Partida Rol por web

Karjian, La Caída de Het´jala [+18]

Una noche en Vanha´atha.

Cargando editor
14/11/2014, 06:06
Horelk

1133 de la Segunda Vida.

Los fríos vientos del norte han azotado nuevamente las murallas del Castillo de Vanha´atha.

El consejo ha optado por establecer esa estructura como sede principal de sus reuniones, todo esto debido a sus buenas referencias de defensa y buena zona estratégica para cualquier tipo de eventualidad, de las tantas que abundan últimamente.

Durante esa noche, los venerables señores del consejo: Amice Becher de raza humana, Sirvus Lasnamorë de raza élfica y Didacus Flook, también de raza humana, se habían reunido en el gran salón señorial en busca de dilucidar respuestas en medio de la gran nube de dudas que se había establecido fuertemente en toda la tierra de Karjian.

- Hoy hemos recibido noticias de un nuevo ataque en Xzuga, al parecer fueron de nuevo los dragones - dijo el señor elfo con las manos entrelazadas

- ¿Puedes confiar de tus fuentes? - pregunto dubitativa la dama -

- ¿Acaso alguien puede confiar en algo hoy en día? -

- Es difícil decirlo… -

El silencio se apodero de la gran sala, fría a pesar de su gran brasero enterrado en el centro de la sala, de cuyo hueco surgían llamas débiles pero de calor abrazador para quien se le acercaba, la gran mesa en la que se encontraban esos tres únicos seres, la rodeaba con su magnífica estructura hecha de una madera exquisita y cuya superficie estaba abarrotada de los más grandes manjares que cualquier aldeano jamás se imaginaria o se inmutaría en soñar el probar un solo bocado.

- ¿El Señor de Vanha´atha es un hombre apático saben? Al parecer, solo se preocupa en encerrarse en sus aposentos para satisfacer sus deseos más bajos y sucios con cuanta concubina se le acerque - hablo por vez primera en toda la cena el señor Didacus, mientras se estiraba sobre ese gran sillón donde descansaba el cuerpo -

- Hoy en día, la delgada línea de lo preocupante y alarmante es solo visible por unos pocos, a algunos solo les da por ignorarla y disfrutar del momento lo mejor que puedan, un beneficio del que lastimosamente no podemos gozar - dijo la señora Amice, con un rostro frígido -

- Nuestra tarea es la de gobernar los territorios protegidos por el consejo, sabíamos que los sacrificios que vendrían con la carga serian muchos y los beneficios pocos…- se explayo algo perezoso Didacus

- ¿Crees que es poco el estar arropado bajo un techo, con comida suficiente para alimentar a una aldea…? -

- Por favor señores, los problemas son muchos, el tiempo es poco, las ideas son casi nulas y no hay espacio para comenzar una absurda disputa de humanos con ganas de demostrar quién es mejor… ¿acaso saben lo que pasa allá afuera, en estos segundos, mientras nos llenamos las tripas y nos calentamos los pies? - ambos señores humanos que se habían dispuesto a discutir como de costumbre, callaron y se quedaron cruzando las miradas, fijamente, sin decir palabra alguna por un largo rato - he de decir que lo mejor hoy en día es el contratar a diplomáticos y gente quienes los defiendan para esparcir por toda tierra conquistada y no conquistada una llamada de auxilio ante las constantes flaquezas de nuestro ejército…en las ultimas batallas, hemos perdido soldados, aldeanos y nobles, sin siquiera acumular la suficiente cantidad de cabezas de dragones como para poder ser superadas por ambas manos de mis manos…esto…se está yendo de nuestras manos señores, es muy probable que se inicie una Tercera Vida de no poder conseguir un buen ejército para hacer frente a semejante enemigo -

- ¿Qué quieres decir Sirvus? - los ojos de la dama brillaban desconcertados, tenía miedo de lo que iba a decir el joven elfo  y no se inmutaba en disimularlo -

- Que es hora de hacer un llamado a las armas mi buena concejala, pero no de hombres ni mujeres que pertenecen a nuestras filas, sino de seres de otras tierras, de otras culturas, puesto que los dragones no hacen diferencia a la hora de matar, solo ven presas y me imagino que esto ha ido más allá de todo nuestro Imperio conocido, las informaciones pueden ser erradas pero ya no tenemos el tiempo siquiera para dudar, pero me han comentado que los dragones han atacado hasta los poblados de las montañas del norte, este problema es mundial y por ende, toda diferencia racial o cultural debe ser olvidada para unirnos y combatir este mal… -

- Es más fácil decirlo que hacerlo mi buen señor elfo… ¿se imagina usted un pelotón orco luchando junto a uno élfico? - la sonrisa en el rostro de Didacus era de cualquier emoción que englobara nerviosismo, mas no de alegría o conformidad -

- Si…por ello he pensado y he pensado mucho…pero creo que tengo a los indicados para el trabajo… -

- Sería bueno que los conociéramos…-

- Por supuesto, están esperando a mi orden para entrar, capitán - un hombre de mediana edad se presenta firme - hágalos pasar por favor - realiza una leve inclinación y con media vuelta sale de la comodidad de aquel lugar para encontrarse con el patio del castillo, donde se habían conglomerado el más variopinto de los grupos ya que los miembros de aquel conjunto, pertenecían a varias razas de Karjian, siendo los humanos los más comunes.

