Partida Rol por web

Tras dudar un poco, puesto que preferiría no meter a Phryne en esto, en tener que verme así y aguantar algo como esto, finalmente asiento con la cabeza y acepto su ayuda. Comento el absolutamente extraño y bizarro proyecto de "operarme" a mí mismo, y nunca unas comillas estuvieron más justificadas porque la delicadeza era semejante a la que tendría un mono con un bisturí al sajar en los alrededores sin excesivo cuidado. Prefiero quedarme sin brazo que dejar a Phry ir sola contra esos dos tipos con a saber qué capacidades. También es asombroso el poco dolor que siento, es una sensación tan extraña que a pesar de la lividez de mi rostro suelto una pequeña risa mientras secciono otro cacho de músculo.

- Jaja... No duele... Es raro... -con esa observación que facilita tanto el pensar que se me está yendo la cabeza, finalmente arranco un pedazo más de carne y pego un tirón a la gran zona cortada, lanzándola a lo lejos sin miramientos, ya había tenido bastante de cosas raras.

Por instinto, intento mover el brazo... y evidentemente no puedo. Miro el miembro colgante con un gesto extraño, y luego compongo una media sonrisa cargada de tristeza, aunque estoy adormecido por el efecto de la vicodina. Quizás por eso todavía no he caído redondo.

- Lo noto colgar... -comento con ligereza, es difícil dictaminar qué de todo lo sucedido es lo que me tiene así- Vale, ahora... ¿cómo era...? -digo pensativo- Yo quien... cierra... la vida... 

Oh, dios... Te has vuelto más imbécil de lo normal... Mierda, ¿tienes que molestarme? No quiero controlar tu cuerpo hecho un harapo. Escucho su voz en mi interior, aunque suena cansada. 

- Venga, no seas nena... -digo, lo cual mientras estoy mirando en dirección a Phry (con los ojos un poco idos) y sin ninguna lógica para lo que ella está diciendo queda extraño, de nuevo.

Vale, cretino, te lo paso por esta vez porque no quiero que mueras tan pronto. Intenta dejar la puerta al mínimo y yo no haré por entrar, no me apetece estar drogado y con el hombro abierto. A ver, repite conmigo: Yo, quien cierra los ojos a la vida... (Ay, que cruz...) Y sí, lo de los paréntesis es algo así como lo que piensa un pensamiento.

Tras un par de largos minutos logro concentrarme lo suficiente para recitar el cántico del tirón y miro a Phryne con dos monedas de plata por ojos.

- Jaja... Brillas... -comento mientras trato de hacer aparecer los grilletes de Nen con la guía de Hades.

Los ojos de Yuki se humedecieron entonces ante tus palabras, casi como si sintiera que no la juzgabas y que incluso la apoyabas en este momento, un momento duro, que odiaba...

Comenzó a llorar entonces formando una cuchilla helada en sus manos y enterrándola con fuerza en la espalda del pobre hombre... Que no tardó mucho en morir... La sangre bañaba las manos de la chica helada y un vapor salía de ellas cuando la cálida temperatura del líquido rojo entraba en contacto con su fría piel.

[color=#0B615E]-Y-Ya no quiero matar a nadie... Snif... Lo prometiste Kuro-Chan!-[/color] Dijo tirándose de rodillas al piso.

Kuroko solo se agachó y soltó un suspiro pesado mientras acariciaba su cabeza [color=#240B3B]-Lo sé Yuki... Lo sé... Pronto... Lo prometo...-[/color] Dijo entonces haciendo una mueca de dolor. Ya habías tocado la piel de Yuki, y era doloroso hacerlo... Si bien Kuroko podría usar sus vendas, no lo estaba haciendo.

Natsume llegó entonces con un pañuelo en mano y se lo dio a Yuki, tenía manchas de sangre por todos lados, y pese a ser rojo, se notaba que en algún momento fue blanco [color=#610B0B]-Toma... Tranquila, ten paciencia Yuki...-[/color] Dijo abrazándola con fuerza. Un extraño vapor salía de ambas al tocarse, pero a ninguna parecía dolerle, como si sus temperaturas tan extremadamente diferentes las hicieran compatibles una con otra... Un poco de luz quizás en sus miserables vidas??

