A duras penas, Ashlyn recuperó la conciencia y con la terrible visión a su alrededor no tardó en levantarse, mientras se le escapaba un grito de dolor, empezó a ser consciente de que un nuevo golpe y probablemente la siguiente cara que viera sería la del mismisimo Pelor, cen cierto temor y con un calambrazo que le recorría el cuello trató de defenderse a todo riesgo.
Defensa total. creo que no puedo atacar no???
Habiendo calmado a uno de los medianos me pongo delante del otro para impedirle que siga disparando.Si quiere hacer daño aqui me tienes hermano, disparame a mi y deja en paz a los demas.
Básicamente he usado la carga de los guantes para agregar un efecto de curar heridas moderadas a mi ataque de toque, y después he lanzado yo el hechizo curar heridas moderadas y he tocado a Ashlyn, por lo que deberían descargarse ambas curas.
¿No te mueres? ¡Venga, hazlo por esta joven mujer! dije disparando otra vez los proyectiles
Motivo: Proyectil Mágico
Tirada: 2d4
Resultado: 2(+1)=3, 2(+1)=3
Si se vuelven a acercar a mí, me alejo dando un paso atrás
Ashlyn se protegió de los futuros ataques de sus oponentes con muy buenos resultados, los dos hombres que se estaban enfrentándose a Quenya, tras recibir el golpe causado por su proyectil se dieron media vuelta y se dirigieron a esconderse detrás de uno de los carromatos igual que había hecho uno de sus compañeros. Instantes después el que se había escondido antes salía del escondite armado con su arco y disparó a Quenya con muy buena puntería, la flecha fue a parar justo al cuello de la semidragona y quedó gravemente herida, cualquier esfuerzo por su parte la dejaría completamente inconsciente.
Uno de los medianos que estaban con Fisteus seguía completamente calmado, pero el otro hacía caso de sus provocaciones y le disparaba, pero algo en el alma o el cuerpo del humano hacia que la flecha se desviase de la trayectoria casi por arte de magia.
Tirada oculta
Motivo: Ataq
Tirada: 2d20
Resultado: 15(+8)=23, 9(+8)=17
Tirada oculta
Motivo: Ataq
Tirada: 1d20
Resultado: 20(+3)=23
Tirada oculta
Motivo: Daño
Tirada: 3d6
Resultado: 14(+2)=16
Tirada oculta
Motivo: Ataque
Tirada: 1d20
Resultado: 15(+6)=21
Turno de Haiayel y luego sigue Quenya. Gatonegro, no doy por hecha tu tirada pues cualquier ataque por tu parte te dejaría inconsciente. Los turnos ya siguen como es habitual.
¿Entonces qué pasa con el turno que había dicho?
Mi ataque sigue igual, si caigo inconsciente, pues mala suerte para mí.
Pero otra cosa, master, que acabo de caer. Por ser magica de guerra, tengo lo que se llama filo del mágico de guerra, que añade mi bonificador de Inteligencia al daño de mis conjuros.
Lo digo porque no lo puse en el anterior ataque mágico (proyectil mágico). Sólo se aplica a uno de los proyectiles. Si lo tuvieras en cuenta para replantear tu post XD pues sería un daño de 2 y otro de 8, un total de 10 puntos de daño.
Y, en este ataque, se lo aplico al primer proyectil, consiguiendo 7 por un lado y 3 por otro
Todo sigue igual, Quenya. El turno empieza con Haiayel, pero podéis postear todos, no hace falta que le esperéis. Que sino aquí nadie postea.
Quenya, si actúas hazlo de nuevo, el post anterior ya lo conté en el mío, me equivoqué con la última frase que te dije.
¡Venga chicos, ánimo!
Vais a buscar a Igor que estaba con Ocaso en la taberna de la plaza del pueblo. Cuando os reunís con él le explicáis que no habéis sacado nada en claro de aquella conversación, pero que ahora tenéis una razón más para ir acabar con el señor del castillo, aquella mujer llamada Mary había sufrido una pérdida muy importante y todos los indicios apuntaban hacia él.
Entonces decidisteis tomar el camino que llevaba hacia las afueras del pueblo, por el camino pasáis por el Bosque de Svalich, aquel lugar estaba lleno de árboles gigantescos con sus copas ocultas entre la bruma gris, sólo dejan pasar tenues rayos de luz hasta el oscuro suelo florestal. Los troncos cubiertos de musgo forman un auténtico laberinto. El bosque está sumido en el silencio de una tumba olvidada, hasta que empiezan a aullar los lobos. Y ya todos sabían que esos lobos eran licántropos y que bajo su protección y la del bosque se escondía la espada que necesitarían para acabar con el Señor Oscuro.