El frio era notable, a más de uno se le escapaba una gran nube de aliento, mientras simulaban soportar las bajas temperaturas y la nieve caía.

Había rostros reconocidos entre aquellos hombres y mujeres, quienes miraban de un lugar a otro buscando alguna respuesta.

Se notaba la presencia del gran Inquisidor Darolhan, terrible hombre de pésima reputación, conocido como El Carnicero de las Mil Viudas, quien se encontraba acompañado por dos inquisidores, armado con un rifle muy potente, otro de tamaño inconmensurable, equipado con una terrible espada, al parecer no se conocían entre ellos, pero ambos conocían a Darolhan.

Estaba el general orco Amúr Darokha, quien con su armadura impecable demostraba poder, quien también iba respaldado por un par de guerreros orcos.

El líder de La Legion Drakken Rash'Al Nassark, vampiro perseguido por la Santa Inquisición, cuyo máximo líder, no paraba de observar.

Así también estaba Kha´shi, líder de los Sangre Purpura, reconocido y temido asesino.

Derek Strumpfk, humano paladín y líder de los Caballeros Nihrg.

Estella Vientoluminoso, elfa y líder de los Hijos de Namad

Por ultimo a Rrakatosh Gromkula, vohnia líder de la Luz de Etherene.

Tras minutos de tensión ya que todos habían sido convocados por el Consejo, pero ninguno sabía la razón y grande fue la sorpresa al ver que había hermandades que poco o nada se llevaban entre sí. Algunos guardias salieron del castillo siendo entre ellos uno de mayor rango el encargado de hablar.

- El gran Señor Sirvus Lasnamorë me ha mandado para darles acceso a la sala señorial del castillo, he de advertir, que a modo de evitar problemas, todas sus armas serán decomisadas y he de avisar que la magia será anulada dentro de la sala, puesto que el gran señor Akenathor Leröiner ha implementado un poderoso conjuro que evitara el uso de cualquier tipo de hechizo de cualquier escuela…entiendan que es por seguridad de cada uno y de los miembros del consejo - los cuchicheos se habían acrecentado ante estas palabras, mientras los guardas se acercaban para rebuscar entre los presentes, cualquier tipo de arma que pueda ser una amenaza -

- Esto es una injuria - bufo Darolhan, con su tono pedante - estoy muy decepcionado del accionar de los Concejeros al demostrar semejante desconfianza -

Nadie respondió ante las quejas del inquisidor, quien levantaba los brazos cubiertos de pieles exquisitas.

Cargando editor
17/11/2014, 06:54
Drakken Rash'Al Nassark

Me habian llamado y por mucho que me hubieran advertido mis lugartenientes que no era bueno ir, habian picado mi curiosidad, al fin y al cabo no es normal recibir una invitacion del consejo cuando la Inquisicion ha puesto precio a tu cabeza. Y hablando de inquisidores, han traido a uno de sus mejores perros a esta fiesta y ademas protegido por dos de los suyos, un rifle y una espada... incapaces de pensar con la cabeza unicamente saben dedicarse a masacrar a todo ser que se les cruce, supongo que es una cuestion estupida, los inquisidores no usan el cerebro solo tienen fe en su dios, sea quien sea. Mi mirada se pasea por el resto de invitados, jefes de hermandades y cofradias... los hay de todas las razas, orcos, elfos y humanos... incluso un vohnia, supongo que sera divertido ver como es capaz de soportar semejante injuria a su honor el Inquisidor, tener que ser llamado a una reunion con un vampiro y un vohnia nada menos. Si, sin duda sera una reunion interesante.

La nieve caia con suavidad sobre la plaza donde nos encontrabamos, las miradas de los asistentes eran mas que recelosas entre si. Sonrei para mi mismo, simplemente patetico. Las puertas se abren de par en par para dar paso a unos sirvientes que nos indican que para pasar debemos depositar nuestras armas y que toda magia sera anulada ahi dentro. Un humano se acerca e intenta ponerme la mano encima, una mirada es suficiente para hacerle entender el grave error que eso supondria. Con un suave gesto desabrocho la vaina de mi arma y se la entrego al sirviente junto con mi espada corta, cuando su mano se posa sobre la misma, retengo la vaina para obligarle a mirarme. - No me gustaria que nada de esto se perdiera... supondria un verdadero fastidio. - La amenaza esta implicita en mis palabras, suelto la vaina para que pueda hacerse cargo de ella.

