Partida Rol por web

Al abrir el libro, de inmediato notas algo diferente, pues esta vez no eres transportada al despacho de Rowena Ravenclaw, sino a un lujoso despacho del Ministerio.

Sobre tu escritorio hay un espejo y un ejemplar del profeta, al verte en elnespejo, notas que ya no tienes doce años, sino que bordeas los treinta y cinco, luego reparas en el titular de "El Profeta"

GUERRA: LOS MUGGLE AMENAZAN CON DESTRUIR TODO LO QUE CONOCEMOS, EL CONCEJO DE SEGURIDAD MÁGICA EN ALERTA TOTAL.

Tras leer el titular del periódico la voz de Rowena resuena en  tu cabeza.

Necesitarás la ayuda de dos personas para esta misión. ¿A quiénes llevarás contigo? - pregunta la fundadora con seriedad.

- Cielos... - más que verme como si fuera mi madre, fue el titular del periódico lo que me impresionó. ¿Muggles amenazando a magos? ¿Cómo había llegado a eso? Era una locura.

Me puse de pies y empecé a dar paseos por el lujoso despacho. Parecía que era una persona importante, o me había colado en el despacho de alguien importante.

- Bien, Jane, piensa - Rowena estaba todavía esperando y tenía que darle una respuesta - bien, quiero que venga Kat, ella conoce bien a los muggles, ha vivido con ellos. Y... Freddy, es un chico inteligente y tranquilo, seguro que podría ayudarme a dialogar si surgen problemas si fuera necesario.

De pronto la puerta del despacho se abrió e ingresa Freddy, quien a sus casi treinta y cinco años desempeñaba el cargo de Jefe de la Oficina de Cooperación Mágica Internacional.

Tanto tu como ella, actual Viceministra de Magia estaban muy preocupados por la posible guerra contra los muggle.

Una de sus mayores preocupaciones era que uno de los principales promotores de la guerra era el actual Jefe del Departamento de Seguridad Mágica, Artemis Flamel y la actual Secretaria del Departamento de Seguridad Mágica del MACUSA, Jackeline Voorhes, ambos aurores muy respetados y reconocidos internacionalmente.

- Freddy - dije con un tono de alegría infantil que contrastaba con mi apariencia actual - qué bien que estés aquí. Necesito tu ayuda para una de las pruebas que puso Rowena y estoy increíblemente sorprendida por por toda la situación. Bueno, es la prueba de la locura así que podemos encontrarnos con cualquier cosa. Por cierto, estás muy guapo de mayor - le dije sonriendo para aligerar la tensión.

Me preguntaba como en esta realidad había conseguido llegar a ser la Viceministra de Magia, pero era una pregunta que tendría que esperar. sin mebargo, la mayor pregunta que me hacía era cómo Artemis había terminado liderando una revuelta de muggles contra el Ministerio, y también Jakie. A la chica de la máscara no la conocía tanto, pero no me la imaginaba metida en semejantes revueltas.

- Visto cómo está todo, creo tendríamos que hablar con Artemis y Jackie, para ver qué está ocurriendo - sugerí - ¿qué te parece? Me pregunto quien estará de Ministro ahora mismo para que se haya armado todo esto.

De pronto, la puerta del despacho de la Viceministra Rose se abre e ingresa la asesora ministerialnen asuntos muggle, Katherin Darling.

En el despacho de la Viceministra se encuentran el Jefe del Departamento de Cooperación Mágica Internacional, Freddy Townsend y la Viceministra de Magia, Janelle Rose.

Ambos conversan sobre la inminente guerra contra los muggle y como el Jefe del Departamento de Seguridad Mágica, Artemis Flamel, está excesivamente ansioso por lanzarse a la batalla contra los muggle.

Kat lleva con ella el expediente del incidente Potter el cual detalla como el célebre auror fue asesinado a sangre fría por un muggle debido a razones desconocidas.

Freddy asintió a su compañera. Le ayudaría a superar la prueba que Rowena le había puesto.

- Este universo alternativo es bastante... Interesante-dijo el joven Townsend con una sonrisa torcida-. No me gustaría acabar siendo Jefe de la Oficina de Cooperación Mágica Internacional, me parece que debe ser algo aburrido... Ah, y lo de la guerra tampoco me acaba de gustar.

La situación parecía complicada pero esperaba que entre todos pudieran superar la prueba.

- ¿Alguna idea de cuál es la misión?

Negué con la cabeza ante la pregunta de Freddy.

- No lo sé pero siguiendo el patrón de las pruebas anteriores tiene algo que ver con el título de la prueba: locura. Da miedo pensar en qué podría depararnos pero deberíamos estar preparados para lo peor. De momento creo que deberíamos ir a ver qué tal están las cosas por fuera y hablar con Artemis y Jakie a ver qué pasa.

Miré alrededor a ver si veía algo que pudiera darme alguna pista de lo que había ocurrido, informes artículos, notas lo que fuera. Estábamos en un despacho por lo que debería haber algún archivo que me diera alguna información.