Pero esa no era la misión actual, ahora mismo había que reunirse con Madame Eva, así que continuásteis andando, cruzásteis el río Ivlis y tras avanzar algunos kilómetros llegasteis a una encrucijada de caminos, aquel lugar fue donde conocieron a Urik, aquel lugar era un viejo patíbulo de madera que cruje bajo el gélido viento que sopla desde las tierras altas del oeste. Una cuerda deshilachada oscila en el travesaño cadalso. La carretera se divide en dos en este punto; un letrero enfrente del patíbulo apunta en tres direcciones: "Barovia" al este, por donde veníais, "Estanque Tser" al norte, donde estaba el campamento de los vistani y la cabaña de Madame Eva y "Castillo Ravenloft" al sur donde sin lugar a dudas tarde o temprano tendríais que ir para enfrentaros a vuestro enemigo.
Al otro lado del camino, un muro bajo, medio destruido en algunos puntos, rodea un pequeño grupo de tumbas; lo más probable es que en ellas descansen los que en su día bailaron al extremo de la soga.
Tomáis el camino del norte, hacia el Estanque Tser la cúpula de bruma y ramas que hay sobre vuestras cabezas se abre súbitamente al cielo, aunque negras nubes de tormenta lo cubren por completo. Un círculo de coloridos carromatos y varias tiendas de campaña dispersas se apiñan alrededor de una gran hoguera, mientras los gritos del fragor de la batalla os alertan y llaman vuestra atención.
La tienda más grande de todas, la que parecía pertenecer a Madame Eva estaba completamente derrumbada y tras el círculo de carretas estaban algunos humanos vistanis malheridos. Fisteus andaba cerca de ellos, mientras unos medianos vistanis le apuntaban con sus arcos cortos.
En el otro lado, junto a la gran hoguera se encuentra Ashlyn, también malherida flanqueada por dos vistanis más, Haiayel no anda muy lejos conjurando y tratando de sanarla las heridas. Pero cerca de la tienda de Madame Eva, a unos metros más allá, está Quenya, gravemente herida, con una flecha que le atraviesa el cuello y que la ha dejado practicamente muerta. El lanzador de esa flecha está a escasos metros armado con un arco.
Pero, ¿dónde estaban Madame Eva y la extraña pareja? Thokk y Envy habían ido con ellos, pero no había ni rastro de su posición.
Tenían que ayudarles pues, además de estar en inferioridad numérica, se les veía a todos que no estaban precisamente pasando un buen momento. Aquellos humanos y medianos parecían peligrosos, muy peligrosos.
Cualquier duda que tengáis hacedla por el off, please, para resolverlas con más rapidez.
Postead para todos los que están por defecto.
No olvidéis de lanzar iniciativa, ataque y daño, si os unís a la lucha, claro.
Edita máster, Igor no va con vosotros pues se queda en el pueblo esperando para que le den su arma y porque opina que allí no es bien recibido y que ir todos a ver a Madame Eva le parece absurdo.
Un golpe de suerte os sacudió, no os lo podíais creer pero justo en uno de los peores momentos que estabais viviendo pudisteis ver como vuestros compañeros aparecían por allí. Venían en vuestra ayuda, se habían encaminado hacia el campamento y llegaban en un momento perfecto. Allí estaban todos, desde el silencioso de Igor acompañado de su compañero Ocaso, hasta el más veterano de los guerreros, Wolkot, pero junto a ellos había alguien más. ¿Una mujer?
No podía ser... aquella mujer era... sí, aquella mujer era ¡Irina! La hija del Burgomaestre parecía que se había unido a vuestros compañeros.
Con algo de alivio por ver llegar a la "caballería" la paladín insuflada con valor se permite el lujo de lanzar sus ataques contra uno de los guerreros que la rodean, un primer tajo al aire abre la guardia del enemigo, que apenas reacciona ante el segundo y mortifero ataque de revés directo a las partes blandas. POR PELOOOOOOR!!!!
Motivo: Ataque
Tirada: 1d20
Resultado: 5(+5)=10
Motivo: Ataque 2
Tirada: 1d20
Resultado: 19
Motivo: Crítico
Tirada: 1d20
Resultado: 20
Motivo: daño 2
Tirada: 1d8
Resultado: 8(+3)=11
Lucho a la defensiva +2 CA.
Uff que buen rollo de crítico, jejejeje. el arma es x2, 22 puntacos.
Al ver cómo venían nuestros compañeros me relaje. Arranqué la flecha de mi cuello y, con dificultado me dirigí a un lugar apartado para protegerme de las flechas.