Cargando editor
17/11/2014, 10:19
Sorek Hunjan

Llego al sitio indicado, totalmente extrañado por la petición ¿Qué querría ese consejo de mi?

Cuando llego, observo que ya hay gente reunida. Un gran inquisidor, esto va a ser serio... !¿Qué carajo hacen aquí esos seres!?

Mi primer impulso al ver a los vampiros es empuñar mi rifle y matarlos, sin embargo me doy cuenta de que nadie ha abierto hostilidades. ¿Qué está pasando aquí? Iluminame Señor...

Me acerco al grupo y sin decir una palabra me coloco cerca de los dos Inquisidores.

Sin ningún disimulo saco la bayoneta y la coloco al rifle, parece que la distancia aquí no va a importar.

Sin embargo la puerta se abre y sale un señor, que nos indica que para entrar hay que dejar las armas... pues vaya.

Agarro el asa del cerrojo y tiro de ella hacia mi, *clak!* noto impasible las miradas de todos, más de uno parece sobresaltarse.

Intruduzco mis dedos en el hueco del fusil, y saco una bala, la cual introduzco en un bolsillo. Devuelvo el cerrojo a su sitio *Clack*

Entrego mi rifle al hombre que me lo pide y paso para adento. 

 

Notas de juego

Cargando editor
17/11/2014, 11:34
Jo'kar Zarpamullida

Jo'kar había llegado al cónclave cuando aún no había llegado nadie más. El patio del castillo estaba vacío y el inquisidor que le acompañaba le indicó que debía esperar allí antes de marcharse del castillo. Así que el felino buscó un lugar donde sentarse y se sentó a esperar hecho una bola de pelo para protegerse del viento frío.

Cuando oyó los primeros pasos, que resonaban acercándose en el camino de piedra que daba al patio, Jo'kar se enderezó y puso toda su atención en la entrada del patio. Estaba sentado en el suelo con las piernas cruzadas y la espalda apoyada en la pared. Una postura de relajación casi total que solo se veía alterada por un movimiento aleatorio movimiento de la punta de la cola. Miró con curiosidad quien entraba, vio llegar a un humano que también se quedó a esperar en el patio. 

La punta de la cola se quedó inmóvil y se cayó al suelo. Un poco decepcionado, Jo'kar siguió esperando y mirando curioso a quienes entraban durante un buen rato hasta que en el patio se reunió un grupo grande de gente. No se le pasó por alto ver como algunos de ellos reconocían a otros. Tampoco se le pasó por alto las miradas que se dirigían unos a otros, en ellas se reflejaba desde desprecio hasta una promesa de violencia. 

Cuando por fin las puertas del castillo se abrieron, salieron unos soldados y uno de ellos habló. Les dio paso al gran salón pero les dijo debían entregar las armas. Jo'kar se puso en pie cuando uno de los soldados le pidió sus armas. Cogió las dagas que llevaba en el cinturón y las puso en manos del hombre. Luego, llevó las manos a la mochila y saco otra daga que tendió al soldado. Por último, se agachó y sacó una última daga de bajo la pernera de su pantalón.  

Las garras de sus pies acariciaron por última vez las rocas que formaban el suelo del patio antes de internarse en la fortaleza.

Cargando editor
17/11/2014, 16:52
Kha´shi

"Akiia, menudas te montas.." Lo mire justo antes de alzar la vista hacia la estructura que ante mi se encontraba, allí estaba yo, frente a las murallas del Castillo de Vanha´atha, con con mi mano derecha a un lado  y Akkia al otro, pues no era un territorio al que venir solo. Entramos en el castillo y la sorpresa no fue poca al encontrarnos con toda clase de personajes allí presentes en una gran sala, algunos sentados, otros hablando, por no nombrar a los que se asesinaban con la mirada, "Vaya..." no pude evitar dejar salir una pícara sonrisa mientras caminábamos entre aquel espectáculo hacia una pared.
-O una de dos, o quieren hacer una masacre o quieren que lo hagamos. Fijaos a vuestro alrededor, puedo reconocer a algunos.-comenté a mis acompañantes en un tono no muy alto.

En cierto momento nos hicieron pasar a una estancia no sin antes pedirnos que nos desequipasemos de cualquier arma. "Nos toman el pelo..." Pero al ver como a mayor o menos conformidad, todos accedían, me vi obligado a soltar mi florete, desabrocharme la correa que atravesaba mi pecho y entregarselo a un guardia mientras con mi mirada felina me reía ante él para luego pasar donde se encontraban los miembros del consejo.

Cargando editor
17/11/2014, 19:44
Horelk

Todos adentro de la comodidad que podía ofrecer la sala, notaron que había varios guardias armados junto a los miembros del Consejo, sin mencionar la presencia del mismo Akenathor, el gran elfo anciano cuyo rostro se presentaba liso como si de un jovencito se tratara.