Notas que Kat lleva consigo el expediente del incidente Potter, el cual marcó un antes y un después en la historia del Ministerio.

El infame atentado, no sólo puso en peligro la posición de la Ministra Granger, quien se vió forzada a nombrar a su auror de más confianza como nuevo jefe del Departamento de Seguridad Mágica.

El león de Londres, Artemis Flamel, quien encerró a Alexander Mengele en Numengard por sus múltiples crímenes contra el mundo mágico y muggle.

La carpeta te revela que durante el incidente Potter, además del afamado auror murieron otros diez magos, entre ellos cuatro niños.

Mientras lees el expediente, recuerdas que el incidente Potter marcó un antes y un después en la vida de Artemis, a partir de ese incidente, Artemis se transformó en una persona distinta.

El león de Londres pasó de ser un feroz protector de la Ley a una bestia salvaje sedienta de sangre, sus métodos pasaron de ser directos y firmes a rudos, violentos e implacables.

Cada infracción es castigada con absoluta brutalidad por Artemis quien no hace distinción entre magos y muggles.

La Profesionista rubia se ajusta sus gafas de sol en su cabello, acomoda los papeles en su brazo y agrega en un susurró:

—Piensen que estamos jugando a ser grandes, eso o que estamos actuando un papel.

Aclarado eso se aclaró la garganta y volvió a su papel:

—Señora Viceministra, aquí están los expedientes que pidió sobre el Caso Potter.

Cogí el expediente y lo miré. Lo que leí formó unas arrugas de preocupación en mi rostro.

- Esto no pinta bien, parece que no va a ser tan fácil como pensaba - pasé las hojas de nuevo para asegurarme de que no me había perdido ningún detalle importante y levanté la mirada visiblemente inquieta - según dice aquí el incidente Potter fue un antes y un después en el Ministerio. Por lo visto Potter era el jefe del Departamento de Seguridad Mágica. Hubo un atentado en el que Potter murió, además de otras diez persona, entre ellos 4 niños. Después de eso, la Ministra Granger casi perdió su puesto y le dio el cargo a Artemis por considerarlo el auror de mayor confianza en aquel momento.

Cambié de hoja y leí varias cosas antes de comentar algunos puntos.

- Aquí dice que Artemis capturó a Mengele por sus múltiples crímenes contra el mundo mágico y muggle y que le llaman León de Londres. Por lo visto, cuando murió Potter su personalidad cambió y se convirtió en una bestia salvaje sedienta de sangre. Sus métodos pasaron a ser violentos e implacables, castigando brutalmente la más mínima infracción tanto a magos como a muggles. ¿Donde quedó el Artemis protector que conocemos? - dije con cierta tristeza.

- La prueba tiene algo que ver con lo que está pasando, es cierto que todo esto es una locura, pero debemos saber algo más si queremos resolver la prueba - me dirigí hacia la puerta - todas las pruebas son una lección que debo aprender. Por lo tanto, será mejor que primero tanteemos el terreno y hablemos con alguien. Creo que tenemos que resolver este problema, pero puede que no sea así. Por el momento será mejor ver las cosas por nosotros mismos. Propongo que hablemos con alguien que esté dentro del conflicto, pero que no esté tan descontrolado como Artemis. Tal vez Jackie o la Ministra Granger.

-Apuesto por Jackie-dijo Freddy dubitativo-. Espero que ella no allá perdido el sentido común y dudo que el MACUSA quiera iniciar una guerra contra los muggle.

El joven Townsend parecía algo contrariado con lo que decía el expediente pero creía que el razonamiento de Jane iba por el lugar correcto y necesitaban algo más de información.

- De todas formas habría que hablar también con la ministra. Creo que la misión es evitar la guerra y parar a Artemis, hacerlo entrar en razón...

De pronto alguien llama a la puerta del despacho y una voz firme y severa se escucha al otro lado.

Jane ¿Puedo pasar? Necesito que firmes unos documentos para poder iniciar el traslado de unos prisioneros a Azkaban, se trata de Fenrir Greyback y Delphi Riddle, al fin cogí a esos miserables, pero la Ministra quiere ver tu firma en el expediente de despacho. 

Todos reconoceís la voz de Artemis al otro lado de la puerta.

Serena como siempre Kat habló:

—Sin duda, las cosas han ido de mal en peor desde la muerte de Potter.

Y lo dicho por Freddy no ayudaba.

—No solo en el MACUSA Señor Townsend, hablamos de la comunidad Mágica internacional en general. Y ni hablar del Conclave Vaticano; no mi Dios, esto es un desastre.

Mientras se lamentaba poniendo la mano en la frente vino a peor pues vino el susodicho en el peor momento.

—Y hablando del rey de Roma.—Miro a su jefa y preguntó —¿Deberiamos hablar con el Vice—ministra?.