Kuroko se acercó a ti dejando a Natsume con su hermana mientras Balder solo observaba [color=#240B3B]-No puedo darte respuestas, pero puedo llevarte con quién puede... Vendrías con nosotros??-[/color] Dijo entonces tendiéndote la mano

tenia todas las ganas de ir contra aquellos idiotas, pero al ver como estaba Gin, debe desistir, entre que intentaba curarse y los efectos de la droga que había tomado, no podía pelear, la chica suspiró y volvió donde él, tomando su mano y haciendo que se sentara en el suelo, aun quedaba agua en la cantimplora, seguía tibia, pero le dio de beber, era algo que podían tomar, lo necesitaban.

—  creo que por hoy, deberemos quedarnos aquí, estas muy yonki,  —  acarició sus cabellos y miró a todos lados, era mejor usar uno de los portales, para volver a alguno de los puntos guardados —  seré la hembra proveedora, —  se acercó a él y besó sus labios, lo besó varias veces hasta poder beber un poco del agua, les hacía falta. — creo que nos moveremos a otro punto, no sé cual, pensaba a donde nos encontramos con 484, de ahí, deberemos movernos y encontrar la comida, a las 12, entraremos en mi portal, ahí podrás descansar más — acarició su mejilla — lamento no poder hacerte entrar antes — se sentía culpable, de alguna forma, y molesta por no poder ir tras los que habían dejado así a Gin, sin embargo, prefería dejarlos partir si con eso podía cuidar a Gin.

— Venga, busquemos un mejor lugar donde puedas descansar y que se te pasen los efectos — le tendió la mano llevado en su otro brazo, la mochila de Gin, con el vestido roto y con manchas de sangre, era como si hubiera ido a la guerra.

Cuando finalmente decide que es mejor que no vayamos, niego varias veces con la cabeza y luego detengo ese movimiento, me marea un poco y se me hace raro que con el bamboleo se me mueva el brazo. Decido sujetarlo para que no ejerza presión sobre el hombro, y comienzo a hacerlo justo cuando aparecen los grilletes, mirándolos con curiosidad.

- Ehh... Decías... Sí, el que me disparó. -retomo el hilo- No, no te frenes. Si quieres ir, iremos. No seré una carga. -afirmo, aunque no tengo idea de que eso vaya a curar ni como.

Aún con esas, si hace falta pienso pelear con los dientes. No voy a dejar que Phryne se enfrente sola a los enemigos y no hay suficiente droga en mi maletín para evitar que haga eso. Bueno, habida cuenta de que tengo como otras 10 vicodinas, probablemente sí, pero dejémoslo como figura retórica y olvidemos los cálculos de sobredosis.

- Phry, no... te... -me cuesta un poco centrarme con las pastillas, pero al instante prosigo- No te preocupes... por mí. Decide lo mejor. -le digo sin más.

Phryne se quedó entonces cuidando a Ginnei, quien pese a sus heridas podía sanarse. Ya no quedaba rastro de los que alguna vez dispararon a Ginnei, se perdieron al entrar a una Cueva, de eso ya más de 20 minutos.

Habían pasado unas dos horas desde que Ginnei se había tomado sus pastillas y no habían sido atacados por nadie hasta el momento, e incluso la zona por donde ellos andaban parecía segura. Al estar cerca de las costas, casi nadie se acercaba. Al parecer muchos cazadores se quedaban cerca de las costas esperando a sus presas, personas que por necesidad se acercaban a las costas donde tenían agua y comida en exceso, para entonces atacarlos desprevenidos.

No eran pocos los que hacían esto, y algunos tenían Nen incluso. Tenían agua, pero les faltaba el alimento... Y de paso, habría que esperar que los efectos de la droga se pasaran en Gin.

