tenía, me pareció que sería algo difícil de ocultar en el exterior. Eso despertó de nuevo las acusaciones, no pude evitar recordar la muerte y lo duro que debía ser pasar por eso más de una vez.

Giré la cabeza al escuchar a Marceline mencionarme, me molestaba que tratara de dirigir mi voto pero debía reconocer que, al menos, estaba bien dirigido. Miré a Liam con el ceño fruncido, tenía muy claro que era partidaría de "a la tercera va la vencida". -Probablemente le vote de nuevo si nada me hace cambiar de idea. Te agradezco el detalle de querer nombrarme sucesora, pero es cierto que deberías usar mejor esa capacidad. Por más que me gustaría poder hablar con Andrew yo no soy importante, además en el fondo aún tengo la esperanza de que pueda volver, de alguna manera.

Me mantuve en silencio escuchando atenta las demás conversaciones, no tenía mucho que aportar pero había aprendido lo importante que era escuchar. El juego de Eko con Ivhone era divertido, parecía que disfrutaba dejandola en evidencia y por las demás quedaba claro que Ivhone caería de nuevo.

Notas de juego

Edit. se me adelantó Liam

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02/01/2014, 00:34
Eko Létang

La sonrisa de Eko se amplió al escuchar la respuesta de Ivhone. - ¿Nunca has intentado dar pena? - Preguntó, con fingida sorpresa. - ¿Hablamos de cuando fingías que tu araña tenía que defenderte contra tu voluntad, cuando sois la misma cosa? ¿O de cuando nos contaste la triste historia de tu madre?

- Supongo que eso significa que se acabaron tus diez segundos. - Continuó después, hablando como si fuera algo que le diera pena. Entonces tomó aire y enderezó su postura. Áine, mientras tanto, descendió desde su hombro, aleteando con dificultad para buscar a Zyllah, y el suave zumbido hizo que la sonrisa de Eko se hiciera aún mayor. - Tomé tu poder, Ivhone. - Le dijo totalmente serio. - Tomé tu poder y la maté. A esa traidora con la que no tienes nada que ver. A esa zorra. Me vengué por lo que me hizo, y por el mensaje que dejó en mi espalda. Y lo hice encantado, tras prometerle a Marceline un agradable amanecer al confirmar lo que escondías.

- Te dije que había más pruebas, pero que no tendría gracia si te las contaba... - Continúa entonces, encogiéndose de hombros. - ¿Pero sabes qué? Me equivocaba. - Responde con un suspiro optimista. - Realmente sí que la tiene. El poder de una traidora para matar a otra... Es casi poesía, ¿no te parece? - Le preguntó con la sonrisa colgada en los labios.

- Estás perdida, Ivhone. Muerde tu lengua, suicídate con el veneno que mató a Zagam, y ahórranos el trabajo para estas votaciones.

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02/01/2014, 00:42
18 Muerto - Ivhone

- Hijo de puta... - Sí, no pudo contenerse y cuando Eko nombró a su madre, utilizando lo que ella había contado para dañarla, las palabras cargadas de veneno salieron de sus labios. - No utilices lo de mi madre para hacerme daño... Abrí mi corazón en un momento de debilidad, pensé que eras diferente... - Ivhone afiló sus pupilas, mirando al pistolero. Sus puños se cerraron con fuerza, pero respiró profundamente y se volvió de espaldas... Entonces vino lo que él llamaba confesión... Se volvió de nuevo y lo miró confundida... Pestañeó un par de veces y negó con la cabeza... - Mientes... - Ivhone miró con odio a Eko... - Eres un miserable hijo de puta... - Nuevamente utilizó aquel recurrido insulto. - Es imposible que hicieras eso porque nunca he tenido ese poder. NUNCA... ¿Pero de qué coño vas...? Estás echándome mierda cuando no te he hecho nada... - Deseaba saltar sobre él, arrancarle aquella sonrisa de la cara y partirle todos los huesos del cuerpo. Pero no iba a caer en su sucio juego... - Has estado manipulando continuamente. Lo has hecho muy bien... Has jugado con todos y te estás viendo victorioso... ¿De verdad no os dais cuenta...? Él no es de fiar... No sé qué papel tiene en todo esto. Hay dos que han confesado y mi voto irá a por uno de ellos. Pero cada vez estoy más convencida de que Eko no es lo que aparenta ser...

