Partida Rol por web

Medité las palabras de Zyllah lentamente, me permitía elegir, era todo un detalle. También traté de asimilar lo que me había dicho sobre Andrew, joder tenía la intuición atrofiada, ni me di cuenta de que él también había cambiado. - De acuerdo, así lo haré y usaré mi don para ver a Ivhone, necesitamos saber por qué era tan importante protegerla, tal vez así podemos descubrir cuál era su plan. No te preocupes no me ha ofendido lo que has dicho sobre lo mío con Andrew, también estoy sorprendida.  Supongo que es la idea de una familia y de no seguir sola lo que me atrae, pensé que con la aldea tenía suficiente, pero es bueno tener gente igual que te apoye, hasta ahora no me había dado cuenta. Si salimos de aquí tendré que averiguar si es real.

-En cuanto a Alice, no sé qué poder puede darme el sello, no he notado nada raro. Era algo que podía hacer de antes, mi muerte arrastraría a otro…

Un movimiento en el otro lado me distrajo, maldición tenía que salir la puñetera venganza.- Tengo malas noticias, avisa a Eko. Annie quiere ir a por él, intentaré que cambie de idea pero si no lo consigo deberá protegerse. No hay ningún motivo razonable sólo le odia. Dile también que por favor corte un poco el sarcasmo, no me ayuda, si la cabrea más no podré hacer nada.

Ignoré tranquilamente la pulla de Yormund. Ya me estaba acostumbrando a no hacerle demasiado caso, la verdad es que había sido toda una decepción. Por suerte tenía a Alexia. Asentí hacia ella al escuchar la decisión que había tomado sobre su poder. Ivhone. Me parecía correcto. Sin embargo sus últimas palabras hicieron que mis ojos brillaran alarmados. - Ya le dije que se había expuesto demasiado... - Murmuré con fastidio para mí misma antes de buscar los ojos de Alexia y dirigirme a ella. - No sé si finalmente podrá proteger a alguien esta noche, espero que haya escogido a Alice al final. - Me mordí el labio inferior, preocupada. - Si puede protegerse a sí mismo no habrá problema, incluso podrías apoyarlas para ir contra él si quieres. Pero déjame que le pregunte qué hizo finalmente. Joder, no sé por qué no se puede callar nunca la puta boca. 

Respiré profundamente mientras tironeaba de un hilo deshilachado en el borde de mi jersey y empezaba a enrollarlo en un dedo una y otra vez con un gesto nervioso. - Si en algún momento recibes algún poder extra por el tatuaje avísame. Faltan pocos por desatarse, ya es mala suerte que no lo tengas todavía...

No tardé más que unos segundos en volver a hablar de nuevo, soltando el hilo y aparentemente más tranquila. - Bien, Eko podrá protegerse a sí mismo. Que vayan a por él, así por la mañana no habrán conseguido ninguna víctima. Nosotros fallamos en las votaciones, ellas fallarán por la noche... Y al amanecer Annie estará muerta gracias a Yormund. - Una pequeña sonrisa se empezó a dibujar en mis labios. - Todavía puede salirnos la noche mejor de lo que esperábamos. Apóyalas, azúzalas... O no. Haz lo que consideres mejor para que no sospechen de ti, pero ahora mismo que vayan a por Eko será lo mejor, se quedarán con las ganas y me encantará ver la cara de Ira por la mañana...

Hice una breve pausa y miré a Alexia arrugando la nariz. - Pero entonces tienes que asegurarte de que no vengan a por nosotros, ni a por Zagam. Estaremos desprotegidos. Y por encima de todo que no vayan a por mí, o caeríamos los tres. 

Mi boca se abrió por el asombro al escuchar las palabras de Eko en el otro lado. - Vaya, quizá no te haga falta azuzarlas. Parece que ha decidido provocarlas para que vayan a por él. Espero que ahora no cambien de opinión.

Escuché las palabras de Eko con una mueca mezcla de sonrisa e incredulidad.- Pues lo está haciendo estupendamente, no creo que haya nadie que pueda pararla. Eko será la diana y Annie el proyectil, eso seguro. No creo ni que tenga que intervenir.

- Sí, lo de tocar los cojones es algo que se le ha dado siempre de puta madre. - Respondí con una media sonrisa. - Eso te lo puedo garantizar. - Suspiré y levanté la mano cruzando los dedos índice y corazón. - Crucemos los dedos para que todo salga bien, entonces. 