Se quedó junto a Gin durante su viaje sicofelico del vicodin, el pobre no valía nada aunque si había logrado sacarse el aparato por si solo y luego curarse, ahora le tocaba a ella cuidarlo y hacerlo comer, algo aunque fuera. Le dio un poco más de agua, y cuando pudo ver que estaban en un lugar seguro, comenzó a pensar en su plan, debía tener uno, imaginó, así que buscó cortar unas ramas y cubrió a Gin, era lo mejor, de ahí, volvió a invocar a sus moogles, está vez, dejaría uno cuidando a Gin mientras ella buscaba algo para , luego debería ver cómo llegar a la playa, ahí había comida y agua aunque, tal como dijo en un principio, era un sitio peligro, lo bueno es bueno ella tenía mecanismos para hacer de todo, un poco más seguro. 

De pie al lado de Gin, saco una fotografía de donde estaban, para volver y envío a los pequeños en busca de comida. 

Tras unos 20 minutos, recibes una señal de un Moogle, no muy lejos encontraron fruta, y otro de ellos fue mordido por una serpiente y con el animal aún enroscado en el brazo mandaba una imagen diciendo que había conseguido alimento mientras la mostraba victorioso.

En el camino encontraron un par de cadáveres humanos, que estaban completamente carcomidos. Solo quedaban los huesos, pero sin embargo a su alrededor habían indicios de que una batalla se desató allí hace poco. Posiblemente ayer... Era imposible que los cadáveres quedaran hechos huesos de la nada, algún animal carroñero debía comerlos por la noche

Deberías dirigirte hacia el punto donde encontraron la fruta entonces, y ya tendrías alimentos para Ginnei y para ti

Ya tenía la información necesaria, incluso es más, tendrían comida para todo el día (por eso ordenó al moogle que había encontrado la serpiente que la trajera pero rodeando lo más posible todo para no advertir a otros su posición), así que ocultó mejor a Gin y le dijo que iría al baño, lo que era una escusa mala considerando que podría entrar a su dimensión, pero no le dejo opción pues se separó de él casí corriendo. Dejaría a dos moogles de punto fijo con Gin y a los que encontraron los cuerpos, les ordenó sacar fotografías y volver, fuera quien fuera el responsable, era una bestia. 

Treparía a un árbol y se iría entre ellos, para avanzar rápido, atenta a las circunstancias y posibles peligros, debía reducir al máximo las situaciones de peligro. 

El acto sucede y por fin entiendo todo: Lo que decía Yuki acerca de Kuroko y su diferencia con Balder y Natsume. Entiendo el motivo de que Kuroko haya asesinado durante la prueba como lo ha hecho y el por qué del odio y sufrimiento de los "Alterados", quienes de lejos parecen ser solo asesinos pero cuando se les observa bien, se ve que son más atormentados que otra cosa.

Aún hay cosas que no me gustaron de sus actuares y dudo que se hayan limitado a matar solo lo necesario, pero hasta que no solucionen su problema, como parece que será pronto, no se les puede terminar de juzgar.

"Lo importante será qué hacen de sus vidas después."

Me giro cuando escucho la voz de Kuroko a mis espaldas. Puede ver que mi rostro no está enojado y que mis ojos tienen un poco de humedad, como si hubiese contenido un poco de llanto que nunca llegó a salir. El dolor de Yuki me es muy familiar y esta situación no me es indiferente.

Le acepto la mano y le contesto:

 - "Claro que iré. Quiero saber qué sucede y en qué puedo ayudar. Supongo que de la prueba no debemos preocuparnos mucho. Asesinando así ya debes tener muchas placas. ¿No?"

Le sonrío un poco, quitándole peso al asunto de lo que deben hacer y entiendo finalmente que ellos son víctimas también y que los culpables están ahí fuera, esperando en ese lugar del que ellos huyeron y que deben ser detenidos. Quizás, si consigo ayudarlos, ellos también querrían acabar con quienes me hicieron daño. Si somos lo suficientemente fuertes y estamos juntos, podemos conseguir lo que sea.