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02/01/2014, 00:58
19 Muerto - Gabriel Hyde

Observo a Ira, dedicándole una sonrisa cansada, aquellos ojos volvían de nuevo a buscar los míos, y volvían a perderme... habría querido rechazarla, girarme y simplemente no responder, detener el tiempo, dejarla que siguiera con aquel absurdo y bizarro juego que tenía con Liam... simplemente no podía hacerlo.

-¿Asustarte?... Tú ya estás asustada, detrás de esa coraza de rabia y sadismo sólo hay una niña que tiene miedo. Una niña que solo ha conocido sangre y muerte, y que se asusta ante un sentimiento que no conoce. 

Me acerco a la joven, acercándome a su rostro sin temor a recibir otro mordisco. Podía desgarrar mi cuerpo, magullar mi piel o hacerme sangrar, no conseguiría dañar mi convicción. 

-La realidad no es un muro con el que puedas golpearte, es más bien un camino que nosotros mismos vamos haciendo, capaz de depararnos las mejores cosas, y las peores -Suspiro. -No lo entiendes, no quiero salvar una parte de ti -Alargo la mano para acariciar aquel pelo cobrizo, deslizando un mechón entre mis dedos. -Me quedo con el todo -Sonrío mirándola directamente a los ojos.

Con sus cosas buenas, sus cosas malas... puede que como ella decía en su interior solo había oscuridad, o quizá estaba tan ciega que no podía o no quería ver la luz. 

-A partir de ahora, voy a llamarte Ari -Era simplemente su nombre, pero al revés. Estaba seguro de que eso la enfadaría mucho. -Y te diré una cosa, no vas a morir sola. -Ni el demonio podía salvarla, pero desconocía que en este mundo hay otras fuerzas mucho más poderosas.

Me debo a alguien en este lugar...

Yo también me debía a alguien, quizá ese era mi destino, por eso había muerte en mis visiones, sin embargo no había podido resistir el impulso de venir a Oldland, debía encontrarme con ella, morir con ella, así terminaría todo. Que gran final...

-Te lo prometo... -Le susurro dejando que mis labios rozaran el lóbulo de su oreja. Después la agarro de la mano, y puede ver como todas las conversaciones parecen pausarse a su alrededor, creando un eco distante, el tiempo se había detenido, para ella... y para mi.

La agarré de la cintura y tiré de ella para besar sus labios, un instante... un eternidad... terminé mordiendo sus labios del mismo modo que había hecho ella con los míos, pero sin llegar a hacerla sangrar. El tiempo volvió a seguir su curso, Eko seguía hablando con Ivhone, y sonreí cuando comentó que solo tenía ojos para la pelirroja. 

Después habló Liam, y simplemente puse una mueca de desprecio*. ¿Salvar a cualquiera? Ni siquiera podía salvarme a mi mismo... había muerto dos veces... y la tercera estaba por venir. Idiota...

-Creo que tu perro espera para que lo saques un rato de paseo. -Dije ciertamente molesto, no me gustaba aquel hombre, no había visto nada bueno dentro de él, era despreciable, culpaba a su condena... cuando él era la mayor condena para los demás... por suerte su final estaba cerca.

-Cuídate, Ari. -Digo sonriendole una vez más. 

Miro a Ivhone, realmente había tardado catorce segundos en responder, pero al menos lo había hecho. Miré fugazmente a Eko con curiosidad cuando explicó como había matado a Annie. Así que era eso... Parecía que la vuelta de la arañita iba a ser efímera.

