Partida Rol por web

- Jeje, tranquila Saki. Aunque tu Arcano te controlara, si hubieras ido por ahí de noche lo sabrías. Estarías cansada!

HANA SORBE EL TÉ SONORAMENTE

- Por cierto... sé que es poco profesional hacerte esta pregunta, pero ¿has visto a D-Five por algún lado? Siempre estaba en casa de Mei, pero ni siquiera ha pasado por aquí desde que se fue Mei.

Suena un silbidito en vuestros móviles, casi al unísono.

- Disculpa. - Dice dirigiéndose a Hana y coge el móvil.

Al leer el mensaje no puede evitar poner mala cara. Una parte de ella se sentía con la necesidad de confirmar aquello, pero otra parte se sentía incómoda por tener la necesidad de hacerlo. Saki mira de reojo a Hana, comprobando si ella está dispuesta a escribir el mensaje. 

Al principio Hana no parecía que tuviera intención de mirar el móvil. Pero al ver tu cara de expectación, mira el mensaje.

Cuando lo ve, empieza a escribir. En unos segundos ha contestado a todos.

- Parece que envió esa carta a todos vosotros. Yo en cambio no la he recibido. ¿Quizá ya dijo todo lo que quería decirme? O quizá me quisiera tener tan desinformada como su maestra la tenía a ella! Siendo Mei, me creo cualquier cosa.

- Puede ser... - Entonces Saki frunce el ceño al caer en algo. - Si a ti no te ha llegado la carta, ¿Cómo sabías que tenías que venir hoy al templo? Ella nunca te especificó que comenzarías hoy, ¿No? Por mucho que ayer pudieras pensar que había llegado el día, no tenías idea de que Mei se iba a marchar tan pronto. Al fin y al cabo hay mucho papeleo que hacer antes de ser sacerdotisa, ¿No?

- No supe que se marcharía tan pronto hasta ayer. Sabía que se marcharía algún día, y ayer vi claro que se iba a marchar ya. Ya estaba preparada por si se fuera Mei.

Ves que una gota de sudor se desliza por la mejilla de Hana.

- Pero lo del papeleo... ay Saki. Mei me insistía en que lo rellenara cuanto antes pero no me preocupé demasiado porque pensaba que quedaba mucho tiempo. No tengo que entregar muchas cosas, pero seguro que se enfadarán conmigo.

Hana estaba genuinamente preocupada. Parece mentira que fuera la misma persona que hacía unos minutos le había dicho que no se preocupara por faltar un día al trabajo.

Hana se levanta y comienza a rebuscar en unos cajones.

- Tienen que estar por aquí, en alguna parte...

Hana saca al fin y papel de uno de los cajones con una sonrisa, pero su cara toma muchas formas diferentes antes de hacer una risita.

- Jeje. Es una carta de Mei. Parece que al final si que me la dejó. "Querida Hana... No te preocupes por los papeles. Ya está todo en orden." ¡Yuhu!

Hana da un saltito de alegría. Luego sigue leyendo.

- "Sabes bien lo que tienes que hacer como sacerdotisa y confío en tus posibilidades. Esta es la última vez que te hago los papeles."

Ahora Hana parecía deprimida.

- "Pero confío en que pronto te acuerdes de llevarlos al día."

Hana deja de leer en voz alta y entonces dice:

- Anda Saki, aquí dice que Mei te manda saludos... y que te ha dejado otra carta. Seguro que se olvidó de decirte algo. Está por aquí...

https://www.youtube.com/watch?v=3i7Sznuu-Ww

Hana abre otros cajones buscando esa carta. ¿OTRA carta? ¿Por qué dos? Y es como si Mei esperara que estuvieras ahí en ese momento exacto. ¿Qué significaba todo esto?

Finalmente, Hana da con la carta y te la da sin abrirla mientras termina de leer la suya en voz baja.

La carta tenía el mismo aspecto que la anterior, pero algo en ella era mucho más serio. Desprendía un aura que solo podía ser de Mei.

Tras unos momentos de duda, abres lentamente la carta.

 A dónde ha ido Tsukihime es algo que solo una chica podría saber...

Y ya está. Solo esa frase, escrita en medio del papel, dejando un gran espacio en blanco arriba y a bajo, pero a la vez, llenando toda la carta. Maldición, Mei. Esto solo acababa de empezar, ¿no?