No fue difícil alejarse, la velocidad de Phryne era soberbia, y su sentido de la orientación, pese a no ser tan bueno en un bosque, estaba siendo ayudada por su Moogles, quienes estaban diseñados, justamente para ello.

La chica no tardó mucho en llegar a su destino. Su Moogle dió una señal de que allí había alimento, y así fue. Habían montones de frutas, frutas que no sabía si eran o no eran venenosas, pero allí estaban! Luego podría pregutarle a Gin o buscar entre su base de datos.

Sin embargo, antes de tratar de volver con Gin, un llanto llamó su atención. Alguien lloraba, no muy lejos de allí. Parecía ser una niña, o una joven, no sabías, pero efectivamente era una chica. Lloraba desconsoladamente, y ese llanto venía desde una cueva cercana.

Pasaba de rama en rama, con una facilidad que nunca antes había logrado ejecutar, pero su cuerpo pequeño y flexible parecía adaptarse a la perfección a sus nuevas habilidades, pues el ren concentrado en sus piernas le ayudaba a avanzar con una velocidad que le sirvió para estar en muy poco tiempo donde estaba toda esa fruta. Había mucha comida, y aunque no sabía cuales eran cuales, decidió sacar su neko y activar un portal en la zona, no sabía cuándo sería necesario volver, así que guardó las que tenía más o menos claro que servían, usando a los moogles que le ayudaran a bajar parte de las frutas mientras ella sacaba otro poco, de la misma manera que lo hizo la vez pasada, usando los portales para ir subiendo por los árboles.

Su Bitcoin's bag se llenó de la fruta que sería buena para el día y un poco más, más la serpiente que ahora mismo pondría a cocinar dentro del hidden hostal, cuando escucha los llantos. Ladeó su cabeza, era una cueva y no le importó que hubiera una chiquilla sollozando, primero, no podría haber una niña en esa endemoniada prueba y segundo, ya había caído en una trampa de ese tipo, era obvio que no se acercaría, además, tenía a Gin solo y no le importaba nadie a excepción de él.

Phry cerró los ojos y activó el portal donde estaba Gin, aunque dejó a un moogle que fuera dónde provenía aquel llanto, ordenándole no volver, pues, lo haría desaparecer apenas pudiera detectar de dónde provenía aquel llanto y era necesario intervenir pero, sobre todo, si esa cueva era un lugar seguro para esconderse. Entró en su portal, com la fruta y aparecería justo al lado de Gin, donde había dejado antes el portal activado.

Prhyne corrió usando REN para salvar una mayor distancia rápidamente, y en cuestión de unos pocos minutos, sin que Ginnei tuviera tiempo de notar su ausencia, volvió a aparecer por uno de sus portales.

Su Neko sonó entonces, mostraba una imagen del Moogle. Se acercó a la cueva, donde una chica lloraba, y otra la abrazaba tratando de consolarla. En su abrazo y llanto, emitían un vapor de su cuerpo, quizás era Nen?? No era tan distinto al aura, pero tenía más consistencia.

También había un tipo con la cara pintada, quien miraba la escena desde uno de los lados de la cueva alejado.

En el centro de la cueva, estaba el 484 tomando a Hiro del brazo o la mano. Lo que sea que estuviera pasando era extraño de contemplar... Una venda salió entonces golpeando al Moogle y perdiéndose la señal...

Una extraña criatura apareció en la entrada de la cueva entonces, Kuroko estaba de espalda, pero aún así, movió su otro brazo y atacó con una venda. El bicho se deshizo en el aire, estaba formado por Nen.