- Por favor señores, siéntanse como en su casa, sírvanse lo que quieran, que la noche apenas comienza y la reunión con ella…he de decir que estoy un poco apenado por las medidas de seguridad, pero sabemos que más de uno de los presentes no cuentan con buenas relaciones entre sí, así que debemos resguardar al Consejo de posibles hostilidades que surjan…también, agradezco que hayan aceptado nuestra invitación, veo que algunos líderes de otras hermandades ni el Dajir de Het´jala se han podido presentar, es una pena, tenemos un asunto demasiado delicado que tratar y cuanta más gente esté informada, mejor será para el destino de Karjian - Sirvus dio aquella introducción a la gente que estaba notoriamente confundida, solicito un pergamino a uno de los escribas que tenía cerca y comenzó la lectura de la misma - Emok´hatosh 1540, Verelen 1.891, Wroth 13.459…todas son cifras de muertes causadas por los dragones, siendo Bant´omun´quenat la única zona que ha logrado eliminar la humilde cantidad de… - observa el pergamino rebuscando con la mirada - …dos dragones, pero perdieron también 1.211 personas, sin mencionar los daños que ocasionaron a la investigación de la zona…aquí no se agrega a las Islas Innombrables, Emok´hatosh ni las zonas de Sin Rostros que no pueden comunicar los daños que han causado a sus pueblos, entre estas muertes podemos citar la cantidad de muertes ocasionadas a sus movimientos, entre ellas la Santa Inquisición, la cual cuenta con… -  

-  ¡No se atreva Sirvus, esos datos son confidenciales y citarlos sería una ofensa para nuestra Orden y para nuestro Señor Yahvé a quien servimos! - el gran Inquisidor, quien hasta ese momento se encontraba sentado, dio un salto de desesperación y con el dedo apuntando al Concejero lanzo esa queja -

- Señor Sirvus para usted Inquisidor, somos conscientes de la ayuda que nos ha brindado la Iglesia Católica en nuestra expansión como nación, y nos prestamos siempre fieles a nuestro señor Yahvé, pero debe de saber dónde pisa y ante quien está hablando - dijo la Dama Amice, con su aire frio y tajante -

El inquisidor, como si de un sirviente más se tratara, bufa sin poder decir nada y se sienta de nuevo.

- Gracias gran señora… - dijo con una leve sonrisa el elfo Sirvus, encorvándose un poco para mirar al rostro de la Concejal - …pero he de admitir que fue un descuido de mi parte, no se repetirá - entrega el pergamino al escriba y se sienta en su gran sillón, cruzando los dedos de ambas manos - ahora bien, los daños hacia nuestra gente es notorio y nosotros hacia esas criaturas paupérrimo, aun con la tecnología de Bant´omun´quenat, no hemos podido causar un golpe considerable y nuestras reservas de soldados se acaba…creemos que son mínimo una centena de dragones, cuyo poderosa flama es capaz de derretir el acero más duro o la roca más resistente, siendo solo el hueso o la escama de dragón la capacitada para repeler el daño, nuestras investigaciones con los cadáveres de la Isla Flotante es aun básica, todo lo que hemos podido averiguar es el dato que les hemos entregado recién y no sabemos más…esta es la primera vez que tantos dragones atacan y causan daños en aldeas o ciudades inclusive, siempre habían sido caravanas o asentamientos descuidados las víctimas de estos seres, pero ni siquiera en los registros de antes de la Primera Vida entregan este tipo de hechos o sus posibles explicaciones -

- Nuestro servicio de inteligencia ha dado con una teoría que este humilde servidor desea compartir, por ser la más aceptada por mi persona - dijo el general orco, solicitando un pergamino a uno de sus guardias, quien se lo entrega - como bien pueden ver buenos señores, el ejercito de dragones está atacando zonas claves del Consejo, tales como aldeas que proveen recursos al Cónclave de los 12 Vientos, como ciudades que ofrecen soldados a la misma…no se tiene registro de ataques a zonas no pertenecientes al Cónclave, por lo que podemos concluir que estos ataques son organizados por un o unos enemigos del Cónclave - los comentarios inundaron la sala -

- ¿De dónde saca semejante disparate orco? - nuevamente  el inquisidor pregunta con una sonrisa incrédula -

- Esa información es… - el general observa el pergamino sostenido por el escriba del consejo - …confidencial - el orco hizo alusión sarcástica a la queja que había hecho el humano hace pocos minutos -

- No juegues con tu suerte asque… -

- Más vale que no termine esa frase Inquisidor, estamos en son de paz…y así se mantendrá… ¿he sido claro?- dijo Akenathor, con su rostro calmado y su cuerpo en su asiento -

Darolhan nuevamente cierra la boca y se traga las ganas de mandar todo a la mierda, como un hombre de su clase está acostumbrado a realizar.