Cuando mis ojos volvieron a enfocar la realidad lancé un suspiro resignado y me dejé caer contra el respaldo de sofá que Zyllah había puesto en la sala, empezaba a estar realmente cansada de todo.- Ya he podido ver a Ivhone y lo bueno es que no tiene ningún poder específico, tan sólo es una traidora, por lo visto lo pasó muy mal de niña. Supongo que el afán protector de Annie debía tener algo que ver con el instinto maternal o algo de eso. Sin embargo hay una mala noticia, puede volver sola, probablemente por el sello. No sé por qué no ha vuelto aún, parece que no pueden quedarse muertos.

No pude evitar que se me escapase una sonrisa con las últimas palabras de Alexia. Al fin y al cabo ella también había resucitado y en cierta forma era una de ellas, aunque ahora jugase para otro equipo. Sin embargo, lo que había descubierto sobre Ivhone no me gustaba nada y arrugué la nariz pensando en ello. - Tenemos que hacer que esto termine antes de que vuelva. Creo que mañana lo mejor será que mires a Vanna, para confirmar si ella realmente también puede volver. Si las dos lo hicieran se nos podría complicar todo. 

Hice una pausa para dedicarle una breve mirada a Yormund antes de seguir hablando con Alexia. - Esta noche si todo va bien nos libraremos de Annie. Mañana en las votaciones de Liam y por la noche podemos encargarnos de Ira. Con un poco de suerte no se lo esperarán y no volverá antes de eso. Puede que esté intentando convencer a Marceline de que es inocente para que no la matemos en cuanto vuelva, igual que parece que está haciendo Vanna. En todo caso... Cuanto más tarden, mejor.

Después de unos minutos volví a hablar, dirigiéndome a Yormund. - Bien, está decidido. Te encargarás de Annie esta noche. Me gustaría que te desahogaras todo lo que quisieras. Haz algo con el bebé, algo... creativo. Diviértete todo lo que quieras con ella. Y cuando acabes, quiero que le dejes un mensaje grabado en la espalda, como hicieron ellas con Eko. Pon: "¿Quién debe temer ahora?". 

Los miré a ambos y suspiré, dedicándoles una sonrisa de ánimo. - Vamos a ganar esta guerra, chicos.

Finalmente me dirigí de nuevo a Alexia. - ¿Cómo va todo con ellas? ¿Alguna novedad? ¿Cómo se han tomado que Gabriel desvelase a Ira?

Escuché el plan de Zyllah y sonreí, me pareció justicia poética. -Eso espero, deseo volver a casa. Lamentablemente no nos lo van a poner fácil, ni se han inmutado aunque Ira ha estado bastante entretenida entre Liam y Gabriel. En cuanto tenga algo nuevo serás la primera en saberlo.

Asentí a las palabras de Alexia y luego miré a Yormund una vez más. - Y si todo sale bien esta noche, no digas ahí fuera por la mañana que has sido tú. No nos interesa que sepan lo que haces ahora por las noches.

Negué con la cabeza y pensé... Siempre he sido el saco de los golpes... Cuando todo esto acabe, me señalaran a mí, lo sé...

Seguí acariciando a Naica, y observando la conversación de aquellas dos, tan diferente a las palabras que esgrimían contra mía.

Desperté también en este lugar y una sonrisa de satisfacción se colocó en mis labios mientras mi mirada se dirigía alternativamente a Yormund y Alexia.

- Lo habéis hecho genial, chicos. - Comencé, ampliando mi sonrisa milímetro a milímetro. - Los dos. Les hemos dado un buen golpe a esas zorras. Si todo va bien, pronto saldremos de aquí. 

Hice una pausa y miré también a Saskia primero y a Naica después, incluyéndolas en la victoria que habíamos conseguido entre todos. - Ahora hemos equilibrado la pérdida de las votaciones de ayer. Este atardecer votaremos a Liam los tres de nuevo.

Finalmente mis ojos se posaron en Alexia. Estábamos remontando, pero no debíamos confiarnos. Todavía quedaba mucho por hacer. - Alexia, ¿Ira ha dicho algo? ¿O las niñas? ¿Cómo se han recibido las noticias allí?