-Tsk!- Soltó -Nos están vigilando...- Dijo para finalmente darte un apretón de manos -Entonces bienvenido...- Terminó de decir de modo solemne. Yuki dejó de llorar al oir eso, si bien seguía sollozando, ahora ya no lloraba y se limpiaba las lágrimas con el pañuelo de Natsume

-Bien, hay que moverse- Dijo. Todos asintieron, y Natsume ayudó a Yuki a pararse antes de partir entonces detrás de Kuroko, quien no respondió al asunto de las placas, solo sonrió ante la pregunta.

Phryne volvió justo al lado de Gin, el portal se abrió, tal como si fuera una puerta y salió la joven, que a medida de que salía de su universo paralelo, su traje especial iba desapareciendo dejando paso a sus ropas manchadas y rotas, traía un poco de agua y algunas frutas, mientras los moogles preparaban algo de jugo con las frutas y cocinaban la serpiente que uno de sus pequeños habían cazado.

— toma, bebe un poco más —  le dio el cantimplora con agua potable y le mostró los tipos de frutas que habían traído, — encontré todas estas frutas, no sé cuales son venosas o no, sólo reconozco algunas, pero dime tú, en ese lugar hay bastante y dejé un portal activo para volver cuanto lo necesitemos, ah, comeremos serpiente asada, espero que te guste como cocinan mis moogles — estaba agachada justo delante de él, y levantó su mano para acariciar su mejilla cuando siente la vibración en su Neko que le avisaba sobre el moogle que llevaba.

— tsss — la información desencajó su rostro, 484 estaba con el chico Hiro, pero ese era capaz de arreglárselas solo, por algo se había separado con ínfulas de superioridad moral, como si eso importara en ese lugar, sin embargo el llanto de las chicas que se abrazaban ante la presencia de ese otro sujeto tensó su cuerpo, Gin sabía perfectamente que habían cosas que ella no toleraba y que su moralidad dejaba de ser utilitarista en esos momentos, justamente como aquel. Gin podría ver parte de la transmisión, escuchar a las chicas por lo menos, y al ver los ojos de Phry, sabría que iría.

— come y bebe... iré por esas chicas, las llevaré a alguno de los portales — se volvió a poner de pie, había gastado aura para ir por la comida, y las veces en que había usado los moogles, que ya eran a lo menos tres veces,  puso a Neko delante de ella, y activó el comando, llegaría con su firewall activado, y sus armas, para eso luego de activar sus arma, que en medio de humo y destellos, apareció un subfusil, que cayó en ambas manos, mientras comenzaba a crearse su armadura.

— voy y vuelvo... — le dice mientras un nuevo portal se abre, la puerta dentro de su cuarto de Deep Web la llevaría al lugar donde estaban las frutas...

Tras sanarme por completo, compruebo con alivio que puedo seguir moviendo el brazo y compongo una sonrisa un poco aturdida. Tras eso, gracias a la vigilancia de Phryne puedo usar Zetsu para reponerme. Sonrío a Phryne que se queda preocupada cerca mía mientras pasa eso, tanta preocupación por su parte me abruma... y quizás dado mi estado mental me recuerda que no es la primera vez que se tiene que preocupar tanto por mí porque mi estado mental no esté como debe. Por supuesto, no son pocas las veces que hemos cuidado los unos de los otros entre Nero y nosotros porque alguno esté herido (más usualmente Nero o yo, aunque mi alta resistencia hacía que rara vez convaleciese si no eran heridas muy serias), pero no son tantas en las que uno estuviese mal por otros motivos.

Tras unos instantes, niego repentinamente con la cabeza ante mis propios pensamientos dándome cuenta de que no es lo mismo, y entonces sin saber por qué me encuentro a medio cubrir de ramas.

- ¿Qué...? -pregunto simplemente, si usualmente no puedo seguir a Phryne en pensamiento, drogado, menos.

Pero oye, los colores y figuras borrosas lo compensan. Es como haberse metido en un cuadro. ¿Se sentiría así aquel guardia de museo al que le pegué la cabeza contra una réplica del Guernica? Hmmmm... Guernica... Suena a canica alemana...* Me río yo solo.