- Aaargh, ¡Estúpida y enigmática Mei...! - Dice Saki sin querer en voz alta, exasperada. Y entonces, cómo si volviera a la realidad, se da cuenta de que está con Hana. - Oh... Bueno. - Algo avergonzada por su reacción. - Parece que aún que esté lejos de aquí Mei sigue dispuesta a hacerme las cosas difíciles. 

Saki le da la carta a Hana. Y cuando se asegura de que la ha leído, continua. 

- Quizás en el fondo quiera ayudar, ¿Pero es necesario hacerlo de esa forma? Pensé que desde lo que pasó anoche dejaría atrás esa forma de actuar... 

Mei estaba irritada, pero el mensaje de Mei ya estaba en su cabeza dando vueltas, demasiado fácil de memorizar... 

"A dónde ha ido Tsukihime es algo que solo una chica podría saber..."

"Solo una chica..." 

"¿Una chica? ¿Se refiere al concepto de chica en general o a una chica en concreto? Podría haber utilizado otra palabra... Y quien sabe, ¡Siendo muy optimistas podría haber utilizado un nombre! Al fin y al cabo seguro que Mei sabe casi toda la gente con la que me junto... Si es que la frase se refiere a una persona en concreto... Y específicamente a alguna que conozco."

Pero si fuera una chica en concreto... ¿Cómo sabría a dónde a ido Tsukihime...? ¿Quizás esa "chica" sería la culpable de su desaparición? Pero entonces... ¿Sería una de las chicas con las que Saki se había reunido hoy? 

"Chika, Atsuko y Hana..."

Un escalofrío recorrìó el cuerpo de Saki al recordar su encuentro con Chika. ¿Realmente lo recordaba todo? Saki sabía que se olvidaba de algo, de algo importante... Y de alguna forma sabía que había sido en algún punto de su conversación con Chika... ¿Sería tan importante cómo para provocar la desaparición de Tsukihime? Quizás tuviera que preguntarle directamente a Chika en vez de seguir nadando en círculos alrededor de esa idea. 

- Qué persona tan enigmática. Nunca llegué a entenderla del todo. Si ella misma se vio afectada por la poca información de su maestra, ¿por qué ha hecho lo mismo con nosotros?

Hana decía esto quejándose de Mei, pero no parecía afectada en absoluto. Parecía hasta que le hiciera gracia.

- ¡Te ayudaré todo lo que pueda con esto Saki! Habla de una chica... ¿crees que podría ser yo?

- No creo... Mei puede ser muy enigmática, pero que la "chica" de la que habla sea la misma que me iba a entregar este mensaje me resultaría incluso estúpido por su parte. Quiero decir, no dudo que me puedas ayudar... - Se sonroja. - Sólo creo que Mei también debe tener sus estándares en cuanto a enigmas se refiere. - Pequeña pausa. -De hecho estoy pensando ya en alguien de quien se podía tratar... Quizás no sea ella pero aún así tengo algo importante que preguntarle y estoy segura de que me ayudara de alguna forma a saber que está pasando. Estaba hablando con esa chica cuando Tsukihime me habló por última vez... Pero no recuerdo que dijo Tsukihime, siento que me estoy olvidando de algo importante. 

- Pareces muy segura. Si estás tan segura no puedes estar equivocada, ¿no? Serían demasiadas coincidencias. ¿Cuando hablarás con ella?

- Imagino que... ¿Mañana por la mañana? Es curioso porque siempre me la encuentro de camino a la... - "Universidad... Pero mañana ya son vacaciones." - Bueno, creo que le mandaré un mensaje mejor. 

Saki saca el móvil y escribe. 

[Hola Chika, ¿Podríamos quedar? Hay algo que me gustaría preguntarte en persona.]

Saki envía el mensaje y se arrepiente después. ¿Quizás había sido demasiado poco concisa? Ahora Chika podría pensarse cualquier cosa... ¡Y encima tan siquiera le había especificado cuando podía quedar! Saki escribe otro mensaje. 

[No es urgente, pero es importante. ¿Te parece bien mañana dónde siempre nos encontramos?]

Y Saki le da de nuevo a "Enviar", algo más convencida. 

- Ya está. - Dice mirando a Hana. - Ahora a esperar. - Y viendo que no tenía nada que comentar aprovecha para beberse el té, que ahora ya estaba algo más frío de la cuenta. 

En un instante suena el móvil.