Mientras hablábamos alguien llamó a la puerta y la voz de Artemis sonó al otro lado. Sin duda era la voz de Artemis, pero sonaba diferente del tono amable al que estaba acostumbrada, era como si le hubieran impregnado de la misma fría severidad que usaba mi bisabuela cuando hablaba de la importancia de la sangre. Nerviosa, miré a mis compañeros pensando en si debía decirle que pasara o despacharlo por el momento. Todavía no habíamos pensado qué hacer y encontrarnos directamente con Artemis podría no ser lo mejor en aquellos momentos. 

Al final, respiré hondo y con la voz lo más firme que pude contesté.

- Claro, Artemis, pasa - cogí un archivo cualquiera y me acerqué a Freddy y Kat con gesto serio, para dar a entender que estábamos hablando de cosas importantes - trae esos informes, voy a echarles un vistazo antes de firmarlos.

Freddy permaneció impasible ante la llegada de Artemis. Todavía no tenía ni idea de lo que se esperaba de ellos pero sabía que podrían hacerlo.

Se colocó a un lado y esperó a ver que sucedía y un momento para intervenir.

Artemis ingresó a la oficina de Jane y dejó una carpeta sobre el escritorio y sonrío con amabilidad.

No tardes mucho Janelle, quiero poner a ese par de psicópatas tras las rejas antes de la reunión del Concejo.

Una vez dicho esto, Artemis centró su atención en Kat y la miro con cierta severidad.

Katherin, aún no tengo nada sobre los que atacaron a tu hermano, te agradeceré que no ejerzas más presión sobre mi, porque de lo contrario voy a tener que emplear otros medios para sacarles la verdad a esos miserables y no me refiero al veritaserum.

Así que si no quieres que se los entregue a Mengele para que juegue con ellos, dame un poco más de tiempo para averiguar porque esos dos muggles golpearon a Fred.

Por cierto Freddy, la Ministra Granger está buscándote, necesita ultimar los detalles contigo para la reunión de esta tarde.

Las agitaciones de Artemis hicieron que Kat se plantara frente a el y le replicará:

—No empieces otra vez Autor Flamel. Sabes que esos muggle's están protegidos bajo los estatutos de seguridad del ministerio de magia, y nadie esta por encima de la ley. Ni siquiera tu.

Sin dejar de mirarlo continuó:

—¿Acaso no has pensado que ellos podrían estar siendo manipulados por algún frente radical o una de esas sociedades de sangre limpia que abogan por la supremacía de los magos?.

Desde que Katherin asumiera el cargo de asesora ministerial había jurado hacer lo posible para lograr el acercamiento de los magos y los Muggle pero tal tarea parecía imposible, los No-mac parecían animales salvajes que arremetían contra todo lo conocido por ellos en su limitada manera de ver las cosas. Y con cada caso que involucraba su intolerancia le hacia recaer en la frustración. Kat tendría todos los motivos para detestar a los no-magos pero no era así, mas que odiarlos los miraba con tristeza y hasta compasión, eran personas que guiadas por el miedo y la ignorancia hacían las cosas que hacían. Tal como había dicho el señor Jesucristo "Perdonalos señor, no saben lo que hacen".

Tampoco es que subestimara a Artemis ni que se olvidara de su hermano Fredd. Había hecho cuanto pudo para alejarlo de los peligros del mundo mágico y de las consecuencias de su verdadera naturaleza. Tenia que saber el por que.

—Igualmente no has obtenido resultados. Sí vas a seguir tienes que darme algo.*

Artemis se lleva los dedos al puente de la nariz y se lo frota con brío, mientras cierra los ojos.

Ya hice de todo, psicología, psicoanálisis, los he sacudido un poco. - dice, antes de dedicarle una mirada a Jane. - Tranquila aún no les he roto nada, pero en verdad quisiera hacerlo.

Mis instintos me dicen que están vinculados al caso Potter, pero no tengo nada sólido, sólo dicen lo mismo una y otra vez: "Eso es lo que merece la escoria mágica"

Maldita sea el estatuto del secreto existía para evitar eso y esa infeliz de Delphi lo estropeo todo. ¿Por qué tenía que asesinar al primer Ministro muggle y a toda la cámara de los lores durante las celebraciones del día de Guy Fawkes en señal de televisión abierta?

Ahora los muggles están en pie de guerra en todo el mundo por eso asesinaron a Potter y a.... - su antiguo compañero hace una pausa y luego continua, dándose cuenta que estuvo a punto de hablar de más. - y a todos esos inocentes.

El mismo Potter tenía sangre mestiza igual que yo, parece que la consigna es acabar con nosotros a cualquier precio, por eso debemos golpear primero y ya tomé una decisión.

Voy a luchar y me ofreceré de voluntario para comandar a nuestras fuerzas, sé que los jefes de los departamentos de seguridad mágica de Irlanda, Francia, Bulgaria y Alemania me seguirán, sólo tengo que obtener el voto de los Australianos y todo estará cerrado. - dice Artemis con convicción y algo de pesar en su voz.