Partida Rol por web

Basil acepta el ofrecimiento de Honoré. Su sed de aventuras pesa bastante más que su escasa prudencia a la hora de embarcarse en algo así. Cuenta conmigo!

Tras pensarlo un poco... ¡que demonios! creo que son ventajas, o salgo mejor posicionado en el viejo mundo o a las malas tengo que salir corriendo, pero sea como sea lo mas probable es que mejore... y parece que se avecinan cambios interesantes, no muchas veces un principe intenta cambiar su ciudad a mejor...

Honoré acepto su propuesta.

-Bueno, puedo hacerme un sitio importante en otra ciudad -pensé en voz alta mientras me llevaba un dedo a los labios- si puedo volver a mi Berlín, no veo ningún problema. Intentaré ayudar a que esta ciudad sea digna de mención en el mundo entero.

Tras decir esto hice una ligera genuflexión ante Honoré con una de mis amplias sonrisas en el rostro.

Venga no os hagáis los remolones :P

Finalmente la noche terminó, la gran fiesta acabó y todos pudieron volver a sus refugios ... 

Pero no solo pasó esa noche, sino que en las sucesivas, todos los que aceptasteis de una manera u otra la oferta de Honoré tuvisteis a vuestra disposición la posibilidad de buscar nuevo refugio y entrevistaros con él para su aprobación. Para los que no hablan francés Honoré provee de un interprete durante unas semanas para que puedan aprender lo básico para empezar a desenvolverse por si mismos en la ciudad. Las puertas de Saint Pierre para los indecisos quedarán abiertas mientras dure su estancia en París, no obstante el resto de edificios del  Eliseo parisino no tienen porque darles hospitalidad ni cobijo.

en los siguientes días a la noche tan rara, las pase buscando un refugio algo mas estable para los próximos dos años, iba a tener que hacer bastantes cambios, los primeros cambiar los créditos bancarios para que me dieran una linea de crédito en París, no es que fuera problematico, pero eso seguramente tardaria unos días, estuve buscando un estudio amplio en el centro de Montmatre en el que pudiera pintar tranquilamente, pero además está la necesidad de asegurar que la entrada se complica un poco a todas las personas ajenas a mis deseos.

Por lo demás una semana tranquila, intento averiguar algo mas de mis vecinos y sobretodo, intento hacerme sonar por los sitios tipicos de la noche parisina...

Yo acepto la oferta de Honoré y en esta semana intento buscar algún lugar donde residir y charlar con Barret, dándole alguna lección de francés, y visitando la ciudad

Barret se mantuvo inactivo en sus negocios turbios mientras se acomodaba en la ciudad. Venia bien saber que terreno estaba pisando antes de hacerlo saltar por los aires. Se esforzó por aprender el idioma y se mantuvo siempre en movimiento. Un día estaba rodeado de proletarios en una taberna y al siguiente en una esquisita cena de gala. Estaba con todos pero no era de nadie. Habia comentado a Honore su disposición a hacer trabajos de diversa indole, y no por dinero sino por agradecimiento a su hospitalidad. Honore le proporcionaba los escasos recursos que necesitaba para mandar a tierras inglesas y si necesitaba más dinero ya se lo ganaria de otro modo.

Una vez os acomodáis en vuestros nuevos dominios, y practicáis algo el idioma. Os llega una solicitud de reunión por parte de François, esta os la hace llegar uno de sus criados de forma verbal, os reuniréis con él en Saint Pierre.  

Hoy hace una semana desde que viste a Anna en el parque, ¿decides acudir?. 

Aunque la ubicación física sea el parque no te cambio de escena porque espero que no se alargue mucho la entrevista con Anna :P

Después de un paseo por el parque meditando en lo ocurrido en las noches anteriores, como cabía de esperar Anna aparece en el embarcadero como acordasteis. Te saluda de forma educada ...

- Me alegro que haya sido capaz de volver a el embarcadero en la fecha acordada. ¿Qué tal le ha ido en su presentación en sociedad señor Pickman?.

Al cuarto día después de la fiesta, tras haber coincidido la noche anterior con no demasiado tiempo, decidís quedar esta noche para contaros como está siendo vuestra adaptación en la ciudad ... Os encontráis en un club privado que os recomendó Honoré cerca de Saint Pierre donde se puede socializar tranquilamente sin demasiadas miradas indeseadas ...

 Se trata de un club ubicado en un local grande, cerca de la zona comercial de Montmartre. El club ha pesar de ser privado y solo para socios, en la puerta enseñáis la acreditación que os facilitaron en Saint Pierre y no os ponen problemas, además os ofrecen un trato especial en un lujoso reservado, uno de los que parecen ser los dueños os saluda con exquisitos modales y os sugiere que en caso de necesitar algo "especial" por favor se lo comuniquéis a él.