- Esa teoría es interesante y he de admitir que muy preocupante señor Amúr…por lo que la razón de esta reunión cobra aún más importancia…señores, es hora de unir fuerzas para paliar el daño que han causado los dragones a nuestra tierra, una vez más decimos que somos conscientes de las hostilidades que mantienen unas hermandades contra otras, pero sean centrados y olviden por un segundo toda creencia y vean nuestro panorama…unidos tenemos posibilidades, separados, solo seremos destruidos y no habrá más templos ni cultos a los que acudir, ni lugares a donde escondernos, los dragones serán los amos de esta tierra y olvídense de todo poder que tengan ahora, para convertirse simplemente en el alimento de estas criaturas - Didacus hablo con el cuerpo inclinado sobre la mesa y los puños golpeándola ante cada palabra dictada con énfasis -

Solo el silencio contesto y las miradas comenzaron a cruzarse en medio de la noche, mientras la nieve aun caía ahí afuera.

Notas de juego

Cargando editor
17/11/2014, 19:58
Sorek Hunjan

Tomo asiento y despreciando todos los licores extraños que veo, me sirvo agua en mi copa. Observo la comida, ingentes cantidades de lujosas y cuantiosas piezas adornan la exquisita mesa. Buscaré algo "nomal" y me serviré, cenando mientras escucho. La cantidad de muertos es ingente, ciertamente es necesario acabar con los dragones, aunque parece que ejércitos enteros no han sido capaces de hacer prácticamente nada.

Cuando terminan solo haré una pregunta.

-¿Con qué armas se mataron a los dos dragones?- La voz suena ronca, como si hiciese mucho tiempo que no la usa. Además está desprovista de todo sentimiento. Su cara tampoco ha reflejado ningún sentimiento en lo que va de noche.

- Tiradas (1)

Notas de juego

voy ha hacer 1 tirada de con. oscuro, para ver si recuerdo si la inquisición leí algo sobre dragones. Sería int (4) + con. oscuro (2) + dado, no?

total un 8, creo que no se nada de nada xD

Cargando editor
17/11/2014, 20:12
Drakken Rash'Al Nassark

Accedemos al salon, todo lleno de la tipica parafernalia que encanta a los humanos... excesivamente decorado y con mas bien mal gusto. Me acerco a mi silla y me siento con tranquilidad mirando las diferentes viandas que pueblan las mesas... por mas que busco no encuentro nada que sea realmente de mi gusto asi que espero a que el consejero deje un hueco para llamar a uno de los sirvientes. - No tendreis algo mas... de mi gusto por ahi. ¿verdad? - No necesito comer y la verdad me he saciado antes de entrar pero no esta de mas jugar un poco con la audiencia, aun mas sabiendo que los inquisidores no pueden hacer mas que callar.

El consejero sigue hablando y pronto las cifras de cadaveres llaman mi atencion, ciertamente los ataques sobre el Conclave parecen mas que obvios dada la cantidad de muertes de diferencia. Aun siendo la zona mas poblada la distancia con respecto al segundo es simplemente excesiva. Al menos parece ser que Bant´omun´quenat consiguio derribar a dos de ellos. Es raro que el consejero esperara mas, los dragones son sencillamente las criaturas mas poderosas que pueblan este mundo o al menos de las que mas... aunque aun asi un ataque coordinado de dragones no tiene sentido. paso mi mano por mi copa, preguntandome si al final el sirviente traera mi pedido o no... aun asi eso implicaria que hay una mente tras estos ataques, coordinar ataques de dragones y encima contra un enemigo determinado implica una inteligencia y una determinacion sin precedentes. No se quien es ese enemigo en las sombras pero sin duda ya cuenta con mi respeto, solamente con ver las caras de los tres consejeros esta claro que no saben que hacer... aparte de reunir a los individuos mas extraños y con menos cosas en comun de todo Karjian.

El gran inquisidor "creadordenosecuantasviudas" parece exaltado cuando estan a punto de indicar un numero de muertos que ha recadio sobre la inquisicion, el consejero le da la razon al mismo tiempo que le azota verbalmente y le manda sentar con mas bien pocas palabras. Vaya... tengo que aprender ese truco para dominar a los perros.

El orco gigante de antes aparece con otros razonamientos, unos que se parecen bastante a los mios... y de nuevo estalla una discusion dialectica con el Inquisidor, la cual finaliza con el perro volviendo a sentarse y una sonrisa en la cara del orco. Si, sin duda quiero aprender ese truco debe ser muy divertido dar ordenes como a un perro a una gran inquisidor. La informacion del orco cala hondo en los tres consejeros y pronto le dan aun mas importancia a esta reunion mientras yo no puedo evitar pensar que no se que hago aqui... por muy peligrosos que sean esos dragones unicamente parecen centrarse de verdad en el Conclave, que la Inquisicion les ayude y muera en el proceso unicamente ayuda a mi causa. Coloco mi mano sobre le menton mientras pienso todo esto y aun asi en cierta medida estoy de acuerdo, de que por mucho mal que provoque al Consejo y a la Inquisicion, si al final ganan... todos perdemos.