Al despertarme la sonrisa no podía borrarse de mi  rostro, todo había salido bien, para mí era una como una dulce venganza, al fin y al cabo me mataron y también a Andrew. Además que Zyllah estuviera contenta también era bueno así que me reí en voz alta. -Un buen amanecer, no me cabe la menor duda, Eko estará satisfecho. Ira no ha abierto la boca y las niñas tampoco, supongo que estarán en shock, unos cuantos gritos e insultos a Eko y a por la votaciones. En cuanto sepa algo te lo diré, estoy deseando hacerle pagar a Liam cada una de las lindezas que me dedicó ayer.- el optimismo reinaba en el ambiente, cada vez estábamos más cerca del final y eso significaba volver a casa.- Por cierto, no se ha despertado mi sello, parece que se hace de rogar.

-Por otra parte tengo que pensar en la próxima noche, Ira vigilará pero tendré que ir sola a por alguien, creo que debería ser Nil para mantener mis opiniones anteriores, pero dime si sabes algo de él porque no quiero morir en el intento.

- Eko está exultante... Ya lo puedes ver. - Respondí soltando una carcajada. - Cuéntame lo que digan si se deciden a hablar. - Me puse de pie y comencé a pasear por la sala, de buen humor, hasta llegar al lugar donde estaba Saskia a la que ofrecí la mano para que me oliese antes de dedicar una caricia tras las orejas. - Hoy ningún poder ha despertado en los tatuajes, porque ayer en las votaciones no cayó nadie. El sello de Annie debería llegar esta noche. Con un poco de suerte será para ti o para Eko. Él tampoco ha recibido el suyo.

Mi sonrisa era optimista, todo parecía ir bien. Al menos, lo mejor posible. Me incorporé para responder a Alexia. - No sé nada de Nil. Creo que es tu mejor opción para que Ira no sospeche de ti, pero no sé si tiene algún as en la manga que pueda estropear las cosas, tendremos que arriesgarnos. Dudo mucho que sospeche de alguno de nosotros, así que si pudiese llevarse a alguien con él como dice Marceline que puede hacer, no creo que nos eligiese.

Tranquilamente caminé de nuevo hasta la piedra en la que me solía sentar y me coloqué sobre ella, dedicando una mirada a Yormund y Alexia alternativamente. - ¿Y qué pensáis hacer cuando salgáis de aquí? - Pregunté de forma optimista, dando por hecho que íbamos a ganar. Después de tanto tiempo haciendo planes con ellos, tenía ganas de conocerlos un poco más.

Asentí a las palabras de Zyllah deseando que efectivamente todo saliera bien y dudé antes de contestar a su pregunta.

- En realidad no lo tengo claro. Sé que quiero volver a casa y vivir tranquila, pero no estoy segura de que sea lo más apropiado, dependerá de muchos factores. Si salgo de aquí con Andrew y no me odia, me gustaría conocer a su familia. Si no, tal vez viaje un poco, aunque me fastidie reconocerlo, eso es algo en lo que Liam tiene razón, soy demasiado ingenua y eso no me beneficia nada. He cambiado mucho, tú lo sabes bien, si vuelvo directamente a la aldea no estoy segura de ser capaz de tolerar sus desplantes y su miedo, podría cometer una estupidez. Dudo que fuera capaz de mantenerme sola y al margen como antes, tal vez estén mejor sin mí. Creo que debo aprender a vivir con lo que ha pasado aquí y conmigo misma antes de volver.- me encogí de hombros con pesar, mi futuro era incierto, no tenía demasiadas ganas de planteármelo hasta que fuera un hecho.

Escuché las palabras de Alexia, comprendiendo sus temores y asentí cuando terminó, antes de hablar con voz suave. - Creo que lo sucedido estos días nos ha cambiado a todos.

Hice una pausa y volví a asentir con la cabeza. - Creo que te vendrá bien viajar, el mundo es enorme y hay millones de los nuestros en él. Antes de que te vayas te puedo decir cómo encontrar algunas colonias europeas donde te recibirán bien. Y bueno si en algún momento quieres volver, serás bien recibida. Siempre que no vengas con intenciones de abrir el sello otra vez. - Terminé, bromeando de buen humor antes de hacer una mueca y volver a hablar. - No sé si podré levantar a Andrew, es muy arriesgado perder la única posibilidad que tenemos de volver. Estaba pensando en usar las cadenas con Megan. Ella todavía tiene en su poder una muerte y una resurrección. Estratégicamente parece mejor opción, pero me gustaría escuchar vuestras opiniones.

-No creo que vuelva por aquí jamás, pero, si me pilla de paso, tal vez venga a saludarte. Dadas las circunstancias, has sido más amable de lo que merezco. Podrías ordenarme sin discusión pero pides mi opinión y eso no lo olvidaré.- una sonrisa triste se extendió por mi rostro al escuchar sus dudas sobre en quién usar mi última cadena, me encogí de hombros.- Lo siento, en eso no puedo ayudarte. Ya sabes cuál es mi deseo, no puedo evitar ser egoísta en eso. Deberías tomar la decisión que más te convenga sin contar conmigo. Quien sabe, tal vez puedas convencer a Megan para que use la poción con Andrew, al fin y al cabo puede rellenarla.

Escuché la opinión de Alexia y negué con la cabeza levemente. - Hay un problema con esa idea. Andrew necesitaría estar encadenado para poder controlar sus ansias asesinas. Como Yormund o tú misma. Si encadeno a Megan y le ordeno traer a Andrew, él quedaría libre. Y nos terminaría matando incluso a nosotros. Si Andrew vuelve tendrá que ser encadenado, es la única forma de que pueda controlarse. Tú lo sabes bien.

Suspiré y miré la cadena en el suelo, dubitativa. - No voy a decidir nada por ahora. Pero creo que uno de los dos, Megan o Andrew, sería la mejor opción. Quiero terminar con esto esta noche, nos llevemos por delante a quien nos tengamos que llevar.

Hice una pausa y mi mirada vagó por la estancia antes de posarse en Yormund primero y en Alexia después. - He estado pensando que quizá sea peligroso que Yormund ataque a Ira si ella realmente tiene ese poder que dijo Gabriel. - Mi mirada se dirigió a la joven a continuación. - Alexia, ¿podrías intentar averiguar si funciona como él dijo? Sin exponerte, con discreción... He estado dándole vueltas a alguna manera de hacerlo sin arriesgar a Yormund. Estoy empezando a pensar que quizá sea buena idea que él ataque a Marceline. Me tiene realmente harta con sus cacareos... Y si realmente tiene el poder de llevarse a alguien con ella, probablemente escogería a Ira, ¿no? En ese caso el poder de Ira, si es como dice Gabriel debería desatarse hacia Marceline, que ya estaría muerta. Nadie moriría por su culpa. Sería como matar dos pájaros de un tiro y sin arriesgarnos directamente.

Guardé silencio un par de segundos, sintiendo la cercanía del combate en mi sangre. - Es sólo una idea, ya os diré algo más seguro cuando la noche avance un poco. - Les dediqué una sonrisa de medio lado entonces. - ¿Listos para darle otra paliza a ese borracho impresentable?

Yormund miró a Alexia y dijo: Buen ataque... pero la próxima vez, prefiero hacerlo solo. 

Era mucho más de lo que se podía esperar de Yormund, todo un elogio sabiendo cual era su carácter. Luego sintió aquel calor incluso en aquella celda y dijo con media sonrisa:

Apunto estamos de cumplir una semana aquí, y la gente empieza a dejarse llevar por su corazón. Cuando aprenderán que los sentimientos solo sirven para guardar heridas abiertas y rencor...

Miro con hastío a Zyllah y dijo como el que espera un trabajo más: Alguna enmienda para esta noche...

No había aceptado el mandato de Zyllah, sin embargo estaba incluso cansado de seguir con el arma en ristre y ser ignorado, sin posibilidad alguna de escapar.

-Entiendo tu punto de vista Zyllah, por eso digo que no te puedo ayudar con la decisión entre Megan y Andrew, aunque tenía entendido que él ya había decidido matar sólo traidores. Decide lo que sea mejor para ti. En cuanto a Ira trataré de sacarle información, pero no prometo nada.- en el otro lado llegó el momento y con él la muerte de Liam, por fin.

El enfrentamiento llegó y se fue pero seguía vivo, no podía creérmelo -¡Joder!- grité enfadada- ¿es que ese gilipollas no va a morirse nunca?- me sentía frustrada y cabreada, otra vez se complicaba y además había que aguantarle un día más. -¿Qué ha pasado?- respiré hondo para calmarme, no quería perder el control.- Pensaba que no podía protegerse dos veces seguidas, ¿tú entiendes algo?- le pregunté a Zyllah un poco desesperada, más aún cuando justo después Nil cayó muerto.

Me giré hacia Yormund con una sonrisa satisfecha. -Lo mismo digo, gato, pero mejor apártate tú la próxima vez.