-Pagarás lo que le has hecho a Zagam. -Digo sin más, con una aterradora calma.

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02/01/2014, 01:33
Eko Létang

Cuando Ivhone comenzó a hablar Eko abrió mucho los ojos, sorprendido.

- Oh-dios-mío. - Respondió con voz exageradamente aguda. - Lo siento mucho, Ivhone. Pensaste que era diferente, y yo... Te he decepcionado. - Le dijo con mirada de cordero degollado. - Vas a tener que perdonarme, de verdad. Mi padre me enseñó a no tener compasión de los traidores. - Explica, como si fuera un motivo para pedir disculpas, encogiéndose de hombros. - Es algo que no puedo evitar: Veo una traidora como tú, o Poron, o ... Y sólo puedo votarle. Es inevitable.

- Ahora explícame mi juego, por favor. - Pidió, sentándose en el suelo. - ¿Jugaba con todos al cazar traidores? ¿Al resucitar a Gabriel? ¿Al matar a Annie? Porque es curioso lo bien que te caía yo cuando acusaba a Alice de ser una mala guardiana. En ese momento te parecía de fábula todo lo que decía. Ah, pero claro... - Suspira entonces, encogiéndose de hombros. - Se me ocurre acusarte a ti, que te escondes tras tu araña fingiendo que no es parte de ti. Que nos abres tu corazón y no se puede mencionar la historia que cuentas, pero sin embargo tienes derecho a decir lo que te da la gana sobre los demás. Se me ocurre acusarte a ti, que te negabas a votar a traidores porque una vez te equivocaste con Gabriel, y no querías que muriera nadie más...  - Fue citando despacio. - Ah, no espera. - Se corrigió. - Que ahora votarás a uno de los dos confirmados. Y seguro que no es al que esté protegido, ¿verdad? - Preguntó guiñándole un ojo descaradamente, con un gesto de falsa complicidad. - Bien jugado, arañita, bien jugado. Marceline casi se lo cree.

- Podrías haber matado a Ira o a Liam, y escogiste un inocente. Pero soy yo quien juega con todos. Si vas a continuar defendiéndote, deberías empezar a hacerlo mejor. Empiezas a parecerte a Vanna. ¿Qué será lo siguiente, decirnos que no eres un genio?

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02/01/2014, 02:00
Zyllah

Marceline no me respondió, lo cual era una respuesta en sí mismo, y me encogí de hombros. Al final era una digna hermana para Kaldreade. - La cobardía debe ser cosa de familia... - Susurré para mí misma, mientras me daba la vuelta para alejarme hacia el lugar en el que solía sentarme, dedicando una nueva mirada dolida al cuerpo de Zagam al pasar junto a él. 

Desde allí escuché las conversaciones en silencio. No pude evitar dedicar miradas incrédulas para Ivhone cuando intentaba defender lo indefendible, ni poner los ojos en blanco cuando Eko de nuevo se puso en plan teatral en lugar de decir las cosas directamente, sin tanta parafernalia. El triángulo Liam-Ira-Gabriel cada vez me parecía menos interesante, y miré al melkhnar con una pizca de lástima. Parecía el que peor parado iba a salir, aunque se lo había buscado él mismo, por elegir mal a sus compañeros de juegos. 

Cuando el pajarito se acercó a mí, aleteando de nuevo por primera vez desde que fue herido, le dediqué una sonrisa de ánimo y le ofrecí mi mano para que se posara al llegar. Lo alcé hasta mis ojos entonces para hablarle en un susurro antes de acariciar su cabecita suavemente con la nariz. - Bien hecho, pajarito. Eres el mejor. 

Los insultos que Ivhone le dedicaba a Eko me hicieron alzar la vista hacia ella y mirarla con rencor, entrecerrando los ojos. La respuesta de Eko no tardó y entonces intervine, hablando hacia ella. - Deja de perder el tiempo intentando echar tu mierda a quien ha demostrado una y otra vez de qué bando está. ¿Realmente esperas que te respetemos mientras insultas de esa manera como una desesperada? ¿Esperas que nos creamos todo lo que te dolió la muerte de tu madre cuando no paras de insultar a las madres de otros? Te diré lo que le dije a Vanna... Si así es como te vas a defender, te harías más bien a ti misma estando callada.