¿Dónde está Phry, por cierto...? Oh, ya ha aparecido y se le está desvaneciendo el traje, abro bastante los ojos pero entonces la expresión muda un poco al ver toda la sangre en su ropa.

- ¿Qué...? -pregunto de nuevo, siendo original.

Entonces niego con la cabeza, ya recuerdo, la operación. Me miro el hombro, ¿no lo tenía abierto? Bueno, supongo que así está mejor.

Mientras como y bebo, Phryne reproduce unas escenas en la computadora y miro de reojo. Hay gente llorando, gente no tanto... Un niño siendo agarrado por una momia, ¿una peli de miedo? Mi cerebro entonces comienza a procesar las imágenes y entiendo lo que pasa, aunque para entonces Phry se ha levantado y ha hecho aparecer un arma, como una pequeña guerrillera que estuviese dispuesta a liarse a tiros contra todos los de allí. Casi sin darme cuenta extiendo el brazo y la agarro por el antebrazo con cierta fuerza, no como para hacer daño pero sí suficiente como para no dejarla escapar sin atizarme.

- Espera... Voy. Me quedo fuera, si quieres, pero voy. -le digo, entiendo que no quiera llevarme a una cueva con 484, pero tampoco quiero quedarme sin tener idea de dónde estará mientras ella se juega el tipo.

Quiero tener oportunidad de apoyarla si las cosas se ponen feas, por mal que esté yo.

Veo aquella cosa que Kuroko elimina con una venda y la reconozco de inmediato. Son los bichos que Phryne genera con su técnica especial, con esa cosa que hacía aparecer en su muñeca y que parece que servía de muchas cosas, aunque no llegué a saber cuales. Esos bichos extraños tampoco sé qué hacen pero de seguro sirven de espías.

"Ella tiene cara de que sus poderes molestan y sirven para muchas cosas. Debe buscar la información y Ginnei pelea. Supongo que en eso se basa su equipo."

Comienzo a caminar junto a ellos mientras hablo:

 - "Esa es la habilidad de una amiga mía, una que ya conoces. De seguro ya saben donde estamos."

Espero que Phryne sea lo suficientemente inteligente como para saber que deberían salir de nuestro camino. No quiero que ella y Ginnei mueran y yo no seré capaz de defenderlos de estos tipos si se los encuentran. Lo mejor será que se mantengan lejos, sobre todo sabiendo como Gin y que va a querer matarlos.

Phry iba entrar en el portal cuando Gin le sujeta por el brazo, impidiendo que desapareciera en el vórtice, la chica suspiró y se giró hacia él, colocando su mano sobre la mano de él para que la soltara.

— ¿estas loco?, en este momento eres un lastre, apenas sabes lo que está pasando, Hades puede desatarse y comenzar a matar a diestra y siniestra, olvídalo, sólo quédate aquí, yo únicamente iré por esas chicas, si quieren entrar en el portal, las sacaré, no tengo intensiones de ir por Hiro y el loquito de las vendas, ese chico, aunque es un niño, es muy fuerte — se inclinó sobre su rostro y lo besó suavemente — descansa, odio verte así —.

Ahora sí, inclinó su cabeza entrando en el portal, el que se cerraría tras de ella, aunque Gin podría entrar también si se movía rápido, Phry iría al portal donde estaban las frutas, y de ahí, a la cueva....

Sus primeras palabras me entristecen un poco y exaltan las dudas que tengo sobre mí mismo en este estado... A ver, que me encuentro de lujo, pero eso de liarse a espadazos me da una pereza suprema ahora mismo. Eso está a punto de suponer que se me escape la ocasión, pero entonces caigo en que ni sé donde está la cueva y agarrando mis cosas con una mano (trabándolas con esos torpes artilugios llamados dedos, mejor dicho, y enganchando la mochila en la muñeca) y me lanzo al frente. Una cosa es que vaya a jugarse la vida, otra que no sepa ni donde... Sí, dicho así suena raro, pero sé que en algún lugar de mi mente es lógico.

Creo.

Espero.