En ese momento la voz ronca de uno de los inquisidores hace la pregunta clave... como consiguieron matar a dos de los dragones. Miro durante un instante al hombre como quien mira a un insecto y devuelvo mi mirada a los consejeros para saber mas sobre ello. No hablare hasta saber mas, pues la unica pregunta interesante ya ha sido formulada.

- Tiradas (1)
Cargando editor
17/11/2014, 20:52
Jo'kar Zarpamullida

Jo'kar entró al salón y se sentó en un sitio cercano al fuego. Dejó escapar un ligero ronroneo al ver que había algunas jarras con leche templada sobre la mesa y se sirvió en una copa sin dudarlo. Cogió también un pedazo de carne asada que se llevó a la boca mientras escuchaba la introducción que les hacía el consejero. 

Escuchó con atención todo lo que decían mientras se preguntaba porqué estaba él allí. Si bien podía llegar a entender que hacían allí los que tenían cierta organización bajo su mando por la ayuda que podían proporcionar, la ayuda que el felino podía proporcionar no era otra que la de su propia persona. Era un cazador, pero dudaba que fuese tan bueno como para poder cazar un dragón. 

Un tipo ataviado con pieles alzó la voz a uno de los consejeros y fue reprendido. Eso llamó la atención de Jo'kar provocando un aluvión de recuerdos y haciendo que se fijase más en las pieles del hombre. Se fijó en cada detalle intentando averiguar de que podía estar hecha aquella piel. Sintió la necesidad de comprobar que no era piel de Syrolutha.

Un orco, uno grande y con una gran armadura, habló para dar unos datos que había descubierto su inteligencia al respecto del tema de los dragones. El mismo bocazas de antes volvió a dar un bote en su silla y le tuvieron que reprender de nuevo. Como podía haber alguien con tan malos modales era algo que no cabía en la cabeza del felino.

Uno de los invitados habló, uno de los que estaba sentado junto al gran bocazas, rompió el silencio que se había formado en la sala para preguntar algo. Una pregunta inteligente y que motivo que Jo'kar siguiese en silencio al menos hasta que fuese respondida. 

Notas de juego

Cargando editor
18/11/2014, 00:42
Horelk

Sirvus observo con interés a Sorek, sin quitar la mirada al rostro del humano, extiende una mano pidiendo de nuevo el pergamino, comienza a leer bajando lentamente la mirada.

- Un syrolutha fue el responsable, Rathzor Daraah, quien al ver a las criaturas atacando la ciudad, tomo sin permiso un meca del tipo X, es decir, experimental, sin número de registro aun…el mismo fue bautizado como Sangre de Dragón y se trata de un prototipo, cuyos ingenieros han recibido la orden de multiplicarlos y arreglarlos para usarlos en batalla…al parecer solo puede ser comandado por syroluthas hasta el momento y estamos atentos a cualquier información al respecto -

Notas de juego

Todas las tiradas para saber si saben mas de dragones son erroneas, nadie sabe nada al respecto, esto es nuevo para los karjianos.

Cargando editor
18/11/2014, 00:49
Akenathor Leröiner

Mientras la gente habla, recibes la respuesta del concejero pero algo más se inmiscuye en tu mente, un intruso que te habla con una vez serena pero tajante.

- Saca tu ira del bolsillo muchacho, ponla sobre la mesa, no quiero matarte aquí  y ahora para evitar hostilidades, pero si por tu orgullo o miedo causas problemas, destruiré cada parte de tu ser antes de que puedas sacar la bala de plata de tu bolsillo…todo depende de ti -

Notas de juego

Si, podes responder dentro de tu mente sin problema alguno.

Cargando editor
18/11/2014, 01:35
Kha´shi

Al entrar en aquel acogedor salón y ofrecernos en participar en aquel apetitoso banquete, no escatimé en modales y me serví buenas copas de licor que allí se servían a lo largo de la reunión y picando algún que otro manjar. Pero todo esto siempre llamando la menor atención posible, no es que eso fuese difícil para mi ni para ninguno de mis dos acompañantes.
Me sorprendió un poco la cantidad de muertos por parte de los dragones pero solo sirvió para pensar que si fuera a cambio de algo, incuso yo podría encargarme con mi hermandad de tales muertes, pero era un tema que dejar aparte, no era momento de jugar con fuego, y menos fuego de dragones.
Cuando aquel tipo preguntó acerca de como mataron a los dragones, me agradó, "Chico rápido." Y la respuesta no fue menos asombrosa, syroluthas, los únicos que pueden usar esas máquinas, interesante.

-Ejem...-Carraspeé a propósito-Interesante, dichos artefactos, como líder de la...digo gremio al que pertenecemos-hice un gesto señalando a los dos individuos a mi lado- nuestro principal interés está puesto en los avances tecnológicos, me gustaría estar lo más informado posible de ello. Y si es eso cierto y quieren, digo, necesitan NUESTRA ayuda... supongo que nos facilitarán tales armas para poder "sofocar" a esos esupefuego. Y para nada me importaría que contaseis con nuestra ayuda para la distribución de las mismas, pues como líder, por alguna parte en esta reunión, debo velar por los intereses de mi familia. 

