Partida Rol por web

Tras estar durante la noche de fiesta la gente se recoge poco a poco en sus habitaciones. Al parecer cada cual se marcha solo y no se forma ninguna pareja, lo cual quizás os habría servido para relajaros en una situación tan tensa como esta.

Sin embargo el amanecer os llega con el canto de un gallo madrugador y poco a poco os vais juntado de nuevo. Algunos aún andan un poco resacosos y entre sonrisas y caras de preocupación os dirigís hacía la habitación de la única persona que falta por despertarse. Al abrir la puerta lo primero que os encontráis es una mancha en la pared.

Aunque el miedo y los nervios habían ido menguando por causa de la rutina diaria notáis un estremecimiento al terminar de abrir la puerta y contemplar la cara de pánico y temor de vuestro hasta hace poco compañero Camilo Castellanos al que le han arrancado la cabeza como si hubiesen estado mordisqueándole en el cuello con sarna.

El hombre recorria los pasillos escalera abajo, con su mirada perdida como si aun tuviera en su retina los restos que habian quedado de todos aquellos que en algun momento habitaron la casa junto a el.

-Estamos siendo cazados como animales en un corral durante la noche y siendo animales y verdugos durante el día... es posible que en algun momento todo esto acabe? Es posible que en los años futuros podamos olvidar esto y sobreponernos?- Su voz retumbaba en los pasillos, sin receptor especifico.

- Pobre hombre, un entierro digno merecerse debe...., digo con cara de tristeza...

Esto ya es demasiado para mi - digo mirando alrededor, me paro y me quedo mirando a Juan.... - Me ayudarías a darle ese digno entierro?

Yo también quiero ayudar -digo con voz lastimosa- Me siento culpable por mi apatía, por no haber intentado hacer nuestra estancia un poco más agradable y, sobre todo, por no haber hablado ni tan siquiera una vez con Camilo Castellanos.

El tiempo pasa y poco a poco va oscureciendo mientras unos y otros deambulan por la casa sin atreverse a mirarse a la cara. ¿Quien será la persona sacrificada? ¿Quien puede ser el vampiro? ¿A quien puedo acusar?
El tiempo pasa y el plazo de la votación se va acortando, pese a que algunos pocos ya han votado una gran mayoría aún no se ha decidido.

El recuento final de la votación indica un resultado muy claro de forma que ainhoa es la sacrificada del día. ¿Sera un vampiro?

Poco a poco la luz abandona el lugar sumergiendo la mansión en la oscuridad...

Os estáis equivocando... - el rostro pálido del pánico de Ainhoa enseguida se endurece. - Pero ya veréis. Esto no os llevará a ninguna parte.

Se reitra de la sala altivamente con dignidad, no sin antes mirar de soslayo a Juanca Dáver.

Maldito...

Cariño... Quizás sea mi destino seguirte...