"Cuando quieras Saki, yo ya estoy de vacaciones! Si quieres mañana por la mañana nos vemos donde siempre como dices!"

"Estos niños de hoy en día... Siempre pegados al teléfono..." Piensa Saki algo asqueada. 

Y tras acabar con el té, mira el mensaje y añade. 

- Vaya... pues ya está dicho, he quedado con ella mañana por la mañana. - Saki se mantiene en silencio unos segundos pero de pronto se le ocurre una pregunta que hacerle a Hana. - Hana, ¿Mei te enseñó diferentes formas de tratar con la gente con arcanos? Digamos... ¿Tratar con un caso especial? 

- Hmm... aunque hubiera sido lo lógico, no me habló demasiado de como tratar a gente con Arcanos. Pero sí que me planteó un caso que no creo que ocurra. Me dijo que si alguien tenía un Arcano muy agresivo me dejara atacar, pero no sé en qué pensaba. A ella no le sirvió de nada.

Saki tenía intención de profundizar en su anterior pregunta, pero el último comentario de Hana le había llamado demasiado la atención. 

- ¿A que te refieres? ¿Mei se enfrentó contra algún arcano agresivo?

- Eso me pareció. Quedó con alguien un día. Alguien que dijo Mei que la odiaba. No pareció una pelea dura, pero Mei no sacó nada bueno tampoco de dejarse atacar. No sé qué pretendía haciendo eso. Si hubiera sido un Arcano más poderoso hubiera acabado muy mal seguro!

"Así que Mei tenía enemigos agresivos... ¿Será alguno de los que conozco? Me hubiera gustado saber por que la atacó... Aunque supuestamente ahora se han acabado las malas relaciones con Mei... Es sólo curiosidad." 

- Esperemos que con Mei desaparecida a ese arcano se le bajen los humos... Aunque si ves algo sospechoso no dudes en llamarme, estaré aquí en un par de saltos. - Sonríe, al fin y al cabo el templo no estaba tan lejos de su casa. Entonces Saki decide volver al tema principal. - Bueno, sobre lo que te comentaba del "caso especial"... ¿Que harías tú si te encontrarás con una persona cuyo arcano a dominado su cuerpo durante tanto tiempo que casi parece que el arcano sea la persona real? 

- Supongo que... hablaría normalmente con esa persona. Al fin y al cabo es la misma persona, ¡y hay Arcanos divertidos!

Ves que piensa un poco más.

- No sé, no sé... quizá sea una buena oportunidad para pedir la opinión del Arcano. Podría aprender cosas de la persona que no podría antes, ¿no crees?

- Supongo que tienes razón...

Dice Saki, para nada convencida de hacerlo. Al fin y al cabo estaba decidida en involucrarse en la vida de Chika lo menos que pudiera... ¿No podía ayudarla sin conocer los detalles? Es más, ¿De verdad Chika necesitaba ayuda? Una chica de su edad no se debería de comportar como ella pero de todas formas si Saki no lo hacía el mundo la transformaría por si sola. ¿Pero en que clase de persona se convertiría si el mundo le enseñaba a como comportarse por la malas?

"Parece un problema tan sencillo a primera vista... Pero es tan complejo en el fondo... No es como si tuviera un problema, es que el problema es ella misma..." 

Lo único que podía hacer Saki era seguir siendo su amiga, ¿No? Al fin y al cabo eso parecía haber ayudado antes a Chika. ¿Por qué habría vuelto a aparecer su arcano? Y en todo caso, ahora no era el momento para preocuparse de eso. Su propio arcano estaba desaparecido por causas desconocidas. La prioridad era cómo mínimo saber porque... 

Saki vuelve al mundo real, y mira su taza... Vacía. Ahora mismo no se le ocurría que decirle a Hana... Quizás... 

- Hana, a lo mejor no tienes ni idea pero no pierdo nada por preguntar... ¿Sabes algo de Watanabe? Desde que desapareció durante nuestro... "Encuentro" con Mei, no se nada de él. 

Hana hace que no con la cabeza mientras sirve más té para ambas.

- Sé lo mismo que tú. Que no haya ido a clase me lo esperaba. Supongo que tendré que ir a hacerle una visita.

Puede que Hana acabara de empezar en esto de ser sacerdotisa, pero se la veía comprometida. Aunque de ahí a que sirva de algo ir a ver a Watanabe...