Alese conjuró algo con un gesto divino, era difícil de decir el qué, pero por un instante resplandeció sobre ella una especie de aura de bondad, haciéndola más hermosa de lo habitual. Después hizo un rápido examen de la situación, y sin aparente miedo a la batalla, caminó con firmeza hacia Quenya que era la que parecía más herida.
Motivo: Iniciativa
Tirada: 1d20
Resultado: 15(+1)=16
Me lanzo santuario y camino hacia donde se ha protegido Quenya para curarla.
Mis ojos distinguen el estado de la hechicera y de nuevo la mano fantasmal se dirige hacia ella antes de descargar el poder de Pelor en sus heridas.
Motivo: Curar heridas moderadas
Tirada: 2d8
Resultado: 5(+6)=11
Mis intentos por aplacar la furia homicida del mediano no me impiden observar lo que sucede a mi alrededor:la grave herida que ha sufrido la mujer dragón no va a mejorar sus ya de por si poco amorosos sentimientos hacia mi persona .La llegada de refuerzos hace que la balanza se incline a nuestro favor y eso puede ayudar a que los enemigos se rindan al verse superados en numero y fuerza.Rendios,somos mas y mejor armados.¿Para que vamos a derramar mas sangre por un malentendido ?.
-¿Qué ha ocurrido aquí?-Pregunto desenvainando.-¿Cual es el motivo de este ataque?
Instantes después comienzo a avanzar hacia el más próximo de nuestros aliados.
No me gustaba nada lo que nos acabábamos de encontrar...
Me situé tras Urik y Leo, y saqué mi arma por si había que echarles una mano...
Al llegar al conjunto de tiendas donde estaba Madame Eva descubren con horror como sus compañeros están siendo atacados por un numeroso grupo. En el suelo hay varios heridos, entre ellos Quenya, quien tiene aojada una flecha en el cuello.
Sin atender a más razones que las obvias y visto que hay una paladina de Pelor en esa pelea, Urik da por supuesto que la contienda es necesaria y lícita, no teniendo sentido preguntar por qué sucedió o si se puede solucionar parlamentando. Mientras desenvainaba su espada el caballero del cuervo, llamó a Hurnn, su compañero alado, quien mandó a la liza para que por lo menos desorientara a los enemigos con su vuelo rasante y, sin girarse, dijo a Irina y Alesse.- ¡Cubrid la retaguardia!, ¡si morimos huid! ¡El resto a por ellos!- Así Urik se aseguraba que no entrarían en liza y que les apoyarían si conseguían salir de ahí con sus amigos, o les avissarían si llegaban más enemigos.
Acto seguido cargó contra el enemigo, enarbolando su espada y cerniéndola sobre el primeroponente que se encontró.
Motivo: Iniciativa
Tirada: 1d20
Resultado: 12(-1)=11
Motivo: ataque
Tirada: 1d20
Resultado: 13(+11)=24
Motivo: daño ataque
Tirada: 1d8
Resultado: 2(+5)=7
Cargo, solo hago un ataque, pues me muevo y ataco.
Uso ataque poderoso de +2
Teniendo el +2 de la carga lo quito para el ataque poderoso.
Vaya ful de daño :(
Motivo: Iniciativa
Tirada: 1d20
Resultado: 4(+1)=5
Se me olvidó tirar iniciativa por si acaso...
El guerrero conocía a los radicales de Pelor. Los vistanis eran gente orgullosa, acostumbrada a vivir rodeada de peligros constantes, y un cruce con los extremistas sólo podía derivar en confrontación.
Wolkot siguió a Alese que se dirigía a curar a la mujer verdosa, la chica se movía por el campo de batalla como si fuese la única que estuviera allí, sin armas y sin sangre derramada.
Con una paz interior y una tranquilidad que parecía que contagiaba a los demás.
Esa paz que conseguía tranquilizar su inquieto corazón atormentado por su trágico pasado.
Era la mejor sensación que había notado en mucho tiempo, y se dispuso a proteger ese divino tesoro.
Motivo: Iniciativa
Tirada: 1d20
Resultado: 20(+3)=23
Motivo: Ataque 1
Tirada: 1d20
Resultado: 9(+12)=21
Motivo: Ataque 2
Tirada: 1d20
Resultado: 15(+7)=22
Motivo: Daño 1
Tirada: 1d8
Resultado: 2(+7)=9
Motivo: Daño 2
Tirada: 1d8
Resultado: 6(+7)=13
Si alguien ataca a la chica o a mí respondo al ataque, si no me muevo a la defensiva
Te dejo las tiradas para cualquier cosa