Después me giré para mirar a Eko y dirigirme a él con voz suave y apaciguadora. - Eko, déjalo, por favor. No pierdas más el tiempo con ella. No necesitas acorralarla más, todos lo hemos visto y está perdida. Se hunde ella sola en su propia mierda. No es necesario que sigas. 

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02/01/2014, 02:07
18 Muerto - Ivhone

- No sé cómo hiciste lo de Annie, pero es mentira que utilizaras el poder que según tú me robaste... De alguna manera te defendiste de su ataque, pero si es verdad que los asesinos eligen a sus víctimas y terminan con ellas, Ira sabría algo, ¿no...? - Dijo, volviéndose hacia la pelirroja. - ¿Cómo mató a Annie...? ¿Utilizó el mismo sistema que vosotras o... De alguna manera se protegió...? Eres un mentiroso y tus palabras te delatan... - Antes de que Ira pudiera llegar a responder volvió a clavar su mirada en la de Eko. Es imposible lo que está diciendo. Seguro que tiene algo que ocultar y por eso se dedica a llenarme de mierda...

- Eres un farsante y te dedicas a tergiversar las palabras de los demás. Ya he dicho que no sé a qué juegas pero sé que no eres de fiar... - 

Eko y Gabriel continuaban achacándole la muerte de Zagam, Ivhone puso los en blanco. - Y dale... Yo no tengo nada que ver con su muerte. Cuando él llegó al otro lado pude volver, no sé quién fue el que lo hizo, pero no fui yo. Y mientras sigáis así de obcecados, el verdadero asesino se estará riendo de vosotros... - Entonces Zyllah habló y la joven se volvió a mirarla con una expresión de rabia contenida. - Hablaré si me da la gana y no me comparéis con Vanna porque no tengo nada que ver con ella... - Aquello había sido un golpe bajo. - Ella sí que era una traidora y se comió su propia mierda, pero yo... Me estoy comiendo la que no dejáis de echarme... Joder, si nada más regresar habéis vuelto a señalarme, cuando sabéis seguro quiénes son traidores. No me habéis dado nada de tregua, es más, tu querido amigo se inventa cosas... - Ivhone se detuvo un momento y respiró profundamente. Sin darse cuenta había empezado a temblar. La hora se acercaba y no quería volver a pasar por lo mismo otra vez... No tendría que haber vuelto, joder... Yo... Soy idiota...

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02/01/2014, 02:30
Zyllah

Giré los ojos con incredulidad cuando Ivhone preguntó a Ira sobre sus métodos y cuando se dirigió a mí respondí tranquilamente, posando mi mirada en ella. - Sí, sabemos seguro quiénes son traidores. Y adivina... Tú estás en la lista. Si te comparamos con Vanna es porque tus argumentos empiezan a parecerse peligrosamente a los suyos. Igual de desesperados... Igual de brillantes. Aunque te reconoceré algo. Al menos no confiesas en cuanto te señalan como otros de tus compañeros.

Hice una pausa y me encogí de hombros antes de volver a hablar. - Puedes hablar lo que te dé la gana, pero si quisieras hacerte un favor a ti misma, hace rato que deberías haberte callado en lugar de seguir hundiéndote tú sola. ¿Por qué deberíamos darte tregua si sabemos que eres una de ellos y que no estarás protegida este atardecer? Sí, le has estado comiendo la oreja a Kaldreade un par de días y esperabas que Marceline se hubiera creído tus cuentos... Pues lo siento, no ha sido suficiente. Caes por tu propio peso, Ivhone. - Terminé, encogiéndome de hombros de nuevo y apartando mi mirada de ella.