Tras una pequeña pausa donde me relamí una de mis manos hasta llegar a mi afilada uña.

-Por otra parte, me gustaría escuchar cuales eran vuestros planes-me dirigí hacia Sirvus- para nosotros en todo esto...

- Tiradas (1)
Cargando editor
18/11/2014, 06:46
Drakken Rash'Al Nassark

La respuesta a la pregunta del humano no llega a satisfacer mi curiosidad, un meca experimental... no sabemos nada sobre sus capacidades y lo mas importante, si simplemente tuvo suerte y derribo a las crias o si realmente es capaz de hacer daño a esas bestias. Aparte que unicamente nuestros preciosos gatitos pueden pilotarlo, justo en ese momento uno de ellos expresa su opinion. Al principio me interesa lo que tenga que decir pero rapidamente esa sensacion desaparece, otro con demasiado ego y prepotencia, casi parece el inquisidor, con la diferencia de que parece tener algo mas de modales... cosa no demasiado dificil despues de todo. Sus ultimas palabras sin embargo, casi me hacen negar con la cabeza... mas me contengo. Si realmente espera que un consejero exprese la verdad en algun momento, es que no sabe como funciona la politica, esos tres diran cualquier cosa con tal de ganar poder y hacer que sus enemigos lo pierdan... incluso en mitad de una crisis como esta.

- La unica arma que puede derrotarlos es un meca experimental que solo puede ser pilotado por syroluthas, y que unicamente se puede construir en Bant´omun´quenat. Decis que estais fabricando mas de esos mecas... pero la fabricacion de esas bestias mecanicas no es justamente rapida y ya que solo los syroluthas pueden manejarlas, la pregunta es simple ¿Para que nos habeis hecho llamar a los demas? - Clavo mi mirada en el elfo, al fin y al cabo parece ser el que usa el cerebro en esta sala. - Aunque fuerais capaces de crear una decena de esas maquinas en los proximos dos dias, dudo bastante que las dividierais para defender todos los territorios y puesto que Worth es el lugar mas atacado irian alli... dejando desprotegido el resto de Karjian. Por lo tanto que ganamos nosotros. - Hago un gesto señalando a la sala. - Peleando vuestra guerra... - Tal vez fuera una guerra de todo Karjian, pero por ahora los mas afectados eran ellos, El Conclave, pedir a alguien que ni siquiera los ha llegado a ver que venga y pelee por ti... implica que esten muy desesperados o nos consideren idiotas y creo que en este caso es un poco de ambos. Miro al elfo de nuevo esperando su contestacion.

Cargando editor
18/11/2014, 09:30
Sorek Hunjan
Sólo para el director

Al notar la voz en mi cabeza, noto como mi ira se dispara.

!¿Con quién te crees que estás hablando, con uno de tus esclavos?! !No te atrevas a ordenarme nada! YO estoy aquí por propia voluntad, con intención de ayudar, mientras que vosotros no sois capaces ni de darnos toda la información, estáis aquí cobardemente mientras el pueblo muere, comiendo como cerdos cosas que a algunos les costaría un año de trabajo poder pagar. !Así que largo de mi cabeza o me largo y allá os las apañeis sólos!

Pongo mi mente en blanco para evitar que el que haya entrado en mi cabeza pueda leer mi mente, o lo que sea que esté haciendo

- Tiradas (1)

Notas de juego

eee se como expulsar a la gente de tu cabeza?? te tiro por si sirve de algo

Cargando editor
18/11/2014, 09:43
Sorek Hunjan

Escucho atento las explicaciones del Consejero, intentando pasar del molesto zumbido que tengo en la cabeza.

Al final la explicación es increiblemente patética. ¿Para qué nos llaman si yo solo se usar mechas de la inquisición y ni siquiera soy experto?

Escucho con asco las palabras del gato, dejando clara su avaricia y corrupción de su alma.

Después el chupa-sangre que no es mucho mejor, deja claro que le da igual las muertes de los demás siempre que ÉL no tenga beneficios, sin embargo en algo si coincidimos ¿Para qué nos llaman?

Dejo de comer, se me ha pasado el hambre, aunque ninguna emoción cruza mi rostro, por dentro no pasa lo mismo.

La ganas de levantarme y marcharme ahora mismo son tan grandes...

Dame paciencia Señor... porque como me des fuerzas...

Notas de juego

Cargando editor
18/11/2014, 10:33
Jo'kar Zarpamullida
Sólo para el director
- Tiradas (1)
Cargando editor
18/11/2014, 10:57
Jo'kar Zarpamullida

yEl gato escuchó en silencio. Aquella nueva ininformación sólo servía para afianzar su idea de que no pintaba nada en aquel lugar. Y por los comentarios que surgieron parecía no ser el único. Pronto la gente comenzó a barrer para casa. Uno de lo felinos comenzó mostrar sus cartas, quería sacar un beneficio. Luego un vampiro habló diciendo básicamente lo mismo.
Nadie parecía entender su papel en aquella trama así que Jo\'kar decidió seguir callado hasta que el elfo terminase de desvelar todo su plan y que las piezas encajasen. Por lo pronto, el felino se dio cuenta de lo poco que sabian de los dragones. Lo que seguramente deberían hacer mientras se construían los mechas era investigarlos. Saber más cosas sobre ellos.

Notas de juego

Cargando editor
18/11/2014, 11:25
Akenathor Leröiner

- Haz sido advertido y habías tenido una segunda oportunidad, algo que no estoy acostumbrado a realizar...un gusto señor Sorek -

Comienzas a sentir una fuerza que rodea tu cuello, la cual te estruja lentamente, estas siendo victima de un hechizo y al parecer no puedes siquiera resistirte al mismo.

Notas de juego

El elfo es demasiado poderoso como para que intentes siquiera algo contra el hechizo, no por nada es el maestro elfico de la escuela Ban.

Cargando editor
18/11/2014, 11:26
Horelk

A pesar de tus esfuerzos, no puedes dilucidar si se trata de una piel de syrolutha o de algún animal.

Cargando editor
18/11/2014, 11:27
Horelk

Sirvus observa a Kha´Shi, suelta una leve risa y contesta.

- Agradecemos su buena voluntad señor Kha´Shi, pero nosotros como Consejo, contamos con quienes administraran nuestros artefactos y soldados a la hora de luchar -

Amúr oye las palabras de Drakken y con rostro frio contesta:

- Hemos abierto el Cónclave de los 12 Vientos para ser centro de refugio contra los ataques, es certero que nos será imposible proteger toda Karjian, pero por lo menos cuidaremos una ciudad y con todas las fuerzas que nos quedan…ahora la pregunta de por qué los hemos llamado es simple señor de la Legión…hoy somos nosotros el Cónclave los atacados, ¿pero mañana quienes serán? Además, estos datos fueron recogidos solo porque no contamos con acceso a lugares fuera de nuestra nación, ¿es usted capaz de asegurarnos que los dragones ya no han atacado Het´jala u otra aldea o tribu que no haya aun sido registrada en los Anales del Tiempo? - se toma un respiro y continua - sé que esto parece una artimaña de unos políticos asustados por el futuro de sus pellejos, pero señores, ¿acaso no ven en donde estamos parados? Mientras estamos aquí llenándonos las barrigas, ahí afuera hay niños y ancianos siendo quemados o devorados por criaturas que no sabemos que quieren ni para qué han venido…si vamos a luchar una guerra, hagámoslos unidos y todos dentro del Cónclave, para que así se recuerde el día en que no fue un orco o humano político el que patéticamente trato de detener a los dragones, sino que sea el día en que la Inquisición unió por vez primera fuerzas con La Legión para eliminar este mal…-

Un fuerte sonido interrumpe las palabras del orco, se trataba de Akenathor quien con voz furiosa lanzo un hechizo en antiguo élfico, levantando con solo la mirada, el cuerpo de uno de los inquisidores, quien no podía respirar, ahogándose y pataleando en el aire.

- Insultas a mi inteligencia inquisidor y a la de los presentes… - con un movimiento de la mano, saca una bala de plata que la tenía escondida en su bolsillo - …considérese con suerte de poder contar con un juicio por desacato en medio de una reunión pacifica, que si por mí era muchacho, ahora mismo estarías sin cuello -

- ¡Suéltelo de inmediato Akenathor! - exigió el Inquisidor levantado del sillón, preparado para luchar con las manos si fuese necesario -

- Si tu sabias algo Darolhan, eres cómplice de un crimen que debe ser castigado por la muerte…pero como siempre, no sabías nada, eres como lo dice mi gente: “muchos truenos, pocos rayos” ni siquiera mandas sobre un guardiasucho y crees mandar sobre toda la inquisición… -

- Bájelo Akenathor, no queremos problemas, por más que haya cometido un delito - dijo Sirvus quien se mantuvo quieto, bebiendo vino, como si estuviera acostumbrado a todo esto, mientras tanto, el anciano elfo suelta al inquisidor quien cae desplomado, agradeciendo por poder respirar de nuevo - señor Darolhan, la inquisición es la que más exige a la hora de pedir cosas y ¿es así como se comporta en una reunión que se suponía seria pacifica? Tendré una seria discusión con sus superiores y visto y considerando su mala voluntad de cooperación, solicito que se retire, ya tratare de entablar conversación con alguien más capacitado de su orden -

Unos guardias se acercan para escoltar a los inquisidores hacia la puerta, donde serán entregados sus pertenencias y sus medios de transporte para que puedan volver por